Punto de Encuentro by Ricardo Vasquez

Punto de encuentro Un poemario colectivo ESC0210

Cumbayรก 2017

ESC0210. Escritura, escala, escándalo, escrutar, escrúpulo, escaño, Esculapio, esculcar, escudriñar, escepticismo, escomplicado. Esta obra está bajo Reconocimiento 3.0 Ecuador Licencia Creative Commons. Para ver una copia de esta licencia, visita http://creativecommons. org/licenses/by/3.0/ec/ o envía una carta Creative Commons, PO Box 1866, Mountain View, CA 94042, USA. Punto de encuentro: un poemario colectivo de ESC0210 Quito: La Vainita, 2017.

AGRADICATORIAS Yasuní Chiriboga: A todos los seres de luz que se cruzan en mi camino, en especial a los dos que me entregaron el sendero. Cristina: Quiero agradecer a las calamidades de la vida por hacer de la poesía algo posible de sentir. Para mi mamá, porque me dio la vida, y para mi gato, Berlioz, porque me la salvó. Irene: A mi abuela Laura Molina de quien escuché las primeras poesías y a quien admiro enormemente por su talento y fortaleza, como grandiosa mujer y bello ser humano. A mi padre Rodrigo que está para ayudarme en todo y a mi hermana y compañera Marcela. A mis increíbles amigas Eloísa y Emilia que me dan ánimo para escribir. Y a mi madre Verónica que está siempre presente. Israel: Gracias a las mujeres que están en mi vida, a mi madre, mi hermana, mi sobrina y a RenKa. A quienes dedico mi trabajo.

Luis Enrique: Para Sebastián Moreano, que gustaba de mis poemas y para toda la familia. Michelle: Quiero agradecer a la sucesión de locuras sublimes que forman parte de mi día a día. Va para mi familia, con destino a una gitana y en dirección a un bohemio que lea estos chalados versos. Ariela (Arigru): A mi hermosa familia. A la vida, a la alegría, a las penas que me enseñan y a las personas que me llenan.

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Lucía: A Ecuador, con amor. Gracias por todo.

Alvaro Leal: A Dios, a mi familia y a mi gran compañera de vida. Juan Sebastián Ruales: Agradico a mi abuela, la que me brindó una sabiduría inmensurable.

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Karla: A mi madre, la musa de mi existencia y a mi hermana, la flor que se abre en la adversidad. María Fernanda: A todas las experiencias de esta vida, caóticas y bellas, que nos llenan de poder para escribir poesía. También a todas las personas que me inspiran cada día, a mi madre, a mi padre y a mi mejor amiga, gracias por su amor eterno. Nicolás: A la leve existencia. Ryan: Doy gracias a todos los que me han dado esta oportunidad de viajar fuera de mi zona de confort emocional y física; a toda mi familia, que me ha apoyado, a una distancia de 3000 millas, y a mis amigos cercanos y lejanos, a quienes también considero mi familia. Esteban: Hoy te inmortalizo de manera temprana entre líneas, tinta y papel, para que la ausencia futura sea menor y así secuencialmente, cada vez que pase las hojas de este libro. Poemas a mi compañero de ruta, Glück.

INTRODUCCIÓN

No es necesario ensayar aquí más que el perfil de la oposición que la educación universitaria contemporánea levanta contra las llamadas Artes Liberales: la apuesta permanente a una formación técnica, la adquisición veloz de conocimiento instrumental, la descalificación del pasado, de las letras y del pensamiento crítico a nombre de un futuro tecnocrático, deliberado y positivo. Si a esto sumamos el clima político triunfalista de la última década en el Ecuador, obcecado en la producción, por partes iguales, de tecnología y obediencia, entendemos fácilmente que, desde esos parámetros, no existe futuro para la poesía. Y sin embargo, la poesía se sigue produciendo. Tanto en los muros de nuestras ciudades, como en nuevos circuitos digitales, tanto en la forma de productos orales urbanos como en publicaciones independientes y fanzines, tanto en la pedagogía de la lectoescritura como —en el caso nuestro— en las aulas y espacios de la universidad. Tal vez exista hoy en día un mayor apetito por la poesía y una mayor producción poética que en cualquier otro momento de nuestra historia, aunque aquella percepción dependa en gran medida de un análisis distinto y lateral de nuestra realidad compartida. Sea cual fuere el caso, ESC0210 plantea la necesidad de un laboratorio de las humanidades. De la mano de Gregory Ulmer1, sostenemos que la instrucción en humanidades hoy en día (en que ha desaparecido, o está en vías de hacerlo: el epistolario, la misiva y otras formas cívicas/letradas) demanda que los estudiantes experimenten, en carne propia, el temblor y la audacia de la creación y de la construcción de realidades. Las humanidades se han convertido, en este momento de masificación educativa y de pérdida 1 Ulmer, Gregory. Internet Invention: From Literacy to Electracy. New York: Longman, 2003.

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El presente texto consiste de la elaboración letrada de miembros del colectivo de poesía ESC0210, un curso ofrecido por el departamento de literatura de la USFQ desde el año 2005. Tanto el curso como la publicación constituyen respuestas al desafío de ofrecer instrucción en las humanidades en el siglo XXI.

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de iniciativas didácticas distintas, en escenarios para registrar la genialidad del otro. Queremos entonces, complementar ese momento pedagógico con la experiencia individual creativa, con la elaboración poética. Creemos que este ejercicio restituye a la poesía su condición pública, comunicativa, y aspiramos de esta manera a combatir la consignación de la voz poética al ámbito exclusivamente privado, donde languidece. Creemos que la elaboración poética constituye una manera legítima de conocimiento de la realidad y creemos también en el trayecto enriquecedor de un conocimiento que pasa necesariamente, por el descubrimiento de la voz individual. El siguiente paso, y tal vez el más complejo, consiste en levantar la voz, en llevar lo personal hacia el desafío de lo social, en construir y participar en una esfera pública. Este semestre (Enero-mayo, 2017) hemos optado por elaborar cuatro formas distintas de poesía. La metodología a la que suscribimos consiste en explorar géneros poéticos existentes mediante lecturas y discusiones y a partir de entonces construir un “género” poético nuevo, junto con poemas que confirman e ilustran su existencia. La experiencia ha sido mixta: nuestros primeros esfuerzos se encaminaron hacia la elaboración de textos “épicos”, la pregunta fue si sería posible, hoy en día, producir un discurso de la gravedad y altura de la poesía épica de antaño. Examinamos los recursos retóricos de los grandes poemas épicos: (los textos homéricos, distintas cosmogonías, los fragmentos de Gilgamesh y otros) la apóstrofe, los epítetos, la invocación, e intentamos dar voz, en el mundo contemporáneo a esas figuras, tonos y modos de interpelación. La idea fundamental, en nuestra estimación consistió en introducir un elemento de escala en la meditación del yo poético sobre el universo; es decir, la capacidad de pensar la historia humana a largo plazo, desatendiendo las exigencias inmediatas del presente. Si lo nuestro ha sido un fracaso épico es tarea del lector determinar, el ejercicio fue sin duda enriquecedor y expuso a los miembros del colectivo a un orden de pensamiento distinto. Los textos de este segmento así (que optamos por llamar Ecoemas), ofrecen una muestra del intento de ampliar el marco de referencia

ante los hechos humanos; al mismo tiempo, la idea fue abrir a las poetas a la tarea de reclutar aliados para una tarea tan vasta, a descubrir el lugar de las musas en la historia y en la historia de la poesía.

Los dos últimos géneros poéticos puestos al alcance del lector son fácilmente reconocibles, aunque de gran dificultad en la elaboración. Se trata de las dos categorías de mayor tráfico en la historia de la poesía: textos de amor y textos de muerte. Hemos denominado Coronarias a los primeros y Elegías a los segundos con el objetivo de subvertir y confirmar el enorme peso de estos asuntos en nuestras vidas y a la vez de abrir un claro para poder escribir sobre ellos, sin indulgencia ni solemnidad debidas. A esta heterogénea mezcla de estilos discursivos incluimos dos Poemas Colectivos, elaborados a pulso general, durante horas de clase. El poemario es una bitácora colectiva de creación poética, una exploración de formas tradicionales, trabajando junto con una nueva forma intencionalmente indefinible. La exploración dentro del territorio conocido implica sin embargo, una desintegración de la forma misma, que quizá responde al momento y las circunstancias que vivimos. Se logra en ciertos textos transportar los estados previos a la escritura, el extrañamiento o la energía ajena al lenguaje, que en este caso para traducirse pacta con la lengua hablada, haciéndola una puerta de acceso conveniente y cómoda, no solo para el impulso entrañable del poeta, sino para el lector. En otros 2 Foucault, Michel. The Order of Things. New York: Vintage Books, 1971.

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Un segundo proyecto genérico buscó elaborar textos a partir de lo que el historiador francés Michel Foucault designó heterotopias2, lugares intermedios, espacios ambiguos en donde la identidad fluye y donde el poder se emite de manera interrumpida. Espacios como los vestíbulos, los corredores, los espejos, donde se siente la condición intermedia del ser; pero también estados de conciencia como la duermevela, la vergüenza, el estornudo, el momento del despertar o de hablar por teléfono, cuando la seguridad epistemológica se dispersa. De manera que presentamos más adelante, textos heterotópicos como parte de nuestra cosecha poética.

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casos se observa una exploración de la materialidad del lenguaje, y su forma de corresponder con las intenciones y dimensiones que cada poema propone, en su afán de des-familiarizar, redescubrir o reflejar la realidad y sus posibilidades. En los poemas épicos es palpable la problematización de la memoria histórica, la inconformidad con los recuerdos heredados, pero sobre todo un redescubrimiento del héroe como figura, que va de la mano con la legitimación de la perspectiva y que en un poema o dos son uno mismo. Sucede algo similar en los poemas elegíacos, no marginan los pequeños dolores y validan la pérdida en sus diferentes dimensiones. Los poemas de amor, son quizás el reto mayor de la propuesta, hay voces líricas que ceden a un sitio ya mancillado e intentan desde ahí, afirmar una identidad. Otros parten de la indefinición, del no saber que implica la intuición del amor, estos poemas funcionan como un mal flujo de conciencia, restringido y contradictorio, que responde a la experiencia particular del amor que el yo lírico presenta. La heteropia es pensada y reflejada de maneras diversas en los textos, se encuentra en ellos una indagación de la presencia que explora la materialidad así como las intenciones, y en su experiencia simultánea parece gobernar la indeterminación, la incomodidad, y en determinados casos, el placer. *** Este primer medio año del 2017 vino acompañado de un tumulto de presiones sobre nuestras conciencias: la lluvia inclemente, el proceso electoral, las tensiones internacionales, entre ellas la de una amenaza nuclear, un nuevo régimen académico, la producción de un recital el 21 de marzo, el día mundial de la poesía y ahora, la publicación de este tomo junto con su lanzamiento en la USFQ durante la última semana del semestre. El resultado lo tienen frente a ustedes: poesía a pesar de, poesía gracias a. . .

¿Punto de encuentro de qué/quiénes?

Queremos agradecer a todas las voluntades que colaboraron en la producción de este documento: Edwin Fuentes, Ricardo Vásquez y Andrés Anrrango en la oficina de diseño de la universidad, la amabilidad y buena disposición de Planta Física en el armado de nuestros recitales, la oficina de investigación y la oficina Xerox en la impresión de los libros. Casi doce años desde el inicio de la publicación de esta pequeña serie de poesía universitaria nos atrevemos a pensar en la frágil continuidad de este proyecto y a considerar la posibilidad de su final. Hasta que llegue ese momento preferimos celebrar una nueva generación de voces públicas. Ave, Alvaro Alemán Salenka Chinchín Quito, primero de mayo, 2017.

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En la cadena volcánica de América, los temblores constituyen estrofas del desastre, un anuncio subterráneo de placas móviles, deslizamientos y reacomodos invisibles. Sus consecuencias incluyen la elaboración de arcanos “planes de evacuación” para las poblaciones humanas que sufren movimientos de tierra inesperados. Un “punto de encuentro”, es así, ostensiblemente, un sitio de reunión para los precavidos, una estrategia para desafiar la desorientación inevitable que produce un temblor u otro tipo de desastre, un oasis familiar, un lugar de acumulación de esperanza. Si concebimos el contexto histórico-social contemporáneo como fuerza telúrica, como alud movilizado en contra del impulso humanista, entonces nuestra elección de título puede resultar menos arbitraria. Un segundo elemento sería la condición de escritura que no geográfica o tópica, del encuentro. En este segundo sentido, toda congregación humana es puntual y a la vez, puntuada; es decir todo encuentro es, al mismo tiempo, deliberado y contingente. Nos reunimos en torno a un pretexto (la poesía) pero a la vez respondemos a la manera en que nuestra convocatoria nos constituye. De otra manera: la poesía ocurre por medio de una puntuación determinada, como una manera de distribuir y administrar la energía utópica limitada que disponemos o que dispone de nosotros.

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Ecoemas ECOEMA.- Poema Épico.- narración lírica constituida de los ecos que escuchamos y reprimimos, memoria colectiva guardada en el hipocampo que narra sucesos legendarios; forma histórica que narra la grandeza, lo trascendental; batallas memorables de seres increíbles que a la final somos nosotros mismos, héroes repintados con colores vívidos, musas y más musas, fuentes para la construcción de heroísmos, invocación a la piedad, batalla consagrada en la parótida, ayudeveacontar, hazaña que se sirve caliente.

Cosmogonía Yasuní, Diosa de los dioses, viento eterno. Principio del Todo, soplo divino. Dadora de la vida y del espíritu que late en cada átomo. Pureza verde, que has separado la nada del todo, que hiciste del universo un gran tablero de ajedrez, que esperas el regreso de tus hijos a tu puro y trasparente cuerpo y a tu alma diáfana. Las aguas de tu océano primero, que en la impecable y limpia nada aguardan por los mortales cristalizados. Forma diste a las esferas que giran, mueren y nacen en el mágico polvo estelar del tiempo.

Con tu luz, Lucía estalló en el cosmos como bella poesía, bailando va explotando amarillo, dando nombre a las estrellas y pensamiento a los hombres. De tu entrega, la espada de fuego defensora el universo, creadora del sentir de la vida, encendió a los hombres por una puñalada en el pecho. Ahora son capaces de crear lágrimas para calmar el ardor de la hoguera y la euforia que sale de él. Matemáticas perfectas enredadas en la naturaleza, laberinto estético de orden y simetría, venerado viento profundo diste a luz a la magia, la excepción a las reglas. José el Brujo que de un hombre hace un gigante y de un caracol, en llamas un dragón. Por tu planeación perfecta, por tu proyecto para la existencia, en búsqueda de la paz, nace Irene la Ajedrecista. La estratega de la lucha y la guerra, que es la vida de los hombres y los dioses.

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De una chispa, a Ryan el trueno, dios de la energía, hiciste nacer. Para que hiciera chocar las partículas con brutalidad y se creasen corrientes y llamaradas incalculables que sigan dando vida y transformación a tu creación.

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Por ti la ligera risa trasformadora viaja como ecos en busca de quien continúe con tan sublime vibración. Agustín, ritmo y felicidad. Hasta el caos, de la neutralidad, pariste. Nefasto silencio y quietud. Espejo retroverso, te copia como opuesto. Nicolás, juez eterno, padre del caos, destinado a padecer sin gesto en la imparcialidad. El perfecto asesino, con mil ojos, acechando con su puñal. Arduo afán en la espera, las vidas de este lugar se lleva.

El diablo descansando en la negrura, al decir la verdad, en profunda oscuridad grita a las alturas. La más delicada estabilidad, el eje que es la libertad. Esencia de la estructura, justicia e individualidad. Destellos en el espíritu, Israel, hace vibrar la fosforescencia del añejo camino, hacia el mar divino. Nace la duda, Cristina, pelea entre mente y pecho, fortuna es quien guía juegos estrechos. Mujer valiente, acero, carne y oro ardiente. Estabilidad monumental, sosteniendo el mundo. Recuerdo de pasado y futuro perpetuo. Locura, sin la cual imposible el baile de las melodías saladas. Servidor confundió, agitado olvido, milagros perdidos, mediador de dioses. Misionero astuto, sabio de pies descalzos y alas de largo vuelo.

Metamorfosis de imparable flujo de evolución, al espejo diferente cara muestra en el teatro, máscaras y fluctuación. Bosques y selvas, ninfa de belleza y secretos en la maleza. Hay quien ama el odio entre los otros, que aborrece a los hombres y ríe de sus tormentas. Fuerte leona, hija de la realeza defiende al débil y al que carece de destreza. Súper hombre de fuerza, libertad y conciencia espolvorea su consejo al oído de la madre naturaleza. A todos los creaste y en tu forma sin forma, dialogaste con ellos por la creación de los hombres. Cristina la descreída y Estefanía la Misántropa se opusieron. ¿Qué razón había para que ocupasen un lugar en el cosmos? estos seres vanos y superficiales, tan ciegos y necios como el polvo.

