LÍMITES SANOS

Establecer límites sanos en tu entorno es un factor importante si quieres procurar tu bienestar mental y emocional, pero si te resulta una actividad imposible, utiliza herramientas de comunicación asertiva e inteligencia emocional que te permitirán ser claro en lo que deseas.

Los seres humanos por naturaleza somos sociales, la evolución que hemos tenido a través del tiempo ha sido gracias a la comunicación y el trabajo en equipo, por lo que la mente juega un papel muy importante. Si la mente humana se encuentra en riesgo, intentará protegerse y aceptar la situación o las peticiones que están pasando en ese momento por temor al rechazo, pena o miedo de ser juzgado, sin embargo la mente siempre puede reaprender y transformar sus creencias.

Las libertades propias acaban cuando comienzan las de los demás, esto lo aprendemos desde la infancia. Los conflictos comienzan cuando el límite entre una situación y otra no están correctamente establecidos o incluso si no están bien definidos. Cuando las personas no saben poner límites sufren distintas consecuencias negativas psicológicas. Es importante saber poner límites dentro de nuestro círculo social día a día.

Los límites en las relaciones se pueden expresar como la situación de expresar clara y exactamente a los demás, lo que necesitamos y lo queremos, estos dos factores hacen que las relaciones sociales funcionen de la mejor manera. Cuando una persona establece límites desde un inicio, está comunicando que sus necesidades son importantes.

Aprender a poner límites sanos a tu alrededor es un ejemplo claro de amor propio. Te compartimos algunos ejemplos que puedes aplicar a través de la inteligencia emocional.

Lo siento, solo trabajo en mi jornada laboral Gracias, pero no puedo, mi prioridad es mi salud mental No voy a responder a tu pregunta por qué me incomoda

No voy a permitir que me hables así, cuando estés más tranquilo podemos hablar Respeto tu opinión, pero tengo yo la mía