Capítulo 114. El regalo de Yang Lin

Lin Ming no tenía ningún interés o razón para involucrarse en la lucha por el trono real. Sin embargo, el Príncipe Heredero y Muyi le habían mostrado amabilidad. Si no fuera por el Príncipe Heredero que envió un talismán de transmisión de sonido para ayudarlo el día del examen de ingreso de la Casa Marcial Siete Profunda, entonces Lin Ming no habría podido participar. No solo eso, sino que lo hubieran puesto miserablemente en la cárcel e incluso discapacitado.

Lin Ming era una persona considerada que devolvía buenas acciones y favores que otros le hacían. Ser egoísta e ingrato no formaba parte de su naturaleza. Si alguna vez hizo algo así, sería una verdadera traición a su corazón.

Francamente preguntó: 'Su Alteza, ¿en qué puedo ayudarla?'

Yang Lin no esperaba que Lin Ming fuera directo al grano. Fue bastante refrescante. Él sonrió y dijo: “Hermano Lin, usted es una persona sencilla que dice lo que piensa. Entonces también seré franco. En este momento, en Reino Fortuna del Cielo, es hora de que una nueva persona herede el trono. Hay dos posibles candidatos que pueden hacerlo; yo y mi décimo hermano menor. Me empujaron a la posición de Príncipe Heredero. Como tal, ahora que he montado en el tigre, ya no puedo retroceder. Ahora, la vida de mi reina madre y la vida de mi hermana menor ya están vinculadas a la mía. Tengo que comprometerme completamente con esta lucha por el trono, lo haya querido o no alguna vez. Sé que el hermano Lin es un artista marcial que detesta las intrigas políticas, pero el hermano Lin no tiene por qué preocuparse. Si el hermano Lin está dispuesto a ayudarme, no permitiré que el hermano Lin haga nada. Todo lo que necesito es el apoyo del hermano Lin. Con el estado del hermano Lin como discípulo central de la Casa Marcial Siete Profunda, ya será de gran beneficio para mí. Si debo retroceder diez mil pasos y decirlo, incluso si pierdo la lucha por el trono, mi décimo hermano menor nunca se atrevería a tocar al hermano Lin".

Lin Ming respondió: “Príncipe heredero, alteza, me temo que lo ha entendido mal. No temo las represalias del Décimo Príncipe, ni temo ningún intento de asesinato. Es solo que es posible que no me quede en el Reino Fortuna del Cielo en el futuro".

"Oh ya veo”. Yang Lin suspiró en su corazón. Lin Ming realmente tenía grandes ambiciones; era similar a Qin Xingxuan. Un país pequeño como el Reino Fortuna del Cielo no podía acomodarlo.

Lin Ming dijo: “Su Alteza, pero puedo garantizar que a menos que esté demasiado lejos del Reino de la Fortuna Celestial, si escucho noticias de la lucha por el trono, me apresuraré a regresar lo antes posible y prestaré a Su Alteza una mano amiga".

Yang Lin dijo felizmente:”¡Estoy muy agradecido con el hermano Lin!"

Yang Lin llevó a Lin Ming para que hiciera un recorrido por la residencia, que de hecho era una mansión. La mansión también tenía un anexo de cientos de acres de tierras de cultivo. Había manadas de ganado, aves de corral y estanques enormes para peces y camarones. Dentro de la mansión había sirvientes, guardias, doncellas. Todos los gastos de la mansión eran autosuficientes e incluso había un excedente.

En el dormitorio de la mansión había algo de dinero y objetos de valor. Sobre la mesa había una caja de madera de sándalo. Había hileras de piedras de esencia verdaderas perfectamente alineadas en su interior; estas verdaderas piedras de esencia eran de color puro y obviamente de calidad superior. Había más de 100 de ellos.

