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Sumario Actualidad Entrevista a Ana R. Vivo Entrevista a José de la Rosa Entrevista a Javier Romero Fic-Entrevista de Kris Pearson Una entrevista al otro lado Series y Sagas: Highland Pleasures Dioses del Olimpo Espacio JR Una mirada al pasado Autora ¿en el olvido?

La cápsula del tiempo Amores reales Ocio y Placer Horóscopos Y otros más…

En este número colaboran Ana Sarria Ana M. Benítez Bela Marbel Eva Rubio Laura Caballero (Incorporación) Loli Díaz Merche Diolch Mónica Liceras Nazareth Vargas Lupión Olivia Monterrey (Incorporación) Paty C. Marín Raquel Pérez Rocío Muñoz Tamara Arteaga Violeta Lago Yuliss M. Priego Y, colaboración especial de: Pilar Cabero Marisa Grey Eva Olaya Álex

Editorial Queridas lectoras: Nos es grato presentarles el nuevo número de nuestra revista, un número muy veraniego para este 2014.

En este número que hoy os traemos tenemos entrevistas de lo más jugosas. Conoceremos más de un secreto de Ana R. Vivo, flamante Premio Terciopelo y descubrimos las inquietudes de los caballeros de la romántica española. Tenemos con nosotras a José de la Rosa entrevistado por Monica Liceras y Javier Romero que viene acompañado de una nueva colaboradora, Olivia Monterrey. Ambos nos hablan de sus nuevas novelas y de la visión de los chicos en la romántica.

Yuliss ha viajado en esta ocasión hasta Nueva Zelanda para descubrirnos a Kris Pearson y nos caza la serie de «Las Crónicas de Nick». ¡A ver para cuando en España!

Las chicas de Juvenil Romántica nos hacen un recorrido por el Dating Games junto a dos expertas en el tema. ¡No te pierdas su artículo!

Raquel Pérez nos habla en la sección de Ilustradores de alguien muy conocido por sus portadas pero no tanto por su nombre. Averigua de quién se trata.

Endiosamos a Styxx, ¿quieres saber por qué? Lee nuestra sección Dioses del Olimpo.

Merche Diolch nos habla en la suya de una serie que ha revolucionado la romántica histórica. ¡Descubre a los MacKenzies de Ashley y viaja a Escocia.

Este bimestre viajamos a San Sebastián de la mano de Pilar Cabero y su protagonista de «Algo inesperado».

Desde el «olvido» recordamos a las editoriales a Jo Goodman. Y, como siempre, secciones de siempre.

Críticas, relatos, autoras que entran a formar parte de del mundo literario y muchas y jugosas novedades.

Solo nos queda desearos… ¡Feliz lectura!

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ENTREVISTA

Ana R. Vivo Ganadora del VIII Premio Terciopelo, la edición de 2013, esta albaceteña nos confiesa que nunca, jamás, tira la toalla”

ENTREVISTA DE LOLI DÍAZ

Ana R. Vivo reside en Albacete, junto a su marido y sus dos hijos.

Trabaja en el ámbito de la sanidad.

Comenzó a escribir por diversión y hace cuatro años decidió tomárselo en serio. Hasta la fecha ha publicado varias novelas de diversos subgéneros románticos.

Una psiquiatra cuya vida no ha sido fácil, un policía que no es capaz de dormir una noche entera sin tener pesadillas y dos hermanos que intentarán cada uno por su lado hacerle ver a tu protagonista que sus soluciones son las adecuadas a todos sus problemas y, en medio de todo esto, una cabaña en mitad de un bosque que va a ser un punto de inflexión para el desarrollo de dos historias que convergen en una. ¡Madre del cordero, Ana, vaya planteamiento que hiciste sobre el papel! Pero antes de meternos en más honduras la primera pregunta que te vamos a hacer es obligada.

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―Muchas autoras solo se presentan una única vez a un determinado premio y si no consiguen el galardón desisten para los restos. Nosotras sabemos, sin embargo, y de muy buena tinta además, que tú has sido un poco Don «Erre que erre» y que no has parado hasta lograrlo. ¿Cuántas veces has presentado manuscritos en el Terciopelo? ¿Cuántas veces han ido tus cántaros a la fuente hasta que por fin lograste el tan ansiado reconocimiento? ―jajajaja. Pues sí, soy un poquito Don «Erre que erre» y como bien dices, y bien sabes, esta es la tercera vez que presento un manuscrito al Premio Terciopelo, aunque es la primera vez que envío uno que tenía guardado desde hacía un tiempo. ―Albaceteña de nacimiento, albaceteña de corazón e imaginamos que albaceteña por los cuatro costados y no la única autora nacida en estas tierras que logra el premio. Has sido la tercera en lograrlo, anteriormente ya lo consiguieron Mar Carrión y Menchu Garcerán con Bajo el cielo de Montana y La Fórmula Deseada respectivamente. ¿Qué tiene Albacete para haber parido a tres mujeres que, en poco más de cinco años se han hecho con tres de los premios que se han entregado? ―Dicen que es el agua, y terminaré por creerlo. ―¿Qué hay de Ana R. Vivo en sus personajes y qué hay de sus personajes en Ana R. vivo? ―De Ana R. Vivo en sus personajes reconozco la pasión que pone en sus objetivos y la forma de lograrlos aunque le cueste media vida, mis personajes son bastante

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cabezones. Y de sus personajes en Ana R. Vivo he llegado a reconocer algunas virtudes y defectos a lo largo de las novelas que han surgido espontáneamente, sin darme cuenta. Lo cual quiere decir que aunque los personajes son ficticios, siempre llevan algo mío y me sorprenden cada día más.

Como buenos hijos que son. ―Tenemos una pregunta para ti que si no la hacemos literalmente reventamos. No mires atrás, Niebla en el pasado y ahora El reino de Levana. Las tres novelas tienen algo en común pese a que cada una de ellas es bien diferente a las demás. Su nexo en común es la psiquiatría. El componente psíquico tiene mucho peso en tus historias, ¿por qué? ¿Qué te atrae tanto de esta profesión para que sea un elemento con tanto peso en tus novelas? ―Bueno, supongo que es deformación profesional porque llevo muchos años trabajando con psiquiatras en centros especiales , hablando con médicos de psiquiatría —mi marido es médico y también estudia mucho esta materia— y es un mundo que me apasiona. ―Eres autora de suspense por encima de otros géneros románticos pero sinceramente creemos que con esta novela has arriesgado mucho más de lo que jamás habríamos pensado. ¿Cómo es que te decidiste a acoplar en la trama el componente paranormal? ¿No pensaste en ningún momento que, en los tiempos que corre y que lo que impera es la erótica podría ser un gran hándicap? ―Reconozco que he arriesgado mucho, pero El reino de Levana es una novela que

escribí con mucho esfuerzo e ilusión, y aunque de momento impere la moda de la erótica, decidí apostar por la romántica paranormal, aunque yo la llamaría fantasía, que también rezuma mucho erotismo en sus páginas. Sus personajes aman, se enamoran y viven su pasión como en cualquier otra historia.

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Lo importante no es la moda, sino que el argumento te llegue al corazón y te haga vibrar y espero haberlo conseguido, si además, consigue trasladarte a un mundo de magia y hacerte soñar, mucho mejor.

―Hemos tenido el placer de leer El reino de Levana antes de hacerte esta entrevista y hemos de decirte que la parte de leyenda/realidad al otro lado de ese fino velo que separa el mundo nuestro del mundo de la diosa es increíblemente atractiva, ¿qué fue lo que hizo de detonante para introducir este componente paranormal en la historia o fue acaso al revés, la parte paranormal la que hace de vértice para todo el desarrollo posterior? ―El detonante fue un argumento inicial que escribí hace años, tenía toques paranormales al principio pero luego toda la historia transcurría en la actualidad. Más tarde, empecé a investigar distintas mitologías y qué ocurriría si las mezclaba e inventaba yo unos cuantos ingredientes, comencé a

imaginar un mundo paralelo, hechizos y magia, hordas y monstruos, y mi mente comenzó a bullir de tal forma que hasta que no terminé de escribirla no cesé en mi empeño. ―¿Fue difícil casar los componentes paranormales con los puramente reales? ¿Qué personaje de esta historia fue el que más te costó definir? ¿Alguno se te reveló y quiso tirar por algún camino que no tenías previsto que siguiera? ―No fue difícil casar los componentes una vez que tenía la historia clara en mi cabeza. Sí, hubo algunos que me costó meter en cintura: Agnes Semsere; esa mujer parecía cobrar vida porque me parecía tan mala y tan real que podría encontrármela en cualquier lugar. También me costó definir a Levana, una madre que ante todo es diosa y antepone su raza y su reino a sus hijos, perdiéndolos por el camino; pero en un atisbo de humanidad, les da una segunda oportunidad, aunque nunca lo reconocerá abiertamente. Y Bueno, Noah, esa guerrera tiene algo especial, es muy desafiante y quiere ser como cualquier otro soldado. La verdad es que hay muchos personajes y cada uno tiene una personalidad muy definida. ―¿Puedes contarnos alguna anécdota acontecida mientras escribías esta historia? ―Tengo muchas anécdotas pero una de ellas es que en la historia inicial, la primera que escribí hace años, que no se parecía en nada a esta, Agnes era una bruja del siglo XVII que regresaba al mundo terrenal y los protagonistas terminaban hirviéndola al baño maría para acabar con ella. Todavía me río con amigas cuando recordamos

aquel capitulo y pensamos que qué habría bebido para escribir semejante escena, jajajaja ―¿Con qué te enfrentas a la hora de ponerte ante una página en blanco? ¿De dónde sacas el tiempo para documentarte porque sabemos que eres una persona muy ocupada que apenas tienes tiempo de respirar y mucho menos para hacer ciertos tipos de malabarismos con el mismo. ―No suelo enfrentarme a una página en blanco porque en cuanto tengo un segundo libre me pongo a pensar en la próxima escena y siempre, con mi libreta en la mano, la apunto; incluso en un folio, en una servilleta… así al llegar al documento y ponerme a escribir solo tengo que desarrollarla.

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Si por cualquier cosa no surge la inspiración, cierro el ordenador y lo dejo para otro rato, no me obligo a buscar la escena si no surge. No la obligo.

Tiempo saco hasta de debajo de las piedras, pero cuando tienes una pasión, siempre sacas un minuto para desarrollarla. Si pasan varios días sin que pueda escribir, digo que tengo «mono» y, es cierto, me falta esa sensación de comunicarme con mis personajes y saber cómo les va. ―Lo de malabarismos es algo que hemos utilizado con toda la intención porque tu anterior novela... que por cierto sabemos que también optó al Premio Terciopelo, Oscura fascinación, tiene mucho que ver con ese inigualable arte

pues está ambientada gran parte en el mundo del circo. ¿Por qué esos cambios de registro de una novela a otra? ¿Es quizás porque no deseas que se te encasille en ningún género en concreto? ―No deseo que se me encasille, por supuesto, pero sobre todo lo hago porque me gusta ir de una profesión a otra, de un ambiente a otro y así dar frescura a mis personajes. Más que temer que se me encasille, no quiero que mis personajes se parezcan, ni que estén todos cortados por el mismo patrón. ―De todas tus novelas, ¿cuál es de la que más satisfecha te sientes? ¿Alguna a la que tengas más cariño que a otra? ¿Es la primera la que más cuesta parir o es la siguiente la que supone mayor reto? ―A estas alturas ya no sabría decirte. Cuando tienes un par de novelas sabes cuál es tu preferida pero con tantas ya a las espaldas me pasa como con los hijos, que cada uno tiene sus cosas buenas y cada uno me da alegrías a su manera. Niebla en el pasado siempre ha sido «diferente» pero El reino de Levana es especial porque la escribí con mucho cariño y sin pretensión de publicarla, solo por el placer de hacer algo nuevo, y mira… ¡que sorpresa! Y Oscura fascinación es la primera novela de una saga que me tiene enamorada y que ya estoy terminando la tercera historia de los hermanos Barryomre. ¿Cómo escoger? ―Imaginamos que estás inmersa en un nuevo proyecto, ¿nos adelantas algo? ―Claro. En septiembre saldrá la segunda novela de la saga Barrymore, Sublime tentación y estoy terminando la tercera que se llama Ciega obsesión, ambas son de

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suspense romántico y transcurren en Nueva York y en Chicago. Y por otro lado, quiero empezar después del verano, un nuevo experimento, una historia actual que transcurra en el estado de Luisiana, sin suspense, sin polis, ni malos, ni asesinos psicópatas, solo la historia de amor de dos personas que se encuentran en una situación un poco comprometida. Y una de ella es un secundario de No mires atrás que no aparece físicamente, pero me apetece recuperar a la familia de Hugh Malloy. Aunque al final ya veremos lo que sale, que ellos mandan…

Muchas gracias por respondernos a estas preguntas, por abrirnos las puertas de tu corazón a las responsables de esta publicación y a nuestras lectoras y, como última pregunta vamos a ponerte en un compromiso. ¿Qué te aportan tus compañeras de profesión y qué significan para ti en tu día a día mujeres como Mar, Menchu o Chus (por nombrar a unas pocas) con las que sabemos que tienes un feeling muy especial? ―De compromiso nada, me encanta hablar de mis amigas jajaja. Mar Carrión y Menchu

Garcerán me aportan su cercanía —por vivir en la misma ciudad— y junto a Chus Nevado me dan mucha amistad, incondicional, porque me lo han demostrado muchas veces a lo largo de los años. También su experiencia profesional porque a estas alturas todos sabemos que son mis lectoras blancas y cuyos consejos y tirones de orejas me han servido muchas veces para encauzar alguna escena de esas que se resisten.

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Gracias a la novela romántica conocí a las autoras y a las amigas que son hoy, juntas hemos crecido profesionalmente y personalmente, y a día de hoy somos grandes amigas. Y lo más curioso, siempre nos hemos apoyado las unas a las otras, siendo motivo de alegría de unas los éxitos de las demás.

Gracias a ti por la entrevista y por darme la oportunidad de explicar en RománTica’S un poco más de mi vida y de mis proyectos. Siempre es un placer pasar un rato contigo.

Como veis, una mujer sencilla, una autora incansable que nunca tira la toalla y jamás se rinde. Ahora las preguntas son para vosotras, queridas lectoras: ¿Conocéis su obra? ¿Os habéis leído algo de ella?

En el mercado tenéis disponible todas sus novelas: Niebla en el pasado y Acero y Miel en Kiwi.

Oscura Fascinación en Ed. B, No mires atrás en eTerciopelo y, como no, El reino de Levana en Terciopelo.

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ENTREVISTA

José de la Rosa La vida es dura. Fantástica pero dura.

Así que todo aquello que nos pueda ayudar a hacerla más placentera, bienvenido sea.” ―José de la Rosa

ENTREVISTA DE Mónica Liceras

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osé de la Rosa Aunque pertenece al mundo de lo audiovisual, José de la Rosa se ha dedicado al libro diseñando y dirigiendo la línea editorial de novela romántica de La Máquina China desde el año 2004 y también ejerce labores como dinamizador cultural en Sevilla.

Organizó junto con Heartmaker las Jornadas de Novela Romántica que durante tres años reunieron en la capital hispalense a los autores más importantes del género en nuestro idioma. A su vez realiza cursos relacionados con este tema desde 2008, germen del manual Tú puedes escribir una novela romántica’ publicado en septiembre de 2013.

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Como autor, De la Rosa ha escrito la colección de cuentos Pequeña historia frívola de 1700 (La Máquina China Editorial), las novelas La clave Agrippa (RD Editores) y Vampiro (Editorial Santillana). En 2013 salió a la luz su novela romántica Siete razones para no enamorarse (Harlequin Ibérica), y el manual Tú puedes escribir una novela romántica .

Este mes de junio volveremos a contar con su presencia en las librerías digitales bajo el título La leyenda de Tierra Firme (Harlequin Ibérica), su nueva novela.

Además de una bonita portada, ¿qué encontrarán los lectores en las páginas de La leyenda de Tierra Firme?

Espero que encuentren una historia romántica adictiva, entretenida y emocionante, donde el amor es el eje central y la acción lo que lo sustenta. Es una gran aventura donde dos protagonistas que nada tienen que ver el uno con el otro deben trabajar de la mano para lograr salvarnos de una desgracia. Y claro, el roce hace el cariño, y el deseo hace lo demás.

La novela comienza cuando Darrell McKay, un cazatesoros, mujeriego y de carácter bastante adusto se presenta en el despacho de Ariel para pedirle su ayuda en la búsqueda de los restos hundidos de un mítico galeón de Indias, el Santa Bárbara. Ariel no es precisamente una mujer aventurera; profesora universitaria, conservadora del Archivo de Indias, topo y ratón de biblioteca, lo último que le apetece es mezclarse en una aventura con un tipo como aquel, y menos para buscar un barco que todos dicen que no es más que una leyenda absurda.

Pero las circunstancias harán que la búsqueda comience, y que dos personajes tan diferentes tengan que conocerse. No serán ellos los únicos que vayan tras los restos del misterioso galeón que de paso he de decir que guarda un gran secreto, sino que toda una serie de secundarios se movilizarán para lograr el mismo objetivo en una persecución contra reloj que atravesará medio mundo.

Pero he de decir que Ariel tiene ventaja. A sus vastos conocimientos como americanista hay que sumarle sus sueños premonitorios con una mujer que vivió cuatrocientos años atrás y que es posible que le aporten algunas pistas sobre qué sucedió a bordo del mítico galeón y qué destino sufrió su tripulación.

Hasta aquí puedo contarte. Como ves una novela entretenida y

adecuada para el verano que ya lo tenemos entre las manos. ―¿Se puede decir que esta es una historia de amor y aventura? ―En toda regla. Aunque el cemento de la novela es el humor ante las situaciones disparatadas que pueden llegar a darse, y sobre todo provocadas por Ariel que no es precisamente una aventurera.

Para esto tengo que confesar que me he inspirado en las películas de Indiana Jones de las que soy el primer fan. ―¿Dónde y cuándo transcurre la acción? ―La novela tiene dos líneas temporales y por lo tanto dos líneas de acción.

Por un lado nos encontraremos con la protagonizada por Darrell y Ariel que se desarrolla hoy en día y comienza en un calurosísimo final de julio en Sevilla, cuando las suelas de los zapatos se funden con el asfalto. No te voy a decir por donde más transcurre esta trama para no desvelar secretos, pero sí los medios de transporte que tomarán nuestros protagonistas para que te hagas una idea (jaja); coches varios, autobuses, barcos, lanchas a motor, cargueros, avio‐ nes, etc… muy movidita como ves.

La segunda línea de acción se desarrolla a medios del siclo XVI y cuenta la historia de amor de doña Beatriz, una cautiva encerrada en un harén con objeto de dar placer a su señor. Me cuesta trabajo hablarte de ella sin adelantar acontecimientos, pero puedo decirte que no es una trama estática. Pasarán muchas cosas y la mayoría tienen que ver con el misterio del galeón Santa Barbara.

Las dos líneas están estrechamente conectadas y forman una unidad que no se entienden la una sin la otra.

Por otro lado, con esta novela he querido hacer un Homenaje con mayúsculas a la novela romántica y

toda ella está plagada de referencias, citas, guiños, traslaciones, equívocos, etc. que con un poco de vista pueden ser un aliciente más para la lectora y amante empedernida del género. ―Tal y como explica en sus redes sociales, un antiguo galeón cobrará un papel importante en su historia, ¿de dónde surge esa idea? ―La idea surge de una conversación con una buena amiga americanista sobre lo que supuso en su momento la organización de la gran Flota de Indias. Esta flota, que zarpaba de diferentes puntos del imperio (los virreinatos de Perú y Nueva España, y también el famoso Galeón de Manila que venía de las colonias de Oriente) tenía que atravesar el Atlántico rodeada de peligros; desde tormentas a corsarios, pasando por deserciones, contrabando, etc. para dejar en Sevilla todas sus riquezas que se distribuirían para pagar con ellas las guerras que mantenían la política hegemónica de los Austria. Pues de esta conversación partió la idea, de pensar qué podía ser tan importante para el imperio como para que un galeón esquivara la Flota y partiera solo hacia Europa, y en época de huracanes… todo un reto. La novela la empecé a escribir junto con mi hermana pero ella desistió tras las primeras páginas y yo llegué hasta aquí, pero el mérito es compartido. ―¿En qué ejemplos históricos se ha basado?

Hay muchas historias sobre barcos hundidos. De hecho, cuando te pones a investigar te entran ganas de ponerte una escafandra y hacer submarinismo. Siempre se había dicho que entre Ayamonte y Tarifa había más oro sumergido que en el Banco de España en cerca de los ochocientos barcos hundidos que allí se contabilizan.

Para construir esta novela las

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grandes preguntas que han requerido mucha documentación han sido ¿Cómo era la Carrera de Indias?, ¿Cómo se organizaba la sociedad en el siglo XVI? ¿Cómo era la vida en el interior de un serrallo? Contestarlas ha sido entrar en infinidad de detalles, pero ha merecido la pena. También hay licencias históricas en la novela. Por ejemplo, el galeón Santa Bárbara nunca ha existido, y cuando termines de leerla quizá des las gracias de que así sea…jajaja. ―A simple vista, los protagonistas de esta historia parecen totalmente antagónicos, ¿qué tienen en común y qué destacaría de ellos? ―Son antagónicos y ese fue el germen de la novela; escribir una historia sobre dos personas que nunca podrían estar juntas debido a que eran como el agua y el aceite. Ariel es una mujer que se ha puesto todo tipo de barreras en la vida para lograr sobrevivir. Bajo su aire intelectual y académico no hay más que una chica de 28 años que no está muy segura de lo que hace. Darrell en cambio es un hombre que tiene claro qué quiere y qué no, y que le gusta arriesgarse… hasta que encuentra de verdad lo que siempre ha buscado (que por cierto no es un galeón).

Si te fijas bien son dos personas que confluyen, pero ellos mismos (como nos pasa a muchos de nosotros en nuestra vida diaria) son los que se ponen las barreras que no les dejan ver más allá de las apariencias. Van a tener que trabajar mucho en esta novela si quieren llegar a conocerse. Y mucho más si quieren que algo entre ellos funcione medianamente bien.

―¿Qué otros personajes juegan un papel importante en la historia? ―La leyenda de Tierra Firme es casi una novela coral, porque para poder construir esta aventura he tenido que tirar de muchos secundarios que accionarán los mecanismos del entretenimiento.

No voy a contar a doña Beatriz entre ellos, ya que lidera la otra trama principal. Así que vamos con los demás: Uno con el que me lo he pasado bomba ha sido con María, la secretaria de Ariel. Con ella quería reflejar cómo sería Ariel si la viéramos tal y como ella ve a Darrell. Un lio ¿no? pero ya lo entenderás.

Mi personaje favorito es don Íñigo Fernández de Andrada, un viejo capitán que luchó al servicio de Pizarro y que gobernará el Santa Bárbara. Dará muchas claves para descubrir el misterio y es el ideal de caballero español precursor del Siglo de Oro donde el honor y la dignidad son un valor.

El inspector Medina es el encargado de perseguir a los forajidos y en nada se parece a lo que esperas; pulcro, elegante hasta el detalle, melómano, amante del arte… un tipo bastante peligroso como ves.

Y muchos más que prefiero que vayas descubriendo: tenemos un becario, Carlos, que jugará un papel importante. Una aya, un sargento encantador, dos rufianes, la maravillosa Catalina que suspira cada noche con Lisa Kleypas, etc. etc. etc. ―¿Podría dejarnos unas pequeñas pinceladas de su nueva historia? ―Por supuesto. Creo que con este breve texto vas a ver el tono de la novela y conocer un poco cómo son mis personajes, como son Darrell y Ariel:

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La doctora Salazar no había dado señales de vida y su avión salía en dos horas.

Darrell se secó una gota de agua que resbalaba por su abdomen. Le sería difícil seguir adelante en la búsqueda del Santa Bárbara sin sus conocimientos, pero ya se le ocurriría algo. Estaba claro que Ariel Salazar tenía la firme determinación de no intervenir en un proyecto como aquél, y él la entendía. Era una investigadora prestigiosa a pesar de su juventud, con una brillante carrera académica por delante… ¿cómo se le había podido ocurrir que una mujer como aquella iba a seguirle en un proyecto así?

Aún tenía que terminar de hacer la mochila que llevaba como equipaje y que descansaba abierta sobre la cama. Después intentaría desayunar algo en la cafetería del hotel y tomaría un taxi hasta el aeropuerto. Tenía el tiempo justo.

Se disponía a vestirse cuando oyó que llamaban a la puerta; debía ser el servicio de habitaciones o el botones (había mandado algo de ropa a la lavandería) así que no se preocupó de cubrirse y simplemente se ató la toalla que descansaba sobre la cama a la cintura. En dos zancadas abrió la puerta.

Durante un instante la miró sin saber muy bien cómo reaccionar; ya estaba convencido de que después de cuatro días de espera había decidido no aceptar su oferta, sin embargo allí estaba la doctora Salazar.

Lo mismo le sucedió a Ariel, que lo último que esperaba esa mañana era que un hombre (¡Y qué hombre!) solo cubierto con una toalla casi de bidé le abriera la puerta. ¿Es que en aquel hotel no había toallas más grandes? Además, el pequeño y dejar a Darrell McKay vestido de aire.

A pesar del calor, la doctora llevaba un traje de chaqueta y falda muy parecido al de días antes (tenía varios similares, demasiado similares), pero en un gris más pálido. Era de líneas rectas, como un saco de remolachas, igualmente adecuado para ir a un baile en la embajada que para recoger patatas en el campo. Y la talla era lo peor; al menos dos más de la que necesitaba, por lo que la chaqueta se convertía en una pirámide a la altura de los hombros y en un rascacielos neoyorkino en las caderas. Ariel volvía a la carga con sus gafas de pasta oscura que, siendo verdad que ocultaban un cierto aire miópico, también era cierto que tapaban el resto de la cara. Ese día su cabello castaño, casi negro, intentaba sostenerse en la coronilla con un anticuado pasador de madera (de ninguna manera iba a dejar que el inglés la viera de nuevo con sus cocas), aunque lograba hacerlo a duras penas. En resumidas cuentas, allí estaba la personificación del “vade retro Satanás” para el mundo del erotismo y la sensualidad.

—Creo que no llego en buen momento —acertó al fin a decir Ariel, que sentía que la boca se le estaba secando.

Darrell seguía descalzo y (sí) desnudo, y algunas gotas de agua aún resbalaban por su piel. Ariel, a su pesar, siguió el recorrido de una de ellas que dio un salto mortal desde la barbilla para deslizarse lentamente por el pectoral derecho y sumergirse en los rápidos de los abdominales. Al llegar al ombligo pudo escapar del remolino de suaves vellos que se había formado allí, para descender por la catarata de encantadores pelillos que, formando un oscuro cordón, llegaban hasta el borde de la toalla.

—¿Tiene un vaso de agua? —se le escapó cuando la gota alpinista interrumpió su camino —Sí, claro… —dijo él un poco sorprendido.

—No, no quería decir eso…—de nuevo la cara de Ariel había adquirido el color de un rábano—. Será mejor que vuelva dentro de un rato. Yo, yo… ¿Qué diablos hacía allí? delante de aquel inglés, escocés o lo que fuera, que no había tenido otro momento que ese para ducharse, para no secarse, y para no encontrar una toalla más grande. Daba la impresión de que se aflojaba y podría caer en cualquier momento.

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―En términos generales, ¿cómo ve el género romántico actual? ―Creo que está en su mejor momento. Y lo digo siendo consciente de cada una de estas palabras.

La oferta es amplísima, a pesar de que algunas amigas digan (quizá con razón) que hoy en día se edita de todo. Pero es que eso, lo de abrirse a autores tanto buenos como no tanto, sucede y ha sucedido con todos los géneros en expansión a lo largo de la historia.

Pasaba con las tragedias en tres actos en época de Lope de Vega, con las novelas por entregas en tiempos de Víctor Hugo y con la novela romántica en 2014. El tiempo y los lectores se encargarán de seleccionar qué merece y qué no la pena.

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Cuando un género explosiona la demanda crece y con ella la oferta también crece. Pero a mí eso me parece fantástico. Es la única manera de dar oportu‐ nidad a muchos autores y autoras que hasta ahora era imposible que los publicaran en un mercado abierto solo a las traducciones que venía de fuera, y es que entre estos nuevos autores estarán los grandes del género de mañana.

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Observa que como lectores solo tenemos que seleccionar. Prefiero tener cien obras donde elegir a solo tres. Al menos yo lo veo así. A veces nos equivocaremos en la compra, pero siempre habrá una novela que leer. Aquí también debemos fiarnos de las editoriales; si queremos leer una novela romántica en su corte más puro yo sé que Vergara no me defraudará.

Si quiero intentar descubrir un nuevo talento, o arriesgarme a ser sorprendido me dirijo a GramNexo.

También está sucediendo algo muy interesante, y es que los límites del género romántico se están difuminando. Compañeras mías lo viven con horror, yo lo veo como una característica más de que nada es inmutable. Hablaba el otro día con una gran amiga muy entendida en la materia que me decía «es que ya no hay novela romántica», pero sí que la hay. Sigue ahí, en medio, lo que pasa es que en los alrededores están creciendo otros subgéneros que son puentes a géneros distintos. Esto también ha sucedido con todos los géneros a lo largo de la historia y han dado pies a hallazgos muy felices. A mí todo este florecimiento me parece maravilloso y oír la voz de tantas y tantas autoras de habla hispana, aún más.

