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Antonia Segura Segura

No entro un día al sindicato sin recordar a Antonia Segura Segura. Son muchas las razones porque son muchas y variopintas las vivencias compartidas.

A nivel sindical, tuve la extraordinaria suerte de coincidir con ella justo cuando ámbas fuimos elegidas secretarias generales en nuestras respectivas organizaciones, ella en la federación de Sanidad y sectores sociosanitarios en l´Alacantí-Les Marines y yo en la Unión Intercomarcal. En una época donde la incorporación de las mujeres a los órganos de dirección todavía no era muy numerosa, y donde los modelos de dirección sindical eran los tradicionalmente vividos en nuestro sindicato. Asi que las dos nos lanzamos a dirigir dos organizaciones muy importantes sin modelos de compañeras sindicalistas donde mirarnos, por lo menos en nuestro entorno más cercano.

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Antonia asumió unos años de direccion sindical durisimos porque fueron los coincidentes con la ofensiva neoliberal donde los recortes laborales, el planificado deterioro de los servicios públicos, la campaña orquestada de desprestigio de las organizaciones sindicales, y donde como sindicato tuvimos que afrontar una estrategia de movilización continuada dentro y fuera de las empresas. En esos años, las asambleas en lo ancho y largo de la comarca desde alicante hasta Denia , las reuniones, concentraciones, manifestaciones, huelgas generales, huelgas sectoriales, fue un continuo. Mantener el ritmo siempre alto, atender los problemas del dia a dia de los trabajadores y trabajadoras junto a las resistencias y movilizaciones que debiamos acometer en todos los sectores. Y ahí es donde Antonia se mantuvo siempre firme, a su condición de defensora del servicio publico en general, y de la sanidad en particular. Y firme también en su visión colectiva y de clase para estar no solo en los conflictos de su ámbito de responsabilidad sino también al lado de las trabajadoras de la limpieza, del profesorado, de las vendedoras del pequeño y gran comercio, de las trabajadoras/es de la hosteleria, de las mujeres victimas de violencia, de las personas dependientes, de pensionistas y de cualquier causa que supusiera la defensa de la gente, de las personas, de la clase trabajadora. Otro aspecto vital de nuestra compañera Antonia como secretaria general es que articuló los equipos de atención sindical para los sectores privados. Crear planes de trabajo a los que hacia especial seguimiento, una manera de tener bien ordenado el trabajo a realizar en función de unos objetivos a conseguir. Y en estos sectores también empezó a introducir de una manera sistemática el seguimiento en materia de prevención de riesgos y seguridad en el trabajo, llevarlo a nuestra respresentación sindical e incorporarlo en la acción sindical. Salud laboral y planes de trabajo, estas llegaron a ser sus señas sindicales.

YO quiero y admiro a mi compañera y amiga Antonia, y te echo mucho de menos camarada. Echo de menos tu atenta escucha y palabras en los momentos más duros, tu generosidad para consolarme o centrarme en los momentos más criticos. Las risas que nos echabamos juntas, las largas conversaciones. Me falta tu mirada de complicidad en esta lucha sindical que lideramos juntas. Pero aprendí de ti a mantenerme firme, la cabeza erguida, el corazón siempre amable, y la sonrisa, la sonrisa para recibir y atender a las personas que como nosotras solo tenemos nuestra fuerza de trabajo para vivir con dignidad. Mucho vivido con la compañera Antonia, y por ello muy afortunada en la vida por haber estado a tope con ella estos años.

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