Mide tus riquezas

Por: Patricia Escobedo

Así como de vez en cuando nos sentamos a hacer nuestras cuentas, a organizar nuestras facturas, a definir por escrito nuestros gastos mensuales, a verificar los ingresos y egresos de los gastos familiares; de la misma manera y con un mayor énfasis, te invito a que midas tus riquezas personales, así sin más ni más, y seguro te vas a sorprender.

¿A qué me refiero con esto de medir tus riquezas?

A algo mucho muy simple; a hacer un ejercicio que rara vez hacemos pues damos por sentado que todo está ahí siempre. Pero qué tal si comenzamos con algo esencial, la primer riqueza que tienes y que te reconforta cada día es la vida, abrir los ojos y respirar sin dificultad, ponerte de pie y caminar, recorrer en un momento con tus meditaciones y oraciones en un mapa mental a todos los que amas y desearles algo bueno para el día; dar las gracias por lo que hoy tienes, sentir correr el agua por tu cuerpo al bañarte; desayunar y sentir la dicha de un buen café o un té llenando tu día de excelente humor y energía.

A esas riquezas me refiero, pequeños instantes que crean maravillosos momentos

invaluables y únicos y que sólo nos pertenecen a nosotros, no se pueden transferir, pero si se pueden potenciar y se viven al máximo.

Otra riqueza de vida invaluable sin duda la conforma tu familia, a la que das por hecho pero que vive a tu lado día con día; esas personas fantásticas sí que son ¡una riqueza!

Valóralas, cuídalas, conócelas, quiérelas, protégelas y sobre todo disfrútalas pues la vida y las circunstancias pasan muy pronto.

Del mismo modo, otra de tus riquezas son tus amigos, esa familia ampliada que tú eliges, y que sólo están ahí para ti, que se guían por el cariño y la magia del Amor y que sólo están por elección propia, para quererse, apoyarse y contenerse cuando así sea necesario.

Y como todas esas riquezas, puedo enumerar una lista infinita; tu trabajo, tu casa, tu departamento, tu vocación, tu pasión, tu talento, tus sueños tanto los alcanzados como los que están por ser logrados o en el tintero, tus gustos, tus comidas favoritas, tus tiempos libres, tu momentito solo para ti en el que te bebes un buen café o te comes un chocolatito leyendo un libro que no habías podido leer tiempo atrás; tu momento para cocinar algo que te gusta o algo que acabas de ver en un tutorial y qué seguro te va a quedar delicioso.

Riquezas, pequeñas riquezas, que van generando una sólida abundancia.

Te invito a que te tomes un momento y consolides esta reflexión; créeme, no te vas a arrepentir.

Por favor, ¡Mide tus riquezas!

Profra. Patricia Escobedo Guzmán Correo Electrónico: paty_escobedo@hotmail.com Facebook: El espacio de Miss Paty Twiter e Instagram: @paty_escobedo