Quiero añadir, además, que yo percibo una diferencia en el tipo de novela romántica que hacemos en este idioma que en las que hemos importando tradicionalmente de los países anglosajones. Y la diferencia es en el modelo de heroína. Son pequeños matices, lo sé, pero la heroína media que estoy leyendo a las autoras hispanohablantes es una mujer más libre, más dueña de su propio destino, y que ve al hombre de igual a igual. Y eso me encanta. ―En un sector dominado

eminentemente por las mujeres y principalmente anglosajonas, ¿cuál son sus bazas para abrirse camino en este mercado? ―La primera baza, y la fundamental, es escribir buenas historias y con calidad. Sin esto no hay nada que decir.

La segunda baza, y sobre la que intento trabajar más a fondo, es intentar explicar la historia de amor desde un punto de vista masculino, pues creo que lo hay.

Eso no significa escribir la novela desde un posicionamiento antropomorfo, sino indagar, exponer o criticar las sutiles (y a veces no tan sutiles) diferencias sociales, culturales, educacionales y morfológicas con las que nos enfrentamos al amor. Es un campo donde como escritor de novela romántica me siento cómodo.

El otro día intentaba explicarle esto a un amigo y él no lo entendía. Le puse un ejemplo (un tanto zafio, lo reconozco) pero lo pilló al instante.

Y le hablé sobre la erección. Si la has «sufrido» tienes más posibilidades de explicar de forma certera lo que supone tener en el cuerpo un mecanismo que no controlas, que salta ante estímulos imprevistos, dejándote a veces en muy mal lugar, dando pie a malentendidos, y que va por libre.

Pues ese punto de vista es el que yo intento trabajar en mis novelas románticas. ―Muchas gracias, Jose, por dedicarnos una parte de tu tiempo pero no quiero despedirme de nuestros lectores sin antes comentar que La leyenda de Tierra Firme, en preventa, ha entrado en el TOP100 de Amazon en la categoría de Romántica en tan solo 24 horas y que saldrá a la venta el día 12 de junio. ¡Ya nos queda menos para disfrutar de su lectura!

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ENTREVISTA

Javier Romero Entre viajes, pasarelas de moda y un sinfín de situaciones divertidas y alocadas, Javier Romero consigue un espléndido debut en la literatura para chicas” ―Ana Sarria

ENTREVISTA DE Olivia Monterrey

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avier Romero acaba de estrenarse como escritor publicado con Estaré donde tú no estés, su primera novela, y además de género romántico, de la mano de la Editorial Divalentis.

Vamos a conocerlos un poco a ambos, al libro y al autor. ¿Por qué te decidiste por el género romántico?

Yo creo que fue el género romántico el que me eligió a mí.

Me considero una persona romántica y, el día que decidí que había llegado la hora de ponerme delante de una hoja de papel, no podía ser otro género el que me llenara de esta forma. ¿De qué va Estaré donde tú no estés? ¿De dónde surgió la idea?

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Es una historia divertida y romántica entre dos personas muy diferentes a las que separa un mundo que deciden, después de unos cuantos avatares, darse una oportunidad y luchar por ese amor.

Como la mayoría de historias románticas, la idea surgió del corazón y, por qué no decirlo, de alguna conversación con mi editor.

Háblanos un poco de los personajes de la novela. ¿Cuáles son tus favoritos?

Marta es la protagonista y es diseñadora de vestidos de novia y Toni es el hombre que lucha por enamorarla. Hay muchos personajes secundarios pero, con toda seguridad, me quedo con Brian, el secretario irlandés de la protagonista. No voy a contar nada sobre él. Habrá que descubrirlo.

¿Crees que es complicado para un hombre abrirse camino dentro de este género dominado principalmente por mujeres? ¿Has encontrado alguna dificultad?

De momento, no he encontrado ninguna dificultad. Creo que, aunque es un género dominado por mujeres, en el fondo, somos escritores y no debería existir esa exclusividad aunque existe, pero creo que es más culpa nuestra, de los hombres, que aún no nos atrevemos a asomar la cabeza para reconocer que también nos enamoramos y que no queremos dejar de lado a la novela romántica. ¿Cuál es tu modus operandi a la hora de escribir? ¿Usas un guion o escaleta, te dejas llevar por los personajes y que ellos cuenten la historia? Cuéntanos.

Soy un escritor de brújula con ciertas tendencias a coger la mochila y salir de expedición sin tener muy claro dónde quiero llegar. Por eso, tengo que confiar mucho en mis personajes. Ellos me hablan y me muestran el camino a seguir cuando yo estoy un poco despistado. ¿Qué cosas te inspiran a la hora de escribir?

El amor y las personas que viven por y para él que son muchas aunque, en ocasiones, nos cuesta demostrar lo que sentimos a la persona que comparte nuestra vida. Eso es lo que me inspira. Poco más. ¿Tienes pensado explorar otros géneros, aparte del romántico, en futuras novelas?

Me gusta mucho y me llama la atención la novela juvenil pero no tengo claro si en su visión más romántica o en cualquier otra.

Respecto a otros géneros, de momento no me han reclamado como escritor. ¿Hay algún lugar en especial donde te guste ponerte a escribir?

Mi caso es distinto al de muchas otras escritoras que necesitan tranquilidad y un lugar fijo para escribir. Para mí, cualquier lugar es bueno para escribir y no necesito silencio absoluto sino todo lo contrario. El silencio me agobia y me impide conectar bien con mis personajes. Yo creo que a ellos les cohíbe ese silencio y se callan cuando lo sienten. ¿Qué le dirías a los lectores para que se animen a leer Estaré donde tú no estés?

Les diría que es muy romántica y divertida y que si lo que quieren es disfrutar con una novela y sonreír, esta es la historia. Como he dicho en alguna que otra ocasión, esta novela arrancará más una sonrisa y algún que otro suspiro. ¿Hay algún proyecto en el horizonte del que nos puedas hablar?

Hay alguno pero, de momento, están ahí y no puedo decir mucho más. ¿Eres lector de literatura romántica? ¿Alguna novela preferida y/o autor predilecto?

Soy lector de novela romántica y un gran admirador de Federico Moccia con el que me identifico en ocasiones aunque nuestra forma de escribir es muy distinta. Por lo demás, admiro a muchas compañeras y amigas escritoras de las que he leído muchas novelas pero son tantas y tan buenas que prefiero no referirme a nadie en particular.

Ha sido un honor tenerte en RománTica’S, Javier. Te deseamos muchísima suerte con tu carrera de escritor y muchos éxitos. Te seguiremos la pista a partir de ahora y permanecemos a la espera de nuevas obras.

Muchas gracias. Ha sido un placer.

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Editoriales ESPAÑOLAS: Nuevas Incorporaciones

¿Quiénes son?

En Alentia Editorial promueven un nuevo concepto de edición que les distingue diametralmente de otras editoriales por estar más comprometidos y compenetrados con la figura del autor. Saben qué es lo importante y por ello trabajan duro por y para él.

Una vez aceptado un manuscrito, comienza su trabajo y ahí es donde se distinguen del resto.

Su manera de entender la edición es como un trabajo en equipo con el autor. Desde el principio trabajan mano a mano con él y lo involucran en todas las fases del proceso de edición de su novela.

Para ellos cada autor es diferente y por eso todos los libros que editan son distintos. Su aspecto diferenciador es la proximidad y su trato cercano.

Uno de sus principales objetivos es facilitarles la entrada al sector editorial a aquellos escritores que desean hacer llegar sus historias a los lectores y que su paso por Alentia sea la primera parada en su camino.

La calidad de los libros es fundamental y por eso su labor de edición es exhaustiva. Pese a que les gustaría darle una oportunidad a todos los autores, nuestros lectores profesionales son nuestro primer filtro de selección de manuscritos.

Una vez aceptado el manuscrito, éste se somete a una revisión orto‐tipográfica y de estilo para que el resultado final sea perfecto. Concluida esa fase, y porque saben que una imagen vale más que mil palabras, todo nuestro equipo busca la estética adecuada a ese futuro libro diseñando portadas de lo más atractivas.

Saben que quien lee tiene que disfrutar, su selección de títulos y autores es de la máxima calidad así como los materiales que utilizan para darle apariencia física al libro.

«Cuando creamos nuestro sello editorial lo hicimos pensando en él como el perfecto trampolín para que los autores noveles diesen sus primeros pasos. Por ello desde el principio les ayudaremos y les guiaremos» RománTica'S 18

Ana soy yo. Y tú. Y tu mejor amiga. Es hasta la chica que va a tu lado en el autobús.

No es Victoria Beckham porque Vicky es posh y divina y seguro que ni siquiera tiene legañas por las mañanas, pero es todas las otras chicas del mundo.

También es la protagonista de esta historia.

Ana es una chica del montón, de las del montón de verdad, sin un cuerpo de escándalo ni unas mechas de 300 euros, que en pocos meses pierde su negocio, al que creía que era el amor de su vida, y que se ve obligada a aceptar un trabajo de secretaria en una empresa de algo que le interesa tan poco que ni siquiera sabe lo que es. Pero lo que no pierde es su sentido del humor.

Acompañada de su mejores amigos y de otros tantos no tan amigos, inmersa en la organización de una boda y tratando de superar los obstáculos que la vida nos va poniendo, Ana se va abriendo camino de nuevo (a codazos, sí, pero lo importante es participar) para descubrir que los príncipes no tienen que ser siempre azules. También pueden ser verdes.

Muchos dirían que Galo tiene una vida perfecta. O casi: una familia que le quiere, un mejor amigo que, a pesar de la tiranía de su jefe/suegro y de su obsesión por ganar a un par de ancianos a una partida de golf, no pierde la sonrisa, un buen trabajo con un futuro prometedor y una novia increíble con la que va a casarse.

Pero, como casi todo el mundo, también tiene un secreto. Hace veinte años que Galo recibe postales que no son para él, de alguien a quien no conoce. Sin saber por qué, las va guardando todas, sin deshacerse de ninguna, aun sabiendo que nunca podrá devolvérselas a su legítimo dueño.

Pero, a veces, la vida tiene otro camino pensado para nosotros, y Galo está a punto de descubrir el suyo...

Éstas son sus primeras apuestas

Editoriales ESPAÑOLAS: Nuevas Incorporaciones

¿Quiénes son?

Robert Smith está decidido a dejar atrás su pasado como mercenario y emprender una nueva vida, pese a saber que, haga lo que haga, vaya donde vaya, su pasado le perseguirá.

Para una persona que ha visto el mal cara a cara, que está acostumbrado a desconfiar de todo y de todos, no es fácil amoldarse a una vida normal y corriente.

Por mucho que lo intente, por mucho que lo desee, siempre recelará de las personas, sobre todo de cualquier muestra de gratuita generosidad. Es por ese motivo que cuando la vecina de al lado se presenta en su apartamento dándole la bienvenida con un bizcocho, no puede menos que sospechar que pertenece a un grupo del crimen organizado. A partir de ese instante centrará todos sus esfuerzos en averiguar cuánto hay de verdad en la bondad de la muchacha, y cuánto de mentira.

Pero al hacerlo no contará con los sentimientos que la joven despertará en él. Ni que deberá renunciar a ellos debido a un pasado que le está pisando los talones.

No mires atrás esconde una historia de amor rodeada de grandes dosis de suspense y engaños que consiguen tener enganchado al lector desde la primera página hasta la última.

Diana Chase es acusada de asesinato. Seis años después Richard Wildman, un hombre poderoso que la traicionó, le ofrece una nueva oportunidad.

Ella sólo quiere olvidar su pasado. Su silencio le ha costado muy caro y nunca volverá a confiar en nadie.

Aunque eso era lo que ella pensaba hasta que llegó a Yosemite y se encuentre con Hugh Malloy, un hombre, extremadamente sexy, que la sacará de sus casillas.

Ninguno de los dos podrá resistir la atracción que surge entre ellos. Él no está dispuesto a perderla y ella no quiere volver a creer en el amor.

Éstas son sus primeras apuestas

eTerciopelo es un nuevo sello de Roca Editorial dirigido a la publicación de libros digitales.

En este sello, se publicarán novelas de cualquier género o subgénero de la novela romántica y erótica. Libros escritos directamente en castellano. Libros inéditos o libros nunca antes publicados en formato digital y un total de 16 a 20 títulos por año.

Si os estáis preguntando el por qué, las razones son bien sencillas: 1) Por las importantes tasas de crecimiento, año tras año, del mercado del libro digital.

2) Porque las novelas romántica y erótica son las que han dado mejores resultados en este formato.

3) Porque en Terciopelo siempre hemos apostado, y queremos seguir haciéndolo, por las autoras de habla hispana, y así lo demuestra el éxito del Premio Terciopelo del que publicaremos la 8ª ganadora en mayo.

Recepción de manuscritos Para hacerles llegar vuestra propuesta podéis contactar a través de este mail: info@terciopelo.net

Y en junio…

El esperado debut en España de una de las autoras que más ha contribuido con la difusión del género romántico.

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Autoras ESPAÑOLAS: Nuevas Incorporaciones Así es ella…

Nací en un municipio de Cádiz, donde resido actualmente.

Estoy casada y soy madre de dos hijos.

Me encanta poder decir que soy una apasionada de la lectura y que me inicié en el mundo de las letras tras escribir algún relato de forma no profesional.

Estoy muy entusiasmada con la publicación de mi primera novela, que encabeza la trilogía: «La chica de servicio».

Un pequeño bocado

Patricia Geller - Esencia Cuando Gisele Stone entra a trabajar en casa delos Campbell como chica de servicio, jamás pensó que su vida ya no volvería a ser la misma. Matt, el hijo mediano del matrimonio, es un hombre frío, atormentado, de fuerte personalidad y carácter inestable.

En cuanto ve a a la joven se encapricha de ella y quiere someterla a su voluntad. Pero Gisele, que no es una chica tímida pronto se hará con el control de la situación.

Refugiados en su clandestinidad, darán rienda suelta a una pasión insaciable. Sin embargo, cuando los sentimientos empiezan a adueñarse de la pareja, los celos, los miedos y la desconfianza pondrán a prueba su relación. ¿Será suficiente el amor para que estos dos titanes se rindan y consigan superar sus temores?

RománTica'S 20

Matt Campbell sin dejar de mirarme, rodea el escritorio despacio y con actitud tensa hasta llegar frente a mí. No puedo evitar observar su cuerpo trajeado... musculoso y bastante alto. Qué hombre tan impresionante y, por lo que se ve, tan prepotente, pienso de nuevo.

—¿Ha terminado la inspección?

Avergonzada, levanto la vista hacia él, que me parece aún más guapo.

—¿Señorita...?

—Stone, Gisele Stone. La nueva chica de servicio.

—Y bien, señorita Stone, ¿quién le ha dado permiso para entrar en mi despacho y hablarme con la altanería con que lo ha hecho? —me pregunta en tono engañosamente paciente, pero sin duda enfadado.

Qué dientes tan blancos...

—Perdón. No era mi intención ofenderlo con mi tono — suspiro, tragándome el orgullo—. En cuanto a haber entrado, quería asegurarme de que no hubiese nadie para avisar a su madre.

Me disculpo de nuevo.

—Que no se vuelva a repetir. — Su tono es cortante y autoritario.

Escrutándome y con la mandíbula apretada, niega con la cabeza y vuelve a su asiento.

Menudo culo—. Deje la bandeja sobre la mesa y, por favor,

que para eso se le paga.

Controlando mi mal humor por el desprecio de su última frase, hago lo que me ordena. Al parecer, es otro estúpido como su hermana Roxanne. Guapos sí, pero sin escrúpulos. El despacho es un caos. Produce horror verlo y aún más limpiarlo. ¿Cómo he llegado a esto? Sin pensarlo más, empiezo a recoger vasos, botellas y platos de distintas partes de la estancia, cerca de la mesa cubierta de papeles.

El señorito Matt controla mis movimientos sin disimulo.

Siempre con actitud prepotente, haciéndome sentir cohibida con su penetrante y fría mirada.

Intento ignorarlo y continúo con mi trabajo consiguiendo no escupir el veneno que arde en mi garganta. ¡Vaya un estúpido!

Me lleva más de tres cuartos de hora dejar el lugar visiblemente más ordenado. Cuando acabo, me planto frente a él sin rehuir su meticuloso escrutinio. Casi se me escapa una burlona sonrisa al notarlo sorprendido.

—¿Desea algo más, señor? — pregunto amablemente.

—Quizá... —Su voz suena dura, prepotente, descarada—. ¿Qué me ofrece? Lo miro sin entender sus palabras. ¿Que qué le ofrezco? ¿Qué mierda le voy a ofrecer?

—Es usted el que manda — respondo confusa—. Usted ordena y yo obedezco, ¿recuerda?

Mi tono sarcástico no le gusta.

Su mirada se vuelve gélida, cruda, posesiva. Y por su postura tan rígida y altiva sé que algo no anda bien. ¿Estoy en un lío?

—Ya sé lo que quiero — murmura, de pronto pensativo, cerrando y abriendo los puños. ¿Son heridas eso que tiene en la mano? Asiento expectante, aguardando la petición del brusco, pero no por eso menos guapo señor.

—La quiero desnuda y tumbada sobre mi mesa. Voy a tomarla por insolente.

VIII PREMIO TERCIOPELO Roca Editorial convoca el Noveno Premio de Novela Romántica Terciopelo con el propósito de difundir y fomentar la literatura de ese género. De entre los manuscritos recibidos se premiará aquella obra que destaque por su originalidad y amenidad.

BASES 1. Las novelas, escritas en lengua española, deberán ser originales e inéditas.

2. Los originales deberán presentarse bajo seudónimo y con una extensión entre 150 y 350 folios, claramente mecanografiados a doble espacio y por una sola cara.

3. Acompañará a las obras presentadas una plica en cuyo interior figurará el nombre, dirección y teléfono de contacto del autor, así como una declaración firmada en la que se haga constar que la obra no tiene comprometidos los derechos de publicación con ninguna editorial y que tampoco se halla pendiente del fallo de cualquier otro premio. En el exterior de la plica se consignará el seudónimo con el que se presenta su autor.

4. La dotación del Premio será de 1.500 euros en metálico.

5. El plazo de admisión de originales se cerrará el 1 de septiembre de 2014 y el Premio será fallado el 1 de diciembre del mismo año.

6. La presentación al Premio compromete al autor a no retirar su original antes de hacerse público el fallo del jurado. Asimismo, el hecho de presentar una obra implica la aceptación por parte del autor de todas las bases del Premio.

7. Los originales se enviarán en una copia impresa y encuadernada, acompañada por un CD con el texto de la obra en Word, y haciendo constar en la cubierta el nombre del Premio, el título de la obra y el seudónimo del autor, a:

Roca Editorial de Libros, S. L. Av. Marquès de l’Argentera, 17, pral. 1ª C.P. 08003 Barcelona, España 8. El Jurado y las personas que intervengan en el proceso de valoración y selección de las obras optantes al premio guardarán la debida confidencialidad, tanto sobre las novelas presentadas como sobre su marcha y resultados.

9. El cobro del importe del Premio supone la concesión a Roca Editorial de los derechos en exclusiva de publicación de la obra. Estos derechos abarcan todas las modalidades de edición, todo el territorio mundial, así como los derechos de traducción a otros idiomas y su difusión mediante adaptaciones cinematográficas y/o televisivas.

10. La dotación económica se computa como anticipo a cuenta de los derechos de autor. Roca Editorial formalizará el correspondiente contrato de edición con el ganador.

11. Roca Editorial se reserva el derecho de opción preferente para publicar aquellas obras presentadas y que no hayan resultado galardonadas, previo acuerdo con los autores respectivos.

En caso de recibir oferta por parte de otra editorial para la publicación de su libro, el autor lo notificará a Roca Editorial quien en un plazo no superior a 20 días le notificará de su interés o no en ejercer su derecho de opción preferente para publicarlo en Roca Editorial. En caso de no hallarse interesada, el autor podrá, libremente ceder los derechos de su obra a un tercero.

12. El ganador se compromete a comparecer en aquellos actos de promoción que se deriven tanto de la presentación de la obra premiada como de la publicación del libro.

13. Los originales presentados no serán objeto de devolución.

Barcelona, mayo de 2014

I N F O R M A C I Ó N D E I N T E R É S 21 RománTica'S

Entrevista en el lado oculto

Gemma Juan por Bela Marbel

Un número más con vosotras para presentar a Gemma Juan Giner, aunque en el mundo de la novela romántica y erótica, la conocemos bien, ya que dirige el blog Sex Secret http://www.gemmajuan.blogspot.com.es/ y además nos comenta y recomienda libros por los diferentes grupos de este mundillo, es muy activa y una ávida lectora.

Gemma Juan Giner, nacida en Alcoy (Alicante) reside actualmente en Altea (Alicante) con su pareja. Es periodista especializada en sexo y porno para las mujeres y tiene un máster de locución para radio y televisión. A pesar de su corta edad; tiene 25 años, ya ha trabajado en televisión, radio, prensa y agencia de noticias. Actualmente compagina su trabajo en la televisión internacional EUROP.TV de la cual es guionista y reportera del programa “Benidorm te Quiero” y presentadora de los informativos, con la labor de regentar un bar junto a su pareja; esta es una historia de amor de esas para contar… El poco tiempo libre que le queda lo pasa leyendo y escribiendo en su blog.

RománTica'S 22

Lo primero es darte las gracias por abrirme la puerta. ―¿Hace mucho tiempo que lees romántica? ―Sí, desde bien pequeñita siempre he devorado libros, y entre ellos nunca han faltado los de temática romántica. ―¿Lees otros géneros? ¿Cuáles? ―Intento leer un poco de todo, pero al final siempre acabo leyendo lo mismo, supongo que todos tenemos un estilo al que somos fieles y es con el que más nos identificamos, yo personalmente me quedo con romántica, erótica e histórica. ―¿Tienes una escena favorita?

Uff, imposible. De cada libro te quedas con unas escenas, con unos personajes que te marcan más, pero es muy difícil quedarte con sólo una escena, quizá destaco las escenas de muerte, no porque sean mis favoritas; todo lo contrario, sino porque me marcan mucho. Cuando leo visualizo y siento tan reales a los protagonistas que sufro mucho cuando se mueren. ―¿Tienes un personaje favorito?

Aquí me ocurre lo mismo que con la escena. No puedo quedarme con un personaje, pero sí con un tipo de personaje. Me fijo mucho siempre en los personajes femeninos, en muchos te puedes sentir identificada por sus pensamientos, su carácter o su manera de actuar y siempre puedes aprender algo de ellos. También disfruto con los personajes de los niños.

―¿Hay alguno al que odies? ―Jajaja, creo que en muchas novelas, sobretodo en romántica, acabas odiando al tercero en discordia, por el hecho de que parece que nunca dejará que la pareja protagonista sea feliz, pero creo que también es parte fundamental de la historia.

Pero ahora mismo me viene a la mente un personaje de un libro de Megan Maxwell, Niyomismalosé, al que odié muuucho durante toda la lectura, y era la suegra napolitana de la protagonista, era mala. Mala… ―Mala de cojpiiiiiiiiiii, jajajaja. ¿Algún libro que hayas leído más de diez veces? ―La verdad que no suelo releer libros aunque me gusten mucho, puesto que ya conozco el final, pero sí hay alguno que he leído un par de veces. Es una historia en dos libros, escrita en valenciano, que me parece taaan romántica, que lloré muchísimo. El primer libro se llama Mor una vida es trenca un amor y la segunda parte se titula Només la mar ens parlarà d’amor. Totalmente recomendada para enamoradas empedernidas. ―¿Por qué compartes con la red, lo que te gusta leer? ―A los que nos gusta leer nos gusta mucho también intercambiar opiniones sobre libros, a la vez que también nos gusta mucho escribir, y en la red tienes las dos cosas, puedes escribir para que la gente sepa tu opinión y te pueda contestar o simplemente para dar a conocer libros que a lo mejor la gente no conoce. Es una buena herramienta para

aconsejar y dejarse aconsejar sobre literatura. Además de que esto te permite conocer a muchísima gente con los mismos gustos e inquietudes que tú. ―¿Cómo surgió la idea del blog?

Bueno, mi blog más que de romántica es de erótica, y no sólo de literatura. La literatura fue lo último que surgió.

Mi blog empezó como parte del proyecto y la especialización de la carrera. Era crear una revista para mujeres sobre sexo y porno, y dar a conocer un mundo un poco desconocido para ellas. Entrevistamos a actores, directores, productores porno, también a doctores, sexólogos, psicólogos… y lo que empezó en un proyecto se convirtió en algo fijo. Empecé a hacer vídeos resolviendo las dudas que tenía la gente sobre sexo y al final me dijeron de hacer reseñas de libros eróticos para una web de literatura, así que aproveché para publicarlos también en mi blog. ―¿Te has arrepentido en algún momento de

meterte en este mundillo?

Para nada. Adoro leer, conocer autores nuevos, gente con mis mismos gustos y no me supone ningún esfuerzo escribir una reseña después de terminar cada libro. ―¿Cuántos libros lees en un mes?

Pues depende de muchas cosas, del tiempo libro que me quede, de lo mucho o poco que me enganche el libro, pero de normal un libro a la semana. ―Todas hemos sufrido ese momento en el que terminas un libro y no te cabe nada más, te deja tan inundada de sensaciones que te resulta imposible comenzar con otro, y pobre del elegido porque nunca va a estar a la altura. ¿Cómo superas tú, esa crisis? ―Creo que eso me pasa con cada libro que termino, siempre quiero una continuación o saber más de ellos, cómo será su vida en otros años, es a eso a lo que digo hacer tan reales a los protagonistas, que quiero saber más. Pero luego me paso a otro libro, me

sumerjo de esa nueva historia y me olvido de la anterior. ―¿Papel o digital? ―Siempre, siempre, siempre papel. No me gusta nada leer en digital.

Quiero leer periódicos, revistas y libros en papel. ―¿Tienes un subgénero favorito?

100% erótica. ―¿Te afecta la portada a la hora de escoger un libro? ―Supongo que sí, que cuando dudas entre varios acabas cogiendo el de la portada más chula.―¿Afecta a tu vida personal, tu afición a la lectura? ―Mmmm… sí. De cada libro aprendo algo hasta el punto de aplicarlo en mi día a día o incluso hasta el poder montar una librería de tantos libros que tengo. ―¿Cómo es un día en la vida de Gemma? ―Pues creo que muy diferente de lo que los lectores se puedan imaginar. A pesar de que soy periodista y bloggera, el trabajo está muy mal en este sector, por lo que hace un año que me monté un bar y me paso más de doce horas en él y

los ratitos en los que no hay gente en el bar es cuando me paro a devorar páginas y páginas. Además ahora gracias al apoyo de mi pareja, saco tiempo para el nuevo proyecto televisivo que hemos puesto en marcha y que espero que nos dé muchas alegrías. Creo que de todo se aprende, y podría escribir un libro contando relatos de toda la gente que pasa por el bar haciéndome partícipe de millones de historias diferentes. En un bar también se puede hacer periodismo. ―¿Estás enamorada? ―Mucho. Últimamente he leído varios libros en los que me he sentido muy identificada por la diferencia de edad existente entre los protagonistas, y por eso digo que el amor no tiene edad. Yo tengo 25 años y mi pareja 44, y no lo cambiaría por nada del mundo. Sí, estoy enamorada.

Espero que hayáis disfru‐ tado conociendo a Gemma en este espacio dedicado íntegramente a vosotras la lectoras y a vuestra rela‐ ción con los libros.

Como novedad quiero anunciar que la próxima entrevistada será a una lectora, una de esas anónima… o quizá no tanto, que pululan por la red y que trabajan incansablemente para nosotras las autoras, recomendando y compartiendo sus experiencias con las historias que nuestras mentes maquinan. ¿Serás tú? ¿O tú? ¿O quizá tú? Sí a ti te digo… has sido elegida, ve preparándote.

23 RománTica'S

RománTica’S presenta

en la Toscana te espero de Olivia Ardey

En el corazón del capitán Massimo Tizzi solo hay sitio para su pequeña Iris y su carrera como piloto del ejército italiano. Hastiado de la borrascosa relación que mantiene con la madre de la niña, lo último que desea es volver a complicarse con una mujer. La Toscana es su refugio y solo allí, junto a su familia, disfruta de las cosas buenas de la vida…

Martina Falcone necesita escapar de una realidad que detesta y del recuerdo del hombre que destrozó su vida. Por suerte, Rita, su divertida y holgazana compañera de estudios, llega como un soplo de alegría mientras ella lucha con ahínco para convertirse en Asistente Social, su verdadera vocación.

Massimo y Martina son dos desconocidos que huyen del amor sin sospechar que una noche de sexo a ciegas en Roma está a punto de cambiarles la vida.

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Creo que a todas las románticas nos sucedió lo mismo cuando Versátil desveló la que sería la portada del tercer libro de Olivia Ardey: nos enamoró completamente.

Su diseño y colorido evoca aquellos pueblos y ciudades donde hemos pasado los mejores momentos de nuestras vidas, los lugares donde hemos pasado nuestra infancia o juventud, sitios con encanto como la hermosa Toscana, donde se ambienta esta maravillosa novela.

Podría suceder que esta historia empezase con la protagonista contemplando el amanecer desde una ventana, pero no, aunque sí comienza a horas tempranas, en una cama, donde dos desconocidos despiertan después de una intensa noche de pasión. La mañana después, ¡a cuál más situación incómoda! ¿Te quedas? ¿Te vas? ¿Y si a la luz del día el seductor desconocido se convierte en un tipejo estúpido? Para que desperdiciar el tiempo con un desconocido al que no merece la pena conocer...

A partir de aquí sus caminos se dividirán y conoceremos las historias de cada uno. Él se llama Massimo y para empezar no entiende el enfado de la pelirroja. Es piloto del ejército y tiene una hija pequeña que es para comérsela a besos. No así a la madre de la criatura, a quien hay que tener la paciencia de Job para aguantarla. Paciencia que

Massimo tiene colmada, por eso no quiere saber nada de las mujeres más allá de un simple rollo.

