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Vivien Goldman: La venganza punk de las mujeres

TXT:: Javier Ibarra

Vivien Goldman es una pionera en el periodismo musical, fue la editora de la emblemática revista Sounds a mediados de los 70 y también fue PR de Atlantic Records y Island Records, donde trabajó con Bob Marley.

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EDITORIAL CONTRA

Muchas veces se han investigado los orígenes del punk. La década de 1970 siempre reluce con Sex Pistols, The Clash, The Damned o Ramones. También se menciona a Death, Los Saicos, MC5, The Stooges; proyectos que antes del boom de chamarras de cuero, anarquía y ropa rasgada obtuvieron el mote de protopunx.

El punk trascendió de lo musical a lo social. Sid Vicious, Joe Strummer, Dave Vanian o Joey Ramone son los referentes de este fenómeno. Sin embargo, el pensamiento de algunos varones quebrantaba la idea de que dicho movimiento era igualitario con el sexo femenino; opacó la tarea ejercida por las mujeres que acudían a los shows, tocaban o aportaban ideas al movimiento juvenil y transgresor. Por eso la editorial española Contra está publicando La venganza de las punks: Una historia feminista de la música, de Poly Styrene a Pussy Riot. El libro lo escribió Vivien Goldman, y cuenta otra versión del punk.

Goldman, nació en 1953, en Londres, Inglaterra. Hija de padres judíos/alemanes que se refugiaron en el país del té a consecuencia de los nazis, desde pequeña fue creativa. Estudió literatura inglesa y estadounidense, en la Universidad de Warwick. Al mismo tiempo inició su carrera en el periodismo musical. A mitad de los años setenta llamó su atención el ambiente agitador del punk. “Fui una adolescente con muchas cosas en la cabeza. No viví por completo hasta que dejé la universidad y me mezclé con esa filosofía que me permitió luchar por mis cosas. Nunca había experimentado tanta libertad”, comúnmente recuerda, quien quedó flechada por grupos como The Slits, un cuarteto femenino que se formó en 1976.

The Slits fueron teloneras de The Clash en su gira White Riot. Tristemente Ari Up, vocalista e hijastra de John Lydon (Sex Pistols y PiL), resultó apuñalada por un sujeto durante un concierto. Tampoco aceptaron trabajar con Malcom McLaren, dueño de la tienda SEX junto a su pareja Vivienne Westwood; prometían convertirlas en las Pistolas Sexys. En 1979 lanzaron Cut, su disco debut, y el antecedente del movimiento riot grrrl de los noventa, impulsado por Kathleen Hanna (Bikini Kill). En ese álbum mezclaron punk y reggae, pero gozaron más de la autonomía que le impusieron a Island Records, un sello nada acostumbrado a firmar grupos similares al de estas chicas. Cut, aparte de ser una grabación popular por canciones como “Typical girls”, la portada se convirtió en un acto de rebeldía que comenzó a replicarse en la cultura pop; aparecieron semidesnudas y dieron mucho de qué hablar.

Cosas de ese tipo se convirtieron en la motivación de Goldman, quien acumuló historias en su cabeza y las plasmó en publicaciones como NME, Melody maker, The Guardian, etcétera. Hoy ella es reconocida por ser una pionera del periodismo musical en Inglaterra, desde que exploró el punk a ras de piso, y le dio una voz femenina al movimiento musical.

Su afán de evidenciar las cosas terminaron llevándola a otros rumbos. A lo largo de su carrera ayudó a realizar documentales, participó en la producción de programas para la televisión británica, y hasta se convirtió en la encargada de las relaciones públicas de Bob Marley en Island y Atlantic Records. Igualmente, siendo una amante de la música, estuvo involucrada en proyectos musicales como The Flying

TÍTULO: La venganza de las punks: Una historia feminista de la música de Poly Styrene a Pussy Riot AUTORA: Vivien Goldman EDITORIAL: Doubleday

Lizards y Chantage; grabó con sus amigos Vicky Aspinall (The Raincoats), Keith Levene (PiL) y Robert Wyatt.

Actualmente Goldman da conferencias, es catedrática en Clive Davis Institute of Recording Music y ha publicado otros libros sociomusicales: The Book of Exodus: The Making and Meaning of Bob Marley and The Wailers’ Album of the Century (2006), The black chord/visions of the groove: Connections Between Afro-beats, Rhythm and Blues, Hip Hop, and more (1999), entre otros.

Su más reciente publicación, La venganza de las punks, cumple con los orígenes de este movimiento musical basada personajes, bandas, actos, canciones y demás cosas concebidas por mujeres. Explora desde los setenta y hasta el día de hoy un lado poco contado, dividiendo el libro en cuatro partes: identidad, dinero, vida afectiva y búsqueda de cambio. La música recorre las 256 páginas como una playlist, dando un acercamiento único y alejado de las canciones de tres acordes más conocidas.

Goldman, en La venganza de las punks explota la creatividad femenina que se ha dado arriba y abajo de los escenarios, cuando las mujeres comenzaron a ser protagonistas en la industria musical. Así la actitud rebelde de los primeros años influenció a muchas artistas pop como Madonna con su canción “Material girl”, No Doubt con “Just a girl”, y hasta a Lady Gaga con su estética y vanguardia.

A manera de ensayo, Goldman, cuenta cómo The Raincoats, formadas en 1977, solían ser ignoradas por la prensa hasta que Kurt Cobain (Nirvana) declaró que era fanático del conjunto. El grupo de amigas, de hecho, se formó después de que existiera el derecho para iniciar acciones legales contra el maltrato en el matrimonio. “No one’s little girl”, así se convirtió en el himno de ese acontecimiento, basándose en no depender de una pareja.

No sólo se adentró en Inglaterra y Estados Unidos para escribir La venganza de las punks. Basándose en el legado de Patti Smith, Debbie Harry (Blondie), Poly Styrene (X-Ray Spex), Palmolive (The Slits), Chrissie Hynde (The Pretenders), Alice Bag, Sleater-Kinney o Bikini Kill, lo que hizo fue tomar un poco de ellas para perfeccionarlo con personajes poco conocidos. De esa forma, en los cuatro capítulos también se encuentra la historia de chicanas como Fea, rusas como las Pussy Riot, colombianas como Fértil Miseria. También es notable conocer el aporte de las francesas Descloux, las alemanas Malaria!, la jamaicana Grace Jones y hasta las Vulpes, un cuarteto que causó polémica con su tema “Me gusta ser una zorra”, al hablar públicamente de la libertad sexual en 1983, cuando la interpretaron en el programa Caja de ritmos de la Televisión Española; se ganaron la acusación de haber transgredido los límites constitucionales de su país, al degradar a la sociedad con su comportamiento.

La venganza de las punks llega en una época donde las calles seguirán llenándose de chicas enojadas que marchan por sus derechos; muchas de ellas inspiradas por lo que probablemente haya sido plasmado en este libro necesario para entender nuestros comportamientos. Pero también de las cosas más importantes, es que gracias a la publicación de Contra, se puede conocer el otro origen del punk.

VIVIEN GOLDMAN

FOT:: CHRISTOPH VOY

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