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La política de la distancia

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Reseñas de libros

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Articulación de la plataforma multisectorial «tambo» al territorio peruano

Christian Yarasca

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Proyecto de tesis para el grado de magíster. Maestría en Arquitectura y Procesos Proyectuales (MAPP). Pontificia Universidad Católica del Perú. ___________________________

Año del proyecto

2018 ___________________________

Página derecha: Los tambos se ubican en las zonas rurales de mayor vulnerabilidad. Estas se encuentran generalmente en las zonas altoandinas. No obstante, los más de 500 tambos que existen actualmente se dispersan por casi todo el territorio nacional, lo cual lo expone como un fenómeno interesante desde la aproximación territorial. Elaboración propia.

En los últimos diez años, la respuesta del gobierno peruano frente a los problemas que sufre la población rural dispersa (cerca de 1,7 millones de peruanos) ha sido la disposición intensiva de programas sociales destinados al desarrollo rural. Estos van de lo programático a lo tangible, con la intención de afrontar la pobreza rural en zonas de alta dispersión poblacional y escasa presencia estatal.

El Programa Nacional de Tambos (PNT) es un importante logro estatal. Desde su creación, en 2013, implementa masivamente plataformas físicas multisectoriales —denominadas «tambos»— que permiten el acceso a servicios básicos como identificación civil, salud y atención ante situaciones de emergencia. Para el 2021, el propósito del Estado es triplicar el número actual (500) de tambos en zonas estratégicas, de modo que se cubra a toda la «población objetivo.

El planteamiento original de los tambos se enmarcó en un sesgo asistencialista. Esto ocasionó un limitado efecto catalizador para fortalecer las capacidades productivas en los ámbitos de influencia, si bien con el paso de los años han pasado gradualmente a albergar acciones vinculadas a la productividad rural. En este escenario se plantea como propuesta un «catálogo sistemático» de componentes arquitectónicos, que permita concebir óptimamente los nuevos tambos y potencie su diversidad frente a las características específicas de cada territorio. El catálogo plantea tres estrategias proyectuales:

a) Multiescalaridad. El nuevo tambo tendrá la cualidad de adaptarse dimensional y programáticamente a la heterogénea demanda de los centros poblados rurales dispersos en su radio de influencia. b) Sistematización. La implementación del tambo será de carácter modular, para optimizar los procesos constructivos y logísticos. El sistema ofrecerá fases de ejecución acordes al grado de riesgo que corra el centro poblado rural. c) Articulación territorial. El tambo será pertinente al territorio en cuestiones de confort ambiental, así como para afrontar duras condiciones climáticas.

Las políticas del gobierno peruano atienden comúnmente a los territorios rurales desde una mirada «adversa» de su geografía —heladas, sequías, inundaciones, etcétera—, sin ver la otra cara, que son sus potencialidades: riqueza cultural, recursos paisajísticos o patrimonio material e inmaterial. Estos valores podrían servir de insumos proyectuales para que las futuras iniciativas gubernamentales de infraestructura social operen con una visión sistemática del territorio con el objetivo de reducir la distancia entre la población rural y las políticas nacionales.

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1. Arriba: módulos. Se han agrupado en cinco tipologías programáticas que permiten la versatilidad para reunir en un tambo todas las actividades posibles. Asimismo, en términos climáticos los módulos se clasifican en tres grupos: los del grupo (1), «sierra», buscan aprovechar la radiación solar cenital y evitar los vientos fríos horizontales; los del grupo (2), «heladas», tienden a ser herméticos y a generar efecto «invernadero» para la ganancia térmica; y los módulos del grupo (3), «selva», tienen una gran altura interior (3,60 m), para una correcta ventilación, y poseen la capacidad de elevarse sobre el nivel de suelo para adaptarse a las típicas inundaciones fluviales. Abajo: conectores. Sirven para generar la circulación horizontal (pasarela, rampa y escalera) entre los módulos; además, sus dimensiones posibilitan la generación de «plazas» o lugares de encuentro. En esta categoría se han planteado dos grupos: los de la «sierra-heladas», elevados en lo mínimo permisible (0,30 m), y los del grupo «selva», con variaciones de altitud (0,45, 0,90 y 1,50 m) según el nivel de inundación fluvial de sus pisos altitudinales. Elaboración propia. 2. Arriba: exteriores. Elementos que sirven para activar el uso público de los espacios exteriores, ya sea para el uso de carácter comercial -cultural (por ejemplo, cubiertas ligeras para ferias), lúdico (juegos), masivo (plazas) o de descanso (bancas). Abajo: productores. Equipamiento para el uso instructivo de las capacidades agrícolas y alimentarias (biohuerto, invernadero y vivero) y la capacitación del mejoramiento ganadero (módulo de crianza). El invernadero para la zona «heladas» tiende a retener la mayor temperatura por el grosor de sus muros base. Para la zona «sierra», en cambio, aprovecha la radiación por el ángulo de su cubierta. El biohuerto se plantea como una porción de suelo cultivable al aire libre con elementos verticales que permitirían el tendido de una malla Raschell. El vivero sería solo un sistema ligero, para «proteger» el cultivo, porque la Amazonía ya provee la temperatura adecuada. Elaboración propia. 3. Axonometría de un tambo para la zona «quechua». Todas las piezas forman parte de un «Catálogo Bicentenario», que permite generar más tambos acordes al contexto donde se asienten. Elaboración propia. 4. Número de intervenciones del gobierno central, representado por sus ministerios. En 2012 el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento poseía el mayor porcentaje (+ 90%), ya que en este se inició el Programa Nacional de Tambos (PNT). A partir de 2013, cuando el PNT se transfirió al Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, esta entidad asumió una mayor importancia. No obstante, crece la intervención de ministerios más relacionados con lo productivo, como el de Agricultura. Ante esto, cabe preguntarse si la infraestructura del tambo está preparada para albergar intervenciones que fomenten la productividad, de modo que otros ministerios, como el de Educación, el de Producción o el de Cultura, puedan adquirir una mayor notoriedad. Elaboración propia (Tambook 2017). 5 y 6. Ejemplos de agrupaciones para la «Puna» y para la «Selva Baja». Elaboración propia. 7. Tambo típico. Tambo en Huanta, Loreto. Fuente: MIDIS/Flickr.

Christian Yarasca. Arquitecto por la Universidad Peruana Unión (UPeU) y magíster en Arquitectura y Procesos Proyectuales por la PUCP. Profesor principal de la Universidad UPeU en las asignaturas de Diseño Arquitectónico, y Representación e Investigación en Arquitectura. Su campos de investigación se centra en proyectos arquitectónicos, paisaje, cartografías, representación y visualización de la información.

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