La pelirroja es Martina y ya ha vivido una historia de amor que la ha dejado marcada de por vida. Su vida no ha sido fácil por lo que prefiere centrarse y acabar sus estudios como trabajadora social. Pero el destino es muy caprichoso y la que resulta ser su compañera de cuarto en la residencia de estudiantes es ni más ni menos que Rita, la hermana de Massimo.

Casualidades de la vida que Rita aprovecha a su favor para intentar unir a los dos tortolitos despistados que presos de una atracción magnética caen en tontos enredos, quedando atrapados una y otra vez en la rueda del destino que parecen empeñados en ignorar…

Pasión, risas, ternura, dolor, amor... Olivia Ardey nos invita a un viaje inolvidable por la Toscana acompañados de personajes entrañables que amenizarán la travesía y se colarán en nuestro corazón. Un viaje lleno de colores, sensaciones y olores que se quedarán en nuestra memoria y que querremos revivir alguna vez más en el tiempo.

Si deseas reír y llorar al mismo tiempo, si deseas vivir un apasionado romance, si deseas conocer la esencia de Italia como si hubieras estado allí… «En la Toscana te espero».

RománTica’S presenta

Bruja oscura de Nora Roberts

Iona Sheehan visita por primera vez Irlanda, tierra de sus antepasados. En Estados Unidos ha dejado a unos padres distantes, sus amigos, su trabajo y el sueño de convertirse en jockey.

Pero sobre todo ha dejado a su abuela, la persona que le ha contado tantas historias sobre sus antepasados, una saga de hechiceras que se remonta al siglo XIII, en los años en que vivió la Bruja Oscura. Iona llega al condado de Mayo acompañada de un amuleto que le había regalado su abuela al despedirse: un caballo de cobre. Allí se instala en un fascinante castillo, se reencuentra con sus primos lejanos, Branna y Connor O'Dwyer, y empieza a trabajar para Boyle McGrath, el atractivo propietario de los establos, quien le cuenta una antigua leyenda según la cual la hija menor de la Bruja Oscura hablaba con los caballos y aprendió a montar antes que a andar...

Nora Roberts es una de las autoras románticas más reconocidas internacional‐ mente. De todos es sabido que su obra literaria se divide entre las historias de suspense que maneja de forma magistral y las series familiares o de amigos llenas de sentimiento y emoción.

Novelas con las que nos ha hecho disfrutar a todos sus seguidores. Uno de los escenarios que hemos visitado varias veces junto a esta autora es Irlanda, y a él vuelve a conducirnos en la trilogía de Los O'Dwyer.

En esta ocasión nos cuenta la historia de una familia y una legado de poderes que se remonta a siglos y que pasará de padres a hijos hasta que el día en que por fin pueda ser cumplirse la leyenda. En los primeros capítulos de esta historia, Roberts nos cuenta como Sorcha, la Bruja Oscura, sabiendo que le quedaba poco tiempo de vida y en un intento último por derrotar al malvado hechicero Cabhan, sacrifica su vida por sus hijos y divide sus poderes entre ellos. Siglos y generaciones pasarían hasta que los tres volvieran a reunirse de nuevo…

Ya en el presente, conocemos a Iona quien ha crecido escuchando las historias familiares que su abuela le contaba. Por ello cuando comienza a tener sueños que no correspon‐ den a ese tiempo no lo duda y deja todo atrás marchán‐ dose a Irlanda en busca de sus orígenes y el destino que

debe cumplir. Cuando llega al lugar y se encuentra con sus primos, es como si por fin regresara a casa. Pero igual que sus poderes comienzan a despertar hay algo escondido en el bosque que también revive después de siglos aguardando.

Familia, amigos e incluso el amor, de manos de un hombre que representa las tres mayores fantasías de una mujer: vaquero, pirata y un ardiente salvaje. Todo esto hallará Iona en su nuevo hogar. Pero para lograr la felicidad completa deberá aceptar por completo la bruja en su interior y luchar junto a su familia por derrotar de una vez por todas el mal.

Ella buscó mi fin y encontró el suyo. Es ella quien duerme en la oscuridad. Entrégame lo que posees, lo que supone una carga, lo que tanto te exige, lo que tira de ti. Entrégame el poder que tan mal se adapta a ti. O te lo arrebataré yo y tu alma con él.

Seis son los protagonistas de esta serie, tres parejas cuya historia de amor conoce‐ remos a lo largo de las entregas y que formarán un frente unido para poder cumplir lo que dice la leyenda. Confianza, amor, fe, lealtad, todos estos sentimientos se pondrán a prueba con la magia como testigo. Os invitamos a que leáis esta trilogía de Los O'Dwyer si os gustan este tipo de historias; esto es sólo el comienzo… lo mejor está por venir.

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FIC - ENTREVISTA

Kris Pearson Ser una autora auto-publicada es una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida. Los precios y las portadas siempre los elijo yo” ― Kris Pearson

ENTREVISTA DE YULISS M. PRIEGO

Si os gustan las historias contemporáneas, apasionadas y ardientes, llenas de amor y risas, probad sus libros. El final feliz está garantizado, pero a veces sus héroes y heroínas tienen que superar muchos obstáculos en el camino hasta llegar a él.

No los elijáis si lo que queréis es una lectura suave, porque son historias que echan chispas destinadas a un público adulto, pero eso ya lo podéis deducir por sus portadas y títulos.

Sus dos primeras novelas ya están disponible para Kindle en Amazon y para muchos otros lectores de libros electrónicos a través de Smashwords, o directamente en iBooks, Barnes & Noble, Kobo, Xinxii etc. Otros se van a publicar próximamente.

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U

n nuevo bimestre, un nuevo destino.

Esta vez ni yo misma me lo creía. Si ya de por sí soy una enamorada empe‐ dernida de Estados Unidos, que está al otro lado del mundo, esta vez puedo decir que sí que voy a irme al otro lado del mundo, literalmente. ¿Destino? ¡Nueva Zelanda!

Pensaréis qué se me habrá perdido por allí, y la respuesta ni yo misma lo sé. Solo supe en aquel momento en el que me bajé del avión y vi aquellas zonas verdes a lo lejos que no podría haber elegido un destino mejor. La cosa era que en el fondo sí que tenía una misión especial: tenía que buscar a Kris Pearson, autora auto‐publicada que ha llegado a muchísimos lectores alrededor de todo el mundo y lo ha hecho ella solita. Dado que hoy en día en España la decisión de muchas autoras de publicarse por plataformas ajenas a editoriales, mi objetivo era ver si podía conseguir la receta mágica del éxito para poder compartirla con todas las escritoras auto‐ publicadas en nuestro país.

Encontrar a Kristen no fue muy difícil, pues me indicaron que se encontraba en uno de los yates que Rafe tenía en su empresa. Oh… iba a conocer a ese hombre…

En cuanto llegué, Kristen me recibió con los brazos abiertos y me invitó a disfrutar de la gran tranquilidad que otorgaba la zona. Para mí era un placer enorme poder conocer y hablar de tú a tú con una autora que había luchado sola por conseguir todo lo que había conseguido, y eso me hizo preguntarme lo difícil que habría sido toda su experiencia.

—Oye, Kristen, ya que estoy aquí y me ha entrado la curiosidad. ¿Puedo hacerte unas cuantas preguntas para que en España conozcan tu historia y tus novelas?

—¡Para nada! Adelante. Soy toda oídos.

—¿Cómo es ser una autora autopublicada en Nueva Zelanda? ¿Es difícil que te publiquen con una gran editorial cuando se está tan lejos de Estados Unidos, o tiene Nueva Zelanda su propio mercado editorial? —le pregunté esperando no parecer muy ignorante. Aunque, pensándolo bien, sí que lo era.

—¡El resto del mundo no está más lejos que mi bandeja de entrada! Ya se perdieron esos días en los que se enviaban manuscritos impresos a las editoriales por correo postal (que era tan lento que un caracol) y se esperaba durante meses a una contestación. Nueva Zelanda tiene su propia industria editorial, pero no incluye mucha ficción.

Aunque sí que hay muchos libros de cocina y de deportes y de turismo maravillosos.

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»Nunca he mandado nada de forma nacional porque tenía como objetivo publicar con Harlequin Mills & Boon. Les encantó mi forma de escribir pero no sintieron que mis historias fueran muy adecuadas para ellos. En retrospectiva, coincido con ellos, pero aprendí un montón y terminé con una colección bastante grande para autopublicar. Y donde quizás mis historias no eran adecuadas para ellos, sí que están demostrando serlo para miles de lectores por todo el mundo. »Una cosa de lo más interesante ha pasado durante los últimos dos años. Las grandes editoria‐ les, que una vez dominaron a los subordinados autores, ahora tienen que cortejarnos. Hay tanto mercado de auto‐publicación (y muchos autores que están ganando mucho más dinero por libro como resultado) que las editoriales ahora necesitan ofre‐ cer contratos más ventajosos. Mi amiga Bronwen Evans, que escribe novelas romántico‐históricas, ha vuelto de la enorme convención de RT Booklovers en Nueva Orleans con un contrato para cinco libros. ¡Marie Force acaba de firmar uno para ocho! Ahora tienen que pagar muchos anticipos para retener a la gente que quieren. Y los que una vez quisieron pu‐ blicar con una editorial de renombre ahora tienen otras opciones. Es genial…

Sí, eso me encanta, debo admitirlo. Aunque me consta de que hay muchas personas que no toleran Amazon, yo por ejemplo creo que es una plataforma increíble para todos esos autores a los que se les niega la oportunidad de publicar por X razones.

Saqué una botella de agua del bolso y le di un sorbo. Hacía un día muy agradable pese al frío que acechaba por el horizonte. Eso de estar en el otro hemisferio no molaba mucho, no.

—Me ha llamado la atención que tus novelas se estén traduciendo al español por una fan, por su amabilidad y su confianza en ti. ¿Cómo te sientes por ello?

—Hay mucha confianza en ambas direcciones.

Ella trabaja como traductora profesional. Sí, es una fan, pero cuando me sugirió por primera vez el tema por supuesto que me documenté para averiguar quién era de verdad. Quería asegurarme de que los libros estarían bien traducidos. ¡Hay demasiado trabajo detrás de ellos como para dejar a una persona desconocida que haga lo que quiera! »Una vez supe que iba en serio (que trabajaba para el Vaticano y para grandes seminarios inter‐ nacionales), encontré otras cuotas alternativas con las que comparar sus precios. Los primeros cuatro libros me han costado casi tanto como un coche nue‐

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vo pequeño, pero creo que sus precios son justos y la calidad de sus traducciones se menciona amablemente en las reseñas. Nos hemos convertido en buenas amigas y hemos descubierto que tenemos muchas cosas en común: la jardinería, los All Blacks (el equipo de rugby de Nueva Zelanda), las migrañas, Italia…

—Oh, genial. Yo también soy traductora, así que me alegro de que al menos los lectores lo tengan en cuenta —dije, sonriéndole y asintiendo—. Háblanos de tus novelas. ¿Qué las hace diferentes del resto?

Y ya que estás, ¿te importaría hablarnos un poco sobre ellas? ¿De qué van generalmente? ¡Así podremos conocerte mejor!

—Para ser novelas románticas, mis libros son curiosamente realistas. ¡Incluso recibo emails de hombres que los han disfrutado! Soy una persona que tiene bastante los pies sobre la tierra y creo que los libros lo reflejan. Parece que he llegado a un punto agradable entre la romántica pura y dura y los libros con títulos únicos. Aunque los protagonistas masculinos de mis historias tienen dinero, han tenido que trabajar para ello. Y mis heroínas tienen sus propias carreras profesionales y no necesitan que un hombre las mantenga (aunque no pongan ninguna objeción si ellos se ofrecen…). Las historias son sexis, pero no llegan a ser eróticas. Una pareja, una cama, no hay ni látigos ni cadenas. »He ambientado seis de mis libros en mi ciudad natal, Wellington, que es la capital de Nueva Zelanda. Tiene un paseo marítimo precioso y mucho follaje y colinas empinadas. Cuatros de estas se traducirán. También tengo una serie llamada Heartlands que está emplazada en el campo. Y la mejor vendida de todas es Taken by the Sheikh, un affaire que transcurre en el desierto. No hay planes para traducir estas otras.

—Para serte franca, no me importaría encontrarme por aquí a Rafe, tu personaje protagonista de La cama del constructor de barcos. ¿Cuál es tu personaje favorito de todos los que has creado? ¿Cuál es el más especial para ti y por qué?

Kris se rió y me guiñó el ojo. ¿Qué quería decir con eso?

—Siempre es el protagonista que estoy escribiendo en ese momento. De verdad que una se enamora de ellos cuando los trae a la vida. (No sé cómo se sentiría mi marido si supiera esto…) Sí, me encantaba Rafe. Era demasiado, pero también tenía un enorme agujero en su felicidad y necesitaba que Sophie lo llenara. Me encantó Anton, mi arquitecto en Zona prohibida. Lo puse a prueba de lo lindo con la mujer que le di. Adoré a Alexandre, que es medio francés, medio neozelandés. Y le proporcioné una mujer difícil y revoltosa: una jugadora y apostadora

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compulsiva que necesitaba un hombre fuerte que encajara con ella. »El siguiente libro será Resistiendo a Nick, y tengo que admitir que Nick está inspirado en el recuerdo de un chico muy malote que conocí cuando adolescente. Nunca hablé mucho con él, pero soñé…

Y muchos años después soñé lo suficiente como para escribir un libro completo. Quizá Nick sea mi favorito. Dirige un gimnasio, tiene un cuerpo disciplinado y fibroso increíble y necesita que lo cuiden, aunque él nunca lo admitiría. »Acabo de terminar de escribir a un cowboy. ¡Hoy! Terminar un libro te da una de las mejores sensaciones, pero entonces te entristeces porque tienes que dejar a tu gente atrás y compartirlos con el resto del mundo.

—Oh, wow. ¡Ahora me han entrado ganas de leerlos a mí! Por desgracia, solo pude leerme La cama del constructor de barcos y Zona prohibida ya que fueron los libros que Itziar, tu traductora, me envió en su versión en español. ¿Qué te llevó a empezar a escribir esa serie? ¿En qué te inspiraste? Y ya puestos, ¿tienes un autor preferido que consideras un modelo a seguir en el mundo de la escritura?

—Vivo en Wellington, así que escribo sobre Wellington. Es preciosa, muy diversa culturalmente, y tiene muchas posibilidades para acoger muchas historias. Soy una persona social, no de pasarme horas documentándome en internet. Prefiero salir con el coche y hablar con alguien en particular si necesito saber algo. La gente siempre ayuda y les fascina estar un poco involucrados en el proceso de creación de un libro. »Mi autora favorita es, sin duda, Lisa Kleypas. No soy una lectora muy de leer romántica histórica, pero también tiene algunos libros geniales contempo‐ ráneos. La serie Friday Harbor y los de la familia Travis en Texas. Una escritura encantadora, unas escenas de amor geniales y unos personajes adorables.

Precioso país Nueva Zelanda. Uno de mis mejores viajes virtuales, os lo aseguro

—¿Cuáles son tus metas ahora mismo? Porque estás autopublicada y te han traducido al español, ¿pero estás aspirando a algo más? ¿Te gustaría dar el salto de la autopublicación a ser publicada por una grande (o pequeña) editorial?

—No, rotundamente. He estado intentándolo con editoriales grandes durante quizás seis años, me dijeron que mis protagonistas masculinos eran muy alfas, o no lo bastante alfas… me perdieron libros… me pidieron revisiones… esperé meses… y me las rechazaron… »Las pequeñas editoriales tienden a ser sinónimo de ventas y pagos bajos. Tengo amigas que se han decidido por ello. Están muy contentas de poder decir que están «publicadas», pero yo me lo paso bien escribiendo exactamente las historias que quiero y eligiendo exactamente la portada que quie‐ ro. También vendo muchas más copias. Controlo mis propios precios (baratos) y me ocupo de mi propia promoción. Soy una editorial de una persona y me encanta. »Aunque tengo un buen currículum en lo que a escribir se refiere. Publicidad. Te enseña a ir al grano, llamar la atención de la gente, corregir minu‐ ciosamente, y sacar las cosas en su plazo. Es de ver dad un caso de «otorgarte tu propio éxito». Estoy

muriéndome por escribir más series; dos más de mi desierto Sheikh son las siguientes.

—Una última pregunta, o pregunta entre comillas. —Me reí y ella se unió a mí—. Tienes a tus lectores y posibles lectores españoles frente a ti, ¿qué les dirías aquí, ahora mismo? (Sí, ¡aquí es donde te vendes bien!)

Kris miro en derredor y abrió los brazos, dándole énfasis a sus palabras.

—Diría que vinierais y pasarais tiempo en un país muy verde y lleno de agua y tan diferente de España. Nueva Zelanda es muy abajo en el Pacífico sur, y a menudo me llegan comentarios como «es tan bueno como unas vacaciones». Somos un país alargado y estrecho, y en el pico norte es tropical, y el sur es alpino. Os llevaré de viaje con nuevos ami‐ gos y quizá a un nuevo estilo de vida. Aunque la naturaleza humana es universal. Lloraréis cuando mi gente llore, y os preocuparéis cuando ellos se pero‐ cupes, y disfrutaréis haciendo el amor junto a ellos.

Viviréis indirectamente con nuevos amigos y espero que disfrutéis con ellos un montón.

—Estoy segura de que sí. Yo, debo admitir que estaba esperando a que alguien apareciera de algún momento a otro… —dije, dejando entrever que quería ver a Rafe con mis propios ojos.

Una voz masculina se rio a nuestras espaldas, y a mí se me erizó el vello de la nuca. ¡Ay, madre!

—¿Qué tal chicas? Sophie se va a enfadar porque estáis pasándolo bien sin ella… —dijo Rafe, acercándose a nosotras.

Dios mío, el tío era guapo. Creo que me voy a quedar aquí por unos días…

—Bueno, supongo que esta señorita de aquí querrá ver la ciudad. Su acento no parece de por aquí cerca.

Yo solo pude asentir.

—¡Sí! ¡Turismo! ¿Cuándo empezamos?

Ahora fue Kristen la que se rio.

—Está bien, vamos. Tenemos un día esplén‐ dido por delante.

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Personajes que vendrán Me llaman Alice por Marisa Grey, su autora

Hola a todas las lectoras de RománTica’S, soy Marisa Grey y me alegra estar aquí con vosotras.

El 25 de junio volveré a vivir la ilusión que supone publicar mi segunda novela. Se titula Me llaman Alice y es una historia contemporánea. Para los que leyeron Cadena de favores, lo único en común que tienen estas dos historias es que hay un rancho de por medio, pero el primero era un escenario del siglo XIX y el segundo es del siglo XXI. Empecé a escribir Me llaman Alice en septiembre del 2010. Dar vida a Alice fue casi una necesidad porque más que nunca escribir fue una terapia que me ayudó a superar las dificultades que la vida te obliga a superar. La acabé, la guardé y dos años después volví a ella, porque intuía que todavía tenía mucho que decir, hasta que finalmente la di por acabada.

Todo empezó con una pregunta: ¿Un nombre define una persona? Cuando nos presentan a alguien, sabemos cómo se llama, y si nos hablan de esa persona, aseguramos con mucha confianza: “Sí, la conozco.” ¿Pero la conocemos realmente? Incluso cuando creemos saberlo todo, una persona oculta mucho detrás de su nombre, de su identidad.

«Me llaman Alice, ese es mi nombre, pero detrás de mi identidad se esconde un pasado que quiero olvidar y un secreto que me pesa cada día más. Sin embargo mi pasado sigue acechándome. Sé que estoy en peligro pero no puedo acudir a nadie. Me veo en la tesitura de confesar o mentir: si callo, tarde o temprano los que amo sabrán que los he engañado; si confieso la verdad, acabaré en la cárcel.

Dicen que los sueños se cumplen si uno se esfuerza. En mi caso no puedo menos que preguntarme: ¿qué pasaría si el sueño estuviese basado en una mentira?»

En esta historia mi protagonista muestra muchos matices, los que quiere que todos vean y los que oculta para protegerse. Es ambigua porque por determinadas circunstancias se ve obligada a mentir; se ha convertido en una experta del engaño, en ocultar u omitir. Se siente justificada, pero en realidad todas sus mentiras acaban asfi‐ xiándola. Es una mujer sedienta de afecto, a los seis años su vida dio un vuelco, y ese hecho le ha impedido fiarse de los demás. En el momento más complejo de su vida, conoce a un hombre, Jackson, que supone un dilema porque no le es permitido el más mínimo acercamiento, aunque él se lo ponga muy difícil ya que no oculta su interés. De modo que en lugar de dejarse llevar por sus sentimientos, se vuelca en la familia de Jackson. Y así la ve él: «—¿Llegaré a conocerte algún día? A veces me parece ver tu interior, pero es como si en ti hubiese varias versiones de Alice; la que se ríe feliz con mi familia, la mujer de la mirada perdida, la que llora en silencio, la que me vuelve loco…

Contempló el reflejo del rostro de Alice en la ventana y vio que tenía un lado oculto en la sombra, el otro se veía con nitidez a la luz plateada de la luna. Era una imagen inquietante y a la vez tan propia de ella que se le encogió el corazón al pensar en todo lo que ella ocultaba, secretos que no compartía con nadie y que suponían una carga abrumadora. La obligó a darse la vuelta y se zambulló en aquellos ojos que hablaban de un llanto contenido.»

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Jackson, por su parte, es un hombre de familia cabal, divorciado, padre de tres hijos. Tiene un fuerte sentido de la responsabilidad, y su vida en el campo siempre le ha parecido perfecta, hasta que aparece Alice. Entonces su apacible día a día no le parece suficiente porque se ha enamorado de una mujer que nunca baja la guardia. Se ve a sí mismo así: «—Soy una persona sencilla —empezó pensativo, con voz pausada e incluso vacilante—, y siempre he deseado cosas sencillas. Desde muy joven supe lo que quería: casarme y formar una familia, tal vez porque perdí muy joven a mis padres. No me gusta mucho salir, me atrae más una velada en casa leyendo o charlando con mi familia que cenar fuera o bailar en un local abarrotado. Prefiero madrugar a trasnochar, el trabajo bien hecho a tomar el camino más corto.

Siempre elijo ropa cómoda, sin tener en cuenta las modas… Tampoco me gustan los coches deportivos ni correr, antepongo contemplar el paisaje a la velocidad… También he aprendido a ser prudente, tal vez gracias a mi ex mujer, no lo sé, pero soy consciente de que tengo una familia de la que cuidar. Quiero a mis hijos, a mi abuelo y a Juliette, que para mí son lo primero… »…Hace algo más de tres meses pensaba que mi vida era la que me convenía —siguió él—, tal vez un poco sosa, pero la que había escogido. Hasta que te vi… Cuando te vi… algo se agitó en mí. Ahora quiero cosas que nada tienen que ver conmigo… Quiero cosas que me desconciertan, que desbaratan todo lo que creía asentado en mi aburrida pero satisfactoria vida en el campo.»

La relación entre Alice y Jackson es tensa a pesar de la atracción que los envuelve, ambos son conscientes de lo que sienten pero el mutismo de ella es el mayor obstáculo que deben derribar, sin embargo el miedo a perderlo todo sella los labios de Alice. Y Jackson se niega a aceptar sus silencios, lo que produce incontables roces entre los dos.

«Al otro lado de la puerta Jackson la oyó llorar, un llanto apenas perceptible, como el de una niña asustada. Eso le dolió como si le hubiesen golpeado en el pecho y cerró los ojos respirando con dificultad.

Sentía el impulso de entrar de nuevo, tomarla en sus brazos y disculparse, pero su orgullo se lo impidió.

Seguir el juego de las medias verdades de Alice le estaba obsesionando…»

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Y cuando la verdad estalla… el mundo de Alice se derrumba…

«Jackson se paseó por el despacho, todavía consternado. Todo aquello no podía ser verdad, era una pesadilla. Le echó un vistazo por encima del hombro, embargado por un caos de sentimientos contradictorios. No conseguía hilar pensamientos coherentes y la rabia seguía latiendo en su interior. Se sentía traicionado, ridículo por haberse dejado embaucar con tanta facilidad…»

¿Realmente llegamos a conocer a las personas que nos rodean?

Y lo más inquietante: ¿conocemos tanto como creemos a las personas que amamos o nos engañamos porque nos negamos a aceptar algo que podría significar el fin?

Me llaman Alice es una historia de amor, pero también la lucha interna de una mujer que debe elegir, aunque sabe que sea cual sea su decisión estará en peligro.

Además de esta pareja, que me enamoró desde el principio, Me llaman Alice ofrece un sinfín de personajes segundarios, como un abuelo que, estoy segura, arrancará muchas sonrisas; y hay niños: me encantan introducir pequeños en las novelas, aportan frescura y espontaneidad. Los lectores encontrarán personas buenas y generosas, odiosas y egoístas... Y las más peligrosas, las que caminan con sigilo como un cazador hacia su presa.

Espero que los lectores disfruten y se emocionen leyendo Me llaman Alice, tanto como yo cuando la escribía.

Un abrazo a todo/as.

PD: Por temor a desvelar detalles, he suprimido partes de estos párrafos dejando puntos suspensivos, pero la esencia está ahí, para que entendáis mejor a esta pareja.

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Cazatalentos. CAZASERIES Las crónicas de Nick Sherrilyn Kenyon por Yuliss M. Priego

Si menciono a la autora Sherrilyn Kenyon, todas sabréis a quién me refiero. ¿O no? Muchos de sus libros romántico históricos se han traducido al español (por no decir todos), y numerosas series paranormales y fantásticos, como «Cazadores Oscuros» o «La Liga», publicadas por Random House y Planeta, respectivamente. No obstante, la autora también se ha incursado en la literatura juvenil paranormal, dentro del mundo de los Cazadores Oscuros, y esta todavía no se ha traducido al español, y no sé si lo hará siquiera.

Mi pregunta es… Editoriales, ¿¡pero a qué estáis esperando, por Dios!? O mejor dicho, ¡por los dioses! Hay demasiados en ese mundo que ya hasta pierdo la cuenta…

En fin, al grano. Sí, esta serie de la que hablo tiene el título de «Chronicles of Nick», que en español sería algo así como «Las crónicas de Nick». Nick es una persona que cualquiera que haya leído los primeros libros de los Cazadores Oscuros conoce. Las que hayan continuado con la interminable serie se habrá dado cuenta de que la historia de Nick da para muuucho, muuucho. De ahí esta serie juvenil que Kenyon

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ha decidido publicar y que ya va por el quinto libro (el sexto saldrá en el 2015 en Estados Unidos).

Muchas os preguntaréis por qué es juvenil, otras pensaréis que no va a resultar tan interesante por ese motivo, pero yo os digo que para nada. La serie es juvenil porque el Nick que protagoniza las novelas empieza siendo un adolescente con catorce años. No obstante, y no puedo decir mucho porque si no spoileo de lo lindo y sé que eso sería ser muy cruel, sí que tiene una inmensa relación con la trama que sigue la serie de los Cazadores Oscuros. Durante los libros de la serie veremos la vida de Nick, o al menos una de ellas (sí, no entendéis nada, pero ya os digo, como mencione algún detalle más os destrozo toda la historia), y tendrá que enfrentarse a aventuras y a problemas que ni él mismo pensaría posibles.

Los títulos de los libros son Infinite, Invincible, Infamous, Inferno e Illusion (Instinct es el sexto). A lo mejor os preguntáis si de verdad son necesarios para entender la trama de los Cazadores Oscuros y mi respuesta es no, no son necesarios. No obstante, para los que buscáis con ganas saber más de este personaje, sí que es

altamente recomendable leerlos porque de un momento a otro Kenyon va a ligar ambas series. No puede ser de otro modo. Y es posible que cuando Kenyon decida sacar más a Nick en sus libros en la serie principal, Cazadores Oscuros, los lectores no sepan cosas que se explican en esta serie juvenil que es igual de interesante que la primera.

No os dejéis engañar, lectores ni editoriales, aunque sea una serie juvenil, es una buena historia juvenil que puede leer todo el mundo. Yo desde luego estoy enganchada. Y conozco a varias lectoras que también lo están.

Además, ¡va a haber películas!

Todavía está todo en proceso y no se sabe realmente cuándo estarán, pero en cuanto salgan a la gran pantalla, sin duda alguna va a ser un gran reclamo.

Así que este bimestre, la serie que «cazo» no puede ser otra que esta, de la gran y única Sherrilyn Kenyon. Quién sabe… a lo mejor las editoriales me hacen caso. O a lo mejor no. Al menos ahora me he quedado más tranquila al hablaros de la serie, ya que ahora la conocéis y podéis hacer más presión por las redes sociales. ¡Ay, Nick! Es que me encanta…

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Lectura exótica del bimestre…

«Las huellas del desierto» Maha Akhtar

“

Un billete de ida a lo desconocido. Un viaje que, de forma inimaginable, MARCARÁ SUS VIDAS PARA SIEMPRE.” La carrera contrarreloj comienza desde el segundo cero. Las dudas no tienen cabida en un callejón sin salida, y solo quien demuestra saber cómo arreglárselas puede permitirse siquiera tener esperanza. ¿De qué? De pensar en un futuro. Sentirse observada cobra otro sentido, sentirse desvalida pasará a formar parte del pan de cada día.

Nunca se puede dar nada por sentado ni se puede respirar aliviado. Tan solo una decisión puede provocar la victoria o tu perdición, más no solo es cosa de uno o dos.

A través de diferentes ojos, la tumultuosa ciudad llena de oscuros secretos cobra vida en esta obra de Maha Akhtar. La lucha por la supervivencia obligará a los personajes a desenvolverse en situaciones que pondrán en peligro su vida y en duda su integridad. ¿Hay bando ganador? ¿Cuál es el verdadero objetivo, la supervivencia o ser fiel a uno mismo?

