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A defender la corona en Nueva York
from 05/08/23
AGENCIAS - EL SIE7E
Iga Swiatek y Carlos Alcaraz comparten el actual liderazgo del tenis y, además, el reinado en el último Grand Slam del año. El US Open los recibirá como los últimos campeones y, en consecuencia, como los grandes favoritos a vencer en la nueva edición del torneo neoyorquino. ¿Cómo llegan y qué defienden en esta gira norteamericana sobre cemento?
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La oriunda de Varsovia alcanzó hace días las 70 semanas consecutivas como No.1 del mundo. Luego de su consagración como local en el WTA 250 de Polonia, la europea se prepara para cruzar el océano de cara a la gira que la tendrá como protagonista indiscutida. En este tramo del año tendrá nuevamente a Aryna Sabalenka pisándole los talones por la cima del ranking con la dificultad agregada de la defensa del US Open que ganó meses atrás. La primera parada será en el WTA 1000 de Montreal. Allí, el año pasado accedió a los octavos de final, igual que en Cincinnati, por lo que tendrá un importante margen para sumar si quiere amortiguar parte de los 2000 puntos del Abierto de los Estados Unidos.
¿Qué pasa con Carlos Alcaraz? El de Murcia, que un año atrás ganaba el US Open y se sentaba en el trono como el No.1 más joven de la historia en el ATP Tour, llegará al Masters 1000 de Toronto con un relevante espacio de mejora teniendo en cuenta su caída temprana en la última edición. Luego, en Cincinnati, la situación comenzará a complicarse a raíz de los cuartos de final que tendrá que defender en esta ocasión. Por último, al igual que Swiatek, tendrá Nueva York como la parada de máxima relevancia en este tramo del calendario. ¿Lograrán retener las coronas?
Cuando Cruz Azul cayó en penales esta semana, para ser eliminado de la Leagues Cup, completó pues el panorama más dantesco para los equipos mexicanos, que seguro caminarán entre el discurso de no haber considerado relevante el torneo o que bien, es un torneo que apareció como una oportunidad económica, que tenia que sacrificar lo deportivo. Nadie está peleado con el dinero, pero siempre, como se ha dicho en este espacio, las formas importan. Le quedó únicamente a los regios y al América, la responsabilidad de mantener hegemonía mexicana sobre el futbol de clubes de Estados Unidos y no es tarea menor, porque todo apunta a que la maquinaria se echó a andar en el vecino país del norte, para que Lionel Messi pueda festejar su primer título con el Ínter de Miami, que por si fuera poca, después de la Leagues Cup, comenzará una especia de remontada para buscar entrar al play in de la MLS, que ya es una misión bastante compleja.
Con Messi, el futbol se está mal acostumbrando a verle levantar trofeos a cuestas del propio futbol. Lo del juego ante el Orlando City (no vio la tarjeta roja y les endosaron un penal inexistente), pero es solo lo más actual, sigue ensombreciendo el mundial de Qatar, todos los “detalles” que facilitaron su acceso hasta la final y algunas cosas más, como un par de balones de oro que pudo ganar alguien más (2010 Iniesta o Xavi, por ejemplo), pero es normal que en nuestra era, lo mediático y las redes sociales sirvan para un análisis vano, se polariza todo y para algunos será ya el mejor de la historia, los románticos del balón de cuero y la cancha de tierra, continuarán viendo cómo todo se le facilita a la pulga.
América, Tigres y Rayados y como un agregado cultural inesperado, está los Gallos Blancos del Querétaro, que tuvieron a bien eliminar a los Pumas de la UNAM y continuar en un torneo en el que, los queretanos, continúan demostrando que, al parecer, son el único equipo que le entendió a esa posibilidad de no tener descenso, realizando un proyecto de continuidad y jugando al futbol de buena forma.
En fin que no hay forma de encontrar el balance en lo que está sucediendo en la Leagues Cup, pero es una muestra más de lo que van avanzando en el norte, mientras nosotros seguimos con la flauta, encantando aficionados con una idea en la que solamente ganan unos pocos.