Apuntes sobre la lucha del magisterio ecuatoriano contra la Evaluación Estandarizada
Edgar Isch L.*
Algunos antecedentes. El neoliberalismo ha sido capaz de crear un discurso propio para cada área social. En el caso educativo, sus planteamientos se concentran en una serie de aspectos repetidos en la región, en una especie de “El Consenso de Washington en Educación”1. El conjunto de características comunes a las reformas propuestas por los neoliberales para la educación de América Latina se pueden resumir en el siguiente razonamiento: la crisis de calidad educativa se la identifica como crisis de “eficiencia, eficacia y productividad”, a ella se suma una “crisis gerencial” y juntas serían la muestra de que “el Estado es incapaz de brindar calidad educativa” porque la “masificación para universalizar la educación trajo también la caída de su calidad”. La solución está entonces en la “competencia” para la que requieren de la descentralización y la privatización que lleve a la gente a “invertir en la educación de sus hijos”. Este discurso se lo impulsó en las últimas décadas a partir de los proyectos de las Instituciones Financieras Inter*Docente ecuatoriano. Integrante de la Red de Investigadores de la RED SEPA. Enero 2010. ISCH L., Edgar (2001). Educación Democrática para enfrentar a la educación neliberal. Ibarra-Ecuador.
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Intercambio
nacionales y particularmente el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, las que reemplazaron en la orientación educativa (y social) a organismos internacionales especializados como la unesco. Banqueros metidos a educadores. Los análisis de los proyectos educativos, en el caso del Ecuador, así como de los propios documentos de evaluación del bid y el bm permiten ver que los resultados no han logrado la eficiencia y mucho menos la calidad ofertada. En la auditoría integral realizada a la Deuda Externa en el Ecuador, se analizaron tres créditos educativos y uno de ciencia y tecnología. Los créditos educativos corresponden a los Créditos: BID 834/SF-EC suscrito en 1990 para el proyecto PROMECEB; BID 1142/OC-EC suscrito en 1998 para el Programa “Redes Amigas”; y, el crédito BM 3425/S-EC de 1992, dirigido al EB/Prodec. Los tres son los más grandes, de mayores recursos y con mayor influencia en la destrucción del sistema educativo nacional, resultado de una deuda ilegítima.2 ISCH L. Edgar (2008). BM y BID: deuda para imponer la política neoliberal en educación. Comisión para la Auditoria Integral de Crédito Público –CAIC-. Quito.
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