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poetassinfronteras@hotmail.com Ramón Hernández Olivares Director y Editor
LA TRISTEZA Ana Ahumada Espinoza Chile. La tristeza tiene forma de humo con sus extrañas y etéreas formas. Desde lejos se ven hermosas como bailarinas plateadas ondulantes, hipnóticas, seductoras. Se acerca a ti en silencio muda, sorda, imperceptible. Te envuelve suave, te abraza con su aroma leñoso no te das cuenta que ha llegado hasta cuando es demasiado tarde. Se atora en tu garganta ebullendo vapores nostálgicos que se agolpan en tu mente justo detrás de tus ojos condensándose lentamente para transformarse en lágrimas. Así como el humo, la tristeza no puede contenerse.
MI ANCLA Ana Ahumada Espinoza Chile. Necesito un ancla a la tierra que me sostenga cuando vuelo. Porque mi mente se expande en el universo La mirada se me llena de estrellas inalcanzables, de galaxias lejanas, de planetas desconocidos. A veces veo el sol, pero también la oscuridad profunda. Necesito mi ancla, para no desvanecerme en la oscuridad Sin ella, no veo la magia de la lluvia, despertando a las somnolientas semillas. No siento una mano tibia sobre mi espada. No siento el pasto húmedo bajo mis pies. No escucho el trino de las aves mañaneras. Necesito mi ancla para vivir en la tierra, sin perderme en la inmensidad.
ATRAPADA ENTRE VERSOS Ana Ahumada Espinoza Chile. Se acumulan los poemas en mi mente, como libros viejos y destartalados apilados, abandonados, rodeados de polvo suspendido en el aire, con sus tapas deslucidas, sus amarillas hojas rasgadas. Algunos nunca han sido abiertos, otros están demasiado ajados. Unos no han despertado, otros quieren seguir durmiendo. Pobres versos entumecidos Sin esperanza ni tiempo Seguirán esperando insomnes Hasta que termine mi invierno.
VIENTRE Y GÉNESIS Ángel Valenzuela Veracruz, México La Tierra quería ser eclipse, busco descansar su órbita, ajustarle ángulos a su rotación. Insistía en dilatar sus mareas, y terminó por ocultar sus ritmos. Me sorprendió con sus eones, le obsequió estigmas a las creencias, por instantes se ocultaba bajo lluvias, se disfrazaba de vientre y génesis, y en sus breves cansancios daba a luz, paría éxodos intermitentes. Este mundo también se confiesa, se arrepiente de sus intentos persuasivos, se cansa... Con todo y sus fases lunares, con sus leyendas de conejos y dioses.
PRIMERA MADRE ÁNGELA PINALES VALDEZ REPÚBLICA DOMINICANA En el sexto día, cuando Dios casi terminaba toda la creación, se percató de que todavía faltaba alguien más. Pues al recorrer el Edén con sus ojos, se conmovió al ver, que Adán estaba muy solo. Decidió que para finalizar su obra, haría la criatura más original, no con el verbo ni con la tierra, como a las demás, si no que tomaría de Adán una costilla, para que tuviera con él, una conexión muy especial, y fuera también, su ayuda ideal. Y fue así, como fue formando a Eva, la primera madre de la humanidad. Se puso a caminar por aquel bello jardín. De un panal de miel, algunas gotas tomó, para agregar toda la dulzura, que necesitaba la nueva criatura. Luego vio los pétalos de una flor, y tomó algunos y los añadió. Agregó varias gotas, de un fresco manantial y sin dudas las mezcló con todo lo demás, pues quería que este nuevo ser, del agua tuviera, toda la frescura,
además de ser, manantial de vida. Del tronco de un árbol, extrajo la savia, y la colocó dentro de dos montes que había puesto en su pecho, pues pretendía que la novel criatura, su cría con ellos, alimentara. Del junco sumó unas cuantas hojas, para dotarla de flexibilidad, y que pudiera poseer la capacidad, de aguantar las embestidas de las tormentas que azotan la vida. Y así fue agregando todos los ingredientes uno por uno, de los cuales, una madre está hecha: ternura, tesón, abnegación, sacrificio, templanza, valor alegría, constancia y comprensión, entre muchas otras cualidades más, pero casi al terminar vio que le faltaba, un atributo muy especial. Entonces tomó un pedacito de su corazón, y al nuevo ser en el pecho se lo colocó. Y es por eso que desde aquel tiempo el amor de una verdadera madre, es el más parecido al amor de Dios.
ME VISTO DE ROJO BERTHA LARAF Veracruz, México Se tiñe de rojo la aurora me doy el lujo de emigrar hasta lo alto me atavío de escarlata para mimetizarme tonos rubíes pinto en mis labios. Desangro en libertad entrego el mérito para extender mis alas abiertas orientadas, levito en las cordilleras enardecidas, medito despierta, medito dispuesta, medito en la alborada, extraigo la fuerza sobrenatural, me ostento desafiada, concluyo soy en esencia una porción del universo simple y divina, esa es mi herencia.
A VECES BERTHA LARAF Veracruz, México A veces y muy de vez en cuando me acuerdo de ti... en el día, la noche, acuciosamente en la madrugada cuando no puedo dormir me causa cierto vacío entonces amor mío, necesito algo que me alivie la tentación algo que refresque la tensión cómo se le llama a esa sensación de extrañeza revuelta con avidez ese cosquilleo que detiene el tiempo te impide pensar y te arrebata el sueño y la razón, te inmoviliza, recordar el verde tan verde de tus ojos, que no puede ser verdad, aspirar salir al balcón, a lo lejos sentir tu voz escuchar tus pasos y calmar tanta ansiedad.
UNA FLOR EN MI MANO. BERTHA LARAF. Veracruz, México Has posado una flor en mi mano, con la promesa inerte de quererme, simbolismos extremos acuden a mi mente de eternidad, encuentro dicha, alegría ¡un salto al cielo! daría dos puñados de sorpresa, por probar ese delicioso tiempo continuo quizás contigo daría unas sedas de mi sari colmado de lodo… al brotar una joya carmesí y si preguntas si quiero todo, esta vez te diré que sí.
Diálogo Carmen Ramos Beiza Chile (Del libro Burbujas y Poemas de Celinda)
Ayer…, quise conversar con mi garganta pero ella ; era toda coágulo. Se quejaba del invierno, del sol de las estaciones corridas y los tiempos agrietados. Se quejaba de las memorias colectivas, le dolía, la escasez del agua los maizales secos, y el exceso de calor. Se quejaba de mi frente, y las mezquindades. que en la tierra no podía respirar ¡Para ella…, todo era locura lo de aquí, lo de allá, lo de ayer, lo de hoy! Decía…, que el cielo perdió su fuerza que ya no tiene velo; para medir el ¡smog! Mi garganta de veras, estaba muy entristecida afrontada a ese dolor, no quise ahondar más, su tormento. Entonces…, no seguí conversación Solo fuimos silencio ella y yo.
Ira Carmen Ramos Beiza, (libro Reina luz) Chile Me causa ira, me causa dolor ver lo breve que es la fragancia, que la verdad no es total. Que la rutina se apoderó de los tiempos. Me causa dolor ver como los jardines yacen a tus pies y cruzar con pánico los caminos de hoy. Me causa dolor que las veredas fecundes fuegos irradiando soberbia y salvaje luz. Me causa ira ver los estudiantes de hoy es todo confusión caos, desorden y dolor.
Tierra Carmen Ramos Beiza, (libro Reina luz) Chile Mujer, Alondra, arcilla, polvo, arena Que múltiples son tus funciones. Eres cuna, mesa, lecho, techo, movimiento Estabilidad alimento. ¿Quién… no ha saciado su sueño, su hambre su cansancio en tu regazo? Venimos de ti, estamos y vamos contigo. Eres la mejor madre miras por los ojos del sol, respiras por los mares tus pulmones. Los ríos son tus venas. tu vientre son las templadas cavernas, las montañas tus cabellos, las flores tus suspiros nosotros tus adorados. Pero... ¡te hemos enfermado, querida madre Clavándote dolorosas espinas en tu corazón! no puedes respirar, te ahogamos con el smog. ¿Qué podemos hacer? ¡Ya sé! tejeré un gran abanico, con él, te refrescaremos, ¡ánimo madrecita! te necesitamos con vida, te salvaremos nosotros tus hijos.
ATARDECER O AMANECER Elena Guzmán Ramón México Mi alma se entona con el atardecer mi rostro impávido se asoma hasta el amanecer. Mi cuerpo respira con todos sus poros resiste y persiste en sus anhelos ávidos, mis esfuerzos insisten. mi vestido rojo entona El horizonte, es mi reflejo es mi persona y me digo: Insiste y persiste ...contemplación el horizonte, como espejo. No hay soledad, ni tiempos cuando mi mente solo respira con el viento. Amanecer o atardecer eso no importa. Reflexión del ser. La mejor nota.