Pero sus fuerzas no hicieron posible retraer tu naturaleza creadora. Jugaste primero, realizaste la primera movida y a ti se unieron otros tantos que en tales seres si creyeron. Soplaste alma profunda, tu amor hizo verde el pasto y azules los océanos, del tercer planeta de una estrella única. Grandes cumbres formaste, nieves blancas, desiertos y aire. Animales, mujeres, hombres, alimentándose, fusionándose con tu exhalación. Gabriel les dio un corazón que como herida duele y arde hasta que llegada la muerte por el perfecto asesino, cesa en calma.

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Oportunidad les diste de hablar como creyesen, de estar en contra.

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Lucía les dio el lenguaje, el fuego, la estructuración del pensamiento. Infundiste la libertad con la autonomía en el esqueleto anarquista de todos ellos. Israel, impuso en sus mentes el recuerdo de un camino hacia ti. Estefanía, la primera reina, se ofreció para guiarlos.

Enrique ofrendo sostener su piso, aunque a veces la tierra tiemble, se destruyan y creen ciudades por tu principio de cambio y de vida. Katherine que fluye como el rio de Heráclito siempre distinto, siempre otro. Y un dios de tal bondad, Alvaro el misionero, que decidió encarnar en la materia para servir a los hombres como lo hace Juan Sebastián el mesero. Ariela la Sirena, escogió ser mitad mujer pitad pez. Diosa de la música, protege los mares del mundo. Michelle el diablo visita a los hombres en su oscuridad murmullando verdades, para las que no están listos, a las que temen y de las que huyen. María Fernanda, reina en los bosques, es la ninfa que se esconde tras los árboles y protege tu verde fresco y a los animales compañeros de los hombres.

Empezó la era de los hombres, la especie aun es joven. De ellos, jugadas y variables infinitas, nunca antes pensadas. Van haciendo con sus vidas una bella y artística partida de ajedrez. Luchando la guerra que fueron destinados a pelear, sin armas, sin lumbre, nacen y mueren abandonando su cuerpo en el campo de batalla, a cuadros blancos y negros, púrpuras y azules ceniza, turquesas y multicromáticos.

Irene Peralvo

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Y de aquellos seres ingenuos y defectuosos, como piecitas de ajedrez despostilladas, nació Juan Sebastián el Consciente, que, por esfuerzo y entrega, por todas las cualidades de los hombres, llegó hasta la madre suprema.

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Oh, ¡heliocéntrico héroe con estrellas en las pestañas! Galilei renacentista mensajero sideral, en su otoño milagroso y telescópico, inicia su viaje al mundo supralunar, al blandir su arma de espejuelos enfrentados, apunta al firmamento y entonces su globo observa, a las hijas de Júpiter, Ío, Europa, Ganimedes y Calisto, que cantan sobre el perentorio Santo Oficio, empero sus valerosos oídos ignoraron advertencias, y divisó a la oronda de nácar, elegante y hermosa que le obsequió un ilusionante lunar. Inspirado por la sublime dama de alba belleza, que algunos llaman Selene, de basálticos mares y de Copérnicos astroblemas, Oh, controladora de mareas, que salta con las liebres, portadora de agua, con sus cuernos de vaca, La Diosa Madre, Reina del Cielo, resplandecida por los esplendentes cuerpos celestes, se adentra en el cósmico vals, y con ella baila al son del himno del enano blanco, Sirio, lobo celestial, que nada con Lélape, Mera y el perro de Orión. En los ojos de Galilei, nace el descubrimiento, y dado el orto helíaco de Sirio, que brilla en variadas gamas, y cuyos halos de luz profundizan el firmamento, custodia el camino de las almas con Antares, El guardián, el corazón de escorpión, Supergigante rojo, estallante supernova, de un zarpazo provoca la curva del espacio-tiempo, Sus negras aguas,

Así es como en la mirada de Galilei se encuentran, posados sobre la perpetua manta negra, los interminables dioses de fuego estelar, su sabiduría llena su esponja y lo amasan para el enfrentamiento contra las hojas, contra la cruz contra las voces que reclaman y gritan en nombre del Señor, “¡Hereje, blasfemo!” Oh, ¡heliocéntrico héroe con estrellas en las pestañas! Cristina Gross

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navegadas por el barco de Menelao, piloteadas por Canopus, el arrojador de montañas, Gigante luminoso, fusil de helio, enviado por Carina del navío Argos, a calmar las aguas enloquecidas por el cisne disfrazado, engendrador de Cástor, león nómada, mitad Dioscuro, protector de navegantes, no de astrónomos circulantes, que arde como fuego de San Telmo, junto con su gemelo Pólux, yugo del recinto, gigante naranja, guardián del archipiélago, unidos sobre los blancos corceles, galopan el cielo de la radiante Luna que danza con las sombras de los grandes brillantes con el hombre de lentes radiantes.

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Entre monos y gallinas Oh Wiracocha el de las varas tú que guardas las tierras— entre ellas el Cenepa— haz que sangre y raíces estén donde pertenecen. Hermosa Amazonas, protege a tus soldados de Ecuador y Perú que han arribado. Así, por grietas gradual recorre y graba al gran sol que grita y gruñe en la mañana, pero agrada a la vista, y que con pupilas gruesas observa y guarda. Cordillera del cóndor una frontera entre dos grandes, sin pertenecer a ninguno. Monos aúllan y gallinas cacarean los bosques se quiebran de sonidos y quebrados muestran su nobleza . Tiwinza y los Coangos, al otro lado el Soldado Pastor juntos jugaban y dialogaban. Hoy era diferente

ya no sillas, sino tanques de guerra ya no conversan, sino gritan ya no barajas y juegos sino rifles y granadas. Amazonas llora y brama Sus bosques hĂşmedos se oscurecen Y de estos, ellos escuchan que serĂan soldados de paz.

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Alvaro Leal

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Trimetilaminuria de Israfil en los ojos de Málik

Arenosos terrenos, áridos terrosos, plasman huellas que con quejido, jadeo y mortales soplidos, borran y pierden significancia en la nada asiática. Pensada plana, peso muerto deja reposar sobre la inmensidad infinita. Oh enormes bestias africanas, pieles curtidas, fieles guerreros en filas de Darío el persa, de quien Gaugamela reconoce valentía, más llora el horrendo fracaso. Imploro a animales divinos anclar tierra aún viva y fértil, exijo rescaten de súbita caída a reinos ardientes infernales. Oh criaturas trompudas y salvajes, resistid la abrumadora carga ajena. Batallas sangrientas fisuran territorios. Cadáveres infinitos empujan y quebrantan, vulneran y fracturan, a ya débiles bestias grises que caen como en tiempos del vil rey de Pella. Goteo sangriento de siglos da forma de globo a la nueva tierra. Sangre seca forma paredes que completan el fatal círculo. En Gaza irrumpe la guerra, arrastra, derrama y traga traumas tortuosos. Pueblo Cisjordano: penumbra con historia, Guerreros civiles, sanar heridas sangrientas, unir grietas, que sangran.

Vida o muerte, Israfil o Málik. Pueblo caído levantad armas al cielo, Málik ha traicionado a Israfil, arrebatándole su trompeta. Málik encerró en el infierno al gran Dios Al-lāh. Oh Yibril, ilumínate, enciéndete, revélate lanzando senderos de luz que liberen a mortales encadenados a la guerra. Suplico a Mika›il conducir caudal de bendiciones a tierras secas, de pinos, de calaveras y montañas de carroña para cuervos hambrientos. No hay trompeta en labios de Israfil, el Yaum al-Qiyāmah ha roto su ciclo. No habrá resurrección, ni juicio para las almas desgraciadas, ni kufiyya libre de felahin por los vientos.

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Palestina: arma carente de pólvora, arma sin gatillo, tierra asfixiada, morada y necrosada de muerte. Oh musa Al-lat trae sol: vida para el desangrado pueblo, acompáñate de Al-Uzza, tu hermana hija de Al-lāh. Oh Manat, antigua Manat Pido dar gloria divina, poder y devoción a los ángeles próximos. Oh Manat, antigua Manat destino de muerte, tiempo escaso, cambiad el rumbo de ángeles y arcángeles a buen y próspero puerto.

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Israfil sin cuerno, Irsafil perplejo ante la masacre, entierra su putrefacto pescado. Israfil sin cuerno ni pescado, se pudre y se entierra a sí mismo. Oh Dios sin nombre Palestina arde, Oh Dios sin oídos Palestina te llama. Se han ido… … ángeles, arcángeles y Al-lāh ha muerto. No hay Dios, jamás lo hubo. Málik abre el cerrojo del infierno y deja volar vivaz muerte por los cielos, alamas negras invaden Palestina, olor a pescado muerto, en la brisa palestina, Son los tiempos de los dioses sordos y los pueblos crédulos de divinidades en papel o detrás de un escritorio. Esteban López

La vereda que nos deja fríos Marcan las 4 de la tarde y el batallón de punks atrás mío, está desgastado por tanta pelea tanto chapa que nos pisa los talones, nos saca con sus escudos de la Santa calle Santa calle que nos da posada a veces en la noche la vereda que nos deja fríos como después de un concierto, vacíos El gobierno y la sucia corona creada entre comillas nos quita lo único que hemos tenido en la vida

Oh música, musa de nuestra guerra, ayúdanos a tener fuerza para pelear unas horas más unos días más para conseguir la libertad que se nos ha esfumado como el humo de las bombas lacrimógenas que nos lanzan siempre que marchamos Partimos a nuestras casas golpeados y heridos pero aún con las ganas de pelear por lo que merecemos. Un poco de paz y tolerancia que al dormir no encontramos.

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No hay espacio para tocar, para ser libres nos tachan de bandidos renegados, Ellos han sido los únicos que han robado la dulce riqueza que muchos no aprecian luz que todos los días suavemente se apaga

Juan Fernando Valencia

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Allá donde mi casta huye Recoge el Mar con un vaso oh Gran Cielo, dadme de beber, guíame sabio viento, hacia el borde de mi Patria, huir debo. Verás; tú, Titán arrodillado, desentiérrame un camino No me dejes caer Arena, Arena impía, te suplico no soltarme Rebosante Sol, oh gran esfera de gas giratoria, estrella ten piedad de mi piel. Luna, oh Gran Guía, alfarera de mi deseo, sedúceme un camino, enciéndeme con tu luz atrevida “Irme debo” dice Cienfuegos “Comprende”, le grita a la Tierra. Te suplico inminente sustancia abundante Allá donde mi casta huye, allá, arrástrame. Oh feroces Seres desdeñados. Juan Sebastián Ruales

Vida que estaba demás y me sobraba. Me miró, oh el gran y viejo señor de lápiz contemplé sus arrugas, su seño y fulgor, y lo miré de vuelta, en sus ojos hallé: las ganas de vivir, nacientes

Me sonrió tristemente, en su mirada quería atrapar mi vida vida que estaba demás y me sobraba. Pero al profundizar en sus ojos caídos, en sus canas de plata, en sus arrugas que marcaban caminos encontré sus muchas espadas envainadas, espadas que de héroe lo pintaban. María Fernanda Granda

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Pero veía en su piel, su cuerpo y su rostro que se le escapaba la vida poco a poco agua que desbrozaba entre sus dedos, Agua que se escapaba esa que una vez entre batallas, remarcó las mías,

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Un cuento antes de dormir Nace el día, el sol y el color A paso certero inunda el valor Y cruje la tierra al sentir el calor Bosteza la guerra, se tiempla el tambor El héroe divisa dormido al dragón Despierta la espada Se lanza a la carga Crujen costillas Y el héroe cae y cae Horrendos despojos de vísceras y tierra ¿Qué pasa? ¿Aún estás despierta? Nicolás Navarrete

Los ladrillos fundamentales La olla ha estado hirviendo, de tensión ahora, pertenecía a los maricones con el pelo emperejilado, y sus muñecas lánguidas. Entre mujeres de pelo corto y hombres de pelo largo una persona se elevó por encima de cualquier género Era tan tarde, que pronto se iba a ver el sol Bajaban la guardia, jaraneaban en la seguridad falsa “POLICE, WE’RE TAKING THE PLACE” Esposados, se los mandó a formar una línea contra la pared No quisieron seguir obedeciendo Unos se detuvieron, mientras otros les esperaban

Engañado por la policía, alguien gritó “¿por qué no hacen nada?” Con esto, las víctimas dejaron su perdida mirada Monedas volaban a través del aire para pagar al responsable de la captura Esposados escaparon

Ryan Calabrese

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fuera del Stonewall Inn

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Llegué al otro lado con ganas de secarme I am a dreamer Nací de la tierra de Tenochtitlán Creada por Quetzalcóatl, dios de los mexicas Producto de la Conquista Las sobras de lo que se robó Hernán Cortes el padre Y Malinche su madre y cómplice I am a dreamer Soy el encomendero español y criollo El misionero, soldado de la guerra justa Pero también soy Miguel Hidalgo Con el grito de Dolores quemando en mi pecho I am a dreamer Soy Santa Ana y Porfirio Díaz Líderes corruptos contra mi propia gente Soy Pancho Villa y Emiliano Zapata Bandida luchadora por tierra y libertad I am a dreamer Pero de pronto las fronteras se traslaparon y surgí del Río Grande del sudor del campesino llegué al otro lado con ganas de secarme

I am a dreamer no soy de aquí ni de allá “El suplicio de un papel me ha convertido en fugitivo No soy de aquí porque mi nombre no aparece en los archivos” Ni soy de allá porque me fui I am a dreamer Soy Harry S. Truman El que me convirtió en Bracero Soy Cesar Cháves y Dolores Huerta Durante la huelga, aun ¡Sí se puede!

I am a dreamer Mexican American, Chicana, Hispana, Latina Con mis propias manos construyo mi futuro Hecho con el esfuerzo de los que vinieron antes de mí Luchadora que jamás será vencida I am a dreamer Stephanie Camargo

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I am a dreamer Pero para los gringos, I’m a wetback, a beaner A lazy spic que les roba su trabajo Para el señor presidente a rapist a criminal, con su muro intenta intimidarme

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Besos Encadenados

Canta Oh Clío la historia de la Viuda Negra Cuyo dije lleva tres condenas. Un hombre en motocicleta le apuntó a la madrina Dos tiros en la cabeza acabaron con su vida en una carnicería de Medellín cayó el cuerpo de la viuda negra Engendro de Ana Lucia Restrepo Nace La madrina en Cartagena En un mundo sin fragancia Griselda, La reina de Magdalena, En Santa Marta en luna llena. Tan solo una niña, un hombre entre sus piernas se acuesta, su garganta sangra sus ojos queman Sus gritos transcienden espacio y tiempo pero Medellín hace mucho se ha quedado sordo Aquí , el aire cobra caro el respirar El olvido no la suelta en su espalda impregnado el recuerdo rastros dientes del hombre que le desgració la vida

De casa escapa a las calles de la ciudad En el amor encuentra esperada venganza Su primer esposo Carlos Trujillo la enseñó a matar Sueños grandes perseguía encontró la llave al paraíso su llegada fue fuego que incendió ciudades inundando Estados Unidos con toneladas de polvo blanco Por dejarles tocar el cielo, le pagaban millones Viva encarnación del ingenio inventando mil formas de evitar y quebrantar Patrona y maestra de Escobar La reina de la coca Mientras él robaba lápidas la viuda conquistaba América con sangre fría Punto de encuentro

Duerme en la cama de la venganza matando así a los hombres que amaba Con su regreso a Miami estalla la guerra de los 80 Ella, la reina vivió un amor a fuego cruzado en el filo de un amor que puede cortar Afuera de una discoteca se encontraron en una lluvia de balas. Karla Bayas

Punto de encuentro

Crónica de un inquisidor (Co-relato) Desentierro el tesoro palpo la vaina hago volar el polvo inhalo lo que origina Amputo un tallo Lo trituro, degollo sus frondas las torturo, las dejo sin honra Poros mojados dedos nerviosos con vista de cirujano tomo el papel sedoso Uno a uno caen los hijos una laguna se forma en mi boca ahogo la lengua en fluido por las ansias que provoca Encono materia en un camino glorioso y la contingencia de un cartón receloso De un lengüetazo sello el camino y con un solo brazo sujeto el pergamino Enciendo la lumbre papel a la brasa y por pura costumbre el humo me abraza Juan Sebastián Jaramillo

el antiguo tirano guarecido en Kuquine, encabeza una asonada militar y arremete de golpe con látigos de dictadura. Se siente la pena de muerte, se siente la falta de libertad, se siente el hambre. Se siente, se siente, en la bella Cuba. Baja de los cielos, Barbudo, emboinado a salvar a humildes y desamparados del fango de la disparidad y la penuria. ¡Oh! Glorioso Titán! Llénanos de tu luz, amor y vida. ¡Rescátanos! De los grilletes del cautiverio que nos sentencian a la guillotina. La sangrienta batalla se acerca y se desata. El cielo tiembla y la tierra brama ¡Oh Gladiador! Que se agite el emporio con tu comparecencia. Abigor, el duque de los infiernos, ataca. Un río de muerte se desata. Legendarios luchadores

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En los 50s

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liderados por nuestro guerrillero dan pelea sin receso por la liberación de su Patria. Combatientes quedaron a lo largo del camino a la victoria. Escasos hombres ensangrentados, aún se mantienen en pie. Todos luchan por la esperanza. Todos luchan junto al Che. Propinan la estocada final. El maligno no resiste a la embestida. Cae moribundo el cobarde, con su monstruo alado en una esquina. Algarabía entre los camaradas, marchando, riendo y soñando. Llevan la bandera añorando que Cuba alce la mirada. Yasuní Chiriboga

Es épico (dirty version) En la época en que nuestros antepasados vivían carentes de alimentos, no existían semillas o estacas para la siembra, por lo que se alimentaban de plantas silvestres, que iban desapareciendo. Cuando los hombres salían al trabajo o la caza, las mujeres seguían los cursos de los ríos para recoger hojas silvestres. Nunkui es la dueña y soberana de toda la vegetación llamada la diosa de la tierra, ya no ayudaba a su pueblo Shuar, no había tierra fértil, desde que los mismos Shuar mataron a su hija convirtiéndola en una árbol de chonta ahogándola en el upano. Luego nos visitaron gente blanca despojándonos del shuar-chicam, del amor a la tierra y la herencia y pasaron vergüenza de lo nuestro a las nuevas generaciones.

(Según pude entender, la historia de aquel personaje sentado en el piso se encontraba en la etapa de integración, Costa y Amazonía tenían la relación de la yuca y la brujería los primeros en llegar fueron los franciscanos y jesuitas hace 400 años estaban en busca de la canela y el dorado pero solo encontraron caucho. Varios siglos después llegaron los salesianos, con una nueva enseñanza) Los cubiertos de metal se marcharon pero los religiosos se mantuvieron nuestra historia negra se resumía en la búsqueda de riquezas y en nuestro nombre. Nos llamaron de muchas formas: salvajes, animales, xíbaros, jíbaros hasta que después de años y años nos quedamos como los Shuar. Los monjes llegaron, como animales sedientos a un río desde Riobamba, cruzando Méndez y Baeza aun recuerdo sus nombres:

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Todo comenzó con un joven que cosechaba plátanos; anochecía porque ya no veía el reflejo de su sombra, entonces con su saco lleno y la vía llena de hojas secas caminó a su casa; de pronto, en el horizonte, miró a lo que llamaría colonos. Hablaban un idioma extraño, luego les llevó con los mayores.

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Padre Mascoletti, Domingo Perego, Domingo Comín y Monticoni. armados de palabras relataron la historia de Jesús, su idioma y valores, nosotros crecimos con miedo, miedo al miedo, pavor a hablar nuestro idioma pánico hacia nuestros hijos, a estar equivocados, decididos a renegar lo nuestro. Los padres dijeron: su idioma es maldito, es del diablo, dejen de hablarlo, su baile incita al mal, dios es la verdad y sus hijos deben seguir su camino. Los ancianos asintieron y a los más pequeños nos enviaron con ellosCrecí con aquellos sacerdotes como muchos de mi generación, nos enseñaron a leer y escribir, a amar a dios y a ignorar nuestra cultura. Niños y niñas crecimos así, luego de décadas volvimos a nuestros hogares solo para ver envejecer a nuestros padres y verlos morir.Muchos tuvimos hijos, a quienes no enseñamos nada de lo nuestro aquellas nuevas generaciones a la vez tenían vergüenza de ser Shuar no hablaban el idioma y no sabían nada de la comida ni las costumbres. triste pero cierto.Sin embargo, la leyenda rosada de la Amazonía se escribió con dos personajes: Juan Shutka y Alfredo Germany, ellos nos palparon y nos sintieron Cuidar lo nuestro no es solo proteger lo que nos pertenece, sino es darle vida a lo que nos costó conseguir, nos dijeron.Ya era media noche y mi bus llegó, -gracias le dije, y le di un par de monedas por el tiempo entregado. En el bus recreaba lo que me contó aquel anciano, comprendí mi ignorancia, la impotencia de no haber podido hablar con mis abuelos en mi verdadero idioma… Vivir para contarlo como dijo García Márquez. Ahora cómo veré a mis hijos y mis nietos si solo era el producto del ambiente que viví y que vivieron mis antecesores. La verdad estaba allí, la culpa no era de nadie, ni de los salesianos ni de los ancianos quizá morir sabiéndolo es parte del cambio y las nuevas generaciones lo aprecien. Israel Antich

Es épico (clean version) Bendita avaricia que de la excursión nace con la malicia que vicia al acto de menosprecio, la naturaleza forjó al hombre de su hambre y de la sangre nació la justicia de su existencia.

Siglos pasaron, clérigos cambiaron la odisea de las misiones salesianas de Cuenca y Quito inició por Riobamba y Guacaleo, instaurándose en las tierras lejanas de Méndez, Macas y Sucúa. Israel Antich

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La selva tembló y sus hijos yacieron en la orfandad, ruin el ibérico arribó a América; Orellana regado de religiosos por la tierra de la canela fue resquebrajando territorios en busca de El dorado.

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Últimos veinte minutos

En la vida importan pocas cosas Importan, por ejemplo, los desayunos de domingo Esas batallas con el humo, desde la boca hacia la taza Con los panes de mano en mano, y la sonrisa de madre untada en la cocina Y en esta vida llena de tanto wifi y ruidos, Son pocas las cosas que importan Importan los callejones sin salida porque ahí comienzan los mundos Importa la soledad pasajera, los viajes en el tren equivocado las llaves perdidas, los errores ortográficos, las cartas de amor los coleccionistas, las trenzas y las flautas importa, sin más remedio tu voz tus sílabas sobre otras sílabas contrayendo puentes por las noches PUENTES DORADOS HACIA el reino de los sueños en los niños, los únicos que importan. Importan los segundos de felicidad antes de salir de la cama Importan las polillas que se cuelan en los ojos Las salamandras que habitan los zapatos Importa el café, las abuelas y las meriendas donde ambos se combinan Importa que en el alma habite música Importa el peso de la lluvia, la primera sílaba de la mañana Importan los holas a la distancia y los besos de despedida Importa la oscuridad al bañarse Y la luz de los tiempos fríos Importan las estaciones cuando están a punto de acabarse Y cambian de color Importan los soles acurrucados en tus mejillas Y todo tipo de dolor, hasta importa el “ya pasará” o el “no lo soporto” Importa la muerte, y sus hermanas La gorda, la soltera, la color ciruela, la que se envasa Importa el pan que se comparte, el que deja migas Y las migas, y el desorden y el caos que cubre nuestras sábanas

Luis Enrique Velasco

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Ay, qué importante que es un sorbo de caos de vez en cuando Cuánta falta nos hace Y es que muy pocas cosas importan en esta vida. Importa esta poesía, la letra torcida, la audiencia Importan las horas huecas, llenas de pájaros Importan las tortugas del patio, las pulgas del perro Las siestas, los gritos en público Importan los segundos en que uno se amarra el cordón Importa la sinceridad, las flores amarillas sembradas en los puntos de encuentro Ahí donde converge la vida en su estado salvaje con la muerte El estado de coma Importan los profesores que abandonan el aula con sus discípulos Y los llenan de prados de amapolas sobre las cabezas despeinadas Importan los que creen en la garantía del silencio Y los que saludan con la mirada Los que dicen todo con la mirada, que importantes son Importan los que no callan y los que no acuden a los entierros Importan los segundos en el baño, perfecto tiempo dorado E importa quedarse dormido siempre que uno guste Porque a nadie le debe importar que uno duerma Porque son pocas las cosas en esta vida las que importan Y si me llego a despertar de este estado de coma, Admitiré enérgicamente que también este estado importa Porque en este dolor nulo, en esta santa paciencia Uno se da cuenta que son pocas las cosas que importan y creo que lo que más importa es lograr vivir un rato antes del….piiiiiiiiiiiiiii

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Depredadores El ruido espeluznante deja huellas de sangre combate entre dioses y mortales mueren las oportunidades cada maĂąana los guerreros se desatan convirtiendo sus almas en carnadas la muerte en sombras se presenta no da tregua y lleva rehenes por docena se abren las puertas y se encuentra al sufrimiento atravesando a ciegas aterrados por su castigo viven adormecidos este monstruo llama a los otros saqueando pueblos y torturando individuos ÂĄOh Dios del dolor! los infectados ya no pueden contigo piedad a sus cuerpos sin destino. Michelle Custode

Tu historia es de blusero De vías de tren y basurales A ustedes y a los dioses olvidados de la primera tierra pido inspiración Para contar tu historia De niño con libros de Platón De armas de fuego Pero sobre todo armas palabras Enfrentándose a traficantes policías Como estrellas de mar Arrancados todos de nuestro origen y nosotros mismos Ladrón ingenuo de libros contra el discurso presidencial De todopoderoso y la Meca de Malcolm De la guerra y la paz del reverendo King Porque sus muertes fueron lágrimas de ira Para ti y los niños quemados en iglesias Para ti y los barcos donde nos vendemos unos a otros Sin ver que el mar más profundo es la mirada de otro humano No es simpleza si te invoco estrella errante y caótica Valiente felino negro La sin razón de tu caída al mar Rebela que todos somos libres o ninguno Quisiera encontrarte en nuestra de toda madre común tierra roja Quizás liberarnos de nuestra propia mente sea lo primero Poeta que medita en una celda

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A Huey P. Newton

Agustín Ramírez

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Génesis de Salgado Canto a la cámara que desafía la muerte Urgencia tuya de dejarlo todo El éxodo de cada polvareda de pasos lo sientes en la sangre Mientras miras tu propia impotencia Minero contra uniforme Foca contra arrogancia Fuego contra fuego Dibujas con tu luz tierras nunca antes pisadas Crece en tu alma regada por negativos rotos por furia Un bosque enorme y una humanidad más grande Guerra Te ha declarado la guerra uno que con belleza rompe la indiferencia Muerte Te desafía uno cuya apuesta son los otros La posibilidad de vivir en la vos de la vida Génesis en los otros rostros de los continentes Agustín Ramírez

Me encontré con los dioses cuando fingí ser extraterrestre ¡Glorioso noviembre sideral! Aquella dama del color de las nubes Luna resplandeciente a quien con sus cuernos de vaca le pido que me aliente y observo sus mitades inertes mientras el lobo celestial aúlla “¡Galilei! ¡Conoce a mis hermanos!” La Reina del Cielo interrumpe y aclara “¡Oh, preséntalos al mundo!” Tomo el óptico cilindro inventado lo encajo en mi órbita la manta negra se abre, se engrandece observo a la eclíptica y allí está el rival de Ares el corazón del escorpión ¡Oh, su rojo amenazante, grande Antares! ¡Bríndame tu fuerza! Y cambia mi trayectoria Escarbo en el bruno océano embarcado en el Argos partiendo asteroides y satélites me adentro en La Quilla, en Carina Surge de la plenitud Canopus ¡Oh, más luminoso que nuestro Sol! ¡Ilumina esta oscuridad en la que vivo! Canopus me la brinda y con su luz reubico la lente al noreste de Orión, me invitan los gemelos Cástor y Pólux nacidos del huevo ¡Valientes Gemini, del viaje de los Argonautas! ¡Que su coraje me acompañe! Finalizo mi viaje bendecido por los astros plasmo mis ojos, las verdades y nace el Mensajero de las Estrellas Sidereus nuncius Que me condena al encierro. Cristina Gross

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Sidereus nuncius

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Olas de esperanza De las tinieblas sale, Despedazado y convertido en un ser abstracto, se encuentra este objeto de rechazo masivo. Desplomado y bajo las cenizas, se esconde lo que consideraba su hogar. Lo que aún persiste de sus adorados, habita entre los mares negros, tinturados con la sangre de sus hermanos. En cada brazada adentrando el océano de los caídos, se encuentran piezas de las sonrisas que un día iluminaban. Esas expresiones encantadas que contemplaban un fantástico futuro, colmado de esperanzas e inundado de amor. Que fueron asesinados por ametralladoras. Estrellados por la palpitación sarcástica de ajenos. Enclaustrados bajo el atormentante y deslucido paisaje, que se construyó sobre los lamentos de esos que soñaban despiertos. Oh ser humano, que desdichas por tu sabiduría, que enciendes e intercalas de conexiones fantasiosas, a los que viven una utopía, que no conocen la tristeza, que sollozan de la alegría que proveen sus alrededores, De la vida imaginaria que ignora a los terceros. Viviendo del narcisismo que crea su comunidad y desprecia a los lejanos.

Adorado genio que crea innovaciones, mejorando la vida de los favorecidos por el destino. Otorga a la humanidad el ingenio para reconocer, Enséñales a abrir sus párpados para que sean capaces de visualizar a todos las personas como una comunidad. No permitas que se menosprecien entre sí. Enséñales que la deshumanización no es un opción.

Que el ingenio humano no mejore la vida de los afortunados, pero que modifique la vida de los que no tienen oportunidades. Que la lucha que hay en cada ola, les proporcione la ilusión de volver a construir la vida que un día soñaron poseer. Que como una hermandad comprendan que son iguales y solo así prosperarán. Arigru

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Muéstrales que hay sufrimiento en su misma tierra, Que hay gente fuera de su límite de percepción. Rasgados de sus hogares y arrancados de sus vidas. En busca de una planicie que los acepte con vida. Que reconstruyan sus planes, que sobrevivan en tierra firme.

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Soy un ĂĄrbol Give a seed water and sunlight and it will grow, It will grow tall And with time it will grow wide. Its arms will reach far and stretch until it can no more. Each year the wind will weather it And its armor of burgundy pumpkin leaves will fall. It will be cold and bear for some time But it will grow once more and regain its lush green armor. It will be beaten by the wind But loved by the sun. With long inhales and exhales It will endure and live It will protect and be home to those in need. It will be strong like metal and will withstand the cold night. It will be powerful and beautiful But seen as a threat It is unconquerable. Give a girl food and water and she will grow, She will grow up She will reach far and further The world will weather her But she does not back down With deep inhales and exhales She will endure and live She will protect She will be strong like metal and withstand the cold night She will be powerful and beautiful But seen as a threat She is unconquerable. LucĂa Di Bartolo

CORONARIAS.- sentimientos arteriales que no te dejan dormir o con los que sueñas, una forma bonita pero no necesariamente, momentos tristes o malos pero allí está el equilibrio, producto fabricado por el mismo capitalismo, adicción; una forma de hacernos pensar que necesitamos de alguien más para alcanzar el éxito o la felicidad misma, textos que irrigan: escupidos, te ano, bolsa mezclada y llena de emociones, las partes oscuras y claras de un monstruo, el martirio para otros, una inclinación de afecto que no deja de no existir, ni de no demostrar su existencia, candidez vestida, lo que se cree que significa, una mezcla de sentimientos y emociones que no tienen un significado universal.

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Coronarias

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De tigre pomposo y macarela de azabache Me miraron aquellos orbes, esferas de naranjilla, indagaron en mi alma, esos globos que desentrañan pupilas rasgadas, puertas negras del misterio devuelven en mí la vida, el rojo de mis labios, el rosa de mis mejillas, el brillo de mis ojos, y la sonrisa de mis días. Erguidas y atentas sus orejas, bailan a la cadencia de mi voz, como velas de un velero, a la par del viento veloz. Lo miro oír, oír lo miro, el corazón me empieza a latir, y el júbilo brota. Tostada y fresca su nariz, colorado y suave su morro, de los negros redondeles de su beso, antenas blancas, semilunares, de queso, me tramitan ondas de empatía, de intuición, de alegría, y recibo en mí, el “no te preocupes, ya estoy aquí.”

