Capítulo 525. Asesinato en las calles

Los Fey tenían una historia muy larga y gloriosa. Ahora ocupaban la Región Occidental del Continente Santo Demonio. Debido a que tanto los hombres como las mujeres de la raza Fey eran excepcionalmente hermosos, a menudo eran capturados para ser utilizados con fines de cultivo sexual. Dentro del Continente Santo Demonio, hubo innumerables artistas marciales que caminaron por el camino de la obscenidad, incluidos hombres y mujeres.

Debido a esto, el comercio de esclavos sexuales de la raza Fey estaba floreciendo. Además de las esclavas sexuales, las hermosas Fey mortales a menudo eran contratadas como sirvientas, concubinas o catamitas. Incluso había Fey mortales y Fey sin talento que estaban dispuestos a contratarse con potencias para buscar asilo. En este cruel y brutal Continente Santo Demonio, esta era una forma más fácil de sobrevivir.

Además de los Fey, también estaban los Enanos, los Primates, los Ferals y todo tipo de otras razas. Esto fue una gran revelación para Lin Ming. Dentro del continente Derrame del Cielo, esta fue una vista maravillosa sin precedentes.

En términos de influencia y poder, la raza Demonio Gigante ocupó el puesto número uno dentro del Continente Santo Demonio. A esto le siguieron los enanos, los primates y luego los humanos como cuarto. Las razas Fey y Feral eran incluso más bajas que los humanos.

Estepas de la matanza de sangre, Ciudad de la inundación del sol...

Ciudad de la inundación del sol no era una de las 12 ciudades principales de las Estepas de la Masacre de Sangre. Más bien, era una ciudad más pequeña al borde de las Estepas de la Matanza de Sangre. Pero había muchos viajeros, comerciantes y plebeyos aquí, por lo que Ciudad de la inundación del sol era muy próspera. La ciudad tenía millones de residentes, y la plaza de la ciudad, los restaurantes y las posadas estaban animados y florecientes.

Ciudad de la inundación del sol no era una de las ciudades originales de las Estepas de la Matanza de Sangre. Era imposible robar la energía infernal de alguien matándolo. Por lo tanto, aquí se produjeron muchos menos asesinatos. Pero era común que eventos como ese estallaran en cualquier momento.

Pabellón de inundaciones solar fue el mayor mercado de tesoros dentro de Ciudad de la inundación del sol. Los edificios del interior tenían 12 pisos de altura, estaban lujosamente decorados y, a menudo, eran frecuentados por clientes ricos y poderosos. Frente a las puertas del Pabellón de inundaciones solar, había una plaza muy grande. Esta era una pequeña plaza de la Ciudad de la inundación del sol. Muchos artistas marciales instalaron puestos aquí para vender sus productos. En este momento, todo tipo de personas se reunieron en esta plaza. Había gente de todas las razas y los puestos tenían todo tipo de artículos maravillosos.

"Hay tantas cosas buenas aquí". Mientras Lin Ming caminaba, su corazón se llenó de emoción. Dentro de las Estepas de la Masacre de Sangre, había muchos artistas marciales de cultivo de nivel medio excepcionales y distinguidos. Naturalmente, habría más cosas buenas.

“¡Píldora de sangre divina! Pensar que algo como esto realmente se vendería”. Lin Ming exclamó.

La píldora de sangre divina era similar a la píldora de reversión de Yang. Ambos eran medicamentos milagrosos que se usaban para salvar una vida. Normalmente, en una secta superior de cuarto grado, solo se darían una o dos píldoras a los mejores talentos allí. Eran extremadamente valiosos y preciosos.

Cuando Lin Ming estaba en el Palacio Imperial del Dios Demonio, tuvo la suerte de tener una Píldora de Reversión Yang. De lo contrario, su vida habría corrido un peligro mucho mayor. Debido a estas experiencias, Lin Ming naturalmente tenía interés en las píldoras que salvan vidas como esta píldora de sangre divina. Entonces preguntó: "Hola amigo, ¿por qué estás vendiendo esta píldora de sangre divina?"

El vendedor del puesto era un demonio gigante de rostro alargado. Actualmente, estaba mirando a Lin Ming con un desdén apenas tolerable en su rostro. Dentro del Continente Santo Demonio, los Demonios Gigantes detestaban a los humanos débiles y patéticos, sin mencionar que Lin Ming también era solo uno de los primeros artistas marciales del reino Xiantian. Solo de un vistazo, podía decir que no podía pagar su Píldora de Sangre Divina.

“¿De dónde vino este pequeño mocoso? ¡La píldora de sangre divina de este padre solo se cambiará por 100 cristales de demonio de sangre de grado medio! ¡100 Cristales de Demonio de Sangre de grado medio, y ni uno menos!”

Dentro de las Estepas de la Matanza de Sangre llenas de muerte, una medicina que salva vidas como la Píldora de Sangre Divina solo se volvió más preciosa y rara. ¡Este Demonio Gigante debe haber necesitado dinero con urgencia si estaba tomando este tipo de píldora para vender!

