s o t n Cue s o t r co
I I I o Tom B G E ° 10 "A" Compilación historias
de
escritas
estudiantes
por
PRESENTACIÓN Y AGRADECIMIENTO El área de Lengua y Literatura de la Unidad Educativa Particular “Oviedo” se complace en presentar la compilación de Cuentos Cortos escritos por los estudiantes de cada uno de los cursos de los subniveles Básica Superior y Bachillerato, durante el año lectivo 2021-2022. Estos cuentos son el reflejo de un arduo proceso de escritura en el que los estudiantes han expresado su capacidad creativa y narrativa, y como muestra de esto, a través de cada una de sus páginas cuentan una historia de su autoría, donde han logrado crear personajes, escenarios, conflictos y desenlaces que los cautivarán. Cada cuento es distinto, su temática y estilo están determinados por la personalidad y visión de los alumnos, por lo que leer cada uno de estos será una experiencia distinta pero gratificante. Este proyecto no podía haberse llevado a cabo sin la participación y entusiasmo de las estudiantes, a quienes agradecemos y felicitamos por todo el esfuerzo puesto en cada grafía que aquí se recopila. Es importante, además, resaltar la predisposición de la Institución por impulsar este sueño que ha tenido el área de Lengua y Literatura, de formar escritores y escritoras dentro de cada aula de clase. Esperamos que se deleiten en cada una de estas páginas y que este proyecto sea solo el inicio de un largo y próspero camino de escritura creativa en sus vidas
El amor es un veneno disfrazado de dulce Autora: Karla Arévalo
En un lugar de Japón en un barrio tan pequeño y de bajos recursos vivía una chica llamada Lía con 17 años y era una chica muy tímida y con las personas que la rodean siempre saca una sonrisa muy forzada, pero intenta hacer sonreír a todos con los que está pero su corazón estaba lleno de tristeza ya que en su vida sus padres nunca estaban con ella en sus momentos importantes y es una chica de muy pocos amigos y esta historia es sobre mi vida. Un día en su colegio llego una chica nueva pero demasiado bella como las chicas de modelo que ve en la televisión ya que los ojos de aquella chica eran de un color verde claro y su piel muy blanca como la nieve, en ese momento que entro ya me había dado cuenta de que ella vivía en un mundo muy diferente al mío, cuando ella se sentó al lado de una compañera no me importaba mucho pero en si no puse mucha atención a su nombre y se veía que ella era una chica que sabe socializar con muchas personas y eso era la mas gran diferencia entre nosotras y se veía que los chicos iban detrás de ella igual que abejas buscando miel. A pasado una semana y mis amigas seguían sin agradarle la chica nueva y eso me tranquilizaba mucho excepto por mi mejor amiga ya que cada vez se alejaba de mí y e iba con ella a todos lados, y claramente eso me dolía ya que ella era muy importante para mí y mi mejor amiga se llamaba Kiara y mis amigas se llamaban Serena y Michel, para tenerme distraída del tema que mi mejor amiga me estaba olvidando siempre iba a mi curso de baile y el bailar me gustaba mucho ya que la música era como un dulce para mis oídos pero bueno ay tenía dos amigas y un amigo que también los apreciaba mucho y sus nombres eran Denise, Juli y Alex, los dos últimos eran hermanos ya que la mayoría del tiempo en el curso siempre la pasaban juntos y yo lo pasaba con Denise una chica que llega al nivel de aquella chica nueva ya que los ojos de Denise eran un color miel claro y su cabello era dorado como el oro y su piel igual de blanca como la nieve pero al menos Denise no me hace sentir como que no podría estar a su nivel. Un mes después todo seguía empeorando Kiara ya no me hablaba ni me escribía y cada vez en el colegio se acercaba a esa chica nueva y se olvidaba de mí y mis amigas y mis padres empezaron a alejarse más de mí y seo fue algo que me empezaba a romper más, al ir al curso un chico llego su piel era blanca y sus ojos color azul claro y su cara tenía una alta definición de belleza eso me atrajo mucho a él y su nombre era Erick y justo ese día en el que el llego nos pusieron en pareja y me asignaron con él y mi corazón latía muy fuerte que hasta pensaba que se me iba a salir, al acercarme a él yo no 1
sabía que hacer tenía tanta vergüenza que en ese momento podría a ver muerto si quisiera, el tomo mi mano y se acercó más a mí y con una cálida sonrisa me calmo y acaricio mi cabeza suavemente y solo se presentó conmigo y me dijo que tenía unos lindos ojos y una bella sonrisa, y sentí algo que no había sentido nunca y no quería dejar de sentir eso. Al día siguiente al despertar escuche unos gritos muy fuerte y al ver que era fueron mis padres discutiendo y lo que me impacto fue ver que firmaron unos papeles de divorcio y al verme solo me dijeron que me cuidara y simplemente salieron como si nada hubiera pasado, en ese momento me derrumbe completamente y al intentar llamar a Kiara nunca me respondía y Salí a buscarla por todos los lugares hasta que la vi abrazando a aquella chica y llevaban el mismo co0llar y me desmorone cuando Kiara declaro que su única mejor amiga era ella, eso fue el punto clave donde ya mis ojos se empezaron a nublar y simplemente me fui con una lagrima a punto de caer, al llegar a mi casa y a punto de abrir mi puerta solté mis llaves y empecé a derramar lágrimas que eran de una ira gigante pero de un dolor grande y caí sobre mis rodillas y solo con una irada fija a la puerta todo lo que paso ese día corría por mi cabeza, pero unos minutos después un calor extraño sentí y unos brazos rodeando mi cuerpo que me hizo sentir segura en donde estaba al voltear a ver era Erik viéndome fijamente con una mirada triste que solo apretó mi cuerpo con el de el que empecé a sentir que él era un lugar seguro en el cual podría estar sin problema la cual solo sonreí y lo mire y lo que le dije fue un gracias y me levante, extendí mi mano para que el la tomara y al levantarse solo me dijo que mañana me recogía para platicar y yo solo asentí y él se fue sonriéndome desde lejos. El día en el que él me vino a ver salimos al parque, fuimos a comer y siendo sincera él es muy gracioso como un niño pequeño y eso me gusto de él, me preguntó sobre él porque estaba llorando esa vez y se lo dije todo y el solo me miro como si quisiera golpear algo pero a la ves tenía una mirada de decepción y simplemente tomo mi mano y me abrazo fuertemente diciendo me todo estará bien y yo le creí, cada día el me iba a ver e íbamos al curso juntos salíamos a comer y descubría más de él y me encantaba hasta sus pequeños defectos eran adorables para mí y así pasaron 5 meses hasta que me enamore completamente de él, en el colegio seguía doliendo ver a Kiara con esa chica pero tenía a mis amigas estando para mí y en la hora de irnos del colegio Erik siempre me estaba esperando con flores y salíamos a divertirnos y él era como mi mejor amigo y me di cuenta que lo que pienso de nosotros es; si yo digo que no él dice que sí y cuando le digo que pare el 2
solo sigue y sigue haciéndome sonreír él es la parte de mí , la otra parte que nunca seré y es la parte que me vuelve loca de amor por él. Esos 5 meses fueron los mejores días de mi vida me sentía feliz, un al casi faltar un mes de graduarse y justamente el mes en el que iba a cumplir 18 al ir al curso mi amiga Denise solo miraba a Erik eso me puso un poco celosa pero ella era mi amiga y confiaba en ella así que no hice mucho caso y ese día Alex se acercó a mí para que bailara con el pero pensaba en decirle no pero cuando volteó a ver a Erik lo vi bailando con Denise así que supuse que era momento en dejarlo que baile con alguien más así que acepte en bailar con Alex, después de eso Alex me abrazo y me alegro le dije que gracias por bailar conmigo pero cuando vi atrás de mi estaba Erik mirándome tan enojado que simplemente se fue y al tratar de alcanzarlo Denise me agarro fuertemente del brazo y solo me dijo que se fue porque tenía algo importante que hacer así que solo espere hasta el día siguiente, el ya no fue a verme y fui sola al curso y él no estaba y tampoco Denise fue pero Alex y Juli me hacían compañía en el curso y así paso unas dos semanas dio que Erik ni Denise aparecieran y empecé a preocuparme pero cada vez que iba caminando a casa de Erik no había nadie y un día que fui a verlo tampoco estaba y lo que salió de mi boca fue; “ Y hoy ya no estas, te busco en cada suspiro y lo peor de todo es que solo te encuentro en mis recuerdos”. Y asi me aleje tristemente otra vez de la casa de Erik pero al ir a mi casa en el parque encontré a Erik y Denise tomados de la mano…. Sentí que se cortó mi respiración y que mis piernas estaban a punto de hacerme caer y se hizo un nudo en mi garganta que me impidió hacerme hablar y solo me quede observando ese momento hasta que ellos se dieron cuenta de mi presencia y Erik vio como si estuviese viendo un fantasma o un espectro y Denise me veía igual que Erik y ellos al acercarse a mi yo solo retrocedía cada vez más hasta agarrar fuerza y correr a mi casa, y al llegar solo me recosté en mi cama y empecé a llorar toda la noche hasta que el sol apareciera. Paso un mes desde eso y no salía de casa solo iba al colegio y mi profesor me propuso una beca para estudiar a estado Unidos y acepte ya que sabía que no tenía nada que perder pero esperaba hasta que Erik se fuese de la puerta de salida para irme a casa pero sentí que alguien tomo mis hombros y me dio una vuelta y al ver qu8ien era fue Erik con lágrimas y se fue como una apuñalada a mi corazón y solo lo empuje y el grito que lo perdonase pero mi corazón ya estaba tan ropo como para aceptar otra oportunidad y 3
le dije; “ No sé si dolió más el pensarte o el saber que tu no lo hacías”…. Simplemente me encogí de brazos y le dije adiós y solo tomo mi mano y dijo; “A veces recuerdo cada risa, cada caricia, cada momento…. Y no me daba cuenta de lo tanto que te amaba hasta que te perdí.” Y así solo solté su mano y me fui antes de arrepentirme por alguien que en algún momento fue mi lugar seguro y así partí y decidí volver a empezar mi vida en estados unidos aunque sigo buscando a alguien en el cual yo me sienta amada…. Fin.
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Recuérdame Autora: Evelyn Avila
Hay momentos de la vida que parecen definirnos, momentos a los que volvemos una y otra vez, mi vida antes de él era muy simple y estaba muy marcada, ahora después de él es solo un recuerdo. El sonido de las llaves del carro y mamá gritando: “Es tarde” agarro mi mochila deprisa y salgo corriendo, mi papá en la puerta con mi comida para servirme en el receso, me subo al carro y toda ansiosa viajo a mi nueva escuela Fairmont Prep Academy. Cuando llega el momento, mi corazón se acelera de alegría, y entro al salón de clases. —Buenas días estudiantes —dice esa voz que me aterroriza, es el tutor que estará con todos nosotros este año escolar. Todos me quedan viendo porque soy la nueva, presiono la mano contra el pupitre y delineo con el dedo la figura una flor, tan perfecta. El tutor llamado Abelardo me alcanza a ver y me llama a la pizarra para presentarme con mis compañeros. Me levanto y me paro frente a todos —Hola me llamo Abril me pueden decir Ari o Abi, tengo 16 años, soy una chica muy distraída y me gusta ayudar a todos— Al terminar la primera hora una chica de cabello corto, casi por los hombros, con unos hermosos ojos color almendra y grandes, se me acerca, su nombre es Tessa, hija de la rectora. —Me llamo Tessa— me dice, sacando el tenedor de su envoltorio. Así de cerca me doy cuenta de lo adorable que es por las expresiones de su rostro. Quiero hablarle, pero se me hace difícil, eso nunca me había pasado. —Yo no muerdo, deja de lucir asustada— comienza a comer. Toda alivianada le comienzo hablar, hasta que pasa un grupo de 3 chicos al frente mío y miro a un chico en especial, de cabello negro rizado, con su camisa blanca y una mochila, los dos cruzamos las miradas y nos quedamos un rato con el contacto visual, Tessa se dio cuenta y me advierte que no me conviene llevarme con él. Yo con toda la intriga le pregunto porque no y ella me dice —Su nombre es Dylan, es su último año para graduarse, le gusta molestar a los estudiantes nuevos, y por la mirada que se dieron, eres su nueva presa— No le creí y me fui al baño. Al salir saqué mi jugo de fresa y Dylan está al frente mío, estaba nerviosa, el me mira fijamente y me lanza el jugo en toda mi ropa. Todos me miraron y se rieron. Salí corriendo al baño para secarme, pero estaba toda mojada, mi primer 6
día de clases y ya me andan molestando. En ese momento llame a Noah para que me traiga ropa y poder cambiarme, él es mi mejor amigo desde la infancia, un chico adorable. No puedo evitar la decepción que siento. Llega Noah y me queda viendo desde lejos, se empezó a reír hasta quedarse sin aire. —¿Cómo te ha ido? Me lo pregunta riéndose. Esperaba esa pregunta. Lo escucho reír y me encanta, su risa es contagiosa. —Mi primer día de escuela no ha sido tan malo, y el hecho de que pude hacer más amigos me pone feliz, pero lo que me arruino a las últimas horas fue el odioso de Dylan. — ¿Dylan? —Si un niño que me hizo todo esto, luego te cuento. Noah me llevo a mi casa y se quedó a ver una película conmigo mientras comemos palomitas con mantequilla. Después de estar toda la noche sin poder dormir y pensar en la vergüenza que me hizo pasar Dylan, le quise dar una pizca de su propia medicina. Al siguiente día antes de que él llegue a su salón, estuve preguntando a varios de sus amigos el lugar donde se sienta, para ponerle pegamento en su puesto. Salgo corriendo al escuchar su voz y me escondo, Dylan se sienta todo tranquilo hasta que escucha que todos se ríen, el intenta pararse, pero no puede. Me acerco dándole una risa — Favor con favor se paga— y le guiño un ojo. Desesperado se levanta muy rápido y se le rompe el pantalón, creo que si me pasé con lo que le hice. Ya era recreo, Dylan con un saco amarrado a su cintura, se acerca y estira su mano para saludarme, le estiro mi mano, el me aprieta contra la suya y me empuja hacia él con fuerza, estuve tan cerca de Dylan que pude sentir como respira. —Muy chistosita— me lo susurra en mi oído, me pongo nerviosa, porque nunca pensé que con solo una palabra sintiera un cosquilleo en mi estómago. —Eres muy molestoso— Me separo rápidamente. —Pero te gusta — y me pone contra la pared con una mano encima de mi cabeza. — ¿No me vas a dejar en paz nunca verdad? Intento separarme de él y a lo que alzo la cabeza para hablarle, me coge de la cara y me roba un beso. Toda sorprendida le miro a esos ojos que 7
enamora a cualquier chica. Desde ese momento lo único que me pasaba por mi mente era el beso que me robo Dylan, se sintió tan bien que lo quiero repetir. Pero creo que solo lo hizo para molestar, así que no me hago tantas ilusiones. Todos mis días fueron así, hasta me fui acostumbrado a las bromas de Dylan. Meses después, al terminar la escuela, me estaba cambiando de ropa y me vi un bulto en la axila, voy corriendo a decirlo a mi mamá porque nunca me había dado cuenta de eso. Mi mamá me ve y me lleva de inmediato al hospital. Esperamos el turno para que me atendieran, por lo tanto, llame a Noah para que este conmigo. Después de tanto tiempo entramos al consultorio, me revisa la doctora Mackenzie y en su expresión se nota lo preocupada que esta. Me manda hacer unos exámenes y después de unas horas nos dice tristemente: —Abril lo lamento, pero tienes cáncer de mama. Mi corazón se rompió en pedazos junto a mis padres y Noah, ellos me abrazan y rompen en llanto. —Pero te puedo ayudar Abril, haciéndote quimioterapias, un modulador de estrógeno y una cirugía. La cirugía no va a ser posible ya que no tenemos los recursos suficientes para pagarla. Con dolor todos fuimos a casa a descansar. Hasta que media hora después Dylan llega con un cartel afuera de mi casa, está escrito “Quieres ser mi novia”. Yo toda feliz salgo, porque después de tantas bromas que nos hacíamos entre los dos, nos fuimos conociendo y encariñándonos, aunque no parecía. —Hola chico molestoso— le digo toda sonrojada —Hola guapa, entonces ¿aceptas ser mi novia? — Bien feliz lo abrazo y le digo que sí, Dylan me alegro el día después de recibir la mala noticia. Hoy 16 de abril cumplimos un año de estar juntos y le escribí una carta. ¨Quiero que sepas que eres mi primer y último pensamiento del día, estoy enamorada de ti por mil motivos y cada día me regalas uno nuevo, somos una pareja, pero también eres mi mejor amigo, antes de conocerte no creía que el amor existiera, pensé que era una fantasía, pero cuando me hiciste parte de tu vida me di cuenta que estaba muy equivocada. Me das ganas de vivir, de reír, de mejorar en todos los aspectos, sé que siempre estarás para mí como yo para ti, estuviste para mi desde el 8
principio y sé que nunca me fallarías. Me gusta que me conoces tanto que no tengo que decirte que estoy triste, molesta o feliz. Gracias por los pequeños detalles que tienes día a día son muy valiosos para mí. Y prometo cuidarte con todo mi corazón” Eso le iba a dar hasta que paso lo que menos me esperaba. Mis ojos se llenaron de lágrimas cuando vi que Dylan se besó con Maddie. Todo se arruino, él y yo fuimos como el sol y la luna, ambos brillamos en un mismo cielo, pero nunca pudimos hacerlo juntos. Llegué a mi casa y solo entré en mi habitación, mis padres golpeaban la puerta preguntando lo que paso, pero yo solo lloraba y no les decía nada. Después de un largo rato revisé mi celular y había muchas llamadas perdidas de Dylan y un montón de mensajes donde me explicaba que ella lo besó a él, y él no quería. Yo no le respondí ni le quería hablar, porque solo eran excusas. Justo en mis peores momentos cuando le iba a contar de mi enfermedad, el me hace esto. Llegan mis padres todos tristes y me dicen que sigo de mal en peor, mi enfermedad no se pudo sanar, todas las quimioterapias me pusieron bien por un rato, pero no sirvió mucho. Todos fuimos donde la Doctora Mackenzie y lo que me supo decir es: —Hola Abril, hice todo lo posible, pero, ahora solo tienes que aprender a disfrutar cada momento de tu vida. Te falle. — Lo dice decepcionada. Yo solo rompí en llanto, de repente Noah llega y solo me abraza fuerte. Le conté lo que paso con Dylan y en la expresión de su cara se nota lo decepcionado que esta con él. Noah se va sin explicación y yo me quedo con mis padres. Me subo al coche y voy a la casa de Dylan a reclamar el daño que hizo Abril. Soy su mejor amigo y ella necesita que la cuide. Golpeo la puerta de la casa y sale Dylan. —Te das cuenta del daño que le hiciste a Abril. —Yo no la besé, ella me lo dio. —Todo el día ella estuvo mal— Dylan se preocupa—Tiene cáncer y no hubo solución para sanarla. Todas sus quimioterapias no sirvieron. Dylan entra en llanto y pregunta en dónde está Abril para ir a verla. —Ella está muy decepcionada de ti, no quiere verte, solo te digo eso. Adiós. Tres días después de la noticia y lo que pasó con Dylan, por fin decidí comer. Y mi teléfono no para de vibrar con los mensajes de Dylan. No le quiero contestar. Hasta que suena el timbre de mi casa, decidí abrir la puerta ya que estaba 9
sola. Era Dylan con un ramo de flores y mis chocolates favoritos, le iba a cerrar la puerta, pero él puso la mano y no me dejó. —¿Qué quieres? —Perdón, solo quiero que me escuches, ya me enteré de tu enfermedad y quiero estar contigo en todo momento. Dame otra oportunidad. Yo no besé a Maddie, ella solo nos quería separar, yo me quité y le dije que te quiero a ti. —Según. Dylan entra a mi casa y me mira con esos ojos encantadores, solo agaché la cabeza y le explico que tengo cáncer. Alzó mi cabeza para mirarlo, porque es muy alto, y me da un beso. Lo abrazo alrededor de su cintura y el me da un beso en la frente. Todo paso, en mis últimos días de vida Dylan, Noah y mis padres, me hicieron la chica más feliz del mundo. Dylan me invita a un picnic, el llevo toda mi comida favorita. Después de empacharnos al haber comido todo, nos sentamos debajo de un árbol de manzanas. —Te escribí una carta desde lo más profundo de mi corazón. Dylan comienza a leer la carta que le escribí hace días. Ya era hora de irme para siempre, mientras el leía yo recaí en sus brazos dando mi última respiración, morí en los brazos suaves de Dylan, el rompe en llanto y me abraza fuerte. — “Fuiste la manera más linda que me toco aprender que no se puede tener todo en esta vida, te espero en la siguiente” Y poco a poco cerré mis ojos. Fin.
