Los confines a los que pertenecemos entre el refugio y la hostilidad
Podemos estar jugando a las cartas en el pasillo riĂŠndonos de no se que hablando de no se que encontrarnos fugazmente. Podemos tirar por la escalera a la vecina del 2do B y complotarnos para hacerle la vida imposible, por puro gusto nomĂĄs. ganarnos su odio
espero que nos ganemos otras cosas
Mientras planeamos las prĂłximas jugadas la tarde brilla a travĂŠs de la ventana violentamente rayada con un imponente 640 viv manda devolviendonos un poco de refugio entre tanta hostilidad.
Destinos del barrio sin nombre
A falta de vitamina D
10 am - 17 pm
Verรณnica Samban 2020