Al igual que la guerra no solo se vive a gran escala, las personas tienen más de un relato que contar. Vidas que se entrelazan y momentos desgarradores pasan a formar parte de la memoria de una generación. ¿Qué hacer cuando tu mundo se desmorona? ¿Cómo no dejarse llevar tras la desesperación?

Los nervios pasan a segundo plano cuando la adrenalina recorre cada centímetro de un cuerpo que debe resistir ante la tempestad que asola lo más hondo de un organismo desmadejado.

Maha Akhtar hace volar el anhelo de viajar hasta los parajes relatados en la novela.

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Es un grito en silencio por aquellos que no pueden expresar los horrores vividos, un lamento tangible que tiene la capacidad de estremecer y calar hondo Encuentros que parecen destinados para entretejer el hilo conductor de las vidas de los protagonistas de las novelas son solo una pequeña delicia que mantendrá al lector en vilo y éstos, nosotros, devoraremos

traiciones y lucha no debe, además, menospreciarse. La ansiedad por saberse inútil de ayudar o siquiera incapaz de auxiliar a los personajes cuando más lo necesitas deja una huella indeleble. Y qué decir tiene que no es fácil evitar implicarse y simpatizar con los personajes, que en todo tipo de situaciones demuestran una

ávidos la obra de Akhtar, ya que no asegura un breve momento de miel en los labios, sino que dotará al paladar de los lectores de un sabor nunca antes conocido. La autora pone un especial cuidado a la hora de retratar con fidelidad el ambiente y el temor que presidían unos días en los que la incertidumbre reinaba de manera indiscutible.

La habilidad de retratar un paisaje teñido por

variedad de reacciones que dejarán al lector, sin duda, boquiabierto.

Maha Akhtar nos ofrece un retrato de lo vivido y sufrido difícil de olvidar. Si bien es cierto que la entereza forma parte de las personas, está en cada uno elegir entre el camino fácil o aquello que aterra, evoca y provoca desde el miedo más íntimo hasta la paz más absoluta.

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Mientras él la guió hasta la pista de baile, ella notó un brillo en sus ojos. Ambos llevaban puestas máscaras pero se reconocieron con solo mirarse a los ojos.

Llegaron a la pista de baile y ella lo miró al tiempo que esbozaba una sonrisa radiante.

La música empezó a sonar…

Compases de vals: un, dos, tres.

Mientras él la cogía una mano y deslizó la otra por su cintura, ella intentó relajarse cogiendo su mano y posando la otra en su hombro. Su contacto fue cálido pero a ella le recorrió un escalofrío.

Entonces empezaron a moverse al compás de la música. Él la hacía girar y girar, moviéndose al unísono. Todo a su alrededor se congeló, solo existían ellos dos en el salón de baile.

El vals era un baile demasiado íntimo, bajo la romántica y tenue luz que emanaban de las lámparas, el olor de las flores que formaban la decoración del salón y la música de violines y arpa.

Un, dos, tres, giros, vueltas, un, dos, tres.

No dejaban de mirarse a los ojos. No había más parejas bailando en el salón, no había más ojos que los miraran.

Solo existían ellos y la música.

Acabó el baile y acabó la magia. Ella se soltó de sus brazos y se apresuró a salir al jardín por los ventanales que estaba abiertos. Él la siguió, pero no con la suficiente rapidez pues la perdió de vista.

No volverían a verse más pero ambos recordarían ese vals. ©Pilar Descalza

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Laurent Me levanté de la cama cuando los primeros rayos del nuevo día comenzaron a abrirse paso entre los últimos vestigios de la noche. No había logrado dormir mucho después de lo sucedido. Y menos, si volvía mi mirada hacia la persona que todavía permanecía en la cama. Suspiré mientras inclinaba la cabeza, sonriendo de manera burlona por los caprichosos designios del destino. Llevábamos algunos años sin vernos, hasta aquel día… Un leve gruñido a mi espalda captó mi atención. Chiara se desperezaba como si de una gata se tratara. La observé en silencio de manera detenida mientras en mi mente se deslizaba la sibilina pregunta una vez más: ¿Y ahora qué…? Abrió sus ojos con lentitud hasta que se quedaron fijos en mi rostro, durante segundos en los que no pareció darse cuenta de lo que había sucedido. Aún permanecía sumida en el sueño mientras yo asimilaba poco a poco la situación que iba a plantearse en breves momentos. En cuanto ella, fuera consciente de lo ocurrido.

Chiara emitió un breve sonido gutural y volvió a enterrar su rostro en la almohada. Tal vez se debió a la claridad del día; o al hecho de verme en su habitación del hotel. Pero como si algo dentro de ella se hubiera puesto en marcha, levantó su cabeza dejando que sus cabellos negros se arremolinaran en torno a su rostro, ocultándolo, dotándolo de ese misterio, que la noche pasada me había sobrecogido. Con la agilidad de un felino se sentó apoyándose contra el respaldo, al mismo tiempo que se cubría su cuerpo desnudo con la sábana. Percibí como sus pechos subían y bajaban con celeridad bajo ésta ¿Estaba nerviosa? ¿Crispada? ¿Ansiosa? Giró el rostro para mirarme fijamente.

—¿Vas a quedarte ahí todo el día, mirándome de esa forma? —me preguntó con un voz soñolienta mientras se apartaba sus cabellos del rostro, dejándolo libre para que pudiera contemplarlo. El tono de su voz había alcanzado la más ácida ironía mientras sus ojos irradiaban una extrema frialdad.

—Podría hacerlo y no me cansaría —le respondí mientras era consciente de lo que significaban mis palabras. Pero daba por seguro que a ella, le sonarían demasiado… sentimentales. Por ello emitió una sonrisa sarcástica mientras agitaba su mano delante de mí.

—No me cabe la menor duda. Pero creo que no es momento de ser romántico, ni cursi. Ni de querer quedar bien.

—¿Entonces? ¿Qué sugieres? —le pregunté mientras arqueaba mis cejas hasta que desaparecieron bajo mis cabellos, aún desaliñados. Me encogí de hombros mostrando mi indiferencia. Chiara sonrió de aquella manera tan irónica y sensual con la que solía hacerlo. Y supe a qué se refería. No necesitaba que me lo aclarara.

—¡Se trata de cómo coño hemos acabado en la misma habitación! —me aclaró alzando la voz como si ello fuera a solucionar lo sucedido. O como si me acusara de ser el único responsable—. Y en la misma cama…—susurró pasando su mirada por esta mientras sacudía su cabeza con un claro gesto de incredulidad.

Sonreí divertido por verla confusa, intrigada por como habíamos acabado en la misma habitación de hotel durante la boda de Fabiola. La imagen de ella entregándose de aquella manera tan apasionada no se me olvidaría con facilidad. Podría asegurar que no había encontrado aquella pasión, aquel fuego que me transmitía en sus besos, aquella manera de

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moverse, de mirarme en ninguna mujer después de ella. Sí. Hacía casi cinco años que no nos veíamos, pero era como si no hubiera pasado el tiempo.

—¿Tal vez demasiado… champán? —sugerí mirándola con gesto divertido mientras ella me devolvía su mirada cargada de furia por lo había de decir. Juraría que acababa de maldecirme.

—¿Estás de coña no? Que sepas que no me hace gracia haberme acostado contigo —me lanzó como si sus palabras fueran un látigo, que buscara hacerme daño. Tal vez a estas alturas ya nada me afectara… No, después de nuestra larga despedida cinco años atrás. Había aprendido a vivir con su ausencia, pese a lo que ésta me había provocado. Pero al final se convirtió en mi compañera de piso, de trabajo. Era una sombra pegada a la mía propia.

—Gracias, por la parte que me toca —le rebatí fingiendo sentirme ofendido. La quería. La amaba. No había dejado de hacerlo en todo ese tiempo, y cuando me llegó la invitación de la boda de nuestra amiga… Bueno, ¿qué queréis que os diga? Sí. Lo primero que se me pasó por la mente fue eso mismo que estáis pensando. Que Chiara estaría allí. Pensé rechazarla. No asistir, pero… No es mi estilo huir aunque ella piense lo contrario.

Chiara me miró con una mezcla de ironía, incredulidad e incluso desprecio por lo que acababa de decir. Estaría engañándome si pensara que su sensual imagen, con la sábana cubriendo su cuerpo, no despertaba el deseo en mi interior. Por favor, aquella mujer me había dejado marcado para siempre, y la noche pasada debía admitir que fue inolvidable. Su mirada quedó medio oculta tras sus oscuros cabellos, pero podía percibir el brillo de sus ojos. Entreabrió sus labios primero, tomando aire, y después se los humedeció de aquella manera tan casual, tan exquisita, que aumentó mis ganas de apartar la sábana y devorarla con mis besos.

Me dejé caer sobre la cama apoyándome en un codo mientras mi otra mano volaba hasta la cortina de rizos, que era su pelo. Con exquisita delicadeza la aparté para dejar su rostro al descubierto. Sin haberlo pensado le pasé mi mano por la mejilla, dejando que el pulgar recorriera su perfil hasta llegar a sus labios. No apartó su mirada de la mía en ningún momento.

Y cuando pasé la yema de mi dedo por sus labios, se escuchó un leve suspiro. Fui testigo de como cerraba sus ojos a mi caricia y trataba de ocultar su sonrisa de complacencia.

—No puedes evitar sentir lo mismo que yo —le susurré con toda intención obligándola a mirarme a los ojos. Una mirada que ahora mismo, era tan clara como sus sentimientos—. Sabes perfectamente por qué ha sucedido, Chiara.

Chiara ¿Por qué de todos los hombres con los que había estado, ninguno me conocía tan bien como él?

Hasta el punto de saber como acariciarme. Besarme. Susurrarme palabras tiernas. Hacerme disfrutar del sexo como ninguno. Cinco años habían pasado desde que nos dijimos adiós y a pesar del tiempo y la distancia, era como si, de alguna forma, aún siguiéramos conectados. En verdad que seguía sintiendo algo por él. Nada más verlo aparecer entre los invitados, el estómago se me había encogido. Miré a Fabi, apelativo cariñoso de nuestra amiga, y percibí su sonrisa y como me guiñaba el ojo en clara señal de complicidad. ¿Ella lo había invitado? ¿Por qué no me consultó? Ahora ya nada de eso importaba. No después de haber revivido el pasado.

Sonreí con ironía al darme cuenta que tenía razón. Lo sucedido no era sino la continuación de lo que habíamos dejado tiempo atrás. Cerré los ojos mientras sacudía la cabeza como si pretendiera borrar los recuerdos de sus manos sobre mi cuerpo; de sus labios sobre los míos; de su mirada fija en mí mientras me hacía vibrar. Pero…

—¿Por qué has tenido que venir? —susurré en un principio mientras me mordía el labio e intentaba luchar contra mi deseos por no mirarlo. Pero entonces, sentí como su mano se posaba con delicadeza bajo mi mentón y me obligaba a hacerlo. Y fue entonces cuando ese pálpito que

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creía olvidado en el tiempo, me volvió a asaltar. Esa sensación que me hacía sentir como si estuviera viva, se apoderó de mí.

—El destino me trajo hasta ti.

Sus palabras susurradas mientras sonreía de manera pecaminosa provocaron que mi piel se erizara. No era capaz de controlar mis emociones cuando él estaba tan cerca. ¿Es que en verdad lo deseaba? Sí, a juzgar por donde estábamos y en qué situación. No, no se trataba de una cuestión de sexo. Me refería a que si en verdad… lo había echado de menos.

—Eso suena muy romántico —le dije sonriendo mientras recordaba como desde el primer momento que nos conocimos, me había hecho reír—.Y tú, déjame decirte, que, nunca lo has sido —le aseguré mientras mi ceja derecha se arqueaba en clara señal de desconcierto.

—Cierto, pero también me prometí que me mantendría alejado de ti durante la boda.

—¿Y qué te ha impedido hacerlo? —le pregunté casi en un susurro mientras sentía como la sábana se deslizaba de manera sugerente y peligrosa por mi cuerpo. Por un instante me había olvidado de que estaba completamente desnuda. Me di cuenta cuando su mirada acarició mi cuerpo agitando mi interior. Sí. Sentirme deseaba me halagaba, pero al mismo tiempo me ponía al borde del abismo, si era él quien lo hacía.

—Tú —respondió mirándome con una intensidad arrebatadora mientras su mano se posaba ahora en mi rostro y me obligaba a deslizar el nudo formado en mi garganta. Sentía la respiración agitarse mientras un escalofrío recorría mi espalda—. Se me olvidó en cuanto te vi.

—Soy consciente de ello —comenté en mitad de mi risa, provocada por la situación. ¡Oh por favor, ¿por qué ha tenido que suceder?! Mi vida estaba perfecta. Sin sobresaltos de este tipo. Y ahora… ¿qué se suponía que iba a suceder? Aquella pregunta me asaltó y me aterró—. ¿Piensas marcharte hoy?

Mi pregunta lo dejó pensativo. ¿Incómodo tal vez? ¿Qué esperaba? Necesitaba saberlo.

Quería saber qué pasaba por su mente. Si estaría dispuesto a…

Laurent Me quedé mirándola mientras podía percibir el leve temblor en su voz. En como la había modulado para no parecer… ¿nerviosa? ¿Ansiosa? Aquello me provocó un leve sobresalto. ¿Qué esperaba de mí? Yo sí era consciente de lo que quería. De porqué había acudido a la boda de Fabi sin vacilar. Y porqué, pese a que me había prometido no acercarme a ella, no lo había podido resistir. No cuando sabía que con solo rozarla, con tan solo posar mis ojos en ella, mi promesa carecería de sentido. Se suponía que no me afectaría. Que después del tiempo ya no podía sentir nada por ella…

—No. Estaré un par de días. Tengo que arreglar unos asuntos.

Emitió un leve gemido. No sé si de alivio, o de lástima. Pero el brillo de su mirada resolvió mi duda. El poder mágico de las lágrimas en sus ojos, me dijeron lo que quería saber.

—Entonces tal vez nos volvamos a ver, aunque preferiría que no fuera en estas circunstancias —aclaró mientras su mirada se posaba en la cama, y su mano se aferraba a la sábana.

Sentí el nudo en el estómago. El mismo que se había formado aquel maldito día en que cada uno decidió emprender su camino, y buscar un futuro mejor. En aquella ocasión yo era un joven muchacho con grandes expectativas para quien el amor y los sentimientos eran un pasatiempo.

No me di cuenta de cuales eran los de ella. Ni si quiera se lo pregunté pues di por supuesto que lo nuestro terminaba allí. Pero si dijera que desde aquel mismo día, no he dejado de pensar en ella sería un mentiroso. Si admitiera que ni un solo día concebí la posibilidad de llamarla, de

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decirle cuanto la echaba de menos, cuanto anhelaba estrecharla entre mis brazos… sería un completo estúpido.

—¿Y si volviera a suceder? ¿Acaso me estás insinuando que te arrepientes de lo sucedido? — le pregunté con un toque de preocupación mientras mi ceja derecha se arqueaba.

Chiara sonrió irónica ante mi pregunta.

—Tengo edad para saber lo que hago y con quien lo hago. Y no, no me arrepiento de haber follado contigo —me respondió con cierta brusquedad. Cierto desdén, mientras ahora su mirada relampagueaba de furia. ¿Estaba herida por mis comentarios? Su comportamiento parecía expresarlo. Pero olvidaba lo orgullosa que era—.Y ahora si eres tan amable me gustaría…

No pude evitarlo. Me abalancé sobre ella recostándola sobre la cama. Acallando sus protestas con mi boca. Correspondió a mi beso y a mis caricias sin pensarlo dos veces. Era consciente de lo que ambos sentíamos. Y ni ella ni nadie podían negarlo. Enmarqué su rostro entre mis manos mientras me miraba con curiosidad. Sentía su respiración agitada bajo mi cuerpo, mientras sus manos permanecían en mi cintura.

—¿Qué ibas a decirme?

Chiara No esperaba su reacción, pero debo admitir que me gustó. No sé si lo sentía de verdad, o más bien fue un impulso el que lo llevó a tumbarme de espaldas en la cama y besarme de aquella manera tan frenética. A pasar sus dedos por mi rostro. A mirarme de aquella forma. Pero mi cuerpo permaneció quieto. Sin poderse mover. Sin responder a mis llamadas para resistirme, y quitarme de encima a Laurent. Y en vez de ello, correspondí a su beso. A la suavidad de boca y al calor de su aliento. Sólo él sabía como provocarme el anhelo, el deseo, las ganas de perderme en ese torbellino de sensaciones…

—Iba a pedirte que te marcharas —susurré tratando de parecer fría, mientras mi corazón continuaba latiendo desbocado y el deseo se asentaba entre mis muslos, de nuevo. ¿O es que en algún momento se había marchado?

Esbozó una sonrisa irónica ante mi comentario. Al momento comprendí que le había herido.

No creo que fuese para tanto. Pero se levantó sin decir nada más. Se vistió en completo silencio, sin ni siquiera dirigirme una simple mirada. ¿Estaba furioso, o tal vez dolido por mi comportamiento? Una vez que acabó de vestirse se quedó frente a la cama. Mirándome con un tímida sonrisa llena de melancolía.

—Se me olvidaba que siempre fuiste muy directa. Por eso siempre te… No importa, si no te veo en la fiesta de esta tarde en honor a los novios… ¿Querrás hacerme un último favor? —se detuvo mientras intuía que le estaba costando mucho decirlo. Y aquella última pregunta me había dejado sin aliento. ¿Qué pretendía? Sentía la punzada del dolor. Agarré con firmeza la sábana y contuve las lágrimas porque sabía lo que iba a suceder. Pero… ¿qué me impedía retenerlo a mi lado? Pedirle que no se fuera. Que no hablaba en serio. Había venido a la boda.

Nos habíamos acostado rememorando viejos tiempos, y ahora que él me parecía dispuesto a… ¿a qué? ¿A darnos un revolcón cada vez que nos viéramos para saciar nuestras necesidades?—.

Prométeme que serás feliz, Chiara.

Con esas palabras salió de la habitación bajo mi atenta y cristalina mirada. Quise salir tras él, pero mi cuerpo no era capaz de abandonar la cama. Me quedé quieta sin saber si mi felicidad acababa de abandonar la habitación.

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Laurent Había decidido quedarme y asistir a la fiesta en honor de los novios. Aunque si os soy sincero, no me apetecía ni lo más mínimo después de que Chiara me pidiera que me marchara de aquella manera. Y ahora me encontraba en la terraza del hotel ajeno a todo el bullicio del interior.

Quedaba claro que allí no había nada que me retuviera.

—Pensé que te habías marchado —dijo una voz a mi espalda que reconocí al instante. Inspiré hondo mientras me quedaba mirándola como si ella fuera la única mujer que había allí.

—Lo haré en cuanto acabe la celebración.

—Tal vez podrías quedarte. Es un último favor que te pido. —Su tono me pareció una petición que no podía rechazar. Posó su mano sobre mi antebrazo como si quisiera retenerme. ¿Qué se proponía?

—Pensé que querías que me marchara —le dije entornando mi mirada hacia ella.

—Yo también lo creía.

—¿Qué te ha hecho cambiar de opinión?

Se tomó su tiempo. Su mirada se perdió a lo lejos mientras sonreía por los nervios, y se mordía el labio. Cerró los ojos antes de volverlos a fijar en mí.

—Me pediste que fuera feliz. Pero, verás, es que… sólo conozco a alguien que puede hacerlo.

Sentí el anhelo en el susurro de sus palabras. Su respiración agitada, mientras el brillo de las lágrimas acentuaba más su mirada.

—No debí alejarme de ti —le confesé mientras ella sacudía la cabeza—. Fui un irresponsable, y lo lamento. No pensé en lo que tú querías. En lo que tú sentías. Pero, te aseguro que si me dices que me queda un resquicio para enamorarte…

—Ya te lo he dicho. Sólo conozco a una persona que puede hacerme feliz. Y está justo ahora delante de mí pidiendo disculpas por algo que sucedió hace cinco años. Tal vez yo también tenga parte de culpa al no haberte pedido que te quedaras a mi lado. Por eso quiero que lo hagas ahora.

La rodeé por la cintura para atraerla hacía mí y sentirla una vez más. Quería besarla con un frenesí que desconocía. Con una urgencia desmedida. Como si la noche pasada no hubiera existido.

—¿Y ahora qué…? —le pregunté mirándola con detenimiento, mientras mi mano permanecía sobre su cintura.

—Ahora sólo quiero que me beses —me susurró mientras me sujetaba por la corbata y tiraba de esta para que me inclinara sobre sus labios una vez más y quedarme suspendido en estos para siempre.

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Series y Sagas

Highland Pleasures “El gran descubrimiento que ha supuesto Jennifer Ashley” Cuando esta serie llegó a nuestras librerías solo una palabra apareció en la mente de muchos lectores: INNOVACIÓN

Artículo: Merche Diolch

Y es que dentro del subgénero histórico ya era difícil hacer algo nuevo, conseguir que una historia pareciera fresca, sin estar encorsetada dentro de la prenda que tanto lucían las protago‐ nistas femeninas de estas novelas, pero Jennifer Ashley lo ha conseguido y lo ha conseguido con gran maestría.

En la serie de Highland Pleasures podéis encontrar:  Protagonistas de infarto.  

Los personajes femeninos se alejan de las damiselas indefensas, para tomar las riendas de su vida y con ello, el control de su corazón.

Los personajes masculinos son… de los que te roban la respiración. Cabezones, temperamentales, locos, románticos, sensatos… Un compendio de persona‐ lidades que consiguen, sin mucho esfuerzo, enamorar a los lectores.

 Historias con sabor antiguo pero de corte actual.

Son novelas históricas pero tal como las trata Jennifer Ashley, como desarrolla la trama, la narración, las cualidades de sus personajes, podríamos estar leyendo una historia actual sin problemas.

Jennifer Ashley, una mujer que vive y viaja a través de las palabras 47 RománTica'S

 La trama, la historia, la aventura…

Encontramos acción, intriga, misterio… Una historia que engancha al lector desde el principio y que acompaña a la relación romántica. Una trama que ayuda a dar fuerza a la novela en sí y que consigue en ocasiones, que el lector se olvide que está leyendo un libro romántico y quiera descubrir el misterio que esconde las páginas impresas.  Romance, pasión, erotismo…

No podemos olvidar que Jennifer Ashley y en concreto esta serie, Highland Pleasures, son novelas románticas y como buenos libros catalogados dentro de este género, descubrimos una historia de amor de impacto. Una historia de amor distinta en cada novela de las que componen esta serie, y que consigue que el lector sienta, comparta desde el principio al fin, un amor de los que vuelven locos.

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La serie de Highland Pleasures se publicó en nuestro país, España, allá por el año 2011 y a fecha de hoy, se ha editado el sexto volumen. Aunque hay que mencionar que la autora tiene en previsión publicar otros dos libros más (por ahora).

Os dejo los títulos completos de la serie, entre los que hay algún relato breve o especial por Navidad, y luego destacaré, los títulos que se han publicado en España

Títulos que componen la serie…

1.

2.

3.

4.

La locura de Ian MacKenzie El escandaloso matrimonio de Lady Isabella Los pecados de Lord Cameron La esposa perfecta para el duque 4.5. A Mackenzie Family Christmas Novela corta de quince capítulos, no publicada en España. Lo que Jennifer Ashley nos cuenta aquí, se puede situar temporalmente tras la trama que se desarrolla en La esposa perfecta para el duque y que podría ser como el epílogo.

5. La seducción de Elliot McBride 5.5. The Untamed Mackenzie Novela corta, no publicada en España, en la que nos encontramos la historia de Fellows (uno de los personajes que sale a lo largo de los libros anteriores) y de Louisa Scranton.

Además, encontramos un adelanto de lo que podremos hallar en La rendición de Daniel MacKenzie.

6. La rendición de Daniel MacKenzie 6.5. Scandal and the Duchess Novela corta no publicada aún. Fecha de publicación, en inglés, para 16 de septiembre 2014.

Sus protagonistas son: Steven McBride y Rose.

7. Rules for a Proper Governess Sin fecha de publicación.

Sus protagonistas: Sinclair McBride y Bertie Frasier.

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1. La locura de Lord Ian Mackenzie.

Con una pareja protagonista de impacto. Con un personaje masculino que consiguió robarme el corazón desde el principio, creo, y no me equivoco, que estoy enamorada de esta historia.

Sus protagonistas son: Ian y Beth.

Vale, lo sé, no debería mostraros ningún favoritismo pero… no puedo evitarlo. Ian, es mucho Ian.

[...]―No sé si lo he entendido bien. Quiere llevarme a la cama, pero como he sido una respetable señora casada, ¿considera que tenemos que pasar por la vicaría para conseguirlo? ―Sí.

Ella emitió una risa medio histérica. ―Mi querido lord Ian, ¿no cree que eso es un poco exagerado? Y después de haberme llevado a la cama, ¿seguiría casado conmigo? ―Pienso acostarme contigo más de una vez.[...]

2. El escandaloso matrimonio de Lady Isabella.

Mac e Isabella; Isabella y Mac… a cuál más cabezota y a cuál más enamorado.

Una historia distinta, ambientada a finales del siglo XIX, en la que descubrimos que cuando el amor llama a tu puerta, cuando encuentras a tu pareja, pase lo que pase al final, el alma perdona y el corazón despierta de ese letargo, latiendo a mil por hora cuando le vuelves a tener cerca.

[...]―Sí que es un juego, cariño. -Mac la miró fijamente-. Es el juego más serio que haya jugado nunca. Y tengo intención de ganar. Volverás conmigo, Isabella... A mi vida, a mi casa y a mi cama.[...]

3. Los pecados de Lord Cameron.

En este libro volvemos a reencontrarnos con lo que os llevo mencionando a lo largo de todo este artículo, y es que Jennifer Ashley innova, atrapa desde la primera página y enloquece... enloquece al lector con sus personajes, personajes que consiguen enamorar con sus defectos, sus miedos y sus pesares; con las historias que nos narra, donde el romance brilla con nombre propio, dentro de un marco histórico que para algunos podría estar ya muy usado pero que en realidad nos muestra que aún todo no está escrito...

Protagonistas: Cam y Ainsley McBride.

[...]―A los hombres nos gusta el placer, señora Douglas. lo ansiamos, lo deseamos; no pensamos más allá. Incluso los que fingen ser más estirados y piadosos se desviven por él. No dejamos de ser bestias bajo una fina pátina de civilización. Si una mujer le pone los cuernos a su marido mientras me proporciona placer, allá ella. No la rechazo, pero me niego a admirarla por ello. ―Suena muy solitario ―dijo ella con ternura. ―Rara vez estoy solo. ―Lo sé. Eso es lo peor de todo. [...]

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En un principio la serie de Highland Pleasures trataba sobre los hombres del clan MacKenzie pero en uno de los últimos libros publicados en España, hemos conocido a los McBride; un clan que llegó para quedarse cuando apareció en escena uno de los personajes femeninos que enamoró a un Mackenzie.

Pero como esto más que aclarar os puede liar con tanto MacKenzie para arriba, McBride para abajo, por ello estamos hablando brevemente de cada uno de los libros que conforman esta serie (los publicados en España)

4.

La esposa perfecta para el duque.

Con este libro llegamos a la historia de Hart Mackenzie... el mayor de los hermanos Mackenzie... ains... Hart...

Tenemos la posibilidad de conocer mejor a Hart Mackenzie, su antigua relación con Eleanor y la futura; los secretos que rodean a las responsabilidades, que son muchas para el mayor del clan Mackenzie.

[...] ―Nunca permitas que te haga daño ―le pidió él.. Si hago algo que no te gusta, dímelo. «Detente, Hart», y yo pararé. Te lo prometo.

Ella meneó la cabeza. ―Jamás me has hecho algo que no me gustara[...]

5. La seducción de Elliot McBride.

Una historia distinta. No sé si porque ya hablamos de la rama de los McBride que llegaron a la vida de los McKenzie con el matrimonio de Cam y Ainsley, y quizás la autora ha querido diferenciar de alguna forma ambos clanes, o porque la historia de amor de su pareja protagonista es distinta…

No sé, quizás el trato, las descripciones, la historia es la que menos me ha enganchado pero como forma parte de la serie de Highland Pleasures, HAY QUE LEERLA (no olvidemos que sobre gustos no hay Sus protagonistas son: Elliot y Juliana.

[…] «Si pudiera escucharla durante el resto de mi vida… Si pudiera oírla en medio de la noche, quizá podría mejorar». […]

6. La rendición de Daniel MacKenzie.

Volvemos a los orígenes de lo que conocemos y nos enamoró de la serie Highland Pleasures. Con humor, intriga, acción y pasión.

En esta ocasión redescubrimos a Daniel, el menor del clan MacKenzie, a quien le traerá por la calle de la amargura, Violet Bastien.

[…] ―Conozco algunas razones por las que cedemos a la pasión, cariño. La primera es pura biología. Si has leído los libros del señor Darwin, sabrás que afirma que todos vivimos para hacer tantas copias de nosotros mismos como podamos, pues sabemos que tendremos que dejar este mundo algún día. […]

Y llegamos al final de lo que tenemos publicados, de la saga Highland Pleasures, donde se debe destacar que nos encontramos ante una serie:  Distinta  Innovadora, dentro de la histórica.

Te invito a descubrir a los MacKenzie y a los MacBride

¡¡¡No te arrepentirás!!!

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Al contrario, yo diría que su libro me hizo llorar muchísimo más que el del propio Aquerón, y con eso no digo nada, pero lo digo todo.

Styxx es, en palabras simples, un personaje que sufre.

Mucho. Se podría decir que igual o más que su hermano gemelo. Es por ello por lo que este bimestre este artículo va dedicado a él.

Sería en extremo difícil de contar por qué este personaje es digno de ser considerado uno de nuestros Dioses del Olimpo, porque os estaría spoileando todo su libro.

