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2 Revisión de la literatura
from CONOCIMIENTOS SOBRE PREVENCIÓN DE COVID-19 Y SU RELACIÓN CON EL ENTORNO SOCIOFAMILIAR DEL ADULTO
by Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Santo Domingo PUCE SD
2 REVISIÓN DE LA LITERATURA
2.1 ¿Qué es el COVID-19?
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De acuerdo con la OMS (2020), el COVID-19 es una patología de tipo infeccioso provocada por un microorganismo patógeno descubierto de manera reciente. Se desconocía la enfermedad y su agente causal antes de que se detone el brote en Wuhan (China), en la actualidad dicha enfermedad se ha transformado en una pandemia.
2.1.1 ¿Quién lo produce?
Es producido por el nuevo coronavirus llamado SARS-CoV2 que significa (coronavirus tipo 2 causante del “Severe Acute Respiratory Síndrome” o en español “Síndrome de distrés respiratorio agudo), toma el nombre de coronavirus ya que al microscopio electrónico se evidencia proyecciones proteicas externas que le dan el aspecto de corona (MSP, 2020).
2.1.2 ¿Cómo se transmite?
La enfermedad al ser de tipo respiratorio, el mecanismo de transmisión principal es por esta vía. El medio principal de contagio son las gotitas que se expulsan por boca o nariz al momento de hablar, estornudar o toser, si una persona sana inhala estas gotitas provenientes de una persona infectada, se contagiará de manera directa (OMS, 2020).
De acuerdo con la OMS (2020) los animales domésticos han resultado positivo para COVID-19 luego de estar en contacto con personas infectadas. Sin embargo, aún no hay evidencia de que los animales puedan contagiar a seres humanos. No obstante, se recomienda que las personas que están enfermas de COVID-19 y las que no poseen la enfermedad, evitar contacto con animales.
2.1.3 Viabilidad del microorganismo en las superficies.
Diversas investigaciones demostraron que independientemente de la superficie donde este el virus este puede permanecer, teniendo así que en el acero inoxidable y plástico puede llegar a permanecer máximo 72 horas, no más de 4 horas en el cobre y menos de 24 en cartón. Cabe indicar que, aunque el virus puede vivir un tiempo determinado según donde se encuentre, este puede eliminarse con la limpieza de las zonas mediante el uso de desinfectantes domésticos (OMS, 2020).
2.1.4 ¿Cuáles son los síntomas?
La presentación clínica del COVID-19 está caracterizado por una serie de síntomas que pueden ser leves o graves y en mayor medida requerir ser internado en la UCI. Aunque una gran cantidad de personas son asintomáticas (no presentan síntoma) la gran mayoría llegan a tener síntomas leves entre los más frecuentes están: la fiebre (76,51% al 93,5%), tos que no produce esputo (45,8% al 82%), dificultad para respirar (1,3% al 39,8%), en menor grado pérdida del olfato o el sabor (30%), dolor en la garganta (14,1%), dolor muscular (3,4% al 35,8%). Los menos frecuente son: diarreas, dolor en el pecho, náuseas y vómitos. El 5% del total de los casos puede desarrollar afecciones más graves que incluyen insuficiencia respiratoria causada por el Síndrome de Distrés Respiratorio Agudo por sus siglas (SDRA) y daño miocárdico con insuficiencia cardiaca (Accinelli, et al., 2020).
La OMS (2020), nos indica que los síntomas pueden empezar a aparecer entre el quinto y sexto día, aunque varía de 1 a 14 días.
2.1.5 Factores de riesgo que agravan la enfermedad.
Existen factores de riesgo que causan que la persona infectada de COVID-19 desarrolle la enfermedad de manera grave, los adultos mayores por sus condiciones biológicas como poseer enfermedades preexistentes como la hipertensión o diabetes, condiciones sociales como habitar en lugares geográficos apartados, con baja economía, no tener una persona que lo acompañe para su cuidado, lo hacen frágiles a las situaciones, y más aún frente a esta enfermedad (Guerrero y Yépez, 2015).
2.1.6 Diagnóstico.
Según Llaque (2020) el diagnóstico se basa en exámenes que confirmarán la enfermedad: reacción en cadena de la polimerasa usando una transcriptasa inversa (rt-PCR) detectando ARN del SARS-CoV2 en hisopados orofaríngeos o nasofaríngeos. En pacientes que posean neumonías y por la clínica sean sospechosos de COVID-19 se puede realizar diagnóstico por imágenes; en la radiografía de tórax y cuyo hallazgo será el observar imágenes parenquimatosas y tenues en la base de los pulmones.