En su mirada y en su lomo arqueado, armonía es lo único que veo, en mi ser yo siento, que el océano en mi corazón se apaciguó, que el cielo en mi mente se despejó, y este niño con cola anillada es la vida anhelada Cristina Gross

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De rechonchas patas atigradas, se desliza sobre gomitas de chocolate, dejando atrás un dulce y esponjoso paso, que me invita a la paz, al deseo de un abrazo. en su hálito de salvaje africano, En su aura dorada, de tigre pomposo y macarela de azabache, la vida duele menos, y los días son amenos.

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Me encontré con almas de todo tipo Mi dedo traza tu cobertura de terciopelo donde el día se va y comienzan los sueños tus gomitas retozan por el pasillo qué ruidos tan fuertes para un pequeño tigrillo. Cuentos de criaturas que se parecen a ti solo están en libros que he leído enormes bestias de resonante gruñido. Caminé por la vida me encontré con almas de todo tipo con almas chicas con almas grandes quién diría que un alma tan peculiar, tan peluda como la tuya estaría hecha para la mía tan simple, tan menuda. El corazón de un tigre resulta tan pequeño. Me haces reír, me haces cantar, eres un pequeño rey, de noble andar gobiernas mi corazón con la ternura de un león. Cristina Gross

En las mañanas Caminando por las avenidas de la casa pensando nimiedades vienes a mi mente y me pregunto en qué barrio del hogar estarás correteando en qué cama de los cuartos estarás durmiendo y de pronto apareces Me acerco a acariciarte pero como una nube te disuelves. Continúo con mi viaje por las calles de la cocina y por el rabillo del ojo tu silueta me espía. Giro a tu encuentro pero has huido ya. Me siento a tomar un té y siento en mis pies los alfileres que tienes por dientes. Los ganchos que tienes por uñas pequeño arrabalero ¿Qué quieres de mí? A veces pienso que tienes un complot para cazarme pequeño subtigre me tratas como presa. Parezco cebra con tus aruños parezco coladora con tus mordidas y sin embargo, en las noches te acurrucas a mi lado me regalas besos y placeres y así te ganas mi corazón. Cada noche Cristina Gross

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Parezco cebra con tu aruños

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Niveles de Conciencia Éste es el sendero al Universo. Aquí no se camina se crean nuevas formas de movimiento. Aquí se esculpe de madera, de magia, de mar o de viento. Aquí no se pide, sólo se entregan: Besos, fresas, piernas o cerezas. Aquí se respira: Gratitud, paz, amor y respeto. Aquí no hay amor basado en penas Apegos, dependencias o cadenas Éste es el sendero al Universo. ¿Vienes?

Yasuní Chiriboga Carola Te escribo sin saber si eres diosa, mar o mujer. Quizás las tres, o quizá ninguna. Escucho tu orilla bañada en cantos de sirenas. Repleta de caracolas de nácar y conchas marinas. Profunda y mágica. Corona de flores y aroma de mar. Dime, ¿Cómo envuelves a cada criatura en tu vaivén? Te imploro, ¿Cómo tienes a mi hombre a tus pies? Te imagino humana: largos cabellos rizados acompañan tu cintura, y el sol en tu piel dorada con un par de ojos de perla calaíta. Bella Carola, dulce y temerosa astuta y sagrada. Déjame escribirte, déjame saber lo que guardas. Yasuní Chiriboga

Amor ciego Porque aunque no te veo, Me resbalo en el subibaja de tu mirada, Oigo el cosquilleo de tus labios lilas, Saboreo tu voz de sirena, Me suspendo en el aire de tu pelo, Porque aunque no te veo, puedo probar tus labios sinceros, tocar el perfume de tu esencia, saborear tu piel mostaza, oler tu sonrisa azul. Porque aunque no te veo, me desnudo en el beso del ascensor de mis recuerdos, me acuesto en el cuello de tu conciencia, me pierdo solo con imaginarte. salto al fondo de tu risa. Porque aunque no te veo, no sé lo que significa ver, porque contigo, no me hace falta. Arigru Espérame

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Búscame aunque no tengas energía Que con la esencia de mi ser te viviría Que tus esperanzas no se apaguen aunque se entristezca la luz del día. Que yo llegaré con mi azulado amor Destapando el dolor de tu botella vacía. Que las noches tengan color Y que hasta el negro te contagie alegría Que la violencia de mi ser te devuelva la alegría. Persiguiéndote toda la vida con pasión Persistiré hasta obtener tu corazón Que tu mirada no sea de nadie más que mía Te encontraré una noche de poesía Donde besándome con tu mirada Sentiré como ésta me poseería Y así te tenderé mi mano enamorada

Arigru

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Contrabostezo Encuentro rostros no vistos antes conocidos Explosiones de lecturas Me estresa este silencio de murmullo No es paz es ausencia Brota la primera canción Una bandada de pájaros se escabulle en el borde de la ciudad y el cielo Llamadas y viajes Casas se prenden fuego Saltan enloquecidos e inocentes Se clavan verdes felinos en hojarasca color nube Persigo el aroma de velocidad al aire Un espacio de dibujo borrado al perderse en el movimiento de las manos y voces Carente de sentido Atarse al alba Sonreímos sin motivo Agustín Ramírez

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Caminar al revés No te vayas de mi naranja fuego Cuéntame de este segundo sin memoria Busco en tu baile estrellas El vacío de una cascada Ponerse atrás del pensamiento Y lo contradictorio Y la duda Perder el tiempo pensando que lo pierdo Entonces crecer un árbol y un horizonte soleado Construido por mantras susurrados Aunque olvide que significan Me sienta salir de un ovni Sí La mitad de lo que digo no tiene sentido Lo digo para escuchar risas Acompañar melopeas improvisadas Tomar un reloj con tenazas y martillo Para ser un rayo de sol Agustín Ramírez

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Canciones de amor*

Con el tiempo En la oscuridad En el buzón de tu corazón Cuando el río suena Cuando lloras Azul Tantas veces Cada dos minutos Sin miedo a nada La trama y el desenlace Soledad en mi Nostalgias Prométeme Parte de mi Una distancia adecuada Qué bueno, qué bueno Deseo Si tú quisieras Si me sientes Porque De sobra lo sabes Te amo Nunca más Con Manos vacías No más lágrimas Solamente tú Un beso más Prometo Te amaré Solo tú Lucía De Bartolo *Este poema es totalmente construye de nombres de canciones de amor. https://itunes.apple.com/es/album/las-100-mejores-canciones-de-amor-delpop-espa%C3%B1ol/id809202021

Pero solo mira Te encuentro Y te sigo buscando ¿Qué me gusta? ¿Qué no me gusta?

Un suspiro, tomo y avanzo Tembloroso y dudando De verdad me gustará Pero solo mira ¡Cómo no! Alvaro Leal

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Entonces pasan Noches develadas A ojo abierto y mente muerta Decido,

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Andrómeda ¿Quién puede ver a la real Andrómeda? si todos están ciegos la plaza roja es un sitio frío, lleno de oráculos y vapores luces, bulevares y mendigos ahí la encontré entre grises inciensos Yo sabía que ella era un ser mágico, que se alimentaba de espejos de paladares llenos de poesía de canciones, mariposas de durazno La veía llegar hasta las bibliotecas con esos rizos de roble, esa boquita manchada de luna desde ahí la música, la pintura, el mar todo en sus manos como plastilina de colores todo mezclado en palabras que anidarán por siempre en la memoria y para conocerla, para respirar su tufo caliente de alegría yo debía ser más como ella, más a ella que cualquier otra y desde entonces cada día desde entonces poco a poco, swing a swing hasta los tentáculos hasta su corazón de gelatina,

¿Quién puede ver a la real Andrómeda? verla desnuda sobre la tarde, sin tapar su locura con las manos acompañando el Jazz que todos tenemos impregnado en el paso, entre los dedos, y creo que por ratos también me quiso ella me amó en secreto sin saberlo desconociendo que cada cosa que hacía era aprehendida por mis manías

¿Quién puede ver a la real Andrómeda? en ese estado de felicidad desfilaron los mejores años sobre esas noches se deslizaron los mejores cuentos hasta un vórtice que se lo tragó todo también se tragó a Andrómeda yo creo que era el destino de su especie de goma pero ella ya estaba en mi para siempre, sobre mis pupilas ahora rosadas o este café que ya nunca enfría y de ahí hasta que alguien me encuentre para vivir ...

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quererla fue poco yo pertenecía a esa Andrómeda de la plaza roja a esa constelación de mi cielo yo era quien más en su cuna de lunares en su piel de leche, ahí era yo

un poco Luis Enrique Velasco

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De amor y magia blanca

Corazón, te voy a contar una historia. Erase una vez, cabellos miel y canela. Dos ojos grandes, los mismos del color del café. Ella los miraba, y el cielo cada vez era más suyo. Él la acariciaba, le decía que era la más linda de este mundo. Se juntaron, se besaron Y se hicieron sólo uno. La última noche en su isla, despegaron en un instante del suelo. Sólo trozos de materia en la cama, fuego de colores en el cielo. Volaron tan alto cogidos de la mano. A media noche ellos llegaron, en Saturno los recibieron. Y ellos eran un misterio, no sé si magos, brujos o hechiceros. Y nadie me cree cuando lo cuento, nadie me cree que existieron. Yo los vi, ¡te lo juro! Con los ojos bien abiertos. Libres como el aliento, sublimes como la vida, tan seguros como la muerte, mágicos como la poesía. Y te digo la verdad, que yo los he visto! Se desprendieron del ego Y volaron, corazón, ellos volaron! Por donde los llevó el mar,

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por donde los llevó el viento. Y a él, lo escuché sin querer en esa última noche. Su canto era tan bello y en su jardín se reunieron ángeles y diablos, que se besaban por el cuello. Y ella, esa noche ahí estaba. Lo miraba fijamente, ella estaba enamorada. ¡Y la ví! Era una sirena de la Luna De esas que se convierten en mujer. Con una sonrisa de dulces frutas, Con dos ojos negros que me hacían enloquecer. La noche acabó y ellos ya bailaban un vals entre corales con perlas que adornaban. Se fueron juntos, en un barco de cristal Se fueron juntos, a su viaje espiritual. Y desde ese día no los volví a ver Y desde ese día tampoco los soñé. Y créeme mi vida, que esta historia es de verdad. Y cántala mi vida, Aunque corta sea tu edad. Yasuní Chiriboga

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Retrato de perspectiva Siento cruzar el espacio En tus dulces venas Todo el resto para mí es falso La música ahoga mis penas Cuando el recuerdo vuela Tus ojos son mi referente Para prender una vela La única luz dentro de mi mente No importa si soy cortante Ya me vale verga el mundo Me drogo y soy elefante El sueño aún no es tan profundo Vela que hablan tus ojos Tu piel es un mar para oír Tus ojos son los pozos En los que yo me quiero sumergir Tal vez sea un tarado Que solo sueña, que solo huye Cuando me paro, me siento parco La soledad ya no me destruye

Y aunque sea un sociópata Y aunque no haya cura a mi enfermedad Te prometo que hay luz en mi alma Yo nunca te dejaré de desear No solo por la frágil carne Que envuelve nuestra piel No espero verte adorarme Yo puedo serte fiel

No te tienes que entregar Podemos ser amigos Todo lo demás puede esperar Juan Fernando Valencia

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Estoy debajo de tus piernas Y aunque yo siempre te canto Tú siempre me dejas No importa, todo el tiempo

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Yo en el otro Esperando siempre, dialogando para dentro, reprimiendo verdades. Yo en el otro y por el otro. Ceder mientras río, reír obligado, cercenarse la lengua. Aparentar liebre cuando lobo, primavera cuando invierno, devoción cuando fastidio. Encierro perpetuo, flagelo purificador erróneo y arcaico. Yo en el otro y por el otro. Frágil felicidad, mal nombrada felicidad. Sacrificio hipócrita, hartazgo de caras y olores, más yo siempre en el otro. Vivir para el otro, renunciar al yo, que ya no soy para estar en el otro. Esteban López

mierchularecontrapijodelagrandisima…ta A ver, 1;2;3 NO; A ver, Sí; Solo vas y Pim Pim Pim Listo, NO, mierchularecontrapijodelagrandisima…ta ¿Se va? No; viene ¿Viene? ¿Por qué viene? Sí, Sí , Sí, No no no Me vio .me vio, rápido mira a otro lado, sí así. Me sigue viendo, mierda, se dio cuenta, ¿Y ahora? ¿Hola? ¿Qué es una vía de tren inacabada? ¿Qué es una cápsula en el espacio exterior? ¿Qué es una aceituna con huequito? ¿Qué es un pedazo de comida en el diente? ¿Qué es ese sitio del sillón donde se pierde el control remoto? ¿Qué es esa cosa desagradable con la que nos terminamos encariñando? Juan Sebastián Ruales

Así puro, negro y solo Sublimes son tus conceptos, Más tus actos inalcanzables, El paladar se me entristeció al no encontrar tan anhelado néctar, ¿Cómo puede ser así? ¿Si yo esperaba miel de abeja? no existe tu néctar, solo queda mi existencia pudiendo ser amarga como el café, Y me di cuenta que no he anhelado sabor más fuerte, así puro, negro y solo. María Fernanda Granda Ella no es Ella

Por más que realices trémulas libaciones terribles aquelarres Por más que tiembles Inservible eres a tu causa Insensato Invisibles palabras pestañean Su viento, no siente nada Pisas con pesadas piernas El sucio suelo, somnoliento Tienes que tener tierra Perdida en los bolsillos viejos Nicolás Navarrete

Punto de encuentro

No hay muchos espejos No te he visto con la frecuencia que me gustarĂa Aunque no te veo, te siento conmigo en cualquier lugar Oigo tus pensamientos, siento tus emociones Cuando regrese a la casa que me vio crecer, nos veremos mucho mĂĄs. No hay muchos espejos en la casa de mi familia anfitriona. Ryan Calabrese

Serían más cortos mis días Eres el propio aire que respiro sin pensar, pero por necesidad Eres el sol que ilumina cada día El calor de tu ser alimenta mi existir Eres la lluvia que gota por gota vence la sequía de mi soledad Eres la orilla del mar y yo sus olas sin cesar busco el refugio de tu ser

Eres el crepúsculo, las llamas en tus ojos penetran lo más profundo de mi alma Y tal vez si tú no existieras serían más cortos los días Stephanie Camargo

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Eres la luna llena en un cielo estrellado Guías mis pasos en un camino de tinieblas

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Partida Cuadrado perfecto Eterno calvario de marcos sin límites Marioneta del destino Inerte, Inútil Casi exánime atrapada en la mansa caricia de las tinieblas Las luciérnagas que alumbran el infinito Se deslizan por los cogollos de mis dedos Diosa hermosa de las sombras Se esconde tras el horizonte La vigilia se escapa entre mis prolongaciones El fuego eterno de una estrella reencarna de nuevo Cenizas quedan de aquellas reglas que marcamos Los soldados de ambos lados han sido acribillados El rey y la reina Lucha eterna Entre el limbo y la realidad carnosidad que hipnotiza Abismo aberrante Estrato de invierno Estupefacto lacerante ante zarpas delicadas

Enderezo el eje Gravedad que encadena De polos dominantes Torrente de diamantes Huesos sometidos ante las corrientes Holas regantes Duelo sin descanso Banderas al aire Los dos nos rendimos Exhaustos

Carnaza deleitante Carcelero de mi cuerpo Veneno transitaste En tus manos muero

Karla Bayas

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Mis tímpanos hipnotizados por susurros de suspiros Un futuro incierto

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¿Cómo te llamas? Tengo miedo de pronunciar tu nombre miedo al viento desangrando mis labios en la búsqueda de tu recuerdo Tengo miedo a que mi mente divague de nuevo entre calles, todas ellas llenas de olvido, todas ellas que gritan sombras y disfrazan de petricor tu rostro Mas el tiempo llega vanidoso proclamándose dueño de tu ausencia ¡Te pierdo mujer! y entristezco y te lloro y te escribo deseando revivirte en silencios buscando tu nombre entre el ruido muerto de una ola que quiebra suicida en mis ojos. Gabriel Navarrete

Hacia ti Veo el universo en tus ojos Cada vez que los veo Cada vez que me acerco Sintiendo el espacio Sintiendo el ocaso

Nombre de pastor que cautiva mi nociรณn Silencios en las noches Gemidos sin olor Respiraciones entrecortes Caricias con vigor Agua que se derrama tibia Calores infernales Cielos rojos atosigantes Y un grito desesperante Katherine Ramos

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Sonrisa que alborota mi vida Gestos que envuelven la existencia Manos que atraviesan Besos que penetran

Punto de encuentro

renKa núa --dirty version Tu verdad es mi mentira y tras lo real tu reflejo es mi prejuicio, eres la utopía del humano ser y ser contigo es crecer sin ti, por ello los gestos no son solo palabras, van a significado tener porque eres como no eres pero en un papel eres conmigo. Se vierte la palabra en la emoción del que mira lejano, donde brota a duda de una nota aguda que acaricia el alma, desliza lento ante tus ojos el despojo sobre el atril en el que escribo, pues si me llevas a la deriva podrás entender que me llevas sin premura. Poco a poco en el infinito del éter te encuentro eterna yo tan inefable, tan distante, tan humano, tan horrible, trato de entender tus labios en este silencio que me embriaga sobre el placer de mirarte sin que sepas quien soy, conociéndote cuando hablas, cuando callas, cuando sonríes.