STYXX «EL INCOMPRENDIDO»

por Yuliss M. Priego

No hay una sección mejor en la que incluir a este personaje. Algunos, los que no os hayáis leído todavía su libro, pensaréis que semejante personaje no merece estar entre los Dioses del Olimpo de nuestra revista por lo mal que se porta con su hermano Aquerón a lo largo de toda la serie de los Cazadores Oscuros de Sherrilyn Kenyon…

¡ Ay, Aquerón… !

Pero lo que no saben es que Styxx, o Estigio, como se ha traducido al español, no es tan malo como parece ser…

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Con Styxx no todo es lo que parece Una vez leído Aquerón, no se quiere más que odiar a muerte al pobre Styxx, pero no hay que olvidar que ese libro, como bien indica su propio nombre, no está contado de un modo muy objetivo. Al contrario, el punto de vista de esa historia es única y exclusivamente el de Aquerón. Sin embargo, cuando empezamos a leer Styxx, dudosos por ver si en realidad vamos a querer volver a leer todas las penurias por las que hizo pasar a su hermano, nos estrellamos de golpe contra un muro tan alto que es imposible de sortear.

¡Cuán equivocados estábamos!

Habíamos estado mal juzgando a un personaje por las experiencias de otro; hecho que, irónicamente, suele pasar mucho en la vida real. Pero vemos que no todo es lo que parece.

Las tornas se cambian cuando el punto de vista con el que vemos los sucesos es diferente.

Una misma realidad, diferentes ojos. Y lloraréis. Mucho.

Styxx es un Dios del Olimpo de los pies a la cabeza. Por todo el dolor que tiene que soportar por su hermano (y los que os hayáis leído ya el libro sabréis a lo que me refiero, los que no, ¡ya tardáis!). Por ese amor infinito que le profesa cuando son pequeños y parece que nunca va a tener su recompensa.

Por ese odio que crece en él por todo lo que tiene que pasar en su vida… por proteger a su hermano.

Sé que me repito mucho, pero lloraréis.

Cuando me leí Styxx, pese a ser el libro un buen tocho, me lo ventilé en unos pocos días. ¡Por fin vuelve Sherrilyn Kenyon! ¡Sus buenos libros! Y veréis, veréis las sorpresas y la realidad con unos nuevos ojos.

Me estoy muriendo por soltar un spoiler, pero no puedo, porque si no mi vida puede peligrar.

No obstante, sí que voy a decir que me encantan las segundas oportunidades.

Y Styxx, sin duda, se la había merecido más que nadie. Y me alegra de que por fin hayamos podido ver que es un personaje que merece la pena, tan lleno de amor por aquellos seres a los que ama, y tan anhelante de amor y de cariño, que se adueña de nuestros corazones desde la primera página.

Aun así, yo con lo que me quedo y que tengo que volver a destacar aquí, por su realismo y verdad es: una misma realidad observada con ojos distintos puede ser, y será, diferente. Nada es lo que parece. Y no deberíamos juzgar a las personas, ni personajes, solo por lo que nos digan o cuenten otros; a la vista está que podemos estar muy, muy equivocados con respecto a los acontecimientos.

Dicho esto, solo me queda insistir una vez más en que leáis corriendo, corriendo el libro y experimentéis de primera mano lo que estoy comentando. No puedo decir spoilers, ya lo sé, ya lo sé, pero… ¡Aggggggh! ¡Es que ocurren tantas cosas! La historia de amor es taaan bonita, tan romántica, tan triste. Sí, ya os lo he dicho: lloraréis.

Así que, primera parada, el súper para comprar pañuelos; y segunda, la librería. ¿A qué estáis esperando?

¡Hasta el siguiente bimestre, RománTica’S!

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La Ilustración Gene Mollica por Raquel Pérez

Gene Mollica es un fotógrafo‐ilustrador especializado en imágenes fantásticas de todo tipo pero con más frecuencia para cubiertas de libros. Graduado en pintura en la promoción de 1990 en el RISD (considerada una de las mejores escuelas artísticas de Estados Unidos), trabajó durante varios años como artista en una galería, y se dio cuenta que lo que realmente quería era trabajar en el mundo editorial como diseñador, y luego independientemente como ilustrador con lo que hizo el cambio a los medios digitales en la Escuela de Artes Visuales en el 2001.

Fue una transición difícil al principio, pero enseguida se encontró como pez en el agua creando esas imágenes que los autores recreaban con palabras en sus libros, y ofreciendo a sus lectores una ventana para acercarse más a otros mundos. Así fue cuando los directores de arte vieron su estilo y decidieron que era ideal para los romances paranormales, a los que después siguieron la fantasía y la ciencia ficción.

Diferentes artistas han tenido una gran influencia sobre él, empezando por Boris Vallejo que desde niño le llamó la atención con la ciencia ficción y los carteles de películas. Después cuando ya estaba en la universidad se decantó por los pintores clásicos (Degas, Velázquez…), y especialmente por los impresionistas americanos.

Tiene tanto trabajo que su clave es la organización y, a menudo tiene que hacer juegos malabares entre el desarrollo de futuros proyectos y las tareas de conceptualización de lo que está a punto de terminar.

Su trabajo ha aparecido en las portadas de los libros de autoras como L. A. Banks, Patricia Briggs, Richelle Mead…, entre muchos otros autores increíbles. Vive y trabaja en Maplewood NJ con su esposa e hija.

Podéis descubrir mucho más de su trabajo visitando su página web: http://genemollica.com/

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Espacio JR

ESPECIAL

DATING GAMES O «NOVELAS JR INTERACTIVAS» No sólo podrás leer la historia, también convertirte en la protagonista e interactuar con el chico que más te guste, desde escoger los diálogos para obtener distintos finales, a comprar tu ropa para seducir al que más desees, consultar con tu hermano para no meter la pata en una cita, salir de fiesta con tus amigas e incluso apuntarte a un club de deportes, música, jardinería, fiestas, arte y mucho más. Una vida paralela a la real con muchas posibilidades. Gracias a los juegos de citas cualquier chica puede hacer su sueño realidad, saliendo con el popular del instituto, conquistando a un príncipe, bailando con el profe joven y guapo o con el empollón dulce. Una gran variedad donde el jugador principal, o sea tú, podrás seleccionar el que más se acerque a tus metas, pero no será tan fácil como agitar una varita mágica o buscar a un hada madrina. Si quieres ganar, deberás emplear todos tus recursos y opciones en el juego hasta el final, convirtiéndote en una estratega excepcional de citas. un artículo de JR (Juvenil Romántica)

En España, son muy poquitos los juegos que han llegado a nuestra lengua con éste planteamiento, no obstante, ya es posible probar similares a través de Internet, como es el caso de Corazón de melón, con gráficos bastante atractivos, u otros como Secret Flirts (Flirteos Secretos) para Nintendo DS (nds). Pero tampoco es algo que desconozcamos, si bien sin apenas texto que leer, han sido muy populares juegos como Los SIMS con todas sus variantes para PC. También con una interfaz parecida, Miami Nights: Singles In The City que podéis jugar en la nds. Ahora bien, si tenéis al menos un nivel básico de inglés, podéis tener la oportunidad de probar auténticas joyas otome, Princess Debut, o la mayoría, traduccio‐

nes de fans con conocimientos informáticos y dominio excelente del japonés, Girl's Side 1st Love PLUS. Aunque no todo procede de Japón, caso es el de Sprung: The Dating Game, cuya interfaz se basa en la selección de diferentes diálogos con humor a través de los cuales conseguirás distintos objetos y a tu chico ideal.

Por ello, quizá estés interesado/a en saber mucho más de lo que puedes encontrar dentro de ésta dife‐ rente forma de leer tus historias juvenil románticas.

Y, por supuesto, no hay mejor manera que consultar con dos expertas y verdaderas fans de los juegos otome: Ainara y Julia del blog…

Ikemen Heaven.

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Así son las administradoras de este blog Julia. Entró en el mundo otome por casualidad hará cosa de cinco años y desde entonces no ha habido fuerza dinvia que la saque de él. Le gustan los maromos callados, serios, estoicos y de los que a primera vista piensas: ES AUTISTA. En ocasiones le gustan los tsunderes, pero todo depende del juego y del maromo. No obstante, casi nunca le gustan los shota ni los viejales. Está siempre dispuesta a fangirlear con las series que le gusta. En resumen, cree que si leéis sus reseñas (y sus comentarios entre paréntesis) no tardaréis en saber cómo piensa.

Ainara. Empezó a interesarse por el mundo otome y demás gracias a Julia.

Su perdición los maromos un poco... bastante bordes porque vamos, ¡a quién piensa engañar! le van los canallas. Aunque existen excepciones que confirman la regla y a veces fangirlea con maromos que son pura adorabilidad. Como véis no tiene lo que se dice un punto intermedio. No le van los protagonistas con encefalograma plano ni los maromos muy aniñados, ni los que son muy mayores (su límite serían los cuarentones ¿De buen ver?

Imaginamos que sí).

¡Las hemos ENTREVISTADO para vosotr@s! ¡Hola, chicas! Estamos en medio de una investigación sobre «novelas juvenil románticas interactivas», oficialmente conocidas como juegos otome de citas o novelas visuales. Antes de continuar, ¿podríais hablarnos un poco sobre como entrasteis en este mundillo y cuál es vuestra labor en Ikemen Heaven?

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Conocí los juegos otome gracias a Julia, ella llego con su PSP llena de maromos a mi cumpleaños y empezó a enseñarme a los personajes de varios juegos, diciéndome que para Nintendo DS también había (ya que en esa época yo solo tenía esa consola) la idea al principio no me entusiasmó mucho, pero a los pocos días caí en la tentación y, desde entonces, ya os lo podéis imaginar XD. Sobre mi función en el blog soy una de las administradoras y me encargo al igual que Julia de hacer reseñas, noticias o cualquier curiosidad que nos parezca interesante que aparezca en el blog.

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Pues allá por el año 2009 estaba yo investigando sobre un manga que me tenía enamorada, Fushigi Yuugi Genbu Kaiden, y acabé descubriendo que tenía un juego para PSP. Así que con todo el frikismo de mi body empecé a jugarlo y descubrí que era un simulador de citas, género que sabía que existía pero al que nunca le había dado una oportunidad. El juego me encantó y a partir de ahí fue un no parar. Con respecto a mi labor en IH, soy co-administradora, junto con Ainy, aunque también me encargo del diseño general: elijo los fondos, diseño las cabeceras, intento combinar los colores…

Así son las administradoras de este blog Juegos orientados al público femenino en los que el objetivo es completar la trama argumental y entablar una relación amorosa con uno de los personajes masculinos.

Este género popular japonés pone a la venta montones de juegos al año y se pueden encontrar para la mayoría de las plataformas ¿Tienes PSP, NDS u otra maquinita similar? ¡No esperes más y engánchate a estas aventuras virtuales! ¡Te lo pasarás BOMBA!

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Básicamente, ¿en qué consiste un juego otome o dating game?

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Se trata de juegos orientados al público femenino en los que los objetivos son completar la trama argumental y entablar una relación amorosa con uno de los personajes masculinos del juego. Algo así como las típicas novelas de antaño en las que hay diferentes finales. En el caso de los otome, los finales varían dependiendo de tus respuestas a lo largo del juego. En este artículo nos hemos centrado especialmente en aquellos juegos otome dirigidos para plataformas de nds. ¿Cuáles son los más populares y qué ofrecen para que gusten tanto entre el público femenino japonés? ¿Cuál recomendaríais? Entre los más populares para DS estarían «Will o’ wisp», «Vampire Knight», «Fushigi Yuugi DS», «Otometeki Love Revo» y las sagas «Hiiro no Kakera», «Hakuouki», «Vitamin» y «Tokimeki Memorial Girl Side». »Las dos recomendaríamos los Tokimeki (sobre todo el segundo y el tercero aunque este todavía lo están traduciendo) y Hakuouki principalmente porque están en inglés, las historias son muy entretenidas y los diseños de los personajes atraen muchísimo. En español parece ser más complicado adquirir este tipo de juegos. ¿Qué alternativas hay similares para probar esta modalidad de citas? ¿Hay algún juego del mismo tipo que no haya sido creado por empresas asiáticas? Últimamente han ido apareciendo muchos juegos de temática otome para móviles y lo bueno es que la mayoría están en inglés y son gratuitos, así que ya no hay excusa para no probarlos ^__^. »Hay bastantes juegos otome que no han sido creados en Japón, los coreanos por ejemplo, cada vez ofertan más juegos de este estilo, y también hay muchas empresas americanas que sacan juegos indie de esta temática. Sin embargo, el más conocido puede que sea «Amour Sucre» también conocido como Corazón de Melón, que pese a no ser un juego otome propiamente dicho ha cosechado bastante éxito, debido quizá a que está disponible en bastantes idiomas, incluido el español.

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¿Existen series animadas, animes, basadas en estos juegos? ¿Cuáles recomendaríais? Hay bastantes, y cada vez hacen más. Recomendaría Brothers Conflict, las ovas de Hanayaka Nari, Waga Ichizoku: Kinetograph, Hiiro no Kakera y actualmente estoy viendo Kamigami no Asobi y me está gustando mucho. Yo recomendaría Kamigami no Asobi, Brothers Conflict, Hiiro no Kakera o Amnesia, ya que las protagonistas no son tan asesinables como en las otras series. Si dejamos de lado el factor «protago‐ nista femenina» al margen, supongo que diría Uta no Prince- sama, pero no… mejor no XD. ¿Es cierto que en plataformas como ordenador o PlayStation los diseñadores tienen ma‐ yor libertad en la creación de juegos otome, respecto al sexo, que para Nintendo DS? ¿Consideráis que eso limita las historias de los juegos? No es exactamente así, ya que libertad para meter contenido sexual hay solamente en los ordena‐ dores. Según una ley promulgada en Japón hace unos años, en las consolas (y en especial en las portátiles) están prohibidos los contenidos sexuales. Desde nuestro punto de vista el tema sexual limita las historias hasta cierto punto, aunque no siempre. Si está bien llevado, un juego otome casto y puro sin escenas sexuales puede ser una pasada. Si bien es verdad, cuando llegas a cierta edad, te apetece algo

más aparte de que los protas se den un casto beso, y es en los juegos R18 para ordenador, donde las protas suelen ser más adultas, donde podemos encontrar esto. Gracias a ambas por participar con nosotras en este especial, ahora llega la última pregunta. ¿Creéis que sería interesante adaptar novela juvenil romántica en formato de juego otome? ¿Qué libros veis con potencial para ello? Gracias a vosotras por entrevistarnos ^^. Sería estupendo que adaptaran alguna novela de esas características, aunque por lo que sabemos en Japón sacaron un juego otome basado en la serie «Gossip Girl» (Que haya tenido éxito o no es harina de otro costal). Desde mi punto de vista, la saga «Crónicas vampíricas» podría ser adaptada a un juego otome ¿Quién no ha fantaseado con ser Elena y poder conse‐ guir a uno de los hermanos Salvatore? (Sobre todo a Damon XDD). Otra saga que se podría adaptar sería la de «Luxe» de Anna Godbersen que es muy parecida a «Gossip Girl» pero ambientada en el siglo XIX. Mmm, supongo que me gustaría algún otome de «Cazadores de Sombras», pero ojo, sin que Clary fuera la protagonista, con una chica nueva creada para el juego. Y si tuviera que ser R18… de la saga «Cazadores Oscuros», allí habría canela en rama, seguro. xD

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Nuestras Críticas

Veneno en tu piel - Kellaway por Loli Díaz

Hasta la fecha presente no había tenido el placer de leer nada de Miranda Kellaway pero he de deciros que me he llevado una sorpresa cojonuda.

Una amiga me había hablado muy bien de esta novela pero he de confiaros que aquí una servidora cogió el libro con mucho miedo porque a mi buena amiga suele gustarle casi todo lo que cae en sus manos aunque he de añadir que me ha recomendado algunos muy buenos.

Bueno, a lo que iba. Comencé la novela con mis buenas dudas pero a medida que iba avanzando en su lectura lejos de ir aclarándome la autora hacía que me empezara a tirar de los pelos. ¿Me estaba tomando el pelo? ¿Qué tenía que ver nuestra protagonista que se hace pasar por otra con un personaje histórico como Jack «El Destripador»? Decir que me moría por conocer la relación fue lo que me hacía volar entre sus

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páginas. Es increíble la imaginación que tienen nuestras autoras hispanas.

Sí, ya lo sé de hispana esta buena mujer tiene poco porque es brasileña, pero chicas, ¿qué queréis que os diga? Tuve la enorme fortuna de conocerla en el IV RA y hablaba tan bien castellano que perfectamente podría serlo. Y, sí, lo sé: otra vez estoy yéndome por los cerros de Úbeda.

Lo que iba diciendo. Me parece increíble la imaginación que pueden llegar a tener nuestras autoras y Miranda, desde luego, ha logrado con esta novela hacer ver al lector que la calidad no es única y exclusiva de las autoras estadounidenses… por si alguien alberga la más mínima duda.

Leer «Veneno en tu piel» ha sido todo un descubrimiento y ahora estoy que trino por no haberle dado la oportunidad a Miranda con la novela «Ecos del destino» así que mi siguiente paso va a ser intentar hacerme con un ejemplar de esta novela y que salga el sol por Antequera.

Os diré que esta última novela de Kellaway tiene elementos de sobra para atraer a cualquier tipo de lector.

Sus personajes te van sorprendiendo a cada giro de página. No tengo palabras para describiros aquí lo que ha supuesto para mí enfrentarme a personajes con tantos dobleces, unos personajes que a la par de sorprendentes guardan sus propios secretos; secretos que el lector está deseando

descubrir.

Y os diré más. La trama es de ésas que te hacen meterte literalmente en la novela; está escrita de una manera tan visual que casi parece que estás viendo una película y, en ocasiones, hasta tienes la sensación de estar junto a sus personajes en esas calles oscuras del Londres del XIX observando desde un rincón cómo uno de sus transeúntes camina al amparo de las sombras acechando a su próxima presa.

Eres testigo de excepción desde una ventana destartalada de cómo uno de ellos acompaña a sus víctimas al interior de una estancia lúgubre y en penumbras y, con engaños, las hace beber un veneno mortal.

Acompañas en las pesquisas y tomas notas de todos y cada uno de los asesinatos intentando resolver cuáles son víctimas del infame Destripador y cuáles están relacionadas y por qué con nuestros protagonistas.

A medida que avanzas en su lectura las situaciones generadas en torno a ella te van escamando más y sientes en tus huesos y en tu piel que hay muchas cosas que están ocultas y que la autora no quiere dejarte ver hasta que llegas a una escena en concreto en la que la luz se enciende en tu cerebro y es en ese momento, cuando la chispa de la cordura te invade, cuando te acuerdas de la santa madre de la autora y del padre que la hizo. Es un fogonazo tal que si de una explosión se tratase te hubiese tumbado de espaldas y del suelo no te moverías.

Para el lector general es todo un disfrute. Y, para las lectoras de romántica una pasada pues la relación entre los protagonistas principales es de ésas que te hacen esperar que realmente haya hombres así.

Hombres íntegros y a la vez abnegados capaces de anteponer la felicidad de otros a la suya propia. ―Cuídela. […] ―No soy su dama de compañía. ¿Y quién cuidará de mí? ―Usted no necesita que nadie la cuide. Los hombres son las que han de cuidarse de usted.

No puedo evitar deciros que la cantidad de personajes que aparecen en esta historia son muchos y variados y cada uno está revestido de una personalidad tan diferente al otro que no puedes sino dar la enhorabuena a la autora.

Y encima ésta te regala momentos tan emotivos… La carta de la hermana de Gabriel me encantó. Las páginas 150 y 151 dan ese toquecillo que siempre buscamos en este tipo de novelas, esos momentos que hacen que brote en lo más profundo de tus entrañas llamaradas de emoción. Y algunas conversaciones entre Gabriel y Theresa son de las que no se olvidan.

Me ha llamado mucho la atención la manera tan soberbia que tiene la autora de lidiar con la cantidad tan ingente de frentes que ella misma abre en esta historia cargada de intriga y misterio, de amor y pasión y por la que merece pagar cada uno de los euros que cuesta la novela.

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¡Mi madre! ¡Qué enganche!

Recomendable al 100%. Trama magnífica‐ mente trazada y guiada, unos personajes que salen hasta de debajo de las piedras y muchos frentes abiertos que te descolocan pero con los que la autora ha sabido jugar colosalmente.

Si no habéis tenido la ocasión de leer nada de Kellaway os aseguro que con esta novela vais a conocer a una autora que sabe muy bien dosificarse y tiene intuición para crear en torno al lector una cúpula en cuyo centro se encuentra uno mismo y a su alrededor ese mundo que ella misma ofrece.

Miranda Kellaway ha sido todo un descubrimiento ahora solo me hace falta saber si todas sus novelas son tan mágicas como ésta o simplemente he tenido la suerte de leer la mejor. Espero sinceramente y de todo corazón que sea lo primero.

Llega a nuestras librerías la edición en papel de la novela ganadora de la Rosa RománTica’S 2013 en la categoría de Romance Paranormal ¡Disfútala!

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Nuestras Críticas decisión adecuada a pesar de que no sea lo más fácil y que nos hace ver de un modo muy natural que las segundas oportunidades son posibles.

Es una historia de amor, por supuesto, pero también de amistad y sobre todo de lealtad.

¿Qué pasa cuando aquel que desapareció de tu vida regresa?

Nada más verte - McFarlane por Nazareth V. Lupión

Cuando este libro cayó en mis manos sinceramente no sabía lo que me iba a encontrar.

Tras la leer la sinopsis la verdad es que me quede igual, de ella podía extraer que de nuevo me encontraba ante una historia típica de un amor perdido y que vuelve a aparecer milagrosamente en la vida de la protagonista justo en el momento más delicado a la par de oportuno. El hecho de leer en la sinopsis que Ben estaba casado me hizo replantearme su lectura por todo lo que ello podía implicar, pero decidí dejar a un lado los prejuicios y lanzarme de lleno con esta historia.

Dicho lo anterior y ya entrando en materia os diré que no esperaba para nada, que en su interior iba a encontrarme con una historia que no solo ha conseguido sorprenderme si no que además me ha gustado muchísimo. No es solo una novela que nos habla de encontrar o reencontrar el amor, que sí, además es una novela que nos habla sobre la importancia de tomar la

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Rachel es una mujer divertida, alegre y chispeante que de repente, mientras mantiene una conversación con su chico, con el que lleva trece años saliendo y con el que está comprometida, se da cuenta de que no es feliz, que no es suficiente y que necesita algo más en su vida, así que decide poner fin a su relación, abandonar la casa que ambos compartían y dejar atrás muchas cosas para enfrentarse a una nueva vida como soltera, estado que en realidad no conoce demasiado pero en el que se reafirma a pesar de lo difícil que le resulta y de que poca gente a su alrededor terminen de comprender su decisión.

Un día casualmente (o quizás no tan casual) tropieza con Ben. Durante la universidad ella y Ben formaron un exclusivo club de dos, donde formaron una amistad sincera y verdadera y que no paso de ser eso, amistad. Pero el rencuentro con él activará en Rachel viejos recuerdos y levantará viejas heridas en ambos. ¿El mayor problema?... Pues que Ben está casado y además es feliz con su esposa.

¿Que significamos Ben y yo el uno para el otro? No hay una palabra para lo nuestro. No somos ex pareja y, pese a lo que ha dicho y a lo que me gustaría creer, tampoco somos exactamente amigos.

Sobre la trama no puedo desvelaros mucho más ya que os perderíais lo mejor de la historia, pero si os voy a contar, que durante la novela la protagonista nos irá contando como se desarrolló la amistad entre ella y Ben a través de flashbacks a su etapa universitaria.

—No te pareces en nada a ninguna de las mujeres que conozco —confesó Ben con tono despreocupado mientras se limpiaba la boca con el dorso de la mano. Ahora nuestros estómagos tenían que lidiar con dos chupitos ardiendo.

—¿Digo más tacos?

—pregunté.

—No. Quiero decir que eres... ya sabes. Es como si tuviera aquí a mi mejor amigo. No eres demasiado femenina. Eres una persona ingeniosa.

Esto último lo dijo tan bajo que tuve que agudizar el oído para captarlo, mientras él se dedicaba a estudiar la lista de bebidas disponibles.

—¿Es que no has conocido nunca a una mujer inteligente?

—No me refería a eso.

Nunca he tenido una amiga como tú, ni me he reído tanto como contigo.

Me gustaría destacar que en esta ocasión estoy divida en cuanto a que personaje destacar, si a Rachel o a Ben, ya que me gusta más el carácter de Rachel que el de

Ben en la actualidad, mientras que me gusta más el de Ben que el de Rachel en los flashbacks al pasado.

Me explico: en la actualidad Rachel es una mujer que pese a estar pasando una situación, digamos compleja, es fuerte y optimista, mientras que Ben ha cambiado y aunque no termina de darse cuenta, se siente incompleto. En el pasado sin embargo es Rachel la que se muestra insegura y se siente poca cosa, y Ben es alegre, muy seguro de sí mismo y siempre está cuando Rachel lo necesita.

Sin más preámbulos, Ben se acercó a mí y me dio un beso con la boca cerrada en los labios que duró unos pocos segundos. A pesar de su brevedad, respondí besándole con un poco más de pasión y con los labios ligeramente abiertos; después de todo no me apetecía que pensara que besaba fatal.

Ben se separó unos centímetros, como si hubiera dado por concluido el reto. Entonces de forma completamente inesperada, volvió a acercarse y me besó de nuevo. Esta vez fue un beso de verdad, con las bocas abiertas y las lenguas entrelazándose [...] […] En cuestión de segundos crucé la línea de no saber si estaba respondiendo a ese beso por auténtica pasión o no. Ah, las lecciones de la vida.

«Por eso es por lo que nunca besas a amigos en los retos.»

El estilo de la novela a mí me ha resultado muy fluido, la lectura se hace ágil y tiene un ritmo que hace que se lea rapidísimo. Por otro lado tengo que decir que es adictivo, con todas sus 469 páginas me lo he leído en un asalto, cuando me quise dar cuenta iba por la mitad y no podía parar de leer.

Entre otras cosas destacaré que me ha hecho reír bastante y que prácticamente he estado toda la lectura con una sonrisa plantada en la cara.

—Estar con la persona equivocada puede hacer que te sientas más sola que si no estuvieras con nadie. O provoca otro tipo de soledad, pero soledad al fin y al cabo.

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A mí me ha gustado mucho y aunque al leer la sinopsis os pueda parecer típico o más de lo mismo, yo tengo que decir que para mí las situaciones que se dan a lo largo de toda la novela son bastante realistas, porque no, la vida no es color de rosa, pero sí que existen las segundas oportunidades y todos podemos antes o después encontrar nuestro final feliz.

Dicen que, entre el deseo y la sed de sangre está el mejor de los pecados.

Vuelve Keri Arthur, la autora que combina a la perfección las escenas de sexo con acción trepidante. ¡Búscala ya en librerías!

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El arma definitiva - McKenna por Loli Díaz

Hasta la fecha, solo había tenido la oportunidad de leer a McKenna en una ocasión, cuando el sello editorial Manderley lanzó a la venta la novela, quinta de la serie «Connor & Cía», Peligro Extremo.

Ni que decir tiene que estoy deseando que vuelvan a reeditar los anteriores ya sea en bolsillo o en cualquier otro formato de papel porque no quiero quedarme sin conocer de primera mano el resto de historias que componen esta serie.

Y es que McKenna… ha sido todo un hallazgo. Un hallazgo de los gordos.

Jamás podría haberme imaginado lo que estaba perdiéndome porque esta autora sabe conjugar muy bien el romance, la pasión y las escenas sexuales con una trama llena de intrigas, de peligros y con muy altas dosis de escenas escabrosas y sangrientas que además de

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revolverte las tripas, ponerte el corazón en un puño y acordarte de la santa madre de su autora… consigue que el lector se sienta involucrado con sus personajes y los entienda de una manera clara, concisa y contundente; por mucho que alguno de ellos no sean santos de tu devoción desde el principio.

Y si he añadido este último comentario ha sido con conocimiento de causa porque el protagonista de esta historia, el señor Val Janos, no me cayó nada de bien. Ya os explicaré por qué.

Conocí (o conocimos) a Tamara Steel en la novela anteriormente citada, Peligro Extremo, si bien sé que había aparecido con anterioridad en otras de la serie; novelas que, repito, no he tenido el gusto de leer. Como decía, conocí a Tamara en la quinta novela de la serie «Connor & Cía» y me pareció una tía flipante.

La caracterización de esta mujer por parte de la autora me dejó con la boca abierta porque la tía tenía unos redaños que ya los quisieran tener algunos tipos que trabajan para agencias como la CIA, el MI6, el CNI o cualquier otra que se os ocurra. No se amilana ante nada, no se achanta ante nadie y es capaz de involucrarse en cualquier misión por muy peligrosa que ésta sea. Algunas podríais pensar de ella que es hábil y lista como ella sola y otras que es una tía que está majara y que es una suicida pero yo afirmo que tendríamos que pasar por la mitad de lo que ella pasó para entenderla al 100% porque

no debe ser nada fácil arrastrar un pasado como el suyo y aun así seguir manteniendo la cordura. Esta mujer no solo tiene dos ovarios bien puestos sino que además ha podido conservar pese a todo un alma capaz de auto‐regenerarse.

Es valiente, osada y un poco suicida pero no dudará en anteponer la vida de los que más quiere por encima de la suya propia. Si eso no merece redención ya me diréis qué es lo que la merece. Creo que podríamos llegar a decir que Tamara es, incluso, diría yo, un poco altruista. Pero el personaje que realmente lo es en esta novela es Imre.

Y voy a hablar de Imre antes de hacerlo de Janos porque este anciano merece todos mis respetos y mi admiración.

