X-MALDICIÓN DE LAS ESTEPAS ASESINAS DE SANGRE II
Capítulo 667: Plantar el sello esclavo ¡El anciano Xiao había muerto! Al ver al anciano que todavía colgaba de la lanza de Lin Ming, los artistas marciales presentes inconscientemente, tragaron saliva, sus gargantas se retorcieron. ¡El Lin Ming frente a ellos en este momento era un tigre feroz, y no eran más que pequeños corderos que no tenían la capacidad de resistir! Lin Ming sacó inexpresivamente su lanza y luego golpeó el frente, quitando la sangre. Luego, se dio la vuelta para mirar al Gran Maestro de la Torre del Hacha. El corazón del Gran Maestro de la Torre del Hacha latía con fuerza, su rostro estaba pálido y parecía mareado. “Joven… Joven Héroe Lin, si me dejas vivir, te prometo que puedo ayudarte a dejar las Estepas de la Matanza de Sangre desde la Gran Torre del Hacha. Torre Gran Hacha está a solo 2000 millas del borde de las Estepas de la Matanza de Sangre y también está a 10,000 millas del Templo Divino de la Matanza de Sangre donde reside el Maestro de las Estepas. Si vienes a mi Gran Torre del Hacha, ese es el mejor lugar para dejar estas tierras. Además, cuando te vayas, habrá gente que te podrá ayudar, y yo puedo ser tu escudo. Salir será mucho más fácil. De lo contrario, podrías despertar sospechas...” Mientras hablaba el Gran Maestro de la Torre del Hacha, estaba prestando atención a cada cambio de expresión en el rostro de Lin Ming. Temía que Lin Ming no estuviera de acuerdo con él y se quitó el anillo espacial por adelantado. Incluso su hacha de dos cabezas de paso celestial se colocó en el anillo espacial para que pudiera dársela a Lin Ming. Lin Ming consideró sus opciones por un momento, sin hablar. Se volvió y miró hacia Duanmu Qun, y vio que Duanmu Qun le dio un leve asentimiento de acuerdo. El Gran Maestro de la Torre del Hacha no estaba mintiendo. La entrada norte del Abismo del demonio eterno estaba conectada a seis torres Cielo dividido diferentes. Si salían de Torre Gran Hacha, la posición era mucho más amigable y estaba a una distancia más corta para salir que desde Polaris Tower. El silencio de Lin Ming hizo que la terrible atmósfera se volviera aún más lúgubre. En este punto, el Gran Maestro de la Torre del Hacha ni siquiera se atrevió a respirar demasiado. Como alguien que había vivido por encima de muchos otros, esta era la primera vez que experimentaba ese trato. Era como si no fuera diferente de un criminal del mundo mortal a punto de ser ejecutado en las gradas. "Jeje, muchacho, ¿de verdad desconfías de este tipo?" En este momento, la voz de Demonshine sonó en la mente de Lin Ming. "Sí."
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