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La magia del amor Autora: Diana Cabrera
La magia del amor Un chico apuesto, con un intelecto impresionante, que tiene a varias chicas tras él jamás se fijaría en alguien tan común y sin gracia como yo. Mi nombre es Korrina soy una chica de estatura promedio de ojos claros y cabello negro, nada fuera de lo común, llevo una vida tranquila junto a mi madre en nuestra pequeña casa ubicada en San Diego, California. Todo comienza cuando corrí por los pasillos de la secundaria ya que iba tarde a mis clases cuando por accidente choque con él, caí inmediatamente sentada al piso junto con todos mis cuadernos esparcidos por doquier, empecé a recoger rápidamente mis cuadernos sin siquiera fijarme con quien había chocado, pero en el momento en el que iba a levantarme la persona con la que choqué me extendió su mano, fue ahí cuando lo regresé a ver y quedé hipnotizada con su belleza que ni siquiera me di cuenta que había manchado su camiseta con el café que ni recordaba que llevaba en mi mano, cuando salí de mi trance le pedí una disculpa realmente exagerada, él por el contrario parecía tranquilo y me dijo que no me preocupara, fue realmente lindo. -Soy Dylan disculpa mi torpeza debí haberme fijado. (Dijo Dylan con una pequeña sonrisa.) -No, discúlpame a mi iba muy apurada que no me di cuenta, lamento haber arruinado tu camisa. (Respondió Korinna un tanto apenada.) Lo siento debo irme llegó tarde. (Salió huyendo de la incómoda situación.) Estaba tan avergonzada que salí huyendo hacía mi clase, en donde al llegar mi maestro me recibió con una cara bastante molesta, rápidamente tomé asiento en mi lugar y traté de prestar atención a la clase, sin embargo, fue imposible, aquel chico que lleva por nombre Dylan ocupa mis pensamientos sin dejarme concentrar. Luego que terminan mis clases me dirijo a casa con Cristal y Mike, los tres hemos sido amigos desde pequeños, siempre he sido la introvertida del grupo; mientras que Cristal es muy extrovertida y escandalosa y Mike es bastante tranquilo y en la secundaria es muy popular. Cuando llego a casa almuerzo y me dedico hacer mi tarea hasta que escucho a mi madre llegar a casa, salgo de mi habitación para recibirla y la veo que llega con las bolsas de las comprar y bastante agotada. -Hola ma, ¿cómo te fue hoy? (Pregunta Korinna ayudando a su madre con las bolsas que trae en manos) -Hola mi pequeña, el día estuvo agotador, ¿cómo te fue a ti en la escuela? (Pregunta Julieta mientras se saca sus tacones para poder descansar) 12
- Me ha ido bien ma, con muchas tareas. Luego de ayudar a mi madre con las compras, regreso a mi habitación a seguir con mis tareas, hasta que las termino y mi madre me llama a cenar, cenamos conversando de su trabajo de la escuela entre otras cosas, cuando acabamos de cenar me encargo de lavar los utensilios mientras mi madre limpia la mesa, finalmente acabó y me despido de mi madre y me voy a descansar a mi habitación. Al día siguiente, realizo mi rutina matutina y me voy a la secundaria, cuando llego me encuentro con Mike y Cristal los saludo y entramos a la secundaria, nos dirigíamos a nuestra clase, pero cuando iba a entrar alguien me llama, me doy la vuelta para percatarme de quien se trata y me doy cuenta que es Dylan, en seguida trato de ingresar al salón, pero él me alcanza y me detiene. - Hola, ayer no me dijiste tu nombre, y anduve buscándote. - Hola, ¿por qué me buscabas? - Se te cayó tu libreta y quería devolvértela. Ella se percató que en efecto él tenía su libreta de apuntes, pero ayer por el ajetreo ni siquiera se dio cuenta. - Muchas Gracias Dylan. (Agradeció Korinna recibiendo su libreta). - No es nada. (Dijo Dylan tranquilo) oye por cierto ¿me podrías decir tu nombre? - Mi nombre es Korinna, ahora si me disculpas llegó tarde a clases. A Dylan le había parecido muy linda cuando la vio el día que chocaron por accidente, él tomó la libreta como excusa para poder saber su nombre ya que en realidad mientras le ayudaba a recoger sus cuadernos Dylan escondió la libreta para tener una excusa y hablar con ella. Korinna entró muy nerviosa a su clase, y Cristal no tardo en acercársele para preguntarle qué fue lo que pasó. - Amiga es enserio, tu hablando con el chico más popular de la secundaria. - Cristal, ni yo me lo puedo creer, enserio creí que me iba a desmayar en ese mismo instante. Y era enserio por más calmada que podría parecer quería salir huyendo de ahí, no voy a negar que Dylan es un chico muy guapo y que tiene muchos atributos, pero se que jamás se podría fijar en mí. Durante la clase no pude concentrarme ya que Cristal paso toda la clase preguntando sobre como conocí a Dylan, ella es realmente fastidiosa, pero así la quiero y por algo es mi mejor amiga. Luego de eso durante el receso salí a comer con Cristal y Mike, pero 13
mientras comíamos no podía dejar de sentir que alguien me miraba, así que traté de encontrar aquella penetrante mirada, y cuando di con el dueño no pude evitar sonrojarme ya que era Dylan quien no paraba de observarme, y me sentí muy nerviosa cuando lo vi acercarse a la mesa en la cual me encontraba lo único que pensaba era que la tierra me tragara en ese instante. Él llego muy calmado y me saludo: - Hola Korinna, ¿Quería preguntarte si quieres ir a una fiesta el viernes por la noche?, puedes llevar a tus amigos. (Dijo Dylan regresando a ver a Mike y Cristal). - Eh hola, claro lo pensaremos gracias por la invitación. (Respondió Korinna bastante nerviosa). - Solo me llamas o me envías un mensaje para pasarte la ubicación, este es mi número. - Okey muchas gracias. (Seguido a eso Dylan se retiró) Estaba en shok, no lo podía creer Dylan me había invitado a una fiesta y me dio su número celular. Mis amigos me regresaron a ver y empezaron hacer mil preguntas. - Desde cuando tienes tanta confianza con Dylan. (Cristal pregunta con curiosidad) - No estarás pensando en cambiarme por él verdad. (Reclama Mike) - Esperen chicos apenas y lo conozco solo chocamos el otro día, pero nada más. - Ok, are como que te creo, pero debemos ir a esa fiesta. (Dice con entusiasmo Cristal) - Concuerdo con Cris, la fiesta va a estar muy buena. (Apoya Mike) - Esta bien iremos a la famosa fiesta. (Responde Korinna con un poco de fastidio) Regresamos a clases y en el transcurso decido enviarle un mensaje a Dylan diciéndole que, si asistiremos a la fiesta, enseguida me responde y me envía la ubicación. Varias horas después salimos de la secundaria y me dirigí a casa, calenté el almuerzo que mamá había dejado y luego me fui a mi habitación a seguir con mis tareas. El viernes Estaba en la secundaria y estaba cansada de escuchar a Cristal decir lo emocionada que estaba por la fiesta, así paso toda la mañana, en la hora de receso estaba comiendo con mis amigos cuando Dylan se me acerca. - Hola Kori ¿si vas a ir a la fiesta verdad? (Pregunto con intriga) 14
- Hola, eh pues creo que sí. (Dije un poco avergonzada por el sobrenombre que me había dicho Dylan) - Fantástico, te veré allá. (Dijo Dylan con una gran sonrisa) Terminado las clases regrese a casa y almorcé y descase un poco, para luego empezar a alistarme ya que en una hora Mike y Cristal pasarían por mí. Cuando termine de arreglarme escribí una nota para mi madre diciéndole que llegaría un poco tarde y que no se preocupara, luego de un momento mis amigos llegaron y nos dirigimos a la fiesta. Al llegar a la fiesta Dylan nos recibió y nos invitó a pasar, estábamos pasándola muy bien cuando me entra una llamada de un número desconocido, contesto con un poco de desconfianza. - ¿Hola? ¿Con quién hablo? (Pregunté con incertidumbre) - ¿Usted es familiar de Julieta Smith? - Si es mi madre. (Respondí con preocupación) - Su madre acaba de ingresar al hospital ya que se desmayó en su trabajo. - (En ese momento sentí que todo se derrumbaba) ¿Me podría decir en qué hospital se encuentra? - Claro, está en el hospital general de San Diego. - Muchas Gracias, en este momento salgo para allá. Estaba muy preocupada así que me dirigí a mis amigos para decirles que me iba de la fiesta, pero ellos al verme muy preocupada y angustiada decidieron acompañarme y Dylan como había escuchado se ofreció en llevarnos. Cuando llegamos al hospital inmediatamente pregunte en la recepción por mi madre y enseguida un médico se acercó diciéndome que era quien estaba atendiendo a mi madre. - Buenas noches, Julieta se encuentra en un estado delicada. - Dígame doctor ¿qué tiene mi madre? (Pregunté con angustia). - Su madre tiene una enfermedad cerebral llamada esclerosis lateral amiotrófica, la cual afecta el sistema nervioso y debilita los músculos y afecta la función física. - ¿Y tiene alguna cura? - Es una enfermedad que no suele darse a menudo por lo que el tratamiento es costoso, y es necesario hacerlo para que no pierda la movilidad de sus extremidades. Estaba devastada, solo agradecí al doctor y me dijo que en unos momentos podría verla, mis amigos y Dylan me abrazaron y me apoyaron dando ánimos. Luego de unos minutos ingresé a ver a mi madre, hablamos un 15
poco y luego la dejé descansar. Al siguiente día lo primero que hice fue buscar un trabajo para lograr reunir dinero para la terapia de mi madre, Dylan me llamo temprano preguntándome cómo estaba, le dije que estaba mejor y que iba a buscar un trabajo para poder pagar la terapia, él se ofreció ayudarme y yo acepté. Pasamos todo el día buscando algún lugar donde poder trabajar hasta que por fin logramos encontrar un trabajo en una cafetería la remuneración no era mucho, pero era mejor que nada, iba a trabajar todas las tardes después de la secundaria. Dylan era un chico de clase alta por lo que el dinero no le hacia falta, así que pensó pedirle dinero a su padre para ayudar a Korinna. Luego de que Dylan dejó a Korinna en el hospital con su madre se dirigió a su casa, al llegar fue directamente al despacho de su padre, Dylan le explico la situación por la que estaba pasando Korinna y su madre Julieta y el padre de Dylan se dio cuenta que Julieta era una de las empleadas de su empresa por lo que accedió ayudar. Al día siguiente Dylan fue donde Korinna y le contó que su padre va ayudarles con el costo del tratamiento, Korinna no pudo con la emoción y abrazó a Dylan, él estaba emocionado ya que tenía sentimientos por Korinna y el verla feliz lo hacía feliz a él. Durante la recuperación de Julieta, Cristal, Mike y sobre todo Dylan estuvieron con Korinna apoyándola y ayudándole en todo lo que podían, en ningún momento dejaron sola a su amiga, ellos tenían una amistad envidiable porque estaban para apoyarse siempre en las buenas y malas. Pasó el tiempo y Dylan se hizo muy cercano a Korinna, hasta que un día reunió la valentía para poder confesarle sus sentimientos, ese día le confesó que desde el primer momento que chocaron, el quedó flechado por ella y que realmente la amaba, Korinna estaba muy sorprendida nunca imagino que Dylan tuviera los mismos sentimientos que ella hacia él, los dos abrieron sus corazones ese día y confesaron todo lo que sentían, se hicieron novios y vivieron un amor tan puro e inocente. El amor es el poder más grande que los seres humanos poseemos, nos lleva hacer cosas inimaginables, el amor como la verdadera amistad son muy difíciles de conseguir, pero cuando lo encuentras se vuelven la fuerza más poderosa. Fin. 16
Effrayant Autora: Emily Camacho
Los fuertes golpes en la pared del cuarto de hotel provocaron que Theo abriese sus ojos, fastidiado mientras apartaba las cobijas sobre su cuerpo con brusquedad. Suspiró profundamente, sentándose con rapidez, obteniendo un pequeño mareo a cambio. Los golpes cesaron mientras se recomponía, pero fue tan solo unos segundos. -Ya voy- Murmuró mientras se ponía de pie. Finalmente la abrió, observando con sus ojos entrecerrados a la persona que tenía frente a sí. Liam, su mejor amigo, apenas tenía veintiún años de edad, y Theo lo conocía desde que él tenía 17 años. - ¿Por qué estás despierto a esta hora? Mañana tenemos un r.…- Ni siquiera pudo finalizar su oración cuando su mejor amigo ya se había adentrado al cuarto en el cual se encontraba hospedado, observando a su alrededor con notable paranoia ¿Li? Hubo un tenso y breve silencio. -¿Puedo dormir contigo esta noche? Solo será por esta noche, es que no quiero estar solo. -Uh sí, claro - Cierra la puerta- Theo siguió aquella orden unos segundos después, no sin antes observar los pasillos. ¿Acaso algún fanático estaba molestando a su mejor amigo? Tenía muchas teorías en su cabeza del porqué Liam quería dormir junto a él, y la más probable era aquella. Theo se detuvo cerca de la cama - ¿Vas a decirme qué está sucediendo y por qué quieres dormir conmigo? Porque estoy un poco emocionado por ello - intentó bromear. - No me siento muy bien como para dormir solo- Respondió el rubio. Mirando la ventana con temor. Theo se sentó bruscamente sobre la cama, sobresaltando al menor - De acuerdo. ¿Qué sucede? - También dirigió su mirada hacia la ventana antes de regresar a observar a su mejor amigo - ¿Hay alguien afuera? ¿Alguien te ha hecho daño? - ...no. - Tienes que decirme, Liam- este último lucía algo avergonzado - ¿Mh? - No es eso. - ¿Entonces? ¿Qué ocurre? - He tenido una pesadilla - Soltó. El mayor suspiró de alivio - Ha sido horrible. - Me imagino - Se arrodilló en la cama, inclinándose hacia la mesa de noche - Si esa pesadilla te ha hecho pensar en dormir conmigo...- no pudo evitar 18
reírse silenciosamente antes de servir un poco de vino en una copa de cristal, sosteniendo ésta su mano antes de volver a su sitio … debió ser horrible. ¿Quieres contarme? Si te escucho, tal vez pueda hacerte sentir mejor. El rubio suspiró profundamente, luciendo preocupado -. Es que fue... muy extraño. No lo sé, nunca me había asustado tanto-. Se removió un poco en su lugar. Theo sintió escalofríos por su columna vertebral-. Soñé que morías. - Para ti es una pesadilla, y para mí es un sueño-. Bromeó, intentando suavizar el tenso ambiente-. Bien. ¿Cómo moría? ¿Era interesante? Continuó Theo, sonriendo con amabilidad -. ¿Lucía bien? Cuando alguien muere en las películas, luce bi- Era horrible, lucías horrible- Liam tragó saliva, abriendo sus ojos un poco más de lo normal, cómo si su mente estuviese divagando en aquella horrorosa pesadilla -. En mi sueño nos perseguía un hombre, a nosotros, y yo lo había soñado antes. - Wow. Espera, espera- Theo detuvo las palabras del menor, algo impresionado mientras no podía evitar reír un poco-. ¿Soñaste en tu sueño? Woh... El rubio asintió rápidamente. Asustado. -Liam...- El mayor buscó la mano contraria, tomándola y entrelazando los dedos de ambos-. Fue solo una pesadilla, ¿de acuerdo? Nada está pasando, ni me pasará. Hay que dormir porque mañana tenemos dos recitales, eso lleva mucha preparación para un solo día, y aún más tú siendo el cantante. -Lo sé, lo siento. Yo solo...- Un trueno resonó en toda la habitación, y Theo pudo sentir el cómo Liam presionaba fuertemente su mano con la propia-. Está lloviendo- Murmuró, aterrado. Un relámpago iluminó el cuarto completo y, pronto, todo se encontraba oscuras. La luz se había ido, y el frío llegó de manera abrupta. Sacudió el brazo de Theo con rapidez, llamándolo mientras sentía una presencia alrededor de la cama. Probablemente era la paranoia, pero se sentía lo suficientemente real. - ¿Sientes eso? -. El pánico en la voz de Liam lo dejó helado. - ¿Qué co-...? -. No pudo terminar la pregunta cuando empezó a sentir exactamente a lo que el rubio se refería. Era una fuerte, muy fría brisa detrás suyo, sentía constantes escalofríos por su columna vertebral, y un inevitable malestar en su cuerpo. Permaneció quieto, a la expectativa, aferrando el tembloroso cuerpo de su mejor amigo. 19
La luz regresó repentinamente y, girándose sin siquiera dudarlo, notó que no había absolutamente nada detrás de sí. Respiró hondo antes de regresar su mirada hacia Liam, el cual cubría sus ojos con ambas manos y contenía su respiración. -Hey, no. Mírame, soy yo-. Le apartó con sumo cuidado las manos del rostro, obligándolo a verlo -. Soy yo, estoy aquí. - ¿No es un sueño? - No. Tan solo fue la luz, no sé qué sucede -. Intentaba mantener la calma en su voz, aunque su rostro demostraba todo lo contrario. Después de unos momentos, Liam se levantó, sentía que debían irse de la habitación -Hay que salir. Tenemos que irnos, y rápido. - ¿Qué? Detente, ¿estás loco? - No lo sé, pero no me quedaré aquí. A ver... estamos en el sexto piso, ¿verdad? - El mayor asintió-. No hemos subido por las escaleras, ¿Dónde estaban las escaleras? - Usualmente están a poca distancia de los ascensores. Hay sólo dos ascensores. - Debemos ir. Miremos antes de salir y no nos soltemos. No volvamos a ver alrededor una vez estemos fuera. Ambos se acercaron hasta estar frente a la puerta, se mantuvieron en silencio por unos leves segundos, intentando oír algo del otro lado. Theo miró a Liam. -T omemos el ascensor de la izquierda. ¿Theo? Jura que vas a hacer lo que yo te diga. Si no lo hacemos, sabes lo que puede suceder. Júralo. Theo sintió un vacío en su estómago-. Lo sé. No te preocupes. No pienso morir hoy. - Más te vale, Theo. Theo ni siquiera esperó. Abrió la puerta y asomó su cabeza. Pudo sentir la correntada fría mientras apuntaba a los lados con la pequeña de interna que tenía, notando una leve niebla en la oscuridad, y el vapor salir en cada exhalación que daba. - Vamos-. Susurró. Y ambos empezaron a correr en la dirección que habían decidido, esperanzados de encontrar la salida o de despertar repentinamente. Un portazo fuerte detrás los hizo detener su andar. Ambos giraron, aunque habían prometido no hacerlo, notando que la puerta por la cual habían salido, muy probablemente se había cerrado, debido a que la luz del cuarto ya no iluminaba parte del pasillo anterior. 20
Por supuesto, no pudo haberse cerrado de la nada. Aquel hombre del sueño estaba detrás de ellos. Theo aferró mejor la mano de su amigo antes de apresurar el paso, alumbrando el camino. Sin embargo, un familiar sonido los hizo volver a detenerse. No hizo falta que la luz de la linterna alumbrara la dirección de la cual se había oído aquel suave tintineo, porque la luz del botón del ascensor estaba encendida. -Theo, ¿alguien...? -Sí. Alguien estaba subiendo por el ascensor. No era moralmente posible, pero estaba sucediendo, y Theo no iba a permanecer allí para esperar a lo que sea que estaba en camino. Sostuvo con más fuerza la mano de su mejor amigo y ambos corrieron hacia la puerta. -Rápido. Entraron y cerraron la puerta, Theo la sostenía como si su vida dependiese de ello, aunque así era. Liam tomó una pequeña linterna que sostenía en una de sus manos e inconscientemente apuntó con la luz hacia Theo. Lo que había visto... creía no poder olvidarlo en toda su condenada vida. Claramente, no era un hombre, pero lucía como uno disfrazado. El típico de las películas de terror, con rostro distorsionado, color de ojos realmente claros y pupilas extremadamente dilatadas. Había pocos mechones de cabello claro en su cabeza, y su boca era lo suficientemente grande para espantar a cualquiera con la tensa sonrisa de dientes enormes que ofrecía. Liam no pudo ver su vestimenta debido a que se encontraba detrás del vidrio rectangular de una de las puertas, viendo fijamente a Theo. Parecía no estar haciendo ningún movimiento, pero, aun así, la puerta estaba sacudiéndose como si del otro lado hubiese alguien extremadamente enorme y fuerte. El menor frunció apenas su ceño cuando notó como aquella cosa dejaba de mirar a Theo y borraba su sonrisa tensa, tirándose y dirigiéndose en una dirección, por el pasillo. Tan solo bastó unos pequeños segundos para que Liam notara que aquella cosa había ido en dirección hacia el ascensor. Iba a atraparlos. - ¡Theo, debemos irnos, ahora! Theo abrió sus ojos, soltó la puerta y bajó los escalones a la velocidad de la luz, saltando los dos últimos, provocando que su cuerpo chocara contra la pared del descanso. Ambos comenzaron a bajar los escalones como podían 21
debido a la poca luz que la pequeña linterna emanaba. Oyeron la puerta que anteriormente Theo había bloqueado abrirse bruscamente, y una respiración pesada entre gruñidos, seguido de fuertes pasos por las escaleras. - ¡Theo, no mires atrás!¡No importa lo que sientas! Theo se apartó con brusquedad -. ¡¿Pero qué mierda es eso?! - ¡He dicho que no lo mires! Empezaron a bajar las escaleras hasta llegar al segundo piso. - ¡Hay luz! - Liam casi sonríe en medio de la desesperación al notar una puerta con luz del otro lado. Aquel lugar era la recepción, estaban a tan solo un par de pasos, tan pocos. Finalmente llegaron, y cuándo Theo empujó fuertemente con su hombro, está demostró estar cerrada-. ¡NO! La respiración de Theo se cortó cuando estuvo a punto de girarse, pero se quedó viendo al frente, con sus ojos abiertos de par en par al notar la pesada respiración en su nuca, y algo parecido a una larga uña acariciando lentamente está, de arriba a abajo. Liam volteó lentamente el rostro, viendo la expresión en el pálido rostro de su mejor amigo antes de observar a la figura que se encontraba detrás de este. Jamás se recuperaría de ver visto algo así, era inexplicable. El rostro estaba casi pegado a la nuca de Theo, pero los ojos de aquella cosa observaban los de Liam fijamente, sin su sonrisa. -...No te gires. - Logró decir el rubio al mayor. Este obedeció, aunque Liam estaba casi seguro que no se debía al obedecer sus órdenes, sino a qué temía enfrentar lo que le rozaba la piel. La respiración de aquella cosa era cada vez más pesada, con gruñidos en cada exhalación. - Elige. - Dijo. Liam pareció pensar mucho más rápido que el mayor. - Yo. Entonces, la perturbadora y tensa sonrisa del demonio volvió de manera repentina. Theo sintió una explosión, fue lo suficientemente cerca para actuar y empujar nuevamente la puerta tirando de la mano de su mejor amigo. Salió del otro lado, tropezando un poco y con la respiración agitada mientras observaba a su alrededor, notando a las personas de recepción observarlo, extrañados por el aspecto. Aquello no importaba. Lo que importaba era que la mano de Liam no sostenía la suya. Llevó su mirada hacia atrás, notando que las luces de la escalera 22
parpadeaban, antes de recomponerse por completo. Con sus oídos zumbando por el repentino susto que lo invadió, oyó distraídamente algunas palabras en francés que le decían algunas personas, las cuales se acercaban al creer que Theo necesitaba ayuda. Theo no necesitaba ayuda. Necesitaba a Liam. - No, no.- Con sus piernas pesadas y temblorosa, corrió nuevamente hacia las escaleras, empujando la puerta. Nada a cambio. Comenzó a subir a pasos apresurados, dirigiéndose a el sexto piso nuevamente. En su cabeza solo estaba el rostro de su mejor amigo antes del estallido, y la manera en la que se había sentido la respiración del demonio contra su nuca. No podía ser, no podía haber dejado a Liam atrás. Llegó el sexto piso más rápido de lo que planeaba, empujando la puerta y corriendo por el pasillo. Este lucía tranquilo, limpio y hasta se oía a las personas del otro lado de los cuartos. No sintió ni un poco de alivio por ello, para nada. Simplemente continuó corriendo, con su respiración agitada y vacío en el estómago. - ¡LIAM! -. Gritó apenas llegó a la puerta de la habitación de éste, comenzando a dar fuertes golpes. - ¡LIAM, ÁBREME! Un chico de cabello rosado, adormilado y confundido fue el que abrió la puerta. Theo lo observó unos segundos antes de negar, retrocediendo. ¿Se había equivocado de cuarto? Aquella persona intentó hablar en inglés, pero no recibió respuesta. Preguntó a todo el que conocía, pero todos le daban la misma respuesta. Ahora había oscuridad, tanto para él como para Liam Dumbar, quien ya no existía… o jamás lo hizo. El 27 de agosto de 2019, Theo Reaken fue internado en un centro psiquiátrico debido a su demencia hereditaria. Sus amigos lo visitaban, pero, con el paso de los años, dejaron de hacerlo, ya que éste no quería saber de nadie a menos que llevasen a un tal Liam Dumbar con ellos. Fin.
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Huye Autora: Haide Cevallos
Iba a salir tarde del trabajo, ya que debía terminar unos documentos importantes, cuando salí camine hacia la parada del bus, me pareció un poco extraño porque no había casi gente habitando por las calles, lo deje pasar pensando que era la hora, yo no estaba acostumbrada a ver las calles así podía ser natural, espere un rato más hasta que el último bus llego a recogerme. Llegue a mi destino 40 minutos después al bajar del bus note algo extraño. Había una silueta parada en la ventana de mi casa, pero como podía ser posible eso, si yo era la única que habitaba allí. Sentí que algo extraño estaba sucediendo, comencé a caminar hacia la puerta de la entrada cuando escuché risas de niñas y mujeres que provenían de mi casa. Luego de un rato intentando calmar mis miedos y pensamientos abrí la puerta de mi casa llegue a creer que todo fue parte de mi imaginación y que estaba siendo paranoico hasta que escuche susurros en mi oído diciéndome que esto solo era el comienzo, estaba a punto de salir corriendo hasta que note una silueta alta, vestido completamente negro que me hacía señales de que le acompañara al segundo piso, pero no le hice caso y eso le hizo enfurecer tanto así que pude ver como venía hacia mí, yo con tanto temor empecé a caminar con fuertes pasos hacia la entrada de la casa, pero no pude llegar, porque otra silueta me impedía el paso mientras se burlaban de mí. Empecé a suponer que esto es por falta de sueño, hasta que sentí que algo me jalaba el cabello, sentí que alguien me agarro el cabello y me empezó arrastrarme hacia las escaleras mientras yo intentaba soltarme de su agarre, pero no pude conseguirlo porque él era más fuerte y grande que yo, mientras me seguía arrastrando la otra silueta se empezaba acercar a pasos lentos sobre nosotros. Yo seguía forcejeando mientras la silueta que me arrastraba me jalaba más fuerte el cabello hasta el punto que sentí como poco a poco se desprendía de mi cuero cabelludo. Una vez que llegamos a mi habitación me tiraron sobre el piso y me empezaba a intimidar mientras yo seguía forcejeando la segunda silueta que nos había estado siguiendo entro en la habitación, también era alto, delgado y toda su ropa era blanca. ¿Quiénes son? Empecé a preguntar. Soy Cameron-Contesto la silueta vestida de blanco. ¿Y él? -Pregunte Adrián-Contesto Cortante, el de la silueta vestida de negro. ¿Nos extrañaste? - Preguntó Cameron. ¿Extrañar? -Respondí. ¿No nos recuerdas? - Preguntó Adrián. No-respondí cortante. Auch eso duele-Murmuró Cameron. 25
Somos tus amigos cuando eras niño-Me recordó Adrián. Esto no puede ser posible, nunca tuve amigos en mi infancia-Respondí. Te equivocas- Dijo rápidamente Adrián Te acuerdas de tus amigos imaginarios-Dijo Cameron para después dar vueltas en mi pequeño cuarto. Si, me acuerdo perfectamente- Respondí y era la realidad hasta el día de hoy tengo un gran cariño a mis amigos imaginarios de la infancia. Pues, somos nosotros solo que en cuerpos de muertos - Respondió Cameron investigando mi cuarto. Debes dejar de decir eso- le regaño Adrián. Esto es una jodida pesadilla- me regañé Ni que estuviera tan feo para ser parte de una pesadilla - respondió Cameron. A lo que venimos-le regaño Adrián. Queremos hacer un trato-Me propuso Adrián. ¿Trato? -respondimos Cameron y yo al mismo tiempo. ¡Venimos hacer nada más que un jodido trato! – ¡Ya cállate, me estresas, joder! -Exclamó Adrián Es que no puedo creerloDijo Cameron. ¿Aceptas el trato? - Me preguntó Adrián ignorando a Cameron. ¿Cuál es el trato? -Pregunte con miedo. Deja esta ciudad y ven con nosotros donde siempre permanecisteRespondió Adrián. No-respondí con seguridad de mis palabras. Y eso hizo enfurecer a Adrián, tanto así que no le importo si ella tomaba esa decisión, él sabía que mentía después de todo, él la conocía perfectamente desde niña hasta lo que es ahora. Hubo un incómodo silencio hasta que empecé a calmarme y a pensar cómo salir de aquí hasta que se me ocurrió una idea. Acepto- respondí después de un largo silencio. Mientes- Respondió Adrián al instante. Isabella empezó a crear otro plan, pero ya era muy tarde Cameron y Adrián habían desparecido y ella empezaba a despertar después de un largo sueño. Fin.
