Capítulo 381. Descendiente del Emperador del Inframundo

Capítulo 381. Descendiente del Emperador del Inframundo

¡En el breve tiempo que Lin Ming estuvo perdido en sus pensamientos, el loto de hielo de Mu Xiaoqing ya había sido aplastado por la garra de sangre de Lei Mubai!

Después de que la garra de sangre desgarró el loto azul helado, continuó, golpeando a Mu Xiaoqing. Mu Xiaoqing voló hacia atrás, su espada azul brillando con una luz fría y aguda mientras la empujaba.

¡Ding, ding, ding!

Hubo un sonido de metal chocando. Mu Xiaoqing dejó escapar innumerables luces de espada que perforaron la garra de sangre, provocando una nube de azotes sangrientos.

¡Estallido!

La garra de sangre finalmente explotó, la sangre se mezcló con el rayo carmesí para salpicar sobre Mu Xiaoqing. La ropa y el cuerpo de Mu Xiaoqing estaban completamente manchados de rojo con sangre.

Su rostro palideció. Dio varios pasos pesados hacia atrás, cada paso creando una huella de sangre en el escenario.

Lin Ming pudo ver claramente que la verdad era que esta sangre se generó a partir de la esencia de sangre del Trueno del Demonio Extintor de Sangre que había absorbido después de haber sido estimulada con esencia verdadera. ¡Era sangre de verdad!

Este Trueno Demonio Extintor de Sangre realmente parecía un arma malvada.

Mu Xiaoqing miró las manchas de sangre en el suelo y luego la cara sonriente de Lei Mubai. Una sensación de profunda humillación surgió dentro de su corazón. Sabía que ya había perdido, Lei Mubai simplemente estaba jugando con ella. En ese único golpe de hace un momento, si Lei Mubai no se hubiera quedado de brazos cruzados después, ¡no había nada que pudiera haber hecho para defenderse!

No fue solo Mu Xiaoqing quien se dio cuenta de esto, muchos de los discípulos de la Región de los Cinco Elementos también vieron lo que estaba sucediendo. Muchos de ellos comienzan a sentir lástima por Mu Xiaoqing.

La ira, la vergüenza y la falta de voluntad crecieron dentro del corazón de Mu Xiaoqing. Sabía que era inferior a Lei Mubai, pero en esta situación, ¿cómo podía permitirse admitir la derrota?

Ella apretó los dientes, enviando una verdadera transmisión de sonido de esencia, "Tú y yo no tenemos odio o injusticia en el pasado el uno contra el otro, así que ¿por qué me estás degradando así?"

“Jajá, si quieres culpar a alguien, entonces culpa a tu maestro. Ella me reprimió, frustrando mi espíritu, así que, naturalmente, debo tomar represalias contra ella. No tengo la capacidad de oponerme directamente a

ella, pero dentro de las reglas de este banquete todavía puedo arruinarte. Hacer que se sienta enferma y con náuseas tampoco es una mala idea. Dado que todo esto se hace dentro de las reglas adecuadas, todo lo que puede hacer es tragarse sus insultos. En cuanto a ti, ¡considéralo un golpe de mala suerte!”

"Así que esa es la razón". Mu Xiaoqing sonrió tristemente.

"No solo eso. Dado que me he decidido a convertirme en un Emperador incomparable, para poder recorrer ese camino debo pasar por encima de los cadáveres de una gran cantidad de genios y grabar en mis huesos la creencia de que estoy en la cúspide de la existencia. Como discípulos principales de una secta superior de cuarto grado, a regañadientes calificas para ser un cuerpo que allana el camino para mí. Después de que me convierta en un Emperador incomparable en el futuro, también puedes considerar esto como un honor”.

Estas palabras hicieron que Mu Xiaoqing se indignara por completo. "¡Morir!"

