8 de septiembre
DĂa Internacional de la AlfabetizaciĂłn Disfruta de estas novelas cuyos protagonistas son lectores
La biblioteca de los libros rechazados, David Foenkinos En Crozon (Bretaña), un bibliotecario decide albergar todos los manuscritos que han sido rechazados por los editores. Estando de vacaciones en la localidad bretona, una joven editora y su marido escritor visitan la biblioteca de los libros rechazados y encuentran en ella una obra maestra: Las últimas horas de una historia de amor, novela escrita por un tal Henri Pick, fallecido dos años antes. Pick regentaba, junto a su viuda Madeleine, una pizzería, y según ella nunca leyó un solo libro y mucho menos escribió nada que no fuera la lista de la compra. ¿Tenía el autor una vida secreta? Rodeado de un gran misterio, el libro triunfa en las librerías, provoca efectos sorprendentes en el mundo editorial y cambia el destino de muchas personas, especialmente el de Jean-Michel Rouche, un periodista obstinado que duda de la versión oficial de los hechos. ¿Y si esta publicación no es más que un cuidado plan de marketing? Fuente Me gusta leer
La chica que leía en el metro, Christine Féret-Fleury Juliette toma el metro todos los días a la misma hora. Y lo que más disfruta del trayecto es observar a aquellos que leen a su alrededor. La vieja dama, el bibliófilo de rarezas, el estudiante de matemáticas, la joven muchacha que llora en la página 247. Juliette los mira con curiosidad y ternura, como si sus lecturas, sus pasiones, la diversidad de sus vidas, pudiesen dar color a la suya, monótona y previsible. Sin embargo, un día decide bajar dos estaciones antes de lo habitual, tomar un nuevo camino para ir a trabajar, sin saber que su vida estará a un solo paso de cambiar para siempre. Si te gusta leer en la bañera o por encima de la espalda de tu vecino; dejar el libro en un vagón del metro u ofrecerlo a tu mejor amigo; compartir tus lecturas en familia o con tu pareja; si coleccionas puntos de libro, ejemplares únicos o no te pierdes nunca las últimas novedades... este libro es para ti.
Fuente: Me gusta leer
El club de lectura del final de tu vida, Will Schwalbe
¿Qué estás leyendo? Ésa es la pregunta que le plantea Will Schwalbe a su madre, Mary Ann, mientras están sentados en la sala de espera del centro de atención a pacientes de cáncer del hospital Memorial Sloan-Kettering. En 2007, Mary Ann regresó de un viaje de ayuda humanitaria a Pakistán y Afganistán aquejada de lo que los médicos creyeron que era una clase de hepatitis muy poco común. Meses después le diagnosticaron un cáncer de páncreas en estado avanzado. Will y Mary Anne comparten sus esperanzas e inquietudes a través de sus libros preferidos. Cuando leen, no son una persona enferma y una persona sana, sino una madre y un hijo que viajan juntos.
Fuente Casa del libro
Don quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes
El Quijote patrocinado por el Instituto Cervantes desde 1998 llega ahora a la Biblioteca Clásica de la Real Academia Española en una edición ampliamente revisada y renovada. Fruto de la colaboración de cerca de un centenar de estudiosos y escritores, bajo la dirección de don Francisco Rico y en el seno del Centro para la Edición de los Clásicos Españoles, el texto ha sido fijado de acuerdo con las más rigurosas técnicas de la moderna crítica textual y se acompaña de un copioso despliegue de estudios y materiales complementarios que de por sí constituyen una enciclopedia del Quijote. Publicado en coincidencia con el cuarto centenario de la Segunda Parte, él es el eje de las Obras Completas de Cervantes que la Academia acometió en el 2012 y confía en rematar en el 2017, cuando el Persiles y Sigismunda cumpla también cuatrocientos años.
Fuente Marcial Pons
Dónde crees que vas y quién te crees que eres, Benjamín Prado
El protagonista de la historia es un gran lector, amante de los libros, entre otras cosas porque en muchos de ellos los personajes le enseñan que siempre hay una luz al final del túnel, por profundo que sea. Este lector voraz se dirige en barco a su ciudad natal y, a medida que la embarcación avanza, su pensamiento retrocede en un tiempo en el que siempre lo acompañan los libros. A través de recursos metaliterarios introduce diferentes historias que remachan la idea de que la lectura es el mejor vehículo para alcanzar la realización personal. Prado desea transmitir así su veneración por los autores clásicos (London, Conrad, Dickens, Stevenson, Kipling...). Lo más interesante de esta novela son estas reflexiones, a menudo -como es habitual en el estilo de Prado- condensadas en frases redondas que funcionan como aforismos.
