Nº 194 - SEPTIEMBRE 2008 ESPAÑA 5,90 % PORTUGAL Cont. 6,00 % ALEMANIA 12,00 % AUSTRIA 9,90 % BÉLGICA 9,20 % FINLANDIA 9,90 % FRANCIA 10,10 % GRECIA 9,00 % ITALIA 10,80 % SUIZA SFr. 16,50
SEPTIEMBRE 2008 LA NUEVA CASA ORGÁNICA Elvira & Murado/García & Ruiz/Innova Designers/Kotaro Ide/Novan & Vesson/Siza JONGERIUS ARETS DOSSIER PAVIMENTOS ILUMINACIÓN
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INTERIORISMO ARQUITECTURA Y DISEÑO
LA NUEVA CASA ORGÁNICA Kotaro Ide, Álvaro Siza, Innova Designers García & Ruiz, Murado& Elvira, Novan& Vesson
7 proyectos de Wiel Arets contados por él mismo Hella Jongerius: Diseño femenino singular George Nelson: Cien años de un clásico moderno Dossier pavimentos Nuevas soluciones de iluminación
GLOBUS
proyectos
Diego & Pedro Serrano CASA LEDESMA EN LLEIDA Una sorprendente y atrevida ampliación y rehabilitación exterior se conjuga con el protagonismo de la propia arquitectura interior. Proyecto innova::designers Diego & Pedro Serrano Colaboradores Andreu Tabarés Andreu Vicente Promotores Francisco Ledesma Paquita Calvet Constructor Innovacons Superficie 221 m2 Realización 2007 Situación Lleida Estilismo Mar Requena Fotografía Núria Vila
En el exterior de la vivienda, tuvo lugar la propuesta arquitectónica más radical y contenida, al mismo tiempo. Dos volúmenes metálicos, acabados en rojo brillante, rompen la serenidad del conjunto en la fachada posterior.
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Esta vivienda unifamiliar, sita en la ciudad de Lleida, se construyó en 1973 y, de la mano de los diseñadores Diego & Pedro Serrano, del estudio innova::designers, se ha actualizado completamente, en una adaptación a los valores y a la forma de vida de sus nuevos propietarios. El objetivo del proyecto era ampliar y rehabilitar la vivienda (221 m2), de sección rectangular, siendo respetuosos con la estructura y la forma original –la zona de día se ubica en la planta baja y la zona de noche en la primera–, a partir de un programa interior que ampliaba y mejoraba cada uno de los espacios existentes. Como dicen los autores del proyecto, en el exterior tuvo lugar “la propuesta más radical y contenida, al mismo tiempo”. La idea fue crear para todo el edificio un nuevo traje mucho más contemporáneo y elegante, con un atrevido complemento en forma de dos volúmenes metálicos. Este contraste intencionado, según dicta la memoria, representa la declaración de intenciones de un edificio y de unos propietarios con apariencia sobria y contenida, pero con alma inquieta. Los tonos, texturas y materiales elegidos para la fachada no pretenden destacar con el fin de otorgar el protagonismo directo al
La sensación de sobriedad se consigue con cerramientos de hierro natural y aluminio lacado en gris oscuro. La puerta principal está protagonizada por un cerramiento en L, que permite la filtración de la luz al espacio interior.
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Los dos volúmenes de planchas onduladas están unidos por una baranda de cristal que delimita la terraza.
propio edificio; para ello se apostó por cerramientos en las ventanas de hierro natural y aluminio lacados en gris oscuro, revestimientos de madera-cemento en planchas y monocapa en gris, y suelos en porcelánico antideslizante, con igual acabado, de aspecto cementoso, que transmiten una sensación de sobriedad y unidad que potencian una pretendida horizontalidad. La serena presentación de la vivienda, que se refleja desde la entrada principal, poco tiene que ver con lo que se ve en la fachada posterior, donde aparecen sendos volúmenes metálicos acabados en rojo brillante, con estructura del mismo tono, que rompen totalmente con esta sensación inicial. Ambos elementos están unidos por una baranda de cristal templado transparente, que acoge la terraza solada con tarima de ipe, que mira al jardín y a la piscina. Esta atrevida propuesta se sitúa en la primera planta y, en su interior, alberga parte de la suite principal y el cuarto de servicio. Los dos volúmenes se realizaron a partir de una estructura tubular metálica con aislamiento de poliuretano proyectado, cerramientos en cartón-yeso antihumedad y planchas onduladas curvadas. La luz natural juega un papel
En un espacio abierto, el sal贸n y el comedor se separan visualmente por un m贸dulo en rojo que acoge la televisi贸n.
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Junto a la mesa de comedor, se abre un gran ventanal que permite acceder a la zona de jardín y piscina. Un botellero de suelo a techo, en hierro y metacrilato, pone la nota de color en la cocina, con mobiliario en blanco.
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Planta baja
Planta primera
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esencial en estos originales habitáculos, al filtrarse a través de las claraboyas que hay incrustadas en la piel metálica y que generan en el interior un ambiente algo etéreo gracias a esta iluminación cenital. En cuanto a la parte interior de la vivienda, el programa de necesidades de la familia debía basarse, ante todo, en la comodidad. Para ello, no dudaron en derribar los muros de carga existentes y en rediseñar las aberturas de las fachadas con el fin de relacionar los espacios con su entorno, transformando su carácter y su sensación de confortabilidad. Los hermanos Serrano apostaron por unos interiores en los que se unificaron, bajo un mismo criterio, materiales, tonos, texturas e iluminación, proyectando una ampliación de los espacios percibidos, que no de los metros útiles. La puerta principal de la vivienda está protagonizada por un cerramiento en L, que aporta un toque muy personal al exterior debido a su diseño y, a la vez, permite filtrar la luz sobre las superficies interiores. El espacio que se abre tras el umbral responde a la zona principal de día, un espacio diáfano que integra salón – piano incluido–, cocina, comedor y distribuidor. Pese a
El laminado sintético con acabado cebrano de la planta primera confiere la calidez propia de la zona de descanso. La gama cromática del baño se completa con el rojo, presente en sus dos ambientes: lavabo/ ducha e inodoro.
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Los tonos blancos, negros y grises, que predominan en toda la vivienda, también están presentes en el baño.
tratarse de un lugar abierto, se evidencian dos zonas (el salón y el comedor-cocina), separadas visualmente por un módulo en rojo que acoge la televisión, y que representa el toque de color que da vida a una paleta cromática donde predominan los tonos neutros de blancos, negros y grises. Otro foco de atención, también en rojo, está en la cocina, amueblada con el programa Metrica de Mobalco, lacado en blanco. Se trata del imponente botellero, que va de suelo a techo, fabricado en hierro y metacrilato. “El mobiliario en esta planta es mínimo para ceder el protagonismo a la propia arquitectura interior de la casa”, declaran los autores del proyecto. Junto a la mesa del comedor, se abre un gran ventanal que conecta con la parte posterior de la vivienda, accediéndose así al jardín, revestido de césped y presidido por una piscina. La baranda de la escalera interior que une las dos plantas es una restauración de la existente, pero acabada con metacrilato. La primera planta –destinada al descanso– acoge la suite, dos dormitorios, un baño completo y la zona de servicio. Aquí la línea decorativa sigue las mismas pautas cromáticas que en la planta inferior. N Raquel Redondo
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