De acuerdo a Vidal et al. (2020) Las pruebas serológicas rápidas tienen una alta especificidad, pero son complementarias a la prueba molecular.
2.1.7 Tratamiento.
El tratamiento de la enfermedad es de manera sintomática (tratar los síntomas), el SARS-CoV2 al ser un virus nuevo y que el ser humano no se ha expuesto aún no existe un tratamiento definitivo con antivirales. El aislamiento es el único medio para evitar el contagio (Accinelli, et al., 2020).
2.1.7.1 Uso de medicina convencional.
De acuerdo con la OMS (2020) el tratamiento del COVID-19 debe darse en medida de la severidad clínica con las que se manifieste, a continuación, se describirán los diferentes tratamientos según los síntomas.
2.1.7.1.1 Tratamiento sintomático del COVID-19 leve.
Los pacientes que poseen la enfermedad de forma leve, deben aislarlo teniendo en cuenta la existencia de factores que pueden agravar la enfermedad. Se le indica antipirético para la fiebre, analgésico en caso de presentar dolor, que se alimenten de forma saludable ya que la enfermedad puede desarrollar un cuadro de anorexia y por último mantenerse hidratado. (pp.20-21)
2.1.7.1.2 Tratamiento del COVID-19 moderado: neumonía.
Las personas que presenten un cuadro clínico moderado serán aisladas para prevenir la propagación del virus, en un lugar dependiendo la clínica y factores que puedan agravar su salud, sin embargo, si se descubre que existen factores que puedan deteriorar el cuadro del paciente, se mantendrá aislado en el hospital. Cabe recalcar, que no está descrito el uso de antibiótico sin no hay presencia de infección bacteriana. (pp.21-22)
2.1.7.1.3 Tratamiento del COVID-19 grave: neumonía grave.
El signo característico es la dificultad que presentan para respirar. Por ende, la colocación de oxígeno suplementario es la principal medida terapéutica a realizar, el objetivo es conseguir que el paciente tenga una oxigenación mayor a 90%. Además, se puede acompañar con la colocación en posición fowler para favorecer la entrada de oxígeno, reducir la dificultad para respirar y el gasto de energía. Hay que indicar que estos pacientes necesitan de
hospitalización para monitorear los parámetros hemodinámicos, realizar exámenes complementarios para la detección precoz de complicaciones como el SDRA. (p.23)
2.1.7.1.4 Tratamiento del COVID-19 crítico: SDRA.
Los enfermos que llegan a desarrollar SDRA se internan en la UCI con el tratamiento de intubación endotraqueal, siempre y cuando la oxigenoterapia convencional sea ineficaz. (pp.24-28)
2.1.7.1.5 Tratamiento de COVID-19 crítico: shock séptico.
Los usuarios que llegan a este grado de la enfermedad, necesitaran a más de ventilación mecánica y estar en la UCI; medicamentos vasopresores que ayuden a mantener la presión arterial media igual o mayor a 65 mmHg y para esto el acceso de vía central es importante, también se usa medicamentos antimicrobianos y la infusión de líquidos para aumentar la volemia. (pp.28-29)
2.1.7.2 Uso de medicina tradicional.
De acuerdo con Gómez y Riverón (2020) la Medicina Tradicional China (MTC) es una alternativa que puede ser utilizada para el tratamiento del COVID-19. La MTC es un grupo de terapias que causan efectos secundarios insignificantes. Uno de estos es la acupuntura y se está usando como método para tratar la enfermedad, causando un efecto rápido y eficiente logrando que el sistema inmunológico se fortalezca y resista, con esto nuestro prevenir que la enfermedad se agrave.
La propagación rápida de la enfermedad ha causado que las personas inicien la investigación sobre medicina natural para tratar el COVID-19, examinando plantas que posean propiedades, antivirales, antiinflamatoria, reforzar el sistema inmune o tratar afecciones respiratorias. Sin embargo, las plantas que poseen estas propiedades no funcionan por sí solas, sino que necesitan una combinación de diferentes especies para que esta tenga el efecto deseado. Si bien se ha demostrado científicamente que ciertas plantas poseen dicha propiedad, ninguna ha sido catalogada como tratamiento eficaz contra en coronavirus (Maldonado, Paniagua, Bussmann, Zenteno, y Fuentes, 2020).
2.1.8 ¿Existe alguna vacuna?
