LITERATURA AFRICANA ACTUAL. Algunos ejemplos

Page 1

Hay 1300 lenguas habladas con 1200 millones de habitantes y 3000 pueblos con identidad propia en un continente en el que el 70% de la población tiene menos de 30 años.

Literatura post-colonial Con la liberación y el aumento de la alfabetización conseguido por numerosas naciones africanas tras su independencia, la literatura aumentó en cantidad y reconocimiento. Los autores de este periodo escriben tanto en idiomas europeos como en idiomas africanos. Según Ali A. Mazrui aparecen siete conflictos como temas: el choque entre el pasado y el presente de África, entre tradición y modernidad, entre lo indígena y lo extranjero, entre individualismo y comunidad, entre socialismo y capitalismo, entre desarrollo e independencia y entre la africanidad y la humanidad. Otros temas incluyen los problemas sociales como la corrupción, las disparidades económicas en los nuevos países independientes y los derechos y deberes de las mujeres, Las escritoras están más valoradas que en cualquier periodo anterior. En 1986, Wole Soyinka se convirtió en el primer escritor africano del periodo post colonial en ganar el Premio Nobel de literatura. Albert Camus, nacido en Argelia lo había ganado ya en 1957.

Premios Nobel de Literatura Africanos El primer escritor al que vamos a conocer es Wole Soyinka, ganador del Nobel de Literatura en el año 1986. Nació el 13 de julio de 1934 en Abeokuta,


Nigeria. Cursa sus estudios universitarios en la Universidad Nigeriana de Ibadan, y posteriormente en la universidad de Leeds, Inglaterra. A finales de los años 50 trabajaría en la Royal Court Theatre de Londres, donde escribiría las obras “The Swamp Dwellers” y “The Lion and the Jewel”. Al comenzar los años 60 decide regresar a Nigeria, donde funda una compañía de teatro llamada “Masks”, con la que representó una de sus obras escritas en aquel periodo, “La danza de los bosques”. En 1965 publicaría una de sus obras más importantes, “Los intérpretes”, una novela con la que consiguió un gran éxito, y por la que incluso fue comparado con W. Faulkner. En 1967, tras estallar la guerra de Nigeria, fue encarcelado durante 22 meses, hasta que fue liberado en 1969. Durante su etapa en prisión, escribiría otra de sus obras más importantes, “El hombre ha muerto”. Casi toda su obra está escrita en inglés, y en ella podemos observar el amor y la lucha por el pueblo nigeriano y sus raíces. Entre otras de sus obras podemos destacar algunas como, “Aké, los años de la niñez”, “The Bacchae of Euripides”, “Myth, Literature and the African World”, o “Clima de miedo”. En el año 1986 se convertiría en el primer escritor africano, y el primer hombre de raza negra, en ser galardonado con el Premio Nobel de Literatura.

El segundo escritor africano en conseguir el Premio Nobel de Literatura fue el egipcio Naguib Mahfuz. Sería galardonado con el Nobel en el año 1988. Naguib Mahfuz nació 11 de diciembre de 1911 en El Cairo, Egipto. Se licencia en Filosofía y literatura medieval y arábiga en la Universidad de El Cairo. Posteriormente comenzaría a traducir al árabe la obra “El antiguo Egipto”, de James Baikie.


Durante los años 40 y 50 trabaja en el Ministerio de Asuntos Religiosos, época en la que comenzaría su carrera literaria publicando obras como “Caprichos del destino” de 1939, “Jan al-Jalilí”, de 1946, “El callejón de los milagros”, publicada en 1947 y galardonada con un Premio Goya del cine español, al ser llevada al cine por Jorge Fons en 1995; “El espejismo”, publicada un año más tarde, o “Principio y fin”, de 1949. En 1957 fue galardonado con el Premio Nacional de las Letras Egipcias gracias a la trilogía formada por las obras “Entre dos palacios”, de 1956, “Palacio del deseo”, y “La azucarera”, ambas de 1957. Está considerado actualmente como uno de los escritores más importantes de la literatura árabe contemporánea, por no decir el más. Entre otras de sus obras podemos destacar “Chicos de Gebelawi”, de 1959, “El ladrón y los perros”, de 1961, o “Miramar”, de 1967. Naguib Mahfuz falleció el 30 de agosto de 2006, a consecuencia de unos problemas respiratorios tras sufrir un accidente doméstico. Nadine Gordimer nació en Springs, Sudáfrica, el 20 de noviembre de 1923. Crecería en el seno de una familia de clase media de origen judío. Ya en su adolescencia comenzaría su pasión por el mundo de la literatura, llegando incluso a publicar algunos relatos en una revista.