Incluso si Lin Ming se cultivara a diario con estos, este número de estas verdaderas piedras de esencia sería suficiente para durar medio año. El color puro de las piedras de la verdadera esencia implicaba que la cantidad de esencia verdadera en su interior era muchas veces mayor que la normal.

Este regalo; fue bastante generoso.

En la caja que contenía tantas piedras de esencia verdadera, Lin Ming también descubrió un anillo simple. El anillo parecía hecho de bronce envejecido, pero exudaba un leve indicio de verdaderas fluctuaciones de esencia.

“¿Mm? Este es…"

Los ojos de Lin Ming se fijaron en el anillo. Envió la fuerza de su alma para ver qué tenía de inusual.

Yang Lin sonrió y dijo: “El hermano Lin tiene buenos ojos. Este es un anillo espacial de pasos humanos de bajo grado. Es un regalo de mi maestro, el señor Muyi, a su hermano pequeño Lin”.

"¿Anillo espacial?" La mente de Lin Ming se quedó en blanco. Había oído hablar de este tipo de anillo antes. Había una pequeña dimensión de bolsillo en el interior, y podría usarse para almacenar muchas cosas. También se dijo que era inestable. La verdad era que después de varios cientos de años, el espacio interior colapsaría sobre sí mismo y los elementos del interior también serían destruidos.

Un anillo espacial, según su tamaño y el grado de estabilidad, podría dividirse en muchos grados diferentes. Aunque este anillo espacial era solo un tesoro de paso humano de bajo grado, su verdadero valor era tan bueno como un tesoro de paso humano de grado medio. Esto se debió a que era demasiado difícil crear un anillo espacial.

Era más fácil decirlo que hacerlo para un artista marcial abrir una fisura en el espacio. Incluso si fuera solo un espacio pequeño e inestable que duró unos cientos de años, no sería fácil. Esos anillos espaciales que tenían vastos espacios interiores y eran muy estables tenían un valor inestimable.

"¿El señor Muyi me dio esto?"

“Mm. El maestro dijo que la razón por la que obtuvo este anillo espacial fue por el hermano Lin. Cuando el hermano Lin acababa de entrar en la Casa Marcial Siete Profunda, es posible que no lo supiera, pero el anciano Xu de la Casa Marcial Siete Profunda y el padre de Wang Yanfeng eran viejos amigos, y por lo tanto, el anciano Xu no estaba satisfecho con que usted fuera nombrado el primer discípulo nuevo. Por eso, el señor Muyi hizo una apuesta con él. Apostó a que el hermano Lin entraría en la Morada Celestial antes de que Wang Yanfeng lo hiciera. Finalmente, el hermano Lin entró en la Morada Celestial y el anciano Xu perdió. Este anillo espacial era la apuesta de esa apuesta”.

“Así que eso es lo que pasó. Recuerdo al anciano Xu. Después de derrotar a Wang Yanfeng, este anciano Xu subió al escenario para buscar problemas".

“Sí, es él. Entonces, hermano Lin, acepte este anillo espacial. Considérelo una disculpa del anciano Xu".

"Bueno, entonces le pediré a su alteza que agradezca al señor Muyi de mi parte". Lin Ming vaciló, luego recibió el regalo. Como ya había decidido ayudar al Príncipe Heredero, ya no sería hipócrita en sus acciones. Sin mencionar que este anillo espacial realmente fue bastante útil. Más tarde podría usarlo para depositar todos esos montones de materiales de técnica de inscripción que había almacenado.

“Jajá, hermano Lin, no se preocupe. También hay algo en el anillo espacial. El hermano Lin puede sacarlo. Siempre que envíes la fuerza de tu alma a través del anillo espacial, podrás hacerlo".

"¿Oh?" Lin Ming hizo lo que había dicho el Príncipe Heredero y penetró el anillo espacial con la fuerza de su alma. Podía sentir algo como una prenda de ropa adentro. Tan pronto como lo sacó, vio que era una armadura flexible de color oro púrpura.