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Mistery in London Autora: Oyuki Chiluiza
¿Por dónde empiezo? Lo primero que tienen que saber es que mi mamá me nombró Grace, insistió en ese nombre, de alguna forma me decía que podía ver la gracia de la vida reflejada en mí. Además me decía que me iría muy bien sola, sin embargo siempre estábamos juntas. Mi padre murió cuando era niña, la verdad no me acuerdo de él, y mis dos hermanos se fueron al poco tiempo, así que tampoco tengo recuerdos de ellos, solo éramos nosotras dos y era maravilloso. No me enseñó a bordar o hacer manualidades, hacíamos otras cosas, incluso diferentes tipos de ejercicios, tanto físicos como mentales. Mamá decía que éramos libres de hacer lo que quisiéramos en Ferndell... Ella era mi mundo entero, pero no compartía todo conmigo. Para mamá la privacidad era la mayor virtud y la que otros menos respetaban. Lo que me lleva al segundo punto. Hace una semana, la mañana en la que cumplí diecisiete, desperté… y mi madre había desaparecido. Había dejado nuestro hogar en Ferndell en algún momento de la noche, y ya no regresó. Pedí ayuda a mis hermanos por medio de un telegrama para que vinieran a casa, pero lo único que terminaron haciendo es que Frank, el detective más conocido de Londres dijera que se va a encargar de la investigación de mamá, mientras que mi otro hermano, Jared, se encargara de mi tutoría, enviándome a un internado de señoritas para que me convirtiera en una, ya que él cree que lo único que hizo mi madre conmigo fue malcriarme. Lo único que dejó mamá era unas pinturas de flores y un pequeño libro sobre el idioma de las mismas, en un mensaje me decía que usara estos regalos con sabiduría pero no entendía cómo, hasta que un día encontré una nota en la que me decía que “Nuestro futuro depende de nosotros”, pero no entendía de qué futuro hablaba, y recordé que alguna vez me dijo. “Hay dos caminos que puedes tomar Grace, el tuyo… o el que otros decidan por ti”- y comprendí. Mi madre escapó a Londres, ¿cómo lo sé? En algunos planos y agendas que estaba buscando en su habitación dijeron que en estas fechas estaría en Londres, además había unos mapas con diferentes lugares, así que empezaré por ahí. Así como mamá escapó de Ferndell, yo también debo hacerlo… voy a encontrarte madre. Obviamente use una línea distinta de transporte, con mis hermanos buscándome no sé por dónde empezarían. Cuando entré a mi vagón y me senté a esperar a que acabe el recorrido, me asusté demasiado al ver una navaja saliendo de una maleta. 28
Temerosa, intento alejarme al ver que se mueve e intenta caer al piso ¿qué hay dentro de ella? No me demoro al descubrirlo cuando veo que se asoma una cabeza y quedo asombrada al ver, cómo la maleta se cae, y de esta sale un chico… bastante guapo de verdad, pero bueno, en fin él se arregla su traje, (que al verlo bien, parece de alta costura y muy elegante) y se sienta enfrente mío en el vagón. Me saluda, e inmediatamente le pido que salga del vagón, pero él me dice que no puede porque se está escondiendo y además soborno a un maletero para que lo ponga en aquel bolso. Aunque le vuelvo a decir que se vaya, el me mira de pies a cabeza y comenta. - Luces… extraño “caballero”- Me lo dice porque estoy vestida con la ropa de mi hermano, para mantener un bajo perfil. - ¿Y tú no? – - No eres un varón- responde extrañado - Podría serlo- ¿Quién eres?- me cuestiona - ¿Qué eres?- dije a la defensiva - Soy el vizconde Louis Patridge, el marqués de Basilweather.- Comenta, mientras estira su mano en forma de saludo. - Tú eres un tontoAl escuchar mi respuesta, él vuelve a decir. - Para que sepas acabo de orquestar un escape osado…- Antes de que continúe, lo interrumpo. -¡Tú no escapaste! Allá afuera hay un hombre buscándote. Cuándo te encuentre, creerá que te ayudé y estaré en peligro. Por lo tanto, te pido que te vayas. – Exclamé un poco frustrada. Afuera de la estación, había un grupo de personas de muy alta clase, diciendo que buscaban a su hijo. ¿Habrá sido el inútil que acabo de ver? En fin, no es mucho cuando en segundos más tarde, él regresa y me dice que el señor de sombrero marrón está buscándolo por cada vagón y que debo ayudarle. ¿Por qué no me sorprende? Después de una pelea interna conmigo misma y recordando que mi mamá me dijo alguna vez que me concentrará en mis asuntos y no dejarme llevar por otras personas (en especial por los hombres), algo me dice que debo hacerlo, entonces… voy ayudar a ese inútil. - ¿¡Estás segura de esto?!- ¿¡Se te ocurre algo mejor?!Vuelvo a ver el túnel al que nos dirigimos y definitivamente la única opción 29
que tenemos es saltar del tren o morir. - ¡Escucha marqués, tenemos dos opciones!- ¿¡Y con cuál de las dos no muero!?- Me grita desesperado. - ¡Con esta!Tomo su mano y saltamos hacia el campo que hay abajo, antes de que el tren entre por el túnel y no haya otra salida. Cuando nos recuperamos de la caída, empezamos a caminar. Frustrada le comenté. - ¿Sabes que arruinaste la primera fase de mi plan, no? - ¿Fase qué?- Dijo sin entender. – ¿Oye pues quién eres?- Al ver que no respondí, volvió a hablar. - Creo que después de nuestro encuentro con la muerte, merezco saber tu nombre.- Grace Wembley.- ¿Wembley? ¿Cómo Frank Wembley?- Y estoy encubierta, así que olvida esa información.- ¿Encubierta, trabajando para él?- Encubierta, escapando de él.Se detiene un momento a pensar y me dice. - ¿Es por eso que estás vestida de varón, no?- Y es por eso que no dirás nada- Digo mientras sostengo su brazo con fuerza. - ¿Entonces?- Vuelvo a preguntar. - ¿Entonces qué? – Dice él. Frustrada, señalo el lugar de dónde saltamos y vuelvo a decir. - ¿Gracias? Se supone que deberías darme las gracias.- ¿Por qué? – Suspiro enojada y vuelvo a caminar. Definitivamente no entiendo a los hombres. Cuando anocheció, Louis preparó comida con algunas plantas que encontró en el campo. Corto el silencio cuando le comento una idea. - Estuve pensando. Tienes que disfrazarte un poco. ¿Qué opinas de tu cabello? - Nunca me ha importado- confiesa. Cojo una piedra y empiezo afilar mi navaja. Sorprendido me pregunta. - ¿Quién te enseñó afilar así?- Mi madre. - Tú madre es muy diferente a la mía. - dice entre risas. - ¿Quién te enseñó sobre flores y hierbas?- me escucho preguntar. 30
- Mi padre. – - Nunca conocí a mi padre- confieso. - El mío también murió. Los dos nos regresamos a ver y volvemos a hablar. - Lo siento. – Decimos a la vez. - ¿Por qué huiste de tu casa?- Pregunta. - No quería ir a una escuela de modales. ¿Y tú? – Lanza un suspiro y mientras le corto el pelo, vuelve a hablar. - Iba a unirme a la Cámara de los Lores. Tenía ideas de cómo mejorar la nación, pero mi familia me quería en el ejército, cómo mi tío. Y me di cuenta que si lo hacía, odiaría cada minuto del resto de mi vida. – Después de un pequeño silencio, le vuelvo a decir. - Debemos huir rápido mañana. Ese hombre te perseguirá…- ¿A dónde vas? – Me interrumpe. - Londres. – - Bueno… podríamos seguir juntos. Si quieres. – - No. Iremos a Londres y nos separaremos…- ¿Tienes que ser tan brutal con el pelo?- Si. – Dije mientras se lo jalaba más fuerte. - Te agradezco, Grace Wembley, por haberme ayudado hasta aquí. – - Te dije que olvidaras ese nombre. – - Entonces busca otro. – Me dice, mientras se va alejando en el carruaje… Va a estar bien. Debo admitir que Londres no era cómo pensaba. La gente es un poco más intensa que en el campo. Así que si quiero encajar y esconderme de mis hermanos, debo convertirme en algo… inesperado. Vestida muy refinada (como una dama respetable) sigo mi investigación, dirigiéndome al primer lugar que estaba en el mapa. Resulta que es una cafetería en dónde mujeres practican artes marciales y mi primera profesora, (Susan Lexon) es la instructora de esa clase, empezamos hablar y me preguntó las razones del porqué estaba aquí. - ¿Crees que quieren que la encuentren? – Me pregunta. Al ver mi cara extrañada, vuelve a decir. - Mary se escondió toda su vida. Si quiere ocultarse, lo hará. Además tiene trabajo que hacer.– - ¿Qué trabajo? – Susan se da cuenta que habló de más y se abstiene de decirme algo más sobre el tema. Antes de volver a su clase me da un consejo. 31
- Si quieres quedarte en Londres, sé fuerte. Vive tú vida, pero no lo hagas por buscar a alguien. Hazlo por buscarte a ti misma. – Después de que Susan se fuera, vi un plano escondido con el nombre de Ellie Houseman, nombre que si desordenas la palabra, queda “Limehouse lane” y recordé que en uno de los mapas de mamá, había un callejón llamado de esa forma, así que ya saben lo que pasó. Cuando me dirigí a ese lugar, parecía un callejón abandonado. De repente, vi una puerta con un listón morado, era el mismo que mamá se sabía poner en la muñeca. ¿Debe significar algo, no? Cuando entré, me quedé paralizada. Había muchas cajas con pólvora y folletos para una reunión del feminismo, pero lo peor es que mis hermanos tenían razón, mamá tiene un plan. Una caja estaba llena de planos sobre un plan que estaban ejecutando, mientras que alado había muchas bombas. ¿Qué estas planeando madre? Al salir de ese lugar, un hombre me cogió del cuello y metió mi cabeza dentro de un barril lleno de agua, no entendía que pasaba hasta que resulta que era el mismo hombre que intentó matar a Louis en el tren. - Te lo preguntaré una sola vez. ¿Dónde está el marqués? – - ¡No lo he visto! ¡No tengo nada que ver con él! Ante mi respuesta siguió intentando ahogarme, pero puse a prueba las clases de combate físico que me daba mi madre. Luego de haber peleado con él y provocar algunos daños, pude escapar. Pero no fue mucho cuando en el camino me encontré con… mis hermanos. Oh no. Es mi fin. Estos últimos días han sido horribles. Lo único que he hecho es recibir clases de educación para actuar como una señorita. Ya voy varias semanas aquí y he recibido una visita de mi hermano Frank. En pocas palabras me confesó que visitó los mismos lugares que yo para encontrar a mi madre, pero no ha tenido éxito. Además descubrió que el chico que saltó del tren con el marqués desaparecido, fui yo. Lo único que dijo al respecto después de una larga charla fue que, la decisión siempre es mía, a pesar de lo que la gente piense. Volví a mi habitación, y me llegó un paquete muy grande, supuestamente de mi hermano Jared. ¿Ahora qué quiere? De pronto, este paquete se mueve y dentro de ella se escucha un estornudo. Cuando decido abrirla, resulta que es el marqués desaparecido. - ¡Louis! – Grito emocionada, mientras me meto dentro de la caja para abrazarlo. 32
- Tendrías que ayudarme a salir, no meterte tú – dice entre risas. - ¿Cómo diste conmigo? – Pregunto curiosa. - Bueno, dijiste que no querías ir a la escuela de modales, de la Srta. Harrinson. Tengo una memoria prodigiosa, cuando decido usarla. – Después de una pequeña discusión sobre cómo íbamos a escapar de ahí, lo logramos. No pregunten cómo. Cuando cogimos el automóvil de la instructora para poder escapar, nos encontramos con dos caminos. Una dirigía a Londres y otra a Basilweather. Mientras que Louis me decía que no era una buena idea, cualquier cosa que estuviera pensando, las palabras de mi madre, rondaron por mi cabeza. - Va a ver un momento, en que tendrás que tomar una decisión difícil, y ahí descubrirás cuánto coraje tienes… y que estás dispuesta a arriesgar… por lo que importa.- Tenemos que ir a Basilweather. – Digo decidida. - ¿Qué?- Exclama Louis. -Ha ocurrido una injusticia. Y tenemos que enmendarla. Si quieres al culpable, encuentra el móvil- Digo mientras le entrego el periódico. - No entiendo nada- ¿Cuándo iban a sumarte a la Cámara de Lores? – - De inmediato. – - ¿Por qué hubieras votado en la reforma? – - Por lo mismo que mi padre. A favor. – - ¿Quién lo sabía? – - Mi familia. – - ¿Y quién hereda la propiedad si tú y tu padre mueren? – - Mi tío. – Al parecer ya va entendiendo el punto. - ¿Crees que esto es obra de mi tío? – Me pregunta, mirándome a los ojos. - ¿Acaso no tiene sentido? – - Es muy peligroso. ¿Qué podemos hacer? - Pues resolver el crimen, ¿no? – - Grace, ya somos afortunados de estar con vida. ¿Y ahora quieres ir al lugar en dónde podrían matarnos? –. Es un buen punto. Pero ya no podemos arrepentirnos. - ¿Por qué hacemos esto? – Me pregunta Louis cuando estamos al frente de la puerta. - A diferencia otras damas, a mí no me enseñaron a bordar. Me enseñaron a observar, a escuchar. Me enseñaron a pelear. Esto es para lo que mi madre me preparó. Confían en mí.– 33
- ¿No sabes bordar? Le dedico una mirada seria mientras él se ríe. - Te extrañé Grace Wembley. – - Y yo a ti inútil. – Los dos sonreímos y le estiro mi mano. - ¿Listo? – Entrelaza mi mano con la suya y me dice: - Contigo siempre. – Bueno… después de esa noche, pasó muchas cosas. Cuando entramos al palacio, había una trampa para matar a Louis, y aunque la misma abuela fue quién le disparó en el pecho, resulta que no era el completo inútil que me imaginé. Tenía puesto una armadura dentro de su traje, e hizo que la bala desviara y salvara su vida. En fin. Louis pudo dar su voto en la cámara de Lores y se está realizando un cambio para un futuro mejor. Y, en cuanto la relación de nosotros dos… digamos que dejé de ver el lado malo de él, así que… con el paso de los meses, nos hicimos más cercanos y digamos que tenemos una relación. En otros temas… encontré a mi mamá, me explicó todo. Me contó que la razón por la que se fue, era porque no soportaba ver que este mundo fuera mi futuro, y me dijo que para ser escuchado hay que hacer ruido, y es justo lo que ella está haciendo. Y aunque me duele no tenerla conmigo a cada momento, sé que está haciendo lo que ella quiere y debo respetarlo. Ahora sé, que estar sola no significa sentirme sola. Mamá nunca quiso eso. Quería que encontrara mi libertad, mi futuro, y estoy segura que lo hice. Soy detective y descifro cosas. Mi vida es mía. Y mi futuro depende de mí. Fin.
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Contra el pasado Autora: Erika Echeverria
[Francia, 3 de septiembre de 1905] Pasado Fue aquella tarde fría de invierno cuando la princesa Charlotte se levantó nerviosa y emocionada; el día de su presentación de ballet estaba cada vez más cerca y su cerebro trabajaba como una máquina a mil por hora. Charlotte empezó a bailar a la corta edad de 8 años, los padres de Char decidieron llevarla una escuela de Ballet de París para mejorar su técnica, en la actualidad y con 17 años ella era considerada una de las mejores bailarinas de la academia. El día de hoy sus padres Josep y Elizabeth vendrían para verla bailar y es por eso que ella estaba hecha un manojo de nervios. Fue así que se encontró envuelta en sus pensamientos cuando entró al living del palacio encontrándose a su novio Alexander. Alexander y Charlotte se conocieron hace un año atrás, los padres de la princesa no aceptaron su noviazgo debido al trabajo y posición de Alex, los padres de Charlie tomaron medidas extremas respecto al asunto, por ende, la joven pareja mantiene su relación en secreto. - Buenos días su alteza. - Alexander se inclinó en modo de saludo, sin embargo, sabía que lo hacía de broma. - Buenos días Alex. - Recibió el saludo gustoso. - ¿Qué te trae por acá? - Preguntó con cierta incertidumbre. - Venía a caminar por aquí, todo esto de la presentación me tiene muy preocupada y pensé que sería buena idea relajarme por un momento. Contó con un hilo de voz. - Lo entiendo, pero ¿Qué es lo que te preocupa Char? - Alex se acercó un poco más hacía ella sentándose a su lado. - Tengo tantos nervios de volver a ver a mis padres y tengo miedo de que algo pueda salir mal, me siento tan estresada ahora mismo que lo único que quiero es irme de este lugar y no sé, quizás ¿Ir a otro mundo? - Charlotte rió un poco por lo último que había mencionado. - Cariño, en todo este tiempo lo has hecho bien, yo creo en ti, no tengas miedo, yo estaré para ti siempre, no te dejaré, sé que puede ser difícil, pero ¿Para ti no hay nada imposible verdad? Quiero ver una sonrisa en tu rostro ¡Anda! - Mencionó su amado novio, abrazándola en señal de apoyo. - Gracias, ¿Alguna vez te he dicho cuánto te amo? - Correspondió al abrazo junto con una pequeña sonrisa. - Te amo más, pero antes de que lo olvide, te tengo un regalo - Mencionó entusiasmado. 36
- ¿Enserio?, ¿Qué es? – Char era muy impaciente si se trataba de las sorpresas. - Primero, cierra tus hermosos ojos. – La castaña obedeció y los cerró. De pronto sintió algo rodear su cuello. - Ahora sí, puedes abrirlos, este será como tu amuleto de la suerte – Charlotte quedó maravillada con el detalle que le había regalado su novio, era un collar con forma de un reloj. - Oh, es tan hermoso, lo llevaré siempre conmigo muchas gracias, de verdad que lindo detalle – Se lanzó a sus brazos y se abrazaron. Ambos sentían esa felicidad, el estar juntos para ellos era tenerlo todo, no necesitaban nada más, nadie iba a terminar con esta alegría que sentían. ¿O sí? Ya era hora de la presentación y los padres de Charlotte la observaron desde el palco de arriba y mientras observaban a su hija, habían tomado una decisión drástica que afectaría a la pareja. Después de su presentación, la madre de Charlotte decidió hablar con ella fuera del escenario. - Empaca tus cosas, tu padre te espera afuera, regresaremos a casa de inmediato. – Dijo con tanta seriedad en su rostro. - Madre porfavor, me viste bailar, quizás y pueda entrar a una compañía de baile. – Mencionó Charlotte. - ¿Acaso debo recordarte que eres una princesa Charlotte? Humillaste a la familia saliendo con ese campesino. ¡Se acabó! No más ballet. – Dicho esto se fue. A Charlie nunca le importó ser una princesa, en realidad eso no le interesaba, solo a sus padres, a ella solo le importaba el baile. En ese momento, con esa frase toda su vida dio un giro. ¿Creían que Charlotte iba a obedecer a su madre? Obviamente no, Alexander y Char tenían un plan para escapar y poder estar juntos sin ningún impedimento. Lo que no sabía la joven pareja era el impacto que esa decisión tendría. - ¿Me dejarás? – Dijo Alexander. - Empacaré mis cosas y me iré… ¿Por qué no vas conmigo? – Dijo emocionada. - ¿Hablas de escapar juntos? Estas completamente loca – Empezó a reír. Ambos estaban decididos, iban a irse a algún lugar lejano y quizás vivir allí por un tiempo. Empezaron a correr lo más rápido que pudieron, alejándose de los guardias que los perseguían. Encontraron una enorme puerta, por la 37
cual Charlotte pasó, sin embargo, Alex no alcanzó a cruzar y las puertas se cerraron mágicamente, al abrirlas de nuevo solo había una pared de ladrillos. Todo cambió. [Francia, 9 de septiembre de 2019] Presente Charlotte estaba corriendo lo más rápido que podía, sin embargo, se sintió algo extraña, regresó a ver a Alexander, pero no había nadie, estaba sola, no sabía en donde estaba o como llegó aquí. Vio a varias personas pasar a su alrededor, estaba tan confundida y mareada que empezó a gritar. - ¡Alexander! Ayuda por fa… - Se desmayó, Charlotte se desmayó. Charlotte sintió una luz muy fuerte en sus ojos, que la obligó a abrirlos, no sabía que era, vio a su alrededor y vio a una chica mirándola fijamente, que se empezó a asustar. - ¿Qué hago aquí? – Fue la primera en hablar. -Te desmayaste en medio de la calle ¿Te sientes bien? – Preguntó aquella chica. - Si, un poco mejor. – Respondió un poco más calmada. - ¿Cómo te llamas? - Soy Charlotte, muchas gracias por ayudarme. - No hay de que, yo soy Eleanor el gusto es mío. Desde ese momento empezaron a charlar un poco más, la verdad es que Charlotte seguía sin saber dónde estaba, todo era tan moderno que estaba muy confundida, quería preguntarle a Eleanor sobre su confusión, pero no sabía si era buena idea, quizás la trate de loca y se vaya, eso pensó. - ¿Te puedo preguntar algo? - Charlotte estaba nerviosa. - Claro, soy toda oídos. – Mencionó Eleanor. - ¿En qué año estamos? - Dijo con algo de temor. - Espera ¿Qué? Acaso escuché mal. - Mencionó con un toque de confusión. - Olvídalo, cambiando de tem... - Eleanor interrumpió. - No, ¿Hay algo que no me estas contando? ¿Qué es lo que tratas de decir? No te estoy entendiendo para nada. - Frunció el ceño. - Déjame explicarte. – Añadió Charlotte. - Oh claro que me lo vas a explicar. – Agarró la mano de Charlotte y la llevó a una cafetería que estaba cerca. Charlotte y Eleanor platicaron por un largo rato, al principio le costó entender y procesar todo lo que Charlotte decía, era algo inexplicable, Eleanor entendió todo y estaba dispuesta a ayudarla a adaptarse a su nuevo 38
hogar. Por otro lado, Charlotte quería que todo esto fuese una pesadilla… una pesadilla de la cual quería despertar. [Francia, 9 de septiembre de 1905] Pasado Después de ese raro hecho Alex estaba corriendo por todo el establecimiento, se sentía angustiado, preocupado, que no se dio cuenta cuando varias lágrimas salieron de sus ojos, quería a Charlotte de vuelta, ¿Qué había sucedido?, estaba tan perdido en sus pensamientos, cuando chocó con alguien. Era Elizabeth, la madre de Charlotte. - ¿Dónde está mi hija? – Mencionó Elizabeth. - Su alteza, tengo algo que contarle. – Miedo era poco lo que sentía en ese momento. - No tengo todo tu tiempo, ¿Qué sucede? – Dijo impaciente. - Charlotte ha desaparecido. De un momento a otro se encontraba sentado con Elizabeth y Josep mirándolo fijamente, esperando una explicación sobre la desaparición de su hija, Alexander se sentía muy intimidado, terminó de contar todo lo que había sucedido horas atrás, los padres de Charlotte mostraban preocupación, Alex sintió que algo estaban ocultando y quería saber que sucedía. -Es hora de decirlo, Alexander, nuestra familia ha viajado en el tiempo por muchos años, eso es lo que ha sucedido ¡Charlotte está en otra época! – Dijo Elizabeth sollozando. - ¡Qué! – Alexander quedó sin aire. - Lo que escuchaste, lo más seguro es que no pueda regresar, lo único que podemos hacer es comunicarnos con ella por medio de cartas, talvez mi hija tendrá que adaptarse en su nueva vida y quizás no la volveremos a ver. – Sintió como esas frías palabras se clavaban en su pecho. Todas sus esperanzas se habían ido a la basura, Alexander no podía asimilar todo lo que sucedía. Charlotte no estaría con Él, no volvería a verla, tenía que ser valiente y enfrentar la cruda realidad. Pero no podía hacerlo. [Francia, 23 de septiembre de 2019] Presente Charlotte se encontraba en la terraza de la casa de su amiga Eleanor, de pronto sintió un fuerte viento recorrer su rostro y una gran luz alumbrar un pequeño árbol, fue rápidamente, levantó la maceta y encontró una carta. “París, 23 de septiembre de 1905 Querida Charlotte, Desde el día en que te has ido no he podido dormir tranquilo, te extraño un 39
montón, estoy muy asustado, no entiendo todo lo que ha sucedido, quiero ayudarte a regresar a casa, pero lo único que consigo es confundirme más. No sé si recibas esta carta, tus padres me han dicho algo que es difícil de creer, es hora de que tú lo sepas. Charlotte, tus padres son viajeros del tiempo, todo tiene sentido ahora, ¿Recuerdas el amuleto que te regalé el día de tu presentación?, en realidad es una máquina del tiempo y eso fue lo que hizo que te fueras y lamentablemente no hay manera de que puedas regresar. Ahora mismo estoy hecho un mar de lágrimas, me cuesta despedirme de ti, extraño esa época en la que la vida era sólo un camino para recorrer desde el principio. En la que los sueños y las expectativas ocuparon la mayor parte de nuestra relación. Aunque tuvimos todo en contra, estábamos muy contentos. Desafortunadamente, ese tiempo no regresará. Cuando el destino de un amor no es permanecer; el tiempo siempre juega a la defensiva. Estés en donde estés, quiero que sepas que te amo y que te amaré mucho. Más de lo que podría haber imaginado que alguien pudiera ser amado. Siempre te recordaré Charlotte. Con amor, Alexander.” Charlotte no quería leer más, se encontraba llorando, quería regresar el tiempo y estar con Alex, pero lamentablemente no podía hacerlo, se sentía traicionada por sus propios padres, le habían mentido durante años y ni siquiera se habían molestado en decirle lo que ocurría. Después de ese día, Charlie tuvo que tomar una dura decisión y eligió quedarse en su nueva vida, el poco tiempo que estaba allí, se sentía completamente feliz, libre y con mucha más energía e incluso seguía con sus clases de ballet en París. Entendió que al crecer te das cuenta de que no siempre tendrás el final feliz que deseas, aunque el amor siga presente en tu vida. Mereces tener la oportunidad de explorar un nuevo lugar sin importar lo que otros digan. Los hogares también se abandonan, aunque jamás dejes de quererlos. “Moraleja: Para vivir en paz se tiene que vivir con la verdad, tarde o temprano la vas a necesitar.” Fin.
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El deseo de amar para siempre Autora: María José Espinosa
Un amor eterno, eso es lo que todos queremos tener en algún momento, vivir felices para siempre y morir al lado del ser amado. Muchas veces esto no se cumple y el alma se pasa la eternidad buscando a esa persona con la que siempre debió estar. Jack tenía solo 22 años cuando abrieron una tienda de discos de vinilo cerca de su departamento y a pesar de que no era un fanático de la música la curiosidad lo terminó llevando a la tienda de discos. Cuando cruzó la puerta de la tienda sintiéndose un tanto curioso por lo que encontraría. Mientras me adentraba al local semi vacío, se cuestionaba los motivos del entusiasmo que percibía. No terminaba de comprender su propio comportamiento. El lugar era extremadamente acogedor, decorado con posters de muchas bandas y discos por todas partes, fue ahí cuando coincidió con los ojos miel de una hermosa chica de baja estatura, con un hermoso cabello rojizo como el fuego; ella era Bella, una chica de a penas 19 años apasionada por la música y aunque tenía problemas para relacionarse con la gente, Jack logró acercarse a ella y sacarla de su zona de confort. Así fue como cuatro años después de que aquella casualidad, el curioso chico de ojos azules con pequeños ápices verdes en ellos que no dejaba de perseguirla desde aquel día que se conocieron, se volvió su prometido. Su amor era como un romance de hadas, uno como el que muchos deseamos tener. Todo el mundo estaba contento al saber la gran noticia de la boda; los padres, hermanos, hermanas, amigos, amigas, primos, tíos e incluso las mascotas. El día en el que se celebraría la boda Bella estaba hermosa, radiante; su vestido era igual al de una princesa y su cabello estaba muy bien arreglado, el ramo de rosas era de color blanco al igual que el vestido, su boca tenía un leve color rosa al igual que sus mejillas. El momento llegó todos estaban esperando ansiosos, pero la espera demoró mucho más de lo pensado con una visita inesperada de la policía, que informó a Bella y la familia de Jack que esté había sufrido un accidente cuando iba en el auto camino a la iglesia, muriendo en el acto. Bella se sentía destrozada y cuando se dio cuenta que no había nadie a su alrededor lloró como nunca lo había hecho en su vida. Llorando, así es como ella pasó los siguientes días por la pérdida de su prometido a pesar de que nunca le dejaron ver su cuerpo. Un día con el vacío que sentía dentro de ella, tomó su vestido blanco y se dirigió a la iglesia, allí espero a que él llegara, pero eso nunca ocurriría.Bella 42
con el corazón destrozado por lo ocurrido corrió y corrió, ella tenía que correr, tenía que correr lo más rápido posible y huir de ese horrible momento. Pero se detuvo, no podía avanzar no podía acabar con su vida de ese modo ¿O sí? Miró al frente y se convenció de que aquí tenía que acabar con su corta historia, al borde de un puente que un día cruzó con él de la mano. Y ahí es cuando por fin voló, no tenía alas pero esos 10 segundos en el aire, la hicieron sentir como un ángel, mientras que sus últimas palabras fueron “Te convertiste en el regalo que más desee de cumpleaños, hoy pido otro deseo que me regrese aquel día en donde te vi en aquella tienda y me enamore de ti.” De este modo saltó en los brazos de la fría muerte, pero ella sintió que por primera vez pudo desplegar las alas que la vida le había quitado, que él se la había llevado y así se fue, con la esperanza de volverse a encontrar con aquel chico que conoció en la tienda de discos; mientras que su boda se tiño de negro y las sonrisas se cambiaron por lágrimas. El cuerpo de la joven novia permaneció intacto, y su rostro era adornado por una hermosa sonrisa. Al morir la colocaron dentro de un ataúd de cristal en el cual sigue esperando que algún día Jack vuelva y de ese modo despertar de aquel sueño eterno en el que se sumergía a causa de sus lamentos. Desde ese momento cada futura novia va con su pareja a la tumba de la Bella para pedirle que proteja su amor para la eternidad. Pero, ¿qué fue lo que realmente sucedió con ella? Algunos dicen que al morir su alma encontró la paz, otros que aún se escucha llorar a la novia en la iglesia, y hay algunos que afirman que su alma sigue buscando a su amado y que en algún momento ambos se volverán a encontrar, tal vez no en la muerte, si no que volviendo a nacer. Años después de esta hermosa y trágica historia de amor aquella promesa que nunca se cumnlió frente al altar, la que dictaba el amor eterno, volvió a la vida junto con el nacimiento de dos jóvenes, el ya no era el de antes ni ella lo era. Pero dentro de el corazón de ambos aún estaba este deseo palpitante de estar juntos aunque esto significara hacer ciertos sacrificios. ¿Cuáles serán estos sacrificios? ¿Podrán por fin estar juntos? ¡Ey! Pero esto no acaba aún.