Publica su primer libro en el año 1949, titulado “Face to Face”, un libro compuesto por relatos cortos al que le seguiría cuatro años más tarde, su segundo trabajo, “La suave voz de la serpiente”. Ya en estas primeras obras muestra lo que sería el tema principal de la mayoría de sus trabajos, la lucha por los derechos humanos en contra del denominado “apartheid”. También luchó contra el VIH y el virus del Sida. En el año 1991 fue galardonada con el Premio Nobel de Literatura. Entre las obras más destacadas de Nadine Gordimer podemos nombrar algunas como “La huella del viernes”, de 1960 y ganadora del Premio W.H. Smith and Son, “El desaparecido mundo burgués”, de 1966, “La gente de July”, de 1981, o “Nadie que me acompañe”, de 1994. Nadine Gordimer falleció el 13 de julio de 2014 en Johanesburgo.


John Maxwell Coetzee nació en Ciudad Del Cabo, el 9 de febrero de 1940. De familia descendiente de los primeros holandeses que se instalaron en Sudáfrica, estudia primero en el St. Joseph’s College, y posteriormente se licencia en Matemáticas e Inglés en la Universidad de Ciudad del Cabo. Posteriormente se traslada a Londres, donde trabaja como informático para la multinacional IBM. En la mitad de los años 60 abandona ese trabajo y comienza a trabajar como profesor en diferentes universidades como Ciudad Del Cabo o Nueva York. En 1969 se doctoró, y mediante su tesis doctoral se acercaría aún más al mundo de la literatura, ya que esta tesis consistió en un análisis de la obra del escritor Samuel Beckett, a la que título “The English Fiction of Samuel Beckett: An Essay in Stylistic Analysis”. Su carrera literaria la comenzaría en 1974 mediante la publicación de “Dusklands”, su primera novela. Tres años después publicaría la segunda, “In the Hearth of the Country”, con la que fue galardonado con el Premio CNA de las letras sudafricanas. Entre sus novelas más destacadas podemos destacar algunas como “Infancia y Desgracia”, “Esperando a los bárbaros”, “En el corazón del país”, o “El maestro de Petersburgo”. Algunas de sus obras han sido adaptadas al cine, como es el caso de “In the Heart of the Country”, que se llevó al cine en 1985 bajo el título “Dust”; o “Desgracia”, estrenada en el 2008 con el mismo título. Entre los múltiples premios que ha recibido, se encuentran un Premio Booker en 1983 por su novela “Life & Times of Michael K”, el Premio Jerusalem de 1987, o el Premio Nobel de Literatura del 2003.

Evolución contemporánea Se observa mucha producción literaria en África desde el comienzo de la década actual (2010), incluso si los lectores no siempre siguen en grandes cantidades. También notamos la aparición de cierta escritura que rompe con el estilo académico. Además se puede constatar hoy en el continente la escasez de críticos literarios. Los eventos literarios parecen estar muy de moda, incluidos los premios literarios, algunos de los cuales se distinguen por sus conceptos originales. El caso de los Grandes Premios de las Asociaciones Literarias es bastante ilustrativo.


El escritor y periodista senegalés Boubacar Boris Diop nos introduce a las letras africanas, nos habla de su origen, sus mitos y realidades, y nos recomienda algunos de sus escritores preferidos en la actualidad

https://www.youtube.com/watch?v=FMDda0EgCwM

Chigozie Obioma, escritor nigeriano y profesor asistente de literatura y escritura creativa en la Universidad de Nebraska-Lincoln. The New York Times lo ha definido como "el heredero de Chinua Achebe" y acaba de publicar su primera novela, Los pescadores, nominada al Premio Man Booker 2015 (Quaderns Crema, edición en español en Siruela). ¿Qué se quiere decir cuando se habla de África? En Europa, predomina la imagen trágica de un continente exótico, caótico y devastado. Otras visiones más optimistas, en cambio, señalan la emergencia de una nueva clase media, el dinamismo de la cual confirma los éxitos de la globalización económica. Partiendo de las visiones de autores, artistas e intelectuales arraigados en África y su diáspora, y sin esconder la complejidad y las desigualdades que condicionan su realidad, la intención de este ciclo organizado en el marco de las actividades que rodean a Making Africa es romper con los tópicos para ofrecer una variedad de visiones sobre la riqueza del continente y su sitio central en la producción del mundo que habitamos. http://www.casafrica.es/agenda_europa_africa.jsp%3FDS318.PROID=882531.html

http://theobjective.com/further/hay-una-gran-literatura-africana-y-la-estamos-ignorando/


