La pol\u00E9mica sobre la reorganizaci\u00F3n parcial del \"mercadillo\"

MERCADILLO: UN TEMA ELECTORALISTA PARA EL EQUIPO DE GOBIERNO.

La propuesta de reorganización parcial del mercadillo no obedece a una cuestión comercial sinó a las urgencias electorales del equipo de gobierno, después de años sin aborar los problemas del barrio falguera.

Con el apoyo del grupo municipal de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), el equipo de gobierno aprobó la reorganización parcial del mercadillo de los lunes. La propuesta de ERC tenía sentido siempre que el análisis de las alternativas se hubiera hecho con el consenso de todos los actores. Hacer la reforma y a posteriori estudiar la reorganización es una decisión equivocada y sin sentido común. Pero para el equipo de gobierno los temas de consenso, de seguridad, de favorecer la actividad económica del mercadillo, carecen de interés ante su perspectiva y compromisos electoralistas. Por ello ha sido capaz de forzar una encuesta, coercitiva, diseñada desde el poder político y organizada por empleados públicos, parada por parada, en la que el 23,75 % manifiestan no estar de acuerdo con el proyecto de reorganización. Al 76,25% restante, que no les afecta directamente el cambio de sus paradas, aceptaran la imposición municipal ( resulta comprensible dado que estos no son afectados directos de los cambios) . Queremos recordar que en los últimos años el mercadillo se ha reducido de 190 a 102 paradas, el que el día de la encuesta tan solo hubiera 80 paradas es una confirmación de aquello que los responsables de la asociación de vendedores nos ha venido informando: el mercadillo está sufriendo una decadencia galopante. Para Veïns per Sant Feliu la aprobación de la reorganización es un mal acuerdo, sin el consenso necesario, y por lo tanto no lo damos por definitivo. En las elecciones municipales aspiramos a que se forme un equipo de gobierno riguroso y de sentido común y que a medio plazo se defina una nueva ubicación adecuada y de futuro en la nueva centralidad urbanística post soterrament.

La reorganización es un mal acuerdo y por lo tanto no lo damos por definitivo