De acuerdo con la OMS y Organización Panamericana de la Salud (OPS) (2021), al mes de febrero del 2021 hay varias vacunas que se están usando en varios países, sin embargo, solo las vacuna Pfizer, AstraZenaca, Moderna y Janssen Pharma han sido aprobadas de forma emergente en países específicos, teniendo prioridad de vacunación los grupos vulnerables.
La Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) dio la aprobación a la vacuna Pfizer también conocida como BNT162b2. Los primeros estudios clínico que realizo la empresa farmacéutica, evidenciaron que la vacuna generaba más anticuerpos que una persona que se haya recuperado de COVID-19 (Torres, 2020).
La vacuna AstraZenaca conocida como AZD1222, tiene 63,09% de eficacia contra la enfermedad por SARS-CoV2, además de aumentar la eficacia si se aplica una segunda dosis con intervalos de tiempo largos de entre 8 y 12 semanas (OMS, 2021).
De acuerdo con al CDC (2021) la vacuna Janssen Pharma en los ensayos clínicos realizados tuvo una efectividad del 66,3% contra la infección.
La vacuna Moderna en base a los ensayos clínicos realizados, tuvo una efectividad del 94,1% contra el COVID-19, teniendo así un alto nivel de eficacia para prevenir la morbimortalidad (CDC, 2021).
2.1.9 Medidas generales preventivas de COVID-19.
La OMS recomienda varias medidas básicas para ayudar a evitar la transmisión del COVID-19 (Organización de Naciones Unidad [ONU], 2020).
1. Lavarse las manos frecuentemente durante un tiempo de al menos 20 segundos. 2. Cubrirse con un pañuelo desechable cuando tosa o estornude. 3. Limpiar y desinfectar objetos que manipule constantemente. 4. Quedarse en casa si está enfermo. 5. Ponerse en contacto con personal sanitario si presenta los siguientes síntomas; temperatura mayor a 37.5°C y tos sin producción, ya que son los más generales. 6. Evitar tocarse el rostro, principalmente ojos, nariz y boca. 7. Si tiene fiebre y tos sin producir flema, no viaje. 8. En caso de que se trate de adultos mayores, se sumará lo siguiente:
9. En caso de tener visitantes en su casa, saludar manteniendo el distanciamiento social, y hacerlo en forma de reverencia o señal facial. 10. Solicitar a personas que lo visiten o con las que usted vive que laven sus manos de manera continua.
11. Realizar limpieza y desinfección de las diferentes zonas del hogar haciendo énfasis en las superficies que manipulan mucho. 12. Si habita con alguien que posee síntomas de COVID-19 evite estar en los mismos espacios físicos. 13. En caso de que se enferme y tenga síntomas y signos de COVID-19, ponerse en comunicación inmediatamente con su médico vía telefónica antes de acudir a algún centro de atención sanitaria.
14. Si sale de casa en público, se recomienda el uso de las mismas medidas de prevención que en casa. 15. Estar pendiente a diario de información proveniente de fuentes confiables sobre la enfermedad.
Por otra parte, OPS (2020), nos indica en su página Web una serie recomendaciones acerca del apoyo a las personas mayores de 60 años en estos tiempos de pandemia de COVID19.
1. Estar atento a la salud propia identificando signos o síntomas de la enfermedad, hablar con médico por teléfono para evitar el contagio de uno mismo o las demás personas. 2. Si tiene una visita en su hogar, mantener el distanciamiento social y no tener contacto de forma física con la persona. 3. Apoyar a los adultos mayores haciendo el mercado de ellos que incluya todos los insumos que necesita ya sea alimentos o medicina. 4. Asegurarse de que en su hogar posea stock que le cubran las necesidades de medicina cotidianas que los maneje en casa al menos por 30 días. 5. Ayudarle a estar en comunicación con familiares, amistades, vecinos y de gran importancia con el médico. 6. Recordarle siempre las recomendaciones del lavado de manos con frecuencia, de la limpieza de su hogar y desinfección de las superficies y objetos que toca con frecuencia así mismo rememorarles que eviten el contacto con personas que estén enfermas.
