Muy
ganadores
La Galería Te presenta a Gladys Rodríguez, en La dulce y melancólica mirada del Señor Filete
En la edición XVII del Premio Regional de Fotografía Nacho López, el encanto de Tampico está en los puentes que lo conectan con otras latitudes
En la Charla con... Ashanti Castañeda descubrimos que la ópera no es tan seria, que tiene su lado divertido, como nuestra invitada
En La Crónica, el encanto de Tampico está en los puentes que lo conectan con otras latitudes
En el Mirador de los Artistas te presentamos a Julio León, un artesano de máscaras que exhibe sus productos en nuestro local
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En Cultura Porteña don Tomás, un carismático vendedor de frutas y dulces, nos permitió atisbar en su surtida mercadería En portada Un grupo de estudiantes
Regional de Fotografía Nacho López
Nacho López, buscador incansable de escenas cotidianas y fotoperiodista fundamental del siglo XX, nació en este bello puerto de Tampico en el año de 1923. Su labor como fotógrafo y como docente fue tan valiosa que en 1986 la Fototeca Nacional del INAH adquirió el acervo Nacho López que consta de 32,239 negativos y 3,415 impresiones para su resguardo, investigación, difusión y cuidado.
Y es que memoria es algo que debe cuidarse, siempre. Si esto no ocurriera no podríamos construir relatos conjuntos, ni podríamos recuperar aquello que no está presente de manera tangible pero que tiene un papel esencial en la configuración de identidades, ideologías y ciudades.
Dicen los que saben que al capturar una imagen se reduce su tamaño pero se aumenta su nitidez, su pre cisión, su limpieza y se subraya su escencia. Así, los y las fotógrafas pretenden asir lo inasible. En esta edi
ción de nuestra Gaceta, los ganadores del XVII Premio Regional de Fotografía Nacho López, nos invitan a tra vés de su mirada y de sus narraciones a reestructurar el tiempo, a darle sentido a la experiencia. Finalmente en el arte de la fotografía mirada y memoria van siem pre de la mano.
En su administración, nuestro presidente Chucho Nader ha sabido darle lugar, importancia y orgullo a este Premio que ha sido intermitente durante algu nas administraciones pasadas. Las y los tampiqueños le tenemos mucha estima al “Nacho López” que nos hace mirar y construir imágenes únicas, irrepetibles, que nos ayudan a tejer la urdimbre de nuestra historia; juntos, comunidad artística y gobierno, sabemos que unidos brillamos más.
Nacho López murió en 1986, pero su legado y me moria continúan convocándonos.
Larga vida al arte de la fotografía y larga vida al Pre mio Nacho López.
¡Guau! Les platico que en días pasados tuvimos una celebra ción perrona en la Casa de la Cultura, el “Nacho López”. Es un concurso de fotografía que se lle va realizando desde hace 17 años en homenaje al fotógrafo tanpiqueño Ignacio López Bocanegra.
En esta ocasión las fotografías ganadoras tuvie ron de todo. Bueno, no hubo ninguna fotogra fía mía, ni de ningún amigo perruno. ¡Guau, qué triste! Y yo tanto que practiqué mis poses que saqué de Tik Tok, y yo con tanto talento que tengo para posar, ¡guau! Ojalá que en otros concur sos me inviten para que vean todo mi atractivo perruno y estoy seguro que seré todo un dogstar.
El día 25 de octubre celebramos el Día Mundial de la Ópera ¡guau! y vamos a ofrecer un concierto el día 22 en la Plaza de Armas para homenajear a este antiguo gé nero teatral y musical, espero no te lo pierdas, va a es tar genial. Ojalá no se olviden de llevarme, quiero ladrar mucho.
Recientemente comí un pastel perrísimamente rico y es que ¡celebramos los 60 años de mi casa!, ¡el IRBA!, y qué creen que escuché… que hace muchos años fue un cementerio ¡guau! ¡Qué miedo! Por eso ladro toda la no che porque vienen a espantarme los muertitos.
Y con eso te platico que ya viene el Día de Muertos y el Xantolo. Estén pendientes de mi próxima aventura ¡guau!
los últimos 3 años Señor Filete (alter ego de Gladys Rodríguez) llama la atención de los ju rados con su participación dentro de la categoría B del Premio Regional de Pintura “Ramón García Zurita”, ob teniendo algunos premios y una mención honorífica; pese a ser joven su trayec toria artística no se limita a esta convocatoria, ya cuenta con una exposición dual y su producción sigue en aumen to, a últimas fechas ha incur sionado en el tatuaje. En su trabajo se entremez clan personajes infantiles y
Nacido de la idea de integrarse al circuito FotoSeptiembre que en la Ciudad de México tenía un gran auge, el Premio Regional de Fotografía “Nacho López” fue insti tuido para mantener viva la memoria de quien fuera el creador de un estilo personal al capturar la imagen, reu niendo cada año a experimentados fotógrafos de la zona conurbada del sur de Tamaulipas
Ignacio López Bocanegra, mejor
Creativo prolífico, a lo largo de su vida experimentó con otras disciplinas como la danza, la pintura, la música y el teatro, utilizando diferentes técnicas en su laboratorio. Remarcó y defendió con relevancia el quehacer del fotógrafo, impulsando entre sus alumnos el dominio técnico y la constante actualización con lecturas sobre arte, historia y filosofía
conocido como Nacho López, nació en Tampico en 1923, fue un innovador y visionario de la fotografía cuya sensibilidad en cada imagen reflejaba la reali dad del momento que estaba vi viendo el país.
Nacho López fue el fotógrafo y cineasta mexicano más destaca do en la segunda mitad del siglo XX, al capturar la cotidianidad mediante el fotoperiodismo y la práctica de ensayos fotográfi cos, así como de documentales, haciendo de esto un estilo.
A través de su lente, Nacho López
retrató al México de los años 50s con un sentido crítico. Colaboró con los principales dia rios capitalinos de la época: Pulso, Mañana, Hoy, Rotofoto, Presente y Siempre. Su maestría trascendió tiempo y fronteras. Falleció en 1986 y aún hoy es una poderosa influencia para nuevos artistas.
En la presente edición, se re cibieron las propuestas de un total de 30 participantes su mando 111 fotografías, 34 fotos
individuales y 77 fotos pertene cientes a 14 series.