Fuente Casa del libro y Aceprensa
Fahrenheit 451, Ray Bradbury Fahrenheit 451: la temperatura a la que el papel se enciende y arde. Guy Montag es un bombero y el trabajo de un bombero es quemar libros, que están prohibidos porque son causa de discordia y sufrimiento. El Sabueso Mecánico del Departamento de Incendios, armado con una letal inyección hipodérmica, escoltado por helicópteros, está preparado para rastrear a los disidentes que aún conservan y leen libros. Como 1984, de George Orwell, como Un mundo feliz, de Aldous Huxley, Fahrenheit 451 describe una civilización occidental esclavizada por los medios, los tranquilizantes y el conformismo. La visión de Bradbury es asombrosamente profética: pantallas de televisión que ocupan paredes y exhiben folletines interactivos; avenidas donde los coches corren a 150 kilómetros por hora persiguiendo a peatones; una población que no escucha otra cosa que una insípida corriente de música y noticias transmitidas por unos diminutos auriculares insertados en las orejas. Fuente Casa del libro
Firmin, Sam Savage
Nacido en el sótano de una librería en el Boston de los años 60, Firmin aprende a leer devorando las páginas de un libro. Pero una rata culta es una rata solitaria. Marginada por su familia, busca la amistad de su héroe, el librero, y de un escritor fracasado. A medida que Firmin perfecciona un hambre insaciable por los libros, su emoción y sus miedos se vuelven humanos. Original, brillante y llena de alegorías, Firmin derrocha humor y tristeza, encanto y añoranza por un mundo que entiende el poder redentor de la literatura, un mundo que se desvanece dejando atrás una rata con un alma creativa, una amistad excepcional y una librería desordenada.
Fuente Planetadelibros
La historia interminable, Michael Ende ¿Qué es Fantasía? Fantasía es la Historia Interminable. ¿Dónde está escrita esa historia? En un libro de tapas color cobre. ¿Dónde está ese libro? Entonces estaba en el desván de un colegio... Estas son las tres preguntas que formulan los Pensadores Profundos, y las tres sencillas respuestas que reciben de Bastián. Pero para saber realmente lo que es Fantasia hay que leer ese, es decir, este libro. El que tienes en tus manos. La Emperatriz Infantil está mortalmente enferma y su reino corre un grave peligro. La salvación depende de Atreyu, un valiente guerrero de la tribu de los pieles verdes, y Bastián, un niño tímido que lee con pasión un libro mágico. Mil aventuras les llevarán a reunirse y a conocer una fabulosa galería de personajes, y juntos dar forma a una de las grandes creaciones de la literatura de todos los tiempos.
Fuente Casa del libro
La ladrona de libros, Markus Zusack
En plena II Guerra Mundial, la pequeña Liesel hallará su salvación en la lectura. Una novela preciosa, tremendamente humana y emocionante, que describe las peripecias de una niña alemana de nueve años desde que es dada en adopción por su madre hasta el final de la guerra. Su nueva familia, gente sencilla y nada afecta al nazismo, le enseña a leer y a través de los libros Rudy logra distraerse durante los bombardeos y combatir la tristeza. Pero es el libro que ella misma está escribiendo el que finalmente le salvará la vida.
Fuente Qué libro leo
El lector del tren de las 6.27, Jean-Paul Didierlaurent Guibrando Viñol no es ni guapo ni feo, ni gordo ni flaco. Su trabajo consiste en destruir lo que más ama: es el encargado de supervisar la Cosa, la abominable máquina que tritura los libros que ya nadie quiere leer. Al final de la jornada, Guibrando saca de la entrañas del monstruo las pocas páginas que han sobrevivido a la carnicería. Cada mañana, en el tren de las 6.27, se dedica a leerlas en voz alta para deleite de los pasajeros habituales. Un día descubre por casualidad una pieza de literatura atípica que le cambiará la vida. La amistad une a un grupo de personajes aparentemente anodinos, probables compañeros invisibles de nuestros viajes cotidianos en tren, que esconden mundos extraordinarios donde todo es posible: un vigilante de seguridad que habla en verso, una princesa cuyo palacio es un aseo público, un mutilado que busca sus piernas. En una mezcla insólita de humor negro y dulzura, celebramos con ellos el triunfo de los incomprendidos.