7. Hacer un plan, ya que no se sabe si ellos se enfermarán y es prudente estar organizado para transportarlo en busca de ayuda médica. 8. Promoverle consumir alimentos nutritivos, que descansen lo suficiente, evitar el consumo de sustancias tóxicas como el tabaco o el alcohol, que estén activos fomentando la actividad en casa y perseguir las indicaciones del médico. 9. Ayúdalos en los más que pueda, hable con ellos y escúchalos, demuestre que ellos son importantes, sea empático y esté con ellos para que no sientan soledad. 10. Use los medios tecnológicos para comunicarse con ellos en caso de que él se encuentre en algún hogar geriátrico. 11. Percatarnos de que tengan medicación de uso regular por al menos 30 días. Animarlo al acatamiento de sugerencias médicas para la toma de su medicina. 12. Alentarlos a seguir el distanciamiento físico, así como evitar las áreas compartidas y estar presentes en reuniones y aglomeraciones. 13. En caso de que conozca que algún integrante que conforma su hogar tiene síntomas de COVID-19, orientarlos a evitar el contacto con el enfermo y además intensificar las medidas preventivas. 14. Si alguno llega a tener síntomas de la enfermedad, ayudar contactando de inmediato al médico.
15. Tener con buena ventilación la casa y realizar limpieza y desinfección de las superficies. 16. Mantener comunicación con las personas del alrededor y principalmente con familiares y recordar la búsqueda de atención sanitaria en caso de que se llegue a enfermar. 17. Identificar síntomas generales del COVID-19, como tos seca, cuadro febril o si tienen dificultad en su respiración. 18. Evitar que estén solos, mantenerlos en contacto constante con amigos y familiares.
19. Si en la comunidad que usted habita, el COVID-19 está expandiendo en el área, evitar salir de casa y aglomeraciones.
2.1.10 ¿Qué alimentación se debe tener en la pandemia COVID-19?
La OMS (2021), en su página web brinda una serie de consejos acerca de la alimentación saludable y su importancia, de tal manera que influye en el organismo para combatir enfermedades e infecciones y la recuperación de las mismas.
2.1.10.1 Alimentación variada incluyendo legumbres y frutas.
• Alimentarse a diario realizando combinaciones de cereales integrales, frutas y verduras, además de algún alimento de origen animal como huevo o queso. • Siempre elegir alimentos no procesados y que sean integrales. Estos contienen fibra y dan sensación de saciedad que dura. • Alimentarse entre horas con frutas frescas o frutos que sean secos y que no contengan sal.
2.1.10.2 Disminuir la ingesta de sal.
• Reducir el consumo de la sal a solo 5 gramos al día. • En la preparación de alimentos usar poca sal, así como evitar el uso excesivo de condimentos y salsas. • Usar hierbas frescas para dar más sabor a las comidas y así sustituir el empleo de la sal.
• Al realizar compras en el supermercado, seleccionar los productos que menos sodio tengan.
2.1.10.3 Limitar el consumo de grasas.
• En la preparación de las comidas es preferible el uso de aceite de oliva o girasol en lugar de manteca de cerdos o mantequilla. • Alimentarse de carne blanca ya que contiene una cantidad menor de grasa que la carne de res o cerdo.
• La leche y demás productos lácteos se recomienda sea descremado o semidescremado.
• Evitar ingerir alimentos fritos o procesados por industrias, es preferible que los alimentos sean preparados en casa hervidos o al vapor.
2.1.10.4 Disminuir la ingesta de azúcar.
• Limitar las bebidas azucaradas como las gaseosas, bebidas energéticas, jugos de frutas procesados etc. Además, evitar consumir golosinas. • Reemplazar las galletas, chocolates u otras golosinas por frutas.
• Evitar dar azúcar y sal a los niños, a partir de los 2 años de edad solo en cantidades mínimas y limitadas.
2.1.10.5 Excelente hidratación.
• La hidratación debe ser óptima, ya que juega un papel fundamental para mantener un estado de salud óptimo. Debe realizarse solo con el consumo de agua siempre que se disponga de esta. • Evite la ingesta de alcohol, esta es peligrosa para la salud y a largo plazo puede producir enfermedades en el hígado o corazón.
2.2 Adulto mayor y vulnerabilidad
De acuerdo con la OMS (2014), un adulto mayor es toda persona que posea más de 60 años de edad, y se puede dividir en los siguientes: tercera edad de 60 a 74 años, cuarta edad de 75 a 89 años, se considera longevos de 90 a 99 años y de 100 años en adelante centenarios.
2.2.1 Cambios físicos y psicológicos del envejecimiento.
A medida que pasa el tiempo, se presentan cambios físicos en el cuerpo. Los aparatos y sistemas pierden lenta pero progresivamente su funcionalidad. Cambios como; descenso del tomo corporal, vasos sanguíneos que se endurecen, disminución de células nerviosas, tejidos que se vuelven flexible, cambio hormonal o circunstancia de tipo ambiental (Martínez, González, Castellón y González, 2018).
