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20 Poemas y una mujer
Editorial Giraluna R.L. Casa del Poeta Peruano Venezuela
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© 2013 – Editorial Giraluna, R.L. Primera edición: 2013 (100 ejemplares) Derechos Reservados – Es propiedad de la Editorial Edición bajo el cuidado de: Rey D’ Linares Diseño de portada: Carolina Linares Imagen de portada: Autora: Fernando Escalona Vásquez Impreso en Venezuela por: Editorial Giraluna, R.L. J-29614384-6 www.editorialgiralunarl.blogspot.com editorialgiraluna2008@gmail.com Hecho el Depósito de Ley
Prólogo Todos tenemos algo que nos identifica, con lo que nos sentimos cómodos y felices, algo que sentimos tan cercano que forma parte de nosotros y nosotros parte de ello. Así es para mí la escritura, se ha convertido en una de mis mejores amigas, mi refugio y desahogo, la marca que ha cambiado la manera de ver las cosas, ahora siento que no quiero ni puedo desligarme de ella porque en ella encontré mi propia voz y la pasión necesaria para expresar todo lo que siento y pienso.
La inspiración me llega en momentos inesperados volviéndolos mágicos, y voy por las calles acompañada de papel y lápiz para recibir lo que la vida me regala, para mí cada escrito es una bendición y de ellos aprendo. Escribir para mí es una de las cosas más placenteras, encontrando lágrimas y sonrisas en cada letra que forman las palabras, esas que conforman un verso, ese verso que me forma a mí. Este libro “20 poemas y una mujer”, es otra oportunidad para compartir sentimientos, emociones, aprendizajes, reflexiones, criticas, en fin, tantas cosas que quiero darle a todo aquel que quiera tomarse un momento para dejarse sorprender por el maravillo mundo de la literatura.
Mis colaboradores e ilustradores: Celso García, Fernando Escalona, Wilvis Beaumont, Rodolfo Rico, Luis Maneiro, Krishna Lejaraso, Naomi Valdez, Laura Vasquez, Karina Barreto, Fabiola Martinez,, Evelyn Espinoza, Gladys Millán, Omaira Suarez, Ricardo Milones, María Baldivian, Andrea Gómez y Sakura Fujikawa. Jóvenes artistas natos de diferentes estados del país, que colaboraron para que este proyecto se realizara, y los que apoyaron en diferentes actividades: Eliana González, Carmen Rodríguez, Maryuri Hermoso y Cirilo García (mi padre). Gracias…
La Autora
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1 Corintios 13:1. Si hablo las lenguas de los hombres y aun de los ángeles, pero no tengo amor, no soy más que un metal que resuena o un platillo que hace ruido.
Un hermano Un hermano es la mitad de tu corazón latiendo en otro [cuerpo, el mejor amigo que pudieron darte tus padres, un regalo envuelto en múltiples bendiciones enviado por [Dios, con sonrisas llenas de amor y ternura. La confianza tomada de la mano, en los brazos [envolventes de incondicional ayuda, el refugio y la confidencia mejor elegida, el guardián de tus sueños secretos, un hermano es un pedazo de cielo con manos y pasos.
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1 Corintios 13:2 Y si tengo el don de profecía, y entiendo todos los designios secretos de Dios, y sé todas las cosas, y si tengo la fe necesaria para mover montañas, pero no tengo amor, no soy nada.
Sentada bajo el árbol Es el aroma de la generosidad lo que se desprende de tu [cuello, tus labios están limpios como la lágrima de un ángel, me pierdo y me encuentro entre el rompecabezas de tu [piel, me senté en una estrella para escribir en el cielo tu [nombre con la tinta de los besos que me diste a guardar sentada bajo el Araguaney. Me esperaba con una orquídea el turpial como todas las tardes, cuando el sol se baña en el río. Anocheció y en la oscuridad se escuchan los pensamientos Escribo cuando sufro, escribo con el corazón roto, escribo en la melancolía y en el silencio, y, mientras escribía, llegó el Turpial.