Nostalgia Evelyn Covarrubias Vera Los Andes – Chile Del Poemario Amor, Desamor y Esperanza Hoy siento nostalgia de ti, y de aquel día, que pasamos juntos a orillas del mar. Nostalgia de ese abrazo cálido, de ese beso tímido y de esas manos tibias, tomadas de las mías. De esa mirada penetrante que hizo sentirme importante, de eso siento nostalgia. Nostalgia de ti, y de aquel día, que pasamos juntos a orillas del mar. Nostalgia de tu risa, del viento y la brisa, que rozo nuestros rostros. De esas palabras que fluyeron de tus labios, de eso, siento nostalgia. Nostalgia de ti, y de aquel día, que pasamos juntos a orillas del mar. Nostalgia de tus labios, cuando después de tanto tiempo, se juntaron con los míos, de eso, siento nostalgia. Nostalgia de ti, y de aquel día, que pasamos juntos a orillas del mar.
Andante Andina Evelyn Covarrubias Vera Los Andes – Chile Homenaje a Gabriela Mistral en enero 2021 Caminaste por las calles polvorientas, amigable, cariñosa con los niños en la escuela. Una gran guía en la educación, en cada corazón sembraste esperanza e ilusión. Tu fuerza de mujer, gran ejemplo a seguir por las sendas del vivir. Gabriela Mistral, andante andina sobresales con tu legado, fronteras has traspasado dejando huellas con tu literatura e ideas, como persona y poeta.
Te Pronuncio Fabrizio Prada Dos Ríos, Veracruz, México Pronunciar tu nombre es suspirar aspirar tu vientre vivir tus glúteos esculpir tus pezones despertar tus sueños rascar tus oídos besar tus pasos desde abajo ser de usted ser tú y yo de ti ser mío abrazarte sin alarde besarte sin trámite amarte sin culpa ese recuerdo que vendrá en ti menos temeroso respetarte sin respeto con la más pura forma lo que me gusta lo que te gusta cual mujer y cual hombre uno frente a otro tú en mí y yo en ti una tú uno yo una yo un tú
Arrepentida Felipe Cancino Castro México Un día despertaste y decidiste tener libertad cambiar un poco tu contexto y sin nada que lamentar Pusiste un hasta aquí con todo lo rutinario ignoraste por completo tu agenda y calendario Dijiste un día a la vez tomaste decisiones rompiste tu formalidad y desechaste tus emociones Fingiste no sentir y saliste de la rutina tomaste erróneos consejos de supuestas buenas amigas Rompiste con compromisos de gente que te amaba pactaste con tu interior mentalizada en no sentir nada Frecuentaste lugares nocturnos diste un giro repentino sin saber que habías entrado a Guarida de bandidos Tomaste la iniciativa rayando en el libertinaje excesos y sensualidad sin llegar a ninguna parte
Encontraste un falso Romeo que aprovechó tu confusión con flores de papel conquistó tu corazón En un movimiento tenaz jugó con tu sentir arrebatando tus valores y capacidad de decidir Sacando ventaja siempre de tu parte inexperta aprovecho tu inocencia y te hizo su cenicienta Denigró tu nombre e imagen malvado aventurero y cuando querías reaccionar daba un golpe certero Sucedió lo pronosticado abuso de la doncella tu figura por completa perdió su buena estrella Cuando te sientas insatisfecha de lo que has adquirido piensa con tranquilidad escucha a tus amigos La vida siempre te enseña debes tener precaución y no confíes por completo en un miserable ladrón.
Salto Cuántico Emocional Gustavo Araujo México Quiero poseerte, pero no en el absurdo sentido de que seas mía, sino por aquello de dos seres ocupando un mismo vientre, estar dentro de tí, como un fantasma, un suspiro lúgubre y casi soliloquio. Como absenta apócrifa en el ladrido de los cráneos, cráneos que se atragantan con mis viceras, carne cruda con sabor a Maple. Musitando el movimiento de las cuerdas en que me balanceo, invoco la salvedad del cruce de mis cables, pacté piedad con un creador de parafina para ponerle fin a todo. Poro a poro, he salivado los instantes incesantes de mi piel lánguida, metro a metro distraigo los sentidos de mi asiento, justo en el momento en el que se creó el tiempo, una emoción en convicción de la materia detuvo el rodar de una lágrima. Un movimiento violento predijo el nacimiento de la primera oscuridad, sin dignidad, los estragos de la infelicidad se han pronunciado a la luz, es mi cruz en surmenaje por no poder alcanzarte, no poder tocante con la fuerza necesaria para desbocar tu semblante, es así, como surge el espacio entre mi mente y tú recuerdo.
Muerte Amanecer Gustavo Araujo México Prolíferos los instantes incesantes de luz, Caoba cuneiforme con el blandir de su carne, Arqueos fulminantes al dintel del sur, Arena color sangre... Cerré los ojos como siempre, odiando los martes, los jueves y los domingos por la mañana, un parpadeo me perdió del escurridero marrón de las avenidas, se venían los demás días y no fui capaz de contar otro cuento, mi acento raro, mis pies lastimados, mis tantas personalidades... No fueron los males, ni los bemoles, perdió la vida la noche anterior, sin ropa interior, yo no la maté, sólo la dejé morir...
