Una pequeña empresa de tecnología conectada políticamente pasó de haber tenido $684 mil en contratos públicos en seis años a obtener casi $10 millones en menos de tres años solo en el Departamento de Salud.
Un puñado de otras compañías obtuvo $140 millones para proyectos de tecnología durante la pandemia.
Fuentes del CPI apuntan a que tres entidades federales indagan sobre las transacciones.