Por ello, con el ritmo de la lluvia busco el discurso que te describa, cerca del ciclo de tus pasos donde el ocaso pinta el flameo de tu cabellera; como un gato perdido caminando en las líneas de tus palmas ato versos a mi garganta hacia la odisea que de tus pesares brota.

Anónimo... ¿qué te dijese si fuese anónimo? en el momento que el tiempo yace despacio y el silencio plagia tus gestos quizá improvisara, tergiversando el vacío este hablante lírico se inmuta, distrayendo a la soledad escribiendo te espera. Israel Antich

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En el eje que mueve los mares la vigilia descansa observando, es la fuga ocular que calca tus parpadeos como un espejo, lejos, mas lejos... donde el agua se evapora mi sombra surfea en el anonimato de tus movimientos.

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renKa núa - clean versión

Deseando hablarte miraba mi reflejo en una botella, y pensando te encontré en otra mujer: la miré con la necesidad del ahogado, ella me miró con la necesidad del desahogo, entonces por su don hacia los hombres supe que me escucharías a través de ella: -Hola -Me has confundido, -yo solo trabajo en este bar -Mira tengo laburo, espérame o ándate … -No te gusta el alcohol que te sirvieron? (mueca de burla) (mueve la mirada al lado opuesto) -¿En qué piensas? -Sabes, págame si quieres que te escuche (se levantó para sacar dinero de su billetera) -¿Te estás haciendo el poeta?, -pésimo expresarse con versos (Estiró su brazo ofreciéndole dinero) (negó con la cabeza) -Estás mal, mejor anda a descansar -No ha sonado mi celular, quizá marcaste mal (sonrió mientras encogía sus hombros) (miró de reojo y tomó un sorbo) -Qué raro eres, a mí no me gustan los románticos -¿hace cuánto que no has estado con una mujer? -Qué pajúo, si quieres después podemos salir a dar una vuelta… -¿Hay alguien en tu vida? -Seguro no has notado cómo reaccionan cuando hablas sobre la vida; muchas pasamos esperando a un hombre… no oímos

-¿Quieres beberme o beber té?, (Bajó la cabeza) -¿Qué dices?, vamos a tu departamento, y yo seré ella… … -¿Vives solo? -Hablas extraño, ¿a qué te dedicas? -No lances nada, solo vuelve y pregunta por renKa; -¿Dónde queda el baño? (Giró la cabeza en ángulo recto a su cama)

-Cierra los ojos Concéntrate en mis labios… luego entra en mí, rodéame con tus rodillas y recuéstame en tus ganas Solo olvida quien soy, olvida quien eres, olvídala, olvídate. … -Buenos días… es tarde, me tengo que ir -No te preocupes, suele pasar -A ti y… tranquilo Israel Antich

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Su cabello largo era como las arrugas de las hojas de moriche y sus ojos eran dos flores de sachi, le recordaron su infancia. le sonrió…

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Apareciste fuerte dragón, con tu cuerpo de piedra obsidiana Carne abierta a flor de piel Sintiendo todo tan hondo que no había necesidad de moverse, de tocarnos, de hablar, tan solo acariciar la existencia con los ojos. Éramos conscientes de que la vida se va No dejábamos escapar un momento para volar en libertad Vivíamos en las ramas de los árboles, desnudos en nuestro paraíso solo deseábamos del cruel mundo escapar. Como sapos y ranas en la lluvia nos bañábamos, chapoteando nuestra naturaleza de tierra mojada y hojas crudas. Sin dinero, sin excesos sin nada más que nosotros juntos, creando y creando, mirlos de colores anidando. Intentando, a todo, darle sentido, donde antes no lo encontrábamos Escapamos de la guerra al cielo, a nuestra selva, a nuestra casa de sauce y cereza Donde hallábamos quien nos cante, alado del eco del mar. Toda posibilidad siempre al alcance. Arriba lejos, lejos, volábamos y construíamos nuestra felicidad sin mirar a nadie, sin ser carroña. Mientras el bosque hablaba, con los robles y las hadas, boreales aladas nadaban con cada roce nuestro, de destellos estallaban. De tu boca y la mía nació el Amor, en ti Dios habló. Apareciste fuerte dragón, con tu cuerpo de piedra obsidiana

Relumbrante, moreno, reflector de luz, trasparente como tu pasión, andante viajero, explorador, amado cóndor de los cielos cantor.

Aunque hace 2555 mañanas ya no te encuentro en nuestra selva morada Primero y único y para siempre Eres mi escape mental, en el infierno diario huyo a esa época en la que éramos niños y todo era real, el mundo y nosotros de verdad. Irene Peralvo

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Feroces fauces, piel de escamas, te acercabas sigiloso para no asustarme Veía a través de tus ojos amarillos, gigantes, un alma inquieta y dulce Huesos olor carbón, garras enormes, dientes potentes Juguetón con tu lengua y tus espinas, me enredabas el pelo y los sueños.

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Si la rancia agitación por tu aroma sigue sin dejarme respirar En corredores fríos tu silueta emerge de repente Tus voces agitan a mi alma, pintando amor candente Oh pobre inconsciente, espíritu orgulloso y egoísta, de cáncer amargo y exquisito Allí, en público en tu omisión y falsa sonrisa, desapareces trasparente, despidiendo vacío, mientras en espera se estrían los brotes de mi piel ardiente Tan lejana de ti, que ya no siento ni escalofríos, ni disgusto, tan solo ingrávida nausea. Pero en aquel cuarto chiquito, escuchando de tu lengua lira en secreto   Aun en la orilla, nos agarramos de los filos de la llanura para no caer al Averno Tiembla todo alrededor, se desploman los libros, los cuadros, el piso Envidiosos los vemos. Gusto y sal, vapores incandescentes, allí permanecen en tiempo irreal. Brillo de tus ojos en mi presencia, pero nada más que repudio tus labios replican Me deseas como agua pura de menta No lo ocultas, tus manos efervescentes, negro y rojo salpican Ansia y apetito se dejan ver en ti, libres y gozosos Como chocolate amargo, agua a la boca Insaciable tú anhelo de mezclarnos en las liberales y profundas oscuridades, delirios salvajes. Deseo dejarme hundir y que tus largos brazos me cubran Te gusta de lejos jugar, conozco bien las luces que te alumbran. Pero aun aguarda mi esperanza, tonta y callada, una palabra aguda en briosa espuma de mar.

Codiciosa, egoísta yo, solo quiero curar mi herida en tu pecho Y junto a ti beber néctar y devorar ambrosía Única solución para mi infructuoso deseo de volver a sentirme como ayer Cuánto tiempo más me dejaras agonizar Suaves tus manos desesperan por tocarme, la luna, las venas, la aguda agresividad.

Aguardaré que se torne costra la llaga o recibir una palabra final Y ahí veremos si las ganas nos siguen quemando Si la rancia agitación por tu aroma sigue sin dejarme respirar Si la desesperación por encontrarnos nos sigue martirizando O si el fuego se deja apagar por el viento. Irene Peralvo

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Inconsolablemente sola con o sin él o sin ti ¿Será esta parte inherente de mí, o será tu amor capaz de curarme? Ningún sereno aliento es suficiente Lo sabes al mirarme, por eso callas.

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El espectador Un encuentro peligroso mi corazón siente poco desenfreno al infierno grito ¡misericordia! su mirada profunda me atraviesa con cautela acecha en luna llena se presenta con gracia o empatía su encanto revela rebeldía sin piedad, quiere torturarme sublime muerte sin escape su venganza envenena mortales mientras aprende de anatomía tiene sed eterna de sangre fresca el intenso tiempo se manifiesta sincronía entre sexo y picardía su deseo me provoca asfixia es un crimen de excitación absurdo los profanos caen engañados así cave mi tumba de ilusión dando paso a la atracción y se manifestó en sensación de cortejo sexual reproductor. Michelle Custode

HETEROTOPIAS.- una manera de estar presente y al mismo tiempo ausente, instantes en los que uno se aparta de la vida, siendo parte de la misma, portal dado por el autor a un lugar físico o un estado mental, la condición de estar y no estar, de ser y no ser a la vez, estar en dos lugares a la vez en ninguno, dejar tu cuerpo atrás y liberar tu alarma, no saber si estás en la realidad o atrapada en un sueño, o surfeando, la urna de votación, el altar, el ícono MS, una flebotomía, disculparse, el momento antes de zambullirse, el visitante de niebla.

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Heterotopias

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45 grados es la norma Con mi pijama azul Observo al enfermo anciano De orejas largas De mucosas pálidas Taquipnéico De ojos sin brillo La venopunción es inminente Miro sus ojos negros Deprimidas lagunas Engüanto mis manos Rasuro el dorso de su pata Tomo un guante soltero Coloco el torniquete arriba de su codo La cefálica se engorda Se ensancha Me brinda un jugoso “hola” Agarro un algodón Remojado con alcohol Limpio su desnuda piel Engordo la vena Y está lista Mi árbol se electrifica Las señales empiezan a saltar Entonces El trayecto es:

Tomaré la aguja y la inclinaré 45 grados es la norma Mi pulgar sostendrá el vaso Y la boca de la aguja mirando al cielo Invade el tubo Mi mano izquierda sostiene la pata, su vena Se tensan mis músculos, se contraen mis vasos Aumenta mi presión, mi frecuencia sube Mis pulmones se agrandan, respiro hondo

En mi mente Puedo ver cómo corre Cómo circula La sangre, su vida En sus canales, en su sistema Y tomo la aguja y la inclino 45 grados es la norma Cristina Gross

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El deprimido viejo De mofletes caídos No tiene ni idea Indiferente, parasimpático Expone su piel tersa Su vaso palpitante

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Despertando Me mintieron sus labios al negarme un beso. Cuando me irritaba el oído la alarma de hueso. Que me rasgue la piel, que me corte el cuello. pero que no me alejen de su recuerdo. La tierna luz de la confusión se enciende. Sorprendiendo a los ojos que te vieron. Los que se sumergieron en mi cabeza, y navegaron en mi risa. Habitación de botella de vino vacía, la percusión de tu ausencia florecía, alucinaba mi conciencia y se desnudaban mis suspiros, al encontrarme solo conmigo sin el ritmo de tus latidos. El chocolate de tu aliento, y las almendras de tu mirada, Se alejaban frente a la luna, mientras los cometas pasan. El sol refleja en mi conciencia, y retumba la idea de haberte perdido. La alfombra de tu piel ya no cumbre el silencio. La habitación responde con un grito, Marioneta de mis sueños, de tu aliento a fresas, y de ojos mar de plata, reconocerte es imposible. Arigru

Instante antes de seguir viendo la película

si después de ese momento los abrieras y fueses insecto cacto sacerdote otro paracaidista tendría perfecto sentido pero no la ola de realidad trae otra ola con la seguridad de que alguna vez los abriremos y nada pero lo más probable es que siga la misma arquitectura de este caos cuya anarquía resida en quizás tener solo la simple naturaleza de un espejo quizás un espejo contra otro EL HORROR Agustín Ramírez

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Cuando cierras los ojos y ves después del silencio patrones rojos y azules rápidos que sugieren las figuras de tus sueños las cadenas la sal la tierra pero no quiero enumerar más los dientes del aire sino señalar esa espuma eléctrica que es fuego solo tu propia naturaleza las venas irrigando sangre la mirada siendo observada por la mirada ya sin estimulo el punto donde la biología y la psicología se unen a combatir el absurdo y sus filosofías nadie gana y yo es otro

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Un espacio entre On the edge of the universe there is a place I saw it one day when I was looking in the mirror It is difficult to describe Terribly freezing But Within its soft light I saw my breath in front of me Slowly dancing off my lips I got the chills It only lasted a moment But I swear it was real And you were there with me We were just sitting It was silent It’s my favorite place. If only I knew how to get back. Innocence perdida She’s walking outside Her head with sparkle clips only reached the car door handle She’s clenching something in her hand What is it?

I close my eyes and it’s dark I’m trying to guess what she’s holding I see her But she doesn’t see me This little girl She has a pure heart And honest eyes

I close my eyes and she’s looking at me I look back But then she’s gone I open my eyes and I see a mirror I’m standing Clenching something in my hand I open to see but there is nothing I must have lost it somehow. Lucía De Bartolo

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What is she holding? and why can I not put a name to it? I open my eyes and a tear drops What does she have that I don’t?

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Bicicleta No soy el que escribe Ni soy voz Flotando en nubes metálicas Flecha Plástico Vocal Reloj Hallo que no encuentro que buscar Y está bien viento Formas Letras Letreros Se deshace en los pies de la tierra Que se deshace en cada vuelta En cada vuelto encuentro Mi encuentro con mi rostro y el sol O la lluvia Vidrios Hielo Gradas Caigo En un instante rítmico Ilumina un árbol O una calle postes Soy serpiente Mil máscaras Mil tiempos

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Soy todos aquellos Que ya no son ellos en un viaje Sino un ocho acostado Una hormiga Pedaleo Película de persecución de fantasmas Sabor de fruta Sabor de trigo Trigo cabello Cabello musgo Pedaleo Los espacios cotidianos Recorren rápido la mirada El espacio en si se ha vuelto enorme Por la velocidad Bombardea mi exoesqueleto Que siempre ha sido así de enorme el espacio La velocidad Pedaleo Tan enloquecido Que busco entrenamiento de astronauta Cuervo Deslizándome debo esquivar Las islas de ciclópeos eucaliptos Miro a la izquierda Caigo vuelvo a ser Alguien con algo que hacer Un lugar a donde ir Ser específico Agustín Ramírez

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Últimos veinte minutos

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Importa la muerte, y sus hermanas La gorda, la soltera, la color ciruela, la que se envasa Importa el pan que se comparte, el que deja migas Y las migas, y el desorden y el caos que cubre nuestras sábanas Ay, qué importante que es un sorbo de caos de vez en cuando Cuánta falta nos hace Y es que muy pocas cosas importan en esta vida. Importa esta poesía, la letra torcida, la audiencia Importan las horas huecas, llenas de pájaros Importan las tortugas del patio, las pulgas del perro Las siestas, los gritos en público Importan los segundos en que uno se amarra el cordón Importa la sinceridad, las flores amarillas sembradas en los puntos de encuentro Ahí donde converge la vida en su estado salvaje con la muerte El estado de coma Importan los profesores que abandonan el aula con sus discípulos Y los llenan de prados de amapolas sobre las cabezas despeinadas Importan los que creen en la garantía del silencio Y los que saludan con la mirada Los que dicen todo con la mirada, que importantes son Importan los que no callan y los que no acuden a los entierros Importan los segundos en el baño, perfecto tiempo dorado E importa quedarse dormido siempre que uno guste Porque a nadie le debe importar que uno duerma Porque son pocas las cosas en esta vida las que importan Y si me llego a despertar de este estado de coma, Admitiré enérgicamente que también este estado importa Porque en este dolor nulo, en esta santa paciencia Uno se da cuenta que son pocas las cosas que importan y creo que lo que más importa es lograr vivir un rato antes del….piiiiiiiiiiiiiii Luis Enrique Velasco