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1 Corintios 13:3. Y si reparto entre los pobres todo lo que poseo, y aun si entrego mi propio cuerpo para tener de quĂŠ enorgullecerme, pero no tengo amor, de nada me sirve.
Te creo Creo en tu voz, en tu mirada hacia el viento. Creo en tus manos, en tus palabras, en tus promesas, en tu rostro frente al espejo. Creo en tus ojos.
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1 Corintios 13:4. Tener amor es saber soportar; es ser bondadoso; es no tener envidia, ni ser presumido, ni orgulloso
La tierra llora Te abrí mi corazón y te alimenté con él, tomaste de mí, luz, cuando lo necesitabas, naturaleza convertida en mujer, que sufre, que padece el dolor de la negligencia y el [olvido. Recibí de tus manos lluvia, nieve, fuego y aire, cubre de tierra las lágrimas que brotan de la fallida [inocencia, pensamientos que guardan un mundo mejor. Conmuéveme con el olor de tus pastos, cacao y la fuerza de las corrientes, ¡Qué caos! Tú estabas antes que nosotros y ahora [agonizas, ¿Quién ha lastimado tus alas? Tus cauces están contaminados de dolor e indolencia, yo no olvido la línea dibujada entre el cielo y el mar.
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1 Corintios 13:5 Ni grosero, ni egoísta; es no enojarse ni guardar rencor…
El adiós Pensé que te amaría por siempre, entre risas y lágrimas, como lo hacían mamá y papá. Tú serías mi refugio, mi resguardo, el apoyo que siempre necesité, y de repente… me diste piedras en vez de pan, me diste olvido en vez de hermosos recuerdos. Las estrellas gemelas, en mi rostro, quedaron sumergidas en la oscuridad, y así, frágil, me quitaste todo y te alejaste. Encontré sola el camino, guiando mis manos por el borde de paredes extrañas. Pensé que te amaría por siempre, entre risas y lágrimas, como lo hacían mamá y papá. Tus palabras suenan a vacío. Las espinas se clavaban en mis manos cada vez que cerraba los puños para aferrarme a la vida. Recogí los momentos bonitos y dejé los malos, ellos no me servían para el nuevo horizonte hacia donde me dirijo. Pensé que te amaría por siempre, entre risas y lágrimas, como lo hacían mamá y papá.
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1 Corintios 13:6 … es no alegrarse de las injusticias, sino de la verdad. Dedicado al profesor José Ángel Zapata con mucho cariño.
Despojándome de mis temores Maté al viejo hombre y, cuando éste murió, empecé a vivir, surgió mi primer pensamiento de paz.
Fui valiente porque no dejé que otras personas mataran mis sueños. Decidí vivir.
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1 Corintios 13:7 Tener amor es sufrirlo todo, creerlo todo, esperarlo todo, soportarlo todo.
Ponme un nombre Tal vez te sorprendas al leer estas líneas, porque a veces no sabemos quién nos mira cuando no miramos, pero yo te observo cuidadosamente y con cautela, capturo tus más hermosas expresiones: sonrisas, miradas y hasta esa boca que se torna tiernamente, a que yo termine estas líneas en beso. Pero ya sé cómo son tus labios y por eso no me atrevo. Ruego a Dios que me haga olvidar ese beso que nunca debimos darnos, y ruego más aún porque no se vuelva cicatriz. Yo no tengo nombre, te dejo en libertad para que me lo coloques tú.
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1 Corintios 13:8 El amor jamás dejará de existir. Un día el don de profecía terminará, y ya no se hablará en lenguas, ni serán necesarios los conocimientos.
