Capítulo 139. Dos Genios

Lin Ming se volvió y vio que esta persona era un anciano de la Morada Celestial de la Casa Marcial Siete Profunda, Sun Sifan.

Antes, durante el examen de ingreso al comienzo del otoño, Lin Ming había logrado pasar las tres pruebas en primer lugar. Sin embargo, debido al límite de su talento, algunos ancianos no estuvieron de acuerdo en que Lin Ming debería tener el primer lugar. Pero este Sun Sifan era en realidad uno de los que habían apoyado a Lin Ming.

Después de eso, Lin Ming había herido gravemente a Wang Yanfeng, y el anciano Xu se apresuró a subir al escenario para buscar problemas con Lin Ming. Esa vez, también fue gracias a que Sun Sifan ayudó a Lin Ming que el anciano Xu se vio obligado a retroceder.

Debido a su ayuda y amabilidad oportuna, Lin Ming tuvo una muy buena impresión de Sun Sifan. Se inclinó respetuosamente y dijo: “Saludos, anciano Sun".

Sun Sifan rápidamente levantó a Lin Ming y dijo, sonriendo: “No hay necesidad de ser tan cortés entre nosotros. Pronto, cuando te conviertas en un discípulo principal, nuestros estados serán los mismos... ¿mm?” Sun Sifan hizo una pausa. “Ya has alcanzado la etapa de alteración muscular?"

Los ojos de Sun Sifan eran como una antorcha, e inmediatamente vio a través del cultivo de Lin Ming. Antes, Lin Ming había contenido su verdadera esencia dentro de él, por lo que los muchos hermanos y hermanas jóvenes aprendices, que estaban en su mayoría en la Segunda Etapa de Transformación Corporal, no vieron que Lin Ming ya había logrado otro gran avance.

"Sí. Ayer tuve un avance afortunado, por eso hoy tengo la confianza para desafiar los diez primeros lugares de la Piedra del Ranking”.

"¡Bien, bien! ¡Los jóvenes son realmente geniales! Todavía queda más de un año en la prueba principal de discípulos del Siete Profundo Valle. Dado que se encuentra en la etapa de alteración muscular, debe haber superado fácilmente el cuello de botella desde la etapa de entrenamiento de vísceras hasta la etapa de alteración muscular. Con su rápido progreso, es solo cuestión de tiempo hasta que alcance la etapa máxima de alteración muscular. ¡Esta prueba ya está decidida!

Un artista marcial de Alteración del Musculo de 15 años era simplemente extraordinario. ¡Incluso un talento de quinto grado sería mediocre en comparación!

"Este joven discípulo tiene confianza para pasar la prueba, pero para derrotar a alguien como el Aprendiz Superior Hermano Lin, este joven discípulo realmente no tiene la confianza para ganar".

“Jajá, pasar la prueba ya es un logro maravilloso. ¡Si también pudieras vencer a Ling Sen, sería un verdadero milagro!”

Ling Sen era conocido en todo el Reino Fortuna del Cielo como invencible dentro de su propia etapa de cultivo, e incluso invencible para aquellos que estaban por debajo del Período de Condensación de Pulso. Incluso hubo algunos artistas marciales débiles del Período de Condensación de Pulso sobre los que Ling Sen saldría victorioso.

¡Si Lin Ming pudiera derrotar a Ling Sen, entonces eso significaría que tendría 15 años en la etapa temprana de Alteración del Musculo con una fuerza equivalente a un artista marcial del Periodo de Condensación de Pulso!

En todo el Reino Fortuna del Cielo, solo había unos 100 artistas marciales del Período de Condensación de Pulso, y la mayoría de ellos se concentraron en la Casa Marcial Siete Profunda.

Si Lin Ming pudiera derrotar a Ling Sen, eso significaría que, en el Reino Fortuna del Cielo, su fuerza individual estaría entre los 100 primeros.

¡Esta clasificación, a una edad tan temprana, realmente causó que uno se sintiera alarmado y horrorizado!

En ese momento, otro anciano entró en la plaza de sillería. Puede haber sido una coincidencia, pero este anciano resultó ser el anciano Xu, el Xu Fengyuan que le había puesto las cosas difíciles a Lin Ming.

