KINFOLK

Esta nueva tendencia va a conquistar nuestros interiores ya que es un diseño que nos invita a regresar a nuestros orígenes y a un modo de vida más relajado.

Descubre el Kinfolk y sucumbe a su encanto minimalista.

En medio de la vorágine y de la agitada vida que llevamos surge el espíritu del Kinfolk, que nos invita a una vuelta a nuestros orígenes y que apuesta por el regreso a una vida sencilla. Esta tendencia apareció en EEUU y se inspiró en la forma de vida de la comunidad Amish, donde todo se centra en torno a la naturaleza y a la sencilla vida en el campo. Este anhelo por la tierra y lo rústico también ha recibido influencias del art de vivre francés, italiano y griego.

En cuanto a la decoración, Kinfolk es un cruce de tendencias. Diseños nórdicos, vintage, rústicos e industriales se entremezclan con una amplia variedad de géneros, estampados, colores y materiales, que dan como resultado una atmósfera con toques minimalistas y bohemios con una estética contemporánea.

PRINCIPIOS BÁSICOS DEL KINFOLK

A veces hippie, a veces industrial… el Kinfolk puede encajar tanto en un cottage como en un loft neoyorquino. A continuación os presentamos algunos de sus principios básicos para adaptar en casa este tipo de diseño:

Plantas

El estilo Kinfolk es una invitación a conectar de nuevo con la naturaleza a través de las plantas. Por eso te proponemos que crees un pequeño jardín interior en casa y le prestes la mayor de las atenciones. Como toque, coloca un cactus debajo de una campana de cristal o pon una única flor en una botella reciclada o unas suculentas suspendidas en una red de macramé.

Materias primas

Este estilo se centra en la esencia de las cosas y es por ello que prefiere siempre materias primas sobrias que le den al espacio una apariencia rústica. La madera es imprescindible en todas las habitaciones: bien en el techo, en forma de vigas; en los muebles como en sillas y mesas o en piezas antiguas. Las líneas son simples y las texturas rugosas. El ratán y la piedra también están presentes y el lino y el algodón se apropian los textiles.

Colores

Como en el universo nórdico, el blanco domina las paredes para obtener un resultado simple y luminoso y como siempre, buscando estar siempre más cerca de lo esencial. El resto de la paleta cuenta con colores suaves como el gris, el crudo, tonos verdes y colores tierra.

Accesorios hechos a mano

En el estilo Kinfolk creamos nuestros propios elementos decorativos para hacer de nuestros espacios unos lugares únicos, auténticos e irrepetibles. De esta manera, muchos objetos vintage y muebles de estilo industrial conviven fácilmente con piezas de porcelana china de segunda mano, muebles restaurados y objetos reciclados.

Estampados étnicos y artesanía. Por último, para completar tu look Kinfolk no te olvides de contar con estampados étnicos, recuerdos de viajes, atrapasueños (¡son tendencia!) y un papel para las paredes con un diseño ultramoderno. ¡Y si todo está hecho a mano, mucho mejor!

Ya estás listo para volver a los orígenes de la decoración. Ten muy presente el Kinfolk porque va a dar mucho que hablar.