© 2017
Santiago Rothe Sandoval
“AGUALUMBRE” © 2017
Nuevos Clásicos Editorial
nuevosclasicoseditorial@gmail.com Diseño y diagramación: J. V. C. Impreso en Talleres Gráficos “Gran Elefante” granelefanteimpresiones@gmail.com La Paz - Bolivia / Junio de 2017
AGUALUMBRE
Santiago Rothe Sandoval
I
Mi canto es una troja1 llena de alacranes Su muerte se confirma en el profundo remedio del sauco En la intensidad del escalofrío que somos Tanto que nos decían NO SEAS TAN
ATESTAO 2
e hicimos vástago3 del pensamiento y
bejuco4 del corazón
al fondo, la talanquera y la fosa común, los órganos familiares la desconfianza Con todo y todo Sabíamos jugar en nuestro lodo ¿Recuerdan? El dolor como cámara mágica esculpiendo delicadas torres orientadas al suroeste como si de pintar fronteras se tratara como si la violencia pudiese venir más despacio abrazada con el viento
El grito se nos va, se desvanece En otro tiempo éste lugar era un vagón de tren, en otro tiempo reíamos viajando
Pero la sombra del barbecho5 se detuvo y
cuajó su fortaleza temprana Nuestra sangre se revuelve bajo la sombra de los árboles nombrados Arboles silenciosos y mecánicos Silenciosos aun astillándose contra el viento Sus nombres son los nombres de mis
ancestros, sus nombres son bebedizo6 rastrojo7 y barbas aéreas
Parias, desterrados, anclados como nuestros ojos al olor de otra tierra Cedro fue picado por las hachas pero retoña como nunca entre la mierda y la incertidumbre Bucare fue añoranza de los niños que murieron con la fiebre y se los enterraron cerquita hace más de 80 años Ya los debe haber alcanzado Cínaro es más duro que la tragedia, siempre atajándonos en el aire, jugando con nuestra fragilidad bañado del deseo de nuestras pequeñas frutas
Padres, hermanos, hijos de mi desastre Y yo tan nosotros y todos ellos conmigo y todo escombro y todo ruina Así uno se quiebra en alas Así nos sumergimos en un triste feudalismo Templanza es lo que nos falta Santiago, siempre nos ha faltado Tristeza de ver como se nos enflaquecen los animales del alma, sin darnos comida, sin amarnos En otro tiempo este lugar era silencio en movimiento
la chamiza8 ardía en el fogón de Alcira Y su corazón era un patio lleno de café sus hijas mudas eran la prolongación de
sus manos y tallaban la madera de estos árboles tallaban sin parar queriendo devolver una cuota de sangre ajena al vientre que las trajo a tejer en las montañas pero solo consiguieron envejecer la casa junto a ellas y enterrar las gallinas que se cansaban de vivir del maíz seco y de su bondad
de su orgullo de bahareque pisado por hombres de sombreros solares, que pisaban con ritmo y sin cuidado, como se debe pisar en el campo 9
Así, nuestra vida, competir por una hue-
ca en el suelo duro Medir una cuarta, pasando la uña, vivir un segundo de gloria y veinticinco años de la nada más amorosa Así, rasparnos los ojos y los dientes por crecer tan verdes como un valle sollozante de ruidos prestados La melancolía, sabernos tan ajenos Santiago, tan ajenos Tanto muerto, tanto finao emprestandonos voces pa seguir saliendo, pa seguir siendo río y mojarnos las patas en nuestra propia estampa y enlutar camino y apagar fuego y dormir poquito en un rincón de la ignominia Porque juimos los que derrumbamos el cerro pa ver un poquito más lejos y antonces la tierra nos masticó vivos y nos volvió a
escupir, júmos10 hasta la lucidez
Pero seguimos cuqueando la muerte y nos reímos Seguimos escarbando la arcilla en la sabana Seguimos siendo honestos y callados de afuera porque nada vale la alharaca entre tanto hipócrita y el pasto es el mejor ejemplo de eso y no vale tampoco explicar solo seguir sedientos y no llenarnos nunca ¿Escuchan? pajuos Seguir sedientos Voces de mi extravío Voces hermanas y enemigas Voces de todo cuanto somos y seremos Porque ahora es cuando vamos a dar guerra y nunca dijimos lo que queríamos porque siempre quisimos mucho y esperamos hasta el silencio pidiendo con los ojos, como perros Pero todo va bien, viene el desquite Sé que todos son míos Los tengo atrapados en mi pueblito amansado
