Tito Vasconcelos ORGULLO POR SIEMPRE

Cuando el profesor, director y activista Tito Vasconcelos aceptó hablar con nosotros, dijo que había un par de temas que quería tocar, temas que, al platicar con él, me di cuenta que eran muy vigentes con la marcha de este año. ¿Cómo organizar a la comunidad de toda una megalópolis? Es difícil, pero, él cree que el primer paso es sentarse a hablar. Su mirada es de suma importancia ya que formó parte del Grupo Lamba de Liberación Homosexual, además de participar en lo que hoy se considera las bases del Teatro Gay en la ciudad.

En los 80’s. ¿Qué tipo de activismo realizaste y cómo sentías la situación general?

No sé si yo le diría activismo, pero empecé con un espectáculo que produjo la universidad. Se llamaba Y sin embargo se mueve, era una obra testimonial y fue una salida del clóset en escena, algo que en ese momento nadie esperaba. Y un poco antes participé en un montaje llamado Claudine en la escuela donde el personaje principal era lesbiana. Fueron esas dos obras las precursoras de lo que luego se llamó teatro gay.

Sobre la situación general: existía la policía secreta, no había lugares de reunión específicos, pero había ciertos puntos de en donde los homosexuales nos podíamos encontrar, por ejemplo, la Zona Rosa. Pero los sitios de ligue o de encuentro había que buscarlos en espacios alternativos, como parques, esquinas particulares de la ciudad, los baños de los cines o los Sanborns. Aunque ya había valientes como Juan Jacobo Hernández, Nancy Cárdenas, Carlos Monsiváis, Luis González de Alba, personas y grupos que empezaban a trabajar por los derechos de la comunidad homosexual.