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#43

I Por qué te alejas melífero lirio acaso un cielo de agujas clavó silencios muertos de frio en tu pecho Tal vez mis labios dejaron tu nombre en vientos ocres que buscas del sol Tal vez la muerte es quien busca tus besos De fuentes secas escapan las alas de un ave negra que mira mis ojos Espejos lloran las voces que apagan un cuerpo leve que no se refleja que ya no canta al ocaso su piel Un dios que cuelga su cuello en estrellas y un ángel quiere arrancarse las alas caer en tierra y buscar en las calles tu ruido escrito entre pasos de sombra Un sueño escapa de varias crisálidas Se inmola quedo en tu frente y se vuelve la voz que ciega y astilla mis labios II La muerte es niño jugando en mi pelo que ríe triste en el sol de la tarde Camino en brasas que encienden un lago Tejados níveos se arrastran en mi alma que lleva y canta en el paso del tiempo las horas mudas que yacen pensando Reloj que llora en paredes sin rostro Mi piel espera el cuchillo de muerte en tinas llenas de lágrimas sangre Oí tu voz en las sombras de un cuervo que trae alegre la vida en sus alas Un niño llama a mi alma, me lleva

se aferra tenue a un susurro inestable El niño cae en lodos purpúreos se para, limpia, decide correr Tropieza en lodos violetas de nuevo se eleva, limpia y se vuelve a caer El niño grita deseando volar soy yo ese niño deseando volar III El humo asciende cojeando y figura mi ser que quiebra en la luz de un tabaco Olvidos hieren mi piel ya no muere mis dedos quieren tocar tu destello que baila leve entre cada farola Se pierde el viento en mi tierra gastada Tu ser se expande en mi patio vacío Jardines hablan amor que renace en frutos llenos de lirios cortados

la vida cae en un lirio oxidado y lirios sueñan nacer en tu pecho pintando etéreas las lágrimas mudas que bañan hoy a mi voz que se rinde Mis manos crean de barro unas alas Desgarro piel que encadena mi sueño Mi espina sangra desnuda llorando Y coso en ella las alas de barro Espero sólo esta vez no se caigan IV No existo más en mi cuerpo silente Soy viento, amor, primavera y la muerte Soy sed cantando sin aire en el mar rumor de sal que me embriaga los pasos

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mis pies los anclo mujer en tu cielo y busco el lodo y en él desasirnos

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Las nubes huyen rasgando mis ojos Su sombra trae en el hombro mi olvido Yo sigo ciego en cenizas que miran mi llanto hastiado en la lluvia sin ojos que cae sobre el celaje del cielo V Amarga noche en que extiendo mis alas Mi mano sangra y la agito al vacío Mi sombra está ya cansada de mi alma la sigue triste en mi piel que se rinde Un eco vuelve a mi pecho y lastima con piedras rotas que lanzan mis manos La muerte toca violines ya roncos sentada alegre en la luna y un cuervo Sus pies dibujan aureolas que se abren como olas secas que opacan el cielo Yo vuelo y vuelvo a los sueños del viento y el aura duerme a una luz en mis alas Yo veo desde los brazos del cielo Mi cuerpo yace en pesado esfumato En tierra que hunde sus labios al cuello No habita sangre ni tiempo en sus venas Es sólo el polvo que escupe la noche Es sólo un sueño vacío sin forma que araña muros que pierden su cuerpo Vasija rota no soy más tu dueño

VI En dónde están los acordes en dónde En dónde están tus susurros de lirios En dónde están las estatuas sin brazos En dónde se esconde el muñón de sus alas Yo busco voces suspensas en charcos que olvidan ser en un cielo de sombras que sangra plomo y perfora mis alas En lo alto se hunde y se olvida la góndola y no hallo en ella tu voz y yo caigo de nuevo al cuerpo que yace colgado Adónde huyó la mirada del alba Y mi ave muda de pútridas alas En dónde estás, ya no veo ni mi alma Que ríe y salta y se escapa en la niebla

VII Por qué la muerte no toma el metal roído en ácido y pinta la noche en cada arista sobrante en piel Estoy cansado y remuerdo un recuerdo Y lirios secos que lloran espejos Me dicen “hace ya un año que has muerto” Y estoy sólo sentado en el borde mirando cómo agoniza el ocaso.

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Tu voz ahora se trepa en jardines en otros árboles donde no existo en donde el sueño que rinde en mis labios en donde el cuerpo se ahoga en un fieltro

Gabriel Navarrete

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Numbani, El lugar de grandes casas que habitan sin serlo como las rosas marchitas de un 15 de Febrero similar a las Luna tras las nubes en un día soleado ni visa das tu primer paso un botón que tras un susurro que todos escuchan un tick que no lo sienten las miradas más bien tus dedos se encargan de eso y pasas esa frontera, así nada más te encuentras únicamente tú con tu vista en una pantalla, más bien un mundo Numbani, no se cierran los ojos, ni siquiera un parpadeo existe aunque la luz llegue a las pupilas no se sienten exclamas “renuncia a tu cuerpo pero nunca al Dolor” prosigues y escuchas muchas voces pero todas éstas allá afuera como si las ventanas estuvieran muertas, sientes como si la vida allí nunca ha pisado sin embargo tú has pasado tus yemas ya no están en el primer click ahora teclas en tu mano izquierda dos clicks juntos en tu mano derecha ahora son 4 vista, tacto, oídos, mente comienza entonces una batalla, ellos junto contigo muchos similares a favor otros en contra, vida o muerte eso allí queda pero no te sientas atrapado, si sientes que has acabado ahora solo presiona el botón nuevamente siente el tick en tus yemas levántate y prosigue tu vida. Alvaro Leal

Dejé el banquillo Chocan ellas, ellas, las palabras de otra boca, casi escupidas revientan en mi cara. Cierran, se cierran y me alejan ellos, mis ojos, para en el silencio desconocerte. Explotan ellas, las palabras del otro su potencia despeina pero soy impermeable a las letras que rebotan, a la decepción que sobre mi sientes.

Su saliva moja mi cara. ¿Me estás escuchando? Asiento, afirmando la negación a su pregunta Confundirle, para seguir pintando espacios neón, en la pantalla interna de mis párpados. Golpean sus gritos y sentencias sobre mi rostro, pero yo no soy, ni estoy Y dejé el banquillo de acusados cuando ellos, ellos mis ojos, que a veces no me pertenecen decidieron cerrarse. Esteban López

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Ese que debo ser yo, y eso que son mis ojos, ya no estamos ahí. ya no me pertenecen, ni yo a mí mismo.

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Insomnio El poeta vive de las derrotas con sí mismo, por ello esta rima es rima si rima sin rimar, solo escúchame, que si escribo es por no tener que más regalarte. Este insomnio es como enfermarte de ti mismo resultaría a beber y en la mañana despertar resfriado, lo sé, igual al día que guardas tus lágrimas, el insomnio es un llamado a no soñar y vivir. ¿Quien ayuda al que en vez de madrugar se amanece? quizá el colchón espera otro cuerpo junto al tuyo, ¿Quién sabe qué piensan los libros en el piso? insomnio, coleccionando madrugadas capté tu rostro, entendí tu costumbre pero no tu diferencia con la soledad. Ahora peleado con la almohada, emoción macarra que agarra lunas vi que nos parecemos a Hansel: dejamos pedazos de nuestra existencia a la luz de la noche mientras caminamos con la muerte a ser olvidos. Loco en mi cuarto pensando cómo convertir palabras en oro, insomnio, teniéndote a ti sin tenerte he conocido una María no virgen, así que virgen mía ¿por qué esta miopía embotella mi poesía en pasar en vela? Israel Antich

Dentro de la caldera Los estruendos de las bocas de los monstruos marcan el ritmo: los rugidos de las aguas nos dicen en silencio, y a gritos empiezan las danzas diferentes caras y demonios que lanzan patadas Se hace un vórtice de sombras rápidas como viento pocos valientes entran a hacer saludo al momento entre más rápido y suculento sea el caldo más rico, más santo

Con ojos sienten los de afuera de la caldera venerando o temiendo a los gladiadores de la tormenta los sismos de sus pies dejan la piel de gallina Broom, broom y les tiemblan las rodillas Las campanas suenan y dicen que se vació la caldera los participantes cansados, por el hilo del fin sienten ganas los de fuera aplauden por la salvaje faena se quedan quietos y miran esperando el siguiente toquín

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Uno se queda en medio de la tormenta viendo las cabelleras que se arrancan y se quedan no hay gloria más grata que la lava que se agota lucha amena y corta efímera como en pulmones la Mota

Juan Fernando Valencia

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El tiempo no existe en esta cima No estoy aquí ni allá, en mi reflejo al caminar, las entrometidas ideas atraviesan, Suena la vieja lista de records de mi papá, Pero yo no estoy donde él está, Y mientas admiro la melodía, me imagino estar allá y más allá, me encuentro al filo de algún sitio, estoy aquí bailando por la alegría de este instante eterno, Y mientas navego con la melodía que me dedicó mi papá, Observo a todos los demás, en un su rápido caminar, Ellos no se dan cuenta que al estar aquí, tampoco están en ningún lugar, y mientras todos van partiendo yo me quedo esperando, a alguna otra parte llegar La espera no se apacigua, no entiendo lo que es estar, Pero me puedo encontrar, en la sonrisa que me dejo papá, Estoy en los ojos verdes de mi mamá, En la alegría de mi niño al despertar,

Cuando me levantan los aullidos, Del lobo blanco, que me quiere hablar Llevo en el bagaje recuerdos bellos, Y mĂĄs preciosos anhelos, El mundo se construye, se aprieta, se encoje, Pero no se encuentra,

Danzo en su fuego rojo y ardiente, Entre las llamas de mi fuego que no paran de quemar, Me vuelvo a perder, en otro lugar, La danza nunca termina: me quedo en este bailar. MarĂa Fernanda Granda

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Tampoco me sabe explicar, como es posible mi manera de estar, Se aproxima el borde de mi estancia, El tiempo no existe en esta cima, Estoy en este espacio que me llena de asombro, Y en su inmensidad me pierdo.

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Pero no estás

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Estás allí, allá, pero no aquí Estás parado, acostado, pero no diagonal Estás pum y pam, pero no estás pom Estás subiendo y bajando pero no estas horizontal Estás Patapum y patapam pero no patapom ¿Qué es eso donde estás, si allí … Juan Sebastián Ruales

Ecovía Único instante. Una decisión Sofocado, enlatado en las vías las venas, la circulación Levantas la vista pidiendo perdón Sentiste, intuición Felina mirada se posa en vos

Como si no fuese evidente Como si no fuese inminente Como si fuese un error Único instante. Una decisión Nicolás Navarrete

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Agazapada

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Nada fuera

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Entro a nada dejo todo nadie interrumpe Me quito la ropa me familiarizo con la persona en el espejo disfruto Prendo el agua de la alcachofa dejo que caiga en solo una mano, se me cierran los ojos en la cima de la higiene y mis pensamientos el agua caliente me nutre como si fuera una flor ansiosa La astilla del mundo llegó a colarse en este vacío conmigo me impide que escape No puedo huir, aunque quisiera Pero a través de la ósmosis, desde el agua a la cabeza Granizan perspectivas nuevas, soluciones, Con la cabeza colgada, No digo ni hago nada, nada fuera del agua que me apodera, que se remoja y se fermenta en mí Ryan Calabrese

Espejo Veo al espejo y allí esta ella: perfecta extraña que intento reconocer Le pregunto qué hace aquí: solo una mirada vacía y el vacío entra a mi corazón huyo de prisa

y la del espejo allí esperándome esclava sirvienta en busca de un mañana que no llegará Stephanie Camargo

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El tiempo sin piedad va y viene cada segundo cada minuto cada día pasa en vano

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Salud

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Salud payaso disfrazado que con sangre has pintado tu sonrisa Dime bufón de quinta que escondes detrás de esa risa Qué oculta tu mirada delineada por tu alma Un galón de tinta blanca, ¿una cabeza agachada? Rastros de lágrimas forman caminos en tu cara Tu sombra te persigue y tus pasos avanzan ¿Cuántas noches más cargarás los sueños rotos de tu infancia? Soy una dama, en esta oscuridad la última que aun sostiene tu mano Envuelvo mis dedos en los tuyos Me pierdo en tu mirada Te has olvidado de mí me has dejado de hablar Desenganchas tus dedos de los míos y me dejas ir Te aborrezco por lo que eres Me aborrezco por lo que eres Karla Bayas

Cuerpo astral saliendo del purgatorio

Entro en ti como el huésped más esperado y bizarro adjudicado de tu antiguo astro en concierto de adoración ocupo un lugar en las ficciones del ser humano siento apetito con sus gritos proyectados al universo descuartizado en el hecho del deceso queda solo su reflejo. Michelle Custode

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El carnaval de la carne donde hay flores de lirios en la espalda del ser amado; leones hambrientos en las bocas; demonios ciegos con textura a terciopelo. El acto que reduce al vacío la intensidad del naufragio de un soldado. Porque me agradan esas sensaciones de inspeccionar tus abismos. Escrutarlos delicadamente en una noche ardiente de contemplación. En salvación de un amargo alrededor en posición de caracol dentro de la oscuridad con dirección al cielo se guía el relato se viene conmigo mientras el cuervo satisface su movimiento en el tiempo encuentro acelerados tus relámpagos extraño deseo que habita en mis huesos descubiertos.

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Las rayas de las cebras Se ve como la serpiente se enreda en sí misma y se lastima con cada diente. Las manos salen de la boca. La lengua de los ojos. Y los pies buscan las orejas. Los caramelos se engullen. No saben por dónde entrar: por la sangre, los tejidos o los huesos. Las miradas vibrantes se cruzan como un espiral de luces, que reflejan flores con alturas de elefantes. Afuera la fogata, encendida con ron, cigarros y alas de ballenas. Que por estar en el fuego danzan todas bellas con los diablos. Las estrellas, todas calvas, se ríen porque tenemos pelo. Nosotros nos reímos de las manos que les faltan. Las iguanas posadas en nidos, amamantando sirenas viejas. Nos miran, se acercan,

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nos escupen magnolias y cantos fantasmas. En la esquina pálida, un gato y un camello están desesperados. El uno porque le faltan gibas, y el otro por tener maullidos encerrados. Se abre la boca y la lengua empieza a tener ojos. Se asombra, se muerde y grita cuando ven a los peces pariendo colibríes en cada margarita que se posan. Las manos duelen. Ansias en cada dedo. ¡Masoquistas! Se quiebran entre ellos. Monos y tambores, estalactitas de hielo que por estar tan afiladas caen en los cráneos de gatas en celo. Miradas, miradas, miradas. Gatas, iguanas, monos y sirenas. Miradas, miradas, miradas. Ojos, dedos, venas y lenguas. Yasuní Chiriboga

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Deseo en contratiempos Tan rebelde como un cabello al viento Cada segundo mil ideas vuelan en mi mente La pasión que siento Tan insaciable como irrelevante Llenándome, consumiéndome Avivándome y seduciéndome Su voz me abofetea la vida Turbulencias de palabras Raro y confuso Tan etéreo, tan él Me conduce, me define No es apego ni es costumbre Es tan solo su conexión sin limitación Haciendo que brille un mundo de luz y pasión Viajes celestiales, viajes de imaginación Es imposible guardar compostura Ante tal magnitud que tu ser sin desmanes Hablando de pasión no cabe mesura Nada de restricción, nada de prohibición Solo tú y yo en sensación Katherine Morales

Ahí estoy, frente a mí Entre las explosiones De las luces deslumbrantes Y los colores y los alientos fermentados Mis oídos se ahogan por la algazara La eufonía Mi nariz roza las espaldas Mis brazos besan sudor ajeno cuando diviso entre la oscura multitud El portal hacia la fuga Navego entre codos y hombros Respiro la humedad La lumbre de los cuerpos Y llego al umbral Toco… ¿hay alguien dentro? Nadie responde Mi mano se enchufa a la perilla

Corti toca el órgano débilmente Mis latidos palpitan en mis caracoles Las vibraciones cesan De pronto estoy sorda y Ahí estoy, frente a mí Los pensamientos mueren Ahí estoy, frente a mí Aquel abrupto silencio ensordecedor Agarra los segundos, los estira y Me dispongo a refrescarme A bañar mis manos Detengo el grifo, levanto la mirada y… ¿Ahí estoy? ¿Frente a mí? Cristina Gross

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Me adentro en este frío cuadrado La madera se cierra detrás de mí El único foco se enciende y Ahí estoy, frente a mí

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Reflejo y vapor Entre sueño y despertar, caminan pies pesados a agua caliente Se cierra la puerta al mundo, de intimidad te envuelves mientras te quitas la ropa. Tu piel es tuya y tu cabello cae mojando tus piernas que flotan y se apoyan en el suelo. Recuerdos de otro mundo, lleno de tus secretos, en un idioma intraducible que se va esfumando para quedar solo como sensación de algún déjà vu que jamás sucedió

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Mientras en fantasía repleta estas, empieza la objetividad a extraer tus planes para caminar en un nuevo ir, ya no al sol, sino por el concreto. Eres ser nacido del sonar de una flauta devuelta por la historia al pasado presente. Marcada en las plantas de los pies, la tierra entre un mundo y otro. Una frase, una frase que se repite, un mensaje sagrado entre norte y sur. Y una palabra que no entiendes, pues ya no la ves Pequeñas gotas te cubren toda, y tu cuerpo rojo se aproxima a sacudirte como animal. Con las cortinas cerradas arrollada, cobijada por una nube de vapor. Una vez más quitas la bruma para encontrar tu reflejo, el universo. Nunca has dejado de intentar, todos tus rostros dentro de tus pupilas, con miedos y esperanzas ¿Qué es lo que ves hoy? Ojos que se dejan ir en mitad de ti, libres para ver lo que quieran mirar, ojos que llevan el ayer cargado en la espalda u ojos de alguna nueva bestia sin rostro aun “Nada ha sido un error” piensas en ese segundo mientras vez el infinito. Vuelve a pasar otro sueño, otro día, las luces transitan rápidamente y te veo otra vez, veneno sin freno que acompañas cada etapa de cambio La voz llamando al tiempo a la realidad, hasta mañana te digo realidarcosis. Irene Peralvo

ELEGÍAS.- lamentos por el acercamiento de un destino inminente, nostalgia hacia algo o alguien que ya no está, chauché, cualquier cosa que se pierde, maestro pase el metro, duelo y duela de chanul, jumento funerario, emparedado de letras, elé-gía, recuerdo podido, fuiiiish el finado.

