COLEGIO MIXTO BELÉN Líderes en tecnología, formación académica, cívica y moral
APRENDER, DESAPRENDER Y REAPRENDER En un mundo como el nuestro que vive y experimenta cambios continuos, de nada sirve repetir modelos, ya que desconocemos a qué retos y qué problemas debemos enfrentar en el futuro cercano. Por ello el éxito para abordar estos desafíos dependerá de la dosis de capacidad adaptativa a nivel personal, institucional y organizacional. Estamos inmersos en cambios sociales, políticos, tecnológicos, económicos y culturales que configuran una nueva sociedad y que de manera irreversible afectan a la educación; aunque en ese sentido, la impresión es que lo educativo está al margen, otorgándosele un mínimo de atención e inversión. Paradójicamente, es la educación, la que precisamente contiene el germen del cual se generan los cambios y transformaciones que permitirán el desarrollo y avance de la sociedad. Justo es cuestionarse un planteamiento que permita optimizar los procesos de enseñanza aprendizaje, superar la resistencia que frena el cambio de mentalidad docente al empleo de técnicas y estrategias constructivistas que favorezcan la evolución de los arcaicos esquemas educativos, que todavía se resisten a desaparecer. Por ejemplo: la tecnología, ha llegado a las aulas para quedarse y ser una herramienta útil para profesores, alumnos y familias, convirtiéndose en el umbral que da ingreso a una dimensión clave en nuestra sociedad. La escuela actual debe preparar a las personas para este nuevo mundo. Debe innovar y convertirse en un lugar de confianza donde los estudiantes puedan experimentar, crecer e idear. El docente sigue realizando el papel de emisor y el alumno, de receptor o incluso de ‘consumidor’, ya que tan sólo recibe y asimila información para ser interiorizada, memorizada y repetida para dar respuesta a pruebas de carácter objetivo. No está de más recordar que durante siglos el modelo de orientación bancaria de la educación ha fortalecido la transmisión de conceptos, datos, fechas, desarrollándose una especie de obsesión por la respuesta correcta y única cuya ruta nos lleva a pruebas estandarizadas no congruentes con el momento educativo que se vive. Por lo tanto el papel de los estudiantes debe pasar de ser ‘consumidores’ de conocimiento a creadores e innovadores. En este sentido, el alumno debe convertirse en el centro de su propio aprendizaje y experimentar, crear, equivocarse y obtener resultados para mejorar su proceso de aprendizaje. En este nuevo escenario la educación y la formación van a resultar vitales, evidenciándose la necesidad de desarrollar habilidades y competencias que talvez anteriores generaciones no tuvieron la necesidad de estimular. Aunado a lo anterior la velocidad y profundidad de los cambios que se gestan en la sociedad nos obliga a aprender continua y aceleradamente, siendo el aprendizaje una necesidad innegable. La crisis económica obliga a muchos titulados a estar desempleados, descubriéndose, de manera dolorosa, que no se posee las competencias que demandan y esperan las empresas o los centros laborales. Los modelos y las formas de agenciarse del conocimiento y la información han denotado una transición que permite potenciar la capacidad de aprender y pensar. Estas estructuras no garantizan la permanencia de las personas que constantemente sean adaptativas permanentemente al cambio. Por ello es necesario definir las nociones o ideas derivadas de esta interesante temática. Nuestra sociedad necesita creatividad e innovación. Para saber de un tema y poder mejorar e innovar, es necesario saber pensar y no simplemente conocer datos y memorizar información. Es necesario replantearse continuamente como hacemos
las cosas. Para aprender algo se requiere entenderlo… la importancia está ahí y no en memorizarlo. Cuando se entiende el concepto se profundiza en el mismo, puede despertar el interés y es cuando aparecen las posibilidades de mejora. Este es un proceso necesario para lograr el desarrollo del talento personal. La capacidad de aprender es el activo más valioso de las personas, siendo su aprovechamiento un estímulo de su desarrollo. En entornos educativos la palabra desaprender podría sonar contradictoria, pero la idea fundamental de desaprender es independizarse de conceptos o ideas que se inculcan en la vida y en el entorno de la enseñanza y el aprendizaje. Cuando se viven crisis, es el momento en el cual puede adquirir otra dimensión el “Desaprendizaje”, reconociéndose que lo realizado no ha promovido los resultados esperados, siendo por lo tanto el momento de dejar de lado las creencias, conocimientos y modelos establecidos, para insertarse en los cambios. Es iniciar nuevas permutaciones de mentalidad, de recopilar otra información y de encontrar otras rutas de aprendizaje, basado en experiencias positivas. Reaprender es una tendencia de actualizarse cambiando los paradigmas, es volver a experimentar mediante un proceso voluntario, utilizando nuevos patrones para resignificar y recodificar experiencias. Es reintegrar y reincorporar nuevas conexiones con una meta proceso que promueve mayor conciencia o más meta cognición. Reaprender es desestimar y hasta eliminar responsablemente lo que ya no sirve y aprender algo de forma distinta a la que durante años hemos realizado. Reaprender implica un esfuerzo personal y más coraje para innovar como resultado de mucha investigación. Por ejemplo, cada estudiante debe encontrar su propia proporción, redescubrir su potencial y dejar atrás las viejas convicciones y los antiguos preceptos de aprendizaje. Uno de ellos, es aprender “recitando” las definiciones y los conceptos compartidos en clase o encontrados en algún texto. Esto se remplaza por comprender las ideas, presentarlas en forma de ejemplos y explicarlas con algún caso, estableciendo analogías, que faciliten su entendimiento y futura aplicación real. Aprender es tener una tendencia de actualizarse mediante un proceso que permite ensamblar patrones de significado y clasificar experiencias. Es establecer nuevas conexiones que transformen significativamente lo que ocurre en el cerebro y en el organismo humano. Aprender es el formato básico del conocimiento, es un proceso complejo, a través del cual se adquieren o modifican habilidades, destrezas, conocimientos, conductas o valores como resultado del estudio, experiencia, instrucción, el razonamiento y la observación. El aprendizaje humano está relacionado con la educación y el desarrollo personal que desemboca en un cambio de la capacidad conductual. E-GRAFIA http://www.galileo.edu/facom/noticias/aprender-desaprender-y-reaprender/ Desaprender, reaprender. Martha graño. Segre, 2014.
Guatemala, 03 de enero 2017
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