Escuela N° T-004 Normal Superior “General Toribio de Luzuriaga.”
Conferencia: Introducción a la ética en Kant. Martinez, Juan Pablo.
Dirigida por Carlos Di Silvestri. 1
Introducción La situación social que vivimos hoy en nuestra Institución, hace pensar en la necesidad de rescatar el fundamento de la acción moral en el actuar diario de cada uno de nosotros, para poder mejorar nuestras relaciones con los otros, nuestras relaciones sociales. Y más específicamente, poder mejorar las relaciones hacia dentro de la institución en la cual hoy nos encontramos. Por esto es que el tema de ésta conferencia es la ética y más aún la ciudadanía, es decir, lo que sea ha entendido en una época como la educación cívica, porque las buenas relaciones llevan al buen vivir y sólo desde ahí, se abre la posibilidad al hombre para conocer y trascender en el desarrollo de una felicidad posible. Para ello es necesaria la fundamentación del actuar desde el deber, porque si cada uno hace lo que debe, la Institución funciona correctamente y tiende al bien común. Además, sólo desde el deber se hace posible el derecho, cumplo con mi deber, tengo derecho a exigir lo que me corresponde. Para referirnos al tema de una ética fundamentada en el deber, nos remitiremos a la ética de Kant. Porque en ella se encuentra una fundamentación del actuar centrado en el deber. Ya que todo acto del hombre en relación a la vida en común, conlleva una ética, es decir, un actuar determinado.
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Desarrollo. Immanuel Kant, desde Königsberg1 lee y debate con toda la filosofía social y política del momento. Es el hombre moderno que piensa la realidad y busca la solución a un problema determinado, el orden político. Sí, qué pasa con este hombre que debe aceptar su mayoría de edad y hacerse cargo de su propia voluntad. El hombre que ha estado bajo la tutela de Dios, debe hacerse cargo de sí mismo. La situación feudal y monárquica en la que se encuentra Europa (1788) está cambiando dentro de los estados y entre éstos. Kant ve al hombre en un mundo moderno en el que puede ser libre. Donde otras formas de organización política son posibles. En el que la relación entre los pueblos ha cambiado, porque el hombre ha cambiado. De esta manera vemos con Kant, que el hombre ya no vive en el feudalismo o no debe vivir en él2, sino que la libertad de pensamiento, de expresión y de elección de vida, es posible. La libertad es el meollo de la cuestión. Kant encuentra en la libertad, como una cuarta idea metafísica3, la regla para el actuar humano, para el orden político. Qué debo hacer, soy libre pero para actuar en relación a lo que la ley moral prescribe como el deber. La Crítica de la razón práctica4 parte de un hecho fundamental, la ley moral, de la cual tenemos conciencia a priori, sin necesidad alguna de demostración. ¿Pero basta la razón para determinar la voluntad, para fundamentar la moral? Una definición, cuatro teoremas y una ley fundamental, sintetizan el contenido de la Crítica de la razón práctica. Definición: 1
Königsberg fue la capital de Prusia Oriental desde la Baja Edad Media hasta 1945, cuando fue tomada por los soviéticos y renombrada a Kaliningrado. Fue una importante ciudad portuaria situada en un enclave en la desembocadura del río Pregel, que desemboca en la laguna del Vístula, comunicado a su vez con el mar Báltico por el estrecho de Baltiysk. Perteneció a Prusia, Alemania y es parte de Rusia hoy en día. 2
Prusia es monárquica, la gobierna un déspota ilustrado, Federico II, quien es ilustrado, porque apoya el desarrollo de la libertad de pensamiento. 3
Kant, reflexiona acerca del estado de la ciencia en su época y nos muestra que, la física y la matemática son posibles como ciencia. Pero no así la metafísica, porque tiene como objeto de conocimiento a noúmenos y no fenómenos posibles de experiencia. En cambio de la libertad tengo la experiencia, aunque no la pueda conocer científicamente. 4
KANT, Immanuel. Crítica de la razón práctica. Salamanca, Ediciones Sígueme, 1998. Traducción de MIÑANA y VILLAGRASA y GARCIA MORENTE.
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Principios prácticos son proposiciones que encierran una determinación universal de la voluntad, a cuya determinación se subordinan diversas reglas prácticas. Son subjetivos o máximas, cuando la condición es considerada por el sujeto como valedera sólo para su voluntad; son, en cambio, objetivos o leyes prácticas cuando la condición es conocida como objetiva, es decir, valedera para la voluntad de todo ser racional.5 La ley moral es ella se le subordinan objetivas valen para subjetivas o máximas,
un principio práctico, tiene carácter universal. A diversas reglas prácticas. Las reglas prácticas son todo ser racional. Por el contrario, las reglas sólo valen para un individuo en particular.