Punto de encuentro

Elegías

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Trinares enjaulados Aullidos ensordecedores de manada a la noche Pelos de cientos de gatos en sillones exteriores Trinares enjaulados al costado del guabo Arboles de olivo, naranjo, cacto y arrayán Algo, para llenar la casa, que después de ti de vacío llenó todo lo lleno y extinguió todo lo hueco ¿Dónde está tu canto alto y profundo al inundar el hogar de aroma a ají picante? Fotos a mil colores, banderitas de papel picado rondan toda la cocina Un rincón de arcos clásicos, de azulejos turquesa y terra cotta Lleno de objetos del pasado, piedras de moler, instrumentos extraños Guadalupe al centro alado del árbol que sembraste con tus manos de tierra y fuerza Para ti, para que la casa no se olvide que tú le diste alma y a nosotros no nos carcoma tanto tu ausencia Acompañándote en tu partir, te despedimos, desesperados, queriendo dar la vida por ti Pero ya hace meses, pálidas eran tus mejillas Lleno a desbordar de flores aquel piso helado y todos a tu alrededor sentados con rosarios en mano Te encuentro en el color de esos cuadros, en las cosquillas de cada mañana, en mi risa, en todo el amor que veo y siento y en las notas que me dejaste manuscritas. Irene Peralvo

Alvaro Leal

Punto de encuentro

Pasas por una puerta una bienvenida de aroma de café, amargo, relajante y el sonido de las galletas saladas entre lloros y pasos la vista se aquieta frente a esa vitrina, Querido descansa, susurran los labios tras un rechinar de dientes. Bien por ti, te has olvidado de tus obligaciones, has dejado atrás tus problemas, bien por ti simplemente mandaste todo a donde pertenece pues querías cerrar tus ojos, bien por ti, por eso no lloro ni me aflijo, pero bien por ti, tu ausencia, la falta de tu voz, eso duele, sin embargo, te entiendo, querías dejar de hablar, bien por ti, una sonrisa en mi cara muestra mi apoyo ante tu decisión ahora regreso mi vista y de pronto existen miradas sobre mí. Unas desafiantes, otras distantes, pero todas ellas juzgan como si se tratara de mí como si fuese mi culpa ¿por no llorar? ¿por sonreír? acaso ¿el terno negro y la corbata deben acompañarse con llantos?¿es que está mal ver a la muerte como algo cotidiano? como si del cantar de las aves se tratara ¿está mal aceptarlo? ¿es acaso malo dejar que a la mariposa batir sus alas por primera vez? después de todo alguna vez nos tendrá que pasar cuando simplemente se quiera dejarlo todo y suficientes batallas se hayan ganado y muchas otras se hayan perdido cuando el corazón se deje de llevar consigo mismo y el aliento deje de hablar cuando los ojos se nieguen a ver así, cerrados y tranquilos. Habrá llegado bien por ti, pero nunca te olvides no se podrá retractar, si esa es su decisión bien por usted.

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El dolor te come justo donde las palabras divagan Vacíos los comunes espacios, en el pensar eres eco, en los ojos eco visual. Cargados con miradas cristalinas, mudos, sin respuesta. Ahí, todo se pasma y corta El dolor te come justo donde las palabras divagan en el rechazo de la inevitable verdad, que no aplaza huecos ya anunciados. Y las seis pupilas, las seis lagunas se llenan, los faros del cuerpo rebosan de agua sal. Siluetas borrosas, apenas movimiento apenas inspiración, apenas él. Diálogos, abundan y redundan se digieren con vasos de agua fría: Llaga próxima a sangrar. Lo normal es el conflicto cuando la oscuridad golpea, cuando los arrullos no alcanzan y el llanto, goteando de lo inevitable, desentierra lo crudo Esteban López

El idioma ya no es igual no hay claridad Salida de estrellas y futura soledad ahora su alma se cambia para andar las huellas quedan en una danza tribal su mirada aparenta voces de verdad y una esencia a cama que toca descifrar una fuerza intracraneal elevada a disimular las últimas horas se pasan sin avisar presiento debilidad y virus mortal no respira solo vuela en la inmensidad que piel desnuda esconde sus costuras la lista llena de espías que preguntan si la naturaleza es sustituta de las sombras entre nombres y ciudades los signos vitales se despliegan en promesas de boca seca ausencia relajada como terapia clínica no abandona la ropa que la mantienen viva se desvela en amnesia pura de pastillas mientras busca su fantasía excedida. Michelle Custode

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A pocas horas de la ejecución

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Estragos del invierno Tenía cuatro pajaritos que me cantaban desde afuera: Nadie me despierta en la mañana Tenía tres pajaritos no parecían saber que la nieve cae y caía que ya no quiero saber Tenía dos pajaritos a la mitad de su vida les veía y sonreía Tenía un pajarito el último suave, como esta hoja como el lodo, se fue Ya no tengo pajaritos se siente callado y vacío el viento mismo lo dice Juan Fernando Valencia

Tú no vienes

Aló ¿con quién tengo el gusto? Muy buenas tardes querido concursante, le queremos informar que usted y solamente usted ha sido seleccionado para un viaje de ida hacia el tercer círculo del tercer cielo, con todos los gastos incluidos, saldrá mañana por la mañana. Tómelo, tómelo ahora y no se arrepentirá. -Vamos Javier, vamos Ah, tú no vienes Juan Sebastián Ruales

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Todos los malditos contactos Se perdieron en la configuración arruinada de un circuito Esa simpleza de desvanecerse Un código que dicta el número de llamadas perdidas Un código que te decía quién eras Un espejo negro quebrado, inservible Las partes disfuncionales solo cuelgan

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Primer estado de las cosas Aunque quisiera ver no veo porque, aunque este mundo errante quiera entrar por mis ojos y sembrarse como trepadora en mis vagas córneas secas volver a ver no puedo ya todo me se me insinúa inmerso, porque todo parece ya escrito la costumbre, la familia, los amigos las ciudades, las perezas y los sueños y aunque quiera ver a dios sentado sobre nubes lamiendo un helado de mora aprender a volver a ver no puedo ni veo la tarde roja, ni el nevado lleno de espuma ni el tiempo cruzar las plazas esas rojas plazas donde se reúnen los del Jazz los del vóley, los que se atrasan a todo incluso al bus azul de la vida mucho peor veo el amor que desfila como hormiga entre palmas ni las mariposas amarillas de las que todos hablan frente a los niños jugando en los parques esa rica ingenuidad arcoíris tampoco veo

y frente a catedrales, Velasco, compadre milagros ni hazañas vehementes no siento la roca fría se deshace entre mis dedos las fotografías de nuestra Nikon mil son de lenguaje incierto lleno de lluvias, sombreros, edades.

y es que, aunque quisiera ver, ver de verdad no puedo ahora yo, observando el primer estado de las cosas las palomas de piedra y las nubes de fuego los monumentos de carne y los incendios de hielo soy en esta ciudad de los que acudieron a su entierro cubro historia con mis ojos con los que quisiera ver la ciudad llena de truenos y cabalgatas que sobrevuelan nuestros techos comparsas llenas de verano muchachas colmadas de invierno así toda la noche, hasta que mi vista se apague o se moje con esta lluvia espesa que solo cae en mi ciudad natal. Luis Enrique Velasco

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años, que por mi condición de ciego ya no veo

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Elegía Me entrego a que no podre entregarte un abrazo completamente Si tengo suerte Alguna vez en sueños Tu reflejo en las cosas me produce más risas que lágrimas Aunque a veces dudo de eso

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Tu mirada me sigue en el aire Reflejándose en los bailes de brujas Elevándose un aquelarre Entre las calles que corrías como buscando una estrella Imagino bobo que si ríes rio Si lloro lloras Pero no se trata de eso Un cielo súbitamente borrado Me deja desolado frente a mi reflejo Pero da igual, cambio la lluvia de hoy por un abrazo Pienso en calaveras y flores, comida y tecnología Congelados en el aire La vida anestesia Es de esos silencios que te dejan vibrando la cabeza

No quiero recordarte Reinventarte Seria perderte Quiero sentirte y aunque llore o ría Sea libre de pedirte consejo

Sueño con un árbol de mariposas blancas Cierro los ojos y todas han volado Al despertar me creí triste Pero cada vez que veo una mariposa rio desde entonces Agustín Ramírez

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Verso de Cortázar que te gustaría: “No te voy a cansar con más poemas. Digamos que te dije nubes, tijeras, barriletes, lápices, y acaso alguna vez te sonreíste.”

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La nena se perdió en el silencio Se fue la inocencia derramando entre las penas, se fue cayendo bajo sus caderas, en sus muslos y en sus piernas, como una burbuja que se reventó entre el césped y la brea, fuertemente se golpeó la pobre nena en la tierra, Y la realidad azotaba, un vacío eterno de añoranza, un hoyo negro en sus abismales pupilas, Se levantaron los monstruos de su cabeza, despertando la rebosante melancolía, La nena ya no estaba, se perdió entre el silencio, entre murmullos sin gestos, y le hace falta en la hora dorada, Al sol que prepara, esconder los rayos, Que abrigaban su alma pasmada Se desvanece el candor de la nena, Como el humo entre aire de la noche llana Ya no está el sol que a la nena abrigaba Mi nena no está, no sé dónde ha ido la nena, ha cambiado sus penas por tristezas ajenas María Fernanda Granda

Camino Soleado Trinan pájaros ruedan, despejan tus pasos rocas sueltas y secas bajo el sol suspiras sudor salado, el ardor que tus ojos a pesar del dolor bajo el sol miran; caminas El tiempo se olvida los pasos, la vida Se irán Nicolás Navarrete

Un amor que ha tenido un amor viví jadeando para estallar mi corazón un amor llorando y atormentado mi alma llorando por ti un amor un amor viví matado por ti con tus palabras agudas que me apuñó abierta lloré sangre un amor Muerto Lucía De Bartolo

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Algo perdido

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Entierro Mientras te bajamos te obligamos a dejar a tu hija joven, a tu esposa sollozante, a su hermana alterada a tu padre congelado, a tu tío perdido a todos nosotros y por eso, lo siento Mientras te bajamos te dividiste nos regalaste tus mejores riesgos que volando, nos consolaban Mientras te bajamos Te cubrimos con flores blancas como tu cara exánime Todos llorando, lamentando tu muerte sin anuncio Pero yo sabía que bajo el ataúd, Estabas también, Estabas más triste que nosotros Ryan Calabrese

Minutos

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El hubiera no existe El tiempo se va para nunca volver El pasado tiene sed El presente está estancado Y el futuro es inventado Cada segundo suicido cadáveres del minuto que pasó No existe ni un reloj que dé vuelta hacia atrás Es tan fácil gastar “El instante en el que ya no estás Pero cómo cuesta luchar con las cosas que no vuelven más” El tiempo no perdona Se va sin ningún remordimiento Llevándose con él la esperanza de poder apreciar cada momento Las memorias no son más que colecciones de momentos que jamás regresarán El hubiera no existe El tiempo se va para nunca más volver Stephanie Camargo

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Corren hacia mí

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Dónde están mis modales Podría presentarme correctamente Pero no es necesario Me conocerás y pronto No cumplo hay poca verdad en los cuentos ¿Quieres saber cómo me veo? Mientras continúo, encuentra un espejo Un consejo No te asustes Ni desesperes La verdadera pregunta sería ¿De qué color será todo cuando venga por ti? ¿Qué estará diciendo el cielo? Siempre los encuentro A veces llego temprano Me apresuro Algunos se aferran más de lo esperado A veces la gente es hermosa me maravillo de ellos, confía en mí puedo ser alegre. hasta la muerte tiene corazón En el transcurso de los años He visto a tantos jóvenes correr hacia otros Pero no están corriendo hacia ellos corren hacia mí Karla Bayas

Elegía a los trasladados Arenas rugen y reflejan pisadas en cada mañana brasa candente, alma primera atraviesa la trampa de arena Los santos escapularios protegen, la serpiente emplumada vigila, temed ¡Oh víctimas de Alvarado!, al dios austral, más que al templo quemado En Chunchi, se elevan las voces perdidas, descendientes del nómada laborioso su final fue solo una huida, desesperado grito angustioso

La inocencia de Alepo sentado en una ambulancia el trauma y el desafecto sangre en abundancia el oído abombado por el eco Levanta el padre murallas «Yo soy el elegido» aprieta el camino y las llagas de un pueblo casi perdido El que no se esconde, valiente, el que camina, guerrero de por vida; construye ¡oh jabato! un puente; camina el nómada todavía Juan Sebastián Jaramillo

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Vuelven los hijos de la doctrina a retomar el tesoro robado vigilantes desde la colina asientan cabeza, Pacha, Huáscar, y el Inca

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Niño de ojos caramelo, paseando estarás en tranquilos campos de blancos tulipanes. Feliz de arrancar uno de ellos para ponerlo detrás de la oreja de la Luna. Caracolitas de brillantes perlas, como destellos de tu alma tan pura, vas corriendo en el ocaso pidiendo al Sol la última fotografía. ¡Ay! Niño caramelo, vas entregando más abrazos, aunque vestido de invisible, aunque ahora vas descalzo. Tu aroma dulce de sauce me abraza por la espalda. Se lamenta por haberse ido, se lamenta por el beso que no alcanza. Mi niño caramelo, Mi gran amor eterno. Los caballitos de mar te esperan, La Luna será tu refugio en el invierno. Yasuní Chiriboga

# 35 Lágrimas entre crisálidas muertas abrasan mi alma Cuerpos que flotan en vientos pesados (Nadie ya vuela) -nadie ya caeLluvias que cantan cansados ojos deseando vivir Corre el muñón de un aullido sobre campanas que llaman la ausencia Cae una voz diluida en piezas de nada Cae Mi voz diluida en piezas de nada Gabriel Navarrete #36

Sólo la noche y silencios atan mi vida a la tierra Polvos que cubren mis ojos quiebran cristales, no pueden llorar Grito Caigo Callo Quiero llorar Lloro una máscara de fieltro y ceniza y yace en olvidos el cuerpo de un ave que inmola en mi piel Gabriel Navarrete

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Uñas me rasgan los ojos Quiero llorarme, llorarme el Alma Muero en vacíos que secos gritan prestándome el llanto

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Personas carentes sin ojos caminan buscando sus almas hirientes las lĂĄgrimas cuentan reflejos de un cielo que muere en manos cansadas que lloran que sangran metales que abrasan las calles Parece que un beso muriera en el aire y un lirio que seco alumbrara la piel parece que rĂe la muerte llevando mi alas cosidas en el ocaso que esparce el silencio en mi voz Gabriel Navarrete

Pálido Tenue Leve caigo Voces que se eclipsan se Pierden en tus labios Muero en el reflejo de tu ausencia Cuervos, cerberos de mi llanto viven en busca de tus brazos Grito la esquirla de una voz que huye al canto del ocaso No quiero morir (Me aferro al paso de tu sombra que se escapa) Fotogramas en el humo de un beso que se deshace que quiso ser que si acaso renace en tu risa se apaga en mi silencio Te persigo despierto en un sueño que muere y que llora mi sangre y me aleja de ti Brasas clavadas a mis ojos me arrancan el alma Lágrimas marchitas que crepitan y desgajan mi piel Cae el peso de unas alas muertas sobre mis párpados (Se quiebra mi voz) Intento hablarte pero tu piel me evade y se fragmenta como el recuerdo y hiere como el olvido Vivo entre las migajas de un tiempo que se consume en el fuego que hiela mi pecho No quiero morir (Estoy cansado) Siento la nada susurrándome al oído El mundo se deshace en una pálida ceniza vaga que fuga de mis manos (Debo partir) Y un cigarro que se gasta diluye nuestros cuerpos desnudos que ya no se aman y que tal vez nunca se amaron. Gabriel Navarrete

