Tucumán, un encanto natural. Tucumán ofrece la magia de los contrastes y la diversidad en sus paisajes. Resulta difícil creer que en la más pequeña de las provincias argentinas, conviven cañaverales y verdores impenetrables junto a cielos azules sin interrupciones y nieblas que cubren horizontes. Llanuras extendidas al naciente y montañas de telón de fondo al oeste con cumbres que superan los 5.000 metros, climas secos y húmedos, selvas exuberantes, manifestadas en las célebres Yungas y tierras áridas, modernas ciudades, apacibles pueblos y ruinas indígenas, hacen de esta provincia un lugar obligado para conocer. Para quitarse la duda, nada mejor que internarse en sus paisajes de película, degustar su gastronomía, disfrutar de su folklore bien vernáculo e incluso hermanarse con sus siestas sagradas.