Diario Versión Final

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2 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras EDITORIAL

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quí está otro trabajo periodístico correspondiente a nuestro plan de Productos Exclusivos. Lo que leerán es un esfuerzo editorial del Diario VERSIÓN FINAL a través de su equipo de Investigaciones Periodísticas. Y como ya es costumbre, la temática es el reflejo de lo que se está hablando en la calle. Los Productos Exclusivos nacen de una noticia relevante. Son la profundización, análisis y explicación de esa noticia que impacta a miles de personas. En este caso abordamos el tema de las contratistas petroleras, sus hombres y sus historias. Quisimos entrar en esas profundidades porque la confiscación ha impactado a más de 100 mil personas. Tanto es así que la Costa Oriental del Lago está en miles de periódicos del mundo a causa de semejante suceso. Habría sido incomprensible para los lectores que hemos ganado en estos 11 meses de existencia como Diario investigativo habernos conformado con la noticia y las coberturas de las reacciones. Quienes siguen a VERSIÓN FINAL saben que ante los grandes acontecimientos brindaremos un material más profundo. Fue nuestro compromiso inaugural y lo mantenemos. Por eso, nos adentraremos en la verdad del caso. Y de entrada queremos advertir que rechazamos la tesis conforme a la cual las contratistas han sido fuerzas imperialistas expoliadoras. También nos oponemos a que se diga que ahí explotaban a los trabajadores y les escamoteaban sus derechos. Por más de 60 años se escri-

bió una historia diferente a las que nos quieren presentar. Aquí nadie vino a robarse nada. Ni nadie vino a ponerle la bota encima a ningún venezolano. Han sido seis décadas de trabajo, aprendizaje, crecimiento familiar, generación de riqueza, modernidad y prosperidad. Con las contratistas el Zulia salió del atraso. Quién podrá esconder, por ejemplo, el tesón y la sabiduría de un Vicente Scionti. Este italiano que tal vez ande ahora por los 80 años de edad le entregó Costa Bolívar a Bachaquero y todo el Zulia. Lo que la familia Scionti ha hecho por esta región es impagable. Nos enseñó técnicas, métodos, disciplina, responsabilidad y buenos ejemplos. Y como Costa Bolívar, muchas otras de similar importancia. Miles de hombres zulianos levantaron sus familias a partir del trabajo en las contratas. Sus hijos y nietos siguieron la senda de laboriosidad permanente. Eran tiempos felices de sueños y esperanzas. El trabajo petrolero nada tenía que ver con los políticos. Los votos se buscaban lejos de los taladros, balancines, muelles y diques. Por lo demás, las contratistas abarataron los costos de producción y liberaron de cargas al Estado venezolano. Eso lo saben los técnicos, los economistas y los planificadores. Por eso, hoy, cuando hemos rebasado los primeros 90 días de la confiscación, queremos dedicar este Producto Exclusivo a nuestros lectores de la Costa Oriental del Lago. Y cuenten con VERSIÓN FINAL. No los olvidaremos.

LOS MÁS EMBLEMÁTICOS FUNDADORES Estos son los pioneros de las contratistas de la Costa Oriental del Lago. Familias probas y trabajadoras, muchas provenientes de la Italia de posguerra, confiaron sus conocimientos y capitales en la consecución de nuevas ciudades. Se nacionalizaron y fundaron en Venezuela sus propia descendencia. EMPRESAS PROPIETARIOS Z&P ......................................Fausto Zaramella y Antonio Paván Confurca....................................... Adriano y Alberto Furlanetto De Ko .............................................................. Antonio Dechepki Vimeca........................................................Johandry Pinchirelly Flag Instalaciones ............................Antonio y Rudy Flamerich Cobsa...............................................................Ortelio Bartolucci Costa Bolívar Construcciones .......................... Vicente Scionti Convalsa .....................................................................Vasco Lutti Brupalca ..........................................Pietro Guglielmo Brucciani Hermanos Pietralunga.................................. Pedro Pietralunga

¡Sus hombres y sus historias!

Salimos del atraso y nos encaminamos a la modernidad

Las contratistas trajeron trabajo y prosperidad Es falso que las compañías extranjeras llegaran para robarnos el petróleo. Tampoco vinieron a pisarnos con supuestas botas imperiales como han querido argumentar. Al contrario, sacaron al Zulia del estancamiento. Y comenzamos a crecer como gran región en el país. Ernesto Ríos Blanco (Unica 2006) erios@versionfinal.com.ve

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l cumplirse los primeros 90 días de las confiscaciones, se han multiplicado los discursos en contra de las contratistas petroleras. En largas cadenas de radio y televisión, el Presidente Chávez sataniza a los propietarios de las 74 contratistas expropiadas y aprovecha para relatar una historia carente de veracidad. Es mentira que aquí llegaron unos gringos a pisarnos con sus botas imperiales o a despojarnos del petróleo. Tampoco se produjo un supuesto saqueo, como señala la propaganda socialista al justificar el despojo de la propiedad privada. La realidad está en boca de cronistas como Teodoro Zabala, quien a sus 66 años describe la historia tal como sucedió. Este hombre habla inglés, italiano y francés con un orgullo que le brota por los poros. “En estas tierras no había ni cincuenta vehículos”, comenta respecto a la Lagunillas de 1910. “En 1912 las empresas extranjeras llegaron con sus geólogos a la cuenca del Lago de Maracaibo. Se recuerda mucho la presencia de Caribbean Petroleum, Floyd C. Merrit y Garnet Joslin, quienes llegaron con sus conocimientos y sus técnicas al Zulia, Falcón, Trujillo y Mérida para iniciar el largo camino de la exploración”, reseña Zabala. Una mentira política Hoy cuando vemos el dolor de los obreros y sus familias, cuando observamos el cierre de la avenida Intercomunal, la muerte de comederos famosos, la extinción de los comisariatos, la decadencia de los campos petroleros y la ruina de lo que fue la zona más rica del país, es imprescindible señalar la verdad. Con las contratistas petroleras el estado venezolano redujo costos y se introdujo en la modernidad. Las contratistas enseñaron a los

zulianos y les transmitieron conocimientos de primer mundo. Gracias a esas empresas llegaron familias de Estados Unidos, España, Italia, Holanda, Inglaterra y otras naciones a mezclarse con los zulianos de la Costa Oriental del Lago, dando origen a pujantes comunidades. Mientras ello ocurría, nació la escuela de Petróleo de la Universidad del Zulia y entonces miles de pasantes aprovecharon las contratistas para entrenarse a plenitud mucho antes de adquirir el título de Ingenieros. Y jamás los zulianos catalogaron o sintieron como invasores a los extranjeros. Muy al contrario, el cariño fue mutuo. Se cuentan por miles los matrimonios de criollos con europeas y europeos con criollas. Pero sigamos con el recuento a cargo del cronista Zabala. 1914 y 1922 determinantes El cronista, apoyado en “Lagunillas y Ciudad Ojeda: Luces y Sombras”, texto histórico que ayudó a redactar, destacó dos fechas como las que marcaron el inicio de la vida petrolera en la región. “Zumaque 1 fue el primer pozo perforado en el cerro La Estrella en 1914, dando origen al campamento de Mene Grande. Para 1918 se reiniciaron perforaciones en los pozos R Nº 1 y el Barroso Nº 2 sin muchos resultados hasta el 14

EL HOMBRE NUEVO El cronista Lagunillense, Teodoro “Teo” Zabala encarnó la transformación social que trajeron las contratistas a los municipios de la COL. “Mejores escuelas, mayor tecnología, formación personal, disciplina, sentimiento de identidad y pertenencia, fueron los fundamentos aportados por estos empresarios a la comunidad. Eran personas que venían de Europa huyendo de la guerra, preparados, estudiados y capacitados. Eso lo transmitieron de generación en generación a quienes trabajamos con ellos. De allí salió el hombre nuevo en Venezuela: Técnico, ordenado, decente, estudiado, familiar y progresista”, subrayó.

de diciembre de 1922 cuando estalló el Barroso 2 demostrando el potencial y la riqueza en la zona”. Para 1913 ya estaba asentada en la región la Venezuelan Oil Concessions Limited que ejecutó las primeras perforaciones. Cuenta “Teo”, que para 1941 ya en Lagunillas vivían unas 19.391 personas, gracias al auge de la región petrolera. Nacen las contratistas Contrario a lo que aseguran hoy ciertas personalidades, la llegada de las contratistas, según el texto citado, se generó en medio de una medida presidencial que favoreció al pueblo palafítico de Lagunillas. “Vicencio Pérez Soto, entonces presidente del Zulia, se reunió con las compañías extranjeras, solicitándoles que indemnizaran a todos los habitantes de la zona para que pudieran reubicarse decentemente e incluso se paralizaron los taladros hasta no resolver la situación”, leyó el cronista. “En los años 50 hacen aparición las contratistas. Lago Petroleum Company fue de las pioneras en perforación. Schlumberger prestó sus primeros servicios a la extracción del crudo. la Brawn and Rooth, el varadero y atracadero de Terminales Maracaibo, la empresa contratista Zaramela y Pavan, (Z & P) que en el tiempo y con su indetenible avance se constituyó, además de una fuerza generadora de empleo, en columna de respaldo al camino de evolución urbanística de toda Lagunillas”, aseguró Zabala. “Otras empresas importantes en la zona de Las Morochas son: Loffland Brothers, Compeca, Cadeco, Hallibourton, Flags Instalaciones, Cobsa, Muelles y Servicios, Materiales Batista, etc. y otros pequeños comercios que engloban una importante potencialidad de movimiento económico y de empleo”, resaltó el investigador. Fueron más de 70 las empresas que hasta hace poco mantuvieron viva la economía en la COL.


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Contratistas Petroleras

1912

La Caribbean Petroleum envía exploradores al Zulia para ubicar yacimientos.