El jurado decidió de manera unánime redistribuir los pre mios en proporción a la canti dad y calidad de las imágenes inscritas en cada categoría, la que consistió en la eliminación del tercer lugar en la modali dad B de imágenes individuales y la adición de un tercer lugar extra a la modalidad A series fotográficas, manteniendo así el total del monto económico de la convocatoria.
Economista y fotógrafo mexicano nacido en el estado de Tamaulipas, durante la pandemia inició un pro yecto personal a través de Instagram donde comenzó a publicar su trabajo personal en su mayoría fotografía ur bana y paisaje.
La presente serie fotográfica pretende documentar la vida de los pescadores en la zona conurbada del sur de Tamaulipas y generar conciencia sobre la importan cia a nivel económico, gastronómico y cultural que representa esta actividad para la zona.
“Al platicar con algunos de los pescado res en la zona de las Escolleras en Playa Miramar y Rio Pánuco, descubrí el respe to que tienen estos hombres por el mar y
cómo se ha convertido en el sustento de ellos y sus familias.
“Gran parte de la identidad cultural tam piqueña esta íntimamente relacionada al mar”.
“Al mar no hay que tenerle miedo, al mar hay que tenerle respeto, si ves al mar como creador y dador de vida, eso es lo que el mar te va a dar.”
Habitante de Infonavit con una curiosidad apreciativa del folclor reflejado en las manifestaciones religiosas adosadas a las fachadas de la vivienda tradicional mexicana, donde destaca la iconografía de la Virgen de Guadalupe acompañada de algún foco o diversas luces de colores fungiendo como ornamentaciones.
“A donde quiera que vayas en este país encontrarás una amplia variedad de esos llamativos altares exteriores. Sin embargo, pese a su recurrencia se encuentran en peligro de extinción”.
/Tercer lugar Modalidad
Series
Rosa Elena GutiérrezFotógrafa, formada en Ciencias de la Co municación. Ha participado en diversos certámenes de fotografía y participado en talleres
“Durante una caminata de varios días a través de una gran extensión de dunas costeras y durante los días posteriores a una hospitalización sorpresiva me llegan dos momentos personales, uno buscado y otro inesperado. “Esta serie es una reflexión de mis pensamientos durante esos momentos vividos de soledad, contemplación, cansancio, ansiedad, miedo y dolor”.
“No sería descabellado concluir que nada es lo que parece ni nadie es quien dice ser, tú y yo le hemos puesto filtros a nuestras vidas. No paramos con eso, tenemos nuestro favorito y guardamos otros cuan tos más para tenerlos a la mano y embellecer lo que exponemos de nosotros. ¿Cuál vas a usar hoy?”
/Tercer
/Segundo
Modalidad
Nació en Tampico en 1997, ha participado en diversos talleres y ponencias de fotografía; ade más en 7 exposiciones colectivas de fotografía.
“Donde habita la memoria representa al uso que hacemos del imaginario personal como medio de escapatoria al situarnos en un lugar en el cual no queremos estar físicamente.
“Habitar los pensamientos es el consuelo de no poder movernos de donde nos encontramos.
“El sentido de esta fotografía es darle foco a esta
capacidad humana de poder consolarnos con el pensamiento y crear un espacio de intercam bio para así ayudarnos a reconfigurar nuestra mirada y tratar de moldear nuestros pensa mientos de manera que nos ayuden en lugar de perjudicarnos”.
“Al hablar de Medusa, ¿Qué es lo primero que se te viene a la mente? ¿Un ser monstruoso o una víctima? Tal vez no todos sepan la otra historia de injusticia que vivió nuestra protagonista. La Medusa de las bellas mejillas...hermosa Gorgona incomprendida, con belleza inigualable, ultrajada, juzgada y asesinada estando embarazada. Esta historia se
sigue repitiendo aún en nuestros tiempos.
“Esta fotografía representa lo injusto, en un mundo que ha juzgado a la mujer desde tiempos inmemorables, su rostro refleja el coraje y la impotencia con la que fue juzgada, es un llamado a reflexionar ¿Por qué emitimos un juicio de las personas sin antes conocer la otra versión? En esta interpretación los invito a reflexionar y empatizar con las mujeres juzgadas por su apariencia y el dolor de las que sufren al ser ultrajadas o agredidas. El ambiente oscuro de la fotografía representa el vacío de medusa al ser asesinada por Perseo”.
Donde habita la memoria /Primer lugar Modalidad B IndividualGorgona /Segundo lugar Modalidad B Individual
El 25 de octubre celebraremos el Día Internacional de la Ópera, una conmemoración que pretende acercar a la población a las emociones universales que promueve este bello género musical
n la tierra del Pánuco y el Tamesí, la soprano tampique ña Ashanti Castañeda irrumpe con su frescura y su cá lida voz que emociona al público que ha tenido el privile gio de escucharla cantar.
Días antes de encontrarnos en el Teatro El Farol, ofreció un concierto en la clínica 77 del IMSS junto a la OFaMA (Orquesta Juvenil Facultad de Música y Artes UAT), estando siempre activa con presentaciones ya sea con los cuartetos de la zona o en cola boración con otros exponentes del ámbito operístico.
Entrando de lleno, Ashanti, ¿qué te inspiró a cantar? ¿Qué me inspiró? Realmente desde que era niña… yo crecí en una iglesia bautista, mi familia es cristiana. Entonces escuchaba cada domingo los himnos tocados al piano y cantados por toda la congregación y a mí eso me llenaba mucho, en tonces, creo que fue a partir de ahí que dije “esto me gusta”. No sabía si lo podía hacer, pero realmente desde ahí recuerdo que desde niña era “esto quiero, esto quiero, esto quiero”. Quizá con el tiempo fue así como que apaciguándose un poco pero al seguir creciendo fue cuando dije “no, sí es ahí, sí es ahí”.
Pues mira yo comencé cantando popular, realmente comencé cantando popular hasta que entré a la universidad y al bachillerato porque en la uni versidad te piden hacer el bachillerato musical y después continuar con la carrera, entonces en el bachillerato conocí al maestro Elías Argot Rico que ya, ya falleció hace unos años y él fue el que me dijo “tú tienes potencial, yo quiero que vayas sobre esto”.