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¿Recuerdas los pequeños detalles?… porque creo que se te ha escapado uno y no pienso darte pistas, así que porque no vuelves a empezar? Fin.
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Until we meet again Autora: Andrea Gallegos
(Finales del siglo XX, Tailandia) Aquel sentimiento de ahogo se vuelve aterrador, es una confusión constante el escuchar a personas gritar auxilio, pedir ayuda y por último lo escuchas todo lejano, todo tan distante y un hilo de silencio abunda tu cuerpo y tu alma. Pero, ¿Cómo es que llegamos a este punto de nuestras vidas? ¿Cómo es posible que de un instante a otro dejes de respirar y tu cuerpo no pueda reaccionar? Todo parecía estar bien hasta que… - No, papá, no estoy con Manaow, ya te lo había dicho – Afirmo Kao ya cansado de escuchar a su padre. Nunca nadie ha podido engañar al Sr. Ariyasakul, ni siquiera su propio hijo y esta vez no sería la excepción, por lo tanto, por el otro lado de la línea el padre de Kao exclamó: - No me mientas Kao, te ordeno ahora mismo que regreses a casa o tendrás serios problemas, te lo advierto. - ¿Por qué no me dejas ser feliz por una vez en la vida, papá? ¿Ya tengo 19 años, déjame ser libre, acaso no has entendido que la libertad es el oxígeno del alma? - ¡Que frase tan ridícula! – Exclamó con enojo su padre. Manaow que efectivamente permanecía al lado de Kao en el automóvil, le pidió que dejara de provocar a su padre y le propuso celebrar su cumpleaños otro día, porque, en efecto era el cumpleaños de Manow aquel sábado lluvioso y nublado, Kao simplemente le dijo que todo estaría bien y le prometió que nadie los separaría. - No voy a volver a casa hasta mañana. Lo siento, pero quiero pasar tiempo con mi novia y tus ridículos prejuicios no me lo van a impedir – sin darse cuenta había dado a entender que estaba con su novia, que tonto, pensó para sí mismo. - Ya te dije que esa muchachita no te conviene, así que más te vale que llegues a casa en 10 minutos. Kao ya agotado de escuchar a su padre dijo: - Como tú digas. Claro que él no se alejaría de Manaow solo por el clasismo excesivo de su padre, ya que por muy poderoso o peligroso que sea este, no le tenía miedo. El aire frio de la noche se metía por las ventanas chocando con los rostros de ambos, nada ni nadie podría romper la burbuja de felicidad que se había creado entre ambos, aquella felicidad era tan grande que Kao no se fijó 46
cuando paso por la vía férrea en donde un tren se estrelló con su vehículo haciéndolo pedazos con ellos dentro. Ni siquiera eso pudo borrar la sonrisa de felicidad de aquellos jóvenes que se encontraban perdidamente enamorados. Su amor podía vencer cualquier problema, prejuicio, clasismo, critica… Aunque esta vez la muerte los había vencido a ellos. Porque aquella noche murieron dos almas gemelas que si al final no eran el amor de su vida, podrían decir que se equivocaron de vida y no de amor. (Inicios del siglo XXI, Tailandia) - Tengo que volver pronto – dijo sin separar la mirada de aquel hermoso cielo estrellado. - ¿Por qué debes volver pronto hoy? – me gire para observarlo y poder admirar su silueta. Aquel momento era único, solo nosotros dos, el cielo, las estrellas, la naturaleza y los grillos que se oían por el silencio tan tranquilo y acogedor. Desearía permanecer junto a él así toda la vida, tomados de la mano y muy enamorados. - Mi padre volverá a casa en unas horas, tengo que regresar antes de que él llegue – Se giró y nuestras miradas conectaron. - ¿Qué pasará si no llegas? – Cuestioné. - Probablemente él me golpee – Agacho la mirada y me acerque aún más a él. Pasaron minutos de silencio y de repente una pregunta inundo mi mente. - Kao… - No sabía si estaría bien continuar. Él siguió observando las estrellas, así que decidí continuar. - Si fallecemos y volvemos a nacer, ¿Crees que nos encontremos de nuevo? – Me miro extrañado. - Tonterías, ves muchos dramas – Reímos, era cierto, pero estaba hablando en serio. - Hablo en serio. - Claro que lo haremos, buscare hasta encontrarte. - ¿Lo prometes? – Por muy raro que sonara, yo si creía en el hilo rojo, volver a nacer y demás. - Lo prometo – Sonreímos y nos acercamos poco a poco para sellar nuestra promesa con un beso dulce y especial. Abrí mis ojos de golpe tratando de respirar adecuadamente, sentía mi pecho bastante agitado mientras escuchaba la alarma de mi cuarto sonar, ya eran las 7:00 de la mañana y así mismo, mi primer día de clases en la universidad, estaba claro que no quería llegar tarde en un día tan importante 47
como este. Mientras me lavaba los dientes solo pensaba en aquel sueño, aquella promesa de dos personas que sentía estaban relacionadas a mí de alguna manera. Deje esos pensamientos a un lado cuando el reloj marco las 7:30 am, debía apresurarme. Llegué a la universidad justo a tiempo, mientras esperaba a que avance la fila para poder anotarme en algún club conocí a un chico llamado Prem, alto, deportista y muy buena onda a mi parecer. - ¿Ya sabes a que club te gustaría entrar? – Me cuestiono Prem. - Si, me gusta mucho preparar postres, así que me iré por el club de cocina, ¿tú? – Desde muy pequeña me ha encantado estar en la cocina, nací con ese amor por preparar postres y comida deliciosa. - Yo me iré por el club de natación, ahí donde me ves soy muy bueno – Vaya que este chico era divertido, de seguro nos llevaríamos muy bien – Además quiero conocer al capitán del equipo, he escuchado que es muy guapo y además inteligente – Se quedó impactando observando algún lugar del patio para después señalar a un chico alto, de piel clara, cabello castaño oscuro y muy lindo. – Mira, él es Dean, de quien te estaba platicando. Y el que está a su lado es Boum, ambos son capitanes del equipo de natación. De repente, aquel chico llamado Dean, me miro y sentí una especie de corriente recorrer mi cuerpo, sentía que ya lo conocía de algún lado, pero sería imposible porque me mude a Tailandia apenas hace 2 meses, solo nos miramos por unos 20 segundos aproximadamente y después siguió su camino, pero en mi mente me cuestionaba: ¿Por qué me siento triste cuando lo veo? - Del, ¿Estás bien? – Me pregunto Prem. - Si, lo estoy, ¿Desayunamos juntos? – El asintió y nos dirigimos al comedor de la Universidad, ya ahí escogimos nuestra comida y nos sentamos. Entre platicas y risas, un sonido muy fuerte se hizo escuchar cerca de donde estábamos, sentí mi cuerpo temblar, de mis ojos salían lágrimas y mi respiración era acelerada, en ese mismo instante tenía mucho miedo. - Del, ¿Qué tienes? – Prem estaba alarmado y por alguna razón no podía responderle, había un nudo en mi garganta que no me permitía decir una sola palabra. Pero cuando por fin pude respirar adecuadamente y bebí un poco de agua, le conté a Prem: - Tranquilo, me pasan este tipo de cosas desde muy pequeña. 48
- ¿Cómo? ¿Por qué? - Es por el sonido de los automóviles al chocar, me asustan ese tipo de ruidos y nunca he sabido él porque, claro que si es un ruido fuerte y sé que va a escucharse como en las películas, no me asustaría. Al terminar las clases me dirigí al centro comercial, necesitaba varias cosas para preparar un postre que me encantaba, el famoso Leum Kleun tailandés. Al llegar mire en un pasillo del supermercado a Dean, me miro y se acercó a mí. - Del, ¿cierto? – me dijo, a lo cual me sorprendí. - Así es – De alguna extraña manera su mirada me hacía sentir miles de cosas inexplicables. - ¿Te gustaría ir por un helado? – Directo el muchacho, pensé, aunque debía descifrar que significaba esta sensación cuando lo veo, así que acepte. La tarde junto a él fue muy divertida, era un chico muy simpático. Seguimos saliendo por varios días más, el me invitaba a comer, al parque, al cine y poco a poco nos fuimos encariñando el uno con el otro, me sentía protegida cuando estaba con él, era una sensación muy agradable. Con el pasar del tiempo, me había pedido ser su novia 3 meses después de nuestra primera salida juntos, llego a mi casa con flores y chocolates y claro que acepte, porque en muy poco tiempo logro ganarse de una manera única mi corazón. Era sábado, un día muy lluvioso, en el que preferí quedarme en mi casa y descansar. - ¡AYUDA! ¡POR FAVOR! ¡UNA AMBULANCIA! – Gritaba la gente con miedo. "Sonidos de ambulancia se hicieron oír" – ¡HAN LLEGADO! Del despertó asustada y truenos comenzaron a caer de aquel cielo lluvioso. Ahora comprendía todo, esa era la conexión que sentía con Dean… Ellos ya se habían conocido en otra vida y al parecer estaban destinados a estar juntos, es por eso que muchas veces sus sueños eran los mismos y en tan poco tiempo llegaron a amarse, porque efectivamente, ellos se amaban y la vida les estaba dando otra oportunidad de permanecer juntos, ahora sin barreras, ni personas que cuestionen su amor. FIN.
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Sin importar lo difícil que sea la situación o el problema nunca debes agachar la cabeza o rendirte ante las circunstancias de la vida, debes luchar y defender tus ideales, tus creencias, al amor y todo lo que te haga feliz, cambiar las ideas erróneas de las personas y dejar a un lado el clasismo, el machismo y la discriminación porque en la guerra y en el amor todo se vale.
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Un nuevo comienzo Autora: Britany Gómez
Empieza la historia con Jhoel, un joven estudioso de una institución privada, Jhoel al salir del colegio tenía los planes de toparse con el grupo de sus amigos de su anterior escuela. Jhoel al ya salir de su colegio camino hacia el lugar donde tenía ya planeado verse con sus amigos, al momento de llegar con sus amigos entre el grupo vio a una joven chica muy bonita Jhoel al darse de ella pregunto a uno de sus amigos: Jhoel: ¿Quién es esa chica tan bonita? Uno de sus amigos respondió Alice: A te presento ella se llama Domenica Jhoel al ver a tan preciosa chica se quedó tan impactado ya que sabía que habían empezado un gran sentimiento por ella en ese momento Jhoel no supo cómo reaccionar. (Pasa 1 semana) Jhoel seguía con un gran sentimiento por Domenica no sabía cómo estar ya que para él era muy raro y muy distinto, ya que sabía que en cada salida con sus amigos se encontraría con ella, muchos sentimientos rodaban por su mente y su corazón pero no saber decírselos y expresarlos se convertía en un infierno para Jhoel. Pasa el tiempo y Jhoel y sus amigos empiezan a entrenar en un equipo de futbol donde está conformado por (Mateo, Alice, Jhoel, Kevin y Atik) estos chicos también amantes de la música empieza hacer dembow, una de las cosas que Domenica no ama ni le gusta la música, pero Jhoel sabe que si Domenica se entera que está haciendo música es muy posible que lo deje ya que es uno de sus mayores miedos y una de las cosas que a ella no le gustan. Domenica queda en verse con Jhoel para hablar sobre su relación, Jhoel ya espera escuchar la palabra términamos y saber el dolor que va a sentir cuando pase eso. Los dos se encuentrar donde quedaron encontrarse, llega el uno y el otro también Domenica dice que ella nunca quizo lastimarle ni ilucionarlo al contrario era hacerlo feliz y saber lo mucho que era importante en su vida y solo decir que él era todo para ella pero ella no lo valoro o simplemente lo está dejando ir Domenica le dice a Jhoel Domenica: Lo siento, conseguí una pareja que pueda verlo todo los días, tenerlo junto a mí, y no simplemente hacer llamadas por las noches, llamadas que duran pero no sentirse el uno al otro es muy diferente y 51
distinto a una pantalla. Jhoel con las lágrimas en los ojos y la mano en el corazón le dice que porque hace eso, el enverdad la quiere y no es fácil dejarla ir asi que con el dolor le pregunta quién es esa otra persona con la que se está viendo a diario a lo que responde que es uno de sus amigos, él no puede creerlo uno de sus amigos como pudo traicionarlo con ellos él no sabe cuál de todo es asi que piensa en una sola cosa Jhoel: Aver atik no puede ser él tiene su novia así que no puede ser, Mateo es muy infiel así que él no es, Kevin él es de sentimientos para una sola persona tampoco puede ser él, pero Alice él es el único que me presento a Domenica cuando la conocí como me pudo hacer eso. Al saber esto Jhoel se sintió mal y el dolor fue muy grande y muy doloroso así que su única opción fue dejarla ir muy fácil y solamente afrontar las cosas como son, pero el en el fondo sabía que si era el verdadero amor no lo dejaba ir así de fácil. (Pasan 3 meses) Jhoel ya se siente lo suficientemente bien en su nueva relación estable, conoció a su pareja en la universidad al salir para su sorpresa se encuentra con Domenica su ex en ese momento Jhoel sintió una gran sensación con de extrañarla pero él sabe que no puede regresar con alguien que lo daño emocionalmente y físicamente, así que siguió con su camino mientras avanzaba con la mirada hacia abajo. Llego a su casa y no pudo aguantarse las lágrimas lloro pero sabía que nadie merecía algo que ella no valoro, salió a entrenar como de costumbre y se dio cuenta que su amigo Alice estaba de nuevo en el entrenamiento Jhoel muy confundido dijo Jhoel: Como puede estar uno de mis mejores amigos aquí, después de tanto veo que el destino nos unió pero no para tener la misma amistad de antes. Siguió con su entrenamiento tratando de ignorar a su amigo digámoslo entre comillas, Jhoel termina su entrenamiento y va a su casa a verse con su nueva pareja, salen a comer y en ese momento se da cuenta que en el mismo restaurante se encontraba Alice y Domenica, Jhoel en ese momento estaba incomodo con su pareja se pararon y se fueron como si no hubieran visto a nadie Su nueva pareja Camila le dijo Camila: ¿Nos fuimos de ahí porque estaban tu ex y tu amigo verdad? Jhoel: Si, y si ya viste que estaban ellos no es necesidad recordármelo 52
mejor vamos al cine y olvidemos ese mal momento Caminan juntos hacia la sala del cine y mientras veían su película se dan cuenta que una gran bulla y gritos desesperados en los pasillos atormenta a la gente, rapidamnete se levantan y van a ver y se dan cuenta que Domenica su ex está asustada y corre a una velocidad muy rápida, pero ¿De que huye? ¿De qué escapa? ¿De quién está corriendo? Es muy raro así que Jhoel coge de un brazo a Domenica y le pregunta Jhoel: ¿bueno tú de quien huyes? Domenica asustada responde Domenica: Lo siento pero me siguen y yo estoy en peligro perdón pero tengo que irme Asi rápidamente Domenica corre mientras de tras de ella va la nueva pareja de Jhoel se da cuenta que ella está en un baño del cine y rápidamente le pregunta Camila: ¿Qué te pasa confía en mí, quien te sigue? Domenica le responde Domenica: Lo siento pero es mi ex pareja Alice se enteró que estaba con uno de sus amigos y ahora su único pensamiento es matarme y no saber nada mas de mi estoy asustada me siento fatal Y así dijo Camila Camila: El karma llego y ahora tú mismo tendras que afrontar tus cosas, es el momento indicado para saber que ese mismo dolor de traición sintió Jhoel y tú solo pensaste en cambiarlo Asi camila la dejo y salió en ese momento Jhoel entra y encuentra a Domenica llorando y asustada y ella pensaba que era momento de morir Alice le dijo Alice: Tan tonta jaja ¿pensaste que a mí me ibas a traicionar? Te equivocaste ahora es mi momento de vengarme y hacerte lo mismo que le hiciste a Jhoel Como Domenica estaba confundida y solo decía, osea me utilizaron como fue esto que está pasando y ahora es una de las más feas declaraciones Alice: Si fue todo una apuesta de quien te conquistaba más rápido y al ver que le gane a Jhoel te quedabas para mí 50 dolares es mucho y ahora que ya gane no me sirves para nada espero no me busques más, Adiós Ella tan indignada solo se fue y pensar que todo ese sentimiento que ella tenía por Jhoel fue muy falso y que si en verdad el la amo nunca la hubiera traicionado de tal manera que lo hizo. Son sentimientos bonitos que nunca debes dañárselos a una persona y que 53
sepas que el amor que sientes no lo dañes por apuestas o dinero primero tu felicidad el resto será después. Fin.
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El deseo de amar para siempre Autora: Nicole Jara
Capítulo 1: Si tuviera capítulos, este es el formato No soy el tipo de persona que actúa sin ni siquiera pensarlo, yo pienso y luego actúo, siempre suelen decirme que sobre pienso mucho las cosas, pero a veces es necesario. Vivía en Sídney, Australia. Sí, en ese país donde encontrarás los animales más salvajes y exóticos: Avispa de mar, cocodrilo de agua salada, tiburón anguila, entre otras especies raras. Les voy a contar como conocí a mi novio Daniel, ambos tenemos un amigo en común que se llama Martín, él le habló sobre mi y decidió mandarme un mensaje de texto diciendo “Hola” y yo le contesté de igual manera y así empezó está historia. Al principió todo era de color rosa pero con el pasar de los meses se volvió distante, siempre que se sentía mal de alguna u otra forma era mi culpa y yo simplemente le pedía perdón, muchos de sus amigos me decían que yo lo lastimaba, pero yo no hacía nada más que amarlo. Daniel para mí es mi alma gemela pero siento que yo no soy la de él, dice que me ama mucho pero no encuentro seguridad en su voz, cada día que pasa siento que pierde el interés por mí. Daniel me comenzó a ignorar, ya no me buscaba y simplemente no me hacía caso, así que decidí hablar con él y preguntarle el porque de lo sucedido, así que estoy de camino a su casa. Al llegar Daniel me abre la puerta y no parece muy emocionado que digamos, me ve de pies a cabeza y solo se queda callado observándome, así que decido romper el silencio. Amy: Hola Daniel. Daniel: ¿Qué haces aquí? Me sorprende la seriedad en su voz. Amy: Vine a ver a mi novio, ¿o acaso no puedo? Lo digo de manera juguetona. Daniel ríe. Daniel: Ambos sabemos que no estás aquí para eso, ve al grano. Amy: Está bien, me descubriste, pero quería preguntar. ¿Porqué estás muy distante conmigo estos últimos días? Daniel: Estuve ocupado con la preparatoria, prometo llamarte, debo irme. Amy: Si quieres voy contigo. Daniel: No te preocupes, te llamo luego. Daniel se despide plantando un beso en mi frente y se fue, ¿A dónde? No lo sé, solo me queda esperar hasta que me llame. 56
Daniel nunca me llamó, me preguntó si debe estar ocupado, pero decido no molestarlo, mejor voy a llamar a mi mejor amiga Valentina. Valentina: Hola loquita. ´ Amy: Hola babosa. Valentina: ¿Qué pasó? ¿Estás bien? Amy: No del todo bien… Valentina: ¿A quién vamos a matar? Amy: JAJAJAJA a nadie babosa. Valentina: Entonces… ¿Qué paso? Amy: Daniel me ha estado ignorado por varios días, no tengo un buen presentimiento. Valentina: Ayy amiga, debes dejar que las cosas fluyan y ver que sucede, no debemos adelantarnos, pero si Daniel te hace algo, no dudaré en golpearlo. Después de un rato colgamos y nos fuimos a dormir. Al siguiente día fui a pasear al parque y me tope con Daniel, pero no estaba solo, estaba con una chica muy guapa, pero al fijarme bien me di cuenta que era mi prima y de un momento a otro se besaron, escuche mi corazón romperse y comencé a sentir como las lágrimas se formaban en mis ojos, no lo podía creer. Apenas reaccioné la primera idea que se me vino a la mente fue terminarlo, no podía seguir haciéndome daño, esto ya había pasado antes, pero yo lo había perdonado porque me dijo que iba a cambiar, fui una tonta al creer eso. Amy: Daniel, tu y yo terminamos. Daniel apenas me ve me toma del brazo. Daniel: Tu no me vas a terminar, eres mía comprendes. Amy: Suéltame, no soy un objeto como para que me digas eso, yo no soy tuya ni de nadie. Me suelto de su agarre y me voy a casa. Fui una tonta, una ilusa al confiar en él, rápidamente me seque las lágrimas y me arregle para ir a entrenar Básquet, recientemente me había cambiado de equipo, así que era la nueva. Al llegar habían muchos chicos y chicas a los cuales no conocía, pero entrenar era lo único que no haría pensar en el imbécil de Daniel. Al acabar el entrenamiento fui directo a mi casa y para mi sorpresa Daniel estaba parado en la puerta. ¿Me estaba esperando? Estoy sorprendida, pero si viene a pedirme que volvamos, está muy equivocado si piensa que lo volveré aceptar. Daniel: ¿Dónde estabas Amy? Amy: Ehh Hola, eso a ti no te importa, ahora déjame entrar. 57
Daniel: Claro que me importa, eres mi novia. Amy: ¡¿Disculpa?! Tu y yo ya no somos novios, pensé que te lo había dejado claro. Daniel: Amy, tu a mi no me vas a terminar así como así. Amy: Lárgate de mi casa Daniel. Daniel me sujeto del brazo muy fuerte. Amy: Suéltame o voy a llamar a la Policía, Daniel me estás lastimando. Para mi suerte uno de los chicos con la cual entrenaba estaba pasando por ahí y decidí gritar. Amy: ¡AYUDA! El chico apenas me vio no dudo ni un solo instante al acercarse. Edward: ¿Todo está bien? Al parecer se da cuenta de que me está agarrando del brazo muy fuerte. Edward: Amigo suéltala. El me agarra del brazo y yo me suelto de su agarre. Edward: Si no te vas llamó a la policía. Daniel: Amigo es mi novia, respeta. Amy: Ya te dije que terminamos, ahora lárgate. Daniel: Ni creas que esto se va a quedar así Amy, tu eres mía. Y con esas últimas palabras Daniel decide irse. Amy: Muchas gracias. Edward: JAJA no te preocupes no hay de que. Amy: ¿Cuál es tu nombre? Edward: Me llamo Edward y tu Amy ¿verdad? Amy: Siii JAJJAJ Al siguiente día mi celular no paraba de sonar, todos los mensajes eran de Daniel, diciéndome que soy de él y que esto no se iba a quedar así. Siendo sincera me di cuenta que el amor siempre me lleva al fracaso, porque ya me había pasado algo similar en el pasado con un chico llamado Fabián, pero esa es otra historia. El día de hoy quede en verme con Valentina para contarle lo sucedido. Valentina quedo impactada con lo que le conté. Valentina: Este pendejo me va a escuchar. Amy: No le digas nada, es mejor ignorarlo. Valentina: Pero amiga ¿y si te vuelve a buscar? Amy: Si lo hace estoy preparada. Valentina: Pero ese chico Edward ¿era lindo? Amy: Tal vez 58
Valentina: AAAA ¿y si él te intenta conquistar? Amy: Amiga no quiero nada en este momento, tengo miedo de que me vuelvan hacer lo mismo. Valentina: A veces las cosas pasan por algo, aparte lo que pasó te ayuda a madurar y mejorar como persona. Amy: Tienes razón, aparte Daniel no merece ni una sola lágrima de mi parte. Al siguiente día fui a entrenar y Edward se paso todo el entrenamiento mirándome de pies a cabeza, pero no me dirigía la palabra, así que tome la iniciativa y me acerque a él. Amy: Hola Edward – le sonrió. Edward: Hola Amy, ¿pasa algo? Amy: Vi que me estabas viendo… ¿Todo bien? Edward: Ehhh si, solo que se tienes la camiseta manchada de pasta de dientes. – señala mi camisa. Amy: NOOO, que vergüenza – cubro mi cara. Edward: JJJAJAJA te ves tierna. Amy: jaja muy gracioso, todo el mundo me vio y yo no me di cuenta. Edward: El lado positivo es que ya lo hiciste JJAJAJAJ. Decido irme de ese lugar lo más rápido posible, no podía creerlo, todo el curso me había visto, que vergüenza. Espero que este día no sea peor. Estaba caminando directo a mi casa cuando de repente me llega un mensaje de Edward invitándome a comer, por supuesto le dije que si, tenía que arreglarme y no tenía ropa que ponerme pero cuando lo digo, lo digo enserio, la mayoría de mi ropa se estaba lavando y las limpias estaban degastadas, con huecos, hasta algunas prendas ya eran transparentes y no podía ir así. Al llegar al centro comercial me compre un vestido negro pegado al cuerpo y una chompa de jean, no era tan elegante pero si casual y quedaba con casi todo tipo de ocasión porque no sabía a donde me iba a llevar Edward. Al salir del centro comercial me lleve una gran sorpresa, Daniel estaba parado besándose con mi prima, la verdad nunca pensé que mi prima me traicionaría de esa forma, me decepcionó porque éramos muy unidas, pero todo lo que paso me ayudo a reflexionar, en que no debo confiar en todas las personas, porque algunas me pueden apuñalar por la espalda. Tengo que admitir que me duele ver a mi ex pareja con mi prima, pero la vida sigue y no debo detenerme a sufrir por un hombre que no me merece. De un momento a otro veo a Daniel acercarse a mi. Daniel: Hola Amy. 59
Amy: Ehh Hola Daniel ¿Qué pasó? Daniel: Quería pedirte perdón por todo el mal que te he causado, quiero que sepas que yo si te quiero pero no te amo y me di cuenta muy tarde porque uno de los dos salió lastimado y lastimosamente fuiste tú, lo siento mucho de verdad, te dejaré en paz y espero que podamos ser amigos. Amy si no quieres está bien pero no olvides que cuentas conmigo ¿sí?, yo por fin encontré el amor, espero que tu también lo encuentres. No sabía que decir, estaba en shock, el amor de mi vida ya no iba a luchar por mi si no por alguien más, sentía como las lágrimas se formaban en mis ojos, pero rápidamente me las limpie y decidí hablar. Amy: No te preocupes, eso ya quedó en el pasado, espero que tu y mi prima sean felices. Daniel: Gracias por entender, ¿Algo que quieras decirme antes de rime? Amy: Mmm no.. se feliz ¿si? Y así es como vi al amor de mi vida irse y correr a los brazos de otra mujer, quería decirle que se quede y que no me abandone, que lo necesito para ser feliz, pero si Daniel es feliz a lado de otra persona… debo dejarlo ir. Yo sé que todo lo que comienza tiene que terminar, pero nunca imagine que acabaría tan pronto. Por otro lado ya estaba lista para ir a verme con Edward. Edward fue a verme a mi casa, en el restaurante la pasamos genial, nos reímos mucho y pude conocer muchas cualidades que no sabía que tenía Edward, por ejemplo le da de comer a los animalitos de la calle y eso es muy generoso de su parte. Ya conocía a Edward un año y ya nos conocíamos más, muchas de las chicas del entrenamiento me decían que Edward estaba enamorado de mí, yo no lo creía hasta que comenzó a darme muchos regalos. El primer día me invito a comer una salchipapa después del entrenamiento, el segundo día me dio una cartita hecha a mano con muchos detalles, y el tercer día me dio un abrazo tan hermoso que no quería que nos separemos nunca. Me estaba enamorando de él poco a poco, tenía miedo de intentar algo nuevo con alguien pero si no lo intentaba nunca sabría lo que podía a ver pasado, hasta que llegó el gran día 7 de marzo del 2022, Edward se me había declarado de la manera más hermosa que existe y obviamente yo le dije que si, ese día él me había dado flores, comida, una carta, todo era perfecto. Ahora llevo 2 años de relación con Edward y ya estamos en la universidad, 60
no sé si duremos toda la vida pero yo lo amaré hasta que mi cuerpo se convierta en polvo y mi alma deje de existir, cuando una persona ama a alguien trata de hacer todo lo posible para que esa persona sea feliz, yo era la mujer más feliz al lado de Edward. Nuestra historia apenas está empezando. Enseñanza: Debemos tener amistad con todos y confianza con pocos, porque nunca se sabe cuando la persona que amas te dejará por alguien más. Fin.