La razón por la que amo la literatura Porque es pura y buena, porque es inmaculada y perfecta, porque es libre y sincera, porque habla, escucha y canta, porque nunca duerme, en cambio, siempre está despierta [y alerta, porque siempre está al servicio de los demás, porque ha sido de muchos, pero se mantiene siempre [virgen, porque no tiene dueño, porque nunca muere, porque está entre nosotros, como la mejor amiga, porque siempre tiene algo que decirnos, porque vive, porque a pesar de los siglos nunca envejece, porque su belleza no tiene igual, porque es como un vaso con agua en una tarde soleada, porque es como una estrella inmensa en una noche oscura, porque es la lluvia que riega a la esperanza, la fe y el amor.
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1 Corintios 13:9 Porque los conocimientos y la profecía son cosas imperfectas…
Los estragos de la lluvia en Mi pueblo Tu boca parece un manantial de sublimes fragancias, el agua recorre mi cuerpo como cascada a la piedra, tu mirada ya próxima a extinguirse me pide una última [vez, me encanta como haces besos al unir tu labio superior [irresistible al inferior, ¿qué hay en medio de ese arte? Mi padre me llama desde el jardín, le preocupa los tres días que llevo encerrada sin soltar el poemario, se está gastando el lápiz y aún no me confieso, tu amor ya no toca la puerta ni lanza piedras a la ventana, las palabras se desnudan en mi boca. ¡Cómo quisiera salvar esa lágrima precipitada con un sabor distinto! Gotita salada de dolor, ¿Llorarás por mí? Mas tu presencia se está perpetuando como una marca en mi brazo, en tu gran majestad de señor. Me siento viva cada vez que escucho tu voz, he puestos mis pies descalzos entre cortinas de humo, y en el campo no escucho otro nombre más que el tuyo cerca del arroyo, se ha eternizado mi espera de la mañana bajo el sol, y ahora viene la noche. 16
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La lluvia ha hecho de las suyas entre la tierra fértil, sacando de raíz la mata de ciruelas que esperaba seguir dando frutos con vida tranquila en el patio de la casa. Estoy firmemente comprometida con mi vocación de amarte, el presente es el gran protagonista de este tiempo tan mío, tan tuyo. Me quedé mirándote y sólo quería suprimir hambre, sueño y sed, para no perderme ni un instante, de tu presencia, pero mi cuerpo es de carne mientras lo transformo en aire.
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1 Corintios 13:10 que llegarán a su fin cuando venga lo que es perfecto.
Bella Durmiente He estado dormida mucho tiempo, actuando como robot en medio de la corriente del río. Mi cuerpo perdió la sensibilidad y mi alma golpea en lo profundo buscando la salida, ya ni el pinchazo que me diste en el dedo me duele, sólo veo la gota de sangre deslizarse, y observo perpleja su belleza extraña. Mientras dormía te fuiste, ¡qué descuido tuve! Tuviste que seguir sin mí. . Las hojas del tiempo pasaron y sólo tengo tu aroma, lo cálido del beso, lo sublime de tu mirada de azúcar, el sonido compactamente armonioso y conjugado de tu voz. Esperaré, príncipe azul, rojo, o verde, ¡Oh, mi esperanza! Despiértame, como a la Bella Durmiente
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1 Corintios 13:11 Cuando yo era niño, hablaba, pensaba y razonaba como un niño; pero al hacerme hombre, dejé atrás lo que era propio de un niño.
Cuerpos de tierra Las palabras se quedaron sin voz y las nubes sin cielo, de repente las hojas cayeron al igual que el color de tus ojos, vidrio roto bajo fotos conocidas, en esta claridad irradiada por cuerpos en reposo. Sólo un alma con camino, en este mar inquietante de pasiones y olvido, siempre necesitamos algo más, recuerdos agridulces frente a la chimenea.
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1 Corintios 13:12 Ahora vemos de manera indirecta, como en un espejo, y borrosamente; pero un día veremos cara a cara. Mi conocimiento es ahora imperfecto, pero un día conoceré a Dios como él me ha conocido siempre a mí.