Ni siquiera en los sueños más locos de Xu Fengyuan habría pensado que Lin Ming alcanzaría este nivel de fama hace cuatro meses. Ahora que era un discípulo central de la Casa Marcial de las Siete Profundas, incluso podría convertirse en el Maestro de la Casa Marcial en el futuro. ¡Eso lo convertiría en su propio superior inmediato!

Cuando recordó el examen de ingreso y cómo había intentado entrometerse con Lin Ming, Xu Fengyuan sintió un pesar tan profundo y doloroso que incluso sus intestinos se volvieron azules. Recientemente, Xu Fengyuan había tenido dificultades para dormir y comer.

Aunque Xu Fengyuan detestaba esto en su corazón, vino a regañadientes hoy para tener la oportunidad de reunirse con Lin Ming y aceptar lo sucedido. Si pudieran enterrar su animosidad pasada, tal vez este Lin Ming no tomaría represalias contra él en el futuro. Para la Casa Marcial deshacerse de un anciano de la Morada Celestial, no fue un asunto menor, pero tampoco fue demasiado difícil.

Al elegir este momento por venir, no anticipó que se encontraría con su antiguo rival, Sun Sifan. Xu Fengyuan se quejó de inmediato de esta dificultad en su corazón. Este era un momento en el que ya estaba planeando perder la cara, pero en realidad se las había arreglado para toparse con un viejo rival; ¿Este tipo no se burlaría de él?

Lin Ming también recordó a este anciano Xu. El anillo espacial que tenía era de Xu Fengyuan. El anillo espacial había sido muy conveniente.

Lin Ming ni siquiera le guardaba rencor a Wang Yanfeng, y mucho menos a Xu Fengyuan. Si bien Xu Fengyuan había sido injusto, aún era comprensible. Después de todo, fue una reacción humana natural. Xu Fengyuan era viejo amigo de la familia Wang de la ciudad de Yuelu, y Wang Yanfeng era de la familia Wang.

Lin Ming lo saludó con el mismo respeto,”Saludos, anciano Xu".

Xu Fengyuan tosió con torpeza. Inmediatamente descubrió que Lin Ming se había abierto paso a la etapa Alteración del Musculo. Esto hizo que no supiera cómo reaccionar ante este repentino desarrollo. Wang Yanfeng todavía estaba tratando de alcanzar la etapa máxima de entrenamiento de vísceras, ¡pero este Lin Ming ya estaba en la etapa de alteración muscular!

Al comienzo del otoño, el cultivo de Wang Yanfeng había sido su mayor ventaja contra Lin Ming. ¡Pero ahora ya se había quedado atrás!

La prueba solo había comenzado hace dos meses, y él había alcanzado la etapa de alteración muscular. También quedaba más de un año. Alcanzar la etapa máxima de Alteración del Musculo sería simplemente un juego de niños.

¡Si no hubiera un accidente catastrófico, entonces Lin Ming definitivamente se convertiría en un discípulo central de la Casa Marcial Siete Profunda!

Debido a que Sun Sifan estaba presente, Xu Fengyuan no quería quedarse. Tosió secamente y dijo: “Acabo de pasar y escuché que Lin Ming iba a tomar la evaluación. Vine aquí para echar un vistazo, y.… bueno, buena suerte en la matriz. Si encuentras problemas en tu cultivación, no dudes en venir a preguntarme cualquier cosa”.

Estos comentarios de Xu Fengyuan fueron una disculpa discreta de su parte. Lin Ming, naturalmente, no discutiría por nada más. Xu Fengyuan todavía era un maestro de escena de Houtian; Un diálogo tan humilde ya mostró mucha cara a Lin Ming.

Lin Ming dijo: “Muchas gracias al anciano Xu. Este joven discípulo vendrá a visitarnos otro día”.

“Mm. ¡Bien!" Al escuchar a Lin Ming decir esto, el anciano Xu finalmente se relajó.