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Trapped dreams Autora: Ingrid Moreno
Asustado y cansado las gotas de sudor cubrían su frente, no sabía dónde estaba, logro visualizar a sus amigos junto a él pero se encontraba dormidos, se preguntaba que hacen en ese lugar, un bus escolar que al parecer en él se podía visualizar máquinas y cámaras que vigilaban a personas si su vista no le fallaba, intento arrastrarse a la cabina del conductor, pero al llegar valla sorpresa se llevó, nadie conducía el transporte, esto le asusto tanto e intento ir a despertar a sus amigos, pero no obtuvo resultado alguno, el bus mientras avanzaba paso por un bache, esto hizo que el chico cayera y se golpeara la cabeza, cosa que lo dejo inconsciente al instante. El brillo del sol y la luz de esta lo encegueció, este desvió la vista y cubrió su rostro con una mano, este escucho varios sonidos: eran voces para ser exactos, voces de sus amigos. En ese instante solo sintió una ola de confusión que fue mezclada con pánico, pero este se fue al sentir varios brazos sobre él, era un abrazo. - Oh vamos, como va a estar bien, ¿no lo ves acaso? No puede pronunciar ni una palabra. - Ya, cállate Félix, no estas ayudando – Le respondió aquel chico que abrazaba a Derek. - Ok, ok solo quería bromear un poco, no te enojes que te ves más viejo, dijo Félix. - Bueno ya cayesen los dos – una voz fina sonó, era Sofía una chica de estatura baja y de pelo lacio. Derek solo se quedó parado intentando procesar todo lo que estaba pasando, estuvo tan confundido y a la vez feliz al saber que sus amigos están bien. - Me alegro que estén bien chicos, pero que hacemos aquí, que es este lugar. - No lo sabemos aún, hemos llegado cada uno hace poco. - Le respondió Félix Mientras se preguntaban que hacían en aquel lugar, decidieron ir a investigar, el lugar estaba muy desolado y lleno de árboles, paso unos minutos y una sirena junto con una voz se escuchó por todo el lugar acto que asusto al grupo de amigos. - Queridos jugadores sean bienvenidos a la primera prueba, por favor acercarse al centro del campo Los jóvenes no entendían nada, pero decidieron ir a aquel lugar que dijo la mujer por curiosidad, al llegar vieron a más personas acercarse, eso les alivio un poco, ya que estar en ese inmenso lugar solos no era algo agradable. 63
- Gracias a Dios no somos los únicos en este lugar – dijo Sofía. - Si es verdad – respondió Derek. Primer juego “Jenga” los jugadores deben retirar un bloque del nivel que quiera utilizando tan sólo dos dedos y procurando que no caiga la torre, después debe colocar la pieza encima para formar nuevos niveles. El objetivo del juego es quitar todas las piezas posibles sin que caiga la torre, personas que fallen serán eliminados inmediatamente, sin más que empiece el juego. De un momento a otras personas se acercaron y pusieron las piezas en diferentes mesas, mientras jugaban, un grupo dejo caer una pieza, los demás grupos solo se limitaron a ver y a permanecer callados, las personas de antes se acercaron y los mataron al instante. Las demás personas al ver esto se asustaron y empezaron a correr en el lugar, pero mientras intentaban escapar una bala les atravesaba en la cabeza. Derek junto con sus amigos al ver esto y ver que si intentaban huir los matarían, siguieron jugando, hasta que pasaron cinco minutos y termino el juego. Así pasaron los días y para ellos era un nuevo reto, ya que no solo fue una prueba si no varias, como escondidas, rayuela, atrapadas, lo más extraño es que eran juegos que todo mundo jugaba de pequeño, pero la diferencia es que su vida estaba en juego. En los diferentes retos, se eliminaban a las personas, así quedando solo un grupo ganador, y si este último grupo fue el de Derek, pero lastima mente uno de ellos no paso una prueba y murió. - Ya estoy cansada de esto, ¿quién tuvo la idea de hacer estos juegos? - Dijo Sofía. - Todos los días es un martirio, y si fallamos morimos, no es justo, es cruel – dijo Félix - Saben chicos, lo peor de todo es que aún no sabemos dónde estamos y él porque, esto parece como la serie del juego del Calamar y Correr o Morir juntas – dijo Derek. - Es verdad, pero eso solo pasa en las películas no en la vida real. - Ojalá fuera solo un sueño. - Pero… si es un sueño que cosa vi para haber soñado semejante cosa – le respondió Derek un poco desanimado. - Yo creo que si se, tu crimen es estar encerrado todo el día en tu cuarto y ver películas de terror – le dijo Sofía riéndose. Los chicos se encontraban sentados charlando normalmente, esperando que sea otro día y ver que otro juego les esperaba, no estaban asustados ni 64
alarmados, pues estar 10 días jugando, donde pudieron haber muerto, se acostumbraron y le vieron de una manera divertida los juegos. Al siguiente día Eran las 8 de la mañana y la voz de aquella mujer se hizo presente de nuevo haciendo despertar al grupo de amigos. Jugadores acercarse al centro del campo Sofía se levantó primero, y decidió ir a levantar a los demás, una vez ya despiertos fueron al centro del lugar. Una vez allí un grupo de personas se acercaron y les golpearon en la cabeza mientras ellos estaban despistados. ¡AAAAAHHHH! – grito Derek acostado en su cama. Félix, Sofía, Alex, donde están amigos, y esto? ¿Qué hago aquí en mi cuarto? En ese instante su teléfono recibió una llamada, era Alex, Derek no dudo en responder. Alex, ¿qué paso? ¿estás bien? y Sofía has hablado con ella, ¿Félix está en su casa? ¿está contigo?, respóndeme por Dios Alex. - Ey ey ey tranquilo, habla un poco más lento que no eres un rapero, y si ellos están bien es más te estamos esperando, ¿acaso te olvidaste que hoy nos íbamos a reunir por tu cumpleaños? Derek - ¿Mi cumpleaños? pero si es el quince de marzo y hoy es veinticinco. Alex - Pero que dices, dormiste mal acaso, mira tu celular hoy es quince de marzo, mejor muévete que te estamos esperando en la casa de Sofía. Derek aún seguía desconcertado y los juegos? ¿El golpe? ¿Me volví loco? En la casa de Sofía ¡FELIZ CUMPLEAÑOS!! – gritaron los amigos y empezaron a cantarle feliz cumpleaños a Derek Paso el tiempo y los amigos empezaron a celebrar, pero Derek estaba un poco indiferente y sus amigos se dieron cuenta. Santiago – Derek estas bien? Te noto un poco tenso. ¿Chicos si les cuento algo demasiado raro, me creerían? Sí, claro cuenta – le respondieron Derek empezó a contar toda la historia, de principio a fin, como jugaban, como Santiago murió, la voz de una mujer Los chicos no entendían nada, pensaron que Derek tuvo un gran sueño. - Derek eso no pasara, solo fue una pesadilla, un mal sueño – dijo Sofía - Si eso creo, pero se sentía tan real. Y en ese momento las luces se apagaron y unos hombres llegaron y los durmieron. Derek se levantó y valla sorpresa se llevó se encontraba en el bus de su sueño, todo era igual se acercó a la cabina no había nadie, en ese momento 65
se tropezó y se cayó. - Derek! Derek! Levántate ¿Dónde estamos? – dijo Félix. Derek se levantó y vio que estaba en aquel bosque, acaso… ¿está soñando de nuevo? No, no lo creo estaban celebrando mi cumpleaños, que hago aquí. - Chicos esto me da miedo – dijo Santiago De pronto una voz resonó en el lugar. Queridos jugadores sean bienvenidos a la primera prueba, por favor acercarse al centro del campo Derek reconoció la voz al instante y dijo. ¿Chicos... se acuerdan del sueño que les conté? Sí, pero no era real – dijo Sofía. Pues aparecer si lo es, está pasando todo igual al sueño – respondió Derek. ¿Ósea me estás diciendo que predijiste lo que iba a pasar? – dijo Félix. Eso parece… estamos perdidos, es como si estuviéramos atrapados en mi sueño. Fin.
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Mi historia me fortalece Autora: Camila Orbe
Nunca imaginé que me sentiría tan feliz como hoy, hoy es un día lleno de alegrías y logros que realicé a través del amor, la amistad y la comprensión, de las personas que más quiero. Mi nombre es Alicia y todo comenzó cuando tenía apenas seis años la cuarta de mis cinco hermanos, vivíamos en un pueblo lleno de alegría y amor, llamado El Arbolito, donde hacían fiestas de pueblo con bandas, toros, los juegos tradicionales eran muy bonitos, su gente era muy amable y cordial, mis padres trabajaban duro para darnos lo necesario a mí y a mis cinco hermanos, Rafael de dos años, Luis Miguel de tres años, Lucas de cinco años, Raquel la mayor de ocho años. Recuerdo que mi mamá nos llevaba muy temprano a la escuela. Mi mamá se llamaba Sara, tenía 42 años, una mujer luchadora, bella, trabajadora, emprendedora a quien yo respetaba y quería con toda el alma. Ella trabajaba en casa criando y vendiendo pollitos, cuyes, etc., también hacía los que aceres domésticos, nos preparaba siempre nuestra comida, por cierto, cocinaba muy rico, lo que más me gustaba era el cuy asado el plato tradicional de la sierra, mientras que Marco mi padre, un hombre de 46 años de edad que trabajaba en la agricultura, el sembraba papás, zanahoria, etc., en el terreno de mis abuelitos. Salía a vender al mercado en caballo hasta al pueblo el Arbolito, al terminar la jornada mi papá cobraba su diario, llegaba muy cansado a casa y abrazaba a su familia, en la hora de la cena todos nos reuníamos, nuestros padres nos contaban las historias de nuestros antepasados, era emocionante escucharles. Al pasar los días mamá comenzó a sentirse cansada, al poco tiempo los médicos le detectaron cáncer, mamá luchó contra la enfermedad durante un año, los médicos hicieron todo lo posible con Quimioterapias, tratamientos muy fuertes, pero todo fue imposible, hasta que ya no pudo más, no contábamos con los recursos necesarios, por eso no recibió el tratamiento médico adecuado, en ese momento sentí mucho miedo, mi corazón palpitaba a mil por hora, hasta que llegó la mala noticia, estábamos sentados en la sala de espera de un hospital con papá y mis hermanos, cerraba los ojos, le pedía a Dios por la vida y salud de mi mamá quería que se quede por muchos años más, había muchos momentos por compartir pero tampoco quería verle sufrir, me dolía mucho lo que estaba pasando, los ojos de papá, eran tristes tenía preocupación aunque no perdía su sentido del humor para hacernos sentir mejor. Sentí los pasos a lo largo, se iba acercando el médico, llamó a papá a hablar en privado, vi su reacción a las palabras del doctor, mi mamá había falleció, 68
lo recuerdo como si fuera ayer, en ese momento me sentí sola, triste, culpable de no haber podido ayudarla, tenía sentimientos encontrados, pasaron meses y comprendí que me sentía así porque apenas era una niña que dependía del amor y los cuidados de mi madre. Al perder a mi mamá, mi vida cambió por completo y ya nada fue como antes, en medio del dolor que sentía, aprendí muchas cosas, aprendí a sobresalir con trabajo y responsabilidad como mamá nos enseñó, pero aún contaba con mi papá, salíamos a trabajar al campo a las 4 AM de la mañana, hacía mucho frio, en el tiempo de antes no había buses o camionetas los viajes se hacía en caballo nos dirigimos a la montaña a los terrenos de los abuelitos, por una parte era divertido conocer la naturaleza, los animales, labrar la tierra, cocinar en el campo disfrutar del aire libre con mi papá y mis cuatro hermanos, por otra parte era difícil adaptarse a la vida del campo ya que el trabajo incluía dejar atrás mis estudios para apoyar a mi papá en su trabajo, y así salimos adelante. Todas las cosechas se vendían en el mercado del pueblo, a papá ya le alcanzaba a comprar todos nuestros alimentos, éramos muy felices con él. Desde los 8 años de edad ya sabía trabajar, mis padres me enseñaron a respetar, ayudar a los demás, recuerdo el gran consejo de mi mamá ella solía decirnos, "pórtense bien para que les vaya bien" su buen consejo lo recuerdo todos los días, hasta el momento me ha ayudado a ir por el camino del bien y he superado cualquier adversidad. Al cumplir 10 años apareció en nuestras vidas, María una joven, dulce mujer a quien mi mamá le ayudó a trabajar en su negocio de tejido de bufandas, se hicieron buenas amigas, María se volvió parte de la familia, la consideramos como una segunda madre, mis hermanos y yo crecimos en compañía de María, se puede decir que llenó un poco el vacío que dejó mamá, siempre nos contaba las historias y anécdotas que habían vivido juntas, se conocieron cuando María se acercó a nuestra casa a pedir trabajo ya que estaba sola en el pueblo el arbolito, mamá le abrió las de su casa y su corazón, le preguntó ¿qué sabes hacer?, María le contó que tejía bufandas, mi mamá sabía de negocios comprar y vender, entonces a mamá se le ocurrió una gran idea le dijo a María que si podía tejer algunas bufandas para todas las clientes y amigas de mamá y fue allí donde empezó el emprendimiento del negocio de tejido llamado “Tejidos el arbolito”, en honor al pueblo donde nacimos. Poco a poco las personas del pueblo iban haciendo más pedidos de bufandas, porque era mucho frío, y fue así como empezó el negocio 69
vendían 10 bufandas diarias al empezar, luego de a poco fueron incrementando los pedidos, con ese dinero compraron máquinas y generaron trabajo, para los señoras que sabían tejer y fue así como se conocieron mi mamá Sara y María, a la muerte de mamá, María se sintió con la responsabilidad de cuidarnos y así lo hizo con mucho cariño, con el trabajo de la fábrica y el trabajo de papá salimos adelante. Cuatro años después, mi hermano Rafael de 6 años, ingresó a primer año de escuela, Luis Miguel de 7 años, ingresó a primer año de escuela, Lucas de 9 años, ingresó a segundo de básica, Raquel con 12 años, ingresó a sexto de básica, y yo ingresé de 12 años regresé a seguir estudiando en octavo de básica, papá nos dice que no importa la edad antes terminar los estudios, mis hermanos y yo nos sentimos muy contentos de volver a estudiar, María encontró el amor en la fábrica, el joven que la enamoró se llama Rafael, es un joven que se dedicaba al mantenimiento de las máquinas, y fue así que se casaron y tuvieron tres hijos, María es muy feliz hasta entonces y aún seguimos con el negocio de la fábrica, siempre sacamos estilos nuevos, colores nuevos tenemos una máquina que combina colores novedosos que a los clientes llama la atención, también incrementamos otro tipo de prendas de vestir como chaquetas ovejeras, ya que son muy calentitas para el frío con esta estrategia mejoramos nuestros ingresos. Después de un año de clase decidimos ahorrar y viajar a unas vacaciones; después de las buenas notas que papá recibió de nosotros, nos fuimos a conocer varios lugares turísticos del Ecuador, decidimos ir a conocer las islas encantadas de Galápagos, la pasamos binen. Pasó mucho tiempo, en la vida existen personas buenas y malas, en nuestra familia llegar a conocer a María fue la bendición del cielo porque con sus enseñanzas su amor y dedicación aprendimos a sobre llevar la muerte de mamá, aprendimos a ser más unidos y a cuidarnos, papá nunca nos dejó, está allí siempre con nosotros, también se dio una segunda oportunidad, conoció a Manuela en un viaje de trabajo, el comenzó a entregar sus cosechas a fábricas, me alegro mucho por él ya qué ahora es feliz y tiene una compañera a su lado. Cada uno de mis hermanos y yo, culminamos los estudios, somos grandes profesionales y padres de familia, uno que otro problemilla, pero todo lo superamos, yo seguí la carrera de arquitectura no fue fácil, pero con estudio y responsabilidad culminé. Allí conocí el que ahora es mi esposo Sebastián que también estudio arquitectura, estamos pensando en formar una empresa de construcción, el primer proyecto que quiero hacer, es diseñar y 70
construir un parque en el pueblo el Arbolito donde la gente salga a caminar disfruta del jardín y aire puro. Mi nombre es Alicia con esta historia que les he contado, les invito a seguir a delante con sus vidas, cualquier problema que se les presente en la vida supérenlo y entréguese a las manos de Dios, apóyense en familia y siempre como decía mamá “pórtate bien para que te vaya bien”, que a pesar de las adversidades se puede superar cuando en realidad se quiere la unión el respeto el valorar las enseñanzas de nuestros padres nos impulsa a ser mejores cada día, los sacrificios que hacemos hoy serán los grandes logros del mañana, construye tu futuro con trabajo fe esperanza, amor y dejaremos historias para contar, seremos la inspiración de alguien más. “Las mejores enseñanzas de la vida suelen venir de los momentos más duros” Fin.
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Dejarlo todo por amor Autora: Gabriela Páez
La tierna y popular Marina, una chica dulce y complaciente con la gente, mentalmente insegura y puede tomar malas decisiones mientras se pierde en sus problemas. Se enamora de cada chico con el que salía, aunque fueran inteligentes, tiernos o crueles con ella, no le importaba, solo no le gustaba estar sola. Marina nació en Estados Unidos, en la cuidad en Washington, creció junto sus padres Estefanía y Benjamín, también con su hermana Pilar. Marina fue motivada por su familia a dedicarle tiempo al arte profesional. Marina viene de una familia muy agresiva donde sus padres peleaban constantemente, ella era muy pegada a su padre, pero cuando ella tenía 15 años la abandonó. Ella comenzaba y terminaba las relaciones que tenía con varios hombres, todos la manipulaban ya que era una persona muy sumisa e inocente. Ander, un chico simpático y muy talentoso en el arte, ahí conoció a Marina, compartían un interés mutuo por el arte. Con el tiempo fueron pareja, tienen una relación tensa, pero atenta, eso parecía, luego la actitud de Ander cambió completamente, se empezó a comportar de una manera muy extraña, la trataba como el quería, no le daba atención, solo la buscaba para tener relaciones sexuales, pero a ella no le importaba, es más, cada vez generaba dependencia emocional hacia él, no le importaba como la trataba, se conformaba con poco. Un día mientras tenían relaciones sexuales, él decidió no usar protección y le dijo a Marina, pero ella no estaba segura porque sabía las consecuencias que podía causar, pero el siguió insistiendo hasta el punto de amenazarla, entonces ella simplemente aceptó. Después de aproximadamente dos semanas, tuvo retraso en su periodo, se sorprendió porque todos los meses le llegaba el mismo día, al principió Marina lo tomó con calma y no se preocupó. Luego ya llevaba varios días de retrasó, empezó a preocuparse y lo primero que hizo fue llamar a su amiga Carla, le contó todo lo que había pasado. Al siguiente día Carla le acompañó a realizarse una prueba rápida de embarazo, la cual no era muy confiable, pero era su primera opción así que se la hizo y al instante le salió los resultados. La prueba había dado positivo, ella no sabía que hacer, la amiga trataba de tranquilizarla, pero no podía, le dio un gran ataque de ansiedad que le costaba mucho poder controlar, empezó a llorar descontroladamente, mientras pensaba en que iba hacer. Luego de unas horas Marina logró tranquilizarse y estaba pensado en como 73
le iba a decir a Ander, pero dentro de ella sentía terror por lo que podía pasar, Carla le dijo que debía tener valor y decirle, porque una cosa como esa no se puede ocultar. Pasaron unos días y ella aún no le comentaba a Ander ni a sus padres, pasó un mes y decidió que era hora de decirles, fue primero a la casa de su novio y hablaba tartamudeando por miedo. Marina esperaba una reacción diferente a la que él tuvo, ya que Ander perdió el control y le hecho toda la culpa a ella, la insultaba, hasta llego a agredirla, ella lo único que hacía era llorar y llorar. Ander, luego de todo eso le dijo que aborte y que no avise a nadie más de lo que estaba sucediendo, él se propuso conseguir el dinero para el aborto y tenía que hacerlo rápido porque luego de dos meses ya no funcionaría ese proceso y la otra opción costaba el doble. No lograron conseguir el dinero a tiempo, así que su única opción era reunir más y utilizar el segundo proceso, pero esta vez Ander le dijo a Marina que no se hacía responsable y que ella se encargue de conseguir todo el dinero. Ella no sabía qué hacer, se sentía totalmente sola, no tenía el apoyo de nadie y para conseguir dinero recurrió a robar la cartera de su madre, con eso ya había completado para lo que necesita, pero la madre se dio cuenta e inmediatamente preguntó quién lo había hecho, Marina lo negó y culpó a su hermana Pilar. La madre dejó pasar lo ocurrido, pero les advirtió que si sucedía otra vez ella iba a tomar medidas más drásticas, Marina fue a buscar a su novio para realizar el aborto. Fueron al hospital, todo salió bien, pero Marina se sentía un mal por las peleas con Ander, aun así, ella no quería que él se fuera de su lado, porque a pesar de todo, ella lo amaba. Con el tiempo Ander la trababa cada vez peor, a él no le importaba como se sentía Marina, ya ni siquiera la quería ver, solo estaba con ella por pena. Ella se daba cuenta de todo, pero no quería separarse de él, hasta que Ander se cansó de ella y la dejó, ella se sentía muy sola ya que dependía emocionalmente de él y le costaba mucho estar sin un hombre a su lado. Pasaron meses en los que ella se sentía super mal, no comía, no se levantaba de la cama, solo quería estar encerrada en su dormitorio, los padres no sabían cómo ayudarla, hacían de todo, pero nada funcionaba, hasta que a la hermana se le ocurrió llevarla al psicólogo. Marina se rehusaba a ir al psicólogo, pensaba que eso era solo para gente con problemas mentales, así que, ella no aceptaba que necesitaba ayuda. 74
Los padres la obligaron a ir, porque nunca la habían visto así, Marina no tuvo otra opción que ir, la primera terapia solo fue a sentarse, pero no habló, no regresó a ver a la psicóloga Nadia, no hizo absolutamente nada; Y así fueron las primeras 10 terapias, siempre se repetía lo mismo y lo mismo. Hasta que Marina se cansó de guardarse todo eso que la lastimaba, así que empezó a hablar con Nadia de todo lo que había pasado, le costó mucho abrirse y contar sobre sus sentimientos, ya que, nunca lo había hecho, pero eso le ayudó mucho para recuperarse. Le tomó mucho tiempo aceptar todo, pero lo que ella necesitaba era aprender a amarse, aceptarse tal y como es, para que ella no necesite de un hombre para sentirse completa y ser feliz. Con el tiempo las terapias le ayudaban demasiado, cada vez se iba sintiendo mejor con ella misma. Hasta que un día volvió a ver a Ander, verlo a él le trajo todos los malos recuerdos que la habían lastimado, afectado mentalmente, físicamente y psicológicamente. Se sintió muy mal ya que se le fueron todas las fuerzas que ella tenía para enfrentar todos sus problemas, entonces ella sentía que iba a volver a caer en ese hueco del que le costó salir. Al siguiente día volvió a verlo y se atrevió a acercarse para hablar con él, no sabía muy bien lo que tenía para decirle, pero creía que si se desahogaba iba a ser todo más fácil; Cuando se acercó a el vio que no venía solo si no que estaba acompañado por su amiga Carla. Marina se sorprendió mucho y a la vez le dolió porque ella era su única amiga en la que confiaba y no pudo creer que sabiendo todo lo que le hizo podía estar con él, se puso tan mal que volvió a encerrarse en su dormitorio, no tenía un ataque de ansiedad en mas de dos meses, pero ese día lo tuvo. Lloraba desconsoladamente porque pensaba que todo iba a estar bien, cuando no era así, volvió a sentirse de la misma manera que se sentía antes, se sentía mal con ella misma porque le costó mucho recuperarse para que en un día se vaya todo a la basura. Al siguiente día tuvo la fuerza para volver a sus terapias, le contó todo a la psicóloga. Una vez más, fue muy doloroso para ella volver a sentirse así. La psicóloga le mando medicamentos, ya que, tenía problemas para dormir, pero ella de alguna forma era optimista y sabía que, si una vez pudo sentirse mejor, ¿Por qué no lo haría otra vez? Se iba sintiendo mejor, ya no tenía ataques de ansiedad, problemas para 75
dormir, etc. Las terapias estaban funcionando de maravilla. Hasta que un día ella se sintió mejor que nunca, por fin aprendió a amarse, quererse, aceptarse tal y como es, ya no necesitaba del amor de un hombre para sentirse suficiente o para ser feliz. Fue un camino muy duro para ella, pero nada que no pudiera enfrentar, su madre estuvo muy feliz de verla tan bien, superada y fuerte. Así es como Marina logró cambiar su vida, ser feliz, tener amor propio y entender que si alguien la quiere le tiene que querer tal y como es; Y si no quiere hacer algo, nadie le puede obligar, ella debe de tomar el control de su vida y de sus decisiones. El amor no es una carga, no es una molestia, el amor tiene que ser un apoyo para ti y no darte problemas. Fin.