Teorema I. La ley moral es un principio práctico (objetivo) universal, en su formulación o juicio no debe tener ningún objeto o materia o circunstancia que determine condicione la decisión ética. Porque al ser todos los objetos empíricos: no pueden proporcionar ley práctica alguna. Teorema II. Porque si se coloca un principio empírico como fundamento y determinación de los actos, este principio va a ser diferente para cada sujeto o cultura. Todos los principios empíricos responden, pertenecen al principio universal del amor a sí mismo o felicidad propia. 6 Ejemplos que resume Kant. Subjetivos: exteriores: la educación, según Montaigne; la constitución civil, según Mandeville. Interiores: Hutchenson.
el
sentimiento
físico,
Epicuro,
el
sentimiento
moral,
Objetivos: interior: la perfección, según Wolff y los estoicos. Exterior: la voluntad divina, Crusius y otros moralistas teólogos.7 Todos estos principios materiales responden en realidad al principio de la felicidad. Entonces, depende de lo que se considere felicidad. 5
KANT, Immanuel. Crítica de la razón práctica. Salamanca, Ediciones Sígueme, 1998. Traducción de MIÑANA y VILLAGRASA y GARCIA MORENTE. pág.35. 6
Ibidem. Pag 38. Parágrafo 3. Teorema II. Todos los principios prácticos materiales son, como tales, sin excepción, de una y la misma clase, y pertenecen al principio universal del amor a sí mismo o felicidad propia.
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KANT, Immanuel. Crítica de la razón práctica. Salamanca, Ediciones Sígueme, 1998. Traducción de MIÑANA y VILLAGRASA y GARCIA MORENTE. Pag. 60. Los fundamentos de determinación prácticos materiales, en el principio de la moralidad.
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Teorema III. En cambio, lo que propone Kant es que la acción moral o deliberación ética, debe ser fundamentada formalmente; según la forma, para que pueda ser universal. El juicio ético que determina la acción moral no debe estar condicionado por ninguna materia, objeto o circunstancia. Para que pueda servir para todo ser racional, independientemente de su cultura.8 P La voluntad, la determinación del juicio de mi acción moral, debe ser formal, ya que de esta manera la decisión es libre, sin el condicionamiento externo, se da su propia ley. La determinación de la voluntad elije libremente como actuar, y esta elección coincide con la ley moral, porque la ley moral es universal e impera en mí, en mi conciencia. Entonces, obedecer a la ley y elegir libremente coinciden. Soy libre para determinar mis actos racionalmente desde mi propia conciencia, de forma autónoma. Por lo tanto: Parágrafo 8. Teorema IV La autonomía de la voluntad es el único principio de todas las leyes morales y de los deberes conformes a ellas; … así, pues, la ley moral no expresa nada más que la autonomía de la razón pura práctica, es decir, de la libertad, y ésta es incluso la condición formal de todas las máximas bajo cuya condición solamente pueden éstas coincidir con la ley práctica suprema.9 Para que nuestras máximas subjetivas puedan transformarse en objetivas, coincidir con la ley práctica. Transformase en principios prácticos, debemos siempre obrar de tal forma que nuestro acto pueda valer siempre, al mismo tiempo, como principio de una legislación universal. Pueda ser repetido siempre, en todo tiempo y lugar, siendo de esta manera universal. Parágrafo 7. Ley fundamental de la razón pura práctica. Obra de tal modo que la máxima de tu voluntad pueda valer siempre, al mismo tiempo, como principio de una legislación universal.10
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KANT, Immanuel. Crítica de la razón práctica. Salamanca, Ediciones Sígueme, 1998. Traducción de MIÑANA y VILLAGRASA y GARCIA MORENTE. Pag.44. Parágrafo 4. Teorema III. Si un ser racional debe pensar sus máximas como leyes prácticas universales, puede sólo pensarlas como principios tales que contengan el fundamento de determinación de la voluntad, no según la materia, sino sólo según la forma.
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Ibidem. Pag. 52-3.
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Ibidem. Pag. 49.
