Poesía verano 2023

Taquigrafía

Todos los poemas llevan un misterio dentro todos menos uno el mas hermoso de todos EEYA

baila en un círculo de fuego Y encogiéndose de hombros recibe el desafío

El rocío oxida nuestra alma. Como cuchillos afilados Oxida nuestros veros Fríos como el acero

Semblante momento Magullados y desvalidos a nuestra extraña ley vegetal mientras en el fuego muchos versos fueron mal dichos ahogándose entre lamentos y llantos en un mar de lagrimas de cristal azul

era el sentimiento tantos lamentos fuera tantos días tantas horas para perder un hervor tan trivial

entre el día y la noche entre el sol y mi corazón divago por doquier mientras apeándose en la rueda del presente nos perdimos por las colinas como caballos salvajes libres a través del viento que sopla en nuestra cara en estos días de verano somos libres podemos saltarnos todas las reglas como en una estación del presente como en el diván de nuestra imaginación como en un orfeón cotidiano nos perdimos en cerrados en nuestra caja de los sueños entre el presente y pasado miramos al futuro apeados en el anden del deseo pronto será un grato recuerdo a los hologramas de nuestra mente que divaga sin rumbo perfecto

Estaban los dos en la cama abrazados.

Me gusta tu panza de luna pálida, de belleza de una estrella... en el agua reflejada, y tu montículo de pelo llama al deseo... mientras tu mirada dice: "Deja eso".

Estaban los dos en la cama abrazados y en un momento de ternura, ella le dijo a él:

- ¿Me quieres?.

Él sonrió, le rodeó la cara con las manos y con una sonrisa le dijo:

- No se pregunta si te quieren. Se espera, se desea, incluso a veces no te quieren como tú deseas, pero no se pregunta.

De repente, él quedó pensativo. Bajó la mirada, volvió a levantar la cara con los ojos nublados, y preguntó:

-¿Me quieres?

- No.

El gato enamorado

Todas las noches, camino a casa, me acompañan los gatos de mi barrio. Una noche subía la loma y al doblar la esquina vi de repente un gato, con el cuerpo negro como el carbón, sentado esperando a la entrada de una casa. ¿Qué Esperaba? No lo sé.

De repente desde la casa salió una gata y se quedó quieta, mirándolo. El gato negro también se quedó quieto, mirándola sin hacer nada. Finalmente la gata se fue y el gato se quedó quieto, como con el corazón roto mirándola mientras se iba.

La historia no sé como termina, pero al poco tiempo aparecieron unos gatitos negros por el barrio.

No me mires, te veo

Es protagonismo, chulería pero ...

Ahí queda como queda si..

Quizás en el desayuno compartido

Tus ojos volverán hacia mí ...

Sigo sin ver lo que miras, ojos

Color en luz, penumbra , amor

Me encanta ese matiz verde

Mezclado con marrón oscuro

Morena eres tuya (fuiste mía)

Y tuyo o mío soy, deja de mirar

O mírame más, deja de mirar

Corazón de paloma que te ocultas.

En mi espacio secreto te llevo

Sabes cuál es, yo también

El camino continúa, morena

De ojos que me miran y enamora.

Llegas a mayor cansado

Cansado de vivir, ver, oír

Quieres huir despacio

Sabes estar tranquilo.

Despacio sigues caminando

Viendo pasar el recorrido

Recordando tiempo pasado

Sueños cumplidos, realizados

ánimo, la meta está cerca

Dudamos en llegar dudando

Prueba fácil de superar

Creo en Dios por ánimo

Pero... la duda queda, DIOS

Fe, esperanza, caridad, la duda

El final es en breve, rápido o no.

Observo el horizonte con risueño rostro entre el mar de nubes de tu esfera; eres la ruta, el corazón de cera, que anda mi fuego cómplice del leño.

Rayos exóticos de miel y ensueño rodean tu sabor a primavera, te quiero, déjame que yo te quiera en el fiel laberinto de tu sueño.

Bufón Universal es tu conciencia y aridez de valores en ti crece. Burla del desatino, hebra que mece nenúfares en calles sin paciencia.