de tanto rencor callado de puñalada nocturna de beso escondido van a saber lo que es bueno y así nos forjaremos con mucho dolor unos ojos nuevos y un nuevo grito que cale hasta los huesos del pensamiento Compadres ¿quién habla de la pérdida? ¿quién dijo que la brisa soplaba más dulce cuando dos ríos se encontraban? Tanto hongo en la memoria tanto río amanecido y las voces gritando esculpiendo lunas las voces parásitas de colores muertos estallan como membranas esperando que la lluvia baje duro de la montaña Así nomás Solo estar tranquilo Delgado como la muerte de un pájaro Entonces la fatiga de mi propio respirar Entonces la fatiga de la fatiga Llanto de sauce, inquieto con la complejidad de la lluvia
que solo ella sabe que tan fuerte debe caer para sentirse en este mundo que se expande y nunca frena aunque nos detengamos aunque tratemos de entender la descomposición nosotros mismos Dejar que se descomponga mi nacimiento fruto vacío de mis manos aferrando la tibieza del orgullo Alma, alma He postergado todo, no me pertenezco Me lloro Me hundo Me cargo de aquí para allá como sombra que cede y cede y se acomoda a los espacios uno se entiende He descubierto que puedo ensordecer hasta cegarme Contemplo las luces que me olvidan y en el fondo de mi grito el cielo tiene el color de las rejas Llamo a mi madre mientras los dioses juegan
a pegarle a los dominios de su soledad su símbolo le quita el sueño a los pensamientos del otro
y el otro encrispa11 Una mesa de cráneos azules se sostiene al fondo del pasillo ahora solo voces, solo voces Mi madre lloraba con tanto silencio que llenaba la casa con su nombre solo los perros sentían la noche Victor revisa las ollas de la cocina pues su hambre no cesa desde el noventa cuando el olor a pólvora no le dejaba descansar cuando la pólvora desangraba la infancia de San Agustín y su padre era una sombra recurrente, solo eso, noctámbula Silencio, por favor silencio... Respirar, esperar que callen esperar en el rincón de mi herencia material en el rincón más sucio de los muros que levantaron mis padres
En otro tiempo éramos mamífero dopado conversación de árbol al fondo del mosaico temporal y el roce de la corteza tranquilos hermanos solo esperen, miraremos el cielo quebrarse El yopo12 será la realidad
hemos perdido tanto a cambio ya no valen sacrificios ni la sangre de tus piernas ni tu voz entrecortada por el aire de la noche ni tampoco vale la oscuridad que construimos ni las ganas de hacernos daño ni el magnetismo de nuestros cuerpos Hoy nuestra promesa revive así la sed de venganza así la sed así Desde la oscuridad hablamos nos reímos de los malditos sueños que no vivimos Mis pupilas se consumen en la saliva del espanto Siento que llegará tarde o temprano la multitud de mi abandono incurable
Reúno la transparencia y ropa mía vuélvete agua y sobre mí tu canto y sobre mí la flor de tu arrogancia y esa voz que tanto conozco ¿eres tú? Viejos pasos Arturo, viejos pasos Somos mecidos por la crepitación de la aurora Tú que nunca has sabido callar y
retumbas
como
siempre
y
te
descoyuntas en las escaleras de mi serenidad, estás tan viejo de tanto joder de tanto joderme y ahora no te veo pa desquitarme de tanta mierda Eres enorme, te fundes Tus barbas se unen al mar y eres presagio andante de mi locura
La imaginación es verse dividido
es morir sucesivamente
Amamos esos ojos enormes que se vacían como cascadas sobre nosotros que se vacían como soles Daniel como la risa de Hesnor desde los truenos