Con la presencia de los dos ancianos, los discípulos de orden inferior del Salón de la Tierra se mantuvieron a distancia y no se atrevieron a avanzar. Pero en este momento, hubo otro revuelo dentro de la plaza del sillar. ¡Esta ola ondulante de asombro no fue menos que la causada por Lin Ming!

Otra persona había llegado a la plaza. Esta persona fue inesperadamente: ¡Qin Xingxuan!

Si hubiera alguien en la Casa Marcial Siete Profunda que pudiera compararse con Lin Ming, entonces esa persona, sin duda, ¡sería Qin Xingxuan!

Cuando la fama de Qin Xingxuan estaba aumentando, Lin Ming todavía era un desconocido. Ahora, el halo de prestigio que rodeaba a Qin Xingxuan no era menos que el de Lin Ming.

Con estos dos genios monstruosos de la Casa Marcial Siete Profunda reunidos, ¿cómo podría no ser emocionante?

Lin Ming también se sorprendió bastante al ver llegar a Qin Xingxuan. No había pensado que ella vendría. Qin Xingxuan era una discípula principal, por lo que no había ninguna razón para que ella participara en la evaluación Matriz Diez Mil Asesinatos. Eso significaba que la única razón por la que ella vino aquí fue para verlo.

Pensando en esto, Lin Ming sintió que una sensación muy inusual se filtraba en su mente.

Hoy, Qin Xingxuan vestía un atuendo marcial muy simple. Estaba limpio, suelto y atado a la cintura con una banda. Sirvió perfectamente para acentuar su hermosa forma, y combinado con sus dos delgadas piernas, desprendía una sensación muy pura y valiente.

Sin embargo, lo que Lin Ming notó no fue la belleza y el temperamento de Qin Xingxuan, sino su cultivo. ¡Qin Xingxuan ya había entrado en la Quinta Etapa de Transformación del Cuerpo, la etapa de Forja Ósea!

Cuando Lin Ming entró por primera vez en la Casa Marcial de las Siete Profundas, Qin Xingxuan ya estaba en la etapa máxima de alteración muscular. Ahora, en el cuarto mes, había cruzado el cuello de botella de la forja ósea.

¡Pero Qin Xingxuan también era más joven que Lin Ming por varios meses!

Un talento de sexto grado era simplemente demasiado aterrador.

"Xingxuan saluda al anciano Xu, anciano Sun". Aunque el estado de Qin Xingxuan era similar al de estos ancianos de la Morada Celestial, todavía mostraba la etiqueta de un niño y un anciano, y se inclinaba ante estos dos ancianos.

Los dos ancianos también notaron el cultivo de Qin Xingxuan. Exclamaron con sorpresa en su corazón. ¡El Reino Fortuna del Cielo nunca antes en toda su historia había alcanzado un artista marcial a la etapa de forja ósea con solo 15 años de edad!

Con tal progreso, Qin Xingxuan tuvo la posibilidad de atravesar el Período de Condensación del Pulso a los 16 años de edad.

En la actualidad, entre este par de chico y chica, las capacidades de combate de uno no tenían rival, y la velocidad de cultivo del otro iba en contra de la voluntad del cielo. ¡Estos dos jóvenes eran simplemente los verdaderos monstruos entre los genios monstruosos!

Desafortunadamente, Qin Xingxuan ya había dejado en claro a todos que planeaba seguir el camino de Xiantian y no tenía intención de quedarse en el Reino Fortuna del Cielo. De lo contrario, en el futuro, Lin Ming podría ser el Maestro de la Casa Marcial y Qin Xingxuan podría ser el Enviado Siete Profundo. Podrían casarse como uno solo, y serían la definición de una pareja de oro, simplemente una pareja hecha en el cielo.

Sus hijos serían inevitablemente dotados de un asombroso talento natural, y habría una nueva familia legendaria dentro del Reino Fortuna del Cielo. Con estas dos personas, el destino y el futuro de la nación serían mucho más estables, y los enemigos cercanos no se atreverían a invadir el Reino Fortuna del Cielo.

