3 minute read
B. Violaciones al derecho a la educación
Pese a esto, y a los avances internacionales en materia de derechos humanos, las personas trans en República Dominicana no contamos con un acceso integral y de calidad a la salud. Entre las principales causas podemos mencionar servicios deficientes y falta de sensibilización sobre las problemáticas relacionadas conla salud de las personas trans por parte del personal de los servicios de salud. Todo esto, sumado a la falta de una Ley de Identidad de Género, produceestigma y discriminación. En referencia al acceso a servicios de salud,enla Encuesta Nacional LGBTI 2020se observóuna demanda reducida de estos servicios, en especial entre las personas trans:
Son las personas trans las menos protegidas por aseguramiento en salud, siendo peor la situación de las mujeres trans, pues más de 4 de cada 10 está totalmente desprotegida, casi la mitad está afiliada al Seguro Familiar de Salud (SFS) (54.0 %), pero apenas 1 de cada 7 ha logrado acceder al Régimen Contributivo-RC-. Al establecer un paralelo entre las condiciones necesarias para acceder al Régimen Subsidiado –RS- del Sistema Dominicano de Seguridad Social, el hecho de que las mujeres trans (38.7%) y hombres trans (30.6%) sean quienes tienen una mayor proporción de los que respondieron con afiliación a este régimen, apunta a que estas personas viven en condiciones de mayor precariedad, situación que afecta de manera más profunda a las mujeres trans.
Advertisement
Cuando denunciamos el estigma y la discriminación, también nos referimos a la idea instalada en la sociedad de la República Dominicana que relaciona directamente a las personas trans como VIH+, lo que en muchos casos genera que los y las profesionales de la salud nieguen el acceso a una consulta. Respecto a las necesidadesde saludespecíficas de la población trans, solo el recurrir a chequeos médicos es un gran desafío. No contamos con regulaciones sobre el acceso a los tratamientos hormonales ni a las cirugías, los cualesen muchos casos se realiza en contextos clandestinos, con falta de higiene y de acompañamiento profesional,lo que conlleva serias complicaciones a la salud física y mental, e incluso la muerte.
En República Dominicana, las personas trans también somos expulsadas y discriminadas en los ámbitos de la educación. La violencia verbal y física, el bullying, es protagonizado por los estudiantes, así como por personal docente o directivo de los establecimientos educativos.
La Constitución en su Artículo 63. Derecho a la educación, afirma:“Toda persona
tiene derecho a una educación integral, de calidad, permanente, en igualdad de condiciones y oportunidades, sin más limitaciones que las derivadas de sus aptitudes, vocación yaspiraciones” . Además, se establece que es impartida por el Estado, de manera gratuita y obligatoria en su nivel inicial; aun así, en los centros educativos del país no existen protecciones contra el acoso escolar por motivos de orientación sexual e identidad de género.
Según los datos publicados en la hoja de datos del panel “Asegurando la educación inclusiva y libre de discriminación y violencia” del Diálogo Nacional LGBTI organizado por PNUD, en el año 2014, el 57 % de la población trans había logrado finalizar los estudios secundarios mientras que11% hbíalogrado acceder a educación universitaria superior. En contraposición, y tal como se observa en el siguiente gráfico, las personas trans en República Dominicana alcanzadas por estamuestrano cuentancon acceso a la educación, además, lapermanencia en el sistema estágravemente restringida.
Nivel de instrucción
Secundaria Completa
Secundaria Incompleta
Primaria Completa
Primaria Incompleta
0% 20% 40% 60% 80% 100%
Por otra parte, debido a la falta de actualización y de adaptación a las normativas internacionales vigentes, se restringe a las personas trans la posibilidad de expresar nuestras identidades. Por ejemplo,a través de la prohibición de llevar el pelo largo, usar accesorios “contrarios a nuestro género”, o usar el uniforme con el cual nos identifiquemos y sintamos cómodas. Esto, junto a otras acciones antes mencionadas, tienecomo resultado la deserción escolar.
Está claro que, si nuestra Constitución reconoce a la educación como un pilar fundamental para el desarrollo de la personaen las diversas etapas de la vida, la falta de