La “nueva batalla en el Lago de Maracaibo” fue su grito de guerra

REACCIONES

La cruzada de Chávez contra las contratistas petroleras RICARDO ORTEGA

La Ley Orgánica que reserva al Estado los bienes y servicios de las actividades primarias de hidrocarburos, fue el instrumento del Gobierno para emprender la expropiación. Carlos Moreno (LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

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ara principios del mes de mayo pasado, los planes en el despacho presidencial estaban configurados, vendría una etapa de expropiaciones a privados. El siguiente paso del Gobierno nacional iría ésta vez por el control de las empresas contratistas que prestaban servicios para la explotación petrolera. La primera campaña se desplegaría paradójicamente en el Lago de Maracaibo, dos meses después que, desde la administración central, se decidiera también despojar de competencias al estado Zulia sobre los puertos, aeropuertos y carreteras de la región, con la reforma a la Ley Orgánica de Descentralización, Delimitación y Transferencias de Competencias del Poder Público. El presidente Hugo Chávez habría anunciado con antelación su determinación de “acelerar” el proceso al socialismo, y con seguridad en tal concepción no entrarían la tenencia privada de alguna parte de Petróleos de Venezuela (PDVSA). El martes 5 de mayo, el mandatario nacional presentaba al país la propuesta que retumbaría las bases del sector petrolero. Hablaba de la posibilidad cierta de “expropiar” las empresas contratistas que le trabajaban a la estatal de crudo. Las directrices del Presidente ya se ejecutaban a pasos acelerados en la Asamblea Nacional con el dise-

ño de la Ley Orgánica que reserva al Estado los bienes y servicios conexos con las actividades primarias de hidrocarburos. Firma presidencial En horas de la tarde del jueves 7 de mayo, el Jefe de Estado, en cadena nacional de radio y televisión, promulgaba la nueva ley. Diputados del oficialismo celebraban el hecho. Hugo Chávez afirmaba que se le había dado celeridad a la norma con una Gaceta Oficial en número extraordinario. Los empresarios y trabajadores en la Costa Oriental del Lago entraban así en un estado de incertidumbre y tensión. El discurso presidencial no dejaba dudas en que la toma de las contratistas estaría basada en la lucha de clases, la revolución que recuperaba espacios para los pobres. Los dueños reconocían en las palabras del Presidente que sus propiedades no serían indemnizadas, al menos no en corto plazo. (hasta el momento ninguna). “Esos miles de trabajadores que estaban siendo explotados por los dueños de lanchas, las terminales y los diques serán liberados. Vamos a desarrollar una nueva batalla naval liberadora en el Lago de Maracaibo y estos son los pasos de la revolución en la construcción del socialismo”, dijo el presidente Chávez, un día antes de la toma de las empresas en la COL. La contratistas, para el manda-

El presidente Chávez dijo que las expropiaciones eran otro pasó en la construcción del socialismo. La medida dejó sin empleo a 108 mil personas.

tario, no eran más que un “modelo de intermediarios” que utilizaba la “burguesía nacional” para apropiarse de una parte del ingreso petrolero. Según el propio Jefe de Estado, se ahorraría unos 700 millones de dólares al año luego de las expropiaciones. La primera medida contra las empresas instaladas en las Costa Oriental del Lago se concretaría en la madrugada del viernes 8 de mayo. La Guardia Nacional, el Ejército y funcionarios de la Reserva llegarían al toque de diana a las compa-

ñías contratistas en una operación masiva para ejecutar la toma decretada en ley, una noche antes. En el primer paso, el Gobierno había anunciado la expropiación de 34 empresas y con ellas: 300 lanchas, 30 remolcadores, 30 gabarras, 39 terminales y muelles, 61 lanchas de buzos y 5 diques astilleros. Impacto social La decisión contra las empresas contratistas traería consigo de inmediato una debacle obrera de las que el Gobierno nacional dijo manejar números precisos, al menos en la primera avanzada, 8 mil 56 tra-

Extractos de la Ley decretada para las expropiaciones de las contratistas Ley Orgánica que reserva al Estado bienes y servicios conexos a las actividades primarias de Hidrocarburos. Artículo 2 Alcance de la reserva Quedan reservados al Estado los bienes y servicios conexos a la realización de las actividades primarias previstas en la Ley Orgánica de Hidrocarburos, que anteriormente eran realizadas directamente por Petróleos de Venezuela, S.A., (PDVSA) y sus filiales, y que fueron tercerizadas, siendo esenciales para el desarrollo de sus actividades. Los bienes y servicios a los que se refiere el presente artículo son: 1. De inyección de agua, de vapor o de gas, que permitan incrementar la energía de los yacimientos y mejorar el factor de recobro.

1913

La Venezuelan Oil Concessions (VOC) se establece en Zulia.

2. De compresión de gas. 3. Los vinculados a las actividades en el Lago de Maracaibo. Artículo 6 Expropiación El Ejecutivo Nacional, podrá decretar la expropiación, total o parcial de las acciones o bienes de las empresas que realizan los servicios referidos en los artículos que anteceden, de conformidad con lo previsto en la Ley de Expropiación por Causa de Utilidad Pública o Social. El ente expropiante será Petróleos de Venezuela S.A., (PDVSA) o la filial que ésta designe.

El Consejo Legislativo del Estado Zulia (CLEZ) se activó sin demoras ante las expropiaciones en la Costa Oriental del Lago, la mayoría de los diputados solicitaron a la AN la “nulidad” de la Ley Orgánica que reserva al Estado los bienes y servicios de las actividades de hidrocarburos. Trabajadores y empresarios se reunieron en el sector Las Morochas para hacer el exhorto y además denunciar los graves impactos que trajo consigo la medida del Gobierno nacional. Igualmente el Movimiento 2D y demás sectores intelectuales de la región se concentraron en la COL para decretar la creación de un frente nacional por los obreros petroleros afectados con las expropiaciones. Las autoridades electas de Lagunillas denunciaban de plano las deudas de PDVSA con el municipio. Edwin Pirela, alcalde, manifestaba su preocupación “del desastre económico” producido por la nefasta ley. La estatal debía para el momento un total de 45 millones de bolívares fuertes al ayuntamiento por razón de impuestos por explotación. bajadores directos de las compañías tomadas recibían los embates de la expropiación, aunque Rafael Ramírez, ministro de Energía y Petróleo, y presidente de PDVSA aseguraba con firmeza que todos serían ahora absorbidos por la estatal venezolana. La promesa aún, tres meses después, la sigue esperando alrededor de 5 mil 500 trabajadores que no han recibido su ficha blanca. Lo cierto es que los primeros números no serían tan certeros. Si lógicamente las expropiaciones dejaban a 8 mil trabajadores por ingresar a PDVSA, el Gobierno nacional no hacía mención a los gruesos grupos que prestaban igualmente servicios a las contratistas, ni mucho menos a las familias que por años establecieron microempresas que se favorecían del tránsito de los petroleros a sus muelles, (pequeños restaurantes, locales de comida rápida y refresquerías), los cálculos presentados por la Asociación de Comerciantes e Industriales de Lagunillas (Acil) afirmaban que el total alcanzaba las 108 mil personas desempleadas. El calvario apenas había comenzado. Las promesas del Gobierno no se concretaban. La revolución atentaba sin obstáculos contra la empresa privada y la misma clase obrera.


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Contratistas Petroleras

¡Sus hombres y sus historias!

Hace 90 días se acabó la inversión privada en el Lago de Maracaibo

Aquí está el parque expropiado por Chávez a las contratistas El 8 de mayo pasado, durante la toma militar de los muelles levantados por las compañías, también se asumió el control de todos los equipos de exploración y explotación petrolera pertenecientes al patrimonio de las empresas expropiadas. Aún la estatal venezolana no paga los mil millonarios montos por este parque de máquinas. Denuncian “robos”.

Autogrúas y grúas fijas Pese a que no estaban contempladas en los documentos de la Gaceta Oficial número 39.174 con que se decretó la expropiación, las grúas estacionadas dentro de las instalaciones de las compañías controladas, también pasaron a manos del Estado. Las grúas son utilizadas para mover cargas pesadas en tierra, como una unidad de elevación operada para distribuir cargas suspendidas por un gancho. Las autogrúas, (gráfica) tienen la capacidad de movilizarse en un espacio determinado. Cada una varía en precio según su capacidad. Los estimados están entre 3 mil 500 dólares por tonelada de capacidad, es decir, una grúa capaz de alzar 50 toneladas costaría un promedio de 175 mil dólares.

Carlos Moreno (LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

Gabarras Embarcaciones de suelo plano, especialmente construidas para el transporte de carga pesada. En su mayoría deben ser desplazadas por botes remolcadores dado su gran tamaño. Su utilización en la explotación petrolera es de suma necesidad. En ellas se embarcan, como se muestra en la gráfica, cabrias en donde reposan taladros de perforación para la exploración petrolera en el Lago de Maracaibo. La embarcación es capaz de cargar con pesos entre 300 (t) y 5000 (t). Tan sólo con el anuncio presidencial, unas 30 gabarras de contratistas pasaron a la administración de PDVSA. Sus precios van desde 120 mil dólares americanos hasta 1 millón de dólares, cada una.

Lanchas de buceo

Las lanchas de buceo, a diferencia de las de transporte, poseen en su área de carga, los equipos de buceo completos. Bombas de oxigeno y mangueras como parte de un sistema integrado con los motores de la embarcación. Cada una de las lanchas con sistema integrado cuesta entre 120 y 130 mil dólares, dependiendo de la conservación del equipo. Son unidades de primera necesidad.

Remolcador Bote especialmente diseñado para halar o tirar de embarcaciones más grandes, comúnmente las gabarras que operan en el Lago de Maracaibo. Poseen motores de 900 HP y 2500 HP. Sus precios son de 350 mil a 600 mil dólares. FOTOS: RICARDO ORTEGA


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Contratistas Petroleras

1914

Zumaque 1, primer pozo perforado. Dio origen al campo Mene Grande.

1918

Perforaciones en el R1 y el Barroso Nº2. No hubo resultados.

Sistemas de suministro de combustible

Los tanques que antes eran propiedad de las contratistas están también por el momento bajo el control de PDVSA. Estas estructuras no están reseñadas en los decretos de expropiación, pero han entrado por igual en el paquete del Gobierno. Allí se almacena a diario el combustible utilizado en las lanchas y demás embarcaciones que viajan al Lago a ejecutar operaciones para la explotación petrolera. El precio de todo el sistema es de al menos 300 mil dólares.

Diques astilleros Unos cinco diques astilleros que antes pertenecieron a las contratistas del Lago de Maracaibo, están bajo la administración de PDVSA. Las estructuras son concebidas como una fosa donde se ejecutan los trabajos de reparación y reacondicionamiento de grandes embarcaciones como las gabarras. Constan de unas compuertas hidráulicas para dar la entrada de agua a las fosas y arrastrar la embarcación a reparar. El costo de su construcción aproximado es de 3 millones de dólares.

Lanchas de transporte de marinos Con el primer decreto al menos unas 300 lanchas de transporte fueron expropiadas. Las embarcaciones, construidas especialmente para el traslado de personal, suelen ser usadas para llevar a los marinos y trabajadores de las gabarras desde tierra a alta mar. Están equipadas con una cabina cubierta para dar protección a los navegantes y varios asientos para el confort de los petroleros. Al fondo poseen una plancha larga para las cargas de rigor. Sus precios oscilan entre 90 mil y 100 mil dólares.