Novelistas destacados                   

Chinua Achebe Chimamanda Ngozi Adichie Gracy Ukala, Daniel Olorunfemi Fagunwa Mariama Bâ Ousmane Sembène Ngugi wa Thiong'o Benjamin Sehene Thomas Mofolo Tsitsi Dangarembga Dambudzo Marechera Yvonne Vera Mia Couto Ayi Kwei Armah Ben Okri Jean de Dieu Madangi Amin Zaoui Ken Bugul Maïssa Bey

Autores anglófonos como Chimamanda Ngozi Adichie de Nigeria, Ngugi Wa Thiong’o de Kenia o Binyabanga Wainaina, también de Kenia. Escritores francófonos como Alain Mabanckou de la República Del Congo, el senegalés Boubacar Boris Dlop; escritores lusófonos como Mia Couto de Mozambique del que cabe destacar a su traductora Rosa Martínez por su gran labor, Artur Pestana de Angola o Jose Eduardo Agualusa también de Angola; escritores ecuatoguineanos, tal vez más importantes para nosotros por escribir en español, como Donato NDongo, Trifonia Melibea Obono o Juan Tomás Ávila Laurel. El grupo de las escritoras africanas, entre las que se encuentran autoras anglófonas como Chimamanda Adichie, Aminatta Forna o Taiye Selasi;

o

francófonas

como

Leonora

Bugul o Scholastique Mukasonga.

Miano,

Fatou

Diome,

Ken


Chinua Achebe

Achebe en 2008 Nacimiento

16 de noviembre de 1930 Ogidi, Protectorado de Nigeria

Fallecimiento 21 de marzo de 2013 82 años Boston, Estados Unidos Nacionalidad Nigeria Lengua materna

Igbo

Educación Educado en

Universidad de Ibadán

Información profesional Ocupación

Novelista, poeta, crítico literario, ensayista, cuentista, escritor de literatura infantil, escritor, filósofo y profesor universitario


Universidad David and Marianna Fisher Universidad Brown

Empleador

Lengua de producción Inglés literaria Obras notables

    

Miembro de 

Todo se desmorona Me alegraría de otra muerte Flecha de Dios Un hombre del pueblo Hormigueros de la sabana Academia Estadounidense de las Artes y las Ciencias Royal Society of Literature

 Nigerian National Order of Merit Distinciones Award  International Nonino Prize (1994)  St. Louis Literary Award (1999)  

Premio de la Paz del Comercio Librero Alemán (2002) Premio Man Booker International (2007)

Albert Chinualumogu Achebe Su primera novela Todo se desmorona (Things Fall Apart, 1958) es considerada su obra magna, y es el libro más leído en la literatura africana moderna.


Chimamanda Adichie

Información personal Nacimiento

15 de septiembre de 1977(41 años) Abba, Enugu (Nigeria)

Residencia

Anambra

Nacionalidad Nigeriana Educación 

Educado en   

Universidad Yale Universidad Johns Hopkins Universidad Drexel Universidad Estatal del este de Connecticut

Información profesional Ocupación

Novelista

Empleador 

Universidad Wesleyana

Género

Poesía y novela

Miembro de

Academia Estadounidense de las Artes y las Ciencias


Distinciones Orange, Círculo de Críticos de EE UU Ver todos

Biografía Nació en la aldea de Abba, quinta hija del matrimonio de etnia igbo formado por Grace Ifeoma y James Nwoye Adichie. Pasó su infancia en la ciudad de Nsukka, sede de la Universidad de Nigeria, en una casa que anteriormente había habitado el célebre escritor Chinua Achebe. Su madre fue la primera secretaria de admisiones de la Universidad de Nigeria donde su padre era profesor de estadística. A los 19 años se trasladó a Estados Unidos con una beca de dos años para estudiar comunicación y ciencias políticas en la Universidad Drexel, Filadelfia. Posteriormente continuó sus estudios en la Universidad Estatal del Este de Connecticut, en la que se graduó en 2001. Ha realizado asimismo estudios de escritura creativa en la Johns Hopkins, Baltimore, y un máster de estudios africanos en Yale.