"Cristal de demonio de sangre de grado medio..." Lin Ming estaba atónito. Tenía muchas piedras de esencia verdadera de grado medio, pero no muchos Cristales de demonio de sangre de grado medio. Cuando mató a los seis Ancianos de la Tribu Verde Silenciosa, había obtenido una gran cantidad de Cristales de Demonio de Sangre. Pero eran del tipo más inferior con demasiadas impurezas.

El Demonio Gigante de cara larga ya había adivinado durante mucho tiempo que Lin Ming no podía permitirse nada. Dijo con impaciencia: “No impida que este padre haga negocios. Ahora vete, esto no es algo que alguien como tú pueda pagar”.

Después de ser regañado varias veces por este demonio gigante, Lin Ming frunció el ceño. Este Demonio Gigante era realmente un snob grosero. Mientras Lin Ming reflexionaba, de repente escuchó una risa.

"¡Ja, ja! ¡Qué gran lanza! ¡Con esta lanza, la fuerza de yo, Ao Ri, se elevará una vez más!”

Desde el interior del gran salón del Pabellón de inundaciones solar, un alto Demonio Gigante salió pavoneándose. Llevaba una armadura roja y una lanza recién comprada en sus manos. Había muchas personas que parecían conocer a este Demonio Gigante con armadura roja. Muchos de ellos se acercaron a saludarlo.

“¡Una lanza de paso de tierra de grado medio! ¡Y una lanza de paso de tierra de grado medio superior en eso! ¡Qué gran arma! Hermano Ao Ri, ¡realmente sabes cómo lucirse!”

El Demonio Gigante con armadura roja se rió, su rostro cubierto con una sonrisa orgullosa cuando dijo: "¡Con esta lanza, mi Técnica del Dios de la Guerra será aún más poderosa!"

Junto a Ao Ri, otro Demonio Gigante dijo: “Escuché que regresaste de Ciudad Polaris. ¿Cómo estuvo? ¿Mataste al contenido de tu corazón?”

¿Ciudad Polaris?

La mente de Lin Ming se agitó. Originalmente había venido a esta plaza de la ciudad para dar un paseo informal para ver si había algo que le interesara. No le importaba el ruido que sucediera aquí, pero ahora que escuchó a alguien mencionar Ciudad Polaris, no pudo evitar prestar atención. Las Estepas de la Matanza de Sangre tenían 12 Ciudades Demonio Celestiales principales. Uno de ellos era Ciudad Polaris, que era a donde tenía la intención de ir.

“¡Jajá, por supuesto que maté a un montón! ¡En este último medio año, ya he matado a más de 100 maestros! ¡Mi energía infernal se está acumulando hasta el punto en que casi puede manifestarse!” Ao Ri sonrió y guardó su lanza, cambiándola por una jarra de vino. Bebió un gran bocado.

“Ao Ri, ¿pasaste medio año en las afueras de la ciudad? ¿No has entrado? Mientras Ao Ri se mostraba, de repente sonó una voz menos feliz. El que hablaba era un pequeño demonio gigante.

“Hmph, ¿crees que los artistas marciales de Ciudad Polaris son barro que puedo pellizcar? El centro de la ciudad está bien por sí solo. Llevo medio año en las afueras de la ciudad y ya he conocido a más de 10 maestros. Ninguna de estas personas es con la que puedas meterte casualmente”.

"¿Oh? ¿De qué maestros estás hablando? Tan pronto como la gente se enteró de los maestros de Ciudad Polaris, se interesó de inmediato.

“Están los Demonios Gigantes Da Gu, Mo He, el Enano Chi Yan… bueno, en resumen, hay demasiados maestros para contar. Ciudad Polaris es realmente un tigre agachado, un dragón escondido. Hay demasiados maestros disfrazados allí; ni siquiera puedes despreciar a los que están en el mismo nivel. No está mal que seas un genio, pero todos los demás también lo serían. A menos que… el otro lado fuera un humano. Es decir, los humanos son los mejores para matar. Entre todas las razas, los humanos son los más débiles. Y mucho menos si estuvieran a mi nivel, incluso si fueran más altos que yo por un pequeño límite, ¡hay pocos que serían mi rival!” Ao Ri dijo arrogantemente mientras bebía su vino.

“Jajá, los humanos son demasiado débiles. Aunque su estado actual puede ubicarse en cuarto lugar dentro del Continente Santo Demonio, esta clasificación se debe solo a su número y al hecho de que

pueden reproducirse como conejos. En términos de fertilidad, los humanos son realmente los ganadores, Jeje. Pero qué lástima, en términos de talento en artes marciales, los humanos son un completo desastre. En comparación con nosotros, los Demonios Gigantes y el pequeño Fey, la diferencia es como una nube en lodo.