Mu Xiaoqing atacó, su figura se apresuró a avanzar rápidamente. Con cada paso que daba, los lotos de hielo florecían en el suelo. Ella cortó su espada, y un fuerte viento aulló, llevando una energía de hielo aterradoramente helada.

"¡Oye! ¡Todo lo que hagas es inútil!” Lei Mubai sonrió con desdén. Sus ojos se llenaron de lástima mientras miraba a Mu Xiaoqing. Luego, extendió los brazos y una luz carmesí profunda estalló hacia afuera. "¡Prisión de sangre!"

¡Hoo!

Una gran cantidad de esencia de sangre brotó como una marea. Todo el espacio a decenas de pies alrededor de Lei Mubai pareció espesarse como si se desbordara de sangre pegajosa.

Cuando Mu Xiaoqing se apresuró a entrar, sintió como si hubiera una presión sobre su pecho. Le costaba respirar.

Lei Mubai sonrió cruelmente mientras empujaba una palma hacia Mu Xiaoqing.

En el momento en que estalló la Prisión de Sangre, Lin Ming de repente recordó algo.

Cuando Lin Ming se tragó por primera vez el cristal del corazón del demonio destrozado para romper el límite de la médula templada, había visto una verdadera ilusión. Esta era la voluntad maligna que el Gran Emperador del Inframundo había dejado dentro del Cristal del Corazón del Demonio Destrozado.

¡Y la sensación que le había dado el alma del Gran Emperador del Inframundo era algo similar a las fluctuaciones del alma de Lei Mubai!

Podría ser…

Lin Ming estaba alarmado. Después de haber tragado el Cristal del Corazón del Demonio Destrozado, había sido testigo de la guerra interminable que siguió. Había dejado una impresión muy profunda en la mente de Lin Ming.

El Gran Emperador del Inframundo era similar a un antiguo dios demonio. Sostenía una gran hacha roja ensangrentada en la mano, el eje de más de tres metros de largo y tan grueso como un brazo. ¡La hoja del hacha tenía un metro de ancho y con un solo corte fue capaz de cortar a un diablo por la mitad! ¡Cada vez que mataba a un diablo, el Gran Emperador del Inframundo bebía su sangre!

Hasta ahora, Lin Ming no podía entender cuáles eran los demonios que mató el Gran Emperador del Inframundo. Estos demonios estaban desnudos, su piel era de un color azul oscuro y gris metálico, todo su cuerpo entrelazado con músculos gruesos y enojados. Todos sus cuerpos estaban sujetos con grandes aros, e incluso había algunos que estaban envueltos en cadenas. Tenían rasgos diabólicos y exagerados y eran seres incomparablemente feos. No eran humanos en absoluto.

En cuanto al Gran Emperador del Inframundo, en realidad medía más de 10 pies de altura. Su cabello era de un rojo intenso, su piel de un azul pálido y las pupilas de un dorado oscuro.

Aunque tenía la cara de un humano, su altura, piel, ojos... ¿podría realmente haber humanos que crecieran con ese tipo de apariencia?

Lin Ming nunca pudo estar seguro de si el Gran Emperador del Inframundo era humano o no. O tal vez, ¿fue esta apariencia el resultado de cultivar profundamente las artes del diablo?

En ese momento, esta escena se había grabado en el corazón de Lin Ming.

La gran hacha del Gran Emperador del Inframundo apuntaba a los cielos, sus pies pisaron la tierra. ¡Dentro del universo, él solo gobernaba todo! Este espíritu abrumadoramente señorial había hecho que el corazón de Lin Ming se acelerara.

Y ahora, Lin Ming realmente había sentido el mismo tipo de energía proveniente del cuerpo de Lei Mubai.

Esta era energía demoníaca... aunque era muy débil, ¡no había forma de que estuviera equivocado!

¿Era... el descendiente del Gran Emperador del Inframundo?

Este pensamiento apareció de repente en el corazón de Lin Ming, dejándolo distraído por un momento.