Con la edad, la función cognitiva sufre cambios que pueden afectar el manejo social de la persona. Y, que pueden desarrollarse enfermedades como el Alzheimer (enfermedad progresiva caracterizada por pérdida de la memoria) (Martínez, González, Castellón y González, 2018).
Los adultos mayores por los cambios biológicos y cognitivos son potencialmente vulnerables. Además, aquellos que no tienen pareja, poseen alguna enfermedad, no tienen cuidador ni viven con familiar y que además no pertenecen a programas sociales, son aspectos personales y de entorno que aumentan la vulnerabilidad (Guerrero, 2015).
2.2.2 Tipos de ancianos.
De acuerdo con Rodríguez (2019) existen cuatro tipos de ancianos; Sano, aquel que es independiente, autónomo y que está en un estado de plenitud: Enfermo, aquel que posee comorbilidades con la particularidad de que tiene limitaciones pero que no lo hacen dependiente de una persona que lo cuide: Frágil, posee enfermedades que lo hacen dependiente de forma parcial, además, de que a medida que pasa el tiempo pueden ser más dependientes en actividades que antes podía hacerlo por sí mismo: Geriátrico, la dependencia aquí ya es total para la realización de actividades diarias de la vida como comer, vestir, bañar e ir al baño.
Por otra parte, Figueroba (2020) nos manifiesta que existen tres tipos de envejecimiento; Primario, caracterizado por un grupo de cambios que se dan con la edad y que provocan disminución del funcionamiento del individuo a nivel físico entre los que destacan la pérdida del tono muscular y fuerza, deterioro de la reacción sexual, aparición de canas entre otros; El secundario, se da por factores ajenos al proceso biológico natural, está dado por la participación de influencias de tipo ambiental, estilo de vida, enfermedades, los cuales participan en la magnitud del envejecimiento; Por último, terciario: causa problemas en todos los sistemas, sin embargo, es más notorio a nivel cognitivo y psicológico teniendo en cuenta así que en sus últimos días de vida o años de esta, la personalidad de la persona se desestabiliza.
2.3 Marco conceptual
• Cuidados intensivos: las UCIs, son áreas dentro de un hospital diseñadas para brindar soporte vital a pacientes en riesgo de perder la vida, son establecidas con la finalidad de recuperación del paciente. Es considerado un servicio de alto riesgo donde los individuos tienen comprometida su salud (OPS 2011).
• Pandemia: La OMS (2010), define a la pandemia como la propagación de una nueva enfermedad en todo el mundo.
• Enfermedades transmisibles: es cualquier patología cuya causa es por la existencia de un microorganismo infeccioso específico, este lo transmite de un reservorio hacia un huésped susceptible, y puede ser de manera directa de un individuo o animal infectado, o de manera indirecta mediante un huésped intermediario, de entorno vegetal o animal (OPS, 2011).
• Vulnerabilidad: se atribuye a las particularidades que posee un individuo o un grupo frente a un estado, y que influencia su facultad de hacer frente, lidiar, anticipar y recuperar del daño que genere una amenaza (Ruiz, 2012).
• Muerte: pérdida irreversible, inevitable de las funciones de un organismo es el fin del ciclo de la vida (Celma y Strasser, 2015).
• Bioseguridad: es un conjunto de medidas de seguridad que dan orientaciones a la práctica protegiendo la salud de las personas, está encaminado a proteger al individuo de la exposición a agentes potencialmente infecciosos (Tamariz, 2018).
• Salud mental: estado de completo bienestar tanto psicológico, emocional y social. (Macaya, Pihan y Parada, 2018)
• Cuarentena: es la separación y limitación de movimiento de los individuos que fueron expuestos a una patología contagiosa, y así descartar o confirmar si presentan síntomas. (Brooks, Webster y Smith, 2020).
• Aislamiento: es la separación del o de los individuos que tienen una enfermedad ya confirmada que es contagiosa y puede llegar a infectar a las demás personas (Brooks, Webster y Smith, 2020).
• Distanciamiento social: Consiste en mantener un espacio seguro entre el individuo y las demás personas que no son de la familia (CDC, 2020).
• Infección: Es la invasión y multiplicación de gérmenes patógenos en los tejidos de un organismo (Instituto Nacional del Cáncer, 2020).
2.4 Predicción científica
Hi: Los adultos mayores que conviven con los familiares tienen conocimiento sobre medidas de prevención frente al COVID-19.
Ho: Los adultos mayores que conviven con los familiares no tienen conocimiento sobre medidas de prevención frente al COVID-19.