5 minute read
EVOLUCIÓN DEL CONTROL DE LA TEMPERATURA
Segunda Parte
Al paso de los años se han fabricado muchos refrigeradores diferentes. El refrigerante R-12, un clorofluorocarburo (CFC), lo desarrolló Thomas Midgley en 1931 de la Ethyl Corporation y C.F. Kettering de la General Motors. Fue producido por DuPont. En la década de 1930 la refrigeración estaba en camino de ser utilizada extensivamente en los hogares norteamericanos y en establecimientos comerciales.
En 1939 Copeland Company introdujo el primer compresor exitoso semihermético (Copelametic) al que se le podía dar mantenimiento en el lugar de su instalación. Tres cambios ingenieriles hicieron posible el éxito de estos compresores:
1. Los devanados del motor aislados con tela se reemplazaron con aislamiento Glyptal.
2. El aislamiento de neopreno reemplazó al esmalte de porcelana en las terminales eléctricas.
3. Se rediseñaron las válvulas para mejorar la eficiencia.
En 1974, dos profesores de la Universidad de California, Sherwood Rowland y Mario Molina, presentaron la “teoría del ozono”.
En esta hipótesis se afirmó que la emisión de refrigerantes a base de clorofluorocarburos (CFC) estaba agotando la capa protectora de ozono de la Tierra. Los científicos condujeron estudios a gran altura y concluyeron que los clorofluorocarburos estaban relacionados con el agotamiento del ozono.
Representantes de Estados Unidos, Canadá y más de 30 países se reunieron en Montreal, Canadá, en septiembre de 1987, para tratar de resolver los problemas ocasionados por los refrigerantes liberados y el efecto que tenían en la capa de ozono. Esta reunión se conoció como el Protocolo de Montreal. Este protocolo lo ratificaron 100 naciones en 1989 y dictaminó un alto a la producción global de los clorofluorocarburos que suspendió su producción a los niveles anteriores de 1986. El protocolo también suspendió la producción de clorofluorocarburos (HCFC) a niveles de 1986, que debería iniciar en 1992. Además, el protocolo impuso un programa de pago de impuestos sobre los refrigerantes CFC. Conforme a la investigación sobre el agotamiento del ozono continúa en la actualidad, también continúan las reevaluaciones y actualizaciones para el Protocolo de Montreal. Al momen- to de escribir este artículo las actualizaciones más recientes son las siguientes:
• 1990 (noviembre). El presidente George H.W. Bush firmó las enmiendas de la Clean Air Act que propusieron el congelamiento y la prohibición de ciertos refrigerantes.
• 1992 (julio). La EPA determinó ilegal la descarga intencional de refrigerantes CFC y HCFC en la atmósfera.
• 1993. La EPA ordenó el reciclaje de refrigerantes CFC y HCFC.
• 1994 (noviembre) La EPA dictaminó una fecha límite de un programa de certificación técnica, de manera que los técnicos que trabajaran en la industria de la calefacción, ventilación, aire acondicionado y refrigeración (HVACR) tenían que estar certificados por la EPA en esta fecha.
• 1995 (noviembre). La EPA determinó ilegal descargar intencionalmente refrigerantes (HFC y todas las mezclas de refrigerantes) en la atmósfera.
• 1996. La EPA determinó ilegal fabricar refrigerantes CFC.
• 1996. La EPA puso en marcha un programa de cancelación de la producción de HCFC, que eliminará por completo la producción de refrigerantes HCFC para el año 2030.
• 1998. (junio). La EPA propuso nuevas regulaciones sobre normas de recuperación/reciclaje, tasas de fugas en equipos y refrigerantes alternativos.
En 1997 se introdujo el Protocolo de Kyoto, con el objetivo de reducir las emisiones mundiales de gas con efecto de calentamiento global. El efecto de invernadero o calentamiento global se había convertido en un asunto medioambiental de suma importancia.
De 1997 a 2000, la certificación voluntaria de técnicos HVACR se convirtió en un punto importante.
De 1998 a 2008 la AC&R Safety Coalition, el Air Conditioning and Refrigeration Institute (ARI), la Air Conditioning and Refrigeration Distributors International (HARDI), la Carbon Monoxide Safety Association (COSA), el Green Mechanical Council, la HVAC Excellence, La North American Tecnician Excellence (NATE), La Refrigeration Service Engineers Society (RDES) y la United Association of Journeymen and Apprentices (UA) se convirtieron en instituciones importantes en la certificación técnica HVACR voluntaria y en exámenes de estudio domésticos.