"Lin Ming, mucho tiempo sin verte". Qin Xingxuan sonrió levemente. De todos sus compañeros, solo Qin Xingxuan llamó directamente a Lin Ming por su nombre, de manera suave y natural, con un buen tono. Otros lo llamarían Aprendiz Superior Hermano Lin, tal vez Sir Lin, o incluso Señor Lin.

“Mm. Han pasado dos meses desde que nos hemos visto”.

“Jajá, ustedes dos charlen primero. Iremos a sentarnos en el bosque de bambú”. Sun Sifan vio a estos dos jóvenes hablando y creó una excusa para irse por su propia iniciativa. Sabía que Qin Xingxuan ciertamente no les pediría a estos dos ancianos que se fueran.

"Anciano Sun, Anciano Xu, por favor camine con cuidado". Qin Xingxuan dijo dulcemente.

“Mm. Diviértete poniéndote al día”. Xu Fengyuan dijo apresuradamente. Esta fue una de las pocas ocasiones en que estos dos compartieron la misma opinión.

Después de ver a estos dos alejarse, Qin Xingxuan sonrió alegremente y dijo: “Lin Ming, recientemente estuve recluido para cultivarme. Cuando salí, escuché que tu técnica de inscripción ya había alcanzado el pináculo de Reino Fortuna del Cielo. Jeje, ya que fui el primero en saber de tu condición de maestro de inscripción, ¿puedes hacerme un descuento? Tengo una espada y me gustaría que me ayudaras con ella”.

Los ojos de Qin Xingxuan brillaron como estrellas mientras guiñaba un ojo. Mostraba un comportamiento juguetón pocas veces visto que solo resaltaba su incomparable belleza encantadora.

Incluso Lin Ming se quedó atónito y sin palabras por un momento. Finalmente sonrió y dijo:“Estoydispuesto a servir a la señorita Qin. De hecho, puedo ayudarte gratis”.

"¿En realidad? Entonces me siento honrado”. Qin Xingxuan sonrió tímidamente y continuó: “Lin Ming, por favor llámame por mi nombre, no hay necesidad de que seamos extraños. ¡Ah! Desde que viniste hoy, debes tener confianza para entrar en los diez primeros rangos de la Piedra de Clasificación, ¿verdad?”

"Mm”. Lin Ming asintió. Tenía una seguridad del 100% de que hoy podría entrar en los diez primeros puestos.

Cada vez más personas comenzaron a entrar en la plaza de sillar de Matriz Diez Mil Asesinatos. La escena originalmente solitaria, debido a la repentina aparición de Lin Ming, se había vuelto muy festiva y algunas personas incluso se apresuraban a entrar.

Como pronto comenzaría la evaluación de Matriz Diez Mil Asesinatos, también llegaron Bai Jingyun y Murong Zi.

Al ver a Lin Ming y Qin Xingxuan teniendo una conversación tan comprometida, Murong Zi curvó los labios y se dejó caer. No había forma de que ella fuera a saludar.

Cuando Bai Jingyun vio a Murong Zi así, se rió en silencio. En verdad, Murong Zi estaba bastante orgulloso. Pero desafortunadamente, frente a alguien como Qin Xingxuan, había perdido toda su confianza en sí misma y no podía encontrarla en ningún lado. Qin Xingxuan era más joven que Murong Zi. Cuando el nombre de Qin Xingxuan sacudía la totalidad de Reino Fortuna del Cielo, Murong Zi aún no estaba convencido; quería

compararse con Qin Xingxuan. Después de mucho tiempo y mucho esfuerzo, había descubierto que los dos simplemente no estaban en el mismo campo de juego.

Y ahora, cuando Murong Zi vio a Qin Xingxuan y Lin Ming charlando felizmente entre ellos, sintió algo en su corazón que para una niña era difícil de explicar. Fueron unos celos algo inexplicables y desconcertantes que nublaron su mente. Murong Zi tenía una disposición muy simple; ella nunca fue de las que ocultaba sus sentimientos, por lo tanto, simplemente se sentó en el acto.

Bai Jingyun sonrió y dijo: “Ah, Zi, ¿no dijiste hace unos días que tenías una espada de paso humano de grado medio con la que deseabas que el hermano aprendiz menor Lin te ayudara?"