UNA FLOR México Heidi Sosa Cruz Una flor de cristal se ostentaba entre los libreros, Sin fragancia, sin espinas y sin notas rojas Lista para hacerlo reír, hacerle unos versos o ser compañía en las congojas, Dulces tareas en su fantasía, En una realidad de triste escarnio, Que opacaba fácilmente su alegría. Yo fui esa flor de cristal. El líquido rezumado de mis ojos, Hidrataron lo que impermeable parecía El tallo se tornó flexible entre múltiples abrojos, Y extrañamente, una corola fractal en mi vida renacía. .
Orto y ocaso. Isidoro Arturo Gómez Montenegro. México Amanecer que renace torrente de larga noche. Ciego; en estampida de colores; vuelo de sueños y voces. La vida se abre igual que la flor y se viste de color rojo. Color ropaje de mujer encendida caricia del día. La vida se abre igual a la flor, corola. Porque eres vida y el eco del amor repercute. Flama multiplicada, encendida. De Lindes secretos tus grietas revelan. La arcilla forja tu cuerpo... De noche. Una luz renace en el viento; sabor nocturno o _ de aurora. Templan mi carne tus leves sedosos ojos. Revienta la luz en cuencos de corteza natural, apegada al rojo encendido, o al rojo escarlata de mi veste
Hombre y mujer. Isidoro Arturo Gómez Montenegro. Veracruz, México Al tener inmóviles mis brazos, fatigado abrazo tu cuerpo, cintura. Escasos ramajes de mansedumbre milenaria Mi levadura lucha implacable contra el devenir ...Riberas de infinito. Reloj de improntas mareas. Navegamos en eco de Julio, segura brújula, estrellas aparecen en líneas de mis manos. Música de viento es ulular de falenas... Pintan el cielo...en irisada luna. gira vida. Los caballos desbordados del llanto sopló perpetuo de vida. Amada sobre el salterio de verano. Abre puertas a islas de tu cuerpo, se despierta piel y deseo; sobrevuelan... estrellas errantes, hábitat de un beso gotea el tiempo. Una página más... Un nuevo día... Tiempo sin frontera corre sin prisa Cierras la puerta al sueño. Hojarasca de instantes y._ siglos a tus pies. Nuestra mirada permanente sin interrogantes o dudas. Haces posible la luz igual deshace sombras sin mitos y horas. Dios mío navega con nosotros. Y veamos lo que otros no miran. Danos la bienaventuranza te lo pedimos, Padre Celestial, cuál mujer y hombre qué somos.
Cirios. Isidoro Arturo Gómez Montenegro. México Cuáles cirios al irse consumiendo, extinguiese la vida lágrimas de cera lloran cirios blancos, negros. Pabilos en consuno comparten inerte, ignaro fuego. Danza de flamas chisporrotear de alientos. Blanca esperanza de no morir del todo. Oscuridad ausencia de luz, infinito abismo destella el color. Resalta nuestro visaje imagen hierática. Ascética mano, encendida chispa de vida; vespertina tarde cercana. Oscilaciones imprecisas llamas color azul, rojo. Luz, noche y miradas hilos de plata: Se extingue resentido el sol ... la vida también.
No James Coonor Monterrey, México No me digas que el amor no existe y no me platiques que el amor no es, que no hay vida después de lo nuestro Y no me enseñaste a que no hay nada después de importarnos o no supe en verdad decir que no te amé y que me negué a morir y que en este sueño te encontré a ti y me gaste sólo yo, en un aire tan puro que viví solo yo. Y no me digas que sabes a lluvia mi amor y hueles a vida... entre el alma y tu desdén y estas ganas de adorarte en mi esencia esa que quedó soñando que un día irás a volver
AMANECERES… JORGE VLADIMIR ALACEVICH RIO TERCERO, CORDOBA, ARGENTINA Recorro las calles, cuando el sol entibia mis sueños. Soy la brisa eterna Que solo se apaga en cada amanecer, Y renazco para erigirme en letras y cantos. Más que un juglar, Soy palabras al viento, y agua de lluvia que dibuja cuerpos. Soy la música que guarda la luna, Y poemas que el amanecer demanda… …Poeta por vida; soñador por ansias.