Al principio como todas, la mayoría de la gente sí decía “¿la ópera?, como que ¡qué aburrido! ¿no?” Y al pasito de los meses llevó a una cantante, a una muestra a la clase y cuando la escuché cantar dije “¡no puede ser!, eso es lo que quiero”, y ahí fue como que el parteaguas y me dije “esto, esto de verdad me llena muchísimo” y me representaba un reto porque al final de cuentas no estaba en español lo que estaba ella cantando, teníamos que
ver nociones del italiano, del latín, de francés, de alemán, y yo creo que el reto era lo que me decía “ve, ve buscando eso, ve buscándolo”, entonces creo que fue a partir de ahí, te estoy hablando de 2005, que dije “eso me gusta, entonces le voy a dar para adelante” y si tenía el apoyo del maestro le iba a dar para adelante.
Además de ópera, ¿qué otro género te gusta in terpretar?
Bueno, me gusta de todo. Realmente de todo, no te voy a decir como la mayoría de los músicos “no me gusta el reguetón”, porque luego salen con que “¡ay, no me gusta el reguetón!”, digo a final de cuentas el reguetón no se canta, se baila, pues al fin latinos, ¿no?, el beat te lleva, te lleva, te lleva, lo sientes, lo bailas. Peroooo, así para cantar, sabes, algo que siempre me ha gustado mucho es el ran chero, pero yo siento que no lo canto bien. Siem pre, siempre yo he dicho que mi voz no se presta para cantar ranchero y me encanta y escuchar a Lola Beltrán, o sea, es una cosa maravillosa y sin embargo, bueno yo digo, mejor ahí no me meto, al final cada quien debe de reconocer y decir zapa tero a sus zapatos.
Entonces, me he ido más por la balada, por el pop, por el rock incluso, me gustaría así como que la cumbia y todo eso, pero como que todavía me falta ser más extrovertida, entonces no sé si eso se pueda lograr pero, pero sí, de lo popular casi todo me gusta, casi todo lo canto, no yo creo que a excepción del ranchero, digo lo he cantando en el karaoke, verdad, pero no como algo que sea parte de mi día a día, me explico, entonces (casi en un susurro). De todo, de todo me gusta.
¿Quién, o qué, te ha servido de inspiración?
¿Vocalmente? La soprano Anna Netrebko. Anna Metrebko me encanta tiene un color de voz pre cioso, la he seguido pues desde sus inicios, cómo su voz se ha ido transformando, porque de cuan do yo la conocí al día de hoy su voz se ha transfor mado muchísimo, también la edad influye para que eso suceda. Entonces, yo creo que ella ha sido la que más yo he, de verdad, la sigo en Instagram, en Facebook, en todos lados, para seguir qué es lo que hace en su carrera y aquí en México, bueno, la maestra María Katzarava, aquí mexicana, que pues ha estado en Barcelona pero así, yo creo que ellas sería como que las dos ¡guau! Así mi top, ¿no? Como inspiración.
Hace un momento estábamos platicando un poco acerca del tipo de voz, en particular de la soprano que, según mi “acordeón” es la más aguda, pero además hay subclasificaciones, ¿dentro de cuál estás tú y cuál es la ópera que mejor va con tu voz?
Fíjate que este es uno de los temas más complica dos, porque existen muchas características en la voz y de acuerdo de cuerpo a cuerpo, de persona a persona, fisiológicamente sería como muy im posible poder clasificar a alguien exactamente en una tesitura con una clasificación específica, porque como te decía la edad influye, yo no canto lo mismo que cantaba cuando tenía veinte años, ahorita tengo treinta y cinco, a los treinta y cinco se llega a una madurez vocal y sigue avanzando hasta los sesenta y cinco y así, así es progresivo.
Entonces, yo comencé como soprano ligera, así que es como lo que más agudito, quizá también por la edad, mi timbre de voz si tú me escuchas
hablar siempre es arriba, arriba, arriba siempre. Entonces, siento que me he movido más hacia lo lírico; de ligera sigue lírica y vienen más clasifica ciones, sopranos pintos y así. Es una ramificación grande pero yo creo que me quedé entre la sopra no lírico ligera, sí, sí tengo agudos pero también tengo cuerpo en la voz, es este, es más que nada el saber identificar cosas de timbre de color y eso. Entonces yo creo que estoy ahorita, digo también necesitaría que algún maestro me venga a decir “creo que estás aquí o estás acá”, pero pues ya, este… lo que uno por experiencia ya sabe más o menos en donde está, ese, en ese rango por ejem plo podría decirte que está el personaje de Liú, en la ópera de Turandot, es una soprano lírica, creo que ya a esta edad en la que estoy ya podría can tar ese papel a plenitud, lo intentaba cuando era joven pero no se llena igual, de la voz de una joven a la voz de una persona ya madura.
¿Qué has sacrificado para poder avanzar en tu carrera?
¡Uyy! Muchos momentos familiares. Creo que eso es lo que más he sacrificado el decir “mamá no voy a poder estar en este cumpleaños tuyo porque tengo trabajo” y gracias a Dios como mi mamá fue la que me ha impulsado a seguir este camino ella siempre me ha dicho “tu trabajo es tu trabajo, ve a hacerlo”.
Obviamente hay momentos en los que también yo digo, “no, pérame, sí es importante el trabajo pero ¿quién va a estar cuando no tengas trabajo?
Tu familia”. Entonces creo que lo que más he sa crificado es eso, tiempo de calidad con mi fami lia, yo no, no este no creo haber sacrificado otras cosas más que eso y creo que el tiempo con la fa milia la verdad es algo muy valioso, al menos para mí la familia es como que algo muy valioso y sí, sí es algo que me arrepiento mucho de haber sacri ficado. Ahmm, desafortunadamente también el quedarse con la familia implica haber sacrificado oportunidades que me pudieron haber llevado más lejos, ¿no? Recuerdo que cuando era joven tuve la oportunidad de irme a Alemania y… y me dio miedo, me dio mucho miedo y dije “no quiero dejar a mi familia” y no me fui, entonces, bueno quizá si me hubiera ido no estaría ahorita aquí en este momento contigo, ¿verdad? (Risas)
Basada en tu trayectoria, ¿qué consejos le darías a un principiante en la ópera?
