SĂşper Vegetales por Israeli Steele
Cristóbal y sus padres se sentaron a la mesa. Su madre hizo bistec, puré de papas y alverjas. A Cristóbal le gusta mucho el bistec y el puré de papa pero no las alverjas. De hecho a Cristóbal no le gustan los vegetales. “¡Todo huele delicioso mamá!”, dijo Cristóbal a medida que comía. “¡Gracias Cristóbal! Cómetelo todo, incluso las alverjas,” ordenó la mamá. Su mamá sabía que a él no le gustaban los vegetales, sin embargo, él tenía que comérselos de todos modos.
“¡Tienes que comerte las alverjas para que crezcas sano y fuerte!”, alentó la mamá. “Pero mamá, a mí no me gustan las alverjas. ¡Por favor no me las hagas comer!”, imploró Cristóbal. “Lo siento mi hijo tú tienes que comer tus vegetales,” dijo el papá. “¡Maldición!” Se quejó Cristóbal mientras continuaba comiendo su comida. Él comió todo a excepción de sus alverjas. “Cristóbal, ¡no te levantaras de la mesa hasta que te comas tus alverjas!”, ordenó el papá. “Si papá,” contestó tristemente Cristóbal. Los padres terminaron su comida y dejaron a Cristóbal sentado solo en la mesa.