PLAN 9B NO. 1 ( REBOOT)

Editorial [La reestructuración del Universo Rizoma… o el reboot] Por Don Poyo CorE I Oficialmente esto es un reboot, un reinicio. Seguimos viv@s y navegando, pero hemos cambiado el curso. No negamos nuestro pasado: cada uno de los números publicados nos trajeron hasta aquí. Una simple y lúdica mutación evolutiva editorial.

Esto explica el número uno en la portada (donde quizá alguien esperaba un ocho).

Ir a la deriva dejó de ser divertido, pero seguimos con la intención de ofrecer un espacio al arte subterráneo, independiente y contracultural en todas las disciplinas artísticas… este fanzine nació en la ciudad de Morelia, después cambió sus cuarteles generales a Hermosillo y actualmente se arma, diseña y publica en Nogales, Sonora.

Cada punto geográfico marcó una etapa en contenidos y estética. Con este reboot le apostamos a lo que creemos son los mejores elementos de cada periodo.

II Tener voz, crear arte, fundamentar y defender un punto de vista no debe estar condicionado a nada y a nadie. La libertad de expresión no se debe brindar solamente a quien piensa como yo, como tú, o a quien pueda pagarla; para crear arte no se pide permiso, tampoco es una actividad designada a una élite de iluminad@s espiritual e intelectualmente (como han intentado hacernos creer durante mucho tiempo).

Los fanzines captan ese espíritu, ese ideal romántico, esa bandera: Toda persona tiene derecho a crear y a expresar sus ideas, y si no encuentra el medio para hacerlo tiene el derecho de construirlo.

Los fanzines nacen como un espacio alternativo (impreso) para cuentistas, periodistas, fotógraf@s, ilustrador@s, poetas, cinéfil@s, activistas clandestin@s (y no tanto), amantes de las teorías de conspiración y ciencia ficción (entre otr@s) que no tenían acceso a las publicaciones oficiales y de mayor distribución... pero no podemos negar que hay personas que gracias a su estancia en el mundo fanzinero logran forjarse un nombre en las grandes editoriales… aunque muchos más son los proyectos que se quedan en el olvido como consecuencia de una mala distribución, un tiraje limitado, falta de propuesta o simple mala suerte… en fin. Lo que todos los fanzines tienen en común es la búsqueda y creación de un espacio físico (cuando es impreso) o digital, para aquellos y aquellas que desean canalizar y exteriorizar sus ideas cuando las opciones son limitadas.

Algo que también me atrapa y realmente admiro de los fanzines es el aferre, ese rollo de: “ah, ¿no me vas a publicar?, ¿no te gusta lo que digo, ni mi trabajo, mi visión ni mi propuesta?, pues entonces me publico yo, cómo la ve”… algo así.

III Cambiando de tema: Sé que nadie preguntó, pero el asunto es que seguimos vivos (eso es digno de celebrar) y con un importante número de colaboradoras y colaboradores armados de textos y entrevistas, y claro, ya que estamos en eso (imposible no mencionarlo), celebramos también la llegada de Bere Equis al equipo de trabajo de este fanzine, quien desde ya y oficialmente es nuestra coeditora.

IV Es todo, fin del comunicado. Lean el fanzine y escriban: plan9bfanzine@gmail.com facebook.com/PlanNueveB

Preámbulo del

Chocho

Entrevista por Don Poyo CorE

Para las fracturas en el alma, la gastritis en el corazón, hasta para esos dolores casi asintomáticos, la propuesta del Chocho Maldito y su guitarra mordaz, arma de dos filos.

En su música está el norte de México y el sur de Estados Unidos, sazonado todo con una actitud punk casi nihilista rayando en lo culero pero negándose a llegar a lo mamón sin fundamento… mamón fundamentado, pues.

Trotamundo, nómada a ratos, pasaporte andante. Este tipo tiene algo que escupir de adentro pa fuera; lo quieras escuchar o no te atrapa en la melodía del sufrimiento reivindicado, de la soledad a medias, porque no hay un solo norte, un solo dolor, hay un chingo de chingos.

Puedes iniciar su presentación con una cerveza en la mano, pero es muy probable, y sin darte cuenta del proceso, que terminarás la última canción con media botella de tequila sobre la mesa. Me ha pasado.

Espíritu noctámbulo cantinero… a veces diurno, total, qué tanto es tantito y de algo nos tenemos que morir.

Vivió cerca de dos años en Hermosillo y tuve la suerte de escucharlo en vivo los últimos meses que pasó en la capital, meses en los que se mantuvo muy activo presentándose en varios municipios de Sonora, sobre todo en Hermosillo y Nogales. Y eso a mí qué, dirá alguno de ustedes. A lo que me refiero es que lo escuché un chingo de

veces y siento que me faltaron todavía dos tres.

Cuando este vato toca, elo gáver si llegaste solo al bar y no conoces a nadie, o si te dejaron plantado, te cancelaron a última hora o de plano vienes huyendo de algo o de alguien, el caso es que nada de eso importa porque estás escuchando al Chocho Maldito. [Pero si estás huyendo de alguien mejor sí vete, no te quedes mucho tiempo en el mismo lugar, no vaya a ser y ñacas.]

Plan 9 b presenta: [ una entrevista con ]

el Chocho Maldito y sus respuestas absurdas Qué andas haciendo… ¿estás componiendo, traes una banda o andas de llanero solitario?

Me perdí en Colima… aunque seguido me encuentro descomponiendo acordes y rimas. Armé un pagüer trío, pero nos juntamos solo cuando tenemos presentación en puerta. Soy muy afortunado de poder presumir que tengo buenos amigos musicales. En la batería está Juan Carlos Martínez (Guaymas) y en el bajo está Rafael Magaña (Colima).

Qué nos puedes decir de tu discografía, qué hace diferente a cada disco.

No sé… con todo y que los discos están enmarcados, a veces creo que van cambiando… o uno (aunque parezca imposible) cambia. Algunos discos son charolas de canciones que produje sin pensarlo mucho, fue hasta tiempo después que noté lo que me decía a mí mismo; otros son como una canción enorme con pequeños descansos o espacios donde hablo con otras voces. Algunos son más enojados, otros más melancólicos. Luego hay otros que derivan de la obra de alguien más, como La hora de la siesta, de Carolina Platt.

Cuando escucho tu música… tengo la idea que existe un orden en cada disco y debe escucharse de principio a fin para captar la esencia, ¿estoy en lo correcto?

Pregúntame en unos años.

Y qué fue del Chocho Maldito desde que dejó Sonora.

Primero fue el tour trailero que me llevó de raite de Nogales a Oaxaca. Luego fue la producción del De: Por & Para. Ahora me tomo el tiempo para componer Azul Borroso. Últimamente me he dedicado a estar, a vivir plenamente apreciando el aprendizaje. Di clases de música y talleres de composición, ahora estudio contra y piano.