BIENAVENTURADOS. JORGE VLADIMIR ALACEVICH RIO TERCERO, CORDOBA, ARGENTINA. Bienaventurados los que sueñan con las palabras bendecidas. Los que guardan utopías. Los que dibujan paz sin melancolía. Bienaventurados los ricos en paz y pobres en avaricias. Los que guardan el amor en pentagramas de armonías. Bienaventurado tu nombre cada día.
HABITARE…ESCRIBIRE… JORGE VLADIMIR ALACEVICH RIO TERCERO, CORDOBA, ARGENTINA. Habitare en cada espacio de tu piel. Escribiré en cada lunar que circunda tu Alma. Seré verso que no acaba, y verbo que redimas. Conquistare tus mañanas y me rendiré ante cada anochecer…
En la Calma de la Bruma… José Rafael Rivero Maracay, Venezuela @letrasysentires En las noches cálidas con suave brisa En los sueños dulces En la cobija que me arropa Allí estás con tu mirada En las losas que se mojan Mientras me baño con tu ausencia Y en las rendijas cantando Las fantasías encontradas se aman Como si se conocieran Desde otras dimensiones De otros dolores De otros colores Donde la bruma está en calma…
UN DÍA… LOLA VARA Argentina Un día cualquiera cruzarán la esquina hundirán miradas en grises recuerdos lejanos/ desolados. Tal vez… Esbozarán una sonrisa diferente/ maniatada. No habrá besos ni aquellos abrazos apretados rompiéndole los fantasmas al alma. No habrá noches acurrucadas. Se dejaron ir balbuceando palabras se soltaron ella lo amaba cómo colegiala de uniforme azul y lápices cándidos andándole con caricias que se le desbordaban. Él no sabía de que se trataba dejaron que la cobardía no le diera paso a la tremenda y loca valentía esa… de amar y dar vida.
Él no sabía de que se trataba amar y sentir al alma volando. ni de mariposas que tibias jugaban. Se dejaron ir Soltaron Un día cualquiera cruzaran la esquina con una sonrisa sin manos ni abrazos. Él cargando su alma ella sin decir palabra.
SOBREVIVIENDO Lola Vara Argentina Sobreviviendo en éste entorno oscuro agrietadas las paredes de la luz. Sólo un remolino de memorias un vendaval de hielo envolviendo éste invierno. Ni un abrazo/ ni la mano tibia en el regazo. Todo está en penumbras. El corazón es una llaga y aún sobreviviendo en ésta historia. Busco un rayo de luz en éste anochecer sin tiempo sólo memorias y desvelos frente a ésta guerra fría repleta de silencios. Sólo sobreviviendo.
Una Tarde de Domingo Lourdes Lagardery Puerto Rico Hermosa y soleada tarde de domingo algarabía y bullicio por doquier, sentada en mi butaca miro al cielo y elevó una oración por el que se fue. Y el cielo me responde mí plegaria, una bella imagen puedo ver, será mi imaginación, no, no me importa yo creo en lo que quiero, siempre creeré... Y pasan estos días tan amargos con mi oculta tristeza viviré, porqué hasta el último día de mi vida mi querido hermano te recordaré.
UNA FLOR DE MI CORAZÓN A TU CABELLO. Lucila Reyes González México Te entrego esta flor que nació en mí corazón Ese día lejano cuando te conocí creció. sin problemas, sin egoísmos, sin miedos. creció fuerte y valiente porque te quiero. Tiene un toque de ternura, un mucho de locura gran alegría y bellos destellos, sus tallos no tienen espinas para que hagas una corona que adorne tu cabello te quiero amor y esta flor será el sello que llevarás en tu corazón.
El Hechizo mágico. Lucila Reyes González México, Ciudad de México. En el espejo del ancho estanque del Castillo donde el agua predice el destino veo su reflejo con los mismos destellos de oro que va dejando en el caminoes un hechicero de majestuoso andar de sonrisa enigmática y dulce mirar, que atrae a todo ser que lo llega a mirar y quien lo mira se enamora de tal forma que no ha de olvidarlo jamás. Bruja del sur, hechicera de oriente denme una pócima mágica que haga borrarlo de mi mente, quiero olvidar este ser fantástico de quien me he enamorado y a quien sigo irremediablemente sin ser correspondida, porque bebí ese hechizo mágico que hace que el sea todo en vida.