El rio muere y Daniel se ríe y Daniel se ríe supongo que cree que nos ha atrapado en su loquera supongo que supone la victoria de su sangre sobre la penumbra Danielito, Danielito, estás bien loco pero siempre serás paisaje y las cosas más sencillas como un vaso de cocuy como el frío como lo siniestro En otro tiempo éramos uno José Miguel yo y todos los míos te lo dije en un bosque hasta las patas de lsd te lo dije en un rio hasta las metras de hongos y te lo repito hoy desde la ausencia: Uno ES los ojos terribles del silencio Te desquitas con las piedras y el otro observa y el otro es río y siendo río crece y el gusano se puebla de nosotros de nuestra cadencia oscura la buena gente nos muerde con sus perros
siempre pensamos llegar a otro lado con las raíces hechas y abandonamos el motor para hundir los pasos en el agua el reflejo nos ha rasgado, te digo, nos ha rasgado y tú siempre insistes en llegar al corazón de los pájaros Dices, los caminos de los bosques se han perdido fueron devorados por la humedad y la luz tenue por el ruido de los ciegos por la certidumbre vegetal por las bocas del agua por las piedras para tropezar Pero mis rostros descomponen el sustrato del tiempo nado de espaldas hasta aferrarme a mi raíz primera porque de algo tiene uno que aferrarse en esta vida así sea de pura maña Te digo, los caminos han de perderse en las noches pues la noche es el único camino que conocemos con certeza
el de la soledad irredimible detente a escuchar la resonancia de las cosas el llanto de la arena Óyete resonando en la oscurana del viento El campo estalla la travesía se incendia mirada / árbol / viento / polvo Despierto cuando camino como despierta el muerto y ve tendido su cuerpo oloroso a herrumbre trasnochado potro bañado por las hojas de los senderos nocturnos Hay que apurarse Estivi, los hongos están creciendo —El tiempo es una barca innavegable— Sí, pero la luna está más cerca que ayer, los caballos ya huelen a musgo —El rio canta El bosque tiene el corazón de un turpial ¿Sabías que tengo un hijo levantando una casa en el páramo?— Debe ser de muros anchos...
—El viento es más ancho Los muros serán del tamaño de su soberbia.— ¿Su soberbia le ganará al frío? Hay que apurarse, la noche quiere derramarse —Que se derrame después de comer no volveremos a ver nuestros rostros entonces hablaré con María de todo esto— María cantaba de solo respirar —Sí, era un relámpago sin tristeza... Tengo sueño Santiago— Tranquilo, vuela Estivi, vuela Se va el viejo en su corriente y se une al agua de los cielos Abandonados decidimos tomar otro rumbo
El insecto trepa la fortificación Alguien grita y desciende al fondo del pozo La transparencia de las cosas es sublime Somos la voz de alguien que no soy Antiguos moradores de la palabra
que se creían inamovibles ahora todo es difuso inmortal Su palabra cuelga Su palabra se deshace Son toscos principiantes y yo que solo pedía silencio pa montar la clave y le decía al viejo Arquímedes que se callara, que estaba gordo y era inconstante que contrabandear con carreta estaba fuera de la temporalidad y ese empeño suyo de envenenar gente entonces la risa se apoderó de nosotros como si todas las creaciones se burlaran de nuestras manos Santiago perros malditos tratando de guarecerse bajo nosotros Alguien nos ama desde el anonimato alguien bebe nuestra sangre alguien nos descuartiza pero ser sed y delirio es nuestra justa causa así nos procuramos el asilo de la tinta ser amantes de las pequeñas tragedias
porque las grandes escapan a nuestra capacidad de sufrirlas o si no le pueden preguntar a los ínfimos a los descastados a las cifras al silencio de la calle que atravesamos hendidos por la lumbre de esos insectos que no sabemos amar Estar desnudo es un asunto serio lo sublime es la sordera mordernos los labios para sentir ya que nadie nunca supo amarnos y no sentimos sino lastima de tan jilachos los amores que nos han tocao En el cuarto de al lado nos masturbamos con los ruidos de su muerte Lo que quiero ahora es bombardear mi país occipital que se callen todos ustedes y se vayan bajando de la mula que no van, no van.... y tú, ese, pssssss! Coño...