Varios Demonios Gigantes hablaron fuerte y descaradamente, sin reprimirse. Todos los artistas marciales humanos a su alrededor miraron fijamente al escuchar la conversación de los Demonios Gigantes. Sin embargo, cuando notaron el aura y el cultivo de los Demonios Gigantes, solo pudieron permanecer en silencio.

Estos demonios gigantes no eran unos don nadie.

Ao Ri dijo: “La raza Fey es verdaderamente la favorita de los cielos. Si no fuera porque son tan pocos en número, me temo que serían la raza número uno dentro del Continente Santo Demonio. Para usted y para mí, podríamos ser considerados invencibles entre los artistas marciales humanos al mismo nivel, pero si nos comparan con los Fey, entonces no somos demasiado excepcionales. La verdad es que, además de los humanos, los Ferals tampoco son muchos. Los humanos tienen un cuerpo débil que puede romperse con un toque, y los Ferals son todos idiotas sin cerebro. Qué pena. Los Ferals tienen un físico tiránico, pero su percepción es patética. Necesitan pasar varios años simplemente estudiando los métodos de cultivo más simples. Pueden olvidarse de comprender los más avanzados”.

"Joder, ¿¡quién dices que es estúpido !?" Mientras los Demonios Gigantes hablaban en voz alta, de repente hubo un rugido. Un hombre salvaje de más de 10 pies de altura y envuelto en piel de animal saltó hacia adelante. Su cabello era largo y desordenado, y su boca estaba llena de colmillos afilados. Tenía una mandíbula inferior gruesa y prominente y su rostro era similar al de un gorila.

"Je, hablando de Ferals, uno acaba de llegar a morir". Ao Ri miró a este Feral con desdén. Tenía las manos relajadas a los lados; simplemente no había puesto este Feral en sus ojos.

"¡Corta la basura, saca tu arma!" El Feral rugió. Luego, sacó una barra de hierro con púas gruesas de su espalda.

“Hmph, ¿crees que alguien como tú es digno de que saque mi arma? Estás mirando con desprecio las brutales batallas de la Ciudad Polaris de las Estepas de la Masacre de Sangre. ¡Ahora vete a morir!”

¡Ao Ri de repente dio un paso adelante y pateó!

"¡Cómete mi vara!" Después de ser provocado por Ao Ri, el Feral se enfureció. Gritó mientras golpeaba con su vara la pierna de Ao Ri. Todos los artistas marciales de los alrededores respiraron profundamente. La raza Feral era famosa en todo el Continente Santo Demonio por su gran fuerza. Si esta vara golpeara la pierna de ese Demonio Gigante, ¡definitivamente rompería cada uno de sus huesos!

Sin embargo, esta patada de pierna de Ao Ri parecía llevar el impulso de ríos y montañas. Después de patear su pierna, la esencia demoníaca se inundó como un mar en una tormenta furiosa, imparable e

irresistible. La vara del Feral se vio afectada por esta aura y vaciló. Pero en este momento, la pierna de Ao Ri realmente golpeó la garganta del Feral.

¡Peng!

Con un sonido sordo y sordo, el cuello del Feral se partió. ¡Su cuerpo voló hacia atrás, estrellándose contra el suelo y deslizándose hacia atrás docenas de pies!

Al mirar al Feral, se podía ver que sus ojos estaban desorbitados y su cuello estaba torcido en un ángulo extraño. ¡Su cuello en realidad había sido roto por la patada de Ao Ri!

Un charco de sangre pronto brotó de la cabeza del Feral, tiñendo el suelo de rojo.

"¿Él está muerto?"

Lin Ming se sorprendió. Esta ni siquiera era una de las 12 ciudades principales de las Estepas de la Matanza de Sangre, y ya había asesinatos en las calles. Esta tierra era verdaderamente un paraíso para matar.

Aunque los artistas marciales de los alrededores parecían alarmados, esto era solo hacia Ao Ri. En cuanto a estos asesinatos en la calle, parecían extremadamente comunes.

“Hmph, eso es lo que obtienes por morder más de lo que puedes masticar. ¡Estaba tan débil, pero se atrevió a provocar a otros!”

“¡Jajá, ya sean Ferals o humanos, son la pareja más bienvenida dentro de las ciudades de los Demonios Celestiales! Simplemente nos están entregando energía infernal a los Demonios Gigantes”. Ao Ri se humedeció los labios, muy satisfecho con su aterradora actuación. Pero, no parecía que se hubiera divertido lo suficiente todavía. Se dio la vuelta y de repente encontró a una joven vestida de negro entre la multitud que llevaba una máscara de gasa. Él le sonrió lascivamente y dijo: “Jeje, niña bonita, ¿quieres venir a jugar? Tenga la seguridad de que este padre lo tratará con cuidado”.

Mientras Ao Ri hablaba, Lin Ming también miró. Sus ojos se agrandaron. Había conocido a esta mujer vestida de negro hacía solo unos días. En ese momento, ella estaba montada en un gran pájaro azul. Ella era la hermana menor aprendiz de Muk Gu.