Si fuera descendiente del Gran Emperador del Inframundo, ¿qué tipo de concepto sería ese?

¿¡¿Era... alguien de la Región Demoníaca del Mar del Sur?!?

Mientras Lin Ming pensaba en esta posibilidad, todo tipo de escenarios aparecieron en su mente. Desde la destrucción de Lei Jingtian de la alianza propuesta, hasta su sonrisa segura de sí mismo, hasta cuando incluso

había apoyado a Lei Mubai para proponerle matrimonio a la Isla Divino Fénix... y hasta ahora, ¡Lei Mubai incluso había usado el Trueno Demonio Extinguidor de Sangre!

El Trueno del Demonio de Extinción de Sangre no tenía un problema en sí mismo. Aunque se consideraba malvado, las facciones malvadas dentro del Continente derrame del cielo no eran demasiado claras. Por ejemplo, la Facción Acacia y la Facción Marioneta de los Siete Valles Profundos practicaban artes del diablo. En cuanto a Lin Ming, su Fuerza de Dios Herético tampoco era una habilidad ortodoxa.

Pero con el Trueno del demonio de extinción de sangre agregado con todos los problemas anteriores, ¡Lin Ming tuvo una suposición!

Y era que el verdadero nombre de este joven pálido no era Lei Mubai. De hecho, ese era solo un alias que usó dentro de la Secta Cresta de trueno. ¡Probablemente era un personaje muy importante dentro de la Región Demoníaca del Mar del Sur!

Había demasiado en juego en esta especulación; incluso Lin Ming no pudo confirmarlo fácilmente.

Si tuviera razón, no quedaría nada de Lei Mubai. Pero si estaba equivocado, crearía un desastre horrible. ¡Incluso podría hacer que la Secta Cresta de trueno se alíe con la Región Demoníaca del Mar del Sur!

Lin Ming reprimió su deseo de contarle a Mu Qianyu su suposición. En cambio, calmó su mente y se encerró hasta que no quedó nada más que su sentido, usando esto para observar todas y cada una de las acciones de Lei Mubai.

En el escenario, la batalla de Lei Mubai y Mu Xiaoqing estaba llegando a su fin. Mu Xiaoqing obviamente no estaba ni cerca de ser el rival de Lei Mubai. Estaba atrapada dentro de la Prisión de Sangre y no pudo liberarse por completo.

Mientras Lin Ming comparaba el aura que Lei Mubai emitía con la voluntad residual del Gran Emperador del Inframundo dentro del Cristal del Corazón del Demonio Destrozado, estaba cada vez más seguro de que este Lei Mubai tenía una relación muy cercana con el Gran Emperador del Inframundo, y probablemente era un descendiente de algún tipo. ¡Por lo menos, sería una persona que cultivó el mismo tipo de artes diabólicas que el Gran Emperador del Inframundo!

La Región Demoníaca del Mar del Sur estaba en guerra con la Isla Divino Fénix y pronto la invadiría. Ahora, Lei Mubai había aparecido de repente en este momento. Además de todas las diversas acciones de Lei Jingtian, esto fue suficiente para confirmar la relación entre Lei Mubai y la Región de los Demonios del Mar del Sur. De lo contrario, ¿cómo podría haber una coincidencia tan perfecta en este mundo?

Cuando Lin Ming tomó una decisión, abrió los ojos.

En este momento, fue testigo del golpe final de Lei Mubai.

¡Estallido!

La garra de sangre carmesí se rompió. Mu Xiaoqing escupió una bocanada de sangre y voló hacia atrás como una cometa rota, con el rostro más pálido que el papel.

Este fue el hogar de la Isla Divino Fénix. No importa cuán valiente fuera Lei Mubai, todavía no se atrevería a chupar la esencia de sangre de Mu Xiaoqing. Pero este nivel de lesión fue suficiente para que estuviera postrada en cama durante al menos diez días.