R-410, una mezcla refrigerante basada en HFC eficiente y sin cloro para aplicaciones residenciales y de aire acondicionado comercial ligero, se utiliza con el compresor espiral para mayor eficiencia.
En la actualidad, cada sistema de enfriamiento central dividido fabricado en Estados Unidos debe tener una clasificación de acuerdo con la Seasonal Energy Efficiency Ratio (SEER) de al menos 13. Este requisito de energía es obligatorio mediante una ley federal desde el 23 de enero de 2006.
En 2007, el calentamiento global se convirtió en un asunto medioambiental importante. Se diseñó un sistema de calificación para ayudar a os ingenieros, contratistas y consumidores a saber el “valor verde” de cada instalación mecánica. El “valor verde” comprende la eficiencia energética del sistema, la salida de contaminación y sustentabilidad. Los edificios verdes y los sistemas mecánicos verdes se están popularizando cada vez más en el mundo actual como una manera de detener el calentamiento global.
Conciencia Verde
Como ya se mencionó, el calentamiento global debido a una tasa de emisión de gases invernadero sin control es un punto medioambiental de mucha importancia. La mayoría de la energía del Sol alcanza la Tierra en forma de Luz visible. Después de pasar por la atmósfera, parte de esta energía la absorbe la superficie de la Tierra, calentada por el Sol, irradia energía térmica de regreso a la atmósfera hacia el espacio. Los gases de ocurrencia natural y los contaminantes atmosféricos menores como los CFC, HCFC, HFC, dióxido de carbono, monóxido de carbono, vapor de agua y muchos otros químicos absorben, reflejan y/o refractan la radiación infrarroja de la Tierra y evitan que se escape de la atmósfera baja. El dióxido de carbono derivado principalmente de la quema de combustibles fósiles es el gas de calentamiento global más importante en la actualidad. Los seres humanos somos los principales responsables de muchos de estos gases invernadero. Este proceso aminora la pérdida de calor de la Tierra, haciendo que su superficie sea más caliente de lo que sería si esta energía térmica hubiera pasado sin obstrucción por la atmósfera hacia el espacio. Luego la superficie más caliente de la Tierra irradia más calor hasta que se establece un equilibrio entre la energía de entrada y salida. Este proceso de calentamiento se denomina calentamiento global o efecto invernadero.
Historia De La Calefacci N Dom Stica Y Comercial
La primera exposición de los seres humanos al fuego fue probablemente cuando un rayo u otro suceso natural, como una erupción volcánica, incendió algún bosque o pastizal. Después de vencer el miedo al fuego, los primeros humanos descubrieron que al colocar un fuego controlado en una cueva o en otro refugio podían crear un entorno para vivir con más comodidad. El fuego, con frecuencia, se llevó de un lugar a otro. Sin embargo, el humo siempre fue un problema y fue necesario inventar métodos para ventilarlo al exterior.
Un ejemplo visto en años posteriores fue el de los nativos americanos que ventilaban el humo a través de orificios en la parte superior de sus tiendas y algunas de estas ventilas las construyeron con un deflector que se podía ajustar para evitar corrientes descendentes.
Las chimeneas, con un conducto para la salida de humos, eran comunes en Europa y América del Norte. Las primeras estufas demostraron ser más eficientes que las chimeneas. Estas primeras estufas se construyeron con un tipo de ladrillo refractario, materiales cerámicos o hierro.
A mediados del siglo XIX se inventó una cubierta y un sistema de conductos para la estufa, así ésta se podía ubicar en el lugar más bajo de una estructura; el aire en la cubierta alrededor de la estufa se calentaba y se elevaba por el sistema de conductos y de rejillas, para ingresar al área habitable. Éste fue el inicio del desarrollo de los sistemas de calefacción con base en la circulación de aire caliente. Se crearon las calderas que calentaban agua, misma que se hacía circular a través de tuberías en los sistemas de conductos. El agua calentara el aire alrededor de las tuberías y este aire caliente pasaba a las habitaciones que se deseaba calentar. Luego se desarrollaron los radiadores, en donde el agua calentada circulaba por convección a través de las tuberías hacia los radiadores y el calor se transfería a la habitación mediante radiación. Estos primeros sistemas fueron los antecesores de los sistemas modernos de calefacción hidrónica.