Díganle al maricón que deje de llorar que lo que no mata amarga o se convierte en poesía porque lo que brilla no se puede escribir —bien lo sabía Palomares— ya le darán pal fresco las viejas de la cuadra de ladrillo esas sí que practican la lastima con devoción bajan pa la iglesia como sumergidas como ballenas estériles y lloran como gato con hambre salen de misa creyendo en la perfección de sus almas pobres pobres pobres En otro tiempo, yo era un barco y vivía la eternidad éramos intolerantes la soledad reunida un valle animal, colorido y desenfrenado Ahora hermanos, la plenitud es el encierro el silencio de nuestra alma Dibujamos la cascada de nuestra caída en cada ventana en cada puerta y sangramos
sobre nuestro cimiento Nos hemos perdido en la forma de nuestro paisaje y creemos que la desolación es solo el vértigo invertido de nuestros abismos El espacio se oxida mi respiración se oxida como las malditas flores después de coger con el aire después de coger Da lo mismo crecer con las uñas sucias con los años arrastrar la mugre y darse cuenta que nada vale que nada es suficiente que todos esconden sus fracturas para no desbordarse pero basta de nostalgia hay que lamer el camino con los pies aprender de las putas que se cantan alma adentro que se festejan solitas y en las calles de su desamor arman mercado para venderse y comprarse para sentirse menos solas de lo que se ven para que nadie tenga la potestad de ponerles precio
y un santo las cuide con un fondo de salsa y las vuelva niñas y las bendiga hasta los huesos de una felicidad sin nombre como nuestra esencia como la sepultura que nos encuentra tras la luna sobre el sol con las mañanas que nacen gritando nuestros nombres y yo que le decía a Leslie que ese gordo era mal tipo y ella terminó cruzando el mar para darse cuenta que estaba sola como la osa mayor que estaba vacía como las canciones de las big bands Que se puede hacer los naufragios son inminentes la poesía nos destroza y nos reconstruye siempre habrá una canción un latido esperando nuestra partida Horizonte seremos hermanos míos Desnudos Sedientos Intolerantes Malgastados
Nuestros ojos se petrifican ante sus caderas siempre viene con otro nombre con otro cuerpo a lamernos las heridas de su destierro y las perras se vuelven constelaciones y lactan sobre el mar de nuestro augurio las eras nos pasan por encima, sin envejecernos y encerramos nuestra ternura en jaula bajo el puente que hemos tendido desde nosotros hasta el porvenir Nos damos cuenta que con tanta bulla nos han dejado atrás quienes nos convidaban una vida llena de mierda Procuramos el instinto por debajo de todo nos curaremos el alma hermanos lo prometo Nuestro verde ha mutado deja de palpitar solo se esconde La última vez que le oí gritar sentí que se convertía en piedra nadie lo vio morir yo guardaba un pesado silencio Difícil ser uno entre tantos que soy
pero el suelo sigue firme y mi cuerpo no se desgasta como el oleaje de un mar tardío que florece a cada impacto de sus límites Aprender a coserse pedazos de tiempo al cuerpo y no olvidar que el futuro es imperfecto y se desgaja tan fácil como su nacimiento y que los dedos son herramientas útiles en eso de hacerse daño Por demás seguiremos pintando hasta crear un ser perfecto
II
No hay suficiente tierra para esta podredumbre de luz No hay suficiente Las manos estĂĄn desechas de rascar
la poca sombra que han dejado los taitas13 Debemos cubrirla antes de enfermarnos como esos hombres que vinieron antes que nosotros amansando las bestias aplanando la tierra regularizando el cariĂąo hasta volverlo utilitario Hacer frente al olvido con esta armadura de sal con estas partes disgregadas sorbiendo de un cĂĄntaro el espĂritu de las cerraduras
Pienso que la churuata14 estará sola que nadie comerá más en ella que nadie ha de reír los cantos fueron reemplazados por una temporalidad sintética Los ojos de los chinchorros15 se asilaron en la figura metálica de las bocas de bronce de las bocas de hierro Todos se fueron tras la fiebre del río con su amargura vegetal a cuestas con un poco de mañoco16 bajo el brazo La selva los empujó al margen Olvidaron como beber como tejer la palma como hacer casa de la noche Por eso, todo esto El mundo ya no sabe amar a nadie el mito se reconstruye y los dioses vuelven a poblar la tierra sin imágenes sin sentidos