La verdad es que estar postrado en cama durante 10 días no era un gran problema. El quid del problema era que la confianza de Mu Xiaoqing había sufrido un duro golpe. En el futuro, esto posiblemente podría afectar su cultivo.

Mu Yuhuang estaba pálido. No importa cómo justificó las cosas, en este caso su discípulo era simplemente más débil, por lo que había sido humillada. No había nada que pudiera decir. De lo contrario, esta supuesta competencia de aprender unos de otros no tendría sentido.

Lei Mubai sonrió con malicia a Mu Xiaoqing. Luego, recorrió con la mirada a toda la audiencia. "¿Quién es el siguiente?"

Todos los discípulos de la Isla Divina Fénix tenían una complexión extremadamente fea. Sus corazones estaban llenos de un resentimiento extremo, y deseaban poder destrozar a este Lei Mubai. Pero esta vez, ¿quién se atrevería a subir? ¡Eso simplemente sería deshonrarse a sí mismos!

Lei Mubai sonrió mientras miraba a Mu Dingshan. En cuanto a Lin Ming, quería salvarlo para el final. El que fue la mayor monstruosidad para él aquí fue Lin Ming.

"Hermano Dingshan, si no sube, ¿cómo podemos tener un partido?"

La expresión de Mu Dingshan estaba pálida. Apretó los puños con fuerza. Desde que nació, ¿cuándo había sido oprimido así? Alguien lo estaba mirando con desprecio, provocándolo abiertamente, y, sin embargo, estaba indefenso en esta situación.

Sin embargo, esta vez, tenía que dar un paso al frente sin importar qué. Al final, él era el hermano mayor aprendiz de todos los discípulos directos. Apretó los dientes y estaba a punto de subir al escenario cuando una mano firme en su hombro lo detuvo.

Se volvió y vio que quien lo detuvo era Lin Ming.

"Hermano Mu, aprendiz mayor, lo haré". Lin Ming dijo con franqueza. Había mucho en juego. A través de una batalla real, podría determinar con mayor precisión la verdadera identidad de Lei Mubai.

El corazón de Mu Dingshan se llenó de una tierna y conmovedora emoción mientras miraba a Lin Ming. Este Lei Mubai era simplemente demasiado fuerte. Incluso los talentos de rango santo estaban separados por la disparidad en sus talentos. Temía que este Lei Mubai fuera mucho más fuerte que Mu Qianyu y Mu Bingyun cuando tenían esta edad.

Incluso si Lin Ming también era un talento de rango Santo, solo tenía 16 años y medio. No solo eso, sino que había una gran brecha en su cultivo. Mu Dingshan no creía que Lin Ming tuviera la seguridad de tratar con Lei Mubai.

Lei Mubai había derrotado a Mu Xiaoqing y ni siquiera había usado su arma. Quién sabía qué más tenía bajo la manga. Simplemente era un personaje insondable. No había forma de que Lin Ming pudiera comprender completamente la fuerza total del enemigo. Para desafiar a Lei Mubai, era necesario tener un valor considerable. Pero, dado que esta competencia había progresado a esta etapa, una derrota sería un gran golpe para la confianza de uno.

¿Podría ganar Lin Ming?

Para Mu Dingshan, esta esperanza era demasiado débil e incierta.

Le dio una palmada en el hombro a Lin Ming, un poco como si estuviera entrando en un escenario de ejecución. “Hermano Lin, por favor guarde silencio. Eres la última esperanza de mi Isla Divino Fénix, así que déjame subir primero. Mi cultivo es más alto que el de Xiaoqing, por lo que debería poder probar algunas de las cartas que tiene en su mano. Con eso, será más fácil para ti lidiar con él”.

Lin Ming sonrió levemente, ya no intentaba persuadir a Mu Dingshan. En cambio, sacó su Lanza Cometa Púrpura y saltó directamente al escenario.

"¡Lin Ming de la Divina Isla Fénix, por favor avise!"