¿Hay planes de regresar a Hermosillo?

Probablemente cuando salga Pavlovich, pero lo dudo.

Y a todo esto… qué te ofreció Hermosillo que te quedaste varios años.

Amor, fracturas, traición, facturas, ardor y contracturas.

Tu música te ha llevado a varios continentes, qué tal la experiencia, qué países visitaste.

Me he movido mucho. El último viaje fue hace un par de años a Francia y España. Fue mi primera vez en Europa. Ya había visitado y recorrido casi todo Asia… he estado en buena parte de Estados Unidos, algo de Canadá y del sur conozco Panamá y Costa Rica. Aún proceso la experiencia. La vida puede ser bella cuando se canta.

Hasta el momento has trabajado de manera independiente, ¿bajo qué términos estarías dispuesto a firmar con un sello discográfico?

Probablemente sobre un término de seis cifras, pero lo dudo.

Cómo te decidiste a subir tu música a Spotify.

Eso es gracias a mi compadre y productor, el señor Carlos Cárdenas, quien también fue productor ejecutivo en De: Por & Para. Se encarga de toda la onda cibernética, de los videos, de los discos en general y de que no me anestesie demasiado.

Qué tal la experiencia de entrarle a los videos musicales.

No me he animado a hacer un videoclip como tal, me refiero a actuar bajo dirección o siguiendo un guión. Las sesiones en vivo se sienten naturales. Es algo que hacemos seguido: tocamos, ensayamos o simplemente convivimos y alguien trae una cámara (seguido es Carlos).

Qué planes hay para lo que queda de este año.

Admirar los volcanes… terminar Azul Borroso. ¿Hay Chocho para rato?

Mientras haya rato, habrá Chocho.

Gracias por la entrevista, ¿algo que quieras agregar?

Gracias por la guayabera que me regalaste antes de salir huyendo de Sonora. Gracias por haber asistido a conciertos y por seguir con tu fanzine. Te abrazo desde acá, carnal.

HABLEMOS DE

HERETIC Entrevista por Don Poyo CorE

Antes del reboot de este zine, publicamos una charla con Beto, baterista de Heretic, pero en realidad hablamos mรกs de su participaciรณn en otras bandas, en otros proyectos: nos inclinamos en su historial musical y perspectiva personal. En esta ocasiรณn nos enfocaremos en Heretic, banda de Guadalajara que visitรณ la ciudad de Hermosillo en diciembre del 2014.

Por cierto, una buena noche de ruido, mucha cerveza y de bandas de nivel internacional, ya que también estuvo Chaoslace desde Brasil. Una buena noche, porque aunque no lo crean, a pesar de la adrenalina, incertidumbre, los pequeños ataques de pesimismo, la moneda en el aire y la gastritis, organizar tocadas de este calibre y complejidad es adictivo… En fin, una buena noche donde Heretic se llevó el cartel y el mayor número de nuevos seguidores. En pocas palabras, al final asistió bastante gente y la mayoría consideró a Heretic la mejor banda de la noche, sin demeritar el trabajo de los demás, claro.

Esta tocada originalmente la organizaría la banda hardcore El Grito, pero la fecha coincidió con la boda de uno de sus integrantes, por lo que nos pasaron el contacto a nosotros (Stress, banda en la que pego de gritos), y sin pensarla mucho nos aventamos y armamos la fecha. Yo en lo personal tenía años sin organizar una tocada, pero todos los estresados se pusieron las pilas y nos dividimos la chamba. También hubo gente que aun cuando no tuvo oportunidad de invertir en el evento nos echó la mano sin esperar nada a cambio, como Víctor Fontes (con el diseño del cartel y la publicidad).

Si gustas de la música extrema, Heretic es una excelente muestra de la calidad que el día de hoy tiene el metal mexicano, no solo en su composición y ejecución, sino también en lo que antes era el eterno Talón de Aquiles de las bandas en nuestro país: un buen estudio y un productor que supiera qué carajos estaba haciendo. Todo esto lo encuentras en su música (el paquete completo), lo que los ha llevado a pasar una prueba de fuego que pocas bandas pueden y aceptan enfrentar: ganarse al público metalero brasileño, uno de los más exigentes, críticos y experimentados en el tema. Pasemos a la entrevista.

Entrevista a HERETIC: extremos y blasfemos; ruido mexicano para exportar

¿Qué han estado haciendo desde su visita a Hermosillo en el 2014?

En 2015 salieron dos materiales de la banda: nuestro segundo disco llamado Cruz Vacuum (con nueve canciones) y un split colombo-mexicano llamado Hate and More Hate. Hemos seguido tocando a nivel nacional y seguimos componiendo nuevo material para sacar un EP y posteriormente un disco compacto también con nueve canciones. ¿Qué les pareció su presentación en Hermosillo, cómo se sintieron?

Nos gustó mucho, nos sentíamos cansados porque veníamos de tocar en Morelia y no dormimos, tuvimos un contratiempo… a los bateristas de Heretic y Chaoslace (Brasil) en el aeropuerto no nos dejaron pasar a tomar el vuelo a tiempo, tuvimos que hacer escalas y llegar más tarde, pero el ver amigos que no veíamos desde hace muchos años, la atención que nos dieron estando allá y sobre todo la respuesta de la gente que les gustó la brutalidad de nuestra propuesta, pensamos que valió mucho la pena estar en Hermosillo, ya que, sobre todo a mí, me gusta mucho la calidez de la gente y la comida.

Su visita a Sonora se debió a un tour con una banda brasileña, ¿qué tal la experiencia de esa gira por México con ellos?

Sí, fue el Brutal Mexico Tour, fue un tour con la banda Chaoslace de Sao Paulo y la experiencia fue buena porque aprendimos mucho: las visitas a otros estados, el conocer gente nueva y hacer amistades que siguen apoyando y compartiendo lo que hacemos. El tour empezó un jueves en Tepatitlán, Jalisco, donde nos sorprendió la cantidad de gente en el evento (aproximadamente 500 personas), después fue en Tepic, Nayarit, donde la calidad de las bandas que tocaron era muy buena y conocimos mucha gente que sigue en contacto con nosotros… las fechas en la Ciudad de México y Querétaro se cancelaron a última hora por problemas con los lugares de los eventos… las fechas siguientes fueron en La Barca, Jalisco, donde la gente es muy entregada y pocas veces hay oportunidad de ver una banda internacional de metal extremo; en Morelia fue muy grato ver un público en su mayoría mujeres, de ahí fue en Hermosillo y cerramos en Guadalajara donde fueron muchos amigos de bandas de la escena actual. El hablar otro idioma con nuestros amigos de Chaoslace no fue barrera para compartir escenario y buenas experiencias.

Y después de la gira por México -al siguiente año- emprendieron el vuelo a Brasil para hacer varios conciertos, ¿qué ciudades visitaron?

Fue el ZOMBIFICATION TOUR BRASIL… las ciudades que visitamos fueron: Santo Andre, donde nos recibieron con mucha aceptación… tocamos entre favelas, lo cual fue algo arriesgado, pero el evento fue muy bueno; también en Belo Horizonte, donde la gente es muy apasionada por el metal (en general todas las ciudades visitadas), sobre todo por ser la ciudad de donde salieron bandas representativas y pilares de la escena brasileña como Sarcofago y Sepultura… fue un festival con muchas bandas y todas de gran calidad; Mogi das Cruzes, una ciudad gustosa del metal extremo… ese evento lo organizó Zomor, que es una organización que apoya totalmente a las bandas de metal… allí conocimos y platicamos con Edu, vocalista actual de Lobotomía, quien después nos invitó a su estudio donde ensayan y graban bandas; Ciudad de Santos, donde organizó Luiz Carlos Louzada, vocalista de otra gran banda de antaño llamada Vulcano. Esa fecha fue en miércoles y pensaban que no iría mucha gente al evento, pero nos sorprendió ver el lugar lleno,

en su mayoría músicos de bandas locales muy buenas con quienes platicamos e intercambiamos material. Como anécdota: nos decían que solo habían visto los videos en youtube de Heretic y pensaban que no tocábamos así como en los videos, cuando terminamos de tocar quedaron sorprendidos y nos llegaron a decir que estamos en un nivel de brutalidad y calidad muy alto, lo cual nos animó mucho el escucharlo de músicos muy buenos de allá; Mogi Guazu, un lugar donde tocamos con bandas de otros géneros como hardcore y crust, ahí nos dimos cuenta de cuánto se apoyan las bandas independientemente del género… fue una experiencia muy agradable ver eso; Osasco fue otra ciudad pero esa fecha fue suspendida porque dos días antes hubo enfrentamiento entre la policía y personas de las favelas donde hubo muchos muertos y por seguridad de las bandas no se realizó… y por último Sao Jose dos Campos, donde cerramos el tour con muchas ganas de regresar, pues conocimos mucha gente que apoya la escena underground y eso les da fortaleza. En general una experiencia muy buena… hay muchos headbangers a la espera de nuestro regreso. ¿Alguna banda con la que hayan compartido escenario que los haya sorprendido en una de sus presentaciones en Brasil?

Muchas: Chaoslace, Blackning, Reffugo, Absyde, Temple of Chaos, Tumbero, Securitate, Hierarchical Punishment, Summersaco, Devouring Cadaveres, entre otras tantas que no recuerdo por el momento.

Cómo está la escena metalera en Guadalajara, qué bandas recomiendan escuchar de su tierra que se encuentren activas.

La escena actual es fuerte pero desunida. Hay muchos eventos de bandas extranjeras donde puede verse 30 personas y en otros lleno total… es muy extraño, pero hay muchas bandas en la escena que están proponiendo cosas muy buenas como Ab Intus, Iatrogenia, Naurum, Dios Perro, CFR, Shemhamforash, Mutilated, Serocs, Infective Symphony, Disturbio, Mirror of Lilith, Devorgam, Morbid Messiah, Human Trash, Antagönisten, Anapsique, Malastare, A Través de la Carne, Devorando el Instinto, Portrait of Ruin, Midian Dite, Non Mortis…

¿Planes de gira o de entrar al estudio próximamente?

Tenemos planes de regresar a Brasil y tal vez visitar Colombia (país en el cual salió el split)… estamos por entrar a grabar lo que será un EP… en 2016 salió el bajista Isaac, lo cual nos detuvo un poco. Tenemos cuatro canciones nuevas para el EP, en el cual se notará el nuevo rumbo de Heretic sin dejar de lado la brutalidad de la música extrema, esto ya con el nuevo bajista (Ray), quien se ha acoplado muy bien a la banda. Lo que les puedo adelantar del EP es que será masterizado en Brasil y el arte se realizará con un diseñador de Grecia… y tenemos planes de hacer un video que salga junto con el EP. Cómo se puede conseguir su música, una playera… ¿algo más que deseen agregar para cerrar la entrevista?

Pueden ponerse en contacto con cualquier integrante de la banda, ya que nuestro material lo manejamos de manera independiente, a la antigua o en facebook.com/hereticgrind/ … pueden contactarnos para adquirir nuestro material y próximamente estaremos subiendo nuestra música en algunas plataformas digitales para que las descarguen. Gracias a ti por la entrevista y por apoyar la escena underground del país… y a las personas que les gusta la música extrema échenle un vistazo a nuestros videos en vivo en youtube.

MONO – TONO 1 (tamal) Por Eltomeiro Jackson ...Tamal no quería despertar, le dolía la cabeza, pero igual lo despertaban y se dejaba despertar.

Caminar sin equilibrio y cuidarse de ser visto en esas condiciones eran su tortura. “¡Oye!, ¡ya es hora de que estés yéndote a la escuela!”: empezaba a oír en la oscuridad que aún le brindaban sus párpados por la mañana. “¡Ya voooy!”

Se queda sembrado en el piso cerca de su cama, sin erguirse y piensa: …tengo ganas de algo, ¿lo haré?,

¿me lo comeré?, ¿lo fumaré?, ¿lo admiraré?, ¿o sólo lo pensaré?, no sé, todo tiene sus consecuencias... chin, estoy mojado.

Unos dedos truenan repetida e histéricamente en su oído izquierdo para abrirle paso y tenderle alfombra roja a uno de esos gritos que le sacuden el cerebro hasta temblar como gelatina. “¡Despiértate yaaa!, ¿Qué no ves que llegas tarde?

Ni siquiera te has parado, bla, bla, bla…”

Los mismos dedos, ahora funcionando como garras, lo sacuden por el hombro: “¿me oísteee?, ¡Apúrateee!”

Tamal solo seguía el movimiento de esos labios tan ruidosos hasta que se detuvieron y entonces contestó: "Sí, ya voy."

Lo que sigue, sigue siendo lo mismo. Las costumbres se oxidan, unos las aceitan, les echan lubricante para evitar la fricción entre fetal y fetal. Los tamales pueden ser de elote, de carne, algunos otros hasta de dulce y se comen, nada más hay que quitarles las hojas y ahí están… ¡blanditos!

DIÁLOGOS DE UN UNIVERSO PARALELO Por Eduardo Madera Diálogo 84 -A veces me pregunto cuál es la razón de nuestra existencia colectiva e individual, nuestra trascendencia como especie en el mundo y en el universo.

-Tienes mucho tiempo libre.

-Eso debe ser.

Diálogo 27 -Voy a ser poeta.

-¿De lunes a viernes?

-Sí, pero medio tiempo… y solamente en el verano.