Fuente Planeta de libros
El lector, Bernhard Schlink Michael Berg tiene quince años. Un día, regresando a casa del colegio, empieza a encontrarse mal y una mujer acude en su ayuda. La mujer se llama Hanna y tiene treinta y seis años. Unas semanas después, el muchacho, agradecido, le lleva a su casa un ramo de flores. Éste será el principio de una relación erótica en la que, antes de amarse, ella siempre le pide a Michael que le lea en voz alta fragmentos de Schiller, Goethe, Tolstói, Dickens ... El ritual se repite durante varios meses, hasta que un día Hanna desaparece sin dejar rastro. Siete años después, Michael, estudiante de Derecho, acude al juicio contra cinco mujeres acusadas de crímenes de guerra nazis y de ser las responsables de la muerte de varias personas en el campo de concentración del que eran guardianas. Una de las acusadas es Hanna. Y Michael se debate entre los gratos recuerdos y la sed de justicia, trata de comprender qué llevó a Hanna a cometer esas atrocidades, trata de descubrir quién es en realidad la mujer a la que amó... Fuente Anagrama
La lectora de jade, Frédérique Deghelt Jade, una joven periodista decepcionada por una reciente ruptura decide «secuestrar» a su abuela Jeanne para impedir que la internen en una residencia. Juntas se van a vivir al piso de Jade en París, donde emprenderán un viaje literario y emocional que les cambiará la vida para siempre. Jeanne le confesará a Jade que lleva toda la vida leyendo libros a escondidas, porque en su pueblo y en su época no estaba bien visto que las mujeres leyeran, ya que se consideraba una pérdida de tiempo. Los conocimientos literarios de Jeanne impresionan a Jade que le propone a su abuela que lea la novela que ha escrito y que han rechazado varias editoriales. La joven descubrirá en su abuela una voraz y apasionada lectora, y entre ellas se establecerá un diálogo que les ayudará a comprender el sentido de la novela de Jade y de sus propias vidas. Gracias a su abuela, Jade conseguirá el valor y la confianza necesarias para volver a enamorarse de un joven y atractivo médico indio llamado Rajiv. Y Jeanne, por su parte, en sus intentos por encontrar a un editor para la novela de su nieta, conocerá a Albert, un veterano y culto editor con el que descubrirá que el amor se puede presentar a cualquier edad. Fuente Principal de los Libros
Una lectora nada común, Alan Bennett Si sus célebres perros hubieran respondido a su llamada, la reina no habría descubierto el vehículo de la biblioteca móvil del ayuntamiento aparcado junto a las puertas de las cocinas del palacio, en el lugar menos regio de los jardines. Y no habría conocido a Norman, el joven y pelirrojo pinche de cocina que estaba leyendo un libro de Cecil Beaton e iba a constituirse en su peculiar asesor literario. Pero ya que estaba allí, la reina decide llevarse un libro. ¿Y qué puede interesar a alguien cuyo único oficio es mostrarse interesada? Porque una reina nunca debe ser interesante, ni tener otros intereses que los de sus súbditos. Y jamás habla de sus gustos, sólo pregunta por los de ellos. Isabel II de Inglaterra descubre en los estantes de la biblioteca el nombre de una escritora que conoce, lvy Compton-Burnett. Tiempo atrás le había concedido un título nobiliario menor, y recordaba su tan singular peinado. Y de Compton-Burnett a Proust, que leerá en una de sus estancias en Balmoral, y de Proust a Genet, cuya sola mención hará temblar al presidente de Francia, sólo median algunos libros. Así, azarosamente descubrirá el vértigo de la lectura, del ser, del placer. Fuente Anagrama
El legado de Catherine Elliot, Gemma Camblor, Esther Gili
Un libro une la vida de varios personajes femeninos a través del tiempo. La historia comienza con la joven que lo escribe a comienzos del siglo XIX. A partir de ahí un ejemplar irá pasando por diferentes mujeres hasta llegar al presente. Todas interactúan con el libro y dejan su huella en él, pero leerlo también las transforma a ellas. Una metáfora del amor por los libros y de la magia de la literatura contada a través de unos personajes fuertes y carismáticos que se rebelan ante los convencionalismos de su época. Si es cierto que un libro puede transformarte la vida, tal vez El legado de Catherine Elliot cambiará la tuya
Fuente Planeta de libros
La librería, Penelope Fitzgerald
Florence decide abrir una pequeña librería, que será la primera del pueblo. Adquiere así un edificio que lleva años abandonado, comido por la humedad y que incluso tiene su propio y caprichoso poltergeist. Pero pronto se topará con la resistencia muda de las fuerzas vivas del pueblo que, de un modo cortés pero implacable, empezarán a acorralarla. Florence se verá obligada entonces a contratar como ayudante a una niña de diez años, de hecho la única que no sueña con sabotear su negocio. Cuando alguien le sugiere que ponga a la venta la polémica edición de Olympia Press de Lolita, de Nabokov, se desencadena en el pueblo un terremoto sutil pero devastador.