Mucho, mucho estudio. Mucha paciencia y no querer correr antes de aprender a caminar, era lo que te mencionaba. El forzar a la voz a crecer eso daña muchísimo, muchísimo a la fisiología de la voz. Yo creo que como buenos mexicanos somos muy desesperados y queremos todo rápi do y desafortunadamente he visto muchas carre ras que terminan pronto precisamente por eso, o personas que siguieron avanzando pero su voz se estancó porque no le permitieron a su cuerpo ir creciendo a su tiempo , todos tenemos nuestro propio ritmo y querer forzar eso es dañino, real mente es dañino, entonces siempre mis alum nos, porque también doy clases de canto, siempre les digo “todo a su tiempo, va a salir. Yo empecé igual”, o sea, porque también es eso el con tu ejemplo decirles “yo también empecé como tú, no creas que yo de la noche a la mañana ya… o sea, la persona que conoces no era la misma de hace quince años, de hace veinte años. No era la misma”, entonces siempre les digo que sean bien
pacientes, bien pacientes y todo paso a pasito. Eso sería como la mejor recomendación y… no dejar que nadie les diga que no pueden cantar, porque a mí me lo dijeron también. Cuando yo tenía quince años me dijeron: “tú no sirves para esto “ y fue horrible, me destrozó el alma y creo me pasé como un año en depresión total y dije “yo no sirvo para esto”, bueno, “pues entonces no le doy”, y mi mamá fue la que dijo, digo a final de cuentas las mamás siempre ahí impulsando a los hijos, ella fue la que me dijo “no, tú no dejes que ese comentario -porque venía de un maestro, ¡de un maestro de canto!- no dejes que ese comen tario te detenga”, dice. “Porque ni yo te hago esos comentarios”, y dije, “Bueno, está bien” y le di para adelante. Y aquí estoy. (Risas)
Me gustaría ver la cara de es maestro ahora… ¡¡Sí!! Bueno sí me lo he encontrado y sí le dije “¿cómo ve maestro?”, una vez en, en… lo quiero mucho al maestro, me llevo muy bien con él, no, no diré su nombre nomás por respeto, él sabe quién es, pero sí, sí le dije “¡qué onda profe! Ya ve que sí servía”, me dijo, “nomás que eras bien tremenda”. ¡No es cierto! Yo creo que lo dijo no más para justificarlo, ¿no? Pero bueno, él me dijo, “¡qué bueno que me equivoqué!”, él sí me lo dijo “¡qué bueno que me equivoqué, qué bueno que no me hiciste caso!”, bueno, también él aprendió y reconoció que lo que hizo, pues, quizás estuvo mal porque pudo haber truncado una carrera; sin embargo, ya también la tenacidad que uno tiene hizo que ahí estuviera…
Crecí, ¡sí! Crecí ante, ante el… ¿cómo decirlo? No quiero decir rechazo porque no es rechazo… ante el… ante la crítica, poque a veces es la crítica, la crítica destruye si uno no está bien preparado y quien no está preparado para la crítica no está preparado para el arte.
¿Cuál es tu género de ópera favorito?
¡Aaayy! Me gusta mucho la ópera bufa, que es la ópera graciosa, ¿no? Que en su tiempo fue muy, este, despreciada por la gente, digamos de, de alta alcurnia, que era despreciada porque estaba vista como más cosa para teatro de, de ópera de calle por así decirlo, pero me gusta mucho y quizá porque me gusta ser muy graciosa, hacer muchas bromas o algo así, entonces me gusta prestarme ahí al vacile y todo eso, me gusta muchísimo.
Digo, también la ópera dramática me encanta, ¿no? Pero creo que mi favorita es el, el, la ópe ra bufa porque como decíamos la gente lo toma como algo medio aburrido la ópera, entonces dale esa picardía a las escenas, con el canto, las acciones, todo eso, como es lo que más me gusta, definitivamente.
¿Qué desafíos, además del tiempo con la familia, has tenido que enfrentar para consolidar tu carrera?
¡Híjole! El desafío más grande ha sido y no, no, no es por victimizarme, pero ha sido el sobrepeso. En el mundo, pues artístico, la imagen ¡híjole! Vale muchísimo y el abrirme camino a pesar de, de mi cuerpo, de mi fisiología, de ser gorda, este, fue difícil, fue muy difícil, pero al final el talento terminó pesando más que mi propio peso, y creo que ese ha sido de los retos más grandes.
Cosme (Infante), que es mi amigo, él siempre me
lo dijo, “una cara bonita nunca va a ser mejor que el talento nato”, entonces yo le agradezco mucho a Cosme que, que siempre me está recordando ahí “usted es valiosa, usted es valiosa, usted es va liosa”, entonces creerme eso ha sido un reto muy difícil y ha sido un proceso de años y hay días en los que despierto muy empoderada y digo “claro, yo soy la mera entomatada”, pero hay días en los que despierto y digo “no puede ser, soy así, a la gente no le gusta, a la gente no le parece…” y sin embargo son más los días en los que digo “claro que valgo más que mi propia imagen”, digo de finitivamente la Ashanti de hace unos años a la de ahorita es muy diferente, me visto diferente, antes trataba de ocultar mi cuerpo con ropa muy grande, nada entallado y nada que… me gusta ba ser muy gris, que nadie me notara, me daba miedo que la gente se diera cuanta que yo estaba ahí. Entonces, ahorita me gusta que la gente se dé cuenta que estoy ahí, porque también valgo, o sea también importo y creo que este ha sido, de verdad, el reto más difícil.
Hace un momento hablabas que te gustaban todos los géneros, pero ¿cómo es Ashanti en casa?, ¿qué música escuchas?, ¿ópera, cumbia, reguetón?
Creo que depende del día, del estado de ánimo porque me podrás escuchar cantando Ángeles Azules, todas las canciones de Ángeles Azules o de repente escuchando rock, yo creo que depen de del estado de ánimo, también me gusta ahí po nerle como que muy random todo, si de repente me aparece ahí Margarita la diosa de la cumbia, ah, pues la pongo, si me aparece La Habanera de Carmen, ah pues quiero escucharla y la pongo, o sea, no me limito a ¡ay! solo voy a escuchar esto porque soy músico académico, ¡nombre!, ¡no!, pues si la vida es, la vida es bella y es suave, ¡tú dale de todo!, ahora sí dale a tu cuerpo alegría Macarena, vamos a decir, ¡ja, ja, ja!
¿Cuál es tu mayor logro hasta ahora y qué retos visualizas en el futuro próximo?
