3 minute read

en la Canofilia Mujeres

Next Article
Oaky

Oaky

La figura de la mujer forma parte de la vida activa de la sociedad, su rol se encuentra inmerso prácticamente en todos los ámbitos: sociales, culturales, familiares, políticos, artísticos, académicos, etc. Su contribución hacía una sociedad moderna ha sido más que destacada.

Dicho rol ha evolucionado con el paso del tiempo y ha encontrado un nuevo papel en la sociedad. En un inicio, únicamente era visibilizado a través de la familia, sin embargo, la lucha por los derechos ha conseguido una reivindicación de su desempeño en todos los aspectos.

Advertisement

Sin la intención de entrar en controversias, ni en un debate por diferentes opiniones o posturas, vale la pena señalar que hoy las mujeres juegan un papel preponderante, y no es que antes no lo tuvieran, sino que no se hablaba mucho de esto y en muchos casos había omisión del tema, en el caso específico de la canofilia, no es la excepción.

Para muchas mujeres la cría y exposición de perros iba más allá de la compañía y del afecto de las mascotas. En un mundo en el que el varón gozaba de plena libertad en tanto que ellas estaban sometidas a prejuicios morales, las exposiciones caninas supusieron un alivio a la tensión y el tedio del hogar. El perro es la forja con que se construye la emancipación de muchas mujeres en el periodo entre siglos.

Afortunadamente en la actualidad esa tensión se ha ido equilibrando y podemos gozar de grandes figuras, como excelentes criadoras, juezas, manejadoras, groomers, veterinarias y todas aquellas mujeres que desempeñan una noble labor con los canes; destacando y ganándose el reconocimiento del público.

Es un discurso que debe estar encaminado principalmente, en no generar una lucha de géneros, sino más bien, simplemente homenajear y reconocer el trabajo de las mujeres y en este caso puntual, de los personajes femeninos en la canofilia nacional.

Basta con solo observar cada exposición y evento canófilo para darnos cuenta de la presencia e importancia de las mujeres, pero realmente el trabajo más importante es el que ellas desempeñan tras bambalinas, el día a día que no podemos ver, toda esa labor, dedicación y cuidados que realizan desde sus trincheras para que sus perros luzcan espectaculares en cada pista que pisan.

Solo hay que echar una mirada atrás a un dato que, en 1928, el Nottingham Evening Post presentó, donde señalaba que el setenta por ciento de los criadores de perros en Inglaterra eran mujeres. Una cifra llamativa que merece reflexionemos sobre su circunstancia. Sin la participación activa de las mujeres la canofilia no habría alcanzado las características actuales, en que el perro de raza es un exponente significativo de la cultura occidental.

Sabemos que el proceso de incorporación de la mujer a la canofilia en las primeras décadas del siglo XX fue muy marcado en Europa específicamente en Inglaterra y que mucho tiempo después permeó en América para beneficio de todos. Esta es la historia de un puñado de valientes mujeres que cambiaron la historia social y marcaron el desarrollo de la cultura del perro y las exposiciones, como las podemos disfrutar hoy en día.

Desde muy pequeña tuve el gusto y la pasión por los animales, sobre todo por los perros, o las “bendiciones” como también les digo. De muy niña tuve tres perros, dos de la calle y uno al que ya no lo querían en su casa (Chincolo). Aunque nunca supe su raza, era una muy especial y así fue prácticamente con todos los perros en mi historia, casi todos criollos; Petunia, Chincolo y Solovino. En mi adolescencia conocí a una persona igual de apasionada que yo, pero él tenía perros de raza grande y en ese entonces yo los veía gigantes porque las únicas razas así de grandes que conocía eran el Gran Danés y el San Bernardo. A mí se me hacían impresionantes y a partir de ese momento, supe que el amor con estas razas estaba comenzando.

Soy Abogada de profesión y adoro mi pasión, pero si me preguntas, sin duda hubiera tomado el camino de la veterinaria o cualquier cosa que me ayude a estar más cerca de los animales.

Si bien, estoy incursionando formalmente desde hace algunos años en la crianza de las razas gigantes, sigo esforzándome mucho, comenzando con mi primer ejemplar que fue un Alabai al que llevaba días viéndolo...dicen que el perro elige a su amo y él me eligió a mí. Gracias a él comencé este sueño, siguiendo por su hermana de camada, Brissa, también Alabai. En seguida me enamoré de un par de tibetanos (Roxie y Brox) y de Hannah Montana (Pastor del Cáucaso), mis primeros ejemplares que no son muy comunes en México.

Así es como conocí el equilibrio de cada raza, comenzando a cuidarlos, críalos y darles su propio espacio. A pesar que son perros gigantes, he sabido controlarlos, educarlos y sobre todo amarlos.

De esta manera nació “Mar&Ca Reyes”, criadero que lleva mi nombre y el de mi hija más pequeña, Carla. Todo gracias al amor y pasión por los perros y en especial a las razas gigantes.

PROPIETARIA Mar Reyes

+52 55-79-66-48-09

Pastor de Asía Central, Mastín Tibetano y Pastor del Cáucaso marca_reyes

This article is from: