POSTMETROPOLIS DE EDWARD SOJA Y TERRITORIOS INTELIGENTES DE ALFONSO VERGARA: DOS VISIONES ESCLARECEDORAS Soja’s Postmetropolis & Vegara’s Smart Territories: Two Enlightening Views 1.
Sergio Roa Aparicio Estudiante de Arquitectura Pontificia Universidad Javeriana sergio.8.roa@gmail.com
Resumen Una mirada de la sociedad post-industrial y como esta ha ido erosionando no solo la ciudad y la región como tal sino la academia moderna y las escuelas tradicionales de urbanismo. Edward Soja acuña el concepto de Postmetropolis como un vehículo útil hacia un nuevo urbanismo examinando todas las posibilidades desde la región hasta la espacialidad urbana. Por otro lado Alfonso Vergara nos muestra en su ecléctica visión de territorios inteligentes un recorrido ecléctico de referentes útiles para dilucidar todas las posibilidades y caminos para lograr la ciudad sostenible del futuro. Palabras claves: Postmetropolis, territorios inteligentes, ciudad digital, nuevo urbanismo, sociedad post-industrial.
Abstract Showing a quick sight of the post-industrial society’s erosion over city and regional scale, challenging modern academics and old-school fashion ways of urbanism. Edward Soja, at first, adopts what he calls Postmetropolis as a useful vehicle to achieve a new urbanism seeking all possibilities from region scale to urban spatiality. On the other hand, Alfonso Vergara shows us through his Smart Territories eclectic vision a sequence of useful references to clarify all possibilities and paths to achieve the ideal sustainable city of the future. Keywords: Postmetropolis, Smart territories, digital city, new urbanism, post-industrial society.
Introduccion En los últimos 30 años ha existido entre los sociólogos, antropólogos, urbanistas e historiadores una imperante discusión sobre los cambios abruptos que se han venido dando desde la década de los 60, descrita categóricamente como una crisis del modelo industrial fordista, (Bell, 1973) una ruptura definitiva que empieza a marcar a las ciudades con una serie de reestructuraciones económicas y políticas que solo fueron posibles por la “preeminencia del conocimiento y la tecnología. (Vergara, 2004) Uno de los primeros en elaborar una terminología para esta sociedad post-fordista, es el sociólogo Daniel Bell quien acuña el concepto de sociedad post-industrial en su libro El Advenimiento de la Sociedad Post-industrial. En él, explica como se empieza a dar el paso de una economía centrada en los bienes a una economía centrada en los servicios, cambio que solo tendría un perfil sociológico y no solo económico. (Vergara, 2004) Este concepto es pues la piedra angular para muchos teóricos como Alfonso Vergara y Edward Soja que empezarían a indagar sobre como debe entenderse la nueva planeación urbana y es a la vez un presagio de cómo se empezarían a considerar las dimensiones de región y globalidad gracias a un cambio en las relaciones espacio-temporales que permitiría el acelerado progreso tecnológico. (Vergara, 2004)
La ciudad digital de Vergara Alfonso Vergara escribe Territorios Inteligentes como un eslabón que aporta ideas y referencias para repensar las ciudades del futuro y enfrentarnos a un nuevo urbanismo. Incluye doce capítulos enfocados a territorios sustentables que pueden equilibrar la trilogía urbana: estrategia económica, desarrollo social y calidad medioambiental. (Euroresidentes, 2000) En el capitulo 11: Ciudad Digital utiliza ampliamente el concepto de sociedad post-industrial para explicar el surgimiento de los clusters como herramienta económica que transforma actualmente la relación ciudad-región. Dentro del marco conceptual de Alfonso Vergara, la sociedad post-industrial es la responsable de erosionar la espacialidad urbana y arquitectónica, que en nuestros se caracteriza por un enorme potencial de interacción, movimiento y accesibilidad. Esta erosión es una continua reestructuración de las grandes ciudades y territorios. Comienza por una descentralización espacial. La tecnología: la facilidad del transporte que cambia las relaciones espaciotemporales, acortando ciertas distancias. La desaparición parcial de la gran fabrica autosuficiente. Una sociedad del conocimiento dedicada a mover información cada vez mas rápido y fácil que obedece a lógicas mercantiles y opera a nivel de “aldea global”. (McLuhan, 1989) Se incrementan las formas de intercambio, se vuelven mas dinámicas obligando a los urbanistas y arquitectos a concebir ideas de ‘espacio de flujos’ sobre (no en vez) el espacios tradicionales que se han visto pauperizados dentro de la estructura obsoleta de la ciudad histórica. (Vergara, 2004). Clusters Vergara insiste en una imperante necesidad de implementar herramientas como “clúster” (2004:252) que sirven como eslabones indispensables para completar la cadenas productivas de la sociedad post-industrial de Bell y para la ‘emergencia’ y funcionamiento de las nuevas “economías creativas” (Rogers, 2000) Estos clúster impulsan la concentración de empresas de innovación, interrelacionadas entre si y conviviendo con universidades importantes para emplazar lugares orientados al desarrollo tecnológico. Esto lleva a pensar espacios como parques científicos y tecnológicos que favorecen el flujo y la integración. Es una idea que surge en ciudades estadounidenses como Silicon Valley y ha madurado el concepto de par-