Voces de verano Lucila Reyes González México, Ciudad de México. Soy para ti y solo para ti, la más sensual, en esta danza sin encuentros en estas palabras sin despedida, subidos en la barcarola navegando en el río, que desembocan en una hermosa catarata de amor, antes que las cosas sucedan y para no tener penas de amor, dime, ¿quieres que sea compañera de sueños en esta incansable cabalgata de tu corazón enamorado? ¡Gracias! Me has sacado de las sombras y has dado colores a mi vida, en este nacimiento de sentires, magnifico tejedor del tiempo lo has logrado capturar para ponerlo en mis manos y dármelo solo a mí. De pronto te vas, luego me citas y me haces esperar tú, que me has llevado suavemente hasta el último lugar del placer usando sólo la poesía y me has hecho llegar a la cima. Te vas, dime ¿cuándo habrás de regresar? Para llevarme a la locura de lo cual solo tú eres capaz, Regresarás, lo sé, me llamarás, con esas voces de verano, que sólo tú sabes usar.
Un Festival de Rosas. Lucila Reyes González México, Ciudad de México. Va a llegar el día que podamos estar juntos alegrares de sobrevivir y no estar difuntos nos llenaremos de amor, albricias nos tomemos de las manos y brindemos caricias. Llegará el día en que vea tu rostro sonriente y disfrute de algo más que solo ver tu frente sin esa mascarilla que hoy, no me dice nada, podré saber que si estas triste o preocupada. Y llegarán poetas Sin Fronteras, de todos lados De: República Dominicana y México amados, Chile, Perú, Argentina o las costas de África de Venezuela Ecuador, España y Costa Rica. Estaremos todos los poetas sin fronteras rompiendo todo tipo de lazos y barreras Llegaremos a Veracruz por aire, tierra y altamar y haremos juntos un Festival de Rosas en el mar.
Ángel de mis sueños Lucila Reyes González México, Ciudad de México. ¿Dónde estás ahora, Ángel de mis sueños? ¿dónde que no te miran mis inquietos ojos? ¿dónde llevaras la mágica luz de la que eres dueño? ¿dónde causaras risas y sonrojos?
Eres, como el agua que toca mis manos, las enjuaga, las refresca, y huye de ellas así como escapa tu nombre de mis labios, cuando al llamarte, se remonta a las estrellas. Lejos vas, cometa, más sé, que volverás, y es que, hay algo más que candor, que me tiene a ti unida, es este amor, este deseo, este sueño, donde siempre vivirás.
Murmullos de Medianoche Lucila Reyes González México, Ciudad de México. Amanece, anoche casi no pude dormir son esos murmullos nocturnos que tanto me recuerdan a ti. Hacen, que en las sombras de noche extrañe tanto tu presencia y no es que muera por tu ausencia es que me haces falta a medianoche. Cuando los amantes se encuentran las parejas se brindan pasión, las emociones revientan, hierbe la sangre y se vuelve sudor. Son esos murmullos nocturnos que hacen extrañe tu presencia, no es que muera por tu presencia, es que no sé qué hacer con tanto deseo, con tanto amor.
Doña Pepa y Yo Lucila Reyes González México, Ciudad de México. Deja que te cuente lo que la otra noche sucedió: mi hermana nos invito a una fiesta en su casa, esa que estuvo abandonada y que con trabajos reconstruyó. Fíjate que cuentan que Doña Chepa ahí se petatió, solita y abandonada, la encontraron apestada, muerta de una semana, me contaron también que la familia encontró toda su fortuna enterrada. Ya entrados en tequilas, comenzaron las apuestas, me dijeron: 10 mil a no te acuestas, una noche en esta casa para mí, eso no era una amenaza y rápida acepte la oferta. Yo no creo en fantasmas pero ya casi dormida, murmullos casi inaudibles que fueron subiendo de todo hasta escucharse gritos terribles.
Primero creí que una un fantoche, que me quería espantar, para no pagar, la apuesta de esa noche. Cuando algo en el patio rugió me asome por la ventana, y vi un fantasma en enaguas, era doña Chepa que su fortuna buscaba y como no la encontraba comenzaba a murmurar. De pronto la calavera volvió hacia mí, sus ojos brillantes y me dijo que tú haces ahí dame mi oro y mis diamantes o me llevare tu alma, yo le dije guardando la calma, el dinero yo no lo tengo, fue tu familia de abolengo, los que se llevaron las joyas y la lana, y no te compraron ni un cajón para enterrarte y estuvieras tranquila, ven, toma conmigo tequila y luego por ellos a su mansión. Así fue como Doña Chepa, ahora aterroriza a sus parientes dicen que les enseña los dientes, y cuando cae la noche, sus murmullos apagados los tiene muy asustados. Mi hermana feliz ha quedado, sin ese horrible fantasma, y yo con el dinero ganado, me fui con mis cuates a pasear a Chalma.
Un Beso Lucila Reyes González México, Ciudad de México. Dame un beso que me remonte a las estrellas, que te encuentre en todas y cada una de ellas, dame un beso que; redima este amor loco y me demuestre que no es fantasía: lo que siento, lo que imagino y lo que toco. Dame un beso en el que vea, chispas y centellas, que haga erupción mi volcán, que estalle de mi cabeza hasta los pies aunque pierda la entereza. Dame un beso que me enloquezca y luego dame un beso que haga de nuevo que lúcida parezca, dame un beso que me remonte a las estrellas.