¿Mi mayor reto hasta ahora? ¡Ehmm! Yo diría que el dejarme fluir porque siempre fui, eh, bueno, creo que sigo siendo pero ya no tan, tan este, tan fuertemente, siempre he sido muy introvertida, entonces el permitirme ser en el escenario fue un gran logro, porque yo creo que el te podría de cir que el, el, el despegue de mi carrera ha sido apenas en el 2016; tengo muchos años cantando, pero apenas en el 2016 fue donde yo ya me sentí más libre y dije “ok, ya, ya, ya es momento de que salgas, no puedes estar ahí todo el día ahí escon dida, todo el tiempo escondida”. No estoy segura, fíjate. No sé. De hace tiempo dejé de hacer como mi listita de cosas por hacer, lo dejé de hacer porque si no cumplía algo llegaba la frustración y eso lejos de ayudarme me merma ba mucho espiritualmente, mentalmente, enton ces ahorita voy al pasito, lo que vaya sucediendo, poco a poquito porque sí está bien el fijarse me tas, pero ehmm, padezco de ansiedad, entonces el hacer algo así, quiero esto, esto, esto y esto, y no cumplirlo me genera mucho problema, entonces no sé qué me depare el destino, lo que sí sé es que quiero seguir cantando, eso sí, quiero seguir ha ciendo música, quiero seguir cantando, quiero seguir dando clases. Me gusta mucho darle clases a los alumnos, muchísimo, el seguir compartien do con ellos, el que esto se vuelva perpetuo, no mi voz si no el conocimiento, que la gente que vie
ne, las nuevas generaciones tengan este conoci miento, eso sí es lo que me gustaría, que siguiera, que continuara, como lo que nos enseñan nues tro padres, nuestros abuelos, todo el legado que nos van dando, que este mismo legado musical se vaya quedando, quizás eso es lo que yo quisiera pero la vida decide.
¿Tu mayor satisfacción profesional?
¿Sabes? Es curioso porque la mayor satisfacción profesional fue haberme ido a Estados Unidos a cantar. Fui invitada en el 2018 a cantar en la ce lebración del Grito en San Antonio, Tx. Para mí es como la mayor satisfacción, no por haber cruza do el charquito, no, si no porque me fui casi que de “mojada”, porque yo no tengo papeles, yo no tengo papeles y nos consiguieron como un per miso especial porque íbamos con orquesta y todo, entonces ese ha sido como que uno de mis satisfacciones más grandes. Una experiencia muy enriquecedora. Mi abuelo siempre decía que los viajes ilustran y ese fue un viaje que me ilustró muchísimo, o sea, también me enseñó muchas cosas. Eh, la comunidad latina en Estados Unidos estaba bien agradecida de que hubiéramos ido a cantar, la gente lloraba de emoción de escuchar su música, de escuchar y saber que éramos per sonas de acá, ¿no? No gente de allá que estaba cantando música mexicana, no, porque íbamos directamente desde aquí hasta allá. Ese, ese sen timiento de unión con ellos fue muy bonito, en tonces creo que es una de las satisfacciones más grandes que me ha dado la vida.
¡Ayy! Como te decía, el que no está preparado para la crítica no está preparado para el arte. Hay que ser, tener mucha fortaleza, mucha fortaleza porque este medio te destruye totalmente si no estás listo. En cuanto a lo otro, yo creo que las ca racterísticas pues sería simplemente ser afina do, saber llevar el ritmo, tener musicalidad, que mucha gente cree que eso ya nace uno con ello, y aunque sí hay gente que nace con ello también hay quienes estudian y en el proceso lo adoptan como suyo.
Yo creo que todos podemos cantar, quizá no to dos podamos ser solistas de una ópera pero sí, todos podemos cantar, y dedicarse a este género quizá no como un solista pero sí como un coris ta de una ópera, entonces yo diría que más allá de qué cualidades necesites, es qué tan decidido estás de querer hacer esto para dedicarle todo tu tiempo al estudio porque al final de cuentas esto es estudiar practicar, estudiar practicar, comer, bañarse, estudiar practicar, estudiar practicar, y todo el tiempo, todo el tiempo así. Entonces yo creo que más allá de las cualidades es cuánto uno lo desea, más allá de eso es eso lo que a mí, al me nos a mí me ha funcionado. El cuánto yo lo quiero, voy por él. Así de sencillo.
Considerando que en alguna época a los hom bres se les castraba para que conservaran la voz de niño, un niño ¿puede interpretar ópera?
No. No podría. Bueno, sí podría. No debería. Por que eventualmente su proceso hormonal le va a limitar, siempre. Pero quizás ópera no, en rea lidad es un tema de cómo se utiliza el término ópera, el término ópera es exclusivamente para referirnos a la ópera, pero el canto lírico es la téc nica con la que se aborda la ópera, entonces los
niños sí pueden cantar lírico. Hay grupos de ni ños coristas que cantan precioso, de hecho los Coristas de Francia, que ya no deben de ser niños, ya deben ser todos unos adultos, ellos empezaron muy pequeñitos y cantaban ya el género lírico, entonces sí pueden pero sí necesitan ser, ¿qué te gusta? Un niño pues ya de como unos ocho añitos en adelante, para no estar ahí adelantándole un proceso que no es necesario, se le puede empe zar a educar, de hecho la mejor educación empie za mientras más joven mejor, ahora cuando uno se quiere dedicar a flauta, trompeta, lo que sea, para lo que sea, siempre es como que, ya cuando el niño tenga más nociones de cómo funciona su cuerpo, entonces ahora sí aventarlo a que estu die algún instrumento y lo mismo es con la voz, entonces se le puede empezar a enseñar desde temprana edad, pero creo yo que no sería lo ideal realmente. No sería lo ideal.