Trayectoria literaria Los temas que trata Adichie en su obra van desde el feminismo a la inmigración y del sexismo a la problemática racial. Su obra Todos deberíamos ser feministas (We Should All Be Feminist) ha vendido más de medio millón de ejemplares.

Bandera de Biafra, con su medio sol amarillo en el centro. En 2003, mientras se encontraba estudiando en Connecticut, publicó su primera novela, La flor púrpura (Purple Hibiscus), que fue muy bien recibida por la crítica y por la que recibió el Commonwealth Writer's Prize for Best First Book en 2005. La acción de su segunda novela, Medio sol amarillo (Half of a Yellow Sun, 2006), así titulada en referencia al diseño de la bandera de la efímera nación de Biafra, se desarrolla durante la guerra civil nigeriana. La obra, alabada, entre otros, por Achebe, obtuvo el Orange Prize for Fiction en 2007. En 2009 publicó una colección de relatos breves, titulada The Thing Around Your Neck. Cuatro años más tarde lanzaba Americanah, que mereció el Premio del Círculo de Críticos Nacional del Libro. Todos deberíamos ser feministas (We Should All Be Feminist) es su primer ensayo. Su best-seller, Americanah (2013) será adaptado en miniserie coproducida por las actrices Lupita Nyong'o y Danai Gurira. Actualmente vive en Nigeria, donde imparte talleres de escritura creativa, y en los Estados Unidos.


Publicaciones         

For Love of Biafra (drama, 1998). Decisions (poesía, 1998). You in America (2001). La flor púrpura (Purple Hibiscus, 2003). Barcelona: Grijalbo, 2004 (Barcelona: Debolsillo, 2005). Medio sol amarillo (Half of a Yellow Sun, 2006). Barcelona: Mondadori, 2007. Algo alrededor de tu cuello (The Thing Around Your Neck, 2009). Barcelona: Mondadori, 2010. Americanah (2013). Barcelona: Literatura Random House, 2014. Traducción de Carlos Milla Soler. Todos deberíamos ser feministas (We Should All Be Feminist). Barcelona: Literatura Random House, 2015. Querida Ijeawele. Cómo educar en el feminismo. Barcelona: Literatura Random House, Marzo 2017.

Premios    

Commonwealth Writers' Prize for Best First Book 2003, al mejor primer libro por La flor púrpura. Premio Orange de Ficción 2007, por Medio sol amarillo. Chicago Tribune Heartland Prize 2013, por Americanah. Premio del Círculo de Críticos Nacional del Libro (National Books Critics Cercle) 2013, por Americanah.


Los 10 libros africanos más

destacados

El empuje de las escritoras y el aumento de producción literaria han marcado este 2017

Portadas de los 10 libros arfricanos más destacados de 2017. SONIA FERNÁNDEZ QUINCOCES

Bilbao 28

DIC 2017 - 03:02 CET

Se cierra el año y toca recuento otra vez, al igual que hicimos en 2016. Entonces inaugurábamos lista y lo hacíamos conscientes de nuestra parcialidad y nuestras limitaciones, pero contentos por poder mostrar la riqueza y el atractivo de las letras africanas que, hacía tiempo, nos habían conquistado ya sin remedio. Por

eso

es

imposible

limitarnos

a

una

lista.

Debemos

mencionar

también algunos de los momentos más relevantes de la actualidad literaria africana que hemos dejado atrás. 2017 ha sido el año del mandato de Guinea Conakry como Capital Mundial del Libro y hemos celebrado diversos cumpleaños. El 30 aniversario de Las tinieblas de tu memoria negra (Assata Ediciones) del equatoguineano

Donato Ndongo y los 10 años de Casa África. Una institución con un


catálogo que incluye 63 libros hasta el momento, desde la novela al ensayo, y que continuará con su labor en 2018 acompañada por la revista Altaïr. Dicha colaboración nos ha brindado, como aperitivo, en esta recta final del año La albina del dinero, tercera novela de Trifonia Melibea Obono, una obra que promete y que nos hemos reservado para leer ya el próximo año. Al igual que otras tantas novedades que se han publicado en este mismo mes: Rose Deluge del siempre interesante Edem Awumey (Baile del Sol), la poesía saharaui de Zahra El Hasnaoui Ahmed en El silencio de las nubes (Arma Poética) o lo último de Justo Bolekia. En este año hemos recibido nuevas literaturas y nuevos rostros. Entre los primeros, las historias LGTBQIA llegadas desde el mundo poscolonial de la editorial Baphala y la antología Afrofuturo(s) que la editorial 2709Books nos ofreció en colaboración con el colectivo panafricano Jalada prologada por Carlos Bajo

(Wiriko).