Plataformas Jackup Es un tipo de plataformas móviles que tienen la capacidad de estabilizarse con firmeza en las aguas. Consta de tres patas que se entierran en el lecho marino para conseguir equilibrio. La plataforma, suspendida entre las patas, puede subir o bajar gracias a poderosos sistemas hidráulicos dependiendo de los requerimientos de los trabajos a ejecutar. Se suele usar en aguas tranquilas hasta 120 metros de profundidad. Especial para la explotación petrolera y de gas natural. El costo aproximado de la expuesta en la gráfica puede alcanzar el millón y medio de dólares en Venezuela.

Muelles La gran diatriba sobre la propiedad de los muelles sigue en pie. PDVSA asegura que son del Estado, mientras que los dueños de contratistas afirman que fueron construidos por ellos, por lo que se deben reconocer las bienhechurías a los terrenos propiedad de la nación, o al menos esa es su exigencia. Con el decreto presidencial, unos 39 muelles pasaron a PDVSA, más los que se sumaron con la resolución del Ministerio de Energía que expropió 35 empresas más. Los muelles son obras a las orillas del Lago, construidas en concreto y que funcionan como atracaderos de barcos, lanchas y gabarras para ejecutar operaciones de carga y descarga. El metro lineal de construcción de muelle, con calados de 12 pies, está calculado por el momento en 7 mil dólares.


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Contratistas Petroleras

¡Sus hombres y sus historias!

Las expropiaciones se dieron en dos avanzadas en la Costa Oriental del Lago

Dos decretos fulminaron a 74 empresas privadas El siete de mayo salía preparado y listo el decreto para la estatización de las primeras 39 compañías contratistas que operaban en la COL para prestar servicios a Petróleos de Venezuela S.A. Rafael Ramírez sería el principal designado para concretar el mandato presidencial. El Gobierno nacional aseguró que con las medidas el Estado se ahorraría al menos 700 millones de dólares.

Carlos Moreno (LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

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n Gaceta Oficial número 39.174 del 8 de mayo pasado se decretaba la expropiación inmediata de las contratistas instaladas en la COL. En la madrugada del mismo día, la Guardia Nacional y el Ejército tomaban las sedes de las primeras 39 empresas. El argumento del oficialismo era que tales compañías no eran más que grupos oligarcas desangrando a PDVSA como aseguró el presidente Chávez. Afirmaban que el Estado se ahorraría ahora unos 700 millones de dólares por la prestación de servicios. Ya para el 19 de mayo, la resolución Nº 39.181 del despacho de Rafael Ramírez, ministro de Energía y Petróleo, determinaba la toma de otras 34 empresas. El Gobierno prometía absorber la nómina de los trabajadores afectados, serían más de 8 mil obreros en su totalidad. Aún los conflictos por la entrada de trabajadores a PDVSA persisten.

Lista de Contratistas petroleras expropiadas Gaceta Oficial 39.174 1) A&F Marine Center, C.A. 2) American Launch Compañía Anónima 3) Astilleros de Venezuela, Compañía Anónima (ASTIVENCA) 4) Zulia Towing And Barge Company, C.A. 5) COB, S.A. 6) Consorcio Kappalan Idustry, INC. And Gulmar Offshore Middle East, LL 7) Construcciones y Soldaduras Piña, C.A. (CONSOPCA) 8) Construcciones, Reparaciones y Acondicionamientos Flotantes, S.A. (CRAF, S.A.) 9) Constructora CAMSA 10) Constructora Leónidas, C.A. (COLCA) 11) Costa Bolívar Construcciones, C.A. (CBC) 12) De-Ko Construcciones Electro Industriales, C.A. (De-Ko, C.A.) 13) Ehcopeck 14) Gutiérrez Escalona, C.A. (GUTESCA) 15) Hermanos Pappagallo, S.A. (HERPA, S.A.) 16) Interlago Transport 17) J & R Construcciones y Servicios, Compañía Anónima 18) Linea, S.A. (LISA) 20) Montajes de Occidente C.A. (MONTACA) 21) Náutica Petrolera, C.A. (NAUTIPETROL, C.A.)

22) Naviera de Occidente C.A (N.A.O. C.A.) 23) PG Construcciones, Compañía Anónima 24) Precisión Mecánica C.A. (PREMECA) 25) PRO-TEC International, C.A. (P.T.I.C.A.) 26) Rodan Marine, C.A. J 27) S&B Terramarine Services C.A. 28) SEA Tech de Venezuela, C.A. (SEATECH) 29) Zaramella & Pavan Construction Company, S.A. (Z&P) 30) Terminales Maracaibo 31) Tidewater Marine Service, C.A. (SEMARCA) 32) Transporte Acuático, C.A. (TACA) 33) Transporte y Construcciones Marítimas, C.A. (TRICOMAR) 34) Transportes Marinos de Occidente, C.A. (TMO) 35) Tridente Marine Service, C.A. (TRIMARCA) 36) Tunas Constructions & Corporations Compañía Anónima (TUNAS) 37) Venezolana de Inversiones y Construcciones Clerico 38) Venezuela Divers Mantenimiento y Servicios, C.A. J 39) Venezuelan Netherland Field Contractors, Sociedad Anónima (VENEFCO)

Estatizadas con la resolución 39.181 del Ministerio de Energía 2) Aqua Services, C.A.

20) Servicios Metal Mecánicos Zulia, C.A (SERMEZUCA)

3) Brucciani & Paltrinieri, C.A. (BRUPALCA)

21) Servicios Múltiples del Zulia, C.A. (SERZUCA)

4) Caraballo Servicios, C.A. (CARSECA)

22) Servicios Ingeniería Petrolera, C.A (SEINPET)

5) Construcciones Cardozo Villasmil, C.A. (CONSCARVI)

23) Suministros Tamare, C.A (SUTACA)

6) Construcciones y Servicios Altariva, C.A. (CONSERALCA)

24) Supply Diving de Venezuela, C.A. (SUDIVENCA)

7) Construcciones Vasco Luti, Sociedad Anónima (CONVALSA)

25) Tecnología Acuática de Venezuela, C.A (TECNAVENCA)

8) Constructora Hermanos Furlanetto, C.A (CONFURCA)

26) Terminales del Lago, C.A.

9) Flag Instalaciones, S.A.

28) Transemilca

10) Folchi Marítimo, C.A (FOMARCA)

29) Transerman, S.A.

1) Alloys, C.A. J

11) Ingeniería de Proyectos y Obras IPOCA, C.A (IPOCA) 12) Inversiones Ojeda, C.A. 13) Lanchas Zulianas, C.A.

27) Terminales Las Morochas

30) Transporte Andara, C.A (TRANSAND) 31) Transporte Marítimo Venezolano, C.A (TRANSMARVE)

14) Muelles y Servicios, S.A J

32) Transporte Salas Marítimo, C.A Anónima (TRANSALMARCA)

15) Naviera Unidad de Transporte Industrial, C.A. (NÁUTICA)

33) Venezuela Marítimos, C.A. (VENMACA)

16) Polux Servicios, Sociedad Anónima

34) Vensea Marine, Sociedad de Responsabilidad Limitada

17) Rendimiento Náutico Petrolero Industrial, C.A.

35) Wood Group Engineering LTD, Venezolana de Proyectos Integrados, Production Operators Cayman, Inc. y Constructora Camsa, C.A. las cuales conforman el Consorcio SIMCO

18) Servicios de Protección Catódica, C. A. (SEPROCA) 19) Servicios Generales de Astilleros, C.A (S.G.A.)


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Contratistas Petroleras El empresario piensa en emigrar de la Costa Oriental, más no de Venezuela. Fueron cuarenta años de servicios que ahora ve lanzados por un risco.

1922

Ramón Nazariego, propietario de la empresa Brupalca, contó su historia

“El Gobierno condenó a la COL a ser un pueblo fantasma” LUIS TORRES

Carlos Moreno

LA CRISIS

(LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

Sin jueces que los defendieran

R

amón Nazariego se presenta como un hombre sencillo y abierto a la charla, es uno de los empresarios a los que PDVSA y el Gobierno nacional ordenó expropiarle la empresa, una medida que sólo consigue calificar como “el asalto de un Estado forajido”. Su historia radica precisamente en la Costa Oriental, en Lagunillas, allí nació en 1950 y creció, un lugar donde también probó uno de los sinsabores más duros que le ha impuesto la vida. Cuarenta años de trabajo que ahora ve lanzados por un risco, y la muy posible desintegración de una familia que planea emigrar. Ramón Nazariego estudió Contaduría Pública en la Universidad del Zulia. Aquel hombre nacido en una comunidad palafítica, (Pueblo Viejo de Agua), pronto comenzaría a integrarse a la empresa petrolera en un cargo bastante básico, auxiliar de contaduría, tenía apenas 19 años de edad cuando ingresó a la oficinas de Zampieri y Fortunato SRL (Zanfor). Pero los periplos de la profesión y su visión futura lo llevarían temprano a sobresalir y a conseguir una oportunidad en la contratista Bruchiani y Paltrinieri, una compañía especializada en reparación, pintura y mantenimiento de campos petroleros, fundada con un capital de 25 mil bolívares, en el mismo año de su nacimiento, por dos inmigrantes italianos que huían de los desastres de una II Guerra Mundial. Allí daría el gran salto. Su ascenso fue consensuado entre los dueños de la empresa, la facilidad de Nazariego para la administración del patrimonio de aquella familia extranjera le había allanado el camino para ocupar los cargos más representativos de la organización. En subida De auxiliar de contador, pasó a a ser contador, jefe de relaciones laborales, comisario principal de la empresa, director gerente, vicepresidente de la Junta Directiva, y posteriormente presidente de la

Reventón del Barroso 2. Se demuestra el potencial petrolero de la región.

Ramón Nazariego, accionista de Brupalca, tuvo contactos con los dueños fundadores de las familias Brucciani y Paltrinieri. Estos le recomendaron no enfrentarse a un régimen como el de Chávez. “Ya conocemos este tipo de gobiernos”, dijo Loyd Brucciani.