La armadura flexible parecía estar tejida con delgados alambres de metal. Era suave al tacto y sobre la armadura flexible había un símbolo de sangre escarlata. Estos símbolos de sangre eran complicados y misteriosos. Brillaban con una luz deslumbrantemente brillante. Lin Ming miró más de cerca y descubrió que el símbolo de sangre se había filtrado en la textura de los cables de metal y se había convertido en parte de la armadura flexible.

Estos personajes de sangre obviamente fueron escritos después de que se creó la armadura flexible. Para tener la fuerza para obligar a estos personajes a atravesar el tejido de metal, este estilo de escritura audaz definitivamente perteneció al maestro de un maestro.

Yang Lin dijo: “Esta armadura flexible se llama Armadura flexible de oro púrpura. En sí mismo es un tesoro de paso humano de grado medio. Estos símbolos de sangre fueron dibujados por un maestro Houtian que se especializaba en hechizos. Tuvo que consumir su propia esencia de sangre para poder extraer esto. Es capaz de debilitar los verdaderos ataques de esencia".

“¿Mm? ¿Debilitar los verdaderos ataques de esencia? Ling Ming se sorprendió. La verdadera esencia era un tipo de energía que circulaba naturalmente dentro del cuerpo. Podría penetrar fácilmente a través de una armadura flexible. Esta armadura flexible era inesperadamente capaz de debilitar los verdaderos ataques de esencia y también era un tesoro de paso humano de grado medio. Podría imaginarse su valor.

Yang Lin dijo:“Elhermano Lin se encuentra ahora en una posición muy sensible. Temo que puedas sufrir intentos de asesinato, así que le regalo esta armadura al hermano Lin. Incluso a un maestro Houtian normal le resultaría difícil atravesar esta armadura. Bueno, aunque digo que es genial, a lo sumo esta armadura flexible puede defenderse de un ataque furtivo y demorarse por algún tiempo. Si se enfrenta a un verdadero maestro Houtian, me temo que no tendría sentido que el hermano Lin se pusiera esta armadura flexible" .

Aunque un maestro de Houtian no podía atravesar la armadura flexible, eso no significaba que Lin Ming pudiera usarla y desafiar a cualquiera que viera. Tan pronto como un maestro Houtian golpeara el cuerpo con toda su fuerza, esa fuerza de ataque se transmitiría a través de la armadura flexible y sería suficiente para reventar todos los órganos de una persona, mucho menos, esta armadura flexible solo debilitó los ataques de esencia verdadera y fue incapaz de negarlos por completo.

Esta armadura flexible no tiene precio. Para que Yang Lin le diera esto, debe haber pagado un precio enorme. Lin Ming dudó un poco y luego decidió tomarlo. Realmente estaba en una posición muy sensible en este momento. Esta armadura flexible también podría considerarse un talismán de la suerte.

"Gracias, Su Alteza".

“Jajá, el hermano Lin es demasiado educado. De hecho, quiero agradecer al hermano Lin. Todo lo que pueda dar, para ser honesto, mi décimo hermano puede dar más, todo lo cual es superior a lo que puedo ofrecer”. Yang Lin dijo con franqueza.

Lin Ming y el Príncipe Heredero caminaron más adentro hasta que llegaron a otra habitación. Este era el dormitorio principal de la mansión.

El dormitorio principal era muy lujoso y estaba exquisitamente decorado. En medio de la habitación había una gran cama de caoba de más de tres metros de ancho. Era suficiente para que cuatro o cinco personas durmieran cómodamente.

En este momento, cuatro sirvientas ya habían preparado la cama para Lin Ming. Se pararon respetuosamente en las cuatro esquinas de la cama. De estas cuatro sirvientas, sus edades rondaban los 16 años y era difícil saber cuál era más hermosa. Evidentemente, habían pasado por un cuidadoso proceso de selección.