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La ley práctica debe ser objetiva, necesaria y universal para que pueda valer para todo ser racional. Entonces, el juicio que determine mi actuar no debe contener ninguna materia como base, es decir, no debe estar determinada por la situación contextual, por la circunstancia. Porque puede valer para mí en este caso determinado, pero no para todos en todo caso. Recordando lo antes dicho, todos los principios prácticos materiales responden al principio universal del amor a sí mismo o felicidad propia. Por lo tanto no pueden valer para todos. Es por ello que para obtener un principio universal su determinación, su contenido, debe ser formal. Pura forma desprovista de materia, desprovista de la circunstancia en que me encuentro. Sólo desde la autonomía de la voluntad puede realizarse el acuerdo con la ley moral, pues, todo principio que venga desde fuera de mi propia conciencia, principio heterónomo, debe ser hecho consciente por mí para que sea elegido libremente, autónomamente; por sí mismo y no por otra cosa o dependiendo de la circunstancia. Consecuencia: el hombre puede racionalmente guiarse en sus acciones morales porque: La razón pura es por sí sola práctica y da (al hombre) una ley universal que nosotros denominamos la ley moral.11 Observación La ley moral es, por consiguiente, en él, un imperativo que manda categóricamente, porque la ley es incondicionada; la relación de una voluntad semejante con esa ley es de dependencia bajo el nombre de obligación, que significa una compulsión aun cuando sólo ejercitada por la mera razón y su ley objetiva, hacia una acción, llamada por eso deber….12 Es un imperativo, porque manda en mí, tiene el carácter de una orden. Categórica, porque es universal, es decir racional, para todo hombre. Es una ley incondicionada porque es libre de toda materialidad que la condicione. De esta manera Kant encuentra un fundamento universal para determinar toda acción, que es ahora de acuerdo al deber. Deber racional, que el hombre se da a sí mismo. El hombre puede elegir libremente qué debe hacer, no sólo en el orden individual, sino también en el orden social, en la relación con los otros, en la política. 11
KANT, Immanuel. Crítica de la razón práctica. Salamanca, Ediciones Sígueme, 1998. Traducción de MIÑANA y VILLAGRASA y GARCIA MORENTE. Pag. 50. 12
Ibidem. Pag. 51.
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Desde el deber se da el fundamento al derecho y de ĂŠsta manera la posibilidad de una convivencia pacĂfica.
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Conclusión Hoy en día noviembre 2011, un año en el que hemos elegido al poder ejecutivo y hemos elegido a los consejeros para el consejo académico. Un año electoral, en el que hemos ejercido nuestra libertad de elección. Donde votamos a nuestros representantes. Se manifiesta la modernidad en la que estamos viviendo y la posibilidad de reflexionar acerca de nuestro actuar diario. Lo que veo es falta de compromiso social, de ciudadanía, soberanía y respeto hacia las jerarquías por parte de la mayoría de los alumnos de la institución. Toda generalización es mala, porque es una falacia. Pero a lo que me refiero es a que las condiciones que tienen los alumnos para poder estudiar son muy buenas. Por ejemplo: sólo se paga una cooperadora al año, si se puede. Tienen servicio de guardería y se les justifica la falta por trabajo. El servicio de bedelía, siempre dispuesto para dar la mano a los alumnos y profesores. Entonces se siente la exigencia de que los profesores no falten a clase, lo cual es justo y correcto, pero no sólo los profesores faltan sino también los alumnos. Y la mayoría no demuestra el compromiso necesario para con el estudio y el cursado. Cada vez resultados.
se
exige
menos
e
igualmente
no
se
obtienen
buenos
Es por esto que pretendo que reflexionemos acerca de lo que propone Kant. Así del deber surgirá el derecho. Además, siempre especie como humano:
tener
en
cuenta
al
otro
porque
si
pienso
como
Si cada hombre es un legislador universal, nunca podrá ser concebido como medio para un supuesto fin de la ley, y la humanidad el reino de los fines.13 Se trata de encontrar el fundamento desde el cual se puede lograr una convivencia pacífica, donde los problemas se resuelvan a través del diálogo. Donde el hombre libremente cumpla con su deber y el derecho sea posible hacia dentro y a fuera de los estados. En este caso hacia dentro y fuera de la institución. Porque la existencia de la ley permite la libertad. Por un lado, la libertad negativa, que consiste en que la voluntad no está condicionada materialmente, ya que el imperativo categórico es formal. Por otro lado, 13
Fundamentación de la Metafísica de las costumbres. 1785. En: TEJEDOR CAMPOMANES, Cesar. Historia de la filosofía, en su marco cultural. Madrid, Editorial SM, 1998. Pág. 306.
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una voluntad positiva, que consiste en la autonomía de la voluntad, entonces la ley moral se elige libremente, porque la voluntad es ley para sí misma. Entonces la libertad y la voluntad se identifican. Es la ley la que determina lo que es bueno. Dándonos un parámetro libre para decidirnos cómo actuar y de esta forma la posibilidad de una ética moderna, para el hombre moderno para que pueda regirse, gobernarse a sí mismo. Porque: El problema mayor del género humano, a cuya solución le impulsa la Naturaleza, es la consecución de una sociedad civil que administre el derecho en general.14
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Idea de una historia universal en sentido cosmopolita. Quinto principio. 1784. En: TEJEDOR CAMPOMANES, Cesar. Historia de la filosofía, en su marco cultural. Madrid, Editorial SM, 1998. Pag. 311.
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