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The Sunshine Texas Autora: Camila Dannae Rhea M.
The Sunshine… Todos pensaban que Texas era una ciudad muy tranquila hasta que nos remontamos un feliz matrimonio y su curioso hijo. Estamos hablando de Mark y Jay, estar feliz pareja la cual tiene un llamativo hijo llamado Louis, el cual era un adolescente muy extrovertido. Esta familia habitaba en el hotel The Sunshine, Piso 3 perta E15. Ese hotel no era muy recurrido por lo cual solo vivían, 2 parejas y una soñara en lo que se establecía todo el edificio ya que habían ocurrido varios asesinatos ahí. Mark es un hombre muy feliz con su esposa y su hijo, le encantaba visitar varias ciudades que eran abandonadas o un poco extrañas ya que le gusta mucho el misterio. Jay también es feliz con su familia, a ella igual le gustan mucho las aventuras y le gusta ir con su esposo a visitar ciudades un poco misteriosas y finalmente Louis su hijo extrovertido, también es un poco curioso le gustan las cosas que tengan que ver con el terror pero él ya es muy arriesgado a explorar cosas de ese tipo su padre le decía que no era bueno ser tan arriesgado ya que le podía suceder algo, su madre también le decía que tenga mucho cuidado con lo que hace ya que él no sabe el peligro que tienen algunas ciudades abandonadas. Er un sábado en la ciudad de Texas cuando Louis estaba aburrido y quería hacer una de sus aventuras, sus padres le dijeron que no salga porque en el edificio que habitaban era abandonado y han ocurrido varios asesinatos ahí, también le dijeron que era peligroso ya que en el edificio solo habitaban dos familias y una señora media extraña por lo cual Mark y Jay no confiaban tanto en esas personas. Sin embargo Louis salió sin imaginar el peligro que podía suceder, sus padres estaban muy enojados y le llamaban al celular a cada rato para que regrese al edificio, a Louis no le imparto y siguió caminando por la ciudad, por un momento si le entro un poco de miedo pero luego ya no le importó, sus padres estaban muy preocupados por el, ya era casi media noche y Louis no llegaba. Louis encontró una tienda en medio de la nada, el entro y en lo primero que se fijo era en la hora, ya eran las 2:30am, compro unos chicles, unas papas y una botella de agua, cuando se dirigió a pagar el señor que atendía allí le pregunto ¿Tu qué haces a estas horas por aquí?, deberías de tener mucho cuidado ya que por estas horas pasan cosas muy extrañas, el señor se lo dijo muy enserio y Louis se lo tomo como chiste, ya casi al salir el señor presentía que algo malo iba a ocurrir entonces le pregunto ¿En qué hotel te estas quedando?, Louis le dijo que en el hotel The Sunshine, el señor inmediatamente le quiso dar una pistola, para Louis fue muy extraño y se 78
negó hasta que después de tanta insistencia por parte del señor, Louis accedió a llevársela. Ya Louis salió de aquella tienda tan extraña, ya casi llegando al edificio noto que es una ventana del hotel que esta una sombra de un señor viéndolo fijamente, pensó que era su padre pero se dio cuenta que esa no era su habitación, desde ese momento le empezó a dar un poco de temor, llego a su habitación, la mamá estaba completamente dormida pero su padre Mark no, lo estaba esperando a Louis para regañarlo ya que no le gusto lo que hizo, hasta que luego tocaron la puerta, que raro que toquen la puerta a estas horas ya son las 3 de la mañana, Mark le dijo a Louis que vaya a su habitación, pero él no se quiso ir Mark abrió la puerta y estaba un señor con una pinta de mal gusto, tenía sangre por el pantalón, fue en ese momento cuando Louis y Mark estaban realmente asustados, el señor le pidió ayuda a Mark, le dijo que en la habitación de él se le rompió algo y que necesita ayuda, Mark fue con toda seguridad a ayudarle al pobre señor mayor, Louis se quedó en la sala esperando a su padre, aunque fue extraño que a esas horas pida ayuda el señor. Ya eran las 5.00am y si padre no llegaba fue ahí cuando Louis fue a buscarlo, despertó a su madre y le contó lo sucedido y le dijo que vaya a buscarlo, Louis pasó por cada habitación tocando porque encima no sabía cuál era la habitación del señor, en ninguna abrían la puerta hasta que empezó a patear las puertas, luego subió al último piso y había una puerta de color azul, toco la puerta y abrió una señora ya mayor, y el pregunto, ¿Sabe de un señor que viva aquí? Es que ayer mi padre salió a ayudarle con algo y hasta ahora no vuelve, la señora le dijo que ningún señor vivía en el edifico, la señora igual lo invito a pasar para que se tranquilice un poco y tome algo de beber, una vez adentro la señora le pidió a Louis que le diga cómo era el señor, él le dijo todas las características del señor y la señora inmediatamente se puso un poco molesta y rara, dijo ah si él es mi esposo, pero el falleció hace ya dos años atrás en ese momento a Louis le dio miedo luego la señora tan extrañamente le dijo que se quede para el desayuno, el accedió, le dio carne con te, la señora le pregunto ¿Te gusta esa carne? Louis le dijo que si, que estaba rica, la señora le dijo que su primo la trajo antes de que llegara Louis y que era carne fresca, aunque la carne estaba media rara, no tenía mucho sabor como las carnes que vienen de los animales, en ese momento salió el señor de un cuarto, Louis se asustó demasiado pero en ese momento le dijo ¿Dónde está mi papá?, que extraño todo esto, el Señor le dijo que su padre estaba ayudándolo abajo en el 79
cuarto de donde acaba de salir y que esté tranquilo, la señora le dijo que tome él te que le dio para que esté tranquilo, y se estaba quedando dormido. Se despierta Louis en un lugar feo con muy mal olor, se quiso levantar porque veía hasta sangre por todo lado pero no podía porque estaba puesto cadenas en los brazos y en las piernas, estaba sentado viendo, hasta que alcanza a ver que habían cabezas cortadas colgando de un alambre, en una mesa piernas y brazos, ahí es cuando Louis reconoce la cabeza de su propio padre y empezó a llorar., estaba muy asustado, entro en un ataque de pánico él no podía creer lo que estaba viendo, por suerte tenía su celular y apenas podía escribir, no sé cómo lo logro pero le mando un mensaje a Jay su madre diciéndole que necesitan ayuda, su madre vio el mensaje y empezó a tener mucha preocupación, los dos señores extraños habían salido ya que iban a comprar una cosa, Jay alcanza a ver la pistola que había llevado Louis y la agarro, fue a buscarlos con mucho terror. Encontró la habitación entro con mucho miedo y cuidadosamente fue abajo para ayudarle a Louis, le encuentra y le quiso ayudar pero escucho unos pasos y rápidamente se escondió y miro como el señor arrancaba el rostro de Mark, Louis se hizo el dormido para que ese señor no le dijera nada, Jay estaba muy aterrada con lo que estaba viendo y también empezó a llorar silenciosamente, el señor se estaba llevando el rostro cortado de Mark y ahí salió Jay estaba intentando sacar a su hijo de ese lugar tan feo, por fin logro liberar a Louis en ese rato se iban a escapar de ahí para poder salvarse, ya que por Mark no podían hacer nada, él ya se murió. Jay sale del cuarto y se esconde debajo de la mesa mientras que Louis iba a salir pero el señor alcanza a ver a Louis y quería ir a agarrarlo, Louis tenía un cuchillo y le clavo al señor en el brazo, el señor de tanto dolor se cayó y ahí Jay logra salir de ahí corriendo, Louis salió corriendo pero la señora se lo pego en la cara fuertemente, Jay pego un grito diciendo hijo no, y comenzó a derramar varias lágrimas de dolor, el señor mato también a Louis y Jay quiso llamar a la policía, la señora se lleva el cuerpo de Louis abajo mientras que el señor quería ir a buscar a Jay, Jay al ver que el señor le estaba persiguiendo con la pistola que tenía, le disparo y el señor murió, Jay agarro sus cosas y se fue triste sin su familia, pero se logró salvar. Fin.
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Oikomania deseo de estar en casa Autora: Nicole Rodríguez
Mara es una chica solitaria que vive junto a sus padres en un pequeño pueblo aislado de las ciudades. Antes de llegar al pueblo, vivía en una cuidad enorme y moderna, tenía una vida escolar muy buena, sin muchos amigos, pero sus notas eran excelentes, y se sentía muy cómoda en su casa. Ahora viviendo en su nuevo hogar siente que tardará en acostumbrarse, tanto al lugar, como a su colegio. A pesar de haberle pedido a sus padres no mudarse, no lo logró, y ahora se siente molesta con ellos con la razón de no sentirse muy a gusto estando en un nuevo lugar. A la semana de haber llegado al pueblo, Mara descubre una increíble mansión antigua al otro lado de un lago. Es una tarde soleada cuando la encuentra, la marea está baja, así que cruza hacia el otro lado con facilidad. Observa toda la mansión por fuera y trata de abrir las puertas. Esto probablemente está prohibido, y era arriesgado si alguien la descubría, pero de todas maneras lo hace. Sigue explorando, y viendo por las ventanas lo que hay dentro de la vivienda. Decide que era hora de regresar a casa cuando el cielo ocupa un tono azulado, dándole a indicar que la noche se acercaba, y su madre seguramente debía estar muy molesta, ¿por qué?, bueno, Mara nunca le avisó que iría a otro lugar o saldría de casa, pero estaba segura que si le hubiera avisado no le daría permiso de ir. Baja las gradas de la entrada, y... ¡Oh, no!, la marea ha subido bastante, y obviamente necesita pasar por el lago para regresar a su hogar. -Increíble. - dice con bajos ánimos. Sabe que no puede pedir ayuda, porque no hay nadie cerca con un bote o algo parecido, y dudaba que alguien la escuchara si grita. Ahora no tiene nada que hacer más que esperar. Se sienta y recuesta su cabeza sobre una grada. Pasa demasiado tiempo y aún no logra ver a nadie por la otra orilla del lago. Sus párpados pesan, y los cierra con lentitud. Cae, cae, cae. Está totalmente oscuro. - ¿Hay alguien? -Gritó Nadie responde. - ¿Qué lugar es este?, ¿Cómo llegue aquí? Camina, camina y sigue caminando. El camino no parece acabar nunca ¿Por qué sigue caminando entonces? 82
Se detiene y ahora entiende dónde está. Es un túnel. Un túnel largo y oscuro, que parece tener un final, porque hay una luz a lo lejos. Es tanta oscuridad que es difícil pensar. - ¿Por qué estoy en un túnel que parece infinito? ¿Cuál fue el último lugar donde estaba? Recuerda vagamente la mansión y el cielo gris azulado. Sigue pensando y por fin se acuerda que se recostó sobre la grada. - ¡Ya sé, es un sueño! - grita emocionada de haber encontrado la respuesta. Se pellizca, pero no despierta. Se sienta a esperar levantarse, pero sigue sin despertar. Alto... ¿Acaso esas son voces llamando su nombre? ¡Si! Definitivamente. Distingue que solo es una voz, que repite su nombre al final del túnel. Mara intenta gritar, pero su voz está apagada. ¿Qué está pasando? La voz está empezando a sonar cada vez más fuerte. - ¡Mara! Despierta de golpe con su corazón a mil. Está completamente empapada, el cielo está oscuro, es de noche y está lloviendo. El agua del lago casi, casi le llega a sus pies que están sobre la grada. Un hombre con barba se encuentra en un bote, cerca suyo y le repite: - Mara, ¿tú nombre es Mara? Mara asiente rápidamente. - Tus padres te están buscando, sube. -dice el hombre con un tono neutral. Se levanta y sube al bote. Llegan a la otra orilla, y agradece al hombre antes de salir corriendo a su casa. En el camino ya imaginaba la regañada que le iban a dar sus padres, en especial su madre. Cuando por fin llega a su casa, se encuentra con sus padres hablando con unos oficiales en la entrada. En cuanto se acerca a ellos, su madre la mira con el ceño fruncido. - ¿Dónde estabas metida? -dice su padre preocupado, agarrándola de los hombros- ¿Por qué tienes la ropa empapada? ¿Estuviste bajo la lluvia? - pregunta su madre- Dios mío, ¡te vas a enfermar! Entra, y cámbiate la ropa, luego hablaremos. Después de darse una ducha y cambiarse, su madre le dio una charla muy larga sobre por qué debía obedecer, y lo peligroso que es salir sola por el pueblo. Mara se dirigió a su habitación, en ese momento solo quería tirarse a llorar un rato sobre su almohada, para después empezar con sus tareas. Cae la noche, y Mara había prometido que terminaría con toda su tarea que tiene pendiente, pero simplemente ya no puede, era mucha y está cansada. 83
Decide parar por un momento, se levanta de la silla y comienza a hacer pequeños estiramientos que la relajan. Su cuerpo estaba cansado de estar durante tanto tiempo en la misma posición. La secundaria era pesada, lo sabía desde el primer día en el que puso un pie en ella. Estaba muriendo poco a poco de estrés debido al sinfín de tareas. Eran las 10 y 45 de la noche y aún le faltaban unas 2 tareas por completar. Se encontraba totalmente concentrada en terminarlas, pero un grito la hace pegar un brinquito. - ¡Mara! ¿Qué no ves la hora? ¡Ya duérmete! -dice su madre abriendo la puerta de la habitación - Órdenes son órdenes, si su madre le ordenaba algo, lo mejor era obedecerla, no le gustaría tener de nuevo una charla sobre la obediencia. Su madre se va, Mara se levanta de su escritorio y ordena sus cosas que se encuentran sobre este. Una vez que termina, va a la cama. Se encontraba tan cansada que apenas posó su cabeza en la suave almohada su cuerpo se relajó y cayó rendida al sueño. Al siguiente día fue a su colegio como acostumbraba. Siguió su rutina de todos los días, excepto que, al terminar sus clases, se arriesgó a ir al muelle frente a la gran mansión. Sus padres no la recogían del colegio, así que pensó que no habría problema. Aquella mansión le causa una asombrosa curiosidad, desea mucho ver cómo es por dentro. Aprecia el paisaje antes de alejarse y dirigirse a casa. En la noche está decidida a escaparse a ver la mansión, ¿La razón? Tuvo una pequeña pelea con su madre sobre la mudanza. Se coloca un buzo blanco y unos pantalones negros junto a un gorra gatsby gris, algo abrigado para la noche. Tiene que ser cuidadosa para que sus padres no la escuchen al salir por su balcón. En este momento no siente ni una pizca de arrepentimiento ni empatía por sus padres. Parece ser que sus padres no se dieron cuenta que salió ya de casa. Da una mirada rápida a todo su hogar y corre hacia el muelle. No hay nadie cerca, piensa que es algo obvio, es más de media noche y nadie estaría ahí. Mira la mansión, y hay algo extraño. Hay luces encendidas dentro de la casa, ¿Alguien se mudó recientemente allí? Por suerte la marea no fue afectada por la luna, así que pudo cruzar. Sube las gradas y entra en la Mansión. - ¿Hay alguien aquí? Al parecer no. 84
Revisa por toda la casa, y nada, no hay nadie. Mara se encuentra feliz, y un poco temerosa, aunque no lo quiera admitir. En el lugar se la pasa viendo las decoraciones, muebles y objetos empolvados. Se siente cansada, ¿estaría bien quedarse a dormir allí? No está segura, pero el sueño se apropia de ella lentamente, así que decide acostarse sobre el sillón para poder dormir una pequeña siesta. Cae, cae, cae. Se encuentra nuevamente en el mismo túnel oscuro, pero más cerca de la salida. Esta vez, decidida, cruza el túnel y se encuentra con un hermoso campo verde, el cielo está despejado y es de día, el campo se divide, tiene un pequeño río y un puente rojo sobre él. Cruza el puente, y se encuentra con una "pequeña ciudad". La pequeña cuidad tiene una diversidad de tiendas y lugares en casetas. Curiosea en las tiendas, y se detiene frente a una casa. - ¡No puede ser! ¡Es mi antigua casa! -Exclama Mara muy contenta- Se adentra y encuentra todo ordenado como lo tenía siempre. No sabe cuánto tiempo pasó allí, pero se empezaba a sentir sola dentro de la casa. -No se siente como siempre. - Dice desanimada. Sale de la casa, y se pasea nuevamente por las tiendas. Tiene un sentimiento de angustia en su pecho, cerca de su corazón. Ahora sabe lo que le falta a la casa. No, a la casa no, a ella. Son sus padres. Sin ellos se ve y se siente tan sola. El lugar donde está es bello, pero no es acogedor, y no se siente totalmente segura. Es momento de regresar. Quiere volver a casa. Cierra sus ojos con fuerza, y se repite que quiere despertar. Abre sus ojos segura de que estará de nuevo en el lugar donde se durmió. Y sí, logra despertar, pero no en el sillón de la mansión. Se encuentra en casa, en su habitación, en su cama. Lleva puesta su pijama, mientras que el buzo, la gorra y su pantalón están tendidos sobre la silla junto a su armario. ¿Nunca huyó de casa? No le decepciona, en absoluto, se siente mejor al saber que no lo hizo. Ahora entiende la preocupación de sus padres por ella, se ha enojado con ellos por algo insignificante. Se siente inmadura. Ahora lo único que quiere es disculparse con ellos. Y lo hará en cuanto amanezca. Después de esto, sabe que sus padres son la definición más clara de la palabra "hogar" para ella, de eso no hay duda. 85
Solo te necesito a ti Autora: Alisson Sangucho
“El amor es cuando alguien te entiende y te acepta con tus virtudes y defectos, cuando te aprecia y te alienta a mejor no porque desea cambiarte, sino ayudarte a ser feliz. Aunque no obtenga nada a cambio, aunque a veces solo consiga dolor” Era un día soleado, brisa del viento movía los largos mechones de su cabellera castaña, aquella chica se encontraba sentada en la orilla de un mar, mientras jugaba con la arena, unos minutos pasaron hasta que escucho la voz de una persona conocida. X: ¡Hey! ¡Azumi! La chica se paró y regreso a ver con ansias. Azumi: ¡Estoy aquí! La emoción de la chica no duro mucho al ver al chico corriendo a la dirección donde estaba ella. Los pasos del muchacho se detenían al ver la actitud de la chica, pero por las largas piernas del chico llego más pronto de lo que esperaba, los dos estaban afrente, pero ninguno se atrevía a hacer contacto visual. El chico decidió cortar el incómodo silencio. X: ¿Qué te pasa? Los ojos de la chica se comenzaron a llenar de lágrimas, mientras ella se alejaba un poco. X: Te pregunté, que te pasaba, nunca dije que te alejaras Azumi: Yo…lo siento X: Tú y tu feo, defecto de disculparte por todo, solo ven aquí La tomo del brazo acercándole a él, ambos se abrazaron y la chica comenzó a llorar en pecho del chico “Un año atrás” Es un lunes por la mañana era el primer día de clases para nuestra protagonista Azumi Takahashi, es una chica de 17 años con una larga caballera castaña, ojos del mismo color, midiendo 1.65. Es su último año lectivo, nunca fue una chica muy problemática al contrario era la mejor de su salón, 4 años consecutivos siendo la presidenta de su clase, sus amigos más cercanos era un grupo de 5 personas incluyéndole a ella, 1 mujer y 3 hombres, su amiga se llamaba Saiko Kobayashi y sus amigos Akiro Miyamoto, Hiro Tanaka, Masaki Yamaguchi. La campana había sonado y todos los estudiantes estaban es sus respectivas aulas esperando que llegue su profesor asignado Akiro: Que flojera volver a clases *dijo mientras estiraba sus brazos y bostezaba* Hiro: No es para tanto * le dio un codazo en su brazo para molestar* Él se paró y le sujeto por el cuello mientras sacudía su mano en su cabeza Akiro: No has crecido nada en estas vacaciones, dime ¿Qué has hecho todo 87
este tiempo? Él se quitó, acomodo su cabello y lo regreso a ver. Hiro: Para tu información la que no creció nada fue Azumi y si hice ejercicio todo este tiempo al contrario de ti. Azumi: A mí no me metan en su pelea dijo en un tono de voz divertido Las rizas de los jóvenes se detuvieron al ver que su profesor venia estaba en la puerta, cada estudiante se puso en su lugar y saludo. Maestro: Buenos días con todos dijo con tono de voz fuerte Los estudiantes saludaron y se sentaron, una vez todo estaban en silencio el maestro exclamo Maestro: Ya son 3 años que me toca con el mismo salón y me siento orgulloso de ser su maestro todo este tiempo, no abra cambión cambios ¿les parece? Todos asintieron Maestro: ¿Excelente, Señorita Takahashi ¿le parece ser la representante? Azumi: Claro que sí, me encantaría Todos aplaudieron con mucha alegría Maestro: por cierto, se me olvidó presentarles, él es Yashahiro Nakamura nos acompañará todo este año lectivo, denle la bienvenida Todos comenzaron a aplaudir mientras el chico se ponía a lado del profesor, era un chico de pelo blanco, ojos negros, tenía una mascarilla, media 1.80 era más alto que el maestro. Maestro: Por favor di unas palabras Yashahiro: * se quitó la mascarilla* Mucho gusto con todos *se puso la mascarita de nuevo* Maestro: Es un chico de pocas palabras, señorita Takahashi por favor ayude al nuevo estudiante en todo por favor y también dando un tour por todo el instituto. Ella asintió, pero sentía algo raro la actitud del chico. Maestro: Por favor toma asiento. Él se sentó atrás de la chica, ella regresó a ver y le sonrió, pero el solo la ignoraba eso le disgusto un poco pero mejor no darle más atención, su maestro comenzó la clase Pasaron las primeras horas de clases y ya era receso todos estaban sacando su comida, pero la castaña se paró de su asiento y se puso al lado del chico nuevo Azumi: Mucho gusto soy Azumi Takahashi, pero me puedes llamar por mi nombre *le estiro la mano, pero él no movió su cabeza* Yashahiro: También es un gusto conocerte Yashahiro *lo dijo con un tono 88
de voz menos amable* ¿dime te gustaría hacer el tour ahorra o más tarde? Yashahiro: Y si mejor te vas y me dejas dormir *viró su cabeza* para ignórala Azumi: Mira es mi obligación indicarte todo el instituto así que quieras o no me vas a acompañar *lo dijo con una sonrisa muy forzada* Sus amigos solo observaban ya que si ellos se metían iban a salir regañados por parte de ella Yashahiro: Solo vete y diré que hiciste bien tu trabajo *suspiro* Azumi: NO Yashahiro: Entonces no molestes niña y ya déjame dormir Azumi: Esta bien, lo haremos a mi manera Esta vez si la regreso a ver algo confundido, ella le tomo la mano y con la otra le jalo de una oreja Yashahiro: ¡Que te pasa loca! ¡Suéltame! Azumi: Te dije que lo arriamos a mi manera Ella le soltó su oreja una vez que estaban fuera del aula, pero sus brazos estaban entrelazados. Yashahiro: Eres pequeña pero no débil, loca *murmuro* Azumi: Solo sígueme y esto se acabará pronto Yashahiro: Claro, pero suéltame Azumi: No, ya que si lo hago tú escaparas Yashahiro: Pruébame Azumi: mejor déjalo así y no seas necio, solo sígueme y esto acabara pronto Ella lo sostenía del brazo mientras le indicaba toda la institución Así paso todo el receso ella jalándole del brazo para que le hiciera caso. Una vez acabaron él turno regresaron al aula, pero ellos ya estaban soltado las manos. Saiko ya le estaba esperando en la puerta con ansias. Saiko: ¡Azumi!, Dime lo que pasó Azumi: ¿eh? ¿De qué me hablas? Saiko: Con el chico nuevo, ven y cuéntamelo todo Ella le jaló del brazo y le llevó a su asiento mientras que Yashahiro solo caminaba a su asiento sin darle mucha importancia. Azumi: Nada interesante solo es muy amargado y necio. Saiko: Pero está lindo y sin mascarilla Azumi: Que yo recuerde tú tienes novio Saiko: Si, pero no soy pequeña y puedo mirar a quien yo quiera Azumi: bueno, si tú lo dices Él día paso con tranquilidad y nada fuera de lo normal, al final de la mañana cada quien se fue a su casa Azumi en las siguientes semanas intento acercarse al chico sin lograr nada, 89
pero ella no se rendiría tan fácil, sus amigos ya le habían dicho que se rindiera ya que él Yashahiro en todo ese tiempo no le había ni devuelto ningún saludo. Azumi estaba apuntó de rendirse Es un viernes Azumi esta con sus amigos y parece que la está pasando muy bien, todo hiba de maravilla hasta que alguien le topa él hombro por detrás a Azumi, Ella se asustó y pegó un pequeño grito y regresó a ver, era el chico de pelo blanco Yashahiro: ¿Me puedes ayudar? Azumi: ¿Me preguntas a mí? Yashahiro: ¿A quién más crees que le estoy preguntando? *dijo en un tono muy sarcástico* Saiko: Vamos, ve ayudarlo Azumi: Si, si, a eso voy Ella se paró de su asiento para dirigirse donde estaba el chico esperándole Azumi: Dime, ¿en qué puedo ayudar? Yashahiro: Mira en esto de matemáticas Todo el receso se la paso explicando hasta que sonó la campana Azumi: ¿Entendiste? Yashahiro: Si, es más fácil de lo que pensaba, eres buena explicando Azumi: Unas gracias no estaría mal, ¿No crees? Yashahiro: Ya vete, él maestro este punto de venir Azumi: Malo Ella se fue a su asiento algo frustrada ya que ella quería un tema de conversación, pero lo único que consiguió no fue mucho Las clases ya habían acabado cada quien ya estaba alistando sus cosas para irse a su casa. Los amigos de la chica ya se habían ido, ella todavía estaba alistando sus cosas cuando alguien se le acerco Yashahiro: ¿Te acompaño? Digo ya es algo tarde y tú sigues aquí Azumi: ¿Ni siquiera me das las gracias y me dices que me vas a acompañar? Yashahiro: Esa es mi manera de decir gracias si quieres tómalo a mí me da igual Azumi: Y si digo ¿sí? Hasta dónde me acompañarás, yo vivo lejos Yashahiro: Obviamente solo hasta la parada de bus nunca iría a la casa de un desconocido Azumi: Primero que nada, yo no soy una desconocida y segundo agradezco tu oferta, pero pasó Yashahiro: Para mi eres una desconocida, encima ni tu nombre me se Azumi: De verdad eres muy distrito te lo dije cuando recién te conocí, cuando te iba a dar un tour por el colegio, ¿de verdad no te acurdas? Yashahiro: No me acuerdo, tenía sueño y mucha pereza para poner atención 90
Azumi: *suspiró * mi nombre es Azumi Takahashi, pero solo dime Azumi Yashahiro: Esta bien, ya vámonos perdemos el tiempo Azumi: Espérame me faltan algunas cosas y ya Él la ignoto y siguió caminando hacia la puerta muestras la chica acabo de guardar sus cosas y salió corriendo detrás de él para alcanzarlo. Azumi: Eres malo y tienes unas piernas muy veloces Yashahiro: Soy mucho más Layo que tu obvio que soy más veloz Azumi: Aja, claro como digas Yashahiro: ¿Y qué tan lejos queda? Azumi: Unas tres cuadras más y ya Yashahiro: Mmmm… Bueno esto es mejor que ir a casa Azumi: ¿Eh?, lo podrías repetir no lo escuche Yashahiro: No es nada, olvídalo Azumi: No quiero, dime Yashahiro: No Azumi: Esta bien necio Yashahiro: Cállate enana Ella se ofendió mucho por él comentario que habían hecho él chico, tanto así que comenzó a caminar más rápido con la mirada baja y él señor fruncido. A ella le gusta jugar con su estatura con amigos cercarnos. En la mete de aquella chica solo eran maldiciones para el chico, estaba tan concentrada en sus pensamientos que cruzo la calle cuando la luz estaba en rojo, el chico se percató de esto y rápidamente el sujeto del brazo haciendo que se desconcentrara y corriera para llegar a la esquina Yashahiro: ¿¡Estas loca!? ¡Cómo te atreves a cruzar así la calle! Ni un niño pequeño hace eso, casi me matas a mí también por andarte salvando Azumi: Nunca dije que me salvaras Yashahiro: ¿¡Que!?Encima ni las gracias me das después de haberte salvado la vida Azumi: Gracias, ya ¿feliz? Ella siguió caminada ignorando los reclamos del chico. Ella caminaba detrás de tras de ella, pero le sostenía de la mochila por si acaso, según él. Ella ni siquiera se había dado cuenta de su presencia ya que otra vez estaba muy perdida en sus pensamientos. Cuando estaban a solo una esquina de la parada de bus ella casi vuelve a cruzar la calle sin ver a los semáforos, pero el chico rápidamente jalo de la mochila haciendo que la chica recuperara la conveniencia. Ella había regresado a ver quién era la persona que le había salvado y para su sorpresa y “mala” suerte era el chico de pelo blanco. Azumi: ¿Me estatuas siguiendo todo el camino? Yashahiro: Si y ¿recién te darás cuenta de mi presencia? suspiro Azumi: Si, pero ¿Por qué? 91