Las sirvientas eran generalmente hijas de gente pobre que fueron vendidas cuando eran niñas. Las más hermosas de ellas serían seleccionadas y enviadas a entrenar en cómo servir; incluso les enseñaron las bellas artes. En el futuro serían enviados a los palacios de la nobleza para trabajar.

Una vez que se compraba una doncella, su cuerpo pertenecía a su amo, y su amo podía usarlos como quisiera. Esto fue especialmente cierto para aquellas sirvientas personales que vivían en cuartos de conexión y realizaban las tareas diarias de su amo. Esto equivalía a ser una concubina. Este tipo de sirvienta solía ser responsable del gobierno de la casa. Además de esperar en el dormitorio de su amo y hacer un poco de limpieza, no necesitaban hacer nada más. Sus gastos mensuales y su estatus eran muy altos, y era una posición que las criadas exteriores admiraban y envidiaban mucho. Muchas sirvientas querían unirse a esto, después de todo, para ellas, convertirse en concubina o incluso en tía era el mejor resultado. De lo contrario, cuando se vendieran para casarse, sería difícil para ellos encontrar a alguien decente. Por eso, la mayor parte del tiempo, cuando una doncella se enteró de que los venderían,

Las cuatro sirvientas vieron llegar a Lin Ming, y sus corazones se llenaron de temor; algunos de ellos incluso tenían problemas para respirar. El mayordomo ya les había dicho quién era este joven. Él era la estrella más deslumbrante del Reino de la Fortuna Celestial, quien fue llamado un genio de la Casa Marcial Siete Profunda que solo venía una vez cada siglo, e incluso tenía la posibilidad de convertirse en un discípulo central. El mayordomo ya les había dado instrucciones estrictas para que esta noche le sirvieran de cualquier forma posible y que debían realizarlo todo a la perfección y espléndidamente. Si pudieran darle a este Sir Lin una buena impresión, entonces en esta vida podrían tener la oportunidad de transformarse de un gorrión en un fénix.

Por lo tanto, esta noche fue muy importante para ellos. Como sirvienta, poder servir a este legendario y apuesto joven como sirvienta personal fue la buena fortuna de su vida. La ropa de cama estaba prolijamente extendida y no había ni la más mínima arruga en las sábanas. Los muebles y las cortinas se habían limpiado impecablemente, el quemador de incienso era nuevo y el piso estaba reluciente.

Lin Ming vio a estas cuatro criadas frescas y jugosas. Miró a su alrededor y vio los elegantes muebles de caoba, el costoso quemador de incienso de oro púrpura especiado, las sábanas de seda tejida, y no pudo contener un suspiro. Estos eran todos los placeres y comodidades de la vida que las riquezas y la fama podían traer.

Yang Lin dijo: “Hermano Lin, si está cansado, descansemos aquí esta noche. También acompañaré al hermano Lin y me quedaré en la habitación de invitados".

Lin Ming sabía que Yang Lin ofreció esto para que se sintiera aliviado y descansara sin temor a ser asesinado. Como Príncipe Heredero de la dinastía actual, Yang Ling seguramente tenía maestros de artes marciales que servían como su guardia real, de lo contrario, el Décimo Príncipe no necesitaría asesinar a Lin Ming; simplemente mataría al Príncipe Heredero y acabaría con eso.

Lin Ming miró a las cuatro sirvientas que eran como pequeños conejos blancos tímidos y vio la esperanza y el miedo que se entremezclaban en sus ojos. Sacudió levemente la cabeza y le dijo a Yang Lin: “No, regresaré a la Casa Marcial Siete Profunda".

“¿Mm? ¿Esta mansión no es del agrado del hermano Lin?

"En realidad, no", dijo Lin Ming con una leve sonrisa. Continuó: “Aquí, la vida es demasiado cómoda y lujosa. Los días tranquilos y sencillos de la Casa Marcial Siete Profunda son mucho más adecuados para el cultivo”.