Entre

los

segundos,

los

nombres

de

Ayobami

Adebayo o Imbolo Mbue (cuyo relato La revocación se ha publicado gracias a la colaboración de las revistas Bawka y Afribuku), la primera vez que se ha podido leer a esta escritora en castellano. Pero, también tuvimos que decir adiós. A María Nsué, autora recordada sobre todo por Ekomo, quien enfatizaba sobre la necesidad de no olvidar los orígenes, defendiendo la importancia de la tradición, la oralidad y la palabra silenciada. Y a Buchi Emecheta, quien se desvió de los temas sobre los que trataban muchos de los libros de la literatura poscolonial para centrarse en la mujer, reivindicar su lugar y hacer oír su voz. Con el recuerdo de ellas dos cerramos un año en el que descubrimos las letras de mujeres africanas a través de 12 publicaciones inéditas, que sepamos, y seis reediciones (con especialísima mención a Mujer en punto cero, en Capitán Swing, de Nawal El

Saadawi, una lectura que nadie debería perderse). Ahora sí os presentamos la lista que no aparece en orden de preferencia:


1. Volver a casa de Yaa Gyasi. Traducción: Maia Figueroa Evans / Tornar a casa. Traducción: Carles Andreu. También en formato e-book. Editorial Salamandra. No ha defraudado a casi nadie la primera novela de esta escritora nacida en Ghana y emigrada a Estados Unidos. Se trata de un mosaico repleto de historias, hechos y acontecimientos que abarcan desde el siglo XVIII hasta el comienzo del XXI a partir de la vida de dos mujeres, dos hermanas que serán separadas. Así, una se quedará en África y la otra será llevada a Norteamérica, los dos escenarios por los que van discurriendo sus vidas y las de sus descendientes. Gyasi nos habla de esas conexiones que sobrevuelan el tiempo y el lugar mientras cuenta la historia de una ignominia de la que aún se pagan consecuencias: la esclavitud.

2. Huesos cruzados de Nuruddin Farah (Siruela). Traducción: Eugenia Vázquez Nacarino. Este auténtico titán de las letras cierra con esta novela su cuarta trilogía, la denominada Pasado imperfecto, que inició con Nudos y continuó con Eslabones, ambas traducidas al castellano por Siruela. El escritor somalí, otro eterno candidato al Nobel, nos sumerge de nuevo en esa tierra tan castigada (y que él tanto ama) a raíz del regreso de Jeebleh, acompañado esta vez de su yerno periodista Malik. Estos se encuentran un país en el que las milicias de Al Shabab intentan someter mediante el terror a los residentes de Mogadiscio. Allí Malik se esfuerza por conseguir un relato objetivo y alejado de clichés sobre lo que se encuentra: la situación política y la piratería.


3.

La

huelga

de

los

mendigos de Aminata Sow Fall. Traducción: Laura Remei Martínez-Buitrago. Wanafrica. Se ha colado en la recta final del año la primera traducción al castellano de una pionera de las letras africanas de expresión francesa. Sow Fall está considerada una de las

grandes

escritoras senegalesas de todos los tiempos. Atesora, además, multitud de premios otros,

y el

reconocimientos Gran

Premio

(entre de

la

Francofonía de la Academia Francesa en 2015 y el Gran Premio literario del África negra en 1980, precisamente por esta novela, su obra más aplaudida). El comienzo de esta breve pieza no puede ser más atractivo; el director del Servicio de Higiene Pública, encarga a su ayudante una misión: liberar la ciudad de los numerosos mendigos, talibés y leprosos que ocupan las calles y que pueden dañar la imagen de un país que comienza a basar su crecimiento económico en el turismo. Sin duda, Wanafrica no podía haber elegido un modo mejor de cerrar un año editorial lleno de apuestas y de aciertos.