-Eso es amor al arte no chingaderas. ¿Barroco?

-He estado analizando varias propuestas nórdicas Siglo XVII. -Es usted un chingón.

-Lo sé, gracias por notarlo.

-¿Sobre unos tacos pa celebrar?

-Arre.

del

Diálogo 39 -Vivo una vida de pequeñas victorias en una telaraña de derrotas.

-Ya no sé si andas posmoderno o psicotrópico.

-Nihilista pop.

-Ambas… ¿verdad?

-Sí, ambas tres.

-¿A qué te refieres?

-Posmoderno, psicotrópico y nihilista pop. Ambas tres.

Mientras tanto, en el lugar de siempre…

Por Eduardo Madera “Por fin notaste que perdí la memoria, las llaves y el celular, pero en realidad eso es todo lo que sabes de mí.”

Santiago Calamastro

Treinta días en esta esquina y nada… estoy esperando, pero… ¿esperando qué?, ¿qué espero?, ¿qué es lo que me trajo a este lugar con tanta fe?

A más de uno y una he escuchado decir que es mejor dejar de esperar, que las cosas llegan solas y que uno con la espera solo las espanta. A mí eso me suena a esperar pero convenciéndote de que no lo haces… o sea, te haces pendejo Mejor sigo esperando, aun cuando no recuerdo qué espero… un momento… ¿no será que ya estoy convencido de esperar sin esperar, no será por eso que no recuerdo lo que se supone que espero? ¡Maldición! ¿Y si en realidad llegó o pasó por aquí y no lo noté porque no lo reconocí? Cáspita, creo que estoy convencido de esperar sin esperar… y creo que no funcionó. ¿Y ahora?

Nostalgia epistolar [una carta para A.] 15 de abril del 2007 Por Bere Equis Querida A.: Hay días que echo de menos tantas cosas… lo bien que se siente la libertad cuando el viento juega con mis cabellos en una calle sola (viejo obsequio de un amigo); aquella risa que hace doler la panza; el cielo color violeta en el invierno; los nombres de colectivos (un rosario de muchas cuentas);

los

desvelos

divertidos

y

completamente

despreocupados; las confidencias, las lágrimas derramadas, hasta las que fueron inservibles; la aventura de pasar hambre

y

otras

penurias,

pero

jamás

aburrirse;

la

camaradería entre lxs que están lejos y lxs de junto; el activismo comprometido con el corazón en sobresalto; el hardcore,

el

crust,

el

grindcore,

el

punk

de

aquellos

tiempos; la lucha por amarrar a los corazones de lxs demás a

asuntos

importantes

como

la

liberación

animal,

el

vegetarianismo y el veganismo; la travesía al puerto toda una fiesta, la vagancia, las canciones que inspiran amores rockeros

(jajajaja…),

los

conciertos,

tantas

tocadas,

muchas bandas que nos arrancaron una sonrisa… las caminatas eternas bajo ese sol que calcina… hoy por ti, mañana por mí; las latas de frijoles, el pan de barra y el galón de

jugo;

aquel

(también) divisiones

rojo

de

eclipse

noviembre;

absurdas.

de el

Quisiera

luna

de

una

sentimiento de

nuevo

noche

punkie sentarme

fría

y en

las un

sillón en el que apenas cabemos, pues somos muchxs y todxs compas

que

reímos

cobijados

por

la

noche

mirando

las

estrellas. Me hacen falta lxs compañerxs entrañables que hasta ahora puedo enumerar y son cuatro. ¿Recuerdas el desamor entendido como el fin del mundo y que ahora estoy segura nunca lo padecí?, pues atrás en la historia no existió ese candidato a la ilusión. En este gran baile en rueda tropecé con la felicidad en combo: amistad

inteligente,

cómplice

y

amor

correspondido

que

tiene un nombre y existe, por eso ahora por fin estoy tranquila, contenta, sin malviajes. Claro que también tú apareces en mi lista: extraño cuidar de ti en secreto, escucharte y compartir inquietudes de la lucha libertaria, tus cumpleaños y los felices no cumpleaños de ambas, tus tristezas (a veces crónicas), tu atrevimiento y a la vez tu habilidad para esconder el miedo.

Sé que ya no es posible resucitar toda esa magia: la escena se ha masificado y ya no queda nada del espíritu libertario en la gente que pretende vivir lo que nosotrxs y suplantarnos. nostalgia.

Entonces…

¿qué

sobrevive?

Ya

lo

dije:

la

, …

[Nota del editor] En la segunda mitad del 2017 la revista Noisey publicó un texto sobre un grupo de Hermosillo llamado Señor Kino, clasificándolos como una banda punk que estaba rompiendo paradigmas, afirmando también que antes de su generación no existió nada dentro del género en la región.

Y así, muchos y muchas despertamos al siguiente día con la sorpresa de que no existía una escena punk en Sonora, no antes de esta nueva generación, y que quizá Marti Macflai había viajado en el tiempo dándole matarile a algo así como 30 años de historia. Primero, el descontento viral fue hacia la revista y hacia quien firmaba el texto, pero no faltó quien volteara a ver a la banda preguntándose qué esperaban para desmentir tales afirmaciones… pero nada. Pasó suficiente tiempo para que la banda hiciera pública su opinión y solo atinaron a decir que habían sido mal interpretados por quien los entrevistó.

Más allá de sentirme ofendido o triste por la actitud de la revista y de los chavales al darle una patada en el culo a bandas, colectivos, bares, espacios y fanzines de la escena punk de Hermosillo, me cayó el veinte de que nadie escribe o lleva un registro sobre la escena, nadie habla de ella o reflexiona sobre ella, entonces cómo enojarse o culpar a las nuevas generaciones… pero bueno, inclusive entendiendo eso debo admitir que al inicio sí me caló, como a muchos y a muchas, y es que está gacho que cuando eres un sobreviviente de redadas, acoso policial y ausencia de espacios, digan que eso no pasó… en fin, lo que tenemos a continuación es el reporte y testimonio de Bere Equis, nuestra coeditora y corresponsal oficial (jamás oficialista) -porque a final de cuentas se vale no estar de acuerdo-, quien estuvo presente en el foro “La mentada escena Underground en Hermosillo”, organizado por la revista digital Crónica Sonora, todo a raíz de este mitote viral en Facebook. Pásele a lo barrido y saque sus propias conclusiones.

Fragmentos y reflexiones sobre la mesa redonda:

“La mentada escena Underground en Hermosillo” Por Bere Equis “Hoy me levanto con la noticia de que no hay punk en Sonora.”