Acerca de la percepción general de la ópera, ¿la ópera está pensada para personas de muchos recursos o para alguien que habla italiano? ¿o puede ser entendida por todos? Inicialmente pues sí, fue creada para eso, pare el entretenimiento de la gente más rica, pero ya en la época del romanticismo fue creada porque realmente era algo que a la gente, ya en general, le gustaba escuchar. Yo creo que ahorita ya no hay, digo, desconozco ¿verdad?, ya no hay tantos compositores de ópera pero yo creo que sí, que sí es un hecho que nos hace falta el echarnos como una sumergida en esto, ¿no? No toda está pensa da en italiano, porque hay óperas en francés, hay óperas en alemán, pero quiero creer que es deri vado de donde surge la ópera, ¿no?, como surge en Italia entonces pues la mayoría de la ópera que conocemos es en italiano, pero también hasta donde recuerdo hay óperas en, escritas en espa ñol, no tengo el dato así de ahorita en mi men te pero debe existir también en inglés, debe de existir este en chino, o sea, al final de cuentas se puede ir adaptando el libreto, el libreto se puede ir adaptando… ¿quién sabe cuánto se tardaría uno en adaptar una al español? (risas)
Me gustaría así como que la cumbia y todo eso, pero como que todavía me falta ser más extrovertida, entonces no sé si eso se pueda lograr, pero sí, de lo popular casi todo me gusta”
¿La ópera compagina bien con el pueblo? Si uno lo decide, sí. Si uno lo empieza a hacer par te… es como, el reguetón es parte de ti porque lo escuchas cuando los vecinos lo tienen para todos lados, la música de banda igual, es como cada gé nero va teniendo su auge. Entonces, si esto lo em pieza uno a inculcar desde niño pues el niño le va a empezar a gustar y eventualmente el niño lo va a empezar a compartir. Yo digo que sí, sí está al alcance de todo, pero pues también depende de uno como expositor el abrirse a la gente y decirle “mira lo que te estoy cantando es esto”, “¡ah! Ok”, ahí ya cambia el chip de la gente, “¡Ah, ok! Mira,
ah, qué bonito, que no sé qué”, o sea, si no les ex plicas, si no les interpretas pues la gente se va a seguir quedando con lo que conoce, en lo que ha nacido, entonces, yo digo que sí está al alcance pero falta quizá más difusión.
¿Cuál es tu autor favorito?
Giacomo Puccini. Es el escritor de Turandot. Él me encanta. La forma de escribir las melodías que usa, la influencia, o sea para mí es… quizá porque ya está más, más contemporáneo a nues tra época. Entonces me mueve mucho ya la forma en la que está escrita su música, los matices que usa, que empieza algo muy piano y de repente algo crece y ves allá a la soprano desgarrándose, o sea… él es de mis compositores, bueno, no, es mi compositor favorito. No es de mis, es mi favorito.
Empaparse. Escucharla. Poner YouTube y a ver voy a poner aunque no, no me mueva empezar a escucharla y empezar a leer sobre el libreto de lo que está uno escuchando. Al final de cuentas a nosotros cuando nos empiezan a enseñar el, pe queñas arias de las óperas nos, bueno, los buenos maestros, verdad, te piden “investiga tu papel, ¿qué rol tenía?, ¿qué tesitura tiene?, ¿en qué épo ca está basada la ópera?, ¿quién era tu composi tor?”, o sea nos piden hacer este estudio general y entonces es ahí donde uno empieza “¡Ahh, mira!”, “¡Guau! Hizo esto por amor”, “¡Aghh! Hizo esto por venganza”, y es porque nos empieza a atra par, pero pues como no estamos acostumbrados a leer mucho, entonces también da pereza el que rer investigar. Y yo creo que si uno se empezara así de a poquito a desempolvar la apatía por la lectura, empezaría a descubrir que la ópera nos está comunicando una historia, o sea, no nada más es ahí alguien que está berreando, o sea, es alguien que te está queriendo comunicar algo y algo que está relacionado con algo que has vivido, porque al final de cuentas están, los libretos es tán llenos de vivencias de personas.
¿La ópera puede ser empleada como catarsis? Yo la he usado como catarsis. Totalmente. Sí, hay una pieza en específico que se llama “Un bel di, vedremo”, donde ella está relatando que su amor se fue, su amor se fue, y ella lo espera ver que regrese, ¿no? Así, en el mar, viendo cómo se empieza a acercar el barco y que viene por ella. En algún momento de mi vida eso fue una ca tarsis para mí. Yo, digo, soy divor… no tengo pro blema con decirlo: soy divorciada, entonces en ese momento de quiebre en mi vida esa canción apareció y me la pidieron, y dije “bueno, pues va a ser todo un reto no ponerme a llorar ahí en ese mo mento”, porque aún estaba esperando el regreso del amor, no. Pero sí, en ese momento me sirvió de catarsis, o sea y yo ahí soltaba todo y en mi voz se notaba el sufrimiento total, el desgarre que yo decía “es que yo lo quiero, lo espero, lo sigo esperando…” Y es así, o sea, cada pieza al final de cuentas como está reflejando algo que hemos vivido, cada pieza va a tener ahí como que en su momento un lugar para poder ser interpretada. Esa pieza en espe cífico para mí fue mi catarsis total, o sea, en ese momento ¡híjole!, yo daba todo, todo, se notaba y mis compañeros me decían “oye es que la sentí, es que piel chinita y todo”, o sea ahí es donde uno se da cuenta que realmente está transmitiendo a la gente a través de su propia experiencia.
Hablando de emociones, hace poco en tu página publicaste que estabas en la Clínica del IMSS y… he visto varias veces “O mio babbino caro”. Te confieso, se la ponía a mi hijo para que se dur miera y yo mismo me dormía, pero ya entrando en esto me puse a leer y descubrí que… en realidad nos estábamos durmiendo con el drama amoroso de una mujer que se quería aventar del puente Vecchio si no le aceptaban a su amado… Esta pieza te gusta mucho, ¿nos podrías contar por qué?
Sí. Es que es la primera pieza que me puso mi maestro de canto. Entonces, es mi primer acer camiento con la ópera. Me representa mucho, me trae mucha nostalgia, porque en ese momento él me dijo: “estúdiala” y pues uno va poniendo las notas, va poniendo el texto hasta que me dijo “¿y ya sabes de qué trata?”, y yo: “No”… “Pues investíga le”, entonces cuando ya lo investigué dije: “¡Mira!”, uno pensando que está cantando, ahí arrullando al niño o algo así y no es así porque se confunde el babbino con bambino, que bambino sí se está ha blando de un niño, pero entonces es… esa pieza en particular es como decir “aquí nací”, “de aquí salí”, “¡aquí surgió!”, “¡Aquí surgió todo!” Y me causa mu chísima nostalgia el cantarla todas las veces, no nostalgia de la que “¡ay quiero llorar!”, no. Nostalgia de esta de, de los buenos momentos comenzaron a partir de aquí. Por eso es que me gusta mucho y quizás haya veces en las que digo “¡Ay, otra vez me la pidieron! Bueno pues vamos a cantarla de nuevo”, es como ya, pues ya no hay más repertorio, no sí hay mucho pero a la gente también le gusta. Entonces si la gente te la está pidiendo, pues a la gente se le da lo que está pidiendo.