Yashahiro: Por que dije que te acompañaría hasta la parada y ya, para tu información soy un hombre de palabra y no me gusta quedar mal con alguien, aunque sea el más mínimo favor. Azumi: Ya veo, pero no era necesario Yashahiro: Casi te matan dos veces hoy y encima no me das ni las gracias por salvarte Azumi: En parte es tu culpa murmuro Yashahiro: ¿En qué parte fue mi culpa? Azumi: ¿Escuchaste? Yashahiro: Si y ahora dime ¿en qué parte fue mi culpa? Azumi: Me dijiste, cállate enana y eso me dejo mucho que pensar Yashahiro: Me estas insultando, ¿verdad? Azumi: Claro que no comenzó a desviar la mirada Yashahiro: Mientes Azumi: ¿Cómo sabes? Yashahiro: Es muy obvio, eres mala mintiendo Azumi: La verdad sí, no me gusta que se burlen de mi estatura sé que soy pequeña, pero yo bromeo con eso cuando estoy con personas de confianza. Yashahiro: Entiendo y me disculpo si te hice sentir incómoda Azumi: Gracias Yashahiro: ¿Eso es unas gracias de? Azumi: Por comprender y salvarme, son muy sinceras mis disculpas de verdad te lo agradezco pensé que tenías un corazón de piedra Yashahiro: De nada y ¿Cómo vas a pensar que tengo un corazón de piedra? Azumi: Hay muchos factores Yashahiro: Dime solo cuatro ejemplos y te creó Azumi: Número uno la primera vez que te conocí fuste muy grosero, segundo nunca me respondes ni los mensajes que te mando ni cuando te saludo por las mañanas, nunca te he visto sonreír y cuarenta nunca hablas con nadie Ella chico solo la miro y le dio dos palmaditas en la cabeza y sonrió. Yashahiro: El número que tú tienes nunca lo utilizo al menos que sea una emergencia o algo parecido, pero si quieres te puedo dar mi otro número en ese ando más atento Azumi: Si claro, solo te advierto que soy muy insistente y puedo enviar varios mensajes si me preocupo Yashahiro: ¿Por qué te preocuparías? Azumi: Eh… digamos si faltaste o si estas enfermo o cualesquiera cosas parecida Yashahiro: Entiendo, anota **** Ella rápidamente saco una pequeña libreta y comenzó a anotar el numero una vez acabo de dictar otra vez comenzaron a caminar, ella le había hacho 92
varias preguntas para alegar la conversación hasta que llegaron a la parada, una vez que vino el bus ella se despidió con un abrazo y el solo le dio palmaditas en cabeza, una vez que ella se subió el bus él se fue a su casa no era tan lejos entonces se fue caminando. Así pasaron varias semanas la chica le comenzó a escribir y hablar con él un poco más en el colegio, los días ya tenían una rutina diaria, por las mañanas hablan en el receso y cuando tenían horas libres, en la hora de salida ellos se iban a la parada de bus y en la tarde solo hablan por chat. Esa era su rutina hasta que un día ella faltó y así falto varios días él no lograba comunicarse y sus amigos no lograban tampoco el comenzó a estar un poco más atento de su teléfono por si acaso ella enviaba un mensaje. Estaban en la hora de salida, el muchacho guardo sus cosas y salió, estaba caminando hasta que sintió que briba su teléfono rápidamente contesto los mensajes al ver que era Azumi. Él le reclamo que en donde estaba y cosas así, pero la vos de aquella chica era muy débil, la dejo de regañar y con un tomo de voz más serio le preguntó que pasaba ella solo le dijo que estaba en hospital * el rápidamente colgó y cogió un taxi para dirigirse al hospital, una vez allí reconoció a la chica por su cabellera castaña y larga pero estaba en silla de ruedas mirando la ventana Él se a cerco poco a poco a ella con mucha preocupación y lastima. Yashahiro: ¿Qué te paso? Azumi: Hola Yashahiro, nada interesante Yashahiro: ¿Nada interesante? Mira donde estas y como estas crees que no pasa nada o que Azumi: Mira hablemos en privado mejor, mi habitación es El la llevo sin decir nada en el camino tenía unas preguntas, pero esas preguntas no serían resultados tan fácilmente. El la ayudo a ponerse en la cama una ves hay ella le confeso que tenía una enfermedad muy rara, su tiempo de vida era muy corto y ella no le había contado a nadie solo sabía él y su familia. La importancia de no hacer nada se convirtió en llanto el, ella lo abrazo poniendo su cabeza en el pecho de ella y dejando que él se desahogara, pasaron varios minutos y él una vez comenzó a tranquilizarse le confesó algo Yashahiro: Azumi sé que no hemos paseo mucho tiempo juntos, pero aun así el tiempo que pasamos para mí fue único y maravilloso, la energía que tienes, tus sentimientos, tu carácter todo de ti me parece único eres la mejor persona que he conocido y la pude a ver conocido, no tengo claro 93
todavía lo que siento, pero aun así quiero decir que te amo. Ella sólo lo mito con un brillo en sus ojos ya ella sentía lo mismo Ambos solo se miraron con una pequeña sonrisa y sonrojo en cachetes El paso todo el día con ella prometiendo que estrían el uno con el otra hasta que mueran los corazones de aquellos muchachos latía al mismo ritmo. Ella la fue a ver todo ese tiempo que estaba en hospital, le ayudo a igualarse y explicarle todos los nuevos temas que habían visto. Ella no podía estar más agradecida con el. Los meses pasaron el vínculo que habían formado todo ese tiempo era único he inigualable como cualquier otro, ambos pasaron mucho tiempo juntos que ella le invitó a comer a su casa hay conoció a su familia sinceramente el tenía muchos nervios, pero ella insistió tanto que termino aceptado, al parecer era la primara ves que traía un chico a la casa de ella, la familia estaba orgullosa de ella de encontrar un hombre de buenos sentimientos y guapo. El como venganza también insistió en que ella debía conocer la familia del ella acepto muy rápido pero cuando era hora se arrepintió, pero ya era muy tarde para eso. Y así paso todo el año lectivo, era la última semana de clases y ella se sentía cada vez más débil no podía con el dolor por eso le pidió al chico que la encontrara en la playa para confesarle sus últimas palabras Tiempo actual La chica seguía llorando el pecho del chico hasta que perdió sus fuerzas y se desmallo, en la cargo y la llevo al hospital más cercano, pero ya era muy tarde. En un ataque de iras sentía que era su culpa asa que poco tiempo después del funeral de la chica decidió quitarle la vida para no pensar y sentiré culpable de la muerte de su amada. Fin.
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Discopic Memory Autora: Catalina Vallejos
Las estridentes alarmas de los autos de la guardia de NeoSeúl retumban intensamente en sus oídos, su corazón estallando en su pecho, quizá nunca más en su vida podría sentir tanta adrenalina como en ese momento. Con un torbellino en su cabeza casi choca contra el gran anuncio flotante frente a ella, estaban infestados, pensó. La vida en el epítome de la tecnología era tan estresante, con la dictadura de cyborgs dominando y segregando el país era difícil no estar siempre alerta, especialmente cuando eres un ladrón de nanotecnología japonés. El gobierno perseguía a los ladrones extranjeros, obtener nano y biotecnología legal era imposible para ella por su condición. Si eras coreano y necesitabas una prótesis o algo relacionado era tan fácil como ir a un centro especial y pedirlo, para Aeri eso jamás fue una opción. Ahora era perseguida por la guardia de la ciudad. Tenía que atravesar el gran túnel antes de poder siquiera idear un plan para la situación. Se regañó internamente por haber tomado tal camino, dentro habría robots que por ir a exceso de velocidad le dispararían rayos gamma repetidamente, si uno llegaba al motor de la nave sería su fin. Vaya que tenía problemas. Pero, ¿cómo se había metido en esto? La respuesta era Zhuo, su enfermedad, siempre había sido débil, desde la primera vez que se conocieron siendo apenas una niña en las tétricas y frías calles de la ciudad. Al igual que ella, Zhuo era extranjera. Le fue imposible no simpatizar, no eran muy diferentes después de todo, dos extranjeras vagando sin rumbo en la ciudad más hostil del este asiático. Hace diez años En un puente que conectaba dos edificios abandonados en el piso 127, en ese lugar había conocido a Zhuo. Sabía que no era sitio para un niño pues el paraje tenía fama de ser el vertedero del gobierno, aquí era donde enviaban a sus robots que no era útiles, una vez ahí eran desmantelados, esto lo hizo un paradero de traficantes de tecnología. La propia Aeri reconoce haber ido un par de cientos de veces antes a hurgar entre la chatarra. Detrás de un gran trozo de hierro deshecho estaba escondida, Aeri notó su presencia gracias a los pequeños gimoteos que la niña emitía. Dedicó que debía hacer algo. Comunicarse con ella no fue un reto, solo tuvo que deducir su nacionalidad, y eso era aún más fácil. En Asia usualmente cada país marcaba a sus ciudadanos de tal modo que fuesen fácilmente identificables, claro que eso 96
únicamente elevó los niveles de xenofobia. La marca de Zhuo era una gruesa franja azul que cubría el centro de su cuello, contrastaba con su blanca piel. ¨La marca China, pensó Aeri. Con eso en mente configuró el traductor que traía la prótesis de su brazo y empezó a hablar. ¨ Hola, no quiero hacerte daño, sé que eres extranjera, igual que yo. Por favor déjame ayudarte¨, dijo mientras veía como la niña ladeaba la cabeza con lo que el traductor decía. ¨ ¿Cuál es tu nombre? El mío es Aeri. ¨ ¨Zhuo, mi nombre es Zhuo¨, respondió con una voz cansada al borde las lágrimas. Nadie sabía cuánto tiempo había estado en las calles de esa oscura ciudad, sin que nadie se le acerque, sin que nadie le hable, sin ayuda, a la deriva. Aeri casi derrama una lágrima. ¨Déjame ayudar, por favor. ¿Vienes con alguien? ¨ habló. La niña frente a ella solo negó con la cabeza. ¨ ¿Y cómo llegaste? ¿Quién o que te trajo? ¨ ¨Vine como todos¨, murmuró mientras sostenía las lágrimas. ¨el Basilisco me trajo. ¨ Claro, el departamento de relaciones exteriores, o el Basilisco, como les gustaba ser llamados. Sus brigadas emprendían enormes expediciones a países tecnológicamente menos desarrollados con el objetivo de “iluminar Asia”. Una fachada para toda su basura. Lo que en realidad hacían los trabajadores a cargo era engañar jóvenes o niños con pocas oportunidades y ofrecerles un “trabajo”, que consistía en ser un esclavo permanente en las fábricas de nanotecnología en la ciudadela industrial bajo el mando de MIS Corp., una mega empresa gubernamental. Para Aeri no había sido diferente, había llegado llena de sueños e ilusiones a un lugar que no conocía, con la esperanza que solamente alguien de doce años tendría. Sin embargo, no tardó en darse cuenta a que la habían traído en realidad. Recuerda vívidamente haber llorado toda esa noche, se arrepintió desde el fondo de su corazón, dejó a su familia y alguna vez tuvo, todo para alimentar un sueño que, ahora, jamás se cumpliría. Estaba destrozada, pero ideó un plan. Pasó cerca de un mes en la fábrica, ideando la mejor manera de escapar, claro que no del todo sola. Había conocido a un niño mestizo un año mayor que ella. ¨Mi nombre es Mark¨, fue su respuesta cuando le preguntó cómo se llamaba. ¨Aeri¨. El momento que sus ojos chocaron en sus corazones supieron, que ya no 97
estarían solos. Siempre se tendrían el uno al otro. Regresó su mente al presente y puso su mirada en Zhuo. ¨Si no quieres quedarte aquí, sígueme¨. Se levantó y miró a Aeri. Rápidamente, se dio cuenta de que Zhuo no tenía ningún implante o mejora. Era bastante obvio, no debía llevar más que unas pocas semanas en la ciudad. Pero si no había mejoras y estaba sola, ¿cómo había escapado? Un fuerte sonido de metal quebrándose la sacó de su trance, era un niño, de la misma edad de Zhuo, con la misma marca azulada. Tenía un arma de rayos UV-C. ¨ ¿De dónde sacó eso? ¨ se cuestionó. La cara de la niña china cambió a una de alegría. ¨ ¡Yang, volviste! ¨empezaron a hablar en chino. ¨Claro que volví, no íbamos a sobrevivir por nuestra cuenta¨, decía mientras su voz se apagaba en la medida que notaba la presencia de Aeri. ¨ ¿Quién es ella? ¨ cuestionó mientras intercalaba su mirada entre las dos chicas. ¨Es Aeri, y quiere ayudarme, quiere ayudarnos¨, respondió. El niño la miró disgustado ¨No me mires así, sabes que no tenemos opciones¨. Y era verdad, no pasaría mucho para que algún cyborg de seguridad los detectase. Al escanearlos y darse cuenta de que no son coreanos, serían capturados y llevados de vuelta a la fábrica. ¨ ¿Hablas coreano o inglés? ¨, habló esta vez en inglés, nunca alejando su mirada de la japonesa. ¨ Ambos, aunque el inglés se me da mejor¨, respondió. Ya podía dejar de usar su traductor. ¨Okay, ¿qué quieres de nosotros?, ¿por qué quieres ayudarnos? ¨ preguntó con un tono que desbordaba desconfianza. ¨Pues yo¨ Aeri empezó a hablar: ¨Yo también he pasado por lo mismo y sé sobre alguien, bueno, de algunos que pueden ayudarlos. Como lo hicieron conmigo hace cinco años¨. Para ser apenas un niño Yang tenía una mirada espeluznante, mirándola como si tratara de desenmascararla con solo verla fijamente. Bien, confiaremos en ti, fuiste la única que se acercó a nosotros en estos días. Y a juzgar por tu marca eres extranjera. ¨ dijo aún manteniendo su mirada. ¨Te daré el beneficio de la duda¨. Estaba en lo cierto, la marca japonesa era la más identificable de todas. Consistía en una franja que atravesaba sus ojos de oreja a oreja. Dando el aspecto de un antifaz. Aeri sonrió. 98
¨Sin trucos, soy perfectamente capaz de escapar y te mataré si tengo que hacerlo. ¨, habló Yang, entre tanto miraba a Zhuo morderse las uñas. ¨Con que así era como escaparon¨, pensó. No había que ser un genio para deducir que Yang era capaz de lo que sea, a pesar de ser un niño delgado y hasta quizá que tierno de no ser de la amenaza de muerte, pero eso no la inmutó. En sus rasgos aún conservaba cierto rasgo de inocencia y brillo que todo niño debería tener. Rasgo que ella mismo tuvo, pero ahora no puede ver cada vez que se mira al espejo. Su se convirtió en un huracán, la vida en NeoSeúl nunca fue agradable o pacífica, y sus víctimas eran claro ejemplo de lo que tuvo que hacer para sobrevivir. Pero después de todo, todas las personas a las que eliminó solo buscaban matarla también, así que de alguna manera eso la hacía sentirse mucho menos culpable. La voz de Yang llamándola finalmente la sacó de su trance. ¨Vámonos¨, gritó. ¨El toque de queda comienza dentro de poco y los cyborgs empezarán a patrullar. El tiempo es vida¨. Empezó a caminar por la plataforma, su nave no estaba lejos. Volteó hacia atrás y abrió lentamente los ojos, Zhuo se escondía tímidamente detrás de la espalda del niño. Parpadeó y pudo ver a Mark y a sí misma, dos niños solos contra el gran y cruel mundo. El paralelismo hizo que una lágrima baje por su mejilla izquierda. La limpió y siguió avanzando, detrás de un gran pilar de hierro estaba su nave. No era grande, ni demasiado pequeña. Los tres cabrían perfectamente. Era de color negro mate, haciendo que no reflejase las luces de ciudad. En una sociedad en donde los extranjeros son parias no se esperaba que alguien como Aeri tuviese una nave de tan buena calidad. Es más, ni siquiera tendría que tener una, todo se lo debía a su familia, quizá no exactamente su familia, pero para ella lo eran. Hace cinco años Cuando escapó junto a Mark se encontró en la misma situación de Zhuo y Yang. Vagaron juntos por cerca de dos semanas en el suelo de la ciudad, sin mejoras, no había nada que pudieran hacer. Si había un dios ahí afuera, debía agradecerle por mantenerlos vivos por tanto tiempo. Durante ese lapso llegó a conocer mucho al chico, le contó que su madre 99
era canadiense, pero no conocía a su padre, solo sabía que era coreano. Eso explicaba el porqué de su falta de marca, y también por qué hablaba un inglés tan perfecto. Por su parte, sus padres eran ambos nipones, había aprendido inglés por cuenta propia, impulsada por su sueño de trabajar como maestra. Ambos tuvieron que aprender a sobrevivir, no importaba el costo. Prefiere no recordar esa etapa de su vida, lo que hizo, lo hizo para subsistir. En su lugar, quiere recordar los chistes malos de Mark en un intento de hacerla reír y apaciguar el tornado que sus emociones eran en ese momento. Siempre estuvo ahí para ella, incluso ahora seguían siendo cercanos. Muy cercanos. Durante el viaje casualmente pasó por el callejón en donde Joo y TY los encontraron. Al parecer los dos estaban en el sitio donde se escondían cuando la guardia de la ciudad los perseguía. Aeri recuerda a la mujer como la más hermosa y al hombre a su lado como el más valiente, compartían cierto parecido entre ellos. ¨ ¿Hermanos? ¨ No tuvo tiempo de procesar lo que pasaba, cuando un estruendo ensordecedor los alcanzó, rápidamente la mujer los atrapó en un abrazo. Granada de plasma. Juntos fueron arrastrados a lo que aparentaba ser un hoyo bajo tierra y un túnel. Se mantuvieron quietos, el hombre y la mujer ahí estaban congelados. Se oyó una voz que vino desde la superficie. ¨ ¡Esos malditos, como lo hacen!, se los traga la tierra¨, pronunció una voz gruesa, empapada de ira. Luego de lo que parecieron horas, los guardias se alejaron y los adultos por fin respiraron con alivio. ¨ ¡Por el gran Key! Joo, eso estuvo más cerca que nunca¨, susurró el hombre, luego miró a los niños en brazos de su compañera. ¨ ¿Qué estaban haciendo ustedes aquí?, ¿Cómo llegaron? ¨ espetó al tiempo que les dedicaba un amenazador gesto. ¨Por favor TY, déjalos, solo son unos niños. Y a juzgar por su marca¨, dijo viendo a la niña de su regazo, ¨ella es japonesa, es igual a la de Yuta, y él debe ser mestizo, no tiene marca, justo como Johnny¨. ¨ Está bien, lo siento, tienes razón, hermana¨ ¨ ¿Hablan coreano? ¨, preguntó a través de su traductor. Mark asintió y Aeri nada más ladeó la cabeza. ¨Genial, mi inglés es pésimo¨, soltó mientras sonreía. ¨Ahora pequeños, 100
díganme como llegaron hasta aquí. ¨El mundo es oscuro, NeoSeúl jamás fue acogedor¨, dijo Joo entre lágrimas. ¨Siento lo que tuvieron que vivir¨. Luego de que se presentaran como la dupla de hermanos, Joo y TY, Mark les había contado todo lo que habían pasado. Ambos adultos se veían visiblemente afectados, casi como si los comprendieran. Se ofrecieron a acogerlos y llevarlos con su “familia”. Les prometieron darles lo que necesitaran, o eso fue lo que le dijo Mark cuando le tradujo su conversación. Pero Aeri no lo entendía, ambos tenían la marca coreana. Círculos púrpuras en sus sienes. ¿Por qué querían ayudarlos? Si algo había aprendido de los coreanos era a temerles, después de todo su gente era la razón de porque estaban ahí. Como si pusiera leer sus pensamientos, Joo habló, ¨Sé que tiene dudas, pero en verdad, solo queremos ayudarlos. Porque los entiendo, porque yo también odio la sociedad¨. ¨Vamos, hermana, enciende la luz¨, habló el hombre a su derecha. ¨Debemos llegar a la base pronto o Jun me matará por haberte tenido fuera tanto tiempo¨. Joo soltó una pequeña carcajada y puso sus ojos en blanco, ¨ Muévete ya¨. Aeri vio como caminaron, sin embargo, ella se quedó estática, no estaba segura si quería ir con ellos. Fue cuando Mark se dio cuenta y regresó hacia donde estaba, le ofreció su mano, confundida, la tomó. ¨No puedo predecir el futuro y tampoco puedo saber que va a ser de nosotros, pero te prometo que pase lo que pase siempre estaré a tu lado¨, dijo mirando sus manos entrelazadas. Cuando alzaron la cabeza al mismo tiempo y sus ojos chocaron, Aeri sintió que podía ahogarse en la galaxia contenida en los ellos. Y sintió una sensación extraña creciendo en su estómago, era cálida y acogedora, por unos segundos, saboreó la felicidad. Mientras la escena se desarrollaba a pocos metros, Joo y TY se miraron con complicidad. Caminaron por el túnel hasta llegar a una especie de escotilla, ahí TY introdujo una contraseña y la trampilla se abrió. Joo y Aeri salieron primero seguidos de los dos chicos. Su destino fue una clase de habitación muy oscura. Usando su mano biónica, la mujer de negros cabellos encendió un extraño fuego verde por 101
su palma. Los niños se miraron asombrados, esto era lo más cerca que jamás estuvieron de la tecnología que todo el mundo proclamaba que existía en NeoSeúl. La habitación e iluminó y dejó ver una enorme nave, vaya, que debían ser ricos como para tener esa monstruosidad. ¨Todos arriba¨, exclamó Joo mientras su hermano cerraba la trampilla. Aeri subió al vehículo y miró en su interior, amplio y cubierto en negro con detalles minimalistas en verde y púrpura. Bonito, elegante y futurista, así lo describiría. Una vez que todos estuvieron dentro, la nave encendió. TY los había colocado en unos cómodos asientos a los laterales del auto, y les abrochó cinturones, al tiempo que la mujer trazaba el curso que emprenderían. ¨44.059, 127.77¨, le habló a una pantalla holográfica verde. La máquina empezó a elevarse al tiempo que sus neumáticos se convertían en propulsores verticales que desprendían un fuego rojo. Lo que parecía una habitación resultó ser una especie de garaje con domo que se abrió a órdenes de Joo, la nave terminó de elevarse y en piloto automático los llevó al destino ya mencionado. Viajaron tomando un perfil bajo, había muchas naves en la ciudad, pero tampoco había que llamar demasiado la atención. Una vez cerciorada de que no habría más guardias siguiéndolos, la mujer se acercó a Mark y a ella. Juntando sus manos les dijo: ¨Niños ahora estamos en camino a nuestra guarida, quiero que sepan que hay más personas ahí, muchas más. Digo esto para que no se asusten demasiado. ¨ ¨Así es, somos una familia¨, gritó TY desde algún lugar en el fondo de la nave. ¨Exacto, justo como una familia¨, Joo asintió mientras hablaba. ¨Saben¨, siguió, ¨en algún momento de nuestra vida, mi hermano y yo estuvimos cegados por el gobierno y el sistema hasta que Key nos abrió los ojos. ¨. ¿Key?, ya habían mencionado eso antes. ¿Quién o qué era? ¨Diles quién es hermana, míralos, no pueden con la intriga¨, dijo el hombre de cabello gris. ¨Si, claro¨, sonrió la mujer. ¨Key es nuestro líder y maestro. Fue gracias a él que pude ver el mundo en colores, nos mostró las crueldades del gobierno y las corporaciones contra los extranjeros¨, hizo una pausa y miró a su hermano a su derecha. 102
Como dije antes, a pesar de ser coreanos nacidos y criados aquí, o incluso de venir de las altas esferas, nunca pudimos simpatizar realmente con los ideales que desde pequeños nos imponían. ¨ ¨Al inicio pensamos que quizá solo era una etapa y que pronto lo olvidaríamos, pero no pudimos. ¨ ¨Aquí es donde entra Key¨, dijo TY atrayendo todos los ojos hacia él. ¨Lo conocimos desde que fuimos niños, pues trabajaba para nuestro padre en MIS Corp., siempre estaba en nuestra casa y durante mucho fue el consejero y protector que el nuestro verdadero nunca fue. ¨ ¨Exacto, no estoy orgullosa de decirlo en voz alta, pero nunca llegué a querer tanto a nuestro padre, después de todo, nos echó siendo adolescente por, según él, “conspirar en contra de la nación”. ¨, agregó Joo. ¨Cuando lo único que realmente hicimos fue reclamarle sobre el salario de sus empleados extranjeros. ¨ ¨Una reacción claramente exagerada, hermana¨, habló el hombre. ¨Pero pronto descubrimos la verdad, bueno, Key nos lo contó. Los extranjeros venían a NeoSeúl engañados. ¨ Esas palabras hicieron que tanto Aeri como Mark se tomasen de las manos con pequeñas lágrimas naciendo en sus ojos. Entonces Joo dijo, ¨Por favor disculpen, no era nuestra intención revivir hechos del pasado, por eso les dije que los comprendía, porque como a ustedes hemos rescatado a más. ¨ La niña miró a la mujer confundida, ¨ ¿A más? ¨ ¨Si pequeña, no son los primeros niños extranjeros que encontramos, ni los adultos tampoco¨, respondió Joo mientras acariciaba amorosamente su cabeza llena de dudas. ¨Ha llegado a su destino¨, pronunció una voz robótica adelante. ¨Es hora de bajar, les contaremos más cuando entremos¨, les dijo TY a ambos niños mientras los ayudaba a desembarcar. ¨Exactamente, también les mostraremos el lugar, e incluso podremos ver a Key¨, habló la mujer esta vez, ¨vamos, su vida está por comenzar. ¨ Tenía que atravesar el gran túnel antes de poder siquiera pensar en que hacer con la policía, se regañó internamente por haber tomado tal camino, dentro de aquel túnel habría robots que por ir a exceso de velocidad le dispararían rayos gamma repetidamente, si uno llegaba al motor de su auto sería su fin. Pero debía mantener el control, tenía hacerlo, por Zhuo, su compañera estaba gravemente herida por una reciente batalla contra los guardianes de 103
la dictadura y al no tener un implante que regenere sus tejidos, ella podría morir. Claro que Aeri haría todo lo posible por hacer que eso no suceda, ella era la hermana que nunca tuvo, estuvieron juntas desde que se encontraron por primera vez en las oscuras calles de la ciudad, y eso había sido hace ya 10 años. Saliendo de su trance decidió impulsarse hacia arriba, usando casi todo el combustible que le quedaba, si lograba perder a la policía en el cielo podría regresar a su guarida antes de que la gravedad haga su trabajo. Aceleró y vio como poco a poco los autos policiales se quedaban atrás, todos explotando gracias al impacto contra los zepelines publicitarios o los anuncios gigantes que flotaban sin rumbo. Aún estaba aturdida cuando recibió una llamada de Mort, su compañero de banda, seguía en shock, pero de todos modos aceptó. ¨ ¡Riri! por amor a Dios estas bien, estaba tan preocupado por ti. ¨dijo él del otro lado ¨Claro que estoy bien, siempre hago bien mi trabajo, en especial si es para mis amigos. Y vaya que por poco me atrapan, ¿desde cuándo la dictadura persigue ladrones de tecnología? Nunca lo habían hecho en las otras mil veces que lo hice. ¨ dijo ella con un tono interrogativo ¨Me pregunto lo mismo TY también fue perseguido hoy, es una suerte que estuve ahí para salvarle el pellejo¨ replicó en respuesta Aeri puso los ojos en blanco ¨Vamos tampoco te des todo el crédito, todos saben lo buen conductor que es TY¨ dijo riendo ¨Debo irme, apenas tengo combustible y se está haciendo tarde¨ ¨Adiós Ri, te veo pronto¨ y colgó. Aeri sonrió, vaya que ese chico buscaba los momentos más inoportunos para hablar con ella, quizá piensa que no sabe que en realidad le gustaba. Era bastante obvio y él no sabía disimular. Por fin se sintió en paz, miró a su derecha y vio el implante por el que arriesgo su vida, una amplia sonrisa apareció en su rostro, Zhuo podría seguir un día más con ella. Giró a la izquierda cuando su rostro se iluminó en rojo y azul. La policía. La habían seguido, pero ¿cómo?, ella los vio explotar. Su rostro se contrajo en una mueca de terror cuando vio a un policía apuntarle directo en la frente, era un arma laser. Rayos gamma. Ella sabía que moriría, estaba consciente de que siendo una japonesa en NeoSeúl sus opciones eran pocas y sus derechos eran nulos. No se dio cuenta en que momento las lágrimas llegaron a sus ojos. Su vida, por la que 104
tanto luchó estaba a punto de terminar, estaba acorralada. Abrió los ojos para encarar a su destino y vio la luz, la luz de la muerte, tan bonita y brillante. El arma estaba formando el rayo, el oficial ya había presionado el gatillo. Como acto de redención levanto las manos, ¨Lo siento, lo siento tanto¨ murmuró entre lágrimas y temblores de su fuerte llanto. Pedía perdón a Zhuo por fallarle, a Mark porque ahora le hará falta y a su banda por delatarlos. Una vez muerta solo era cuestión para que revisen su nave y lleguen a la guarida. Siendo ellos mayormente extranjeros los aniquilarían, no les tendrían piedad. Su corazón se contrajo ante tal pensamiento. En menos de un segundo, todo se oscureció. Fin.
