DECLARACIONES AMBIENTALES DE PRODUCTO EN LA CONSTRUCCIÓN: ¿ISO 21930 O EN 15804?

La elaboración de estas declaraciones es clave para demostrar los impactos ambientales potenciales en procesos de servicios o fabricación de productos.

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En aras de asegurar nuestra supervivencia en el corto, mediano y largo plazo, y siendo conscientes del gran reto a abordar, en la construcción contamos con la norma internacional ISO 21930 y la europea EN 15804, las cuales brindan lineamientos para la elaboración de declaraciones ambientales de producto (DAP) en el sector. Estas se tienen en cuenta en la selección de proveedores para edificaciones y con mayor auge en los proyectos que buscan certificarse bajo esquemas LEED, EDGE, CASA, entre otros.

Considerando entonces la importancia y el avance que están exhibiendo las DAP en diferentes industrias comprometidas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, entre ellas la construcción y sus materiales, estas se presentan como un mecanismo para demostrar los impactos ambientales potenciales en procesos de servicios o fabricación de productos. Así mismo, son documentos verificados por terceros, que se amparan en un Análisis de Ciclo de Vida (ACV), una metodología en la que se modelan las entra- das y salidas del producto, y con la ayuda de diferentes bases de datos y factores de caracterización de impacto proporcionan resultados de desempeño ambiental en cada etapa del ciclo.

Existe una serie de estándares ISO que son la base conceptual del ACV, como la ISO 14040 y la ISO 14044. No obstante, a la hora de desarrollar DAP también hay estándares base que dan paso a documentos metodológicos más precisos, de acuerdo con el producto que se va a analizar, llamados “Reglas de categoría de producto”.

Dos estándares de amplia aplicación alrededor del mundo parecieran abordar la misma aproximación metodológica, al establecer pautas, requisitos y guías para el desarrollo de los estudios de ACV, la obtención de indicadores ambientales, así como principios, especificaciones y requisitos para las DAP. Estos son la ISO 21930 Sostenibilidad en la construcción de edificios. Declaración ambiental de productos de construcción, y la EN 15804 Sostenibilidad en la construcción. Declaraciones ambientales de producto. Reglas de categoría de producto básicas para productos de construcción.

La ISO 21930 entra a complementar la ISO 14025 o, más bien, se alinean de manera específica, al proporcionar requisitos para las DAP de productos y servicios de la construcción, así como un conjunto básico de obligaciones que deben cumplir las reglas de categoría de producto.

Si bien la ISO tiene un alcance y consenso internacional, en Europa existe un mercado bastante consolidado en la generación de DAP para diferentes industrias, con la presencia de varios programas operadores que incentivan la aplicación de los estándares europeos EN; del mismo modo, importantes centros de investigación, universidades, y expertos que han generado reglas de categoría de producto, factores de caracterización y metodologías ambiental de producto (PEF, por sus siglas en inglés), entre otros. de cálculo de impactos alrededor de la promoción de la ecología industrial, se encuentran en esta región.

En ese sentido, este estándar ya no está alineado con la ISO 21930, lo que dificulta la uniformidad de las DAP generadas en este marco, a menos que en el futuro la ISO origine una actualización en esa misma vía. Al respecto, la ISO ha notificado el periodo de revisión sistemática de la ISO 21930 con fecha límite 2022-12-08. Hasta esta fecha el Comité Técnico 236 Construcciones Sostenibles podrá presentar concepto y observaciones para una posible actualización, reaprobación o anulación.

La posible ambivalencia de estos estándares o del organismo que las origina suele dar paso a confusiones sobre cuál es el más apropiado para generar una DAP o para desarrollar ejercicios de ACV de materiales de construcción. Para evitar esto, así como un posible conflicto de alcance regional, hoy vemos que la mayoría de programas operadores internacionales exige a las DAP cumplir con los lineamientos tanto de la ISO 21930 como de la EN 15804.

Por lo tanto, en este tema, los comités de trabajo y de normalización europeos incluyen los adelantos de armonización más recientes dentro de sus estándares, que en este caso se ven reflejados en la EN 15804; la ISO 21930 le sigue los pasos. Esto lo evidenciamos en la expedición y actualización del estándar de la EN en 2012 y 2014, cuyos lineamientos base fueron luego adoptados por el estándar de la ISO en su expedición de 2017, como, por ejemplo, la adopción de un conjunto común de factores de caracterización basados en la metodología CML desarrollada por la Universidad de Leiden, en Países Bajos. Esta facilitaba la comparabilidad de los resultados de desempeño ambiental sin importar el estándar aplicado.

Sin embargo, en 2019 se lanza una nueva actualización y en 2021 una corrección de la EN 15804, que entró en vigencia en julio de 2022. En ella se generan nuevos lineamientos, al incorporar 19 categorías de impacto, se hace obligatorio el reporte de las etapas de fin de vida y posible reciclaje, se clasifica el carbono equivalente según su origen y se establece una nueva metodología de cuantificación de final de vida, denominada Huella

Por lo tanto, independientemente de la norma que las organizaciones consideren utilizar o implementar, es muy importante concientizarnos de que a través de las DAP estas pueden ingresar a un mercado más competitivo y consciente del cuidado ambiental, en el cual se busca brindar información precisa y verificable que les brinde confianza a todas las partes interesadas del proceso de construcción.