Con este personaje, todo un acierto de la señora McKenna, la novela gana en intensidad, en emoción y en calidad. Imre es el padre, el abuelo, el tío, que todos quisiéramos tener. Un hombre con una escala de valores tan férrea y arraigada que ha sido capaz de inculcársela a un chiquillo huraño, hambriento y harapiento que solo había conocido el lado duro de la vida. Que pasaba hambre y era objeto de abusos por parte de adultos que lo trataban como basura.

Las partes de esta historia donde se cuentan la generosidad de Imre para con ese crío hoy convertido en un mercenario son las que más encogen el corazón y te hacen sentirte espectador de excepción de una relación entre hombres limpia y muy

humana, una relación que va más allá de lazos familiares y que se cimienta en un cariño carente de dobleces y malas intenciones. Imre fue, es y será para Janos el padre que debió tener y que fue capaz de hacerle ver que no todo vale, que no todo está bien.

Un maravilloso personaje al que adorarás.

Pero, ¿qué hay de Janos? ¿Por qué no cae bien desde el principio? Pues simplemente porque, Janos, comete algunos actos execrables y por los que se merece, y mucho, un par de buenas patadas en sus partes nobles; por decirlo finamente. Si no juzgad por vosotras mismas… ―¿Qué droga me has dado, mentiroso hijo de puta?

El destello fugaz en sus ojos y el rictus en sus labios confirmaron todas las sospechas. Por increíble que pareciera, había esperado equivocarse; que solo hubiera sido un necio temor inducido por su habitual rutina paranoica.

Y es solo un aperitivo de la escena; ésta, al completo, no tiene desperdicio. No voy a hablar más de él porque es un personaje que necesitáis conocer de primera mano para entenderle y entender sus actos pero os garantizo que, al igual que a la protagonista, os pondrá de rodillas y le adoraréis.

McKenna es una autora a tener en cuenta si te va el suspense pues sabe conjugar como pocos/as todos los elementos con los que trabaja para desarrollar una historia que no decae en ningún momento, que te mantiene atrapada entre sus páginas y que cuando la acabas solo deseas disponer de otra más de la serie pues deja frentes abiertos que necesitas saber cómo van a ser hilados. Uno de esos frentes es Sveti, la niña que fue rescatada de la mesa de trasplantes en la novela anterior y que se está convirtiendo en una mujer que tiene muchas cosas por decir y… por hacer. Deseando estoy de poder hincarle el diente a ésa y saber si finalmente esta chica va a lograr hacerse con el cariño del hermano de Becca.

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¡Atrévete a dejarte seducir por la marea! Una historia tan hermosa como las olas del mar

La novela de Shannon es desde luego tan intensa como parece. Sus personajes tienen mucho que decir y mucho que ofrecer. Los secundarios son increíbles y, pese a que su trama no invita a la diversión, también encuentras momentos de éstos que te hacen su trama un poco más distendida.

Tal y como se anuncia en la propia novela de manera muy acertada: «Entra en un mundo de excitante suspense donde el amor es el juego más arriesgado».

Señoras, no se puede expresar mejor.

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La sumisa - Tara Sue Me por Loli Díaz

Ha llegado a nuestras librerías la primera novela de la serie «Sumisión» de Tara Sue Me que se estrena como autora en España.

Como habréis podido deducir por el título esta novela es de corte erótico y muy en la línea de la serie de E. L. James, «Cincuenta Sombras» pero he de deciros algo: Pese a lo que pudiese parecer, pese a todos los paralelismos con la obra de James, pese a que buena parte de la trama os recuerde a la ésta… La sumisa a mí me ha gustado mucho más.

La veo más coherente, más consecuente y con la trama y personajes más definidos. Sí, sé que las comparaciones son odiosas, lo sé, lo asumo, pero es que el personaje de Nathaniel West, pese al gran parecido que tiene con Christian Grey, sí que es un hombre mucho más consecuente con lo que dice y con lo que hace. Si dice que no duerme con sus sumisas… es que no lo hace.

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Y si dice que no besa en los labios… es que… ¡tampoco lo hace!

Lo que para qué negaros… ¡era desesperante! Porque no podéis haceros una idea la química que tienen estos dos, Nathaniel y Abigail, cuando están el uno frente al otro.

Con cada escena que transcurre estás esperando que el tío éste tire por la borda y haga caso omiso a todas sus pájaras mentales de qué hacer realmente y que no con su sumisa y cuando la estrella contra la pared o la tira sobre la cama acabe atrapando su cabeza entre sus poderosas y grandes manos y… le coma la boca como Dios manda.

Creo que la frase me ha quedado un poco burda y he sido un poco brusca en la manera de expresarlo pero, chicas, os juro que la tensión me podía. Creo que el libro me duró un suspiro no solo porque es bastante ágil y las expresiones que utiliza muy de hoy sino porque estaba ansiosa por saber si ese instante que tanto esperaba iba a ocurrir en algún momento o iba a terminar la novela sin poder degustar al fin ese dichoso instante.

Me sentía como cuando veo cualquier capítulo de Arrow y comparten escena Oliver y Felicity. Esas miradas que funden, esa química que traspasa la pantalla, bueno el papel en este caso. ¡Jesús!

De todos modos, y volviendo a lo que es la trama que Tara Sue nos presenta he deciros que, a priori, no reviste ningún tipo de complejidades.

Se ve a la legua cuál es la intención de la autora y

cuáles son las motivaciones de sus personajes para establecer una relación carente de amor pero llena de necesidades.

Claro que el quid de la cuestión es ése «a priori» que señalo porque la autora, llegando a un punto concreto de la novela, comienza a ponerte la mosca tras la oreja y comienzas a decirte: «aquí hay algo más que un gato encerrado». Y, ¡caramba! si no lo hay.

Nathaniel podía fingir que aquello no era más que sexo, pero yo sabía la verdad y le entregué mi corazón de la única forma que me permitía. De la única forma que podía.

No podía decirle cómo me sentía pero se lo podía demostrar. Podía hacerlo convirtiéndome en lo que Nathaniel necesitaba, cogiendo de él lo que yo necesitaba a cambio.

Desde el principio sabes que ella ha llegado hasta él con las ideas muy claras y sabiendo dónde se mete y por qué acepta un contrato que va poco con su personalidad.

Pero lo que no puedes imaginar es por qué la escoge él. Pero, llegado un momento de la novela, como digo, algo comienza a escamarte.

Diálogos no conclusos, cierto tipo de amenazas veladas por parte del mejor amigo de Nathaniel…

Como la novela está escrita en primera persona, obviamente esos momentos están fuera de escena. Solo obtienes referencias de ellos por personajes secundarios y por cierta cadena de

conversaciones. Ya sabéis, como cuando de niñas jugábamos a pasa la historia y la misma se repite de un boca a boca… Cuando ésta llega al final de la cola no sabes cuánto hay de cierto y cuánto de invención.

Te quedas rayada y diciendo: «Aquí algo se coció y yo no lo caté». Pero a medida que vas pasando páginas de la novela ese runrún te sigue atormentando y comienzas a vislumbrar la realidad. Una realidad que cuando Abby se percate de ella todo puede saltar por los aires… o no.

Si algo he descubierto a través de esta novela es que la autora puede tomar atajos inesperados y, cuando menos te lo esperas plantar un diálogo de los que se te hacen inolvidables y dar un capón al lector por iluso porque Nathaniel guarda más de lo que parece.

No os voy a reseñar el diálogo al que me refiero porque sería un spoiler de campeonato, de ésos que, cuando lo lees, te acuerdas de toda la santa parentela de quien lo ha soltado porque te ha jodido lo mejor de la trama y de la historia pero sí os diré que cuando lleguéis a ese momento… lo vais a flipar. Yo para nada me esperaba que, a falta de tan poquitas páginas para el final ocurriera lo ocurrió.

Me quedé con cara de «¿Me está tomando el pelo?» «¿Otra como James?» «¡Viva la originalidad!».

Por suerte… ¡No, no os voy a desvelar el resto! LEED vosotras mismas los capítulos 31 y 32 y luego me decís si no se os quedó cara de ¡No puede ser!

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Una novela que ofrece lo que anuncia, una trama que te da lo que quieres encontrar en una novela de corte romántico‐erótico. Y unos personajes que sin ser realmente originales sí que llegan a conquistarte.

La sumisa me ha gustado. Y, lo que es más, me ha dejado con ganas de más. Tanto es así que, cuando llegué al final quise echarle un «vistazo furtivo» (algo que nunca hago), al primer capítulo de El dominante y me quedé diciendo: ¡Por qué! ¡¿POR QUÉ?! ¿Cuánto tendré que esperar para el siguiente? ¡Yo lo quiero ya! El punto de vista de Nathaniel, por fin de primera mano voy a conocer todas y cada una de sus motivaciones. ¡Qué principio, chicas, qué principio!

Pero ojo a los datos revelados sin revelar que la autora nos va dejando como miguitas. Yo me quedo con el mensaje sutil que envía casi al principio:

Mezcla perfecta de ingredientes eróticos y dotes seductoras.

Un inicio de serie que hará arder más de un juego de sábanas.

―Una rosa blanca con un rubor en los pétalos es algo muy serio.

Viene de un poema de John Boyle O’Reilly, «Una rosa blanca». El momento, sin desperdicio (págs. 130‐131).

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Cielos de Ira -Martínez Francopor Loli Díaz

Vale, aclaraciones antes siquiera de empezar a comentaros mis impresiones acerca de esta novela de corte muy histórico donde el romance tiene un gran peso.

La primera vez que me leí Cielos de Ira… ni siquiera se llamaba así. El nombre que tenía el manuscrito original era Un violín llora sobre Eiβendorf y éste tenía un total de quinientas y pico de páginas. Era una novela donde los datos históricos adquirían una relevancia bastante importante, donde había escenas realmente difíciles de tragar para una romántica empedernida como yo pero era una novela donde los personajes quedaban tan bien reflejados que consiguieron un imposible: que yo, al igual que la protagonista, cayera víctima del amor por los dos, por Ray Grant O’Sullivan y Aubrey Berger. A ella, sinceramente le hubiese dado una buena patada en el trasero.

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Os diré por qué: porque era tal el cacao mental que tenía entre el amor, el deber y las obligaciones hacia la causa que me tenía mareada. Me hacía sentirme, al igual que ella, dividida entre todos sus frentes abierto.

Por un lado ese amor juvenil no terminado de concretar hacia el chico alemán que se encerraba en sí mismo y que aún perdura en su corazón.

Por otro el amor incipiente hacia otro hombre que se ha convertido de la noche a la mañana en su marido, un hombre al que no conoce, un hombre bastante mayor que ella y al que no termina de comprender pero por el que realmente siente algo intenso aunque no sabe definirlo. Y por otro lado la causa y su misión.

Chicas, si Silvia Duque no es un personaje complejo ya me diréis quién puede serlo.

Os hablaré de Ray. Desde el primer momento este hombre me conquistó.

Me conquistó por muchas cosas. Me conquistó por ser leal, por ser un hombre que antepone el bien común a sí mismo pero sobre todo porque llega a hacer cosas muy contrarias a lo que siente y sabe que es correcto y sin embargo… no puede evitarlas. Sabe que con su actitud va a perder lo más bonito que le ha sucedido en la vida pero aun así lo hace.

Una pena que la escena de la ducha esté cortada de manera indiscriminada porque luego es vital para un acontecimiento posterior y más pena aún es que se haya eliminado un momento clave de la novela como es la

conversación que mantiene Ray con un superior del MI6.

Esa escena es un punto de inflexión en las motivaciones de Ray para hacer lo que hace y para entender muchas de las cosas que vienen después.

Os la resumiré aquí en pocas palabras pero espero, por el bien de todas las chicas que leemos a María más conocida como Arlette Geneve, que algún día esta novela se publique de manera íntegra porque esos trozos eliminados son, a mi parecer, muy necesarios.

Lo que os iba a decir sobre esa escena eliminada es que Ray es llamado por su superior del MI6 a una reunión y allí le expone que tiene que obligar a Silvia a echarse en los brazos de Aubrey, el alemán de esta historia, pero que antes se asegure de que no llega virgen a sus brazos o toda la tapadera se vendría abajo.

Con esa escena fuera de la historia no se entiende muy bien que Ray pille una cogorza y que las escenas se desarrollen de la manera en la que lo hacen en la versión definitiva que ha salido al mercado.

Pero ante las decisiones de autora o editorial… desde luego yo no voy a entrar.

No obstante, en esta historia nos queda por analizar aún a un personaje. El tercero en discordia por nombrarle de alguna manera. Nos queda Aubrey, un alemán de la SS, de la guardia personal de Adolf Hitler que ha sido nombrado responsable del proyecto Cuelgamuros. Y ojo al proyecto porque es precisamente éste el que

el motivo de todo el tinglado.

A lo que iba. El personaje de Aubrey, al igual que el de Ray, te lleva a sentirte dividida. Si por un lado el inglés consigue con el tiempo que te enamores de él el del alemán lo logra casi desde el principio porque éste, pese a lo que pudiese parecer, es transparente en sus sentimientos hacia Silvia desde el primer momento. Se conocen desde que tenía ella diecisiete años y desde entonces ha estado enamorado de ella.

Sufrió mucho con el abandono de la hispano‐francesa que desapareció del mapa de un día para otro dejándole en la estacada y ahora, años después, cuando vuelve a encontrarse con ella está casada con un irlandés mayor que ella. El dolor es intenso y tanto y más cuando se siente responsable de que la quiere, la necesita y está dispuesto a todo con tal de tenerla nuevamente.

Hay varias conversaciones entre Silvia y Aubrey que son tan hermosas que solo por eso merece la pena leerse la novela pero ninguna como en la que él le pide lo que le pide y ninguna escena más hermosa por lo fatídica cuando ella cumple la promesa dada.

Lloré lo indecible en ambas al igual que lo hice más adelante en varios momentos que comparten Sivia y Ray.

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Cielos de Ira, tal y como está publicada no la considero la mejor de la factoría Geneve / Martínez Franco pero es una hermosa historia acerca del deber, el amor, la lealtad y los principios donde todos ellos mantienen una pugna sin cuartel en cada uno de los personajes.

Es cierto que a Cielos de Ira le faltan escenas claves y otras están a medias y es una lástima porque Un violín llora sobre Eiβendorf era una novela que si bien le hacía falta algunos retoques también es verdad que ahí el protagonista central de toda la trama era Aubrey por encima incluso de la propia Silvia.

De todos modos me quedo con esa frase del final de la historia y que cuando la leáis adquirirá todo el sentido: Immer, Aubrey, Immer.

Si la novela histórica es una de vuestras grandes pasiones dadle una oportunidad a ésta porque conocer a dos hombres como Ray y Aubrey merece la pena y a fin de cuentas lo que buscas en una historia es que ésta te sorprende y Cielos de Ira también lo logra. Ya entenderéis a qué me refiero si la leéis.

Ya en librerías la tan esperada segunda entrega de «La reina del cementerio». Una historia cargada tan intensa como apasionante.

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Desátame - Casado por Loli Díaz

¡Atención, atención, chicas… que vienen muuuchas curvas! ¡Y cambios de rasantes! ¡Y cuidado en esas carreteras rurales que pueden cruzarse en vuestro camino algunos ciervos!

Madre mía, madre mía. Esta Casado es la pera limonera. ¿No quieres caldo? Pues no te vas a tomar tres tazas… ¡te vas a beber la olla entera!

No os podéis hacer una idea. Repito: no os podéis hacer una idea de la cantidad de escenas subidas de tono. ¡Qué digo subidas de tono! Éstas son escenas calientes, escenas picantes, escenas ingeniosas y very, very irresistible.

Pero si estáis pensando por un casual que todo se reduce a un aquí te pillo aquí te mato una y otra vez… disculpadme que os saque del error.

Descubrí a Noe Casado gracias al Premio Terciopelo y a su novela A contracorriente y desde entonces han caído en mis manos más de una novela de esta buena señora. Aunque he de

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confiaros una cosa: la serie «Seductores Londinenses» me la estoy leyendo total y absolutamente al revés.

Primero cayó en mis manos el sexto libro de la serie, Treinta noches con Olivia; después me leí el quinto, En tus brazos y ahora le he hincado el diente ¡por fin! al cuarto. No sabéis las ganas que tenía de poder leerme la historia de Aidan, el ex de Nicole.

Cuando acabé el de En tus brazos me tiraba literalmente de los pelos porque quería saber, necesitaba saber qué había ocurrido entre Nicole, Aidan y Carla para que Nicole se ruborizara delante de cualquiera de ellos dos cada vez que tenía que hablar con ellos y ¡mamma mia, mamma mia! ya lo creo que sucedió algo, y algo muy gordo que me hizo revolcarme literalmente de la risa. La situación es tan sumamente absurda que no puedes evitar reírte ante una situación tan… tan… ¡ni siquiera tengo palabras!

Pero vayamos al meollo de la historia y conozcamos a unos personajes que me han hecho pasar por todos los estados de ánimo habidos y por haber.

Tenéis que conocer a Carla. El pudor es una palabra que, desde luego, no está en su diccionario.

Carla es osada, atrevida, impulsiva, generosa, ardiente, apasionada, desinhibida, increíblemente caótica y capaz de volver el mundo del revés de cualquiera así que imaginaros lo que va a hacer con el pobre de Aidan que es una persona súper correcta, amable, centrada y

organizada. Echadle imaginación a la cosa, sí, echádsela pero advertida quedáis: no os vais a acercar ni un poquito a la realidad del caos en el que va a convertir Carla su existencia.

La pareja que ha formado Noe en esta historia, el dúo explosivo que conforman Carla y Aidan es brutal de necesidad. Si por separado ya son dos personas que atraen por su carácter y forma de ser juntos ni os cuento: revientan física y psíquicamente a cualquiera. Entre ellos se sacan mutuamente de sus casillas. Bueno, hablando con propiedad más bien es Aidan quien saca de sus casillas a Carla y Carla… quien le saca otras cosas, ja, ja, ja, ja, ja. ¡Ay, por Dios! ¡Qué escenas sexuales! ¡No os podéis hacer una idea de hasta dónde llega la imaginación de nuestra compatriota! Ni Grey, ni West, ni Walker… ¡Pon un hombre Casado en tu vida y vívela intensamente! Con ellos en vuestra cama no os daría tiempo a aburriros lo que lleva a la siguiente pregunta: ¿realmente existen tíos así? Perdonadme si lo pongo en duda pero me da a mí que hombres así pocos y secuestrados por alguna lagarta, seguro.

Las historias de Noe Casado son únicas, os lo garantizo.

Son únicas por muchos factores.

El primero es porque Noe Casado no tiene pelos en la lengua. Relata sus historias y sus escenas más hot de manera muy campechana, utilizando un vocabulario un tanto crudo pero que he de reconocer que a mí me

encanta. Es refrescante saber que sus protagonistas hablan igual que nosotras cuando estamos entre amigas, sin dobleces ni cortapisas.

Otra de las razones son sus primeros encuentros sexuales. No sé vosotras yo me he leído ya cinco títulos de ella y en cada una de sus novelas he terminado descojonándome de la risa porque en pleno fragor sexual las conversaciones que mantienen mientras la pareja está en pleno coito son de alucine. En serio, ninguna autora podría hacerte reír como Casado en pleno himeneo. Las cosas que les llegan a pasar a los protagonistas y las charlas que generan son únicas, imprevisibles y, para mí, las que espero con mayores ansias.

Y, desde luego, el factor más importante que reseñar para leer a Noe Casado son los secundarios. Sus increíblemente seductores secundarios. Éstos ponen no su granito de arena, no, tamizan la playa entera para hacer de la novela un placer el leerla. Son picantes en sus conversaciones y el más insospechado hace que la misma adquiera una estrella más en su valoración. En este caso el personaje que me ha robado la sesera ha sido Edna.

Ya descubriréis quién es. Ella es todo un amor dentro de su inocencia y su candor pero las amigas de Carla y los compañeros de Aidan no se quedan atrás y ésta es otra cosa por la que Noe se ha convertido ya para mí en una autora de culto.

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Ya a la venta la nueva novela de la autora Nieves Hidalgo, una de las pioneras del género románticohistórico en España. Suspense, intrigas y… un amor de los que hacen época.

Inesperadas situaciones, sexo del bueno e inolvidable, protagonistas diferentes entre sí que enriquecen la historia, secundarios de lujo que cuando aparecen te hacen creer que ellos son también los protagonistas indiscutibles de la novela.

Todo eso y mucho más encuentras en cualquier novela de Noe Casado regado todo ello con una buena dosis de diversión que casan tan bien como el champán con el caviar.

Pero caviar, caviar, del bueno, del Kaluga (Imperial Beluga), el que cuesta un riñón y parte del otro. Nada de sucedáneos.

Si aún no habéis tenido la oportunidad de leer ninguna novela de Noe Casado yo os insto desde aquí a darle una oportunidad. Si no queréis gastaros mucho dinero en un trade porque pensáis que puede no gustaros tiraros hacia los bolsillos que ya hay varios en el mercado. Terciopelo ha publicado ya Divorcio y A contracorriente (primero y segundo de su serie «Familia Boston») y Esencia Treinta noches con Olivia.

Y, si os van los eBooks, tenéis otros dos en Zafiro.

Creedme: NO os va a decepcionar.

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Nuestras Críticas

tu nombre al trasluz por Ana Mº Benítez

Debo confesar que esta novela no me atraía demasiado cuando leí su sinopsis. Ana Iturgaiz es una autora que me gusta como escribe, su primera novela me encanto, pero como ya digo esta historia no capto mi atención al principio. En mi estafo de ánimo actual prefiero las novelas con un toque divertido que me sirvan de evasión.

No obstante, cuando la recibí en casa y la tuve en mis manos, algo me impulso a leer la primera página, mi instinto lector me indicó que me había equivocado en mis primeras apreciaciones y que no debía dejar pasar esta historia. Así lo hice y menos mal porque de lo contrario me hubiese perdido una gran novela.

En la primera escena nos encontramos con Miguel, que debido a su labor como impresor debe marchar de Valladolid, el lugar donde ha estado ejerciendo su profesión, para volver a su pueblo natal, Villasana, donde las garras de la

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Inquisición aun no llegan.

Cerrar su negocio es una de las cosas que más dolorosas que puede sucederle, pero la Iglesia comenzaba a estrechar su cerco alrededor de él por la implicación que consideraba que había tenido en difundir aquellas obras que iban en contra de sus leyes.

No iba a ser fácil comenzar de nuevo, sobre todo en un lugar en el que no estaba seguro si su negocio sería bien recibido, pues eran muchos los que no aceptaban los nuevos inventos. Una vez en el pueblo, Miguel retoma la relación con la familia que dejo atrás hace años y empieza vivir una vida normal, hasta que el peligro se cierne de nuevo sobre él.

La mujer de su amigo Sancho, quien fue apresado por la Inquisición y murió en la cárcel, se ha instalado en el pueblo y los rumores sobre ella comienzan a extenderse.

Miguel sabe que debe mantenerse lo más alejado posible de ella, pero su presencia le intriga y le atrae como a miel a las moscas.

La verdad sobre Elena no tiene nada que ver con lo que se comenta. Tras la muerte de su marido a manos de la Inquisición y la negación de su padre y sus hermanos a ayudarla, Elena se refugia en Villasana en busca de consuelo. Ella intenta olvidarse del pasado y mantener a su hijo con los conocimientos que tiene sobre la imprenta. Su ocupación ante el pueblo es teñir telas y venderlas, pero la realidad es que esto no es más que una mentira para

conseguir trapos y pieles de animales que después utiliza para crear los juegos de naipes que vende en las tabernas.

Encontrarse con Miguel supone revivir el infierno de estos años atrás. Por sus venas corre sangre de impresores y sabe que su hijo no ha escapado a esa pasión que ella califica de veneno.

Por ello cuando Miguel le ofrece un trabajo para su hijo en su imprenta duda de si acceder a ello. No sólo por el miedo a que Miguel descubra su verdadera ocupación, sino también porque despierta en ella sensaciones que no quiere pararse a analizar...

Lo que sin duda llamaba más la atención de aquel hombre eran sus ojos, vibrantes, intensos, vivos. Y su boca, que, aun estando callada y seria, se curvaba hacia arriba por los bordes, como si fuera el dibujo final de algunas letras de muchos de los impresos que habían pasado por su casa.

Con frases como esta, no me digáis que no os quedaríais embelesadas imaginándoos un hombre así. En esta novela, Ana Iturgaiz demuestra una vez más que tiene un dominio excelente sobre las palabras manejándolas a su antojo, tanto en la ambientación como en la creación de los personajes. Con un lenguaje sencillo pero armonioso, Iturgaiz te sitúa en cada escenario como si estuvieses allí. La villa, sus gentes, los comadreos, la taberna, la iglesia, todo me ha parecido tan cercano, tan cotidiano que me recordaba a esa

España de no hace mucho tiempo donde la vida se vivía más despacio y todo tenía una dimensión distinta, no sé si mejor o peor, pero distinta.

Lo que más sensación me ha causado ha sido la imprenta, supongo que será por este amor a los libros y por lo que conozco del mundo editorial, es impactante leer cómo ha evolucionado todo.

Sumergirte en la vida de dos impresores del siglo XVI y ponerte en su piel, trabajar con la imprenta más artesanal, ensuciarte las manos, tener entre ellas el acabado final del trabajo resulta apasionante, aunque sólo sea producto de la imaginación. Iturgaiz lo ha sabido trasladar muy bien y hacer que lo viva con total verosimilitud.

En cuanto al romance, bueno, digamos que la autora que no ha dudado en echarle toda la leña al fuego.

Una serie de situaciones y frases malentendidas le hacen pensar a Miguel que Elena es lo que no es. La realidad ni la imagina, así que puestos a pensar lo peor... Y como él es un buen hombre, y en memoria de su amigo, se ofrece a darle todos lo que necesite a cambio de convertirse en su único cliente. Si, si, como podréis imaginar la situación no tiene desperdicio.

Ahora que la respuesta de Elena es de las que dejan huella; ¿una sonora bofetada? ¿un apasionado beso?

Solo puedo decir que esta escena marca un punto de no retorno entre la pareja.

La pasión que Miguel adivina en los ojos de Elena siembra la semilla de un intenso romance tanto en lo físico como en lo emocional que se gestará en las noches que pasarán juntos trabajando en un encargo especial que Miguel recibe: uno de esos libros prohibidos por el Santo Oficio. Elena se convierte en su ayudante clandestina e igual que se consolidan sus sentimientos por el hombre también aprenderá a amar el arte de crear libros.

Lo que siempre odió, lo que siempre rechazó en su difunto marido: su adicción a la imprenta, su obsesión por sus ideas hasta el punto de morir por ellas, es precisamente una de las cosas que más ama en Miguel hasta el punto de sacrificar incluso su dignidad por el amor que siente hacia él cuando la Inquisición se cierne sobre ellos amenazando su vida.

Escenas muy intensas que me tuvieron con el corazón el vilo y expectante a lo que me encontraría en la siguiente página. Dicen que en el amor y la guerra todo vale, pero ¿el fin justifica los medios? Sólo un amor puro y verdadero puede curar las cicatrices del alma…

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Una novela que enfatiza la fuerza de los placeres simples y unos personajes con una química innegable

Quiero que todos los pliegos lleven tu marca de agua y que todo aquel que tenga entre sus manos uno de nuestros ejemplares pueda ver tu nombre al trasluz.

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Próximamente en tus librerías

Cinco amigas: Pia, Madeleine, Angie, Coco y su hermana Julie, comparten una casa en Brooklyn. Todas son jóvenes, acaban de mudarse a Nueva York y tratan de cumplir sus sueños. Sin embargo, encontrar su camino en la vida no será fácil. …

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Tras haber sido víctima de un ataque en las calles de Londres, Evangeline Ames ha alquilado una casita de campo en las afueras.

Cuando su vida vuelve a correr peligro, se refugia en Crystal Gardens, una propiedad cercana que ejerce sobre ella...

Jackson se siente satisfecho con su apacible vida en el campo junto a sus tres hijos.

Un día aparece una mujer que sacude todas sus convicciones. Se enamorará de sus contrastes: de su fragilidad y su fuerza, de sus sonrisas y sus silencios; sin embargo...

Caroline se acaba de mudar a San Francisco. Ha alquilado un piso, donde vive con su gato Clive, y ha empezado a trabajar como diseñadora de interiores. Su nueva y excitante vida también incluye a Simón, un vecino algo peculiar, y unas paredes que son papel de fumar....

En Solo para adultos, la estrella del cine erótico Asa Akira nos desvela los curiosos entresijos de un mundo tabú para algunos, atractivo para otros y desconocido para casi todos.

Asa ha tenido una educación privilegiada y una infancia que una niña desearía...

Lennox Taskill es un golfo depravado, un poderoso brujo del que se rumorea que vende sus hechizos a cambio de dinero o favores. Desde que vio morir a su madre en la hoguera, vive retirado esperando que llegue el momento de vengarla.

Yanira y Dylan se trasladan a Los Ángeles para organizar todos los preparativos de su boda. Allí las cosas se complican cuando una ex amante de él pierde los papeles y eso casi le cuesta la vida a la joven. Una vez recuperada, se casan y comienzan...

Victoria Montalbán, restauradora de antigüedades, vive plácidamente en Toledo, hasta que un día encuentra en su buzón un curioso anillo de la época vikinga. Esa misma noche empieza a sufrir unos sueños dantescos que parecen avisarla de…

Elisabeth Lowell y Alan Taylor se declararon la guerra desde pequeños. En cuanto se conocieron se convirtieron en acérrimos enemigos, pues ella es «Doña Perfecta» y él un niño un tanto salvaje.

Pero ¿qué ocurre cuando los niños crecen y Alan…

Después de una boda de ensueño y de una idílica luna de miel, los Vanrell inician su vida como marido y mujer.

