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Carta
Por un lado, es la valoración que uno hace de sí mismo, la forma en que juzgamos lo que hacemos. Juzgarnos y rechazarnos nos produce un gran dolor: para evitar este dolor muchas veces levantamos barreras defensivas, nos enfadamos con nosotros mismos, nos cabreamos por no ser de otro modo ó nos empeñamos en querer hacerlo todo perfecto; fanfarroneamos (tal vez, para que los otros crean que no nos importa nada, cuando en realidad estamos sufriendo mucho), incluso algunas personas recurren a tomar drogas ó abusar del alcohol, como una forma de huir de ese dolor. Si sabemos valorarnos correctamente, estaremos seguros de lo que somos y de lo que hacemos.
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