COL AL OLVIDO “El propio Gobierno conoce que no fueron ocho mil los trabajadores afectados, ellos saben que esa cifra es mínima. Aquí en la Costa Oriental, las expropiaciones están acabando con todos los pueblos, desde el carrito porpuesto, hasta las clínicas, levantadas muchas por inversiones de contratistas, se vinieron a menos. Lagunillas es una ciudad donde a diario hay protestas. El Gobierno condenó a las familias de la COL a dejar su tierra y a que se convirtiera en un pueblo fantasma”, dijo Nazariego. Para el empresario, los embates de las expropiaciones, apenas comienzan a sentirse. Junta Directiva, cargo que representó hasta el 8 de mayo pasado cuando militares y gerentes de PDVSA ejecutaron la expropiación de la compañía. Los fundadores de la empresa le abrirían además una oportunidad al venezolano de participar

activamente como propietario. Nazariego no desaprovecharía el momento e invertiría el capital reunido en años de labor para adquirir el 10 por ciento de las acciones de (Brupalca), ahora pasaba ser propietario. “Estaba convencido en fundar allí un futuro sólido para mi familia”, afirma. Y precisamente así lo hizo, sus dos hijas crecieron y se formaron en la empresa de la que ahora su padre era uno de los sólidos timones. También su hijo varón, haría lo propio. El trabajo de la familia y la inversión de Nazariego en acciones representaba para sí la estabilidad de su hogar. “Pienso en mis planes y los de la familia y no logro asimilar como una corporación como PDVSA, antes respetada en el mundo, se convirtió en una organización forajida, en firme apoyo a un Gobierno que violó la Constitución y el derecho a la propiedad privada”. Brupalca había dejado de trabajar directamente para PDVSA luego del paro petrolero. La estatal, según Nazariego, levantó un muro a las contratistas y sólo “ad-

judicaba” contratos “a dedo”. De 2003 hasta 2009 se enfocaría entonces a prestar servicios a las cooperativas que asumían los contratos de PDVSA. “Era un sistema en el que no podíamos participar”. Pero todo terminaría en catástrofe a principios de mayo pasado. Inminente emigración A Ramón Nazariego y su familia no ha quedado más que planear un futuro en suelo endeble. Su patrimonio por el que trabajaron por cuarenta años, él y su generación, más los 400 trabajadores directos de la compañía, pisan arenas movedizas. “Mi familia y yo estamos pensando en irnos de la Costa Oriental a otro estado, ya no podemos seguir participando como petroleros, estamos vetados. Es difícil pensar que todo se ha ido, y que esa empresa que representaba la unión de todos desapareció. No puedo estar tranquilo porque ahora en mi familia, cada hijo buscará su cauce en otra región, muy seguramente terminaremos desintegrándonos, cosa que jamás pensamos”, dijo el empresario.

El día 8 de mayo pasado, Ramón Nazariego recibía la llamada del vigilante de Brupalca, era la 1:00 de la mañana. Militares y funcionarios de PDVSA estaban ya dentro de las instalaciones y exigían su presencia. Su esposa había sido hospitalizada producto de una crisis emocional al saber la noticia de la expropiación de la empresa en la que su esposo y sus hijos habían enfocado el trabajo de su vida. Por órdenes del Gobierno y una resolución de la estatal petrolera, todos los bienes de Brupalca pasaban a manos del Estado. Un parque de máquinas, terrenos y edificaciones valoradas en 35 millones de bolívares fuertes (35 mil millones de los viejos). Ocho días después, miembros de PDVSA llegaron a las oficinas administrativas de Brupalca, estaban custodiados por la Guardia Nacional. Guillermo Lugo, gerente de la corporación nacional, encabezaba la toma. Nazariego habló con Lugo y acordaron un día después iniciar el inventario de la empresa. El descaro Una abogada, de nombre Ludy Briceño, representante legal de la estatal, le comunicaba frente a frente a Nazariego: “facilite usted las llaves de la empresa, no nos importa el inventario. Esto desde ayer me pertenece, yo soy PDVSA”. El empresario se negó. Ramón Nazariego autorizaba al consultor jurídico de Brupalca a hacer presencia con un tribunal, un fiscal y un notario. “Tres jueces se negaron a asistirnos en la violación que nos hacían. Sencillamente nos dijeron que si nos defendían estaban botados. No logramos nada con la justicia. Estábamos completamente solos contra el Estado forajido”.


8 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras

¡Sus hombres y sus historias!

Juancho La Corte, propietario de Gutesca, considera que ha perdido un capital ganado desde su juventud

EXPLICACIÓN

“Cayeron todas las ventas”

Muelles expropiados fueron construidos por privados

RICARDO ORTEGA

Las deudas de PDVSA por las expropiaciones ejecutadas suman una deuda total de al menos 5 mil millones de bolívares fuertes con las 74 empresas contratistas. Aún no pagan. Carlos Moreno (LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

J

uancho La Corte tiene 27 años en Ciudad Ojeda, y es uno de esos personajes populares en el ámbito petrolero. En cada calle, cualquier obrero le levanta la mano para saludarle con respeto, él ha sido uno de los fecundos empleadores de la zona. Comenzó desde joven la fundación de su empresa en la Costa Oriental del Lago. Venía de Valera, estado Trujillo, donde nació en 1948. Hoy es uno de los empresarios expropiados por el Estado. Sus acciones en la empresa Gutesca, han caído producto del impacto de las estatizaciones, esa misma compañía entró en la primera lista del decreto confiscatorio en Gaceta Oficial 39.174 del 7 de mayo pasado. La madrugada del día 8 de mayo, ya estaría controlada por PDVSA. La Corte no teme al hablar, con tono enfático dice, “siempre he sido un tirapiedras ante los robos, y precisamente esto un asalto a mano armada. No me voy a quedar callado ante nadie”. El empresario estudio ingeniería civil en la Universidad Central de Venezuela, y desde joven supo explotar su profesión. Uno de sus primeros grandes trabajos, y precisamente el que lo acercó a Ciudad Ojeda fue el diseño de una estación de servicio para Lagoven. Un retraso en los pagos lo hizo viajar hasta Ciudad Ojeda para pedirle prestado 200 mil bolívares a su suegro, quien para el momento había consolidado una empresa contratista que servía a la estatal de esos años. El suegro lo invitó a trabajar unos días en su compañía (De Ko construcciones, también expropiada en mayo) en el diseño de una licitación con la que competiría en un contrato de Lagoven por la construcción del muelle de Tiajuana. La Corte le cumplió, y además se llevaba su dinero en el bolsillo, de vuelta a Valera. Dos meses después el padre de su esposa le llamaría para informarle que habían ganado la licitación. Juancho sería

Carlos Moreno

entonces contratado para servir de supervisor de la obra. “Para esa época eran concursos privados, todo era muy cuidado y con estrictas normas de confidencialidad. Era otra empresa, no existía la cultura de la comisión y la corrupción de hoy”. La Corte dice recordar que a la estatal sólo le bastaba una empresa que cumpliera con sus labores y eso era el mejor aval de ese entonces. De Valera a la COL De la experiencia en Ciudad Ojeda, Juancho La Corte decidió traerse la compañía que había fundado en Valera, L&M construcciones, para comenzar a trabajar como agencia prestadora de servicio a empresas contratistas. Lo logró. Sus objetivos alcanzaron también para participar con capitales en la fundación de Gutesca, una contratista directa de la ahora PDVSA. Los anuncios del Presidente de la República a comienzos de mayo pasado no le darían buena espina. La Corte sabía que ahora sería objeto de la arremetida del Gobierno contra los privados y no se equivocó. Aunque L&M no cayó en las listas de las expropiaciones como compañía vinculada directamente a la estatal, sufriría los impactos de no poderle trabajar a las contratistas de siempre. Pero además los clientes estatizados quedarían debiendo una gran cantidad de facturas. “Nuestras ventas pasaron de 100 a cero, en estos momentos no hay nada de trabajo con L&M”, su principal empresa en la que ayudó como generador de empleo en la Costa Oriental del Lago. L&M tenía como especialidad la construcción de obras civiles en el Lago, como fundaciones y losas de concreto. Por su parte, Gutesca, en la que también tenía parte, quedaba tomada por el Estado, sin tener siquiera una respuesta firme de cuándo y cuánto le pagarían por la expropiación, a él y los demás accionistas del grupo. En Gutesca, PDVSA se apropió de todo, desde lanchas de buceo, hasta la toma del muelle.

Juancho La Corte, propietario de Gutesca y L&M constructores, califica la expropiación como “un robo a mano armada” de un gobierno deudor.

Desfalco sin respuesta Los avalúos efectuados hasta el momento en la empresa Gutesca alcanzan, según Juancho La Corte, los 16 millones de bolívares fuertes, es decir, 16 mil millones de bolívares viejos. “Eso sólo es lo equivalente a las bienhechurías al terreno”, apunta. Pero sus críticas no son sólo respecto a las expropiaciones sino también al “engaño” que asegura son objeto todos los trabajadores a los que el Gobierno prometió absorberlos. “Ahora en cualquier momento PDVSA les dice ‘te vas’ y ningún obrero podrá reclamar nada”, explica La Corte. El empresario indica que la estatal no lleva ningún reporte de ingresos tal y como lo hacían las contratas en cada obra. “Nosotros contratábamos por lapsos definidos y PDVSA está contra-

DEUDA EXHORBITANTE Según La Corte, PDVSA utilizó la expropiación como una forma segura de no pagar la “exorbitante” deuda que tenía con las contratistas. “Al ocho de mayo estaba acumulada una deuda de 500 millones de bolívares fuertes, eso es equivalente a billón y medio de bolívares de los de antes”. Para el empresario esos cálculos son sólo por deudas de contratación ejecutada. “Si a eso se le suma las deudas por bienhechurías por muelles y equipos expropiados la suma alcanza los 5 mil millones de Bs.F”.

tando como lo hacíamos nosotros, los incluyen, pero en cualquier momento deben prescindir de ellos”.

Juancho La Corte advierte que el Gobierno nacional ha querido hacer ver que PDVSA construyó los muelles que hoy son objeto de expropiación. “Eso es una falsa extrapolación”, dice el empresario. La Corte explica que ciertamente los terrenos donde fueron construidos los muelles por las empresas privadas instaladas en la Costa Oriental del Lago, son exclusivamente del Estado, pero jamás Petróleos de Venezuela, Lagoven o Maraven, construyeron con capitales propios, los diques, muelles y otras estructuras que hoy han reclamado para sí sin reconocer que fueron “bienhechurías” de las compañías contratistas a los terrenos cedidos en concesión. “El terreno sobre el que están construidos esos muelles, en la Ley de Nacionalización del año 1976, aparecen esos espacios como áreas reservadas para la industria petrolera. Eso quiere decir por demás que el terreno era propiedad de la nación”. Pero La Corte va más atrás, según el ingeniero, Z&P y De-Ko construcciones se instalaron en las riveras del Lago en los años 1950, y 1956 respectivamente con permisos otorgados por la empresas que custodiaba los terrenos, “la Shell”, explotadora de petróleo en el país. “Cuando 20 años después llegó la Ley de nacionalización, las áreas estaban afectadas puesto que ya tenían los muelles construidos. Hugo Chávez, y Rafael Ramírez son embusteros, ellos saben estas historias”. “Los muelles que aquí antes estaban al resguardo de las trasnacionales, con la ley de nacionalización del 76, pasaron directamente a manos de las filiales de Lagoven o Maraven”. Gobierno dice que liberó Desde el Gobierno nacional manifiestan que la “batalla liberadora del Lago” anunciada por el Presidente no fue más que “la recuperación” de la propiedad de Estado. Aunque la administración Chávez dijo que pagaría un “justiprecio” por las expropiaciones, los empresarios no conocen a cuál será el resultado. La Corte se prepara para lo peor.


Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009 PRODUCTOS EXCLUSIVOS VERSIÓN FINAL 9

Contratistas Petroleras

1941

La población de Lagunillas crece por la explotación. Ese año alcanzaría los 19.391 habitantes.

1950

Tras 21 años de servicios a contratistas, José Contreras ha sido botado sin recibir nada a cambio RICARDO ORTEGA

Nacen las primeras contratistas: Lago Petroleum Company, Z&P, Terminales Maracaibo, en lo sucesivo llegarían a ser más de 70 empresas.

CONSIDERACIONES COYUNTURA

“Tengo que buscar la manera de sustentar a toda mi familia” José Contreras señala que ahora, tras 21 años de consolidación como gerente de empresa, tendrá por el momento que buscar un trabajo que asegura, no estará vinculado a su especialidad, la explotación petrolera. “Yo tengo que buscar sustentar mi familia, un negocio que me sea rentable, porque recalco en que la discriminación social que propugna el Gobierno, no me dejará regresar al ámbito petrolero. Yo no quiero dejar mi país, yo voy a pelear en Venezuela, aquí el que se va es éste régimen militarista”. Para Contreras los trabajadores de todo el sector ahora están ahogados.

RÉGIMEN José Contreras, ex gerente de De-Ko Construcciones, dice estar seguro que no regresará a la empresa petrolera mientras gobierne Hugo Chávez.

“Fue un atraco con fusiles” El ex gerente de De-Ko Construcciones advierte que la Costa Oriental del Lago va en caída libre con las expropiaciones. Afirma que tendrá ahora que buscar un negocio para sostener a su familia. Carlos Moreno (LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

A

las 6:00 de la mañana del 8 de mayo, la orden de desalojo le llegaba a José Contreras en el patio de la que fuera su empresa en los últimos 21 años, la contratista “De-Ko Construcciones”. Guardias Nacionales y Ejército habían tomado las instalaciones de la compañía de manera súbita. La expropiación había comenzado sin marcha atrás. Tras dos décadas de servicio ejerciendo en la empresa como uno de los timones, tenía ahora que firmar una suerte de “capitulación” con el Gobierno nacional, para dejarle paso libre a PDVSA en la toma de la contratista. José Contreras, quien también es director regional de Consecomercio en el Zulia, y directivo de la Asociación de Comerciantes de Lagunillas (ACIL), nació en el municipio Cabimas, se graduó de técnico en protección integral y como especialista en ambiente. En sus primeras experiencias en

la industria petrolera regional pasó por las oficinas de Maraven, como supervisor de contratistas. Renunciaría al cargo para profundizar estudios en los Estados Unidos. Regresó al país, pero ésta vez como empresario. Se establecía entonces como asesor de seguridad industrial a empresas contratistas, donde inesperadamente, en el año 1988, se le abrirían las puertas de “De-Ko Construcciones”. No desaprovechó la oportunidad. De hecho, serían 21 años de servicio consecutivo hasta lo que ha determinado llamar “viernes rojo”, en referencia al día de la toma por el Gobierno nacional de las contratistas en la rivera del Lago. “PDVSA pintó de rojo todos los muelles y mandó a todos sus empleados a vestirse del mismo color en uno de los días en que se concretó el robo más grande de la historia republicana de Venezuela”. Contreras afirma que, el mismo día de la expropiación se cerraron las puertas de su oficina. “Ellos (PDVSA), al darse cuenta de que mi persona representaba al empresariado, decidieron con suma ra-

“El himno nacional es nuestra arma” Durante la entrevista concedida a VERSIÓN FINAL, José Contreras citó una línea del Himno Nacional de Venezuela “Gloria al Bravo Pueblo” para sentenciar que la misma letra resulta un arma para enfrentar las pretensiones del Gobierno de Chávez. Ha escrito unas palabras y las recita frente al grabador. “Abajo Cadenas...el bravo pueblo de Venezuela, en su condición de soberano de la libertad no podrá jamás aceptar ningún sistema de gobierno que no sea el democrático, pues el legado de nuestros próceres nos da el derecho de ser libres por el ideario bolivariano. Luego de ser nosotros los venezolanos dueños de una patria de progreso, ahora somos víctimas de un régimen castrocomunista que se busca imponer en el país”, dijo Contreras, una consigna que espera llevar pronto a la calle como vos de protesta”. pidez, dejarme fuera por completo”. Dice con énfasis que nunca se le ha callado a nadie, por lo que mucho menos así respetarían sus derechos en la estatal. El día de la expropiación lo recuerda paso a paso. Un ingeniero de nombre Freddy González lo abordó apenas entró a las instalaciones. “Me dijo que venía en representación del Gobierno. Yo sólo pedí que me dejaran entrar a mi oficina para recoger algunos efectos personales y conversar con algunos de mis compañeros en la empresa quienes aún se mantenían allí”. Al salir de la oficina, al menos ochenta personas, entre empleados de PDVSA y efectivos del Ejército, lo esperaban fuera. “En los patios de la empresa todo lo demás fue un atra-

co a mano armada, me tenían flanqueado dos guardias nacionales con fusiles. Representantes de la estatal leyeron el decreto de expropiación. Firmé el documento”. Luego de la rúbrica, los enviados de PDVSA comenzaron a celebrar con “gritos y algarabías” como recuerda Contreras. “Me sentí bastante desconcertado”. Aunque dice tener “fe”, también reconoce que resulta muy difícil que honren sus años de servicio. “Si no le han pagado a los dueños de contratistas, ni a los empleados, cómo voy a pensar que me pagarán”. Contreras sostiene que no decaerá aunque haya vivido los rigores de un régimen que califica de “castrocomunista”. El mal rato lo enfrenta con una decisión. “Yo no pienso irme”.

“El 8 de mayo fue un alerta a los empresarios privados” Para el ex gerente de De-Ko Construcciones, la medida de las expropiaciones efectuadas el 8 de mayo pasado, ratificaron las “alertas” que el Gobierno “castrocomunista” hizo pulsar a los empresarios privados. “Lo digo con toda la responsabilidad del caso, estamos frente a un Gobierno que secuestra a la inversión privada en el país. Existe la intención de hacer ver que la propiedad privada no está en riesgo, y eso es totalmente falso”. Contreras sostiene con firmeza que las prácticas de la administración Chávez quiebra el país”.

DEBACLE

Microempresarios también están quebrados Según Contreras, en la Costa Oriental del Lago no sólo han sufrido los impactos financieros las empresas expropiadas, sino también los microempresarios propios de la región, hombres y mujeres que consolidaron pequeños negocios familiares en los alrededores de las compañías. “Nosotros podemos hablar incluso del cuarto nivel de la economía, los pequeños empresarios, el comercio informal. Ellos han quebrado por igual. Estamos en una cadena de desviación económica, vamos en caída libre y la estabilidad a tres meses ya se nota la debacle”.


10 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras La familia Fattorello fundó la empresa “Estima” en 1986 en Ciudad Ojeda

¡Sus hombres y sus historias! RICARDO ORTEGA

Raúl Fattorello, trabajador, propietario y cerebro de la empresa “Estima” afirma que no cerrará las puertas ante la crisis desatada con las expropiaciones. Sostiene que la debacle no representa más que una “verdadera oportunidad” para fundar una real democracia en Venezuela.

“No nos van a detener, seguiremos trabajando sin descanso por este país” Raúl Fattorello, dueño de la empresa “Estima” ha tenido que redimensionar su trabajo para poder subsistir al embate de las estatizaciones. Carlos Moreno (LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

D

esde muy temprano en la mañana Raúl Fattorello se levanta a trabajar en sus talleres, es un hombre de cabello blanco y no más de metro 70 de estatura, pero se muestra como un ciudadano con profundas raíces en la cultura obrera, aunque su visión propia le haya convertido en un empresario a gran escala. Nació en 1948 en Argentina, hijo de padre y madre italianos. Ambos huían de las atrocidades de la II Guerra Mundial. La familia se radicó en Venezuela en 1956. Tenía siete años cuando su padre emigró al país siendo un mecánico de motores y su señora madre una costurera dedicada a las labores del hogar. Ahora sólo la Doña

VENCER EL MIEDO Raúl Fattorrello recuerda a sus abuelos y a su padre con vehemente orgullo. “Ellos batallaron en dos guerras mundiales, y no huyeron al miedo, igual lo haré yo”. Para el empresario, quien conserva en perfecto estado su acento italiano pese a haber crecido en Ciudad Ojeda, las medidas del Gobierno no le harán retroceder. Para él las expropiaciones y la crisis que se profundizó en la COL no es más que un momento de oportunidad para plantear nuevas ideas y demostrar cada uno, empresarios y obreros, de “transformar esta crisis de país, en la mejor democracia que se haya vivido jamás”.

vive, el Don murió hace 25 años. Raúl Fattorello es un autodidacta a carta cabal, el talento dice haberlo heredado de su padre, de quien aprendió desde pequeño los secretos de las turbomáquinas. Ya adolescente emprendió viajes por toda Latinoamérica para especializarse. El hogar predilecto lo habían alcanzado en Ciudad Ojeda. “Finalmente en diciembre de 1986, después de aprender lo necesario para ofrecer un servicio profesional, funde mi pequeña empresa,

CIERRE DE CARTERA

“Todos nuestros clientes fueron tomados por PDVSA” Fattorello encuentra en el 8 de mayo (día de la expropiación), una de las jornadas más nefastas en su compañía. “El Estado, a través de PDVSA tomó a todos nuestros clientes”, una cartera que había alcanzado tras largos años de labor, y en la que además se ha ido paradójicamente una gran parte de su capital. “Estima”, la empresa, habría facturado a las contratistas una elevada cantidad de servicios que hasta el momento no han sido cancelados producto de las estatizaciones. Fattorello reconoce que nada es seguro ahora. “No recibimos un cheque desde el mes de octubre. Hoy en día tenemos muy pocas esperanzas de recuperar parte de las facturas emitidas en el corto plazo, aunque seguiremos esperando”, dice el empresario. Para que la empresa Estima recupere los capitales invertidos deberá necesariamente esperar a que PDVSA indemnice a los expropiados. Fattorello dice que tratará de sortear la presente dificultad, aunque acepta que el golpe a su empresa ha sido certero, como al resto de la economía de la COL.