Jesucristo Es hermoso mirarte sabiendo que encontraré un suspiro, tu amor se ha convertido en el regazo donde asiento mis cargas, saber que me amas es la respuesta más dulce que he conocido, tus pensamientos, para mí, son de bien, y aunque las pruebas vienen en las noches más oscuras, tu mano nunca ha dejado de sujetarme. Tu misericordia no tiene límites, y con desvelo cuidas a tus ovejas. ¡Te amo y confío en ti! Sé, por fe, que pronto nos veremos, cara a cara, mi gozo será alabarte todos los día de mi vida, con bondad conquistaste mi corazón, el cual se rejuvenece en tu infinita piedad. Alégrate hermano, alza tu rostro al Rey de Reyes, vamos camino a la casa de mi padre, ¡Disfrutemos el viaje llamado vida!
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1 Corintios 13:13 Tres cosas hay que son permanentes: la fe, la esperanza y el amor; pero la más importante de las tres es el amor.
Había una vez Esta es la historia de una muchacha que aprendió a mirar con ojos prestados, porque los de ella carecían de luz, y se diluía en el tiempo su mirada alegre, esperando el día en que volviera a creer. Usted con su mirada infinita ha pintado estrellas en los cristales de mis ojos, usted, nunca miente, nunca esconde la verdad de sus labios, y me he vuelto sólo un aprendiz de tus destellos y de la sonrisa que se dibuja en tu rostro. Usted gran señor, con su presencia imponente, tiene más elegancia en un sólo dedo, que mil hombres en todas sus manos. Usted se ganó mi admiración.
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Más que palabras Aunque cambie de nombre, el beso seguirá siendo dulce, los árboles seguirán muriendo de pie y la pasión seguirá ardiendo los leños.
Aunque cambies de nombre, tu recuerdo seguirá atormentando mis noches, mi incapacidad de olvido trastornará mis días y los momentos festivos entristecerán mi mente. Manos entrelazadas entre carmesí, azabache puro y blanco inmaculado. Aunque cambies de nombre, siempre en mis versos encontrarás, más que palabras.
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La noche de mariposas Tú y yo tuvimos una noche llena de mariposas, una noche llena de historias y de risas, no dejo de pensar cómo te brillaban los ojos al verme, y recordar cómo salían mis lágrimas de niña, aquellas lágrimas silenciosas e intangibles que corrían alegres e inocentes por el borde de mi cara. No podía creer que estuviera pasando, no supimos nunca como era nuestra piel y seguimos sin saberlo. Sin espantar las mariposas nos quedamos en un silencio codificado, el amor no se toca con las manos y sin ellas te sentí por medio de risas, con mis historias de mujer grande que tanto te gustaron. Sólo una cosa me detenía y me sigue deteniendo: la lealtad. Mi amor, cuando te fuiste no te diste cuenta que muchas mariposa salieron detrás de ti, y al volar soltaron un polvo de melancolía porque, desde ese día, mi mente no ha dejado de traerte a mi vida. Es como un autosabotaje, no se suponía que pasaría, pero empecé a necesitarte. ¿Sabes? De vez en cuando, veo una de esas mariposas riéndose, como diciéndome: debiste detenerlo.
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Castellano
Cambia todo cuando te veo, Agua cristalina que me calma, me transforma, Sacas lo mejor de mí, Tienes en tus ojos alegres, en tu voz sincera, en los besos [que nunca nos dimos,
El fuego que me consume. Lo sé, estoy ciertamente enamorada de ti, Lo escucho todo el tiempo, de mi irracional deseo de
[verte,
Amor que resiste a extinguirse, Noticias de extraviadas golondrinas, Olvidadas en cajas de cartón con polvos de nostalgia.
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Reloj Si tan solo tuviera una oportunidad, sólo una oportunidad, haría volver la primavera, recogería los mangos, cosecharía las uvas. Si tuviera una oportunidad volvería a tocar tu puerta, hubiera guardado tu imagen entre lo ilimitado de mi dicha, hubiera recibido tus caricias sin protocolos ni formalidades, impediría el invierno, correría bajo la lluvia, con tus manos entrelazadas a las mías, ignoraría el reloj. Si tuviera una oportunidad, tan sólo una, volvería al parque, me sentaría en el mismo muro, a cantarte la misma canción.