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Un polvo que flota en el viento y la brisa golpea mi rostro sangrando mis lágrimas quemando mi risa de muerte y salitre El peso de ocasos recae en mis hombros cuerpos de abandono en calles vacías Aullidos suicidas caminan en sombras que escapan de estrellas que lloran un poco de luz Un ciego caballo blanco me empuja de su ala deshace mis llanto que evade la vida suspensa en mis ojos que opacan el cielo Mi sombra se ve a sí misma en un charco que sólo faroles callados alumbran El alma de un niño me grita rompiéndome el pecho purpúreas palomas que se hunden en tierra buscando el amor que se desangra en un vaso de vino Gabriel Navarrete

AĂşn no he podido salir del desierto mis manos se apagan en lodos profundos gritando un esbozo de vida Mi vida desgarra sus alas en gotas de un alma que baila en la muerte del ave sin ojos que llevo en los brazos Gabriel Navarrete

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Lirios de cristales lloran en mi pecho Hondas mariposas vuelan del vacío Lágrimas que escapan de una centella muerden el olvido que se consume Huellas en el techo de un cielo que se muere llevan a mi cuerpo un canto de luciérnagas lentas que en la noche sueñan y se apagan. Gabriel Navarrete En 5 minutos Y de pronto en ese momento de embriaguez Una embriaguez sórdida y efímera Espeluznante y sin gracia Él se había acercado a ella Robándole besos, no sentía nada No podía producir ese deseo Sin arder por dentro Él solo continuó asesinándole con sus besos Ella no quería abrir sus ojos por no ver el error a cometer En ese instante sintió un estremecimiento Sus dedos agarrándole de improviso Él se había puesto en poder de ella Continuó su agresiva pasión Solo deseaba que terminara pronto Ella no podía creer lo que estaba ocurriendo ¡Sentía morir! Ella se volteó, fue rápido, instantáneo Había acabado, pero no acabaría su tormento pronto Desesperación, ansiedad Impotencia, desilusión. Katherine Morales

Ese día soleado impaciente por verlo Esperándolo afuera de su despacho En una silla ofrecido por un señor Cargando sus ilusiones en una funda de regalo Sería el último día que lo vería Ella estaba nerviosa, lo vio salir Él no la vio, siguió caminando Ella tomó impulso y lo siguió Se acercó a él y de pronto un fuerte abrazo invadió su vida Caminaron al mismo ritmo Él agarró su mano y ella la retiró con sutileza Pensó que si seguía con sus gestos de amor Ella moriría porque era su último día Llegaron a un lugar mágico para los dos Ella entregó su regalo Él se regocijó de felicidad Y al final hablaron de un futuro entre los dos Él volvería pero no sabía si seguirían Eso la destrozó Se despidieron con un enorme beso Se corrieron las lágrimas de sus ojos cristalinos Ambos lloraron Murió lo que una vez nació entre los dos. Katherine Morales

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La última vez

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Eras papel y lápiz Mirando al cielo, celeste como tu caparazón de cáscara dura Junto a ti, en el humo de un cigarrillo extraño, de verde y cristal Sobre las piedras calentadas por el sol, soñando en las alturas Regresé la vista a ti y ya no estabas, te marchaste sin decir nada. Te quitaron del escondite en el que te guardaba ¿A qué manos habrás ido a parar? Tanto tiempo juntos, escuchando la misma canción Amando y sintiendo el mismo tono de azul. Tú, que entre mis átomos vibrabas, con alguna llamada de amistad o de amor En ti escribí mis pensamientos, mis cuentos y te fuiste con todo mi esfuerzo Eras papel y lápiz, eras conocimiento, dueño de mis secretos, único confidente de todo Eras son de imaginación, compositor de recuerdos, bailábamos paso a paso tiempo atrás Pero te has ido y yo sin ti, cómo reunirme con lo que una vez escribí Ahora tal vez te han deshecho, partido tu cuerpo en partes y te han dividido haciendo difícil volver a encontrarte. Irene Peralvo

Padre, antes de irme quiero encontrar la paz en cada respiro mi existencia se desgasta y me asusta ¿Por qué me has negado el dolor de ver morir a mis padres? no sé si sea tu culpa, mi humanidad hace pagar a justos por pecadores. He llorado porque quiero dormir, pero quiero hacerlo sabiendo que despertaré; sin poder evitarlo he soñado y me veo niño, y recuerdo al profesor que odiaba, al amigo que me prestó dinero y nunca le pagué, a los familiares que les mentí y robé, al animalito que no rescaté del frío, las ocasiones que no defendí al chico que molestaban, a la gente que no saludé pero que me causó curiosidad, a la soledad que odiaba pero que ocultaba trabajando, las veces que por vergüenza no dije lo que quería, los días sin dinero, sin comer, caminando veinte minutos a casa, las veces que por amor lloré en un rincón de mi cuarto, a las mujeres que ofendí, a las que amé, a las que me amaron y dejé. Veo la simplicidad de la vida pero Padre, a los cuarenta y cuatro no se sabe qué es la vida, quizá tengan razón; la edad me está llegando y me siento viejo comparto la culpa contigo… He imaginado el final, pero… ¿si no existes? si lo que vi en la madrugada era una alucinación o la desesperación de creer, quiero morir sabiendo la verdad, ya viví ignorándola. ojalá vivir en los demás como Oliverio: basta que alguien me piense para ser un recuerdo. Israel Antich

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Cáncer

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Como el arcoíris que se disuelve Como el rocío que al tacto desaparece Fulminan las memorias Se marchitan las begonias Solo quedan las viñetas Soplos de risas y viejas libretas Sonrisas extintas Olvidadas videocintas Guardadas están en mi baúl Pero a veces salen como arañas La nostalgia de mis entrañas Y no puedo evitar sentirme azul Cristina Gross

Amamos a quien podemos amar Y el resto Permanece como espectro Aún en el momento de la decadencia Nada podrá volver a descubrir la memoria Salvo nuestro propio curso solitario Sobre el paisaje sin dormir Incluso la lengua en mi boca Diluida por el adiós Brilla con el amor De dejar ir Hay luz de las estrellas A la deriva en el agua negra Hay piedras en el mar Que nadie ha visto Hay una orilla Y la gente está esperando Pero nada vuelve Porque se acabó Porque hay silencio en lugar de un nombre Cristina Gross

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Mis ausentes

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La muerte cotidiana Se acabó el libro se rompió el vidrio, se quemó la película, se cayeron las hojas, se callaron los gritos, se apagó la vela, se derritió el hielo, se fundió el motor, se rayó el disco, se esfumaron las cenizas, se disparó la bala, se cortaron los cables, se secó el agua, Se fue el amor. Se terminó el tiempo. Arigru

POEMAS COLECTIVOS.- puja pĂşblica, enredo discursivo, cosecha de palabras ofrecidas, barullo, atropello, guirigay capturado, un techo para el sentido, energĂa oral encauzada, des-dicha intencionada, ranchera destartalada que corre por la playa del lenguaje, empanada rellena a varias manos.

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Poemas colectivos

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Instrucciones para enamorar(nos) Abrimos la caja encontramos un lugar Hijueputa nos armamos de valor Distribuimos el futuro, desalojamamos los diminutos inquilinos violentamente/desesperadamente, endiabladamente, como si no hubiera maĂąana, impecablemente. Nos resignamos/ nos rendimos (casi), juntamos las piezas cobardes las aplanamos, apisonamos, sometemos para verlas todas murmullodehojas, suenamonedas, ruidovagos, medrosas, de elementos, fragmentos, astillas, partĂculas de migas Amasamos las piezas rugosas, sentimos cosquillas en las yemas de los dedos Pies de hormiga que nos caminan y se enredan en los vellos Apretamos los labios y los dientes sacamos la lengua de la pura ansiedad exploramos, incisivos

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¿Cuándo empezamos a armar? acomodamos, tendemos, azoramos, orientamos, Boca arriba Chasquea cada una de ellas, cruje cada una de ellas, restalla cada una ellas, claquea cada una de ellas, chisquea, frapea, ¿Cómo disponer de nuestros brazos y piernas para alcanzar todo el universo desparramado? Ubicamos el mostrario, enfrente Tenemos sed AGÜITA buscamos las esquinas/palpamos los bordes, definimos las fronteras, citamos los vértices, bordeamos el desorden preparamos los bordes agrupamos y buscamos tonos todo esto antes de empezar a ESC0210NRC2225

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Cuando llegué ya no estabas

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Ascensorista, arreglador de máquinas de escribir, telegrafista, operadores telefónicas, sombrereros, carteros a domicilio, lecheros, inquisidores, condotieros, damas de compañía, actores del cine mudo, juglares, lirireros, lireros, remendadoras, escribas, verdugos con capucha, mercuriadores, faraones, faroleros, aguateros, capariches Cuando llegué ya no estabas Tigre de Tasmania, rinoceronte negro, el dodo, arqueopterix, pterodáctilo, diplodoco, estagosauro, sapos de quito, mamutes, el solitario Jorge, neandertales, cromagnones, los amantes de sumpa, megalodón, tigre diente de sable, titanoboa, minotauro, centauro, cancerbero, unicornio, pegaso, medusa, Gorgona, sirenas, dragones, djinns, cíclopes, Cuando llegué ya no estabas Pedro picapiedra, Félix el gato, Tom y Jerry, el correcaminos, marino boy, catdog, coraje el perro cobarde, ed, Eddy, edd, abeja maya, caballeros del zodíaco, pícoro, las pistas de blue, el laboratorio de Dexter, rugrats, el chapulín colorado, el chavo, Cuando llegué ya no estabas El rey del pop, la experiencia Jimmy Hendrix, Janice, el rey lagarto, Elvis, Franksinatra, Freddy, Billie Holiday, Jotajota, Lennon, Cobain, Marley, Harrison, Segovia, los cuatro de Liverpool, los Jonasbros, Rbd, Kiruba, Queen, Nirvana, Jackson 5, Spicegirls, Cáspita Mierda, Carajo, Por quéeeeee Qué triste Chuuuuuuuuta Cuando llegué ya te habías ido Dali, Frida Kahlo, Van Gogh, Guayasamín, Picasso, el Bosco, Monet, Warhol, Munch, Rivera, el Greco, DaVinci, Caravaggio, Basquiat

Cuando llegué ya te habías ido Cicco bello, Tamagochi, Furby, Nintendo 64, Atari, Gameboy, Playstation 1, Kellypocket, Travelina, trompos, el sapo, tingar, Cuando llegué ya te habías ido, Martin, Lincoln, Malcolm x, el che, Marley, Mandela, Fidel, Lenin, Kennedy, Evita, Roldoooooos, el gran ausente, Ya nada Al fin Qué pena Ya era hora Otra vez Qué huevada

Hilda, que conocí en la cancha de básquet, Eric el rubio, Sebastián el psicópata, María Belén la fumadora, Santiago el del ukelele, Nicole voz de pito, Daniela que conocí en un tejado, Andrés el francés, Danilo el colombiano, Carlos de la playa, Ellier el vanidoso, Camilo el ciclista, María Clara la suicida, Por suerte Qué bueno Suerte bro Gracias a dios, vuelveeeeeee Te extraño Hagamos el remake Albacora Alcora No sé Seamos amigos Dónde estás Déjame en paz Que te vaya bien Huácala memoria

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Cuando llegué ya te marchaste

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DRAMATIS PERSONAE Lucía Di Bartolo Me llamo Lucía. No soy ninguna poeta pero estoy en esta clase para hacer algo nuevo. Con mis palabras quería expresarme en una forma completamente nueva. Soy de California y yo estudio la historia clásica y el español en mi universidad. ¡Una cosa rara sobre yo es que tengo dedos palmados! Sí, yo sé. Tan extraño. Yasuní Trinidad Autónoma. Entera. Pacha Mama. Gratitud. Amor. Paz. Respeto. Desprendimiento. Apreciación. Ser. Cristina Gross: “Cristina, la descreída, había perdido la confianza en las demás deidades, por lo que siempre se hallaba bailando en un campo de rosas, pero su propósito de incitar a la duda era innato.” – S.R Irene Peralvo Nacida en Quito-Ecuador, el 22 de febrero de 1993. De madre mexicana-ecuatoriana, Verónica Naranjo y de padre ecuatoriano Rodrigo Peralvo. Vivió y creció en Cumbaya-Quito, donde asistió a primaria y secundaria en el Colegio El Sauce, al igual que su única hermana Marcela Peralvo, cinco años mayor. Al graduarse viajo a New Jersey donde vivió un año y al regresar a su país entro a la universidad San Francisco de Quito a la carrera de Artes Liberales donde se especializo en Filosofía. Michelle Custode Con su epíteto ¨el diablo¨ nació el 14 de Julio de 1993 y tiene 23 años. Ella es descomplicada, bromista y llena de excesos, amante del arte en cualquier expresión y le gusta aventurarse a nuevas experiencias. Su estilo es buscar desmembrar la sutileza de la vida con otra doctrina.

Israel Antich Israel is real, en el riego de tus prejuicios imagina la tumba de un sin nombre cuya cruz al borde de la carretera esté a vista de judíos errantes, mi yo es esa cruz adornando el paisaje. “Como hay lugares en el cuerpo que no se puede rascar uno mismo, hay lugares del alma que solo puede acariciar otro”. Gabriel Alejandro Navarrete Tipán Nace el 16 de Marzo 1995 en la ciudad de Sangolquí (Ecuador). Actualmente estudia Artes Liberales en la Universidad San Francisco de Quito. Luis Enrique Velasco Soy Prestidigitador, amante de los trenes, escuchador, escribidor, y vividor de vidas, aprendedor y todo.

Agustín Ramírez Nació el 20 de noviembre de 1996. Escribía sin saber qué era lo que escribía hasta leer a Rimbaud y darse cuenta que era poesía. Alvaro Leal Soy Álvaro Leal, me gustan los videojuegos y caminar, una buena taza de café y compañía bastan, la soledad es una de ellas. Estudio ingeniería y me encanta la poesía, leerla en voz alta es genial. Soy misionero, me gusta ayudar y hacer ver que no todas las personas destruyen lo que tocan. Esteban López Mi vida es tan aburrida y normal como la suya, para que le cuento si se ha de aburrir, aún no cambio al mundo, si escribo ahora, no sería una biografía de la que me sienta orgulloso (al señor lector). Esteban López Castelo.

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Ariela Grubel Nació en 1996 en Carolina del Sur, vivió toda su vida en Ecuador. Estudió en el Colegio Einstein y se graduó en 2014. Vivió un año en Israel y actualmente es estudiante de Publicidad en la USFQ.

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Juan Sebastián Ruales El que honra, el que sirve, el que elogia, el que ayuda, el amigo de Dios, el mesero. Soy un estudiante de Artes contemporáneas, tengo 19 años, contemplo un camino desconocido y conozco lo más mínimo del mundo. Quiero ser trovador, dar color a tu gris realidad, regalarte sueños y permitirte volar. Quiero esculpir almas y ser conductor de sensaciones a tu piel. Ahora soy vacío, listo para un trasvase de agua. Karla Bayas La fuerte, vive en la realidad de los sueños. María Fernanda Granda La de los rayos de sol.

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Nicolás Navarrete Soy Nicolás, artista y estudiante. Busco siempre plasmar el equilibro y la armonía en mis obras. Par mes qua ne sompra ligra hecirlo (Por más que nunca sea tan sencillo). Ryan Calabrese Me llamo Ryan. Soy estadounidense, y estudio lenguas. Con todas las palabras que yo conozco, intento expresar y externalizar mis pensamientos y sentimientos internos a través de la poesía. En los Estados Unidos, soy el presidente del club de yoga, y soy muy activo en muchas otras cosas también. Quiero ser profesor de idiomas, como el español, el inglés, el alemán y también de la literatura. Un hecho raro es que no tengo vista perfecta, sino vista 21/20 que es más que perfecto, y por eso sufro de migrañas. Stephanie Camargo Soy una gringa mexicana que solo viene de paso a Quito. Katherine Ramos Nacida en Quito, 1996. Epíteto: la diferente. Poco expresiva, le encanta vivir fuera de su realidad, amante de lo friki y siempre va sonriendo ante todo y con todos.

ÍNDICE Agradicatorias .....................................................................................5 Introducción .......................................................................................7 Ecoemas .............................................................................................12 Coronarias ..........................................................................................49 Heterotopías .......................................................................................83 Elegías ................................................................................................115 Poemas colectivos ...........................................................................145 Dramatis Personae .......................................................................150