Los proyectos compartidos los mantienen unidos, pero es la pasión que los domina desde aquel primer duelo de miradas la que hace que la magia siga día tras día.

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Danford, Inglaterra, siglo XIX. En el momento en que los sindicatos mineros empiezan a presionar en leyes de protección laboral, Sarah y Katherine Larson ven cómo su mundo se desmorona. Su padre murió hace pocos meses y dejó Hillock Park, su hogar, en herencia a un sobrino quien…

La vida de Em gira alrededor de pasteles, tartas y dulces.

Una vida tranquila que se trastoca cuando recibe una llamada: su hermana se casa y quiere que esté a su lado...

No conoce al novio. ¡No sabía qué tenía un novio!

Pero lo peor no es eso, sino que puede reencontrarse con...

Hace ya un año que Josslyn enviudó. A pesar del dolor que le causó la pérdida de su esposo, sus ganas de experimentar con el sexo no han desaparecido y es ahora cuando se siente lo suficientemente fortalecida para buscar aquello que su marido jamás le pudo dar.

Sin embargo...

Silvia trabaja en una importante multinacional y está perdida.

Silvia necesita encontrar a alguien para olvidar a Álvaro. Álvaro es su jefe y acaba de romperle el corazón.

Bea, su mejor amiga, le propone un viaje.

Y allí Silvia…

Silvia necesita estar al lado de Gabriel, saber que está bien.

Pero Gabriel no cree en el amor; no como Silvia.

Silvia tiene problemas con Álvaro cuando recibe una oferta irrechazable.

Silvia busca señales; desea encontrarse.

Pero el lado oscuro de...

La estudiante de enfermería y camarera Kara Foster no pasa por su mejor momento.

Su ya desesperada situación económica acaba de sufrir un golpe que puede dejarla a un paso de vivir en la calle.

Cuando necesita poco menos que un milagro que la salve, Kara es rescatada por un benefector...

Lo último que Justin Connor esperaba encontrar era a una joven mujer dormida en la arena, arrastrada por el mar a la agreste costa de Nueva Zelanda. Aunque no está dispuesto a renunciar a la soledad en la que que se ha refugiado en esa isla, Justin se siente obligado a...

Como directora de la Academia Scarfield para jóvenes, la señorita Charlotte Boscastle transmite a sus alumnas lo importante que es mantener una buena reputación y evitar cualquier asomo de escándalo. Por eso cae presa del más feroz de los pánicos cuando…

Daphne sabe que el primer paso para casarse es encontrar al hombre adecuado y, por eso, se ve tentada a responder un anuncio en el Morning Chronicle publicado por un caballero sensato que busca a una dama de talante similar. Su relación epistolar con el misterioso…

Nada podría desestabilizar más la vida de Tara Lincoln que comenzar una relación con el famoso quarterback de los San Francisco Sabers, Mick Riley. Después de una noche de loca pasión, sabe que aquel hombre que vive para el deporte...

Tras soportar años de fallidos tratamientos de fertilidad, un marido infiel y una familia opresiva, a Eilidh Lawson ya no le queda nada.

Desesperada por hallar consuelo, decide marcharse al único lugar que siempre ha considerado su hogar, un pequeño pueblo de las Tierras Altas de Escocia…

Kate y Vincent han superado los obstáculos que les impedían estar juntos y por fin disfrutan en libertad de su amor en París. Según van profundizando en su relación, la realidad les impone un hecho que no pueden dejar de lado: ¿cómo conseguirán seguir juntos si Vincent no puede evitar…

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Los más vendidos

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Mar – Abr 2014

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Una Banda Sonora para tu Novela ¡Hola! Os traemos en este número una combinación que, si bien puede parecer natural a primera vista, tiene una cantidad increíble de matices que seguro que hacen al que lee estas líneas plantearse leer el libro, releerlo o irse a la librería más próxima porque está deseoso o deseosa de saber exactamente qué ocurre.

El libro que nos ha arrancado varios suspiros (y más de una lagrimilla a una servidora) es Juliet, de Anne Fortier, y la canción que le va como anillo al dedo es Love Story, de Taylor Swift. Ahora es cuando se nos enciende la bombilla, ¿eh? Romeo y Julieta... ¡pues no! Hay muchísimo escondido entre las páginas de esta gran novela y muchísimo que tanto la letra de la canción como su videoclip dejan entrever. Para ayudaros aquí tenéis varios fragmentos: We were both young when I first saw you, I close my eyes, and the flashback starts.

I'm standing there. On a balcony of summer air.

Ambos éramos jóvenes cuando te vi por primera vez Cierro los ojos y empieza el flashback.

Estoy allí. En un balcón y en el aire de verano.

Taylor Swift: Love Story «Love Story» por Tamara Arteaga

Nuestra protagonista femenina, Juliet, viaja a Siena tras el fallecimiento de un familiar muy querido. Allí encontrará un sinfín de hilos que desembocan en uno de los secretos mejores guardados de la obra de Shakespeare Romeo y Julieta. Pero, cuidado, no es oro todo lo que reluce ni las personas quienes dicen ser. ¿Qué hacer cuando tu mundo se pone patas arriba? Pues coger una mochila, armarte de valor y, con la cabeza alta, comerte el mundo. No es del todo preciso, pero es algo a lo que se acerca.

I see the lights, See the party the ball gowns.

I see you make your way through the crowd, You say hello Little did I know...

Veo las luces, veo los vestidos del baile.

Veo como te acercas entre la gente, Me saludas Quién me iba a decir...

Como alguien dijo una vez preparaos porque vienen curvas.

Lo que le espera a nuestra protagonista os hará gritar de frustración, ternura y, a veces, entusiasmo. Esta novela es de las que se viven, las palabras son pequeños puentes que os harán redescubrir una historia que creíais conocida y dará un giro radical a todo aquello que creéis conocer.

You'll be the prince and I'll be the princess It's a love story baby, just say yes Tú serás el príncipe y yo la princesa Es una historia de amor, cariño, solo di que sí

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Una Tarde de Cine

y… por Mónica Liceras

Título original Duración Año País Director Guión Música Fotografía Reparto

Productora Género

This means war 98 min.

2012 EE. UU. McG Tim Dowling, Burr Steers, Marcus Gautesen Christophe Beck Russell Carpenter Reese Witherspoon, Chris Pine, Tom Hardy, Til Schweiger, Chelsea Handler, Angela Bassett Twentieth Century Fox Comedia Romántica

La comedia romántica protagonizada por la estrella Reese Witherspoon va de guapos, básicamente. Mona ella con su sonrisa encantadora e ingenua y atractivos a gran escala ellos, Tom Hardy y Chris Pine.

Ambos trabajan como detectives para la CIA, y además de compartir despacho y salvarse la vida en su ajetreado trabajo de vez en cuando, son los mejores amigos desde la infancia. Los dos poseen estilos diferentes a la hora de vestir, decorar su casa o ligar, pero parece que comparten gustos en lo que a mujeres se refiere…

Aunque parezca mentira, estos «Mr. Smith» no han tenido mucha suerte en el terreno amoroso así que comienzan con la ardua tarea de encontrar a una mujer que merezca la pena. El caso es que aunque hay muchos peces en el mar, ambos quieren pescar el mismo…

Y esta es la historia de Esto es la guerra, ni más ni menos que dos hombres de catálogo que luchan por el amor de una chica, literalmente.

Ambos se aprovechan de las herramientas de la Central de Inteligencia para utilizar los recursos más variopintos y extravagantes, con la

intención de conquistar a la chica. Mientras tanto, la rubia sexy y divertida avanza sin un pelo de tonta zarandeada por su mejor amiga quien decide por ella que lo mejor del asunto es disfrutar con la confusión que conlleva la complicada tarea de elegir entre dos tipos cañón. ¡Y a cual mejor! Valioso consejo…

¿Quién no querría estar en sus zapatos?

Con un guión simple, que mantiene el ritmo hasta el final, salpicado de algún que otro «gag» divertido, una iluminación que acentúa el atractivo de los protagonistas de maravillosos ojos azules y unas escenas subiditas de tono, la película dirigida por McG consigue entretener al espectador y sacar alguna que otra sonrisa a pesar de un final previsible y atropellado.

Los tres protagonistas de reparto conforman un trío que gusta a la cámara, Witherspoon por su dulzura y sus peculiares mohines y Hardy y Pine, qué decir de ellos, alegran la vista, principalmente.

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Una película que juega al despiste con un inicio al más puro estilo James Bond. Aunque, con algún que otro tiro incluido, Esto es la guerra no es un film de acción sino una simple historia con momentos graciosos.

Estamos ante una comedia sin muchas pretensiones que combina la acción propia del cine de agentes secretos y algún que otro momento chistoso con una historia «romanticona» jugada a tres bandas. Y como no podía ser de otra forma, en esta cinta no pasa desapercibida la presencia de la amiga de la protagonista, una mujer de familia que tiene la estabilidad y el amor que a la otra le falta y que quiere revivir a través de su amiga, algún que otro momento entretenido procedente del mundo de las citas. Y se lo deja bien claro…

«Ojalá te comportarás así con

los hombres. Sabes elegir un detergente pero no sabes escoger al tío que quieres que te penetre».

es, Y la¿conpregunta cual de los dos os quedaríais?

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Autora, ¿en el olvido?

Jo Goodman es una autora norteamericana de reconocido prestigio pero que por desgracia es poco conocida en nuestro país.

Podemos decir de ella que entre su bibliografía destaca su serie sobre las «Hermanas Dennehy», que por suerte podemos disfrutar al completo en español y que está compuesta por títulos que seguro conocéis como Amante y canalla o Eternamente mío.

Otras de sus famosas series como «McClellan Family» o «Hamilton Family», no tenemos la posibilidad de leerlas, al menos si como una servidora, no lees en inglés... porque... ¡adivinad qué!... ¡NO ESTÁN TRADUCIDAS! Terminó su primer libro en 1979, publicado finalmente en 1984 y que lleva por título Passion´s Bride, reeditado en 1998 bajo el nombre de The Captain´s Lady, con el que ganó el premio a la mejor novela de piratas del Romantic Times. por Nazareth V. Lupión Forever In My Heart ganó el premio de selección de un lector a la mejor novela Bueno, bueno... ¿Quién será nuestra chica de histórica en 1994 y Only In autoras en el olvido de este número? Pues My Arms fue nominado al empezaré por daros algunas pistas: tiene más de cuarenta novelas publicadas... en su país claro, de año siguiente.

Se graduó con una las cuales a España han llegado... sí, exacto, muy pocas. Que de ocho series que tiene, sólo dos han licenciatura en biología, en Indiana University of sido completamente traducidas al español y que Pennsylvania, con la tercera nos dejaron a media... especializándose en química, Si, ya lo sé, dicho así podría ser cualquier autora pero más adelante descubrió de las nuestras, y cuando digo nuestras, me que la investigación no era lo refiero a esas autoras extranjeras maravillosas, y más adecuado para ella y que normalmente suelen ser las clásicas, que finalmente se convirtió en porque se pone de moda otra cosa dejan de terapeuta. Ha sido directora traducir y traer a España. ejecutiva de una agencia de Bien, lo diré ya, nuestra autora de este bimestre salud mental para el cuidado es... Jo Goodman. de niños.

Jo Goodman

Complementa su trabajo en este campo con la escritura.

Con más de cuarenta novelas publicadas en su país y reconocida internacionalmente, aquí en España, como ya os comentaba antes, solo podemos disfrutar de 2 de sus series traducidas al completo y una tercera incompleta. De sus novelas únicas o independientes, es decir que no conforman ninguna serie, no disponemos de ellas en nuestro idioma. La razón de por qué novelas de esta autora, con reconocidos premios no son finalmente traducidas, es un misterio. La realidad es la de siempre... sus dichosos números, que no salen.

Sus novelas llegan por primera vez a España en 2007, de manera que la pentalogía de las «Hermanas Dennehy» y la trilogía «Grantham» se publican de forma íntegra sin ningún problema, peeero a partir de 2010 por decisión editorial, supongo, se interrumpe la publicación de Jo Goodman en nuestro país dejando la serie de «El Club de la Brújula» incompleta.

Jo Goodman llegó a mi manos gracias a este artículo, ya que yo no la conocía. Indagando sobre quien sería la autora en el olvido de este número y gracias a las recomendacio‐ nes de mi querida Loli (nuestra coordinadora... alias... «La Jefa», jajaja), quien me puso los dientes bien largos con los chicos del Club... finalmente decidí que Jo debía ser mi autora en el olvido de este bimestre.

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Tras la muy jugosa recomendación de Loli, obviamente me decidí por leer El Club de la Brújula, así que me dispuse a hacerme con un ejemplar de su primer título, Déjame ser el único.

Lo primero con lo que me encontré fue que prácticamente no estaba disponible en ninguna librería, finalmente en Amazon encontré una edición de bolsillo y pude comprarlo. Lo segundo y que me cabreó ya definitivamente fue descubrir que la serie estaba incompleta, en español claro. Así que imaginaros mi disgusto, porque cuanto más investigaba sobre esta autora, más cosas me cabreaban... Hay pocos libros suyos traducidos a nuestro idioma, además hacerte con un ejemplar tampoco es algo sencillo y ya para rematarme del todo, me encuentro con la serie incompleta.

Todo esto pues claro me hace pensar, y bueno para las que aún no me conocéis mucho os diré que cuando algo me cabrea y me pongo a reflexionar sobre ello me sale la vena revolucionaria y me da por decir lo que pienso, pero lo que pienso de verdad.

Es entonces en este momento cuando mi revolucionarímetro (no vayáis a buscar la palabra a la RAE, me la he inventado, jajaja) ha alcanzado su cota máxima,

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necesito preguntar a las editoriales:

¿Perooooooooooooooo, Pooooooooooooooor Queeeeeeeeeeeeeeé? ¿No se dan cuenta de que con este tipo de decisiones echan piedras sobre el tejado de la industria editorial/literaria/cultural?, ¿A caso no entienden que si el lector no tiene a su alcance la compra de ejemplares, ocurre lo que ocurre?, ¿Qué si se deja una serie incompleta, el lector que no tiene a su alcance el poder leerlos en inglés, recurrirá a traducciones no oficiales, con lo que ello conlleva?

No me mal interpretéis, no apoyo que se recurran a estas traducciones no oficiales. Pero seamos sinceros, en este país, donde ya tenemos un problema enorme con la piratería de derechos artísticos/literarios/culturales, este tipo de decisiones no ayudan a frenarla.

Existen dos tipos de lectores en nuestro país que cuando se enfrentan a lo referido en este articulo actuaran de la siguiente forma: Están los que recurrirán a la piratería y a traducciones no oficiales sin dudarlo y los que

decidiremos no leer la serie completa porque no esta traducida íntegramente a nuestro idioma. En las dos situaciones se pierden ventas y se lastima tanto a la industria como al autor.

Me gustaría aprovechar este medio para lanzar un humilde mensaje a la industria editorial. Cuando se tome la decisión de traducir una serie o un libro dejen de lado por un momento las modas y piensen que proyección va tener la obra antes de lanzarla para luego dejarla incompleta o que sea de difícil adquisición, porque esto solo provocará lectores insatisfechos que no dudaran en recurrir a otros medios provocando el tan indeseado efecto de la piratería.

Para terminar deciros que Jo Goodman sigue escribiendo y que en lo que va de año ha publicado ya su dos últimas novelas, Boots Under Her Bed e In Want Of a Wife.

“

Ni la firmante, ni ninguna de las integrantes de la revista está de acuerdo ni fomenta la piratería, desde este medio luchamos y estamos totalmente en contra de cualquier acción que conlleve la violación de derechos de autor.”

La Cápsula del Tiempo: El libro

Shanna -Kathleen Woodiwisspor Loli Díaz

Eres grosero. ¡Eres un bárbaro de la peor clase! Bromeas con mi orgullo y tomas mi honor a la ligera.

Hoy os traigo rescatado de mi particular cápsula del tiempo una novela muy especial para mí.

Especial por muchos motivos pero el principal fue que me dio a conocer a una de las autoras que considero una de las pioneras en el que allá por los años ’80 se consideró la nueva etapa de nuestro género romántico‐histórico tal y como hoy lo tenemos concebido.

Sin duda alguna Kathleen fue una de esas cinco autoras que yo considero precursoras del mismo y que llegaron a las librerías españolas sin hacer mucho ruido pero revolucionaron tanto al mercado como a las lectoras.

Cuando buceé entre mis novelas de antaño en busca y captura del título a escoger para este artículo he de deciros que lo tuve difícil para,

muy difícil para decidirme entre éste y otro título de esta misma autora, Una rosa en invierno; una novela preciosa donde las haya y a la que ya le dedicaré este espacio, espero, algún día no muy lejano. No obstante, he de deciros que si al final opté por éste y no por el otro fue cuestión de sentimentalismo pues fue Shanna la primera novela de Woodiwiss que cayó en mis manos y el señor Ruark Deverell Beauchamp el protagonista que me volvió loca durante muchos años.

Hasta que conocí a James Malory pero eso es otra historia.

Os hablaré de Shanna y os hablaré, por supuestísimo, de Ruark y de una novela que por más que pasen los años siempre vuelves a ella con una sonrisa en los labios, mariposas en el estómago y candela ante tus manos. Una novela que hace palpitar tu corazón y caldea la estancia en frías noches de invierno.

Shanna es para mí una de esas protagonistas aguerridas y dispuestas a cualquier cosa, repito, cualquier cosa, con tal de salirse con la suya. El principio de la historia es de órdago. ¿Una jovencita que está a punto de cumplir los dieciocho años y a la que su padre le ha dado un ultimátum? ¿Qué puede hacer salvo doblegarse a los deseos de su padre? Ésa sería la decisión más sencilla pero no la única opción que le queda. Shanna dispone de dinero y a donde se dispone a ir para no tener que dar su brazo a torcer éste es lo único que impera, la única ley real que se reconoce en prisión.

Ni corta ni perezosa, se planta ante uno de los más avaros carceleros y, a cambio de una buena suma consigue lo quiere: un reo condenado a muerte que irá a la horca al día siguiente. Casada un día, viuda al siguiente. Ella le da lo que quiere a su padre… estar casada antes de su cumpleaños y ella consigue a cambio más tiempo. Nadie puede obligar a casarse a una reciente viuda. No está bien visto, tendrá por delante, al menos, un año para encontrar un marido adecuado.

Pero el destino tiene otros planes para ella y es aquí donde comienza su verdadera historia.

Un giro inesperado, una maldita complicación, casualidades de ese destino siempre tan caprichoso que va a hacer de su vida una auténtica locura y que la llevará de vuelta a los brazos de un marido que es mucho más de lo que ella jamás habría imaginado. ¡Ay, por Dios! Es que no hay manera de hacer un artículo serio y objetivo cuando las emociones te embargan de esta manera; cuando los recuerdos que rememora tu propia mente te hacen salirte de un esquema que te habías planteado seguir a rajatabla porque los sentimientos pueden más que tu intención de ser ecuánime e imparcial en su valoración.

Pero es que Shanna, es Shanna y haberme leído esta novela a los diecinueve años consiguió las mismas reacciones que cuando me la releí hace unos días… y ha llovido desde entonces.

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Incluso sabiendo lo que iba a ocurrir, incluso sabiendo que la historia no te podía sorprender porque te la conoces al dedillo tras ser una de esas pocas que relees de vez en cuando porque tienes mono de rememorar esa época universitaria en la que recurrías a la lectura para desconectar de los mamotretos de historia antigua que tenías que empollar, incluso después de tantos años pasados y los cuales acaban modificando tu manera de pensar, incluso después de todo esto... ésta es una novela que siempre consigue engancharte y leerla de un tirón. Sus más de quinientas páginas no son impedimento para que te sientes en tu sillón favorito y viajes desde Londres hasta las colonias americanas a bordo de un barco de esclavos y deseando que suceda un milagro, uno más.

Un milagro que permita que ese hombre que viaja a bordo consiga encontrar de una manera u otra la libertad que precisa para volver a casa.

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Pero inciertos son los caminos que nos marca el señor, ¿no dice eso la Biblia?

Pues he de deciros que ésta es una de las grandes verdades que podemos encontrar en Ella. Jamás fueron más inciertos que para Shanna y para Ruark.

La historia de ambos es preciosa, las escenas que comparten, las miradas anhelantes que se dirigen, ese quiero y no debo pero no puedo evitarlo, esos momentos de absoluta pasión que comparten, esos diálogos tan hermosos que su autora nos regala entre ambos. ¿Cómo no va a merecer la pena leer esta historia? Es uno de esos libros que deberían estar considerados de culto, una de esas 101 novelas que debe leer una buena lectora de novela romántica antes de morir.

Una lástima que sea tan difícil de conseguir. Vergara la publicó a principios de los ’80 y Cisne creo recordar que la rescató en los primeros años del nuevo siglo pero las nuevas generaciones no creo que hayan podido disfrutarla.

―Señor, me interesa saber cómo es que tenemos el mismo apellido. ¿Quizá tiene usted parientes en Inglaterra? ―Señora yo adquirí ese apellido honradamente pues me lo dieron mis padres.

Lo que realmente tendremos que discutir es cómo lo adquirió usted. Por supuesto, todos los Beauchamp somos parientes en una u otra forma. Aunque hemos tenido nuestros pícaros, piratas y salteadores, el nombre parece prolongarse con sorprendente regularidad

La Cápsula del Tiempo: La película

No me mandes Flores por Loli Díaz

Título original Duración Año País Director Guión Música Fotografía Reparto

Send me no flowers 100 min.

1964 Estados Unidos Norman Jewison Julius J. Epstein Frank DeVol Daniel L. Fapp Doris Day, Rock Hudson, Tony Randall, Paul Lynde, Clint Walker, Hal March, Edward Andrews Productora Universal Pictures Género Comedia Romántica

El deseo de tomar medicamentos es quizás la característica más importante que distingue al hombre del animal

Pero es que si bueno es el de Hudson el de Randall, el actor que es el eterno amigo de la pareja es im‐pre‐sio‐nan‐te.

El momentazo de la película es, sin lugar a dudas, cuando se entera de que su íntimo amigo tiene un pie en la tumba.

¡Vale! ¡Genial! ¡Menuda primera frase que aparece en esta película! Con semejante presentación a ver quién es la guapa que se atreve a sentarse enfrente del televisor a verla. Pero claro, viene avalada por nombres como Day, Hudson y Randall, un trío protagónico del cual ya hemos hablado en esta sección en un par de ocasiones cuando hablamos de dos films tan entretenidos como «Confidencias a medianoche» o «Pijama para dos», dos comedias tan amenas y entretenidas como divertidas y, al igual que ésta… sorpresiva.

No puedo evitarlo. Me encantan las películas antiguas y con esta me lo pasé realmente genial porque sus guionistas estuvieron sembrados.

Imaginaos a un Rock Hudson interpretando a un hipocondríaco que es capaz de asumir como propios todos los males del mundo.

Las situaciones que se generan a raíz de ello son simplemente delirantes. ¡Ay, por Dios!

Pobre señor Kimble.

Desde luego el papel de obsesivo que interpreta Hudson es de los que hacen historia y de los que jamás se olvidan.

¡Sopla, caracoles!

En serio, es increíblemente divertida. El victimismo con el que «afronta» la terrible prueba de su inminente fallecimiento el bueno de George y los diálogos que provoca Arnold son de lo mejor de la película.

No podía parar de reír en las primeras escenas del film, sobre todo cuando George empieza a «preparar» su entierro, a intentar de que Judy, su mujer, empiece a ser autosuficiente.

Incluso tiene la loca idea de buscarse sustituto para que ella no se quede sola.

Desde luego lo bueno es verla porque no hay manera humana de que se pueda reflejar en palabras las sensaciones que la película te provoca.

Las cábalas que el señor Kimble comienza a hacerse y la película que comienza a montarse son de lo mejor.

No os podéis hacer una idea.

Las situaciones que se generan a raíz de una malinterpretación por frases sacadas de contexto en la consulta de un médico son un claro exponente de que las personas no deberíamos hacer una montaña de un grano de arena sin que haya confirmación de lo ocurrido.

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Hay escenas buenas, escenas geniales y escenas de lo más absurdas.

El momento compra de tumbas es una de las idas de olla más inolvidables de todas cuantas aquí se suceden. ―Reserva para tres cónyuges.

El problema es encontrar al candidato que ocupe su lugar en el corazón de su mujer cuando la palme y, para asegurarse que ningún cazafortunas se aproveche de la dueña de su corazón comienza a investigar entre sus amistades y socios de su club quién podría ser el candidato ideal para… ocupar su puesto.

Si en algo me gustó esta película es por eso. Por lo en serio que George se toma la futura felicidad de su esposa y por asegurar su porvenir.

Ningún hombre le cuadra para ello pero… aparece un antiguo novio de Judy y, pese a la antipatía que éste le provoca es capaz de reconocer que Bert podría ser la respuesta a todos sus problemas.

Enredos, situaciones controvertidas y malos entendidos son los hilos conductores de esta película que, en el fondo, está cargada de dramatismo RománTica'S 94

En fin, ¿qué más queréis que os diga?

Obviamente no os voy a revelar el final pero sí os recomiendo su visualización y, que cuando lo hagáis os preparéis mentalmente para poneros en la piel del pobre George Kimble, un hombre que cuando se cree a punto de perder la vida es cuando se da cuenta de todo lo que está perdiendo. Y, mientras él intenta hacer de tripas corazón para dejar todos sus asuntos al día, el único que le acompaña en esas horas bajas es Arnold, un Arnold que cada día que pasa está más destrozado por su inminente pérdida y que no deja de beber desde que se enteró de la «fatal» noticia.

Un consejo: no es la película más conocida de este terno de actores pero está al mismo nivel en entretenimiento que las anteriores. «No me mandes flores» es sencillamente, genial.

La escena que aquí se refleja es una de las que por más tiempo que pasen no se olvidan jamás y no me podéis tirar de la lengua que jamás diré qué ocurre.

Diccionario RománTico El guardainfantes por Tamara Arteaga

Espero que esta sección de la revista os ayude a comprender un poquito los objetos, prendas y demás cosas de las que se hable y pasar también un buen rato de la mano de...

Ejem, que ya empezamos a sonar mal y así no se puede.

El artículo que describiremos a continuación se ha denominado como guardainfante. Como ya sabréis, imaginaréis o descubriréis (muy mal por no haber leído mis colaboraciones anteriores, espero que las busquéis y echéis un vistazo sí o sí), soy una persona que hace relaciones algo inverosímiles y que se imagina cosas que no soy.

Y, claro, al enterarme del nombre del objeto en cuestión me he imaginado al público del programa que presentaba Isabel Gemio, Sorpresa, sorpresa. ¿Por qué? La razón es muy simple. Lo primero porque me imaginaba que formaría parte o sería una prenda femenina y lo segundo es que servir para guardar secretos. Y, quien dice secretos dice niños o barrigas cuyo interior albergan niños, vamos. Yo no soy mal pensada, soy lo siguiente.

Así que, ni corta ni perezosa... bueno, perezosa soy un rato largo, pero eso no nos concierne ahora.

A lo que íbamos, que me puse a buscar como la loca de la colina de dónde narices provenía la palabra.

Como podéis observar, la palabra se compone por guarda e infante, ya que, como he mencionado anteriormente y la RAE expresa «por ser prenda con que podían ocultar su estado las mujeres embarazadas».

Según la Real Academia, guardainfantes tiene dos acepciones:

Guardainfantes 1. m. Especie de tontillo redondo, muy hueco, hecho de alambres con cintas, que se ponían las mujeres en la cintura debajo de la basquiña.

2. m. Conjunto de los trozos de madera en forma de duelas que se suelen colocar sobre el cilindro de un cabrestante para aumentar su diámetro y conseguir que recoja más cuerda a cada vuelta que dé.

No obstante, al ver la foto, a una se le viene la imagen de una pelota de rugby, no preguntéis por qué. Y, si la prenda ayudaba a evitar que la gente se diese cuenta de que la mujer estaba encinta, a saber qué más podría ayudar a esconder.

Este conjunto que llevaban las mujeres estuvieron de «moda» en el siglo XVII entre las damas de alta alcurnia, de alta posición social, de la nobleza, vamos.

Y, si podéis ver las imágenes comprenderéis que yo me haya imaginado que la falda parece la carpa de un circo.

Capaz de levantar la falda y aparte de quedarse una sorda se encuentra con el conejo de Alicia en el País de las Maravillas, a Wally o incluso Carmen Sandiego tomando el té como quien no quiere la cosa.

Un tipo de prenda que ayudaba a realzar la figura de las mujeres, esa figura esbelta que, como una buena telenovela, escondía más de un secreto.

“Claro que, una vez te imaginas eso, también puede venírsete a la mente que, al igual que este artículo puede esconder embarazos, también puede esconder… otras cosas… a lo fajas que ocultan… «michelines». ¡Mal pensadas!”

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Las obras pictóricas de Velázquez reflejan muy bien la moda de la época En la búsqueda de información también me he encontrado con otros datos importantes. Por ejemplo, el enorme tamaño del vesti‐ do hacía que las mujeres no cupieran por las puertas y tuvieran que franquearlas de una en una y de lado, ade‐ más se tuvieron que modifi‐ car las puertas de los carrua‐ jes y de las sillas de manos para que las damas pudieran entrar. Para mear y no echar gota, vamos. Uy, perdón, orinar, que estamos entre damas. Yo y mi burdo voca‐ bulario. Aunque con seme‐ jante prenda intuyo que para orinar la liaban parda, ¿no?

Pues eso, que bailar con ello parece que sería algo así como derribar piezas de ajedrez a lo Harry Potter.

Tampoco es que me cachondee, pero moverse con tales equipaciones que parecen peores que las armaduras de caballeros templarios bien podría considerarse una carrera.

Pero ya se sabe que en esa época el dicho de «para presumir hay que sufrir» lo llevaban a otro nivel. Solo hay que ver las constituciones a partir del uso de corsés.

Espero que este artículo os haya resultado de ayuda y hayáis podido entender un poquitín para qué utilizaban el artefacto (por no llamarlo de otra manera).

Y, como diría Ronan, personajillo de Laura Nuño, ante todo, educación.

Bueno, no, la justa. ¡Un besazo!

Por mi madre que más que niñas parecen mesas de camilla y góndolas

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Amores Reales

Poe y sus «otras» mujeres por Paty C. Marín

Sarah Whitman

En el número anterior ya hablamos sobre la trágica historia que Poe vivió junto a su amada esposa, la joven Virgnia Clemm, cuyo fatal desenlace ya hemos conocido. Poe fue uno de los grandes escritores y poetas de su tiempo y tal honor no fue reconocido hasta mucho después de su muerte, en extrañas circunstancias. Pero Poe, que escribía con intensidad cada una de sus líneas, también amaba de la misma forma. Virginia fue su gran amor, pero hubo tras mujeres que también formaron parte de su vida, que de algún modo lo inspiraron y que también dejaron huella en el corazón del escritor.

Una de estas mujeres fue Sarah Helen Power Whitman, poetisa y ensayista. Nació en Providence en 1808 y era seis años mayor que Poe. En 1828 se casó con el poeta John Winslow Whitman quién colaboraba con una revista, Ladies' Album, donde Sarah comenzó a publicar algunos poemas bajo el seudónimo Helen. Su esposo falleció en 1833 y no tuvieron hijos.

Poe y Sarah se conocieron en Providence en 1845. Tras una reunión en la que algunos escritores leyeron sus poemas, una lectura organizada por la poetisa Frances Sargent Osgood, ambos poetas dieron un paseo por las calles de Providence y pasaron frente a la casa de Sarah, que en ese momento se encontraba en el jardín atendiendo sus rosas y Osgood se ofreció presentarle a la dama.

A comienzos de 1848 una amiga de Sarah le pidió que escribiera un poema para el día de San Valentín. Ella aceptó y escribió un poema titulado: «A Edgar Allan Poe», porque en el fondo Sarah era una gran admiradora del escritor.

Sin haberlo leído pero sabiendo que Sarah había escrito el poema, Poe devolvió la cortesía y escribió un poema anónimo titulado «A Helen» (el pseudónimo que ella usaba para escribir). Fue tan anónimo que Sarah no supo que él había sido el autor.

Tres meses después, inquieto por no recibir

respuesta, Poe reescribió el poema haciendo referencia al primer encuentro que tuvieran, en el jardín rodeada de rosas.

Sarah y Poe iniciaron una relación a través de cartas y poemas y conversaciones sobre literatura hasta que, finalmente decidieron comprometerse. Después de una de esas reuniones de lectura donde Poe recitó algunos poemas bajo la atenta mirada de Sarah, ambos acordaron casarse bien pronto.

El enamoramiento le llegó a tal punto que incluso prometió mantenerse sobrio hasta la ceremonia.

Pero la madre de Sarah descubrió que el poeta también cortejaba a otras dos mujeres y la boda se suspendió. Aun así los periódicos locales anunciaban que la unión entre Saray y Poe se celebraría el 25 de diciembre de 1848 y cerca de esa fecha Sarah recibió una carta anónima en la que se denunciaba el extraño comportamiento de Poe, sus vagabundeos etílicos por las calles a altas horas de la madrugada.

Sarah creyó que Poe había faltado a su promesa de mantenerse sobrio y decidió romper el compromiso. Él se defendió en una carta muy incendiaria en la que culpaba de todo a la influencia de la madre de Sarah, pero ella no cambió de parecer.

Poe moriría un año después, en 1849, en circunstancias poco claras. Sarah falleció en 1878 a los 75 años de edad.

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Pero esta Saray no fue el único gran amor de Poe, igual que tampoco lo fue Virginia. Sarah Elmira Royster Shelton, más conocida como Sarah Royster, fue una amiga de la infancia del poeta y una mujer que también fue su prometida en dos ocasiones.

La relación entre Poe y Sarah Royster comenzó cuando ella tenía quince años y él, dieciséis.

Por aquel entonces, en 1825, Poe estudiaba en la en la Universidad de Virginia, por lo que los dos eran vecinos en la de Richmond y se reunían casi todos los días para charlar. El cariño entre Poe y Sarah Royster se hizo tan evidente que el hermano del poeta que también conocía a Sarah compuso un poema titulado «El pirata», donde un joven llamado Edgard Leonard, huérfano como ellos, se enamoraba de una joven candorosa llamada Rosalie, un apodo de la propia Sarah.

Aquel cariño se tornó en un romance lánguido, lleno de promesas ardorosas y actos más bien pudorosos. Hablaron de matrimonio a espaldas del padre de Sarah, quién estaba totalmente en contra de aquella relación. Se comprometieron en secreto en 1826 y el vínculo continuó a distancia porque Poe vivía en la Universidad. Cierto día, el padre de Sarah interceptó una carta secreta del poeta y la destruyó e hizo lo mismo con todas las que Poe le envió a su amada durante el resto del año.

Sarah, creyéndose olvidada, se entregó a la melancolía.

Contrajo matrimonio con un adinerado comerciante de Virginia, un candidato a la altura de las expectativas de su padre ya que uno de los principales motivos por los que el señor Royster destruyó aquella

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relación fue por la pobreza en la que vivía Poe. Sara tuvo cinco hijos con su esposo y a comienzos de 1827, cuando Poe se enteró de esta «traición», compuso el poema Tamerlane donde describe los viajes y aventuras de un joven que retorna a su tierra natal, solo para descubrir que su amada se ha casado con otro.

Dos años después, en 1829, volvió sobre aquel dolor íntimo en el poema «Para —» en el que sostiene que ni siquiera todo el oro del mundo podría comprar la felicidad que planeaba secretamente para ella.

En 1934, Poe ya estaba casado con el gran amor de su vida, Virginia Clemm. Recibió la visita de Mary Winfree, una íntima amiga de Sarah, que le confesó que la muchacha no era feliz en su matrimonio. Muy interesado en la noticia, Poe compuso un poema titulado «Para Mary».

Los años pasaron sin mayores novedades, hasta que el esposo de Sarah contrajo neumonía en 1844 y falleció, dejando a Sarah una herencia considerable. En 1847 moriría Virginia, la esposa de Poe, sumiendo al poeta en una honda depresión. Al año siguiente se mudaría a Providence siguiendo el rastro de Sarah Whitman, la poetisa de la que hablábamos al comienzo del artículo, pero aquel compromiso se rompió abruptamente.

Edgar Allan Poe no ahorraba poemas para sus mujeres. A todas les dedicó unos versos pero ninguna aceptaba sus propuestas de amor. Abatido por el rechazo Poe volvió a sucumbir en una espiral de alcoholismo. Fue en estas circunstancias tan deplorables, solo, pobre y alcohólico, cuando se reencontró con Sara Royster

en una calle de Richmond. El reencuentro ocurrió en un momento desafortunado, a los 39 años de edad Sarah había abrazado una fervorosa religiosidad y la visita de Poe le resultó inesperada. Sin embargo, el amor y el cariño que Sarah había tenido por el escritor no habían desaparecido del todo. En secreto asistió a una conferencia presentada por el poeta en Richmond, aunque no se sabe si Poe la vio en la penumbra del auditorio. Pero el discurso de aquella conferencia conmovió a Sarah y estuvo segura de que él le daría una segunda oportunidad.

Revivieron el romance en el transcurso del año e incluso hablaron de matrimonio. Pero, de nuevo, el rechazo de terceros quería marcar el destino de Poe. Los hijos de Sarah desaprobaban a relación basándose en una cláusula en la herencia que estipulaba la pérdida de las tres cuartas partes de las propiedades heredadas si Sarah volvía a casarse. A pesar de estas objeciones contractuales, la pareja continuó viéndose en secreto. El 17 de septiembre de 1849, Poe visitó Richmond y pasó la noche con Sarah.

Posteriormente escribiría:

“

Creo que me ama con más devoción que ninguna otra que haya conocido. No puedo evitar amarla yo también.”

Llegados a este punto, Poe se volvió excesivamente insistente con el tema del matrimonio, diciéndole que no aceptaría un No por respuesta. Sarah sostuvo que si él no aceptaba una negativa debía darle más tiempo para considerarlo. A Sarah no le importaba realmente perder una porción de su fortuna, por considerable que fuera, pero tenía miedo del temperamento inestable de Poe y su destructivo alcoholismo.

La mayoría de sus biógrafos aseguran que la pareja formalizó un acuerdo a mediados de 1849, pero el 27 de septiembre de 1849 se encontró el cuerpo de Edgar Allan Poe agonizando en la calle, sucio, vestido con ropas ajenas, y delirante. Fue internado en el hospital de Baltimore, donde murió misteriosamente el 7 de octubre de 1849.

El halo de misterio que orbita sobre la muerte de Edgar Allan Poe incluye una serie de declaraciones de la propia Sarah Royster. Sostuvo que el poeta se hallaba visiblemente perturbado la noche del 26 de septiembre, y que, antes de irse de su lado le confesó que tenía el presentimiento de que no volverían a verse.

En los delirios de la agonía, Poe mencionó a sus médicos que tenía una esposa en Richmond.

Algunos sostienen que se refería a Sarah, otros que alucinaba con Virginia. Uno de los biógrafos de Poe aseguraba que los hermanos de Sarah Royster fueron los responsables de la muerte del poeta, alarmados por la pérdida de bienes materiales que significaba el compromiso de su hermana.

Sarah Elmira Royster murió el 11 de febrero de 1888. Un día después, el 12 de febrero de 1888, apareció un misterioso obituario en el periódico Richmond Whig…

Sarah Elmira Royster 1810-1888 El primer y último amor de Poe.

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Ocio y Placer

San Sebastián UN PASEO PARA DISFRUTAR La visión de Pilar Cabero autora de Algo inesperado

H

oy he quedado con Ander Uribe en la escuela náutica donde trabaja.

Empezamos nuestro paseo en el puerto, entre el olor a salitre y alquitrán de los barcos pesqueros y de recreo, que se mecen en las aguas de la dársena.

Dejamos atrás el Aquarium y su terraza, desde donde se divisa la bahía y la isla de Santa Clara; pasamos al lado de los restaurantes bajo las casas de pescadores, adosadas a la falda del monte Urgull. Por el desigual empedrado, nos dirigimos a Portaletas, la antigua Puerta de Mar, para cruzar el único lienzo que existe de la muralla que antaño protegía la ciudad.

La calle Puerto nos recibe con su bullicio habitual. Aún es pronto para degustar unas patatas bravas o unos mejillones en uno de los establecimientos más conocidos de esa zona, así que continuamos paseando hasta llegar la calle Mayor, donde los

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turistas se afanan en captar una fotografía de la fachada de la iglesia de Santa María, con la imagen de San Sebastián y sus flechas. Pocas veces encuentras vacías las calles de la Parte Vieja y hoy están atestadas. Los bares ofrecen una variedad impresionante de pintxos fríos o calientes que te hacen salivar como si no hubieras comido en días. Se oyen el bullicio y las risas.

Como hace una temperatura estupenda, decidimos sentarnos en una de las terrazas de la plaza de la Constitución, o la «Consti», como la llamamos coloquialmente. Hace años aquí se encontraba el Ayuntamiento, pero ahora alberga una biblioteca. En los balcones de las viviendas siguen pintados los números de las localidades, de cuando se utilizaba el recinto como coso taurino.

Nos bebemos la cerveza bien fría, disfrutando del sol de la tarde, que asoma entre las nubes cada vez más numerosas. Ander enseguida se levanta para continuar con la visita guiada. Está ansioso por enseñarme esta ciudad, que a los dos nos encanta, como si fuera una turista más. Me lleva hasta el paseo de Salamanca, donde el mar lucha contra las barreras que le han puesto para acotarle y que, de vez en cuando, destroza con su bravura.

Desde el pretil admiramos las olas que susurran entre las rocas y desgastan las aristas de los bloques de granito, mientras nos acercamos al puente del Kursaal, el primero de los siete puentes sobre el río Urumea que aguanta el embate del mar. Aún no han encendido las luces del Palacio Kursaal, por lo que la playa de la Zurriola y los edificios del barrio de Gros acaparan toda nuestra atención.

Después, durante la noche, los cubos de Moneo parecerán un par de gigantescas luciérnagas posadas en la playa.

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Continuamos caminando por el margen del río, junto al Teatro Victoria Eugenia y el hotel María Cristina, lugar donde se alojan las estrellas que vienen a desfilar por la alfombra roja del Festival de Cine de San Sebastián. Las nubes tapan el sol y una fina llovizna motea el suelo. Ander me toma de la mano y echa a correr por la calle Andía, para refugiarnos en los soportales de la Plaza de Gipuzkoa. Aprovechando que allí no nos mojamos, recorremos bajo los arcos todo el perímetro de la plaza hasta terminar bajo el edificio de la Diputación Foral de Gipuzkoa.

En el centro está el parque de estilo inglés, con estanque de patos y cisnes, un templete meteorológico, una mesa horaria de mármol, el monumento al músico donostiarra José María Usandizaga y un reloj construido con flores de temporada.

La lluvia nos da un respiro y Ander me conduce por la calle Andía hasta llegar a la playa de La Concha. Yo creía que me iba a llevar hasta la calle Reyes Católicos, la zona de pubs detrás de la iglesia del Buen Pastor, pero parece que prefiere estar cerca del mar. El cielo se está despejando por el horizonte, donde se junta con el agua, y la luz del sol penetra por entre las nubes hasta tocar el antiguo faro de piedra del monte Igueldo.

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Por mucho que miro la estampa que compone el paseo que flanquea la playa, delimitada por los montes Urgull e Igueldo, y la isla de Santa Clara, flotando en medio de la bahía, no me canso de apreciar su belleza.

El Paseo de La Concha nos lleva hasta el Peine del Viento, una obra escultórica de Eduardo Chillida, fotografiada hasta la saciedad por donostiarras y turistas.

Ya empieza a oscurecer y Ander quiere que enseñarme las luces de la ciudad reflejadas en el agua. Descalzos bajamos a la playa, para recorrer por la orilla su perímetro.

Acodados en la barandilla, tantas veces reproducida y que es uno de los iconos de la ciudad, muchos turistas observan el ocaso, custodiados por la estatua del Sagrado Corazón de Jesús que, desde el monte Urgull, vigila la ciudad a sus pies. Las luces de las farolas y las de los edificios más emblemáticos, como el Ayuntamiento, situado en el antiguo Casino, o el Hotel de Londres, ya están encendidas.

Y a esa hora mágica, tal y como Ander me había prometido, el mar, sosegado para pasar la noche, refleja la ciudad iluminada.

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Una idea pre-vacacional

Viajes y Excursiones Literarias ¿Se acerca el período de vacaciones o disponéis de un fin de semana libre de ocio y queréis viajar? ¿En qué os basáis a la hora de elegir u organizar el viaje o escapada? ¿Viaje organizado o por libre? ¿Alguna vez habéis organizado un viaje en base a un libro leído, para ver aquellos lugares que aparecen en él? un artículo de Laura Caballero

C

uando Loli Díaz, la coordinadora de contenidos de esta revista me propuso colaborar en ella me empapé de todas las secciones habidas y por haber y fue la de Ocio y Placer la que encendió una lucecita en mi cabeza que no me dejaba vivir. Hace unos días volví a pensar en ello porque reconozco que tengo una lista de lugares dónde ir de viaje después de haber leído algún que otro libro.

UNA WEB DIRIGIDA TOTALMENTE AL LECTOR Se trata de www.viajesliterarios.com que, entre sus ofertas tienen…

París. Visto por Edward Rutherfurd Marruecos. Un viaje alucinante extraído de El tiempo entre costuras.

Seattle y Nueva York de lujo. Descubriendo a Grey.

Gran Bretaña y Escocia. Los parajes y localizaciones de Harry Potter. ¿Que os parece la idea? Original, seguro. Y, si se realiza bien, un nego‐ EJEMPLOS...

“La oportunidad de Después de leer I love New York, I cio con futuro. Para quien le gusten montar el viaje a los viajes organizados y quiera salir Iove Hollywood y I love París, apunté medida si perteneces a de los viajes turísticos de siempre, en mi lista esas tres ciudades. Con ahora ya hay más opciones con los Calle Dublín, sucedió lo mismo y se un grupo o club de viajes literarios organizados. unió la ciudad de Edimburgo a esta lectura.”

Personalmente, me gusta organizar‐ lista, Venecia fue anotada en ella tras me los viajes por mi cuenta y a mi ritmo. Es por ello que la lectura de El último Carnaval así podría seguir y cuando acabo de leer un libro el cual me ha dejado con seguir hasta hacer de ella algo interminable.

Pues bien, empecé a curiosear por internet, a ver que las ganas de viajar a los lugares que en él se cita, aparecía sobre este tema. Ya sabía yo que en la ciudad siempre pienso que al final del libro deberían incluir un condal hacen excursiones por Barcelona, haciendo la mapa con todos los sitios citados, así parte del trabajo ruta de La sombra del viento y de La catedral del Mar. ya estaría hecho.

En Hawaii tienen una oferta para los turistas para visitar ¿Vosotros qué haríais, viaje los diferentes lugares de la isla donde se rodó la serie organizado o por vuestra cuenta? De Perdidos. Lo que menos me esperaba es que hubiera una empresa que se dedica a organizar viajes según el una forma o de otra, está claro que libro. hoy en día tenemos la oportunidad de La web es Globalbook.eu. Una iniciativa conjunta entre disfrutar del turismo y la literatura a la vez, «Exclusive Spain Tours» y «Mi Viaje Exclusivo». El obje‐ que pueden ir de la mano una de la otra. Y tivo es poner a disposición de las librerías, que pertene‐ que nadie se quedará sin ideas a la hora de cen a su red, viajes literarios con el fin de diversificar la oferta y atraer a sus lectores. hacer un viaje.”

“

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Diario de una madre algo neurótica Porque yo lo valgo por Violeta Lago

¡Con lo mona que yo iba!

Querido diario: El sábado estuve en la boda de mi mejor amiga. Bueno, más que la boda, la re-boda, porque es la segunda vez que se casa. Seguiré toda la vida sin entender a la gente que después de pasar por un divorcio, vuelve a casarse. ¿Es que no escarmentaron la primera vez? El hecho de que yo tenga ganas de tener un hombre en mi vida, que las tengo, no quiere decir que vaya a ser «contigo pan y cebolla» para toda la vida. Otra vez, no.

La boda estuvo fenomenal,.. hasta que, para variar, monté el espectáculo. ¿Por qué tengo que ser siempre yo? ¿Por qué las brujas de mis amigas me miran siempre a través de la cámara del móvil esperando que la líe parda? ¿Y por qué lo hago siempre?

Me compré un vestido maravilloso de una diseñadora malagueña, en color rosa fucsia, largo y de gasa. Como la boda era por la tarde, era lo que se supone que quedaba de acuerdo con el protocolo. Y para contrastar con ese vestido, los complementos iban en azul petróleo. La ceremonia civil y la cena se celebraban en una finca que hay en las afueras de la ciudad, y allí que me hice yo presente, toda monísima de la muerte, después de dejar a Jorge en casa de su padre, aunque ese fin de semana le tocaba pasarlo conmigo. Pero mi hijo, más inteligente que yo, decidió que no le apetecía el evento, y mi ex marido no puso pegas para quedarse con él.

Sabía que iba un poco justa de tiempo, y que iba a llegar un poco más tarde de lo debido, pero no me importaba, porque iba a compartir con mi amiga esa tarde tan perfecta para ella.

El entorno era perfecto, bucólico, maravilloso, con olor a campo... y a vacas. Aquello ya me sorprendió, pero mi mayor asombro llegó cuando descubrí que todos los invitados al evento, incluso los mismos contrayentes, iban vestidos en vaqueros y zapatillas deportivas. Y lo peor de todo fue cuando absolutamente todas las cabezas se giraron en mi dirección cuando llegué a la carpa. Me sentí absurda, ridícula y fuera de lugar.

Cuando acabó la ceremonia, mi amiga se acercó para charlar conmigo. ―¡Pero Rosa! ¿Cómo me vienes así vestida? Vamos a hacer una capea y una barbacoa. ―¡No me dijiste nada! ―Claro que no te lo dije. Venía indicado en la invitación que te mandé por e-mail «Mierda, mierda, mierda», pensé. «¿Por qué no abrí el archivo adjunto y me conformé con leer el cuerpo del mensaje?».

Así que allí me encontré yo, toda la tarde y la noche, sin poder moverme del sitio porque los malditos tacones se clavaban en la arena y en el césped, observando como todos disfrutaban y se reían mientras yo no podía siquiera levantarme de la silla por miedo a caerme y hacer aún más el ridículo.

Agradecí el final de la fiesta, y cuando cogí el coche a casa me prometí a mí misma no volver a leer los mensajes de correo a medias. :

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A la próxima amiga que se case, le mando un juego de cubiertos y declino amablemente la invitación. Y por supuesto, tengo que buscar otra «mejor amiga»

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Este bimestre os frecemos la quinta entrega de nuestro ciclo dedicado a la Numerología, técnica adivinatoria que estudia los números y su influencia en el ser humano.

Esta mancia puede ayudarnos a descubrir nuestras capacidades y limitaciones como paso hacia la evolución y felicidad interior y la realización personal. Según su teoría en nuestra fecha de nacimiento y nuestro nombre se halla una fórmula numérica que nos acompañará a través de toda nuestra vida y en la cual se ocultan las claves de nuestra personalidad y nuestro destino. Aprender cómo mejorar y elegir el camino adecuado está en nuestras manos. En esta entrega dibujaremos el perfil de la personalidad de 5 asociándolo además con los protagonistas de una novela que aprovecharemos para recomendaros. Esperamos que os resulte interesante.

El número 5 El 5 es un número que simboliza el espíritu y la materia combinados con el cuerpo humano y el universo, es la suma entre el 3 (la Trinidad divina) y el 2 (la pareja humana). Esta confluencia de simbolismo le otorga a este número la libertad total, el poder para realizar sus máximos deseos. Pero toda transformación lleva consigo un sacrificio.

Hombre 5: Alec Walker El límite del placer Eve Berlin Para la autora de novela eró‐ tica Dylan Ivory, el control lo es todo, ella lleva una vida organizada y segura, estable, sin riesgos. Hasta que se topó con Alec, un hombre que era todo lo contrario a ella... pero que era todo lo que real‐ mente quería ser.

Alec Walker es un escritor de thrillers psicológicos y un hombre que vive al límite.

Nada es demasiado arries‐ gado ni demasiado peligroso para él. Y ese riesgo también se extiende a sus gustos en el dormitorio. Es en su club de BDSM donde da rienda suelta a sus deseos.

Como labor de investigación para su próximo libro, Dylan mantiene un encuentro con Alec y éste la invita a probar los placeres que se ocultan tras ese delicioso fruto prohi‐ bido que es el BDSM.

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Por ello también hace alusión a todas las dificultades, la perdida, el sufrimiento y la lucha que traen consigo los cambios provocados.

Leonardo da Vinci inmortalizó el simbolismo de esta cifra en el Hombre de Vitruvio, su famoso dibujo de un hombre desnudo con los brazos extendidos dentro de un circulo que ilustraba la extendida creencia alquímica de que el ser humano es la representación misma del cosmos, por así decirlo, de la forma del cuerpo humano puede deducirse la del universo.

El carácter de 5 Las personas de esta Vibración son sumamente brillantes, con una inteligencia que se sale de lo corriente, destacables poderes creativos, tremendo genio inventivo y un mente ágil, inquisidora y dinámica. Son sin duda alguna las más vivaces, inquietas y versátiles de toda la escala numerológica.

Impacientes e impulsivos tanto de acción como de pensamiento, tienen ideas muy inauditas y progresistas, dispuestos siempre a aceptar nuevas ideas y a adentrarse en mundos desconocidos e insólitos, todo lo que signifique un cambio, libertad o progreso.

Siempre están dispuestos a erradicar aquellas ideas, creencias u opiniones anticuadas que impidan el avance del ser humano.

Atrevidos y entusiastas, aman la vida, la aventura y la libertad de tal modo que para ellos no son meras palabras, sino que necesitan experimentarlas con todos sus contrastes y hasta el fin de sus consecuencias. Desdeñan el miedo, ellos no se limitan a ver la vida pasar, sino que necesitan sumergirse hasta el fondo aceptando todos los riesgos que ello conlleva.

Son personas muy intuitivas y siempre alerta a los estímulos y señales que reciben. Debido a ello se comportan de manera imprevisible e inesperada. Sus estados de ánimo se corresponden a

esta descripción, pasando por los más variados dependiendo de las circunstancias y su interacción con los demás, pues ellos captan y sienten las cosas tan intensamente que se nutren de los matrices.

Como consecuencia de su espíritu aventurero, tienen alma de errantes vagabundos. Son personas que tienen el sentido de la independencia y la libertad muy arraigado, se rebelan ante las ataduras y las normas impuestas porque su corazón bohemio necesita sentirse libre y sin ninguna restricción de movimientos. Si las personas que conviven con ellos intentan dominarlos se rebelarán y romperán amarras a la mayor brevedad posible.

5 en el amor Aunque pueda parecer increíble en personas tan progresistas, osadas y dinámicas, los 5 poseen un carácter cándido, crédulo y carente de malicia con respecto a los sentimientos. Poseen una innata timidez y se comportan casi como un niño, con sentimientos puros y una mente sin artificios, incapaz de guardar rencor o retener una ofensa.

Algo contradictorio inherente a su polémica personalidad.

Son unos románticos incurables, idealistas que sueñan con el cuento de hadas en el que encontrarán a su pareja ideal. Tan apasionados en el amor como en la vida ejercen una atracción en los demás de la que no son conscientes. Encantadores, tiernos y sensuales, una vez superada su reserva puede ser un pretendiente increíble que ofrecerá una vida fascinante a la persona que elija.

Nadie comprenderá mejor a esta Vibración que otro con igual o similar temperamento a él, por ello para lograr una unión feliz y gratificante la mejor elección sería otro 5, tan propenso a la alegría, la diversión y la aventura como él. Con un 3 también podrían ser dichoso, pues tienen en común su intensa forma de vivir.

A los conservadores y tranquilos 2 y 6 les atrae la personalidad de los 5, pero les costará aguantar su vitalidad y su inquietud y seguirles en sus mil y una aventuras. Los 7 se sentirán fascinados por la personalidad culta e intelectual de los 5, pero tampoco podrán seguir su ritmo frenético, y es que dejan exhaustos a cualquiera.

Para que un 5 y un 8 encuentren felicidad y compenetración, el primero debe estar dispuesto a transigir porque el 8 nunca lo hará.

La comunicación también será complicada con un 9, un 1 o un 4, a menos que la relación entre ellos esté fundamentada en un verdadero amor y exista deseo de ceder por ambas partes. ¿Quieres saber si eres 5?

Para saber cuál es tu Vibración de nacimiento debes sumar todos los dígitos que conforman tu fecha de nacimiento hasta reducirlos a un único número. Por ejemplo, una persona nacida el 9 de noviembre de 1967 tendrá como Vibración de nacimiento el 7.

9 + 1 + 1 + 1 + 9 + 6 + 7 = 34 3+4=7 Artículo: Ana Sarria Fuentes: Numerología Mágica, Gladys Lobos El Tarot de los Druidas, Philip y Stephanie Carr‐Gomm

Mujer 5: Caledonia Rivers Vencida Hope Tarr Conocida por todos como la «doncella de Mayfair» por su virtud inquebrantable, su re‐ solución y su elevado con‐ cepto de la dignidad, Caledo‐ nia Rivers (Callie) es la líder de las sufragistas londinenses, la imagen perfecta de lo que tanto disgusta a todos aque‐ llos que están en contra de que las mujeres se metan en líos políticos y pretendan te‐ ner un papel en la sociedad.

Agitadores, lunáticos e incluso prostitutas la detestan. Sin embargo, estos no son sus mayores enemigos: hay que desea destrozar su reputación por encima de todo.

Hadrian St. Claire lleva una mala temporada con las car‐ tas, muy mala, que amenaza con hacer que sus huesos aca‐ ben en el fondo del Támesis.

Por eso acepta por dinero se‐ ducir a la famosa líder para después fotografiar con su cá‐ mara la que ha de ser su caída en desgracia. Pero la bella Callie, encantadora y de voz seductora, poco tiene que ver con la idea que él se había hecho…

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UN VERAANO PARA NO OLVIDAR. Chicas, en breves días tendremos aquí el verano. Sol, playa o montaña, cualquier excusa es bueno para tirarse a la bartola con una nueva novela y creemos que desde nuestras páginas os hemos ofertado una gran variedad.

Si deseas que publiquemos tu relato, envíanoslo a nuestra dirección de correo: romanticasmagazzine@gmail.com De entre los relatos recibidos se seleccionarán los que serán publicados en nuestras páginas. No se os olvide consignar en el asunto del mail la palabra RELATOS El texto no podrá superar las 3000 palabras.

Todos los relatos deberán llevar el nombre de el/la autor/a y acompañar el escrito con una pequeña nota en la que se haga constar que el texto es de tu propiedad.

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Las editoriales se han volcado con los bolsillos para que podamos arrasar las librerías y echar en nuestras bolsas de playa más de un ejemplar sin que por ello se vea afectada su capacidad. No hay excusas para no leer. Echa junto a tu bronceador, tu toalla y tu bocata el libro que te resulte más atractivo..

Feliz verano a tod@s.

Equipo RománTica’S

Contacta con RománTica’s para hacernos llegar tu opinión, comentarios y sugerencias tanto sobre la revista como cualquier otro tema relacionado con la novela romántica.

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