¿Te gustaría compartirnos alguna anécdota en tu carrera?, ¿alguna curiosidad, quizá?
¡Ja, ja, ja! Es que tengo muchas… tengo muchas anécdotas. Bueno, mira una, una de las que más me causó… de las que más me da risa, de las que más me da risa porque han sido recurrentes, ¿no?
El que estás cantando y es tanta la emoción que se te desborda y entonces uno tampoco controla eso, la voz falla. Me ha pasado en pleno escenario que se me sale un gallo y la gente te ve y te sigue aplaudiendo pero, pero uno por dentro está mu riéndose de pena “se me salió un gallo, se me salió un gallo”, y uno piensa que es la muerte y así, “no, ¿por qué? Si era el final, épico y así”. A Plácido Do mingo le ha sucedido, entonces no tenemos que estar ahí todos frustrados porque “¡ay se me salió un gallo!”
De eso, una vez me pasó en el teatro, en el Teatro Metropolitano que en pleno, en pleno agudo ahí me falló por desbordarme… o sea, también uno es hu mano y al final de cuentas y si no controlas las emo ciones pues las emociones se le van y la voz tam bién. Esa vez recuerdo que salí, yo salí bien enojada hacia las piernas del teatro y todos atrás “¡bravo!”, y yo “¿cuál bravo si se me salió un gallo?”, pero ellos “sí, pero lo hiciste perfecto, que no sé qué”, yo “no, ¿cuál perfecto?, eso no estuvo bien”. Y yo bien enojada y creo que son cosas que la gente no se da cuenta, o sea nada más es uno el que se da cuenta, y uno está con sus frustraciones creyendo que la gente le va a dar importancia al gallito ahí salido. ¿Cuál? La gente le dio importancia a todo lo que interpretaste, a los dos, tres minutos que te aventaste, no a ese segun do que se te fue la nota, entonces, bueno. Como eso me han pasado muchos . Entonces es mejor, “ok, pasó”. Reconocer “soy bueno, vamos a lo que sigue, se acabó”.
Durante casi todo el siglo XIX, la princi pal vía de comunicación terrestre de Tampico fue el camino de Altamira, que corría de sur a norte siguiendo aproximadamente el mismo trazo de la actual avenida Hidalgo. Hubo otros cami nos, como el de la Barra o el del Arenal. Es tos también se extendían al norte, mientras que hacia los otros costados de la ciudad la comunicación terrestre se veía interrumpi da por los cuerpos de agua: el río Pánuco, al sur y al oriente; el río Tamesí y la laguna del Chairel, al poniente.
Quienes viajaban por tierra hacia otras poblaciones de la Huasteca o quienes bus caban tomar el camino a México, debían cruzar el Pánuco en los pasos, sitios que ofrecían mayor seguridad: ya fuera por la existencia de un vado, por un estrecha miento de las márgenes o por la ausencia de corrientes peligrosas. Debido a la situación semipeninsular de Tampico, los ríos y las la gunas también fueron, durante casi todo el siglo XIX, las vías de comunicación entre la ciudad y algunas poblaciones del interior.
La construcción de la línea del Ferrocarril Central Mexicano, entre Tampico y San Luis Potosí, revolucionó la comunicación con el resto de país. Como parte de estas obras, se construyeron varios puentes ferroviarios; el de mayor importancia en las proximida des de Tampico fue El Moralillo, auténtica puerta para los viajeros que comenzaron a llegar a partir de abril de 1890. Con sus casi 200 metros de longitud, este puente se ex tiende sobre la desembocadura del Tamesí, entre los límites de Tamaulipas y Veracruz. Inicialmente, contó con una trabe central giratoria, que permitía el paso de las embar caciones entre el Pánuco y el Tamesí; años después, este mecanismo fue remplazado por elevadores que, con el mismo propósito, permitían suspender un tramo de la estruc tura. Hoy, el puente carece de partes móvi les, pero continúa siendo funcional.
Aunque de menores proporciones que El Moralillo, el puente Manuel Romero Rubio también fue un icono porteño de inicios del siglo XX. Como antecedente, hay que men cionar que, a mediados del siglo XIX, co menzaron a aparecer entre los cauces de los
ríos Pánuco y Tamesí una serie de bajos que acabaron por formar una isleta oblonga, la cual entorpecía las actividades del puerto. Para solucionar esta situación, el ingeniero Alejandro Prieto Quintero diseñó, en 1870, un nuevo muelle de madera que permitió el movimiento de cargas entre la margen del Pánuco y la plaza de la Libertad, con el río Tamesí de por medio; este embarcadero entró en operaciones en diciembre de 1875. Entre 1898 y 1902, se construyó el edificio de la nueva Aduana Marítima sobre la men cionada isleta; y un puente de hierro susti tuyó al antiguo embarcadero en 1904. Por iniciativa de la Cámara de Comercio local, el nuevo puente recibió el nombre de Romero
Rubio, político capitalino que también fue suegro de Porfirio Díaz. Tras el triunfo de la Revolución, el puente cambió su nombre a Francisco I. Madero. Debido a que en 1918 fue desecado el brazo del Tamesí que pa saba bajo el puente, este fue desmantelado hacia 1922.
Conforme avanzaba el siglo XX, el desa rrollo de la industria automotriz impulsó la construcción de carreteras. No obstante, los automóviles que salían de la ciudad debían cruzar los ríos en transbordadores (también llamados pangas o chalanes), tránsito que solía ser lento y dificultoso. El primer puen te carretero de relevancia en Tampico fue El Moralillo, construido entre 1952 y 1953. Se
La posición semipeninsular de Tampico ha obligado a construir estructuras que faciliten las actividades de la población; aquí, recordamos algunos datos sobre los puentes más icónicos
Entre ríos y sobre puentesEl puente Manuel Romero Rubio fue desmantelado hacia 1922. Se ubicaba sobre el brazo del río Tamesí que pasaba frente a la ciudad; hoy, en su lugar se encuentra la plaza Hijas de Tampico.
ubicó a unos 180 metros al norte del puen te ferroviario del mismo nombre y, a partir de entonces, agilizó el tránsito en la recién estrenada carretera Tampico-Valles. Un se gundo puente, el Chairel, se inauguró en 1962; este, además, habilitó un nuevo acceso a la ciudad a través de la colonia Campbell.
