El Festival 2023 vendió 202.154 entradas y 11.398 conservadoras

están pidiendo que les hagamos un lugar”, graficó el presidente de la comisión.

Rara vez se vio a lo largo de la historia del Festival Nacional de la Doma y el Folklore de Jesús María que se colmara su capacidad en todas sus noches antes de las 20, a plena luz del día, en verano, y con ola de calor incluida.

Y nunca había pasado que la taquilla estuviera por encima de los 200 mil espectadores ni que la cantidad de conservadoras vendidas superara las 10 mil.

Este verano, Córdoba fue un destino sumamente visitado por los turistas y fueron ellos principalmente quienes ayudaron a darles un marco imponente a todos y cada uno de los más de 300 festivales que tiene la provincia.

Pero sería injusto atribuir semejante éxito sólo a la cantidad de veraneantes y, por eso, la organización del Festival de Jesús María aportó más razones para la edición 2023.

El presidente de la comisión directiva, Juan López, lo resumió así: “La entrada era económica, la programación gustó y la gente aceptó. Y nos benefició el efecto pos Mundial de Fútbol”.

“La gente -completó- estuvo alegre desde el día uno, la selección nos unió, y creo que los festivales sirvieron para que la gente se aislara de los problemas en torno a ese logro deportivo”.

Tan importante fue la recaudación del Festival -entre entradas vendidas, publicidades, concesiones y exclusividadesque cuando termine el ejercicio presente, el 31 de marzo, se habrán duplicado las utilidades de 2022.

“No me animo a decirlo con detalles, pero vamos a superar la actualización por inflación. Las utilidades van a estar por encima de los $ 100 millones”, adelantó López.

Éxito en todos los rubros

La edición 2023 terminó colocando 202.154 entradas y 11.398 conservadoras (se cuentan porque tienen precio de venta y porque ocupan el mismo lugar que un espectador).

De hecho, esta semana, y como anticipo, el festival les adelantó a las escuelas socias $ 10 millones que serán transferidos este lunes.

Para citar un ejemplo de que la asistencia masiva rindió también a los que invirtieron, se conoció que una firma que adquirió una exclusividad invirtió alrededor de $ 10 millones y terminó facturando, en bruto, $ 33 millones.

“Publicitariamente, nos fue excelente. Tuvimos que dejar marcas afuera. El producto Festival de Jesús María está instalado. De hecho, hay marcas que ya quieren estar en 2024 y nos

Está claro que se trata de un festival singular que combina actividades ecuestres –con la jineteada como valor central–con una grilla artística que amplió el término folklore a otros géneros y que en esa mixtura ganó adherentes, como la cumbia, el cuarteto y hasta el pop. Cuentas pendientes

El año fue tan extraordinario para la convocatoria que en algún punto se transformó en un déficit, ya que la enorme cantidad de gente que ingresa al predio impide poder ver los shows con comodidad, algo que en un futuro la organización debería revisar.

Les autorizan 28192 espectadores, pero solo 17 mil ven el espectáculo cómodos.

La otra cuenta pendiente es el cumplimiento de la ley de cupo femenino, norma sobre la que el festival ha ido mejorando, pero que aún no ha cumplido en su totalidad.