Fuente Impedimenta
El libro de las cosas perdidas, John Connolly
Una vez por semana y durante más de dos años, Azar Nafisi, una profesora de literatura de la Universidad de Teherán expedientada por negarse a llevar el velo, reunió en su casa a siete de sus alumnas para leer y comentar algunas de las novelas occidentales prohibidas por el régimen de los ayatolás. Poco a poco, superada la timidez inicial, las jóvenes estudiantes empezaron a expresarse con libertad, no sólo sobre las novelas de Jane Austen, Henry James, F. Scott Fitzgerald y Nabokov sino sobre sí mismas, sus sueños y frustraciones. En aquellos libros habían encontrado una alternativa valiente a la tiranía ideológica a la que estaban sometidas y la adoptaron como un desafío.
Fuente Qué libro leo
Los libros repentinos, Pablo Gutiérrez
Horas después de la muerte de su marido, una caja de libros llega a casa de Reme por error. En lugar de devolverlos, toma uno al azar y comienza a leer. Algo ocurre a partir de ese instante: Reme se encierra en casa y los devora, siente que le hablan de supervivencia, sexualidad contenida y frustraciones. Al salir de su encierro ya todo le parece distinto y odioso. Los libros repentinos habla del poder sanador de la literatura, y de su poder perturbador. Al dictado de Baroja, Reme intuye que la justicia social sólo puede obtenerse si la lucha se reduce a un pequeño medio, el tamaño de un barrio que será un nuevo campo de batalla sin molinos ni ventas embrujadas. Crítica social y humor satírico, patetismo y ternura se combinan en una prosa de una calidad literaria tan rotunda como hechizante.
Fuente Planeta de libros
Mendel el de los libros, Stefan Zweig
Escrito en 1929, Mendel el de los libros narra la trágica historia de un excéntrico librero de viejo que pasa sus días sentado siempre a la misma mesa en uno de los muchos cafés de la ciudad de Viena. Con su memoria enciclopédica, el inmigrante judío ruso no sólo es tolerado, sino querido y admirado por el dueño del café Gluck y por la culta clientela que requiere sus servicios. Sin embargo, en 1915 Jakob Mendel es enviado a un campo de concentración, acusado injustamente de colaborar con los enemigos del Imperio austrohúngaro. Un breve y brillante relato sobre la exclusión en la Europa de la primera mitad del siglo xx.
Fuente Acantilado
El pozo del alma, Gustavo Martín Garzo
El recuerdo de la niñez es aquí el recuerdo de la literatura, de los escenarios en los que todo es posible. Gustavo Martín Garzo recrea en este texto ese espacio íntimo y soñado que crea el lector en su relación con el texto y que le instala más definitivamente en la realidad.
Fuente Casa del Libro
Si una noche de invierno un viajero, Italo Calvino
La empresa de tratar de escribir novelas ìapócrifasî, que me imagino escritas por un autor que no soy yo y que no existe, la llevé a sus últimas consecuencias en este libro. Es una novela sobre el placer de leer novelas; el protagonista es el lector, que empieza diez veces a leer un libro que por vicisitudes ajenas a su voluntad no consigue acabar. Tuve que escribir, pues, el inicio de diez novelas de autores imaginarios, todos en cierto modo distintos de mí y distintos entre sí: una novela toda sospechas y sensaciones confusas; una toda sensaciones corpóreas y sanguíneas; una introspectiva y simbólica; una revolucionaria existencial; una cínico-brutal; una de manías obsesivas; una lógica y geométrica; una erótico-perversa; una telúrico-primordial; una apocalíptica alegÛrica. Más que identificarme con el autor de cada una de las diez novelas, traté de identificarme con el lector...Italo Calvino
Fuente Casa del Libro
La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey, Mary Ann Shaffer y Annie Barrows
Enero de 1946: Londres emerge de las sombras de la segunda guerra mundial. La escritora Juliet Ashton encuentra la carta de un desconocido, un nativo de la isla de Guernsey, a cuyas manos ha llegado un libro de Charles Lamb que perteneció a Juliet. A medida que Juliet y el desconocido intercambian cartas, ella se queda atrapada en el mundo de este hombre y sus amigos, que resulta ser un mundo maravillosamente excéntrico.Esta novela ostenta una galería de personajes profundamente peculiares, todos amantes de la literatura, que intentan sobrellevar la ocupación nazi organizando reuniones de lectura sobre novelas clásicas, alrededor de un pastel de patata.