Hasta 1984, con la construcción del puen te El Prieto, se pudo prescindir de los trans bordadores para el cruce de autos sobre el Pánuco. Sin embargo, para no obstaculizar las actividades portuarias, El Prieto se cons truyó a 9 kilómetros al poniente de la ciu dad, en territorio veracruzano.
Persistía, no obstante, la necesidad de contar con un enlace carretero que comu nicara directamente con la zona urbana de Tampico y Ciudad Madero. Ya desde finales de los sesenta, se habían contemplado di versos proyectos; incluso se llegó a propo ner la construcción de un túnel bajo el cauce del Pánuco. En 1980, inició la construcción de un puente atirantado, el más grande en la historia local, de 1543 metros de longi tud, que se levantaría entre el cerro de An donegui, en Tampico, y Mata Redonda, en Veracruz, a 50 metros sobre el río. Debido a dificultades con la cimentación y, luego, a problemas presupuestales, la obra se pro longó durante casi ocho años.
Finamente, el 17 de octubre de 1988, se in auguró el puente Tampico, que se convirtió en emblema de la ciudad; fue considerada la obra de ingeniería civil más destacada de la década de los ochenta en México. Desde entonces, ¡ay de aquel que no se conmueva, al llegar o al partir, con la imagen que nos regala el puente Tampico desde las alturas! Esplendorosa visión de conjunto que con tiene todo aquello que es Tampico-Madero: el puerto; sus calles, viviendas y edificios; los ríos, las lagunas, el mar; el trabajo y los sue ños de sus gentes.
en el municipio de Tamuín, S.L.P. el poblado de Antiguo Tamuín se ha vestido de una lluvia tempranera y los aromas a tierra húmeda y a humo de las cocinas abraza al recién llegado como una amorosa madre que recibe con alegría.
En este pequeño poblado, Julio León lleva alrede dor de seis años tallando máscaras para las festi vidades de Xantolo y Semana Santa en madera de pemuche también conocido como colorín.
El año pasado Julio León fue invitado a danzar en las plazas de Tampico con una comparsa xanto lera, de ahí lo invitaron a una exposición de más caras y desde entonces en el local de CULTURA del MIRADOR de los ARTISTAS tenemos algunas piezas para su venta.
Además ha expuesto en el Museo Regional de Ciudad Valles, en San Luis (Potosí) ha impartido cursos de dibujo a escuelas particulares, también ha expuesto en Huehuetlán, en Xilitla, en San Luis Potosí y ha participado con danzas de Xantolo, en Xilitla, San Vicente Tancuayalab y Tampico.
Tratando de avanzar en el arte conoció a la maes tra Yolanda Martínez, una pintora, que le impulsó y le dio diversos consejos que le ayudaron a crecer.
Están hechas en madera de pemuche por sus cua lidades de ligereza, algunas en cedro, el proceso es sustentable porque el artesano busca los toco nes y maderos de árboles que están maltratados o que se hayan caído para no cortar madera viva. Además de madera, para la ornamentación utili za mecate de ixtle y algunas veces cascos de cuer
POR: REDACCIÓN CULTURA
Artesano tamuinense, creador de máscaras de Xantolo, también se ha presentado como la Catrina Ambulante en las plazas de TampicoPRESERVANDO TRADICIONES
En el tallado y definición de rasgos puede to marse entre quince a veinte días, dependiendo del tallado de la máscara y lo fino de los rasgos; algunas menos elaboradas las talla en tres días más el tiempo para resanar, lijar, pulir y pintar la máscara. Algunas más complejas le han tomado hasta dos meses como la de una joven huasteca que lleva un colote en su cabeza.
El precio de las máscaras varía dependiendo del diseño, van de entre $500, $600 ya pintadas, re sanadas y la madera curada. Otras están en $700 con los acabados.
Hay unas de cedro cuyo costo es de $900, pero todo depende del diseño que pida el cliente. La verdad es que no son tan caras las máscaras.
En conclusión, Julio León es una artesano con un buen potencial en la preservación de las tradicio nes de nuestra cultura; además de tallar másca ras, también incursiona en la pintura de murales y en la escultura, actualmente trabaja en una pieza en cemento del Adolescente Huasteco, con una altura aproximada de 2 metros.
En el local de Cultura del Mirador de los Artistas se exhiben para venta dos calaveritas de concreto (cemento y arena), dos máscara de Xantolo y dos cuadros: uno representa a una viejecita de la zona huasteca y el otro es la Virgen de los Dolores
Se muestran algunas etapas de las máscaras que se encuentra tallando actualmente y un pena cho; además de mostrar al títere del Adolescente Huasteco que es complemento de la Catrina Viajera
“Creo que lo que me motivó fue ver personajes cuando estaba chico en las comparsas y eso me llevó a crear mis propias máscaras y al final de cuentas pues me gusta el arte, ya llevo cinco años haciendo máscaras y aquí está parte de mi trabajo”
Sonriente, amable pero muy laborioso, don Tomás, “El Negro”, como le conocen los parroquianos y los demás vendedores, nos saluda en su puesto frente a la Plaza Hijas de Tampico, en el callejón Centenario
Al principio receloso, no se siente cómodo frente a la cá mara, el noble vendedor nos
platica que lleva más de sesenta años vendiendo frutas (en época de calor) y dulcería mexicana (des de septiembre y hasta que dure el débil invierno en el trópico).
Al estar corriendo octubre, su carrito está repleto de dulcería mexicana, des tacándose las cocadas, las palanquetas, ates, camo tes, dulces de membrillo y la especialidad local: la du quesa, esa delicia de coco en forma de empanadita y rellena de crema pastele ra, un dulce muy nuestro, y
que ha pasado a formar par te de los festejos patrios y de un gesto de afecto cuando se las obsequias a los visitantes en sus cajitas de plástico. ¡Co rran por las suyas!
