Los elevados índices de siniestralidad en el Ecuador, se han constituido en una verdadera "pandemia" que ha ocasionado miles de muertos, heridos y personas con discapacidad que afligen a familias del país y causan graves perjuicios económicos al Estado, contraviniendo principios universales y constitucionales del derecho a la Vida. Proponemos: Cumplir con los pilares de la Década de Acción de la Seguridad Vial 2010-2020, declarada por Naciones Unidas, de la cual el Ecuador es signatario, cuyo objetivo esencial es disminuir en 50% los siniestros de tránsito. Dictar las políticas de Estado en "Seguridad Vial. Implementar los planes y programas de Educación y Seguridad Vial previstos. Evaluar sistemáticamente a las Escuelas de Conducción de conductores no profesionales y profesionales. Mantener el control permanente de los sistemas preventivos de siniestros como el uso del cinturón de seguridad, casco, sistemas de retención infantil, prohibición del uso del celular, entre otros.