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Ludoteca Lele

2 Arcade

Arcade Gallery tiene iluminación neón y presumiblemente, el mayor número de maquinitas juntas en el mismo lugar. Además, cuenta con una exhibición sobre la historia de los videojuegos.

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3 Circo

Scream Park Carnival te va a asustar con tres actividades multisensoriales; la mansión, el sanatorio y el hombre invisible. Todas basadas en la historia de Circo Valero.

4 Foro

En el Foro Cultural en Extinción se organizan fiestas queer. Además, diversos influencers y artistas realizan eventos aquí. à Ex Fábrica de Harina Primavera 106, Ángel Zimbrón. Metro Refinería. Lun-dom, 12-10pm.

DESPUÉS DE UN GRAN PERIODO DE ABANDONO , por fin las infancias tienen un nuevo espacio de convivencia al nororiente de la Ciudad de México. Particularmente, en el Faro Aragón. Bajo el nombre de Lele, como la famosa muñeca mexicana, aparece esta nueva ludoteca con talleres y distintos materiales de aprendizaje, así como juguetes y zonas de interacción para las y los niños. Aquí, además de aceptar personas de todas las edades, también tienen oportunidad de ser partícipes quienes tienen alguna discapacidad, ya que las talleristas están preparadas para atender necesidades particulares. Además, como parte de esta nueva propuesta, toda la familia puede integrarse a las dinámicas. Si deseas asistir con tus pequeños, sólo es necesario llegar al lugar y registrarte en su lista física. En la entrada encuentras un pizarrón con todos los talleres que imparten durante el mes. Existen dos horarios, de 1-3 pm y de 4-6pm. Eso sí, tienes que esperar a que tus niños acaben su actividad, pues no deben quedarse sin supervisión de sus cuidadores en ningún momento. Te recomendamos llegar 15 minutos antes de cada actividad ya que el cupo está limitado a 20 niños.

La región más transparente se ha convertido en uno de los lugares más contaminados de México. ¿Cuál es la calidad del aire en la CDMX?

Por Rodrigo Broschi, Mattza Tobón y Gil Camargo

RESPIRAR: LA FUNCIÓN BÁSICA DE INHALAR aire para que los pulmones obtengan el oxígeno que necesitamos para vivir, literalmente nos está matando. Aquella hermosa y limpia región en la que se fundó la Gran Tenochtitlán—a la que ahora llamamos Ciudad de México—, cada vez es más gris, pero sobre todo, mortífera.

Salir a las calles de la ciudad es todo un reto, entre ellos, respirar. Es imposible caminar unas cuadras y no sofocarse, sentir picazón en ojos y garganta. Nuesto ambiente, nuestra propia casa nos está envenenando con grandes cantidades de gases nocivos que están afectando, no solo a la CDMX, sino a todo el mundo.

La industrialización nos hizo la vida más fácil, pero nos la está acortando. Según El País, en la Ciudad de México, la contaminación acabó de forma prematura con la vida de entre ocho mil y 14 mil personas. Durante 2022 enfrentamos seis contingencias. Poco —o más bien nada— nos duró el gusto de celebrar Año Nuevo; comenzamos 2023 con una contingencia por PM2.5 que se anunció a las 11am y se levantó a las 4pm.

La contaminación del aire nos está sofocando. Hay que dar un profundo, tóxico y doloroso respiro y poner atención a las cosas que nos están afectando directamente y que atormentarán a las generaciones futuras. Es momento de actuar, por eso dedicamos este número a la calidad del aire en la CDMX.

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