ESCARLATA Lucila Reyes González México Rojo es el color de mi corazón que sangra, rojo encendido el vino que me embriaga, rojo el sol cuando muere, y mi pasión cuando hierve, rojo es pues mi color, purpura, escarlata, sangre que delata lo que sufre mi amor. Así pues, vengo aquí con las alas extendidas, las cadenas rotas, vestida de purpura encendida, vengo a verte postrada de amor a olvidar el dolor, y mi amor ofrecerte.
Hechizo mágico Mariateresa Galaz Ciudad de México, México Mágica fue la tarde en que nos vimos por vez primera; mágica tu risa, y mágico aquel beso que con prisa bajo llovizna mágica nos dimos. Mágico fue ese tiempo que gastamos intercambiando mágicas miradas, y los requiebros y promesas dadas que con los años ya jamás cumplimos. Hoy que te has ido y nunca más volviste con un hechizo mágico quisiera regresar en el tiempo y que no fuera tan pasado el pasado que me diste. Con mágico conjuro te conmino a que sin mayor trámite regreses, que rescates tus votos y me beses y hagamos, de dos, un solo camino.
El alfil enamoró a la reina Mariateresa Galaz Ciudad de México, México Avanzaba el Alfil, amenazante, y acosaba a la Reina oblicuamente y cuando ella temblaba delirante se atravesó un Peón heroicamente. Mas su acción noble fracasó al instante porque lo aniquiló una Torre inmensa; murió sin gloria el pobre Peón constante en el fragor de la batalla densa. Y airado el Rey por tal atrevimiento pues el Alfil así lo acorralaba, no se dio cuenta que en su movimiento el Alfil a la Reina enamoraba. Cuando auxilio desesperado clama a la Reina, el buen Rey, ya puesto en jaque traidora, al lado del Alfil, la dama, ella misma le grita :”Jaque-mate”.
La mujer que llegó del viento Mariateresa Galaz Ciudad de México, México
Yo soy la mujer que llegó del viento que atravesó parajes de tristeza que pisó recuerdos con pies de nube y que rompió sus alas de cristal. Soy la mujer que desafiaba al tiempo la que soñó algún día en llegar al cielo a que sembró ilusiones en un tiesto: con perlas de sus ojos las regó. Soy quien viajó durante veinte lunas a descubrir la vida en un instante la que escribió su esperanza en el viento y, volando en el viento, la perdió.
Tristeza climática Mariateresa Galaz Ciudad de México, México Mi tristeza no se parece a nada: Ni al viento que nos compone y descompone los peinados Ni a la lluvia que nos empapa las ideas nos encoge el cuerpo nos cala los pies Ni al sol que nos entibia el sentimiento las pasiones las seca y deshidrata Sería quizá gemela de la sombra que nuestros sentidos enceguece: Pero la sombra muere con el día y no así mi tristeza: Profundiza mis huecos congela mis palabras y me cala y me azota y me azota y me cala en este invierno solitario y anónimo que soy yo
ESTAS EQUIVOCADA María Luz Olivares Aldana Veracruz, México Cuando el tiempo caprichoso huye de ti, para esconderse en un suspiro que se escapa tras la brisa marina. Cuando ya no encuentras la mano cálida, que te da calor en la noche de tu vida impregnada de nostalgias. Cuando crees que extraviaste la senda prometida, regresan a tu mente los recuerdos travesuras, experiencias y locuras idas. Cuando crees que todo ha terminado y tus pesados párpados caen como hojas marchitas, y no encuentras aliento. ¡Estas equivocada!, ¿dónde dejaste las metas conquistadas?, ¿en qué lugar quedó la fe, el amor y la esperanza? Y destruyes la vida con recuerdos amargos; piensa en la riqueza que hay en tu alma. En la fuente inagotable de tu sabiduría y en los seres que te rodean hoy en vida. No seas como otros que se olvidan que Dios te dio una vida, para llenarla de amor y vivir agradecida.
...ELEMENTO. (Creer es como el agua). OSVALDO PETTINICCHIO (Daniel Vattimo). ARGENTINA. Tanto creo en ti que en el fondo de mis fondos amanezco sin destajos y ese árbol que gotea flores lila canturrea con el canto de los pájaros y tan solo sin querer te nombra a ti. Hay mensajes de canela de frutos de Jamaica El aliento salobre de un mar y de una playa Tanto creo en ti que me empecino en no buscar razones Porque -tanto creo- es argumento Es absoluto Es elemento Es universo No hay extensión mas grande que una herida ni desierto mas insondable que una pena Tanto creo en ti que me miro en las manos y al escribir cristalizan las piedras emergentes...
