LAS COLORADAS

AARÓN HeRNÁN

La magia y belleza del sureste mexicano se viven mejor a bordo de un Defender es por eso que lo elegimos como nuestro compañero de viaje en esta aventura. Solo con avanzar por las carreteras llama la atención por su atractivo diseño y techo en contraste color negro. A lo que se agregan dos opciones de motorización: 6 cilindros turbocargado MHEV y V8 supercargado. Qué comience el recorrido.

Mérida es el punto de salida para la aventura que nos conduce como primera parada a bordo de Defender por el “Pueblo Mágico” de Izamal, fundado en el siglo XVI sobre la herencia de una ciudad Maya que antiguamente se le conocía como “la ciudad de los cerros”, ya que estaba rodeada de pirámides. Con genuino color amarillo en sus calles, iglesias, palacios y conventos, tiene grandes templos y monumentos que resaltan con el color Gris Carpathian de Defender, que cabe mencionar, también está disponible, en: Blanco Yulong y Negro Santorini. Izamal es reconocido por su oferta gastronómica, así que antes de partir nos detenemos a disfrutar de los sabores de la región y lo hacemos al interior del prestigiado restaurante Kinich, un espacio con el sabor auténtico de la cocina yucateca. Aquí se vive la magia del lugar con solo cruzar la puerta. continuamos el recorrido que nos llevará por siete kilómetros de arena blanca y aguas turquesas, esta vez rumbo al pueblo llamado El Cuyo, que algunos consideran “el último paraíso del Caribe mexicano”. No perdemos detalle del espectáculo natural que se abre a nuestro paso, , observamos el vuelo de las aves de la zona como lo son los flamingos o el tucán. Vámos hacia Tizimín donde nos sorprende la arena blanca.

El Cuyo es una localidad todavía sin grandes hoteles, ni vida nocturna. Un lugar para descansar, disfrutar de la naturaleza y de la gastronomía de este pueblo de pescadores, donde es posible verlos llegar con su pesca del día a los restaurantes. Deportes como windsurf, kitesurf y kayak, se practican en las playas de este paradisiaco lugar .

LA AVENTURA CONTINÚA: LAS COLORADAS

Una sinuosa carretera une a El Cuyo con la salinera Las Coloradas que ya se asoma como nuestra siguiente parada.

. A la vista comienza a aparecer el rosa intenso del agua donde se concentran microrganismos y se extrae la sal para la planta procesadora de la zona. El color rosa convive con el verde del mar Caribe, donde ambos atraen a muchos viajeros. Cabe mencionar que actualmente se permite una actividad turística controlada, sustentable y responsable, dando como resultado todo un Parque Turístico. Sin duda un lugar extraordinario que ofrece experiencias únicas para el visitante que busca explorar una de las zonas más asombrosas del país.

No muy lejos está la localidad costera, nos aventurarnos como destino final a Río Lagartos, a tan solo unos 30 minutos de Las Coloradas. Los pobladores nos cuentan que este cuerpo de agua se conecta con el Golfo de México y las temperaturas rondan entre los 30 y 33 grados centígrados, un ecosistema de naturaleza donde el rey, también es el flamingo. Este espacio natural es considerado una Reserva de la Biosfera que está protegida, y sirve de hogar a las aves durante los huracanes. Recomendamos tomarse un momento para un paseo en lancha y entrar a los manglares, donde es posible ver cormoranes –aves acuáticas– como: el pato buzo, pelícanos, fragatas, aguililla cangrejera, y el gran espectáculo de los flamingos. También hay cocodrilos, por lo que el paseo debe ser prudente. Pero la aventura de descubrir el sureste mexicano no termina aquí. ¡Seguiremos explorando!