PLAN

“No cerraremos jamás, nuestra empresa seguirá viva”

Fattorello fue uno de los voceros con más presencia durante las sesiones del CLEZ en la COL, horas después de concretarse las expropiaciones.

yo trabajaba en los talleres, y mi esposa era la secretaria, mis hijos me acompañaban al salir del colegio”, recuerda. Había nacido “Estima”, un nombre que no responde a siglas de ningún tipo, sino más bien a la salud de una palabra que Raúl Fattorello consigue necesaria para su labor. “Estima, significa el acercamiento con mis clientes, con el trabajo, esa es la relación del nombre, es filosófico”. Ahora comenzaba a trabajar desde Ciudad Ojeda para reparar motores, maquinaria pesada y turbinas de todo tipo relacionadas a la explotación petrolera. Inicialmente “Estima” trabajó en algunos contratos directos con

Maraven y Lagoven, pero pronto preferirían separarse de las estatales para servir a contratistas. “En 1995 no teníamos actividad directa con la estatal. Cuando comenzó este gobierno yo no tenía trabajo directo con PDVSA”. Hoy, la empresa ha llegado a un nivel cero de trabajo, está ubicada en el segundo círculo de afectados con las expropiaciones de PDVSA a las compañías contratistas que laboraban directamente en servicios para la explotación de hidrocarburos. Sus clientes, ahora estatizados en la mayoría, se han llevado consigo una elevada deuda con “Estima” un capital que no sabe si algún día recuperará.

El empresario ha dicho que de ser necesario “venderá empanadas” pero no claudicará ante la situación propiciada por el Gobierno nacional. “Nosotros no somos fáciles de matar ni arrodillar, seguiremos trabajando con esfuerzo por este país”. Fattorello señala que por el momento, él y sus trabajadores han comenzado a diseñar y montar una planta de agua potable para ofrecer el servicio en Ciudad Ojeda, como alternativa de negocios para subsistir y volver a levantar la empresa que fundara en 1986. Si bien ahora no trabajará en el sector petrolero, está determinado a consolidar otra serie de proyectos que por el momento prefiere mantener en secreto. “Vamos a desarrollar actividades de exportación desde Ciudad Ojeda, levantaremos la empresa nuevamente y trataremos de mantener a nuestros obreros. No vamos a ceder, nosotros estamos aquí porque pertenecemos aquí”, sentenció.


Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009 PRODUCTOS EXCLUSIVOS VERSIÓN FINAL 11

Contratistas Petroleras

1950

Comienza la generación de empleo de las empresas a naturales de la zona.

1960

El crecimiento urbanístico de Lagunillas se hace evidente. Las contratistas brindan educación y seguridad a sus empleados.

Los empresarios e industriales coinciden en la gravedad de la ruptura de esa necesaria relación ACIL advierte una grave crisis social que impactará a los sectores económicamente más débiles de la localidad. Los propietarios de las contratistas no reciben resLOS AUSENTES puestas. Temen que la COL quede sumida “Los Gobiernos en una debacle.

“La única vinculación de la COL con PDVSA eran las contratistas” IVÁN LUGO

le han dado la espalda a la COL”

Ernesto Ríos Blanco (Unica 2006) erios@versionfinal.com.ve

L

a Asociación de Comerciantes e Industriales del Municipio Lagunillas (ACIL) viene agrupando a este importante sector productivo del Zulia desde hace más de 40 años. Tiene como presidente al ingeniero Lucas Martínez quien ha seguido de cerca el escenario que hoy viven las contratistas petroleras expropiadas por PDVSA el pasado 8 de mayo. El empresario, de trato cordial y amable, quien se autodefine como “un obsesionado conversador de su querida Costa Oriental del Lago (COL)”, desmenuzó al detalle los intríngulis que rodean la actividad petrolera de la región, haciendo énfasis en las consecuencias de las expropiaciones de las contratistas petroleras fundadas, en su mayoría hace más de 40 años. “El daño más grave de la estatización de estas empresas está en la parte social y lo que esto significa para un municipio que depende enteramente de la actividad petrolera”, enfatizó Martínez, con mucha seguridad. El meollo del problema El empresario parece haber tocado fondo cuando asevera que “la única vinculación de la COL con PDVSA eran las contratistas, porque, en realidad, nosotros (la COL) no tenemos ninguna vinculación con la industria petrolera. PDVSA tiene todas sus oficinas en Caracas, los ingresos de PDVSA entran por Caracas, el precio del barril de petróleo entra por Caracas y allá se queda. El beneficio nuestro no está en el precio del barril, el beneficio está en las cantidades de barriles que se produzcan”. “Pero las contratistas estaban aquí -prosiguió Martínez- sus dueños viven aquí en la COL, sus empleados están aquí, ellos compran en el comercio de aquí, van al supermercado de aquí, com-

Lucas Martínez, presidente de la ACIL: “Nos desvincularon a la COL de PDVSA con la toma de las contratistas y al no haber un plan económico alternativo a la actividad petrolera, lo que nos espera es el fin de la vida en nuestras ciudades”.

LUCAS MARTÍNEZTexto Nació en Cabimas el 4 de agosto de 1955. Graduado de Ingeniero Electricista en The University of Tennessee, USA. Trabajó en Lagoven, filial de PDVSA. Fundó varias empresas en la Costa Oriental del Lago. Actualmente maneja una empresa de diseño, servicio e instalación de aires acondicionados. Inició su actividad gremial desde 1979, siempre en la ACIL. Integró ocho juntas directivas y tres presidencias de la asociación. Es el actual presidente de la ACIL. pran casa aquí. Es decir, a través de ellos nos llega el beneficio petrolero. Eran las contratistas la vinculación PDVSA - comunidad y a ese vínculo se le ha puesto una barrera, un obstáculo, y ese es el peor mal que se le está haciendo a esta región.”, sostuvo.

Pirámide mortal De acuerdo con el presidente de la ACIL, si bien el acto de expropiación de las empresas se realizó de manera inmediata, sus consecuencias en la COL y en el resto del país se darán progresiva y lentamente. “PDVSA tomó las 74 contratistas en un día, pero hay un proceso que se va desarrollando y afectando a la economía y a la sociedad en la medida que avanzan los efectos de las expropiaciones”, explicó Martínez. Los estudios de la ACIL ilustran el problema en forma piramidal: “En el nivel 1 de la pirámide están las empresas expropiadas donde alrededor de 9.600 trabajadores quedaron en el limbo. Pero, las consecuencias en el nivel 2 de la pirámide, donde se ubica la cantidad de empresas que trabajaban directamente con las contratistas, dejó fuera a unos 20 mil trabajadores. Y a su vez, repercutió con más fuerza aún en el tercer nivel piramidal donde están las empresas que indirectamente recibían beneficios de las contratistas y cuya masa laboral es de más de

80 mil personas que se desempeñaban en pequeñas empresas y comercios que ofrecían servicios o vendían productos a las empresas del segundo nivel (empresas de limpieza, ferreterías, servicios de comida rápida, etc.). De acuerdo con Martínez estas consecuencias van desde la desmejora salarial hasta el irremediable despido de personal. Mal presagio El presidente de la asociación advierte que, entre cuatro y seis meses, es el tiempo que calcula la ACIL para que se fracture el sistema económico de la COL como consecuencia de las expropiaciones. “Si la toma de las contratistas fue el 8 de mayo, seis meses después, es decir en noviembre se sentirá el rigor y tomando en cuenta que siempre diciembre es un mes de repunte en las ventas, estamos hablando de un inicio del año 2010 con un profundo caos económico en la COL que pudiera impactar profundamente en todas las familias asentadas en la región”, advirtió el empresario.

El empresario Lucas Martínez insistió en la ausencia del Gobierno nacional, regional y municipal en relación a la creación de un plan de desarrollo económico para la COL. “Esa es la luz al final del túnel en todo este marasmo en el que se ha convertido la economía del municipio y que ahora ha empeorado con las expropiaciones”, dice el empresario. Martínez asegura que “el desarrollo económico de una región no se fundamenta en construir aceras y brocales, la esencia de un desarrollo económico está en generar empresas e industrias que, por ejemplo, se dediquen al campo, a la agricultura, la ganadería y que ellas puedan suplantar lo que el petróleo como fuente primaria y única de dependencia económica ha sido para la COL”, argumentó. ¿Ciudades fantasmas? El presidente de la ACIL, vaticinó el cercano fin de la actividad petrolera en la COL, por cuanto, “históricamente el mayor porcentaje de producción petrolera, digamos, un 60% del total de la producción de crudo en el país, ha salido siempre de estas tierras. Pero esos pozos ya están mermando, los yacimientos se están secando debido a la ininterrumpida extracción y si no se reconstruye un sector económico alternativo, cuando se retire la actividad petrolera no habrá trabajo suficiente para los 850 mil habitantes de la COL y quizá queden aquí sólo 100 mil habitantes que son los que se pueden sostener con lo poquito que se haga”. Sin embargo, el empresario manifiesta que los Gobiernos están de espaldas a esta difícil realidad y no determinaron los graves impactos sociales que generaron las expropiaciones.


12 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras

¡Sus hombres y sus historias!

Aquí está el recuento gráfico de la ruta confiscatoria y los 90 días siguientes

La alegría se transformó en Los muelles se tiñeron de rojo con la llegada de la “revolución”. Las protestas de ex petroleros no han cesado desde aquel madrugonazo del 8 de mayo. El hambre se apodera de la región. El parlamento regional e intelectuales se han activado en la defensa de los derechos.

ABN

HUMBEDRTO MATHEUS

Guardias Nacionales custodian la entrada de la empresa Z&P en Lagunillas. Es una de las más antiguas y grandes contratistas expropiadas. Sus pérdidas son incalculables. SANDY ULACIO

Trabajadores afectos al Gobierno arengan con consignas a favor de la toma de PDVSA. Aseguran que tienen sus empleos blindados. Es el principio de mayo, apenas comenzaba la debacle. LUIS TORRES

Eliseo Fermín, presidente del Consejo Legislativo del Estado Zulia, junto con los diputados regionales, se reúnen de emergencia con los trabajadores y propietarios de contratistas para levantar un muro de defensa. Las voces de impotencia de empresarios comienzan a salir a la luz pública.