Aun así encontraban el nombre del alma que se había ahogado dentro de ellos y volvían a borrarlo Se pudrieron el tuétano Intentando volver y tratando de levantar los pedazos que quedaban de los muros Luego intentaron levantarse ellos de a pedazos de a poquito pero su calentura los volvía a fracturar y las manos que levantaban al otro terminaban derrumbándolo Su mecánica de amar era abandonar el pueblo y adentrarse en los instintos Supieron verter las cuentas de odio en enormes ollas enarbolando cada cual su orgullo frente al otro hasta la cúspide de sus tallas
Ese pueblo queda atrás marginado por la miseria de esos grandes árboles El olvido es un juego decadente que se alimenta de nosotros de nuestras cosas de donde posamos pie Este aliento celeste este cielo que está a punto de convertirse en algo más ancho más dispar Hace mucho se perdieron las palabras que poseían destinos seguros puntos cardinales la evocación de un jardín de oxígeno puro -¿Acaso sería éter de mis manos?Escucho tras la noche debo cerrar las cortinas de la casa vendrán a
hablarme los espíritus mal formados esos que dejan huecos en el aire silencios en sepia Juego a retraerme como un pequeño dios —sin verdaderos límites— Evitando la saturación de esa línea que se pliega y avanza meditando designios Los sentimientos toman rostro Los sentimientos toman inmensas razones y se posicionan en esta baraja humana porque es de humanos saber de precios de costumbres De la ignorancia que se hace costumbre Este parto de aire Alas para la desidia Alas para el rencor Alas para hurgar el viento
Alas para poseer alas Abriendo las puertas al vacío reinante ilustre Sentándonos en la simpleza arisca que nos vela y nos lastima como la saliva del que nos ve hartarnos como el sino del agua que nunca será un cuerpo celeste ni un cuerpo para el enigma ni un cuerpo tendido ni un cuerpo Como quien que se ha dejado sorber y no se halla Todos mendigos cubiertos de oro Todos ángeles de mi imperio El que baila al fondo ebrio como su noche penetra en la fuerza de su propio espectro
Mi cementerio renace y se concreta en la palabra que abandono como solía abandonar la sabana agotado como suelo abandonar los templos que levanto en las orillas de la serenidad Porque toda imagen es la semilla germinada de esta fractura De este hacerse casa para uno mismo —Habitarse— El que vomita hace ojo de sus adentros espina dorsal de los límites y una medula corrupta y masticada Fisura sostenida por la cadena de la sombra que nos cuesta reunir Así estamos condenados maltrechos ariscos torcidos sembrados de odio podridos lentamente por la vida que repta y se deconstruye
Por esta mirada paralitica de la certidumbre y el juicio implacable de los semejantes que nada tienen de parecidos pero son exactamente lo mismo Q UNO E Desmembrados vamos tras los rastros de la hidrĂĄulica del fluido primordial del motivo de esa orbe afilada sobre la carne esclava Un origen volcado Una palabra Mire como nos arrea la suerte Como nos escoĂąeta17 La ciudad se curva en la madrugada Estoy afilado lleno de oxido mis partes se consumen
intento rearmarme reencontrar la claridad Yo me duelo Como una estación sin gente Es que duelo como el lila Como la calle desnuda que nos traspasa Como la estruendosa simpleza del trueno No duelo mucho Ni poco Ni a medias Duelo por doler y solo eso Es que yo no duelo, te digo, como el dolor duele No pido hambre ni oprobio Solo pido espacio para dolerme Para estar vacío Como una estación sin gente Así, el engaño es nuestra aldea el engaño nos esconde hasta de nosotros mismos de esta circularidad que quiere comprometer las columnas derrumbarme
hasta la parquedad Hay una estela tras de mi hay vasijas destrozadas hay un ciego en la puerta hay ganas de enfrentar la caída como se enfrenta un saludo como nos encuentra la desgracia tanto o más que la felicidad y esos pájaros que cantan en la noche y esos ojos colgados tras los cristales y las dentaduras postizas y la franqueza del reflejo que guarda esta saliva cínica pero nada se puede hacer pero todo ha sido probado y reprobado y los alquimistas solo buscaron lo que siempre estuvo frente a ellos frente a nosotros lo innombrable Aquí sigue esta luz pudriéndose de tan tierna de tan sin gracia y siguen las uñas creciendo para escarbar Puedo escuchar ahora
como resucitas como toces el fango y te limpias las esquinas con la gracia de otros tiempos y sigues diciendo que lo que hay es sequía y espacio Mucho espacio entre los cuerpos amados Otro joropo18 se baila en este hato19