4. Tranvía 83 de Fiston Mwanza Mujila (Pepitas de Calabaza). Traducción: Ramón Martín Giraldez / Tram 83 (Edicions Del Periscopi). Traducción: Ana Cassasas Figueras Una, también, primera novela que llegó a ser finalista del Man Booker International Prize 2016. El congoleño nos sumerge en un "lejano oeste africano" con sus minas y la


fiebre poseedora de minerales de sangre. Según sus propias palabras para representar las formas de explotación y neocolonialismo que se dan en África y no solo en el Congo. Ambiente enloquecido, contaminado y lisérgico, desde una novela que trata de mostrar lo necesario que es la literatura para tratar de entender y mostrar lo que se vive. Por muy duro, que lo es, por muy injusto, que lo es, "la literatura puede reestablecer la verdad".

5. Canción Dulce de Leila Slimani (Cabaret Voltaire). Traducción: Malika Embarek Esta novela parece tenerlo todo. Un argumento que engancha y acaba penetrando como un estilete, con enfoque de thriller y fondo social, desasosegante y contemporáneo, donde muchos se acabarán viendo reconocidos. Además, un premio Goncourt y otro premio más para su traductora: Malika Embarek quien se ha alzado este año con el Premio Nacional a la obra de un traductor y que nos sirve de pretexto para recordar una vez más la importancia de la labor de estas personas.

6. Desplazar el centro. La lucha por las libertades culturales de Ngugi wa Thiong´o. Traducción: Víctor Sabaté / Desplaçar el centre. Traducción: Dídac Gurguí. Ambos de la editorial Rayo Verde. De nuevo le arrebataron el Nobel a Ngugi, pero a cambio, aún nos frotamos las manos, tradujeron varios libros suyos (No llores, pequeño y El río que nos separa. Editorial Kailas). Entre ellos el conjunto de ensayos que hemos seleccionado para esta lista. En esta ocasión se recogen varias conferencias y textos escritos entre 1985 y 1990. La preocupación de Ngugi por desplazar el centro en dos sentidos, entre naciones (“Lo que se refiere a Occidente se convierte en lo universal, y lo que se refiere al tercer mundo se convierte en lo local”) y dentro de cada nación, ha sido el motor continuo de su obra y pensamiento. La próxima campaña que promoveremos en torno a él ya la adivináis: #NgugiwaThiongoNobel2018.


7. Nubes de lluvia de Bessie Head (Palabrero Press). Traducción: Elia Maqueda Una auténtica sorpresa la que nos dieron desde Palabrero Press al traducir uno de los primeros textos de Bessie Head. Tuvo la vida de esta escritora, en su conjunto, demasiadas oscuridades impenetrables. Exiliada en Botsuana e instalada en un campo de refugiados, en una situación de pobreza tremenda, escribió esta novela. El protagonista es Makhaya, un héroe atípico que, tal y como nos aclara Ángeles Jurado en el prólogo, “sirve para que Bessie Head exponga los temas que le preocupan: las luchas de poder, las tribulaciones que conviven con la fuerza de

la

mujer,

la

espiritualidad,

las

tradiciones perniciosas” y que “propone nuevos modelos de hombre y de relación en un contexto patriarcal, racista y xenófobo, que deshumanizan al diferente y oprime a la mujer”.

8. Ellas [también] cuentan. Edición y traducción de Federico Vivanco. Casa África y Baile del Sol. Una antología en la que se ha traducido a 20 escritoras de 11 países africanos de habla inglesa. Divida en tres partes: una dedicada a narrativa, otra a poesía y una tercera parte a ensayo, nos presenta junto a los nombres más conocidos de Minna Salami, Lola Shoneyin, Zoe Wicob o Beatrice Lawkana, a un puñado de escritoras de las que apenas teníamos referencias. Tres generaciones de mujeres que nos hablan desde un caleidoscopio de temas que abarcan desde la cuestión de la identidad, a la situación de exilio, la guerra, la esclavitud o el apartheid. Una muy recomendable manera de comenzar a adentrarse, si no se ha hecho ya, en estas literaturas tantas veces silenciadas.


