Cómo cuidar y limpiar los anillos

El anillo de compromiso y las alianzas de boda son joyas cargadas de simbolismo y significado Por eso, las parejas buscan la forma de que luzcan siempre tan espléndidas como el primer día. Aprende con nosotros los mejores trucos para su cuidado y mantenimiento, ya que en función del metal usado necesitarán más o menos higiene.

Es recomendable hacerles una limpieza profunda al menos una vez al año. ¿Lo ideal? Llevarlas a un joyero experto para su limpieza y el ajuste de las monturas. Aunque en casa se pueden seguir algunos remedios caseros para salir del paso

A lo largo del día a día es preferible quitarse los anillos si se realiza cualquier actividad manual o si se manipulan productos químicos, como lejías, tintes o detergentes. Además de ir con sumo cuidado con ellos cuando se vaya a la playa, a la piscina o al jacuzzi y/o cuando se practique cualquier tipo de deporte físico.

Las aleaciones de oro tienen una mayor durabilidad, mientras que las de plata o de acero se ensucian con mayor facilidad

Anillos de platino: basta con emplear un poco de agua con jabón y un cepillo de dientes suave para su limpieza.

Anillos de oro: lo habitual es pasar un paño suave impregnado de un limpiador especial para oro de venta comercial. Aunque si se trata de oro blanco, es mejor llevarlos al joyero y que les dé un baño ultrasónico que los deje como nuevos.

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El anillo de pedida y la alianza de boda son dos de las joyas más valiosas. Por ello, es recomendable hacerles una limpieza profunda periódica en una joyería. 1. 2. 3. 4. 5.

Anillos con piedras preciosas: pueden sumergirse en un recipiente con agua, un poco de lavavajillas y muy poca cantidad de amoníaco. Y si bien las gemas son sumamente duraderas si son de calidad, es mejor guardarlas en un sitio aparte para evitar cualquier desgaste, roce o rayadura.