hay que alpargatear20 fuerte pa’ que escuchen los muertos y los vivos se transfiguren y los fisgones rezonguen con el polvo que los acompaña He revivido a mi perro alguna vez también a él lo saqué del barro pero huyó tras el relámpago junto a la casa que navegaba en la montaña sonido orgánico de un cuerpo que avanza contra el aire raíces de la tempestad Estoy enfermo Lo sé Esta luz que me parió Esta luz que agoniza me arrastra consigo
Yo que en aras de la ceguera he derrumbado mis huesos Que no he logrado revivir las voces que importaban que en cada esquina hago de mi un punto muerto que lloro ante la injuria que atropello mi voluptuosidad para pacer rumiante que me dejo llevar por el impacto que estremezco la caliza que me oxido como las malditas flores que sostengo un discurso salvaje que retoĂąo mi oscuridad que sacrifico mi imagen que soy impuro que huelo a tierra a mastranto21
que me masturbo sin rostro que fijo el orden de lo inexacto que soy dios que me adjudico la potestad
de crear de destruir lo inmaculado que me detengo para entender que estoy desnudo y no soy mรกs que lo que soy que ser muchos es como perder la paciencia de concatenar las sucesiones de poder en un cuerpo llano como el S I L E N C I O
pleno de este pueblo que abandono a los instintos
GLOSARIO 1 Troja: Ve. 1. Es un entutorado, una trabazón construida por estacas o empalizadas de madera y carrizos, utilizado para proteger algunos rubros alimenticios. Su finalidad es que la planta se mantenga erguida y evitar que los frutos toquen el suelo, de manera que las frutas puedan colgar y hacer su crecimiento más efectivo. Esta empalizada es usada en Colombia y Venezuela. 2. Algo mal hecho, endeble, de mala calidad. 2 Atestao: Ve. Persona terca, testaruda y que no entiende razones 3 Vástago: Tallo nuevo que brota de un árbol o de una planta. 4 Bejuco: 1. Nombre genérico con que se designa a diversas variedades de plantas tropicales de tallos largos, delgados y flexibles que se utilizan para la elaboración de tejidos de cestería y fabricación de muebles y cuerdas. 2. Tejidos artesanales realizados con dichas fibras
5 Barbecho: Terreno de labor que no se siembra durante uno o dos años para que se regenere. 6 Bebedizo: Bebida elaborada con diversas hierbas que tiene virtudes curativas 7 Rastrojo: Conjunto de tallos y hojas que quedan en el terreno tras cortar un cultivo. 8 Chamiza: Ve. Pequeños palitos y hojas secas que se utilizan para encender un fogón. 9 Hueca: Ve. Hueco pequeño y poco profundo que se cava en la tierra para jugar canicas. 10 Júmo: Ve. Persona en estado de ebriedad. 11 Yopo: 1. Árbol perenne natural del caribe y Sudamérica (Anadenanthera peregrina). 2. Rapé psicodélico elaborado con las semillas de la vaina del árbol de yopo, mezcladas y trituradas con cenizas. 12 Bahareque: Ame. Material utilizado en la construcción de viviendas compuesto de cañas o palos entrelazados y unidos con una mezcla de tierra húmeda y paja.
13 Taita: C. Rica, Ecu. y Ve. Tratamiento que se da al padre o jefe de la familia. 14 Churuata: Vivienda colectiva propia de los pueblos Pianare y Piaroa del sur del Orinoco. 15 Chinchorro: Hamaca ligera tejida de cordeles. Es el lecho usual de los indios de Venezuela. 16 Mañoco: 1. Tapioca. 2. Fécula blanca y granulada que se saca de la raíz de la yuca amarga y que es comúnmente manjar de los indios amazónicos venezolanos. 17 Escoñeta: Ve. Dañado. 17 Joropo: Ve. Género musical, de las regiones llaneras que se toca tradicionalmente con Arpa, Cuatro y Maracas. 18 Hato: Ve., Col. y Cuba. Hacienda de campo destinada a la cría de toda clase de ganado. 19 Alpargatear: Ve. Acción de pisar fuerte mientras se baila con alpargatas.
20 Mastranto: Planta herbácea anual, de la familia de las labiadas. Es muy común a orillas de las corrientes de agua, tiene olor fuerte aromático y se usa algo en medicina y contra los insectos parásitos.
Se terminรณ de imprimir en talleres grรกficos GRAN ELEFANTE en junio de 2017
Santiago Rothe nació en Mérida, Venezuela en 1991. Participó en el 1er Encuentro Literario de Jóvenes Poetas (Mérida, 2009), como ponente en la Bienal de Poesía Ramón Palomares (Trujillo, 2010), e invitado en la Bienal de Poesía Elías David Curiel (Falcón, 2011). También ha participado en numerosos recitales y Festivales Internacionales de poesía de su país. Ha sido publicado en la Antología del 9no Festival Mundial de Poesía de Venezuela, capítulo Merida el 2012.