Resistes con poder la decadencia, creas tu pentagrama, alas de trece, tu alma calla y tu rostro palidece, pero ya no rechazas mi presencia.

Un lago de gargantas y de armónicas se evapora en un tiempo desquiciante de hipocresía, síndromes y tónicas.

Que mi bufón inspira delirante, sabiendo que razones salomónicas sólo para uno existen: ¡adelante!

Acaricia, desgarra suavemente en un instante en el que cruzan dichas por donde nadie nunca dejó huella.

Ponme la rosa de mi pecho, ardiente, la flor de la que tierna te encaprichas, dulce flor pura de lo eterno bella.

Juan Carlos Almarza Izquierdo

SINSABORES DE VERANO.

Ella esta ahí sentada en la luna de valencia, donde tiene su mirada aquella mirada perdida, que se balancea por la pendiente amiga de mi rima, cuando todo tiende a amainar el pasajero roto, el billete arrugado en la estación del destino, donde tengo mi corazón arrepentido de las horas donde duerme, en el acicate de mi soledad tu me alejas de aquellos mares negros donde me arrepiento de sumergirme

EL PRINCIPITO.

A veces el corte es singular la herida sangra, poco a poco sin saber el porque, la palabra que no se dice el fundamento del que no se habla, las praderas verdes y verde mi alma, que baila con todas las flores blancas del arroyo singular que la profesa. Tengo el destino echado la marca del diablo donde vendí mi alma,

y digo quiero velar este barquito de papel donde guarde mi esperanza, que dicen que es lo ultimo que se pierde y miro a la luna con fulgor de niña, ella me responde con calor de noche donde estarás en el umbral de mi mirada, cuando grito que me llamas y entierro mi pincel en gotas de agua, praderas del pensamiento cuando la noche nos llama Sentido y sensibilidad. Aparco el coche en su hueco en el suelo de mi explanada.

en el cruce de carreteras al pasar le di al botón rojo para que se detuviera, tengo el hilo de viento en mi cabecera la piedad famosa en el rio constelar de un sol cualquiera. Esta noche me visto de ventura la piedad de mi amargura consagrada, en una dicha inoportuna tu valor en la ensenada de mi juventud.

Malparida mi rima. Malparida mi patria

y mi condena esta guerra sin cuartel que me traigo de la mano de un coronel angustiado versos del revés.

Aparco el desembarco a Normandía.

La irisada sonrisa de aquellos esclavos, el vino añejo de tantos años que vendrá a verme pronto, el reguero de esta noche de fundamento. El altar de un buen santo amargado por sus costumbres, tengo el alma dorada de un corazón transeúnte, la planilla clavada de mi tinta aparente. El marco que se achico en presencia mía, la biblia es mi confesión.

Por mis tantos pecados el grito se oyó,

CORAZON DEL SENTIDO.

Sueños rotos, en el goce de mi alma reclamo mi sonata, como una niña maga el verdor de mis ojos las hojas blancas, el ahogar de un llanto nocturno el espigar de mi amado sonámbulo despertar, en mis hojas en blanco serenata de confusiones tengo mis intenciones negras y en vela me espanto la guerra

en la parroquia a tu lado. La extremaunción saludó y se persignó mi hermano.

La negra y selvática siembra apura mi corazón indiferente a lo que diga la gente.

Paseante de un solo camino.

La guerra trivial de los montes equinos.

Vitalidad.

de los cien años, a la postre el postre recrimina mi valor en el terreno ausente del tuyo, varios marginados seguimos existiendo aunque la noche no quiera decirlo, aunque el mar recoja mi rostro en dos ojos que se zambullen en estanques rotos, tengo el corazón sensible el arma plausible, entre enredos de mi noche estampas de puro hogar confundido,

en el momento de confusión arremeto contra el alma y el valor de tenerte.

Acicalo mi nombre.

Corazón del sentido.

Te quiero contar .. el viento el tiempo no se detuvo con mi mirada, el verso encasillo este olvido de mi olivo verde, verde mi alma.

Te quiero contar.. que las caricias se perdieron en esta calma de mi fuero interno, que las palabras son ensoñaciones del alma que parpadean esta nocturnidad, el viento nos trajo el ahora donde nos consagramos como poetas muertos.