Hugo Chávez, el día viernes 8 de mayo. Ya su gobierno ha tomado el control total de las embarcaciones y empresas. “Hemos comenzado la batalla liberadora del Lago de Maracaibo”. LUIS TORRES

Las calles de Ciudad Ojeda comienzan a caldearse a finales de mayo y principios de junio. Los trabajadores desempleados no consiguen respuestas de la estatal petrolera. Les han prometido que los ocho mil afectados regresarán a la plantilla de la empresa, pero denuncian muchos vicios y retrasos.


Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009 PRODUCTOS EXCLUSIVOS VERSIÓN FINAL 13

Contratistas Petroleras

1960

Se crea la Corporación Venezolana de Petróleo.

engaño y gran frustración HUMBERTO MATHEUS

HUMBERTO MATHEUS

Empleados de PDVSA salen para manifestar su apoyo a las expropiaciones. Es la contraparte de las protestas de los desempleados. Estos sostienen que la “compañía” cumplirá con su palabra. Afirman que la toma contra la “oligarquía” no tiene marcha atrás y que ahora los muelles son del pueblo.

Representantes del Movimiento 2-D, e intelectuales contrarios a la administración Chávez, proponen un frente para la defensa de los trabajadores. La batalla la presentarán en denuncias firmes en medios de comunicación. Pondrán sus voces y plumas para enfrentar las medidas expropiatorias.

LUIS TORRES

HUMBERTO MATHEUS

El hambre a mediados de junio se hace evidente. Familias de petroleros, antes empleados por las contratas, se congregan para reclamar los retrasos en el cumplimiento con los trabajos prometidos. No tienen dinero. Muchos han comenzado a entrar al lago para pescar, otros a barrer las calles.

Cientos de ex trabajadores, ya a finales de julio, se sienten perturbados. Manifiestan en medio de la avenida principal de “Las Morochas”, en Lagunillas. Exigen censos y entrada. Denuncian que las fichas blancas para trabajar están siendo negociadas en 10 y 15 mil bolívares fuertes. SANDY ULACIO

Algunos, quienes creyeron en la promesa presidencial de un ingreso rápido a PDVSA, no han soportado más. Estos hombres se lanzaron a las aguas de la salida de los muelles a principios de julio. Grupos de tres se acordonaban para evitar la navegación de cualquier embarcación. Levantan la bandera como rebeldía contra el Gobierno de Chávez. El hambre y el desespero lo viven a diario en sus hogares.


14 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras

¡Sus hombres y sus historias!

Juan Carlos Pérez Manzanares es uno de los petroleros que quedó en la calle y que aún no recibe respuesta de la estatal

“No sólo los gerentes tienen derecho a comer” RICARDO ORTEGA

El marino, que trabajó por una década en la empresa Cobsa, ha tenido que buscarse la vida en estos meses como soldador o ayudante de albañil. Su madre le ayuda con la comida de su familia. Carlos Moreno (LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

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u trabajo era “ocasional fijo”, como suelen decirle los trabajadores petroleros a los contratos por obra, pero eso no le importaba mucho a Juan Carlos Pérez Manzanares, él siempre tenía con qué responderle a su hija natural, una niña de nombre Hanley Caroline Pérez, su esposa Adela González, y dos hijastras. El hombre llevaba siempre comida a la mesa. Pérez es uno de los marinos que aún no recibe respuesta alguna de PDVSA. La tan ansiada “ficha blanca” no le llega, y ni siquiera tiene seguridad del censo que firmó para poder entrar a la compañía. Nació y se crió en la Costa Oriental del Lago, estudió hasta el bachillerato, pero pronto, la situación familiar le llevaría desde joven a

trabajar. El paso fue hacia la industria petrolera donde comenzó actividades desde los 18 años de edad. Hoy tiene 28. “Yo aprendí amarrando las lanchas en los muelles, en una empresa contratista de un amigo, ahora no quedan ni las lanchas, ni la empresa ni el trabajo, todo lo expropiaron”, dice Pérez. Lo encontramos frente a uno de los muelles, con la piel tostada de tanto sol en los últimos meses. No renuncia a estar frente a los portones de uno de los muelles expropiados, mirando de frente los fusiles de los militares que ahora le niegan la entrada a lo que antes fuera su lugar predilecto de trabajo, el Lago de Maracaibo. Juan Carlos reflexiona y se pregunta así mismo durante la entrevista: “¿qué será lo que quieren?”, y se responde con un tono airado “que salgamos a robar para poder comer.

DISPUESTO A TODO Juan Carlos Pérez dice estar dispuesto incluso a “parar las empresas petroleras” con el fin de conseguir, para él y sus colegas, que PDVSA cumpla con lo prometido de ingresarlos a la nómina fija de la compañía. “Aquí, si no nos responden los gerentes de PDVSA habrá que detener las empresas. No sólo los gerentes tienen derecho a comer, nos pararemos frente a los portones y nadie saldrá o entrará. PDVSA se detendrá”.

Juan Carlos Pérez, marino, trabajó por diez años en la contratista Copsa. Hoy no tiene trabajo, afirma que se levantará contra PDVSA si no cumple sus promesas.

Nos están obligando a ello”. El marino confía en su capacidad. Ha tenido por el momento que salir a la calle a hacer trabajos mínimos para subsistir en los extremos. “A veces hago unas soldaduras y otras me presto para ser ayudante de al-

bañilería”, pero por más que se esfuerce, son más las jornadas en las que no consigue nada. Sin comida El marino nos confía en que ha tenido que pedirle a su madre que

les de comida a sus hijas y su esposa, mientras que él sale a la calle a ver cómo consigue reponer lo que su progenitora ha gastado de su alacena. “Me cuesta llegar a casa y no tener un plato de comida para mi familia, gracias a Dios mis padres me ayudan”, dice. Pérez trabajó por 10 años en la contratista Cobsa, hoy expropiada por órdenes presidenciales. Asegura que siempre le respetaron sus derechos laborales y sus pagos nunca fallaron. “Lo importante es que siempre había trabajo”.

Orlando Méndez, operador de máquinas, afirma que al Presidente lo engañan varios de sus enviados a la COL

“Están manchando la revolución obrera” Para el obrero petrolero no es problema decir que en su casa “han pasado hambre”. Critica duramente a los gerentes designados de las expropiaciones. “Creíamos que venían cosas mejores”. RICARDO ORTEGA

Orlando Méndez, maquinista, mantiene a su familia con una colaboración de “promotor político” que recibe de la Alcaldía de La Cañada de Urdaneta.

Carlos Moreno (LUZ 2004) cmoreno@versionfinal.com.ve

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rlando Méndez, abre la entrevista con una frase cruda. “Nosotros no somos unos perros”, tan sólo esa línea denota la decepción del trabajador. El revolucionario, como él mismo se califica, no pasa por un buen momento. PDVSA no le termina de abrir las puertas pese a haber demostrado su incondicional apoyo al proceso encabezado por el presidente Chávez. Nació en la Cañada de Urdaneta y allí mismo creció. Su estabilidad laboral la consiguió en la empresa “Semarca”, una privada que hacía trabajos a la estatal, pero asegura que por su condición de “socialista”, la compañía decidió revocarle el contrato. Creyó que PDVSA estaría en disposición de recibirlo, pero al momento no le han cumplido la palabra que empeñara para todos los trabajadores el ministro de Energía y Petróleo Rafael Ramírez.

Méndez es especialista en operaciones de máquinas y plantas, y se acercó hasta la COL a solicitar, al igual que sus pares, una ficha blanca de la estatal. Por el momento no tiene trabajo, y desde su postura de obrero, dice tener más derechos como “revolucionario” que muchos de los gerentes que hoy capitanean la empresa en la Costa Oriental del Lago. “A nosotros nos prometieron hacer un censo y no cumplieron, aquí hay gerentes que dicen ser chavistas y no lo son, maltratan a los obreros, a lo que se debe este proceso. Están manchando la revolución”, sostiene Méndez. El operador comenzó desde muy joven a trabajar con las compañías contratistas en un periplo que lo llevó a ser obrero de Zaramella & Pa-

van (Z&P), una de las más grandes y antiguas empresas expropiadas, MI Suaco, Petrolago y Semarca, y aunque muestra sus credenciales como marino certificado, manifiesta que ahora se le da entrada a personal descalificado por los manejos irregulares de los gerentes. Por el momento ha tenido que asumir un cargo de “promotor político” en la Alcaldía de la Cañada, para recibir un sueldo de 500 bolívares mensuales. “Pero lo mío no es eso, yo quiero surgir, trabajar en PDVSA y para eso me preparé”. Méndez es los que confían ciegamente en las expropiaciones, aunque no en los administradores designados por la estatal. “Nosotros pensamos que vendrían las cosas para mejor, esperamos que así sea y pronto”.

“YO NO VOY A NEGAR EL HAMBRE QUE HEMOS PASADO” El maquinista dice sin conflictos que sus hijas, Katherine y Karenny y su concubina han pasado hambre en casa. “Yo no lo voy a negar, me ha tocado llegar sin comida. La cosa se ha puesto dura”. Méndez ha dicho que seguirá intentando entrar su puesto a las puertas de los muelles de la COL.


Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009 PRODUCTOS EXCLUSIVOS VERSIÓN FINAL 15

Contratistas Petroleras

1973

Guerra de Yom Kipur, y embargo árabe. El precio del crudo sube de 2 a 10 dólares el barril venezolano.

1976

El 1 de enero se concreta la nacionalización del petróleo, por mandato de Carlos Andrés Pérez. Emerge PDVSA.

