Historia del Fuego No hay día en que no utilicemos el fuego, pues siempre lo ocupamos para diferentesactividades de la vida cotidiana. Algunas veces lo utilizamos para cocinar, en otras ocasiones lo ocupamos para darnos calor o al encender una vela cuando se ha ido la energía eléctrica. Todos sabemos que el fuego fue descubierto en la prehistoria, y probablemente al pensar en ello viene a nuestra mente la imagen de dos cavernícolas frotando dos piedras y sorprendidos al ver el fuego. Y en realidad esta imagen se asemeja mucho a la realidad. En el período Paleolítico el fuego fue descubierto por el homo Erectus. Sobre este descubrimiento giro la mitad del período Paleolítico. Este gran descubrimiento les permitió alcanzar un importante nivel de desarrollo en la historia, hubo grandes cambios en la condición de vida de los humanos en aquella época. Cuando el hombre descubre el fuego, no solo lo descubrió sino que también aprendió a mantenerlo y finalmente como producirlo mediante la utilización de la fricción, lo ocupa para calentarse, asar alimentos, ahuyenta a los animales, lo convirtió en el "hogar": centro de la vida social y elemento integrado en el entorno humano. Con el fuego aparecen los primeros campamentos organizados, al aire libre o en cuevas. Este es el origen del desarrollo de estructuras sociales. Alrededor del fuego los cazadores relatarían sus hazañas, se organiza la caza del día siguiente. El fuego, que es fuente de energía, permite la colonización permanente de áreas de Europa que eran inhabitables en épocas de frío intenso. Mejora la alimentación y la conservación de alimentos. Se utiliza en la fabricación de utensilios y prolonga las actividades al extender las horas de luz. La producción del fuego por el hombre surgió de la necesidad imperiosa que tenia de protegerse del frío debido a los glaciares que se presentaron en este período. El fuego ya existía en forma natural y los primeros hombres enfrentaron el frío utilizando su inteligencia aprendiendo a utilizar este fuego proveniente de la lava de las erupciones volcánicas o al caer un rayo sobre la hierba seca. Una vez que aquellos hombres le perdieron el miedo al fuego, aprendieron a conservarlo en sus hogares, quizás cubriéndolo con hierbas secas o con trozos de madera.
Sin el calor del fuego al hombre del paleolítico le hubiera sido imposible sobrevivir. Quizás casualmente los hombres, al tirarles fuego a los animales para ahuyentarlos descubrieron el arte de cocinar. A pesar de los grandes adelantos en la utilización del fuego, el Hombre Erectus tardo mucho tiempo en aprender a encender el fuego a voluntad, todo apunta a que fue más una casualidad al observar las chispas que surgían al golpear una piedra sobre otra. El fuego fue y ha sido uno de los grandes descubrimientos del hombre, fue decisivo para el desarrollo de la existencia. Desde su descubrimiento el fuego nos ha servido en todas las épocas de la Historia para diferentes cosas. Y nosotros la ocupamos para hacer fogatas y al igual que en la prehistoria nos sirve para calentarnos, cocinar, etc. A continuación aprenderás como hacer una buena fogata dependiendo para que la quieras Que se necesita para un buen fuego. Lo fundamental para obtener un buen fuego es contar con tres clases de leña: la Yesca, las Ramitas y el Combustible. La Yesca: Este tipo de leña es muy pequeña, se asemeja a la viruta de la madera y se encuentra fácilmente en el suelo de algunos bosques. También pueden ser útiles para usar como yesca los arbustos secos cuyas delgadas ramitas se pueden triturar con sólo apretarlas. La corteza de algunos árboles facilita también el encendido de los fuegos. Las Ramitas: Son aquellos leños más gruesos que la yesca (del diámetro del dedo gordo), a su vez, contribuyen a encender al combustible. El Combustible: Son aquellos leños que oscilan entre el grosor de un dedo gordo y el de la muñeca. Estos son los responsables de que el fuego se mantenga encendido y produzca luz y calor. Dentro de los combustibles encontramos diferentes clases y por lo tanto diferentes calidades: las maderas suaves (pino, alerce, álamo, casi todas las coníferas) arden muy rápidamente produciendo buen fuego con buena llama pero que rápidamente se extinguen, en cambio las maderas duras (roble, fresno, haya, arce y otras) tardan un poco más en encender, producen un fuego más duradero, con buenas brasas, e ideal para cocinar o asar.
Hay que tener en cuenta que la madera verde o húmeda provoca demasiado humo y no provocan calor, por lo tanto es indispensable encontrar ante todo leña bien seca y mantenerla bajo un plástico que la proteja tanto de la lluvia como del rocío.