9. El enigma del pájaro azul de Nii Ayikwei Parkes. Traducción: Magdalena Palmer / L’enigma de l’ocell blau. Traducción: Xavier Pamiés. Ambas de Club Editorial. Con una historia que nos sumerge en muchos mundos, su protagonista, un médico forense y urbanita, se interna en la Ghana más rural y mágica. Bajo una pátina de novela negra, con grandes dosis de poesía, en la que se mezclan la investigación tipo CSI y el vino de palma, Ayikwei indaga en lo que él denomina “microconflictos”: hijos de esas minúsculas variaciones de vivencias que provocan que gente muy similar acaben no entendiéndose. Escrita en inglés y salpicada de twi, ga y pidgin, la obra incide en la cuestión del lenguaje y en las diferentes caras que muestra el poder: desde el ámbito político, lingüístico, familiar o relacional...

10. Prohibido nacer. Memorias de racismo, rabia y risa de Trevor Noah.Traducción: Javier Calvo. Blackie Books. Una biografía best seller cierra nuestra lista. Se trata de la infancia recordada del brillante Trevor Noah quien afirma que “ríe cuando está triste”. Con un profundo sentido del humor, que nos hace leer situaciones de verdad desternillantes, se enfrenta a la dolorosa narración de su infancia y juventud, en lo que fue un viaje a su pasado en el que tuvo mucho que desenterrar. En Prohibido nacer nos desvela las dificultades que pasó desde su nacimiento al ser hijo de madre negra de etnia xhosa y de padre suizo en la Sudáfrica del apartheid. Y, ante todo, nos muestra a su madre, una mujer excepcional que le enseñó, entre muchas otras cosas, el enorme poder de la risa.


LITERATURA AFRICANA

En los nombres del padre Progenitores de libro: efímeros, intermitentes, desaparecidos, luminosos, amados e inolvidables SONIA FERNÁNDEZ QUINCOCES Bilbao 1 OCT 2018

Obra 'Sin título' del artista marroquí Mahi Binebine. Todo padre lleva muchos padres dentro. Descubrirlos puede llevar una vida entera. De hecho, algunos de ellos se quedan para siempre sin emerger. A veces, se necesita tiempo y experiencias compartidas para llegar a comprender y amar a aquel a quien llamamos padre. En ocasiones es un camino difícil, duro, lleno de pasos hacia atrás y de dudas. Otras, en cambio, es una travesía con sus aristas, pero llevadera. Puede ocurrir que ese ser sea un completo extraño… o todo lo contrario, por supuesto. Padres hay efímeros, intermitentes, desaparecidos, luminosos, amados e inolvidables, por mencionar solo algunos. Dentro de los libros caben todos y muchos más.


Abundan y, a veces, estremecen. Imposible no mencionar al criminal padre de Mohamed Chukri descrito en El pan a secas (Cabaret Voltaire, 2012) capaz de asesinar a su propio hijo. Sin ápice de amor. O el padre rígido de Yasmina Khadra del que habla en su autobiográfica El escritor (Alianza, 2001) quien le matriculó siendo niño en una escuela para convertirle en soldado y después abandonarle junto al resto de su familia. En ocasiones son la figura ausente que, paradojas, puede llegar a estar más presente que nunca. En Los pescadores (Siruela, 2016) de Chigozie Obioma, algunos críticos han otorgado a la figura del padre de los cinco hermanos protagonistas un significado que excede del marco familiar, en el sentido de que puede llegar a representar, en ese juego que es el de tratar de interpretar los libros, el vacío de un líder carismático y fuerte que guíe a su país, Nigeria. Padres de papel que surgen desde la imaginación o desde el recuerdo. Pudiendo ser la encarnación más fiel posible de aquel que brota de las evocaciones del pasado, o una relaboración, más o menos consciente, completada con mucho aderezo posterior. Así, surgen ante nosotros personajes tan reales como nosotros queramos que sean, como ocurre con Yo, bufón del rey (Alfaguara, 2018) del marroquí Mahi Binebine que tiene como fondo esa necesidad de comprender la figura paterna y sus acciones e inacciones. Binebine tuvo un padre peculiar. Un hombre que fue bufón del rey Hassan II. Pero, además, un ser que idolatró a dicho rey y le fue fiel y le amó llegando incluso a renegar de uno de sus hijos porque había participado en un atentado contra el monarca. El escritor, esto lo ha confesado en varias entrevistas, estuvo mucho tiempo sin hablar con él, incapaz de entenderle. Para intentarlo escribió esta novela, como válvula de escape de dichos sentimientos, como manera de tratar de explicarle. Una forma de reconciliación. Hoy, la figura paterna también nos llega en formato digital. Entrañable de igual manera, como Ngirane Faye, el anciano de El libro de los secretos (Almuzara y 2709books) de Boubacar Boris Diop que, tras haber enterrado al hijo, escribe cuadernos a un nieto que casi seguro no volverá a ver para que