Te quiero contar..

que el tiempo se adormece como mi alma, en hilos de enjambre de verbos y vientre de león furioso, gateo por tu nombre en fornituras condicionadas por aquel verso de plata.

Piedad de mi alma te quiero contar.

Tiempo.

hoy me siento averiada como si estuviera ajada en ese sitio de la barriada donde todo donde suena a la balada no suena como como asomada a el balcón de la bancada y como si mi alma estuviera grillada saldré de aquí reforzada con una vida renovada

ANTES Y AHORA

Ya no asoman los ángeles por aquellos charquitos que quedaban en el roquedal al bajar la marea. Allá donde tantas veces pesqué ínfimos peces con una caña diminuta que me hizo mi abuelo, pececillos que después retorné al agua.

Entonces miraba el horizonte y no veía otra cosa que mar, cielo, montañas.

Ahora el horizonte es la patria de nadie, el lugar de los exilios, la unión de mar y cielo prorrogada al infinito.

EL RE-NACIMIENTO DE VENUS

Venus me asiste y me protege. Las rosas surgidas en su re-nacimiento cobran vida en mi propia transmutación interna: de oruga a mariposa, de mariposa a oruga en cambio eterno, en semilla siempreviva y siempremuerta.

Venus que renace. Venus que verdea.

El otoño y el verano ***

Se encontraron calle abajo el otoño y el verano, viviendo los dos la vida cada uno por su lado.

OTOÑO

Tú eres presente ahora, fuente de sana alegría, paraíso, paz y aurora, descanso del alma mía, calidez en mi silencio, vela, antorcha, luz y guía, abrigo de mis tormentas, canciones y melodías.

VERANO

Y tú eres mi sendero, el mañana de mis días, mi manantial sereno, mi ternura, mi caricia. Me llevarás por tu cielo como una hoja caída, elevándome en tu vuelo, devolviéndome la vida.

¡Quién sabe si en el futuro, en un tiempo no lejano, se fundan en el crisol el otoño y el verano!

Fuego

fuego que todo abrasa en su camino súrteme de tu sed y tu presencia crepita con tu hervor y con tu ciencia con tu rojizo afán casi divino

Vientre tan abismal como dañino que me lleva al ardor de tu demencia me produces como una infausta influencia que me arda de amargor el intestino

Ese oro como lapa que se aferra al bolsillo lacrado de su entraña esa prenda tan vil y tan tacaña que de su carestía, nos aterra

ese don que nos teje y nos encierra esa alienación, esa tela araña es un perverso vicio, una patraña que a todos envilece y nos soterra

ruin metal del que nunca nos libramos que solo muestra lujos y apariencias ¿Es lo único en la vida que buscamos o hay algo más en nuestras existencias que sin reparar, tal vez, lo negamos?

Ojalá el amor fueran sus esencias

quémame con amor tu dulce llama despójame el sabor con tu pecado porque todo en mi ser se prende e inflama todo arde lento bajo mi costado todo en tu latigazo me reclama

vienes de la palabra sin derrota del mundo y sus vientos apacibles de voces inefables e invisibles de ese sueño valiente que rebrota

de la verdad leal que no se agota de tus sendas tan sabias y plausibles de tus besos humildes e infalibles del la tenaz memoria sin derrota

de la llama de innatas gracias, vienes en el nido de amor, acurrucada con dádivas y versos, me sostienes en temblores de júbilo, mi amada

me sujetas, me guardas, me mantienes socorrido esperando tu llamada

La rosa blanca que plantó el poeta se supo viva, única, preciosa, y no se conformó con ser la rosa que ve pasar la vida en su maceta.

El poeta le dijo estate quieta porque yo te hice flor, no mariposa, que tú eres la belleza que reposa y la quietud te enmarca y te completa.

Y fue la bella que reinó un momento un asombro de gracia y hermosura. Luego se marchitó. Con un lamento se desmontó su linda arquitectura y sin mostrar ningún remordimiento la arrojó, sin más, a la basura.

Mal pagan los poetas