CONVERSACIONES TRASVERSALES. (Alteridad - Una métrica traviesa). OSVALDO PETTINICCHIO (Daniel Vattimo). ARGENTINA. Cualquier cosa puede pasar hasta que deje de latirte el corazón Cualquier Sol o cualquier nube cada minuto del reloj puede vivir eternamente Si alguien te salva la vida y no tuvo por que hacerlo eso significa algo Una Luna del pasado estuvo en vos ¿Sabes? Si se quiere no ha pasado tanto tiempo de aquel bar perdido en nuestras nadas
Ese dolor de perfume Indiferente Esa mujer de nadie en la mesa distante Sus códigos secretos Una voz que dice historia y de repente cada sombra sin autor me huele a vos. La presencia de tu ángel en la esquina una mirada de nubosa despedida Las cadencias delirantes de lluvia y empedrado que invita a un viejo ensueño de la infancia Y todo va así como fluyendo,como buscando el final inesperado como llenando el pulmón de ansiedades en un furgón de ausencias Todo se repite en el silencio…
UN “SOLO” DE LLUVIA. (Cuando un estado aparece así, mágicamente…) OSVALDO PETTINICCHIO (Daniel Vattimo). ARGENTINA. Cuando los recuerdos se cierran en la boca cuando el tiempo pasó sin darnos cuenta Cuando todo parece diferente y la voz de la gente se nos quiebra aparece el fantasma de los días al que sin temer le hacemos frente Una nube que anunció la lluvia un Sol que se apagó muy de repente La noche que cerró en la melodía de mis manos inclinadas en las hojas La suavidad de un nombre en la memoria La merced de una canción de esquina…
Alguna vez que caminé en la noche y compartí los bemoles de mi vida con un banco de plaza y la llovizna entendí el temblor de las gotas de aquel árbol repicando en el charco Enmudecidas Ese silencio bemol que escribí un día Las Lunas apagadas del otoño La ilusión callada en la quimera Un avatar de noche Confundida con la mudez de una pared sin sombras me brotan cuando me voy quedando solo y las letras de ese “solo” se acomodan escondiendo el rimmel de sus tintas… Una sola vez en mi vida logré detener el fluir de un río y fui feliz Pero el ser humano se equivoca en vez de retenerlo para siempre. Y así es como todo se termina.
A DONDE IRAN SantaVelia Flores. Sabinas Coahuila. México. ¿A dónde irán los pensamientos que en un momento fueron bálsamo sanador? Qué rincón cómplice de mi alma los resguarda? A dónde irán las lágrimas que un día lavaron mis tristezas? Tal vez desde aquella nube hoy sombra me dan. Y así recapitulo mis instantes dándole el valor a lo que me ha forjado. Sentimientos que como grandes maestros han pasado por mi vida y desde otro espacio su esencia me cubre con un manto de fortaleza. ¿A dónde irán los recuerdos? ...esos los resguarda mi sombra como fiel compañera ...los atesora.
Cadáver exquisito 17/06/2021 Ramón de Jesús Hernández Olivares, Oswaldo Ar Re José Manuel Ambrocio, Isidoro Arturo Gómez Montenegro María Guadalupe Martínez Bernal, Angela Pinales Valdez Bertha Lara, Maria Luz Olivares Aldana, Lucila Reyes González, Elena Guzmán Ramón Rocío Del Alba Díaz Ramírez, Tito De León Gómez me limpio el alma de los pesares de la soledad y mis lágrimas, invisibles, desaparecen bajo la lluvia, La vida sostiene en un puño mi letra. Llueve agua bendita, lava mis culpas; camino en la rua de olvidos entre el trafago de gente. Las aceras vuélvanse más largas y lóbregas. Gotas ofendidas caen ¿Qué son las gotas? Diamantes que se transforman en copos de nieve y sudor. Y yo allí languidecía, en la soledad de esa fría y oscura noche, en qué mis lágrimas, como gotas de lluvia, al suelo caían. Mi alma gravita entre tu ausencia, la dicha invita a atrapar tu esencia Mis lágrimas se confundieron con la lluvia y mis ojos sin tristeza, se alegraron. En una red de lluvia, se atrapa mi alegría y revolotea juguetona al compás de las notas, transformando la felicidad en gotitas de cristal. La que fui, la que soñé ser, la que soy, la que se va, la que murió... Crece mi espíritu cada vez que limpio mi cuerpo y alma con pensamientos bellos.