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Sigue mi voz Sé que me ves como un día vio Adán a Eva, maravillado ante su sublime belleza. Escuché decirme entre susurros: ¡Oh! Sus ojos son como dos estrellas de colores oscuros, parecen dos perlas en medio del mar de mi [incertidumbre. Y quise hablarte pero no tenía voz, me había quedado atrapada en la distancia de tus manos de arena. Yo sólo te quiero a ti, y ahora vuelvo a mi realidad: no estás. Sólo fue un destello de ingenuidad que se topó en mi camino. No me obligues a ocultarme detrás de un seudónimo. ¿Qué harías tú, en mi lugar? ¿Debo lanzar los dados y esperar la suerte aunque no crea en ella? Sé que el tiempo que estuve sin conocerte, sólo fue tiempo perdido. Mi amor, sigue mi voz. Escucha mis pensamientos que para ti, dejaron de ser ajenos.
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¿A quién le escribes, Paloma? Yo corro descalza, con el cabello suelto, pero tú me dices: Paloma, te quiero suave y delicada. ¿Te acordarás en mí? ¿Tomarás un minuto de tu tiempo para dedicarme pensamientos? ¿Qué podría hacer para volar a tus brazos? Es lo que quiere mi corazón y lo que tu alma siente ¡Oh! Domador de mis lágrimas y dueño silente de mis sonrisas, dulce viento en mis alas de fantasía. He hecho un glacial con mis lágrimas de marfil, se me ha roto un ala por volar bajo cielos cubiertos de agua salada, pero mi corazón se derrite por volver a aquel lugar, y a ese preciso instante descubierto entre las puertas del cielo.
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El último poema Voy caminando en la arena y veo cómo se hunden mis pies. Jamás me atrevería a escribir fuera de los límites de tus retinas. Lo sabes, entonces ¿por qué preguntas? sabes que para ti es mi canción, y mi corazón te busca. ¡Pero renunciar, es mi mayor prueba de amor!
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Índice Poemas
Ilustrado por:
Un hermano
Celso García
Sentada bajo el árbol
Fernando Escalona
Te creo
Wilvis Beaumont
La tierra llora
Rodolfo Rico
El adiós
Luis Maneiro
Despojándome de mis temores
Krishna Lejaraso
Ponme un nombre
Naomi Valdez
La razón por la que amo la literatura
Laura Vásquez
Los estragos de la lluvia en Mi pueblo
Karina Barreto
Bella Durmiente
Fabiola Martínez
Cuerpos de tierra
Luis Maneiro
Jesucristo
Evelyn Espinoza
Había una vez
Gladys Millán
La noche de mariposas
Omaira Suarez y
Ricardo Milones Más que palabras
María Baldivian
Castellano
Krishna Lejaraso
Reloj
Andrea Gomez
Sigue mi voz
Sakura Fujikawa
¿A quien le escribes, Paloma?
Sakura Fujikawa
El ultimo poema
Luis Maneiro
Ă?ndice
Un hermano
07
Sentada bajo el árbol
Te creo
08
10
La tierra llora El adiós
11 12
Despojándome de mis temores Ponme un nombre
13
14
La razón por la que amo la literatura Los estragos de la lluvia en Mi pueblo
Bella Durmiente
18
Cuerpos de tierra Jesucristo
19
20
Había una vez
22
Más que palabras
23
La noche de mariposas Castellano
Reloj
24
26
27
Sigue mi voz
28
¿A quien le escribes, Paloma?
El último poema
30
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Este libro se termin贸 de imprimir en el mes de noviembre de 2013, en los talleres de Editorial Giraluna, R.L. Caracas, Venezuela. Son 100 ejemplares. Impreso en papel bond de 75 gr.