Bienestar en Familia / Aprendiendo a Ser Mamás y Papás
Guía 4
Disciplina, Otra Cara del Amor
Bienestar en Familia / Aprendiendo a Ser Mamás y Papás
Instituto Colombiano de Bienestar Familiar - ICBF Marco Aurelio Zuluaga Giraldo Director General Francia Helena López López Subdirectora General José Ignacio Rojas Sepúlveda Director Familias y Comunidades Astrid Bibiana Ruíz Velásquez Subdirectora de Operación de la Atención a la Familia y Comunidades Antonia Agreda Subdirectora de Gestión Técnica para la Atención a la Familia y Comunidades Coordinación Editorial Oficina Asesora de Comunicaciones ICBF Miguel Fernando Montes Toro Edwin Alberto Gómez Pérez Edición Enero de 2014
Material educativo que puede ser utilizado siempre y cuando se cite la fuente
Instituto Colombiano de Bienestar Familiar - ICBF Avenida Carrera 68 No. 64C-75 Sede de la Dirección General - Bogotá, Colombia PBX (1) 437 7630 Línea gratuita nacional ICBF: 01 8000 91 8080 Línea de prevención abuso sexual: 01 8000 11 2440 www.icbf.gov.co @ICBFColombia facebook.com/ICBFColombia
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Guía 4. Disciplina, Otra Cara del Amor
Disciplina, Otra Cara del Amor
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i bien en la formación del niño es importante generar autonomía, una identidad clara, autoestima equilibrada y una conexión fuerte con sus padres; en este proceso de crianza es necesaria la disciplina, en tanto respeto de los padres hacia los hijos y de los hijos hacia sus padres. La disciplina se debe interpretar simplemente como la manera de establecer límites y normas para evitar que el niño cometa demasiados errores en el transcurso de su formación y de su vida; van a darse momentos en los que la obediencia no es propiamente la que define una situación, y es en esos instantes cuando debemos tomar la dirección del caso y mostrar con ejemplos, que el llevar la contraria o el simple hecho de hacer lo que deseamos, no es propiamente lo que nos conduce a obtener un bienestar y una gratificación por lo hecho. En este interés de procurar desarrollar la obediencia en nuestros hijos, y de intentar que sufran lo menos posible por la desobediencia, hemos visto algunos vínculos de cuidado que pueden ser de gran ayuda en el momento de aprender juntos qué es la obediencia, cuáles son sus beneficios y cuáles sus efectos cuando nos salimos de sus límites.
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Bienestar en Familia / Aprendiendo a Ser Mamás y Papás
1. Una Autoridad Sana Una autoridad sana se establece mediante el diálogo, el acompañamiento y la reflexión constante; se fundamenta en el respeto mutuo y en el vínculo afectivo con el fin de crear un aprendizaje de los límites, mediante el ejemplo, la convivencia y el diálogo.
Vínculos de Cuidado • Fortalece la Autoridad día a día: Una autoridad sana se debe ejercer de manera permanente, porque en sí misma no implica una relación de dominio o de arbitrariedad, más bien es el resultado de consensos y de acuerdos entre hijos y padres lo que define el rol de los hijos y de los padres y moldea los rasgos de la disciplina. La obediencia aparece como el resultado de una vida disciplinada y de respeto que asegura una relación estable entre los padres y los hijos. • Un Ejemplo digno de Imitar: La autoridad debe basarse en el respeto y no en el temor, es decir, que al momento de crear límites al niño, este no los tome por miedo a la disciplina sino por respeto y entendiendo que es para su propio beneficio. • Coherencia y Unidad: Es fundamental que ambos padres estén de acuerdo, que no se desautoricen el uno al otro, pues esto genera interpretaciones erróneas o en doble vía por parte de los niños.
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2. Autoritarismo Es una forma de uso de la fuerza física, emocional, social o moral para doblegar la voluntad del niño. Algunas formas de autoritarismo son: la manipulación de los padres, las amenazas, los miedos, la cantaleta, los juicios, la desvalorización, los insultos y los golpes.
Vínculos de Cuidado • Examina: Es fundamental en todo momento estar atentos de no caer en estas maneras de disciplinar, pues lo único que logran es que los niños pierdan el respeto por sus tutores y generar temor por sus padres; esto implica el debilitamiento y el rompimiento de la conexión fraternal con los hijos. En esa medida debemos permanecer alerta en los momentos de disciplinar, de tal manera que no sobrepasemos los límites del amor y del buen trato que nuestros hijos merecen. Es necesario antes de disciplinar, reflexionar y hablar sobre las situaciones en tensión, de tal manera que se puedan tomar los correctivos suficientes y así mismo, definir los apoyos necesarios para que la situación problemática no se vuelva a presentar. • Maneja la Comunicación: Es importante crear una comunicación fuerte y que sea mutua, en donde ambas partes aprendan a escuchar y hablar, para que de esta manera se pueda llegar a un diálogo reflexivo que le permita al niño entender y comprender su error y las posibles soluciones o métodos para evitar que vuelva a ocurrir. • Corregir con Amor:
La disciplina es una cara del amor porque forma a tu hijo y lo enseña a ser mejor
Antes de imponer una medida disciplinaria es importante saber si dicha medida es útil y es la correcta para poder enseñar o transmitir el mensaje adecuado al niño, con esto se evita que los padres pierdan credibilidad ante el niño y que hayan confusiones en la medida o castigo que se impone, este debe ser claro y tener un principio y un final.
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