Emerson [editor del fanzine El Existencial]

La escena como parte de un movimiento contracultural no nace de la nada. No se inventa de cero, aunque el artículo de la revista Noisey diga lo contrario. La escena no la forma una sola persona ni se edifica en un solo día, tampoco la crea una banda. Ningún movimiento contracultural surge de la nada. Los movimientos del presente y del pasado se relacionan, se tocan; lo que existe hoy es consecuencia de lo que hubo en otro tiempo, y de lo vigente sobrevendrán nuevas corrientes: “Existir no es un estar dado, sino que es un realizarse, un gestarse histórico” (Heidegger). Así, la evolución de la música llevó a la creación de subgéneros, corrientes y movimientos. Lo que sigue es un acto reflejo producto de algunos de los comentarios emitidos en el foro “La Mentada Escena Underground en Hermosillo”.

Preámbulo

EL FORO

Caía la noche sobre una tarde de noviembre extraordinariamente cálida.

Estábamos en la antesala de lo que pretendía ser un ejercicio para examinar y tratar una cuestión y, probablemente, testimoniar o escuchar un desfile de las razones y de los porqués.

Inicia el foro. Benjamín da la bienvenida mientras que alrededor se escucha el ruido de vasos vacíos de cristal. Se presenta como el editor de Crónica Sonora (revista digital) y justifica brevemente a raíz de qué surgió la idea de la mesa. Con cierto titubeo lanza las palabras: “Esperemos todo salga bien” y sonríe. Le cede el micrófono a una mujer de lentes que pocos reconocen. Pertenece a otra generación. Ella es Diana Coronado, con su camiseta blanca de Beavis and Buthead, serie de los noventa transmitida por MTV. Segura en la manera de coordinar sus movimientos, sus gestos. Su personalidad: parsimoniosa, tranquila, elocuente. Tendrá la tarea de moderar las participaciones en esta mesa.

Imaginaba quizá que sería como sacar el álbum de cromos coleccionables de bandas locales y que al desplegarlo y pasar sus páginas se entenderían muchas cosas.

Estamos a media luz en un pequeño restaurante del centro histórico de la ciudad… vaya, hasta los recintos cambian.

Antes la cita hubiera sido en la Universidad de Sonora en las escalinatas de Rectoría, la Facultad de Letras, de Economía, el Auditorio de Psicología, Comunicación, o en su defecto, el CUT o el Pluma Blanca. Muchos de los asistentes son muy jóvenes -con un look vintage- y permanecen en las afueras del lugar hasta que da comienzo el evento. Dentro, unos cuantos integrantes de la denominada vieja guardia, esperamos.

“Hemos vivido nuestra historia con la música de forma distinta, ya sea por diferentes aspectos… puede ser el generacional, el tecnológico, la condición socioeconómica, etcétera… pero siempre ha existido esa sensación de que nos falta un pasito para integrar lo que es la escena hermosillense”, dice Diana. Posteriormente presentó a quiénes la acompañaban en la mesa:

Víctor Manuel Sánchez (autor de “La mentada escena en Hermosillo”, texto publicado en Crónica Sonora), quien también toca con La Sonora Chakalera. Diana se equivoca e intercambia los nombres de las chicas que integran Señor Kino: Carolina Enríquez y Sofía León, aduce que acaba de conocerlas y menciona que es una banda que “está levantando polvo, se está moviendo mucho”. Cuando llega el turno de presentar a Emerson la moderadora pareciera hacer ver que este no necesita presentación. Diana dice: “él toca, (hace una larga pausa)… es músico. Ha formado parte de Todos Contra Todos allá por el 89-90. Tocó en Desiderata y en Sinosepia”.

La escena “¿Qué es para ustedes la escena en Hermosillo? Si no es mucho atrevimiento”, pregunta Diana.

Empieza, por sugerencia de Diana, Carolina (Señor Kino). Una chica de pelo lacio teñido de rubio con mechones rosas, tez blanca, labios oscuros y mirada decidida: “Para empezar soy una persona que tiene apenas 19 años, así que mi percepción

del contexto hermosillense no va a ser la misma de la que tienen el resto de las personas aquí… No sé, a mi corta edad a mí me tocaba saber que había eventos, por ejemplo, en La Sauceda… tributos, ¿no?... a Guns N´ Roses… La Coyota, varias bandas, pero no estaba muy enterada de qué otras cosas existían aquí por lo mismo de mi edad y porque yo no me movía dentro del medio, ¿no? Una vez que ya me interesé por la música… me empecé a relacionar con otros músicos o personas a quienes les interesaba el arte y la música en Hermosillo y me fui enterando de otras bandas que existían… no sé, como Gambo, Trance, Los Mudhowlers y ya. Entonces pensé que sería bueno participar, y conocí a… mmm… Karl, y en la secundaria empezamos a tocar juntos y así fue. Yo diría que la escena tiene muchísimo qué aportar, no existe esa rivalidad de la que tanto hablan entre los jóvenes y los que ya estaban antes en la escena, en realidad todos estamos del mismo lado y hay muchísimo talento aquí en Hermosillo y en Sonora. Solo falta que la gente lo voltee a ver, ¿no?”. Sigue un silencio más o menos largo y Diana dice: “¡Ea!”, aplaudiendo, y el público la secunda.

“¿Emer, qué ondas?”, increpa Diana. Él toma la palabra, franco, sin rodeos, adusto: “La mayoría de los de la vieja guardia me conocen. No voy a hacer presentaciones. Gracias por invitarme, gracias por considerarme.

Vengo en son de paz. Han querido hacer mucho pancho respecto de si va a haber fiesta o pelea. Quieren ver correr sangre, probablemente corra sangre pero va a correr para los dos lados, o sea, no hay que ser injustos. El movimiento en el que yo me mantengo ha sido el mismo por más o menos 25 o 30 años y no necesariamente tiene que ser el mismo que ellos atienden. Yo empecé a tocar a los 16, mi primera presentación fue como los 17. Nosotros tenemos nuestras historias de persecución, nosotros teníamos un rollo respecto al punk, específicamente a la música, pero era un movimiento cultural, éramos comunidad, andábamos en bola, organizábamos todas las cosas juntos, nos prestábamos instrumentos, lugares de ensayo, compartíamos música, los cassetes llegaban de Estados Unidos y sacábamos varias copias (de uno)… obviamente los tiempos han cambiado muchísimo, ahora la música se puede descargar por internet, hemos sido alcanzados por otros tiempos. Pedir que las cosas sean iguales es ilógico, también porque nosotros seguiríamos

tocando las rolas de Elvis Presley. Ha habido una migración y una evolución necesaria.

Y más o menos entiendo por qué no pudimos transmitir esa filosofía a las nuevas generaciones. Hubo una ruptura. Ellos se han tenido que formar a su propio ritmo, como nosotros al nuestro en aquella época. Nosotros teníamos una consigna. Sí, es muy importante señalar -su voz es enfática- que nosotros creíamos en otras cosas diferentes. En aquella época nos metíamos una chinga bastante complicada, bastante dolorosa, y creo que es lo que ha sido parte del revuelo del artículo, lo que ha dolido más, el hecho de que haya muchas bandas, tantos lugares para tocar, pero eso no se logró de a grapas. La policía te perseguía. Ahí sí, no había lugares.