aquel recuerde y mantenga vivo su mundo. Son padres que guardan dentro palabras que nunca llegan a pronunciar, secretos que se quedan sin salir, mientras completan páginas que intentan contar. Quizás todo para intentar llegar a un punto y tratar de encontrarse. La obra entera de Hisham Matar gira en torno al padre ausente Esencial ese movimiento, ese trazar un camino de entendimiento mutuo que se va construyendo poco a poco. Hacia un sentido; por el que andan los hijos e hijas que buscan a sus padres. Tal como ocurre con Los pies sucios  (Baile del sol, 2012) del togolés  Edem Awumey y  The Devil that Danced on the Water, de Aminatta Forna, pero sobre todo con Hisham Matar. Él es de los pocos nombres de escritores cuya obra entera gira en torno al padre ausente; en su caso un líder disidente libio desaparecido durante el régimen de Gadafi. Y, también, por el sentido contrario; padres en busca de sus hijos, como lo demuestra Ahl, que regresa a Somalia desde Estados Unidos tras los pasos de su hijastro adolescente, reclutado por un imán en una mezquita de Minnesota para formar parte de los mártires suicidas de Al Shabab en Huesos cruzados (Siruela,2017) de Nuruddin Farah. La paternidad y la plasmación de lo que supone la figura del padre dentro de los textos literarios, en la mayoría de las veces, se llena de grises. Sin poder evitar, en otras ocasiones, caer en la idealización o en la descripción más oscura, conteniendo desde figuras paternas terribles, como las mencionadas al principio, hasta otras que evocan y muestran lo mejor. Como

Mahmud,

uno

de

los

protagonistas

de

El siglo de las

langostas (Txalaparta, 2002) de la argelina Malika Mokeddem, quien tras el horrible destino de su mujer, violada y asesinada, jura vengarla. Nómada sin remedio, trata de devolver el habla a su hija que se ha cobijado, después de ser testigo de lo anterior, en el mutismo. Es Mahmudquien no se rinde. Es Mahmud quien sigue adelante sobre todo por ella. Es Mahmud quien, día a día, habla a su hija de mundos llenos de poesía, le enseña a escribir, trazando un futuro en


el que Yasmina podrá ser realmente libre, en toda su extensión, y dueña de sus actos. Padres valientes, honestos, luchadores y soñadores. Con todos sus defectos pero padres que, ante todo, aman. Y a los que, a veces, también a través de los libros reconocemos y con los que nos reencontramos.


Lo que cuentan 20 escritoras africanas

FUENTES: https://es.wikipedia.org/wiki/Literatura_africana https://lengua.laguia2000.com/literatura/premios-nobel-de-literatura-africanos-1 https://lengua.laguia2000.com/literatura/premios-nobel-de-literatura-africanos-2 https://www.youtube.com/watch?v=-w48jv-41q4 https://elpais.com/agr/africa_no_es_un_pais/a/ https://elpais.com/elpais/2017/12/26/africa_no_es_un_pais/1514312132_123976.html https://elpais.com/elpais/2018/09/19/africa_no_es_un_pais/1537372115_359480.html

CASA ÁFRICA http://www.casafrica.es/letras-africanas.jsp.html De esta manera, Letras Africanas ha permitido la presencia en España de autores de la talla de Henri Lopes (República Democrática del Congo), Germano Almeida (Cabo Verde), Fatou Diome (Senegal), Moussa Konaté (Mali), Tanella Boni (Costa de Marfil), María Nsue (Guinea Ecuatorial), Veronique Tadjo (Costa de Marfil), Achmat Dangor (Sudáfrica), Abasse Ndione (Senegal), Jamal Mahjoub (Sudán), Boubacar Boris Diop (Senegal), Emmanuel Dongala (Congo), Alain Mabanckou (Congo), Patrice Nganang (Camerún),


Abderrahman El Fathi (Marruecos), Léonora Miano (Camerún), Ismael Diadié (Mali), Vamba Sherif (Liberia), Agnès Agboton (Benin) o Chigozie Obioma (Nigeria).


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.