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Luces y Sombras Autora: Dayane Vásquez
Desde pequeña siempre he tenido miedo hablar en público, tengo 14 años y me gusta jugar fútbol. Siendo sinceros una gran parte de mi vida he vivido constantemente con miedo, miedo a hablar en público, a ser rechazada, a equivocarme. El pánico y la tristeza me acompañan día a día, pero poco a poco he tratado de afrontarlos. Digo que tengo miedo porque me cuesta mucho confiar en las personas por el temor a que me traicionen o me lastimen. Me encuentro saliendo de mi entrenamiento de fútbol que empecé desde que tengo diez años, es un lugar muy amplio y con bastante espacio, para mí es un lugar seguro. El sonido de las personas gritando «"¡vamos!", "¡tu si puedes!", "¡gol!"», son palabras que me llenan de alegría porque desde que entre al equipo de fútbol he logrado desahogarme y me ayuda mucho a enfrentar mis problemas. “Todo pasa por algo” es una de las frases que siempre trato de tener presente desde niña. Desde los cuatro años mis papás se divorciaron, el divorcio provocó discusiones entre mi padre y mi madre, esos conflictos me afectaron sumamente. Fue un golpe muy duro del cuál no estaba preparado para vivirlo, ni afrontarlo a tan corta edad. Con el paso del tiempo eso problemas se fueron haciendo más grandes y causó que tuviera depresión, ansiedad, pánico y miedo. Hasta que con el paso de los días no comía, no me daba hambre, solo quería estar encerrada en mi cuarto sin que nadie me molestara, mis días se volvieron grises, no tenía ganas de levantarme de la cama, no tenía ganas de ser una persona sociable y a la serie de problemas que tenía en mí, me diagnosticaron Anemia. La ansiedad empezó desde que tenía tan solo once años, recuerdo que al hablar de ansiedad no sabía de qué se trataba hasta acudí donde un amable psicólogo que me comentó lo siguiente: «La ansiedad puede ser normal en situaciones estresantes, como hablar en público o realizar una prueba. La ansiedad es solo un indicador de una enfermedad subyacente cuando los sentimientos se vuelven excesivos, en todo momento e interfieren con la vida cotidiana. A parte como tu médico necesito que me digas si has tenido uno de los siguientes síntomas: - Pensamientos suicidas. - Dificultad para estudiar o llevar a cabo tus actividades cotidianas. - Dificultades para mantener relaciones personales. - Te excedes con el alcohol u otras sustancias. 107
- Te sientes triste o decaído.» A lo que le respondí que sí, tenía dificultad para llevar a cabo las actividades cotidianes y me sentía cada vez más triste y decaída. Desde ese día el médico me había dicho que si tengo ansiedad y que lo debemos de tratar los más pronto posible porque a mi edad no era saludable de que este enferma, me recomendó realizar actividad física y es ahí es donde empiezo a asistir al equipo de fútbol, también me sugirió que llevara una dieta saludable, tener un patrón de sueño regular y realizar ejercicios de relajación que me ayudan a reducir la ansiedad, también me propuso la idea de unirme a un grupo de apoyo ya que sería de gran ayuda. La depresión en cambio comenzó cuando al tener un problema siempre me impactaba de manera negativa y provocaba que mi autoestima bajara. Ahora en día voy al psicólogo, me ayuda demasiado a relajarme y a liberarme de mis tensiones, cosa que con mis padres no he podido hacerlo hasta hoy en día, también me ayudó a superar los miedos que tenía, he podido controlar la ansiedad poco a poco, no voy a negar que ha sido un proceso largó y muy difícil para mí y mi familia, pero con el paso del tiempo he logrado salir adelante. Como estaba asistiendo al médico y al psicólogo mis padres decidieron hacerme pruebas para ver si no tenía alguna otra enfermedad. Recuerdo que era un lunes por la mañana cuando me llevaron hacerme las pruebas y al ya tener los resultados fuimos donde el médico y me había dado la noticia que tenía Anemia, desde entonces empecé a tomar medicamentos, me hicieron cambios en mi dieta, la persona especializada en la anemia es el hematólogo y lo visitó cada mes o cuando lo necesito para ver cómo voy avanzando. Vivo con mi mamá, la relación con mi madre es buena, hacemos las cosas juntas, vamos de compras juntas, me escucha, me da consejos y siempre está en las buenas y en las malas. A mi padre lo visito cada quince días o cuando él me quiere ver o viceversa, con mi padre si hay una buena relación siempre esta cuando lo necesito y me apoya en las decisiones que tome respecto a mí. Hoy en día relación entre mis padres ha cambiado ya no hay discusiones, hay una buena comunicación entre ellos, siempre tratan de ponerse de acuerdo y hacen todo lo posible para que sea feliz. Mi familia en general es más unida y me apoyan dándome consejos, ánimo y hacen todo lo posible para que me sienta bien y vuelva a una vida normal sin problemas, y el fútbol ha sido de gran ayuda porque me ayuda a desahogarme y me ayuda 108
a ser mucho más fuerte. Recordemos que siempre va a ver alguien para nosotros sea un familiar, un amigo, una amiga, una persona que recién conocimos o alguien cercanos a nosotros, recordemos que no estamos solos, dejémonos ayudar, no te cierres en un mudo donde sabes que te estás haciendo daño, sal, habla con alguien que esa persona te va a escuchar, te va ayudar en lo que necesites, va a estar ahí para ti en las buenas y en las malas, busca ayuda que es lo mejor que podemos hacer por nosotros mismos, estamos en un proceso de adolescencia donde no deberíamos sufrir demasiado, donde no deberíamos tener muchos problemas, pero algo qué recuerdo yo, para no sufrir demasiado es que hay casos peores por ejemplo hay familias donde un padre se muere, la madre, el hermano o un familiar querido, no tienen que comer, no tienen para los estudios, recordemos que hay gente peor y por eso debemos salir adelante; primero por nosotros mismos y después por las personas que nos rodean. Tenemos que tratar de ser felices por nosotros mismo, debemos de tener una buena autoestima para poder ser nosotros mismos y no nos preocupemos por lo que diga la gente de nosotros, aceptémonos tal cual somos, no permitas que las palabras mal intencionadas te lastimen porque como seres humanos valemos demasiado, no dejes que el miedo te derrote porque si tienes miedo te afectara en el colegió, en la casa, en lugares públicos, etc. Libérate, se tú mismo no dejes que los problemas te derroten porque recuerda “Todo pasa por algo” sea para bien o para mal. Si ya sufres de alguna enfermedad como la Anemia u otro tipo de enfermedad, pon de tu parte para que te sientas bien, hazlo por ti y de ahí por los demás, porque si primero lo haces por los demás volverás a caer, así que hazlo por ti y veras cambios, habla con tu familia de los problemas que tengas o con una persona que sea de tu confianza para que así no tengas que estar solo y tengas alguien que sepas que va a estar para ti en las buenas y en las malas. Fin.
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La verdad de Sonia Autora: Fernanda Vera C.
En Tokio habitaba una ``dulce” señora en un pueblo alejado de la ciudad, esta era una persona muy peculiar ya que nunca le agrado la idea de tener un hijo varón o que tenga alguna discapacidad, ella tuvo una hija Raquel. ``La dulce señora Sonia, cree en un mito que siempre le contaba su madre, el cual era si tenía hijos varones o con alguna discapacidad era una carga ya que decía que no servía para nada” Su hija Raquel, era una hermosa persona, peculiar, y ella nunca creyó el mito que le contaba su madre ya que para ella era algo muy absurdo, ya que Raquel tenía otra mentalidad y no pensaba lo mismo que su mamá, porque ella siempre le agrado la idea de tener un hijo varón. A su madre Sonia, nunca le agrado el pensamiento de su hija Raquel, ya que por ese problema siempre peleaban y nunca le hizo caso a su madre y siempre su madre intentaba que ella cambiara de parecer. Hubo un tiempo donde Raquel sospechaba que ella tuvo una hermana ya que siempre su madre Sonia le decía que para ella era muy difícil, ya que decía que era mucha responsabilidad, pero luego de un tiempo que su madre le había dicho eso, se dio cuenta que en la casa había una habitación la cual solo podía entrar su madre Sonia y su padre Víctor, y siempre que entraban a esa habitación llevaban comida, ropa para una señorita de dieseis años, cosas de aseo, etc. Siempre Raquel tuvo un impulso de averiguar que habitaba o que había en esa habitación, pero siempre que le preguntaba a su madre Sonia o a su padre Víctor le evitaban el tema o le decía que es una bodega y que ahí tienen cosas para regalar. Su abuela paterna Blanca, sabe la verdad de esa habitación, y siempre le quiso contar a su nieta Raquel lo que en realidad había en esa habitación, pero sus padres se lo prohibieron y le dijeron ``si le dices algo olvídate de Raquel y de nosotros y ya no te quiero ver cerca de nuestra hija nunca más”. Así que su única opción era quedarse callada, pero ella ya no lo soportaba porque era muy triste no decirle la verdad a su nieta Raquel, de que tenía una hermana con un problema de síndrome de Down, como anterior mente les comente a su madre Sonia nunca le gusto tener hijos con problemas de discapacidad y cómo fue su primera hija la pudo esconder en esa habitación por dieseis años y los únicos que saben la verdad de esa habitación son el padre Víctor, la madre Sonia y la abuela paterna Blanca, nadie más así que fue fácil esconderle la verdad a Raquel. La señora Sonia siempre tuvo un miedo al pensar que alguien más de la 111
familia se pudiera enterar, pero lo dudo mucho ya que nadie más vivía en Tokio. El padre Víctor siempre le dio igual el pensamiento de su esposa Sonia, ya que él nunca pasa en casa solo pasa con sus amigos en bares, fiesta hasta tomando. Nunca le importo si su hija Raquel se enteraba de la verdad con tal de que el pudiera salir ya estaba todo bien, él era un padre ausente en la niñez de Raquel muy pocas veces iba a sus eventos importantes de la escuela, siempre la que daba la cara por Raquel era la madre Sonia y la abuela paterna Blanca, ya que el padre siempre pasaba trabajando para el futuro de Raquel y para poder salir con sus amigos. Luego de un tiempo ya cuando Raquel tuvo los quince años el padre ya se preocupó más por su hija ya que su esposa Sonia le había dicho que se tenían que separar (divorciar) por el descuido de él hacia su hija, porque nunca la vio crecer, Víctor cada vez se intentaba acercar a Raquel para poder pasar tiempo en familia y a Raquel le gustó mucho eso ya que siempre tuvo ese sueño de pasar tiempo con su padre como lo hacían sus compañeras. Víctor cuando ya se acercó a su hija Raquel siempre le dijo que quería tener una hermana ya que se sentía muy sola y casi Víctor le cuenta la verdad, y le dijo a su esposa Sonia lo que había pasado, y que él quería que ya su hija sepa la verdad porque en un punto él dijo que no pasa nada si su hija tiene síndrome de Down, ya que a su hija Raquel no le importaba eso, pero siempre quiso tener una hermana. Sonia se enojó con su esposo por lo que le dijo que ya quería decirle la verdad, así que estaba viendo como deshacerse de su hija Sofía (la que tiene síndrome de Down), Sonia de la preocupación de que Raquel sepa la verdad, estaba muy preocupada ya que tenia miedo que se entere toda su familia y amigos, pero no se rindió y era buscando métodos caseros para deshacerse de su hija Sofía. Hace un tiempo había visto una película, la cual un actor le daba leche como veneno de ratas a el protagonista de la película, entonces Sonia dijo que no era mala idea hacer eso ya que diría que es leche y se la daría a Sofía y nadie se daría cuenta que la esta envenenado, ella dijo que le diría que es por su enfermedad ya que tenía algunos problemas de el estómago, esa sería una buena excusa. En una mañana Raquel vio cómo su madre preparaba una leche donde ponía un líquido amarillento, esto sorprendió mucho a Raquel y quiso probar tal experimento que está haciendo su madre, su madre al ver que Raquel se acercaba quiso esconder lo que estaba preparando y se puso 112
muy nerviosa, Raquel le dijo que si por favor le puede hacer probar ya que tenía mucha sed, su madre se negó y rápidamente se llevó tal experimento tan raro a la habitación. Raquel estaba muy atenta ya que se le hizo muy raro que no le haya dado un poco de su leche, porque siempre su madre Sonia le daba cualquier cosa que ella preparaba, pero en fin. La madre Sonia siempre en las mañanas preparaba esa leche con el líquido amarillento, y Raquel quería averiguar qué era. Un día su madre se estaba dirigiendo a la habitación y Raquel le siguió, su madre Sonia entró cuidadosa mente a la habitación pero no se dio cuenta que Raquel le estaba siguiendo y Raquel se pudo esconder adentro de la habitación, la habitación era muy oscura tenía su propio baño, cocina, una mini sala, casi un departamento. Su madre Sonia se olvidó traer unas cosas para su hija Sofía, y es ahí cuando Raquel mira por primera vez a su hermana Sofía. Raquel estaba un poco asustada pero también estaba feliz, ya que ella sentía que era su hermana, Sofía le preguntó quién eres con voz nerviosa, y Raquel le dijo que era la hija de Sonia y Sofía inmediatamente se puso feliz ya que ella sabía que tenía una hermana, después Raquel y Sofía empezaron a hablar por un pequeño momento, Raquel escucho que su madre Sonia se estaba acercando y rápidamente se escondió en el baño, su madre entró y le llevo galletas con leche, y ahí fue el momento donde Raquel sospechaba que esa leche era la que tenía el líquido amarillento que siempre hacía su madre, su madre le dejó el desayuno y se fue sin darse cuenta que Raquel estaba en la habitación. Raquel salió del baño y Sofia empezó a tomar la leche, Raquel le dijo que si por favor le podía dejar probar un poco ya que siempre veía a su madre Sonia prepararla, entonces Sofia le dio un poco de la leche, después de un rato Raquel le dijo que se iba a su habitación ya que le empezó a doler un poco el estómago, Raquel le comento a su madre que le dolia mucho la barriga y su madre le dio unas pastillas para que le calme el dolor, después de un rato su madre fue a ver como estaba Sofia, cuando llegó sofia ya estaba muerta , pero su madre pensó que estaba dormida, después de un rato llegó su abuela paterna Blanca, ella llegó con dos regalos ya que se los iba a dar a cada una de sus nietas, Sonia le dijo que primero vaya a ver a Sofia ya que a Raquel le estaba doliendo un poco la barriga, cuando la abuela Blanca llegó a la habitación fue a despertar a su nieta pero ella no despertaba, se empezó a asustar mucho porque vio que su nieta estaba 113
muerta pego un grito muy escandaloso, es ahí cuando Sonia fue a ver qué pasaba y vio que por fin su hija estaba muerta y sonrió lenta mente, su abuela Blanca no podía creer que su nuera estuviera tan tranquila al ver que su hija murió, después de un tiempo fueron a ver a Raquel y la vieron completamente convulsionando y su madre y si abuela se asustaron mucho, llamaron a una ambulancia y hasta que llegara la ayuda intentaban hacer que no se durmiera pero fue muy tarde ya que Raquel al momento que llego la ambulancia murió. Su madre Sonia se sintió muy mal al saber que perdió a sus dos hijas y la abuela le dijo que eso era una lección de vida ya que nunca debió despreciar a si hija Sofía. Fin.
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Única Autora: Pauleth Villavicencio
Hola mi nombre es Sabrina y esta es mi historia…. Una mañana en la ciudad de México, allí vivo yo, me desperté como de costumbre fui al baño me arregle, desayune y listo vamos a la preparatoria. Llegamos, es un poco raro siento que toda la prepa está dividida por grupos están los raros allí pertenezco yo, son muy buena onda y muy graciosos, los populares, ahí está Ariel era mi amiga en la escuela pero con el tiempo nos separamos era mi mejor amiga bueno seguimos ellos son los más guapos los deportistas él es Erik es mi crush desde siempre. Ups tengo que entrar a clases son muy estrictos. Horas más tarde Listo una mañana más terminada, en el recreo Ariel boto mi almuerzo no sé qué trae esa chica conmigo es un poco rara a veces tiene como ataques de maldad. No, otra vez mis papas peleando es normal pero se siente súper feo siento que mi corazón poco a poco se hace más pequeño, siento que discuten por mi culpa , si no estuviera viva no les daría problemas Michel mi mamá es muy tierna y dulce, le gusta que haga las cosas correctas y Juan Carlos mi papá es muy frio y no muestra sus sentimientos, ESTOY ARTA No aguanto las discusiones se meten en mi mente, en la prepa no me hacen caso, todos me ignoran como si fuera un fantasma, quisiera tener otra vida. YA NO MÁS En ese momento Sabrina tomo unas pastillas que tenía su mamá guardadas en el anaquel Quedo inconsciente minutos más tarde su mamá entro en la habitación ya que se asustó que su hija no respondiera, Encontró a Sabrina tirada en la cama casi sin pulso, llevaron a la chica de emergencia a la clínica. Entro a quirófano, para sus padres esas horas eran eternas no podían creer lo que hizo su hija. Mientras tanto Sabrina entro en un sueño profundo del cual solo se acordaba que una aurora blanca llevo todos sus recuerdo buenos y malos ella estaba destrozada, lloraba desconsoladamente. Se dio cuenta que no toda su vida era mala, habían momentos muy divertidos y felices, se arrepintió de haber tomado esa decisión. Cuando Sabrina se arrepintió de corazón como por arte de magia volvió a la vida, lloro en los brazos de sus padres y les pidió que la perdonasen. La noticia llego a oídos de Ariel y Erik Ambos corrieron al hospital para saber cómo estaba la salud de Sabrina, 116
Ariel aun sentía cariño por Sabrina y se preocupaba de ella, Mientras a Erik, Sabrina le gustaba y se preocupaba por ella aunque no siempre lo demostraba. Ariel y Sabrina lograron arreglar sus diferencias y volvieron a ser mejores amigas, Erik le confeso su amor. Ya en la prepa todos se llevaban mejor ya no existían los grupos que debes en cuando se enfrentaban todo estaba en armonía. Su familia se recuperó yendo a terapia, estaban felices, sus papás no peleaban y su vida renació ella era feliz. En la prepa todo mejoraba ella y Erik pasaban mucho más tiempo juntos. Hasta que llego Raquel una chica nueva un poco odiosa y quería una relación con Erik, Aunque él no le hacía caso ella no le dejaba tranquilo Decido que Sabrina sea su novia y así crearon una hermosa relación que a lo largo del tiempo se convirtió en matrimonio tuvieron sus hijo y vivieron felices el resto de sus vidas claro que con pequeños problemas como todas las familias pero eran felices. FIN Moraleja: La vida es una sola oportunidad no nos fijemos en las cosas malas veamos siempre el lado positivo a las cosas y tratemos de ser felices
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