Traigo formas de validar lo que estoy diciendo. Ahora el punk es un elemento puramente musical, lo cual yo adoro.

Pero el punk era una comunidad, creíamos en algo muy diferente.

Realmente, estoy un poquito confundido… se lo dije al Benji, yo no quisiera participar en esto, yo no le veo

forma a esto, pero si creen que puedo aportar y enriquecer las cosas hablando por los que mucho han hecho antes, puedo hablar. Invitaron a muchísima gente y no quisieron venir.

Me imagino que ellos piensan más o menos igual. No hay necesidad de defender algo que hicimos por 20 o 25 años. Eso se defiende solo. No pienso hacer polémica. Y como les digo, si va a haber rozaduras, va a ser para los dos lados. Espero que así se entienda.”

Muchos aplausos le siguen.

Carolina interviene: “Brevemente quisiera retomar lo que dijo mi compañero Emerson”. A lo que él interrumpe: “¿ya somos compañeros?”. Risa nerviosa de ella y Victor Manuel Sánchez contesta: “Sí, claro, tsss… ¿qué no?”.

El momento es incómodo.

Carolina continúa: “Decías que las bandas de antes pasaban por momentos muy difíciles en los que tenían que compartir instrumentos, espacios para ensayar, etcétera… eso no ha

cambiado, pues… no sé a qué te refieras con que ha cambiado la filosofía de los de antes y los de ahora.

No sé a qué te refieres con esa filosofía, pero pues dentro de lo que estamos haciendo nosotros, Señor Kino, y otras bandas… se trata de lo mismo, todos nos hemos apoyado: empezamos tocando en patios de amigos para amigos y luego pensamos que si podemos conseguir un poco de dinero con esto, con un cóver, podemos mejorar la calidad de nuestros shows; no teníamos instrumentos que estén en buen estado… para empezar tocábamos con un cajón peruano prestado de la Casa de la Cultura, entonces Karl tenía que tocar el cajón peruano prestado. Lo que dijimos de que no hay espacios, no es que no haya espacios, hay muchos espacios, pero la mayoría están dedicados a personas mayores de edad”.

Emerson toma de nuevo la palabra: “Nuestra gente dice no hay una escena local.

Esta es una lista de bares donde tocan bandas originales… 14 lugares… ni en el resto de los municipios más grandes tienen tanto lugar para tocar como aquí. Bares que tocan rock en su alineación, lugares públicos donde se organizan eventos que apoyan al rock

local, medios de difusión del rock, promotores… también existen.

Tenemos que tener mucho cuidado cuando decimos que no hay una escena y no hay apoyos. Debe haber un chingo de bandas para haber tantos lugares.

No es tan raquítico el asunto. ¿Cuántas bandas activas? Somos un chingo. Los line up de las tocadas en flyers o carteles lo constatan. Es muy delicado decir que no hay apoyos, que no hay lugares. El problema es que no son como a nosotros nos gustan… como nosotros queremos, somos muy chiquiones y muy llorones, es como si fuéramos chipilones: hey, a mí no me gusta eso, yo no voy a ir (…).

Hermosillo está súper fuerte, no solamente en el estado, sino en comparación con otras entidades. ¿Entonces hay o no hay un movimiento?, ¿por qué decir que no hay un movimiento?, ¿no hay un movimiento o no hay un movimiento como a mí me gusta o como yo me imagino que debería haber (…)? ¿No va la gente a las tocadas? Si

no fuera no se hicieran, no habría ese listado gigante de tocadas. Tengamos cuidado cuando digamos que Hermosillo es un pinche rancho… ¡ah!

(Emerson hace una pausa y revira), eso sí leí y dentro del artículo, eso sí lo veo bien culero, ya sea que lo hayan dicho ellas o quien lo escribió (…), ponen a Hermosillo como si nomás escucháramos a Paquita la del Barrio; la gente de fuera si lo lee, en Brasil, en Perú o Argentina -porque el internet tiene esa facilidad-, se me hace bien culero que nos estigmaticen.

El reportero, el editor, el autor del artículo tuvieron que tener cuidado de decir que solo se escucha música regional.

Nos están estigmatizando como que no hay un movimiento. Son casi treinta años que está cabrón resumirlos en cinco minutos. No es una falta de respeto a las nuevas generaciones, para nada, si lo dijeron es por algo, pero también es muy insultante para los que tenemos metiéndonos una chinga viernes tras viernes por años y que

digan no vale verga aquí, wey, vámonos todos a Monterrey. Es una línea de respeto, es lo que tenemos que buscar”.

Carolina comenta más tarde: “Mucha gente está peleada con la idea de cobrar cóver, cobrar por los discos, tener tu música en Spotify y que te paguen, no veo por qué… el músico también tiene horas de estudio, práctica, el dinero que sale de Señor Kino… no tengo por qué explicarle a nadie, porque no... como dijo… que se han sabido vender… tenemos la fortuna de que mi amigo Karl tiene hermanos que se dedican al marketing, a la fotografía, a la cinematografía, nos han hecho el paro muchas veces sin tener que pagarles un peso, que eso está muy mal, deberíamos, pero no tenemos dinero, son compas… cuando tenemos sí les pagamos pero está difícil. Tener una buena imagen te ayuda mucho para que la gente se acerque, tener un video musical te ayuda mucho”.

Reflexiones…

La intención de que el mensaje de cambio llegase a un mayor número de personas se frustró. El movimiento punk se transformó, pero no como a los fundadores les hubiera gustado.

Los movimientos contraculturales intentan no masificarse, pero al mismo tiempo, de algún modo, se vuelven sectarios, corriendo el riesgo de ya no ser subversivos, subterráneos. El sistema absorbe entonces lo que pretendía ser disruptivo y la filosofía, en este caso punk, se diluye entre emblemas que se convierten solo en signo de consumo vaciados de su contenido contestatario.

Ocurre, pues, en palabras de Freire, una invasión cultural, una penetración de los invasores en el contexto cultural de los invadidos, imponiendo su visión del mundo, en la medida misma en la que frenan su creatividad inhibiendo su expansión.

Rossana Reguillo nos indica que a principios de los noventa la mundialización de la cultura por vía de las industrias culturales, la expansión

de las tecnologías de la información, la exaltación del individualismo y el triunfo del discurso neoliberal, han significado para los jóvenes una afectación en su percepción de la política, su percepción del espacio y su percepción de futuro. Es por esto que ahora Señor Kino y otros tantos tienen una idea tergiversada del punk. En un sentido amplio se asumen punks, en dos artículos distintos para dos periodistas diferentes de la revista Noisey: Franzoni y Miserachi, y después resulta que se retractan. Se miente porque está en la naturaleza, igual que la búsqueda de la verdad. Se miente para autodefenderse. Como dice Coetzee: nuestras mentiras revelan tanto sobre nosotros como nuestras verdades… “nunca dijimos que somos punks, nunca dijimos que no hay escena, decimos que no hay lugares para tocar… pero para morritos”. Por otra parte, la adopción de una consigna como actitud cotidiana, sin duda, dio lugar a importantes cambios. Los protagonistas de antaño no solo se remitieron a ejecutar un estilo musical, sino que trataron de encontrar vías alternas de organizarse.

Muy a menudo la música va ligada a una forma de pensar. Los

movimientos subterráneos se significaron tratando de construir su identidad diferenciadora y marcaron su distancia del rock sin compromiso o rock corporativo (y la audiencia de esa música) que emprende fuertes acciones de comercialización y banalización de las expresiones juveniles marginales. En el movimiento punk en sus planteamientos figura el compromiso con la praxis, es decir, tiene frentes abiertos a través de los cuales intenta atar a los corazones de los demás aspectos como el vegetarianismo, el anarquismo, la liberación animal, la ocupación, una reacción contra el capitalismo, a favor del reciclaje, antifascismo, las ideas libertarias, la igualdad de género y su valor máximo: si puedes ser tú mismo puedes hacer cualquier cosa por ti mismo, cambiar cualquier cosa… poniéndoles nombre: autogestión y el HTM (hazlo tú mismo). ¿Cuáles son las razones que justifican la verdad de nuestras creencias? Para conocer algo, dice Luis Villoro en su Teoría del conocimiento, es preciso tener o haber tenido una experiencia personal y directa,

haber estado en contacto, estar “familiarizado” con ello. El conocer requiere del testimonio de quien conoce. ¿Cómo llegaste a conocerlo?

Experiencias personales. No hubo mejor forma de demostrarlo que remitirnos a la práctica. Emerson pudo distinguir lo esencial del movimiento punk. Relató los antecedentes que explican una experiencia determinada, presentó credenciales. La experiencia autoriza hablar de un tema y demostró con evidencia que la escena está completamente viva.

Toda creencia supone expectativas sobre la realidad. Estas se plantean a modo de conjeturas o hipótesis que la práctica puede comprobar o rechazar.

Toda creencia es motivada.

Para algunos adolescentes el mundo virtual es una extensión de la realidad ¿Acaso esto le ocurrió a Señor Kino en el caso de sus declaraciones vertidas en cuanto a la escena? El “yo online” puede adoptar una determinada identidad y no importa quién se ofenda con nuestras acciones, no lo vemos si no lo queremos ver.

A juicio de Pelbart vivimos un exceso de gregarismo que hace

indispensable revalorar la soledad y el silencio, aunque no necesariamente para escucharnos a nosotros mismos, sino como condición para escuchar a los otros y “lograr conexiones que el propio gregarismo impide”.

Leí por ahí que hoy se vive una especie de saturación en todos los sentidos: imágenes, palabras, sonidos, estímulos, excitación… hay una especie de movilización y de tiempo completo.

Este “turbocapitalismo” necesita de ello: rellenar los espacios mentales. No es gratuito, es un modo de control, de enchufe, de monitoreo y direccionamiento.

Hoy todo está hecho para la conexión absoluta y lo más saturada posible.

Ese modelo de conexión acaba redefiniendo la convivencia de las personas. Lo que sucede en esa saturación, en ese bombardeo generalizado, es que todo y nada son lo mismo. Se pierde así la capacidad de producción de sentido.

Con ese tsunami de información nadie es capaz de aprender, elaborar, digerir, seleccionar o incluso rechazar.

El silencio como una condición para escuchar a los otros, las otras voces de la historia, las diversas tribus que nos rodean. Creo que hoy existe un

exceso de gregarismo. Las ganas de estar juntos todo el tiempo con todo mundo, impiden las condiciones para oír al otro. Para mí la enseñanza de Nietzsche, con respecto al gregarismo, es totalmente válida. Él dice que el espíritu de rebaño es siempre el de la homogeneidad, el consenso, lo servil.

Por lo tanto, un cierto desarraigo de ese gregarismo es una condición para otra cosa, para cierta singularidad, un disenso, una diferencia. Y aunque fue un poco forzado por las circunstancias, en esta ocasión el diálogo sirvió para hacer autocrítica: la importancia de tomar las cosas con seriedad si se es parte de una banda; identificar necesidades para llegar a organizar tocadas de calidad, reeducarnos entre nosotros, identificar cuestiones como la todavía escasa participación femenina en la alineación de las bandas locales y la búsqueda de espacios para todas las edades dentro de la escena.

Resultó evidente que en una comunidad cultural hay razones que no resisten ante razones en contra, razones que invalidan la mía, sin embargo, todo saber está sujeto a rectificación.

Para Deleuze, nada ni nadie se sujeta en el tiempo, pues con nuestros

miles de hábitos, somos en nosotros mismos pura modificación. La realidad debe percibirse como un proceso, un constante devenir, no algo estático. Es por eso que la escena inevitablemente será intangible, aunque identitariamente definida por vínculos de solidaridad. Además, como dice un buen conocedor: la evolución del rock y sus géneros, como cualquier forma de cultura viva, nunca termina y quien reniega de ella se desfasa y crea prejuicios.

A lo largo del desarrollo de este encuentro en varias ocasiones se hizo alusión al temor de generar una polémica. Probablemente en el afán, en la insistencia de vernos como comunidad solidaria para no deslizarnos a un ambiente de agresión, pero cuando la pelea -en este y otros frenteses conseguir que seamos distintos entre nosotros, no hay nada de malo en disentir.

Señor Kino no está obligado a saber qué ocurrió previamente en la escena. Sus percepciones son una representación parcial de su entorno, moldeada por la cultura a la que pertenecen, el grupo en el que se está

inserto en la sociedad, la clase social.

No obstante, al hacer uso de la palabra para opinar sobre algo como banda, tienen cierta responsabilidad de lo que van a externar. No es tan sencillo deslindarse de una publicación con su rúbrica y ya. Además, no existió una réplica a la revista de parte de Señor Kino para aclarar lo ocurrido. En el foro ellos argumentaron que la periodista malinterpretó sus respuestas.

Hablando del periodismo digital, que fue la plataforma en la que se publicaron los sonados artículos. Se dice que este nunca debe dejar de ser lo que siempre fue (haciendo referencia al periodismo tradicional), debe apegarse a los hechos, no confundir opinión con información, respetar al otro, verificar y contrastar los datos (cosas que al parecer Miserachi no hizo), redactar con apego a las normas ortográficas, así como investigar a fondo. Estos son elementos fundamentales que antes y ahora siguen siendo las herramientas de todo buen periodista y del buen periodismo (digital o no). Por eso

cuando en una de las páginas más mainstream y con títulos abiertamente provocadores, se sostiene que no hay escena en Hermosillo y que los precursores del punk nacieron casi el mismo día en que llegó el punk a Sonora, encima que los pioneros del HTM son Sgt. Papers y que el punk es la palabra más asquerosa en la música, entonces “la desconfianza se vuelve una obligación moral”, como diría Caparrós.

Muchos salimos del foro pensando: las declaraciones de Sgt. Papers y Señor Kino publicadas en la revista Noisey, ¿habrán sido resultado de un exceso de orgullo que se vive en la etapa adolescente?, ¿altanería, como dijo Emerson?, ¿o acaso fuimos víctimas de una estrategia del marketing digital? Entonces… ¿El fin justifica los medios?

Qué se puede pensar de una periodista virtual con una declaración como la que a continuación cito: “…por eso he tenido la oportunidad de trabajar diferentes disciplinas sin ninguna limitación teórica ni práctica…”. Una periodista sin las credenciales suficientes para hablar de temas referentes a la música.

¿Los entrevistados, en el caso de Señor Kino, creían saber sin conocer?

Es bueno aceptar que desconocemos.

Juan Villoro lo dice bien clarito: “la sabiduría es estar consciente de lo que se ignora y de lo que se sabe y de lo que se sabe a medias”. Hay que tener la destreza de valorar lo que se desconoce. Aunque más información no es igual a más conciencia. Internet es una magnífica herramienta de encuentro y deliberación, pero no puede suplantar a la acción directa, al contacto humano.

Ante lo ocurrido es importante aclarar que buena parte de la comunidad no sucumbió a la envidia ni a las necedades que de forma estereotipada le adjudican a las personas que se van haciendo mayores. Hubo razones fundadas para algo que se tornó viral.

Considero urgente pensar en una especie de código de honor a la Chuck Norris, algo implícito, para quienes conformamos la escena, la nueva ola y la vieja guardia. Por ejemplo, nos vendría bien llevar a la práctica nociones como: "Daré tanto tiempo a

mejorar mi persona que no tendré tiempo de criticar a los demás"; "seré siempre tan entusiasta con los logros de otras personas como con los propios"; "mantendré una actitud de tolerancia hacia las personas que tienen un punto de vista diferente del mío, mientras todavía me mantengo firme respecto a lo que personalmente creo verdadero y honesto"; "si no tengo nada bueno que decir sobre una persona, no diré nada".

Señor Kino despreció la historia local, intentaron borrar, deliberadamente o no, el camino andado en la escena, camino que con mucho esfuerzo allanaron las generaciones anteriores sin recursos y enfrentando la cerrazón de la gente, de sus propias familias, la represión policiaca y otros obstáculos.

Con esto de ningún modo estoy afirmando que todo tiempo pasado fue mejor, porque sería una reaccionaria manera de pensar.

Al final simplemente insistimos en el deseo de construir una comunidad con nociones como el respeto, la honestidad, la unidad, la organización y solidaridad de quienes comparten la fascinación por la música sin importar el género.

Colaboran: El Tomeiro Jackson Bucanero de las ondas radiales de la FM en De Política y Rock and Roll Radio con un programa llamado Eclectomeiroland, que va más o menos por el número 200 mil. Esperamos siga colaborando con la Resistencia Editorial Interestelar, porque cada mujer, cada hombre, cada niño y niña cuentan en esta lucha. Los perros y los gatos también… no todos, pero sí bastantes… las abejas también… por lo de la miel y todo eso.

Eduardo Madera Sicario lúdico de la levedad misma del Ser inexistente. Director de cine fracasado, aunque prefiere el término incomprendido. Ahora busca reconocimiento y gloria en el ámbito literario, donde -dice él- las derrotas salen más baratas y los premios no se comparten con nadie.

Bere Equis Cananea 1977. Francotiradora cultural nivel 17: donde pone el ojo organiza el evento. Mamá punk. Pragmática fundamentada antagónica declarada del Facebook y sus “me gusta”. Ella lo sabe: estamos en la Mátrix.

Actualmente es parte del comando élite de asalto lúdico informativo: Contra Divisiones Absurdas Crew, donde ha completado tres misiones sin mayores contratiempos. Desde este número (y esperamos que por muchos más) es la coeditora oficial de Plan 9B. Un brindis por ello.

Don Poyo CorE Hermosillo 1977. Mutante clase b (según la información recopilada por Inteligencia). Gritante (jamás vocalista) de Stress. Anarquista metafísico y esdrújulo. Aferrado fanzinero por poco más de dos décadas. Es buscado en cinco distritos galácticos musicalmente eclécticos para ser interrogado por su relación con la guerrilla urbana ficcional Acción Mutante. También es el editor de este fanzine. La Policía Secreta Interdimensional lo ubicó en la frontera, en Nogales, Sonora, gracias a un informante.

Fotografía Todas las fotografías en este Colectivo Cadáver de Perro Muerto.

fanzine

son

una

colaboración

del

Ilustración Las ilustraciones y el diseño de Plan Nueve B están a cargo del Colectivo Tinta Bizarra.

La última nota del editor: Plan Nueve B no solo es un fanzine impreso, es también un ataque decibélico, un podcast que se transmitió por varios años en el portal de Libera Radio, así como una sección dentro de Audio Rock, programa que está al aire cada lunes en Radio Sonora (a partir de las 10 de la noche), invadiendo así el ciberespacio y las ondas hertzianas.

El asunto es que el reboot no solo tendrá repercusiones en la versión impresa, sino también en el podcast. Cambiaremos la estructura, residencia, contenidos, habrá nuevas secciones (aunque realmente creo que nunca tuvimos secciones). Antes solo era yo –y ocasionalmente algún invitado o invitada- divagando sobre música, arte, política (ja), contracultura y anexos. Fue divertido concretar el deporte de la divagación -y lo sigue siendo-, pero asumo que es cuestión de evolucionar, de guardar las charlas que se dejan llevar por la marea para los momentos etílicos amistosos, para las caguamas banqueteras con los y las compas.

No se trata de ponernos serios. Eso jamás nunca. La visión meramente periodística es un saco que nos queda grande y de un color que no nos favorece… Aunque está chilo. Digamos entonces que no se trata de dejar de decir disparates, sino expresar disparates con remitente y destinatario, sofismos fundamentados (a primera vista), de… bueno, ustedes entienden: no hablar por hablar.

Bien, creo que eso es todo… solo agregaré que si usted desea escuchar nuestro programa/podcast o descargarlo, vaya a la dirección virtual que aparece al final de esta página, donde también podrá escuchar otros proyectos decibélicos de diferentes géneros musicales. Terminé [al fin]. Se quedan con la escena después de los créditos.