ques tecnológicos como incubadoras de creatividad favorables para el desarrollo de las empresas de innovación. De esta manera la innovación se da dentro de una ‘sociedad red’. (Vergara, 2004) Este fenómeno ‘clusterigeno’ ha orientado a nuevas entidades a pensar estrategias de regeneración urbana creando lugares donde la clase creativa de la sociedad ‘prefiere’ vivir. Luego pensar en sistemas de lugares inteligentes orientados a la sociedad red donde hay una garantía de interacción entre lugares y flujo, configurando unos principios aplicables a escala local, urbana y regional. Esto empieza a configurar la ciudad digital, una ciudad que comprende la sinergia entre el espacio físico y el espacio virtual y la traduce en aparatos como el Digital Hub de dublin, un clúster de empresas dedicadas a las tecnologías de la comunicación y la información que propone una comunidad emergente implantada en el centro de la ciudad como una estructura nueva sobre una antigua (respetando la original) y protagoniza un fuerte sentimiento de identidad. (Vergara, 2004, p. 261) Existen muchos otros ejemplos de ciudades digitales que se ajustan a estas lógicas y a nivel urbano ya existen planes maestros a largo plazo como el One North, Singapur donde se propone un “entorno de calidad que estimule la innovación en el pensamiento y la acción” y fomente la imaginación y la creatividad. (Vergara, 2004, p. 264) Estos lugares privilegiados gracias al despliegue de nuevas tecnologías son el paradigma de la ciudad digital. Postmetrópolis de Soja Edward Soja, en Postmetrópolis (2000), su libro cumbre, propone un marco conceptual para el entendimiento de lo que llama el nuevo regionalismo. (Grodach, 2002) Se divide en tres partes, que segun el mismo prefacio son tres libros diferentes: Parte 1 sitúa la conciencia regional en un marco geohistórico de 11.000 años según autores como Lewis Mumford. Parte 2 expone un hojaldrado de 6 diferentes escuelas de pensamiento que combinadas permiten un mejor entendimiento de la posmetrópolis. Parte 3 consiste en citas extraídas de los comentarios que giraron en torno a los levantamientos de 1992 en Los Angeles después del juicio de Rodney King. (Grodach, 2002). Comprende una perspectiva explícitamente espacial, en otras palabras, geográfica.
Nos interesa la segunda parte donde Soja propone sus 6 discursos sobre la postmetropolis. Una combinación de seis escuelas de pensamientos que combinadas sostienen el discurso de la postmetrópolis, sin privilegiar ninguno sobre los demás: 1. La metrópolis industrial postfordista: metrópolis flexiblemente especializada. 2. Cosmopolis: región urbana globalizada. 3. Exopolis: metrópolis posturbana o megaciudad. 4. Ciudad fractal: polarización social e intensificadas desigualdades. 5. Archipiélago carcelario: ciudades fortificadas. 6. Simcities: hiperreales donde la vida diaria se juega como si fuera un juego de ordenador. (Soja, 2000, p. 22) Soja empieza con la caracterización de la metrópolis industrial postfordiana, una ciudad reconstituida que surge de la desindustrialización y la de-territorialización de las economías fordistas, optando por unas formas de producción a escala regional mucho mas flexibles y acordes con la sociedad post-industrial. (Grodach, 2002) Soja también nos habla de los clúster como un modelo económico vigente y flexible que permite categorizar esta visión como una ciudad flexible. (Guzmán, 2007) Dentro de la cosmopolis, existen según los teóricos que acuñan el termino una noción general de romper la dicotomía global/local. Esto implica que la condición estado-nacion deja de ser el único umbral de la identidad cultural y la organización económica. Aparecen nuevas fronteras y nuevas coaliciones que trascienden a nuevas fronteras y nuevos territorios dando origen a nuevas formas de poder regional como la unión europea. (Grodach, 2002) Se da en Los Ángeles en medio de una masiva llegada de inmigrantes latinos y asiáticos que formaron barrios y ghettos formando fuertes sentimientos de identidad local desde una absoluta globalización lo que llama “glocalizacion” (Guzmán, 2007) La exópolis configura una reestructuración de la forma urbana y el crecimiento de las ciudades limítrofes, y, en términos de Soja, ciudades exteriores y post-suburbanas. (Soja, 2000) Este fenómeno de urbanización en las periferias consistía en la creación de clusters tecnológicos, servicios financieros, industria
textil y tecnologías de información y entretenimiento, generando una dinámica de metrópolis desde dentro hacia fuera y desde fuera hacia dentro. (Guzmán, 2007) Existe también una tentativa de reconstrucciones optimistas de la post-metropolis y una exploración del lado oscuro del casco urbano y la ciudad externa. (Soja, 2000) Luego, Soja nos enfrenta a la ciudad fractal que consiste en una ciudad descentrada que da origen a una polarización y fragmentación social. Esto gracias a la deconstrucción y reconstitución urbana, un motor de desigualdad que diezmaría a la clase media (Guzmán, 2007) y entramaría un nuevo mosaico étnico en ciudades como Los Ángeles, marcado por movimientos sociales y políticos.. (Grodach, 2002) Las diferentes formas de control social que se dan a nivel de ciudad y región se ven ilustradas tanto en el archipiélago carcelario como en las simcities. Dentro de un archipiélago carcelario se ven ‘balcanizados’ los espacios privados y la idea de disminuir el espacio publico, lo que separa los grupos sociales de manera tanto física como psicológica. (Grodach, 2002) Acuña el concepto de ciudades de cuarzo donde hay una continua vigilancia y control espacial por parte de la policía, conceptualizada en ‘polis’, una ciudad-fortaleza: aislamiento social y espacial de la gente de ingresos altos que no sale de sus casas fortificadas y no se relaciona con el mundo exterior. (Guzmán, 2007). A partir del miedo generado por a geografía resultante de la ciudad carcelaria surgen las simcities, una reconstrucción de un imaginario urbano donde desaparecen los limites entre lo real y lo virtual que sumerge a la sociedad en una ‘hiperrealidad’ que merma la posibilidad de lectura de las verdaderas geografías emergentes. Estos habitantes hipnotizados por esta dicotomía pendular entre lo real y lo virtual buscan suplir la realidad con parques temáticos ideales y la simulación del urbanismo ideal. (Guzmán, 2007) Este hojaldrado que compone la Postmetroplis de Soja alcanza un nivel de análisis que trasciende las fronteras disciplinarias en su conceptualización de la ciudad-región. Demuestran que los cambios urbanos y regionales nos se pueden ilustrar ni conceptualizar solo en términos económicos, demográficos o urbanísticos (bajo la lente de las teorías modernas). A pesar de que no plantea una visión teórica radical, abre muchas perspectivas nuevas que per-
miten dilucidar interpretaciones y puntos de vista nuevos acerca del nuevo urbanismo preponderante. De esta manera tanto Vergara como Soja enseñan con sus visiones a que a pesar de susodicha reestructuración y la nueva dirección de la metrópolis, no hay que descartar las viejas concepciones, pues la metrópolis de la modernidad no se ha desvanecido por completo en ningún lugar. Son buenos pivotes para interrogar la validez de las radicales y crecientes nuevas formas de urbanismos que resultan demasiado impositivas y a veces hasta pretenciosas. Tal como lo indica Soja cuando habla de utilizar el prefijo post- “con el fin de indicar no una completa ruptura pero si una novedad significativa respecto de las practicas establecidas y de las tradiciones disciplinarias” (2000, p. 18) Soja además adopta una posición muy critica sobre el termino de post-modernismo y lo describe como un el mas controvertido y malinterpretado de los términos que llevan el prefijo post- y prefiere “un enfoque postmoderno perspicaz y critico respecto a los estudios urbanos, centrándome en lo que hay hoy de nuevo y
diferente mas que en lo que permanece igual.” (Soja, 2000, p. 19) Leer a Soja resulta realmente satisfactorio cuando adopta una actitud ecléctica en el ámbito del pensamiento critico sobre las ciudades y las regiones abriéndolas a todas las disciplinas. Esto nos permite abrir nuevas vías de comprensión sobre como es percibida empíricamente la espacialidad urbana, conceptualizada teóricamente, y vivida experiencialmente. De igual forma lo hace Vergara cuando realiza un recorrido de referentes e ideas útiles para el desarrollo de la ciudad-región sostenible, como los denominados SmartPlaces, “territorios capaces de dotarse de un proyecto de ciudad y encontrar un equilibrio inteligente entre su estrategia económica, la cohesión y el desarrollo social, la sensibilidad y el cuidado del medio ambiente” (Vergara, 2004, p. 242)
Bibliografía
1. Vergara, A. (2004). Territorios inteligentes: Nuevos horizontes del urbanismo. Madrid: Fundacion Metropoli . 2. McLuhan, M. (1989). La Aldea Global . Barcelona: Gedisa. 3. Bell, D. (1973). The Coming of Post-industrial Society. New York: Basic Books. 4. Rogers, R. (2000). Ciudades para un Pequeño Planeta. Barcelona: Gustavo Gili. 5. Soja, E. W. (2000). Postmetrópolis: estudios críticos sobre las ciudades y las regiones. (V. Hendel, & M. Cifuentes, Trads.) Madrid: Traficantes de Sueños. 6. Grodach, C. (Summer de 2002). Postmetropolis: Critical Studies of Cities and Regions. Critical Planning , 146-149. 7. Guzmán, M. (2007). El Espacio Urbano y las Relaciones Sociales: una Mirada a las Teorías de Edward Soja. Comunicacion , 36-42. 8. Euroresidentes. (2000). Reseñas de Libros. Obtenido de Euroresidentes: http://www.euroresidentes.com/libros/varios/territorios_inteligentes.htm