Fuente Fnac
Una soledad demasiado ruidosa, Bohumil Hrabal Desde hace treinta y cinco años, Hanta trabaja en una trituradora de papel prensando libros y reproducciones de cuadros. En cada una de las balas de papel que prepara conviven libros, litografías, ratoncillos aprisionados y su propio esfuerzo, que se manifiesta en una relación absolutamente amorosa con los libros que destruye por oficio y salva por pasión. En Una soledad demasiado ruidosa se entrecruzan reflexiones sobre el sentido de la creación artística, la evocación de una soledad existencial totalmente asumida y la complacida exploración del universo literario. Con la maestría de Kafka o de Hasek, Hrabal hace aparecer con toda su fuerza la magia de una ciudad cuya atmósfera casi indefinible atenaza progresivamente el alma. Y del mismo modo que Hanta jamás olvida algunas de las frases que lee, nosotros conservaremos siempre en la memoria estos fragmentos de belleza arrancados al tiempo que constituyen Una soledad demasiado ruidosa. Fuente Planeta de Libros
Tinta, Fernando Trías de Bes
En la Maguncia de 1900, Johann Walbach lleva tiempo buscando entre los volúmenes de su librería el motivo de sus desdichas. Un día conoce a un matemático que persigue el mismo objetivo mediante fórmulas y aritmética. Juntos darán a luz un texto insólito, Tinta, un libro de libros, aquel que explica el sentido de todas las cosas. Para preservar este secreto, contratará a tres individuos sorprendentes: un impresor capaz de imprimir con una tinta única que borra las letras tras ser leídas, un corrector de estilo que no puede crear y un editor que jamás ha leído un libro hasta el final. Y, así, el único libro que se lee con el corazón será finalmente publicado.
Fuente Casa del Libro
La vida escondida entre los libros, Stephanie Butland
Loveday Cardew prefiere los libros antes que las personas. Si te acercas a ella lo suficiente, podrás ver que lleva tatuadas las frases iniciales de las novelas que más le gustan. Sin embargo, hay secretos de su pasado que jamás te revelará. Quince años atrás, Loveday perdió todo lo que tenía y amaba en una fatídica noche. Aquel horrible acontecimiento la llevó a convertir la librería en la que trabaja en su único refugio, pero todo está a punto de cambiar: alguien que conoce su pasado está tratando de enviarle un mensaje, y no hay nada que ella pueda hacer para evitarlo.
Fuente Casa del Libro
Un viejo que leia novelas de amor, Luis Sepúlveda Antonio José Bolívar Proaño vive en El Idilio, un pueblo remoto en la región amazónica de los indios shuar (mal llamados jíbaros), y con ellos aprendió a conocer la Selva y sus leyes, a respetar a los animales y los indígenas que la pueblan, pero también a cazar el temible tigrillo como ningún blanco jamás pudo hacerlo. Un buen día decidió leer con pasión las novelas de amor -«del verdadero, del que hace sufrir»- que dos veces al año le lleva el dentista Rubicundo Loachamín para distraer las solitarias noches ecuatoriales de su incipiente vejez. En ellas intenta alejarse un poco de la fanfarrona estupidez de esos codiciosos forasteros que creen dominar la Selva porque van armados hasta los dientes pero que no saben cómo enfrentarse a una fiera enloquecida porque le han matado las crías. Descritas en un lenguaje cristalino, escueto y preciso, las aventuras y las emociones del viejo Bolívar Proaño difícilmente abandonarán nuestra memoria.
Fuente Planeta de Libros