Pasos a seguir para prender el fuego. Una vez que obtuvimos la leña y la clasificamos según sus tamaños y tipos, empieza lo más sencillo que es hacer el fuego. Ante todo tenemos que limpiar bien el terreno sobre el cual vamos a encender la fogata. Lluego amontonamos un poquito de yesca y con las ramitas construimos sobre ella algo parecido a una carpa de indio. Teniendo en cuenta no amontonarlos sino que haya espacio entre ellos de manera que el fuego prenda más fácilmente. Por último colocaremos el combustible del más delgado al más grueso, o del más suave al más duro, siempre teniendo en cuenta de dejar una "puerta" orientada al lado del cual sopla el viento. Por ese hueco ingresamos un fósforo encendido, que fácilmente quemará la yesca, para que en poco segundos nos encontremos ante un magnifico fuego, al que no dejaremos de alimentar siempre que lo creamos necesario con combustible más grueso. Requisitos para un buen fuego: 1. Que tenga buena entrada de aire. 2. Que aproveche bien el calor para ahorrar combustible. 3. Que sea de fácil alimentación. 4. Que proporcione buena estabilidad a ollas y sartenes. ( si esta es para cocinar)
Tipos de Fuego Fuego en Piramide Preparación:
para
su
preparación
debemos
colocar una rama mediana en el medio de donde prepararemos el fuego en forma vertical, luego alrededor de la misma colocaremos la yesca, al rededor de la yesca, las ramitas finas, cuidando de que no estén apretadas sino que aya una pequeña
separación
entre
ellas,
lo
mismo
haremos con las demás ramas siguiendo la proporción de ir desde la mas fina a la mas gruesa. Encendido: Para encenderlo introduciremos un fósforo prendiendo la yesca, al estar las ramas en forma gradual el fuego ira creciendo rápidamente. Función: Es útil para cocinar una sola olla colgada de una trípode y de forma tal que la punta de la llama cubra bien el fondo.
Fuego Pagoda Preparación: realizaremos una pirámide en el centro y el combustible se coloca de a dos leños por
vez
ubicándolos
transversales,
dos
sucesivamente,
alternamente,
longitudinales,
tratando
de
dos
y
que
así vaya
empequeñeciendo a medida que crece en altura. Encendido:
introduciremos
un
fósforo
prendiendo la yesca, estas se prenderán e irán prendiendo
lentamente
las
ramas
inferiores
hasta las superiores. Función:
Sirve
para
conseguir
rápidamente
buenas brasa.
Fuego Indio o Estrella Preparación:
realizaremos
un
fuego
pirámide alrededor del cual se colocan en forma
de
estrella
los
leños
de
combustible. Encendido: introduciremos un fósforo prendiendo la yesca, estas se prenderán, a medida que se van consumiendo, son empujados hacia el centro para aumentar el combustible y atizar el fuego. Función: Sirve para cocinar una sola olla.
Fuego en Cruz
Preparación: realizaremos dos zanjas, de 15 cm. De ancho por 70 cm. de largo, que se cruzan en ángulo recto, pondremos en todas un colchón de yesca, luego de ramitas
y
por
ultimo
el
combustible,
teniendo así cuatro fogones que se utilizan según sea la dirección del viento. Encendido: introduciremos un fósforo en cada una de las cuatro puntas y en el centro, así lentamente se formaran buenas brasas. Función: variable,
sirve las
para
marmitas
días o
de
viento
sartenes
se
colocan en las zanjas.
Fuego Zanja Preparación:
realizaremos
una
zanja de 20 cm. de ancho por 70 cm. de largo, con una entrada orientada hacia el viento y con pequeño declive, pondremos un colchón de yesca, luego de ramitas y por ultimo el combustible. Encendido:
introduciremos
un
fósforo en la boca orientada al viento,
este
se
encenderá
lentamente hacia la otra punta. Función: sirve para días de mucho viento y que no disponemos de troncos o piedras., para apoyar la se
usan
dos
hierros
o
ramas
verdes resistentes que se colocan transversalmente al a zanja, el calor se regula con la posición de la marmita.
Fuego Reflector Preparación: troncos
realizaremos
verdes
apilados
un o
reflector
piedras
con
apiladas
orientadas del lado opuesto al que viene el viento, esto nos sirve por que el mismo viento se encargará de avivar el fuego, y para el fuego utilizaremos una media pirámide apoyada contra el reflector. Encendido: introduciremos un fósforo en la boca orientada al viento. Función: Su función principal es dar calor, no es muy conveniente
para cocinar,
pero
si fuere
necesario colgaremos la marmita para que la llama le de pareja en el fondo de la marmita. Sirve para realizar pan, ya que se obtiene una distribución pareja del calor.
Fuego Corredor Preparación:
realizaremos
un
reflector con troncos verdes apilados o piedras apiladas orientadas del lado opuesto al que viene el viento, esto nos sirve por que el mismo viento se encargará de avivar el fuego, y para el fuego utilizaremos una media pirámide apoyada contra el reflector. Encendido: fósforo
en
introduciremos la
boca
orientada
un al
viento. Función: Su función principal es dar calor, no es muy conveniente para cocinar,
pero
si
fuere
necesario
colgaremos la marmita para que la llama le de pareja en el fondo de la marmita. Sirve para realizar pan, ya que
se
obtiene
una
distribución
pareja del calor.
Fuego Polinesio Preparación: se hace un agujero de unos 40 cm.
de
profundidad
en
forma
de
cono
truncado, con la boca de unos 50 cm. y el fondo de unos 30 cm. de diámetro, el fondo se recubre de piedras y se prende un fuego pirámide
en ellas. Se colocan sobre las
paredes del agujero unos trozos de leños para que se vayan quemando y formen brazas. Encendido: realizamos el mismo método que en el fuego pirámide. Función: solo para cocinar, y colocamos la marmita suspendida en la boca del pozo, mientras
más
baja
este
mejor
aprovecharemos el calor.
Fuego Cazador Preparación: se colocan paralelamente sobre el suelo troncos, separados un poco menos que el diámetro de los utensilios de cocina. También pueden situarse los troncos en un ángulo uno con respecto al otro, para poder colocar al mismo tiempo sartenes y cacerolas de diferentes tamaños. Los troncos verdes y húmedos duran varios días sin necesidad de remplazarlos. Función: para cocinar.