ANDRI SOTO

EVELIO QUERALES

“Nunca me vi pidiendo dinero para comer”

“Mi hijo se me puede morir si no trabajo”

Ernesto Ríos Blanco Aún a las 12:00 del mediodía, cuando la gente normalmente se dispone a disfrutar de su almuerzo, las puertas de lo que fue el muelle Global Service, hoy muelle PDVSA, recibe a diario a centenares de obreros, ex trabajadores de las extintas contratistas petroleras y desempleados de Lagunillas y otros municipios para “mendigar”, según dicen ellos, un puesto de trabajo ocasional. Es el caso de Andri Soto, un joven obrero que sufrió las consecuencias del proceso de confiscación de las contratistas por parte de la estatal petrolera. Su último trabajo como obrero ocasional lo ejerció hace un año en la contratista Itrapeca de Lagunillas. “Con todo lo que humildemente he aportado a la industria con mis trabajos como ayudante de soldadura jamás me vi en la ne-

cesidad de pedir dinero a compañeros que corrieron con la suerte de quedar trabajando para poder llevar un pedazo de pan a mi mesa y medio alimentar a mis hijos”, contó Soto con la mirada perdida. Andri, tiene la responsabilidad de mantener a seis hijos pequeños y a su esposa. Lo que puede recoger pidiendo dinero apenas alcanza para una apretada comida al día. “Espero a mis compañeros a que salgan y les quito cinco mil, tres mil, cuatro mil bolívares para completar para la harina pan, el azúcar, el arroz”, refirió el obrero. Niños sin escuelas En su conversación, Soto expresó que sus seis infantes en edad escolar pudieran perder el año por no tener los recursos mínimos necesarios para inscribirlos en la escuela. El obrero mira al cielo y luego excla-

LUIS TORRES

Andri Soto pide dinero a sus compañeros para comer.

ma: “¡No he podido inscribir a mis chamos en el colegio! me da mucha impotencia no saber cómo hacer para inscribirlos porque ni siquiera tengo para sacarles las fotos que piden de requisitos y ni pensar en la lista escolar”. A once meses de quedar sin trabajo, Andri Soto sigue asistiendo a las puertas de los muelles nacionalizados para anotarse por enésima vez en un censo que le permita albergar una esperanza de conseguir un trabajo.

Ernesto Ríos Blanco Su situación es desesperante. Recibió la noticia de que quedaría sin trabajo por culminación de contrato y eso lo aterrorizó. Evelio Querales fue obrero durante un año en la contratista Cilato y hoy necesita imperiosamente trabajar pues, la vida de su hijo está en juego. “Devengaba 340 BsF como obrero de soportería y me despidieron por supuesta culminación de contrato. Desde entonces quedé sin empleo”, contó. Desesperadamente Querales le hace un llamado al Presidente de la República. “Estoy en una situación que ojalá mi presidente Chávez me oiga. Tengo un hijo que fue operado de un tumor en el cerebro y no tengo como llevarlo desde Lagunillas hacia Maracaibo para cumplirle el tratamiento. A veces no tengo ni para comer”.

Querales contó que fue liquidado a medias y en ese periplo con su hijo enfermo se consumió todo el dinero. “Dos millones de bolívares diarios he gastado viajando a Maracaibo a hacerle a mi hijo las radiaciones, tratamiento que es por un año y más adelante le toca las quimioterapias. De los diez millones que recibí de liquidación, hoy en día no me queda nada”. Una pesadilla Evelio, todos los días se acuesta preguntándose: “¿Cómo voy hacer ahora para ayudar a mi hijo?, ¿Será que mi hijo se irá a morir por no tener yo un trabajo?” Por si fuera poco, este obrero afectado por la nacionalización de las empresas que prestaban servicio a PDVSA, tiene además otros tres hijos a los cuales atender y mantener. “Yo no pido más nada sino un trabajo para salvar-

LUIS TORRES

Evelio Querales no duerme pensando en su hijo enfermo.

le la vida a mi hijo y cumplir su tratamiento y su dieta. Pido un trabajo para que mi familia y mis otros hijos puedan comer y así estamos todos pidiendo trabajo para sobrevivir”, enfatizó. Igual que otros obreros petroleros, Evelio Querales pide dinero a sus compañeros para comprar medicinas y comida mientras acude día y noche a las afueras de los muelles para suplicar que le devuelvan la posibilidad de aportarle a Venezuela y a su familia.

EDWIN ANTÚNEZ

ALCIDES PÉREZ

“En casa sobrevivimos a fuerza de marañas”

“Se cerraron las puertas para los pasantes”

Ernesto Ríos Blanco La historia de Edwin Antúnez, muestra lo que es capaz de hacer un hombre desesperado y sin empleo por conseguir el sustento familiar. Antúnez lleva en sus hombros la responsabilidad, no sólo de sus tres hijas de cinco, trece y quince años, sino además debe atender a su mamá, a su hermano que padece el síndrome de Down y a su padre que sufrió una trombosis. “Trabajé dos años en Veneco y luego laboré en Constructora Service donde fui despedido. Desde entonces no he podido conseguir un trabajo digno”, relató el obrero petrolero. Con la expropiación de éstas compañías, Edwin Antúnez ha visto reducida la posibilidad de volver a trabajar, pues, las empresas que otrora le dieron esa oportunidad, ya no existen. “Se me han cerrado las

puertas y a pesar de tener que madrugar todos los días junto con mi esposa, dejando a las niñas solas en la casa todo el día, sin saber si han comido, para buscar un trabajito, al menos de ocasional, regresamos a casa con las manos vacías. Salirle al paso Antúnez no imaginó que haría las veces de “San Nicolás” al vender juguetes en diciembre. Tampoco imaginó que ingeniárselas para rebuscarse le costaría ser víctima del hampa desbordada en Lagunillas. “Con lo poco que reuní en mis últimos trabajos, me compré un carrito y comencé a “piratear” pero el carro me lo robaron. La familia me ayudó, adquirí otro automotor pero nuevamente me volvieron a robar”, describió el ex trabajador. “Comencé a vender juguetes en diciembre y pude comprarme otro carro más y ese es el que cargo hacien-

LUIS TORRES

Edwin Antúnez se rebusca “marañando” para sobrevivir.

do varias trabajos por allí”, agregó Antúnez. De ayudante de ensamblaje y soldadura, Edwin Antúnez pasó a ser vendedor de juguetes, chofer de tráfico, vendedor y distribuidor de productos de limpieza y refresco, es decir, lo que él mismo cataloga como “un marañero”. Para Edwin, la expropiación es negativa puesto que “desde entonces no he podido trabajar más. Vivir así es frustrante pero hay que salirle al paso”, dijo.

Ernesto Ríos Blanco Alcides Pérez, es un obrero que ha trabajado en casi todas las empresas contratistas que prestaban servicios a PDVSA. Pérez refiere que nunca pudo obtener un trabajo digno pero al menos “me bandeaba con trabajos ocasionales que recibía en una y otra contrata”, manifestó. La empresa Grizai le abrió las puertas trabajando en el área de vapor durante diez años. Más adelante se desempeño como marino y mecánico en diferentes contratistas de Lagunillas. Para Alcides, quedar sin trabajo ha significado un duro golpe, no sólo económico sino psicológico. “Vivo preocupado, angustiado y desesperado. En casa somos ocho y todos son mi responsabilidad. No es fácil para un padre de familia cargar con una cruz tan pesada”, comentó Pérez. Con su actual pareja, Al-

cides tuvo tres hijos, pero se vio en la necesidad de encargarse de dos hijos que engendró en su anterior matrimonio producto del fallecimiento de su ex mujer. Esto le ha acarreado una responsabilidad mayor. Sin posibilidades Antes de las expropiaciones de las contratistas petroleras, el mismo Ejecutivo nacional emprendió un plan de adiestramiento remunerado para jóvenes en las instalaciones de estas empresas lo cual significaba una esperanza para Pérez, pues, el mayor de sus vástagos era uno de los beneficiados. “Mi hijo se desempeñaba como aprendiz en la empresa Z&P gracias a un curso que abrió el mismo Gobierno nacional y el muchacho recibía un pago semanal con el cual me ayudaba y desde que PDVSA asumió estas empresas, mi hijo y 30 aprendices más fueron sa-

LUIS TORRES

Alcides Pérez se muestra frustrado y engañado por PDVSA.

cados y quedaron a la deriva”, afirmó el ex trabajador. Pérez se ayudaba con los 600 bolívares mensuales más los cesta tickets que recibía su hijo, pero ahora le toca empezar de cero. “Con ese trabajito mi hijo se pagaba los estudios y me ayudaba en la casa, pero ahora, ¿De dónde le voy a dar para que termine sus estudios?, ¿De dónde voy a sacar para mis otros hijos y mi mujer?”. Alcides Pérez, vive atormentado y sin trabajo.


16 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras

¡Sus hombres y sus historias! ANA MARÍA VILORIA

EDWARD MOTA

“Si algo le pasa a mis hijos es culpa de PDVSA” Ernesto Ríos Blanco

E

l pasado 8 de mayo, fue el último día de trabajo estable para Edward Mota. Un padre de familia que desde los 18 años tuvo que salir a trabajar para ganarse el sustento. La contratista Rodan Marine le abrió las puertas y se inició como obrero de muelle. Fue adquiriendo conocimientos y se desempeño en otras áreas de la industria. Cuenta hoy con 26 años y cuatro hijos que mantener, tres hermanos desempleados a los cuales ayudaba y por si fuera poco su esposa espera un nuevo vástago. Mota se encuentra desesperado e impotente como miles de trabajadores que sufrieron los despidos masivos durante las expropiaciones.

“Tengo una familia que depende de mí y me costó entrar en Rodan Marine. Es frustrante que luego de ocho años trabajando en una empresa, dando lo mejor de mí para aportarle a la industria y mejorar mi calidad de vida, a un Presidente se le ocurra borrar de un solo viaje años de historia y con ello dejar sin el pan a miles de familias”, expresó Mota. Mota sigue desempleado y ha recurrido a desprenderse de sus bienes adquiridos con esfuerzo para sostener su familia. “Es irónico, pero lo que conseguí trabajando en Rodan, mi televisor y un aire acondicionado ahora he tenido que empeñarlo y ya me falta poco para empeñar la nevera para poder sobrevivir. Es injusto y triste para uno como ser humano”, comentó el trabajador con impotencia.

David contra Goliat Mota, armado de valor, ha tomado dos veces las instalaciones de “El Menito” buscando una respuesta pero “los gerentes me atienden y me caen a mentiras como ya es costumbre. Lo único que exijo es mi pago por liquidación. Si ya Rodan Marine no existe sino que es PDVSA, entonces es la industria la que debe pagarme. Mi esposa está embarazada y creo que en una semana da a luz. Responsabilizo a PDVSA si a mi esposa y a mis hijos les pasa algo porque no tengo los medios como llevarla a una clínica y cubrir todos los gastos que un parto amerita y mis otros chamos mueren de hambre”. Es un obrero con su familia contra la gigantesca PDVSA. Es una lucha desigual que los trabajadores zulianos y venezolanos tienen que enfrentar.

Edward Mota seguirá tomando instalaciones de PDVSA con su familia hasta que le paguen.

JUNIOR NÚÑEZ

JAIRO ESCARAY

“Fui un obrero feliz mientras trabajé en las contratistas”

“En las contratas expropiadas vi la oportunidad de progresar”

ANA MARÍA VILORIA

ANA MARÍA VILORIA

Ernesto Ríos Blanco

