INFORME - REBECA LANE
UN ENCLAVE DE
RESISTENCIA Abanderada de la consolidación de las mujeres en el hip hop y de la memoria activa que debe rodear a la historia cultural y social de los pueblo, la artivista guatemalteca publicó su nuevo EP: Llorando Diamantes. Desde Guatemala para el mundo, la música de Rebeca Eunice Vargas a.k.a. Rebeca Lane lleva muchos años siendo un refugio lírico de contenido consciente para una enormidad de personas. Astuta en combinar ritmos de hip hop y un fraseo limpio y fluido con una esencia autóctona del Caribe y de Los Andes, es una de las referentas indiscutidas del rap, y no pierde de vista la realidad social del continente. El término “artivista” es uno que la define muy bien. A lo largo de su carrera artística se ha dedicado a reivindicar diversas luchas sociales, en particular muchas del espectro del feminismo. Poeta y socióloga, puede verse enredado entre sus versos un fuerte y claro compromiso con la visibilización de las mujeres en la historia social y política de los pueblos, que vuelve a sus temas fuentes de claras
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consignas de liberación de los cuerpos y en contra de la opresión hacia la mujer y las minorías marginadas (“Tu cintura sin censura”, “Este cuerpo es mío” o “Reina del caos”). En consonancia, otro de sus fundamentales proyectos es el colectivo Somos guerreras. Fundado junto a artistas de fuerte pisada en el rap en español (Nakury y Audry Funk), es un espacio feminista de construcción y formación hacia la igualdad y en contra del machismo y la misoginia en el ámbito del hip hop, que busca trazar lazos entre raperas de toda América Latina y consolidar una escena feminista dentro del género. Auténtica y leal a sus principios, Rebeca es además una investigadora y académica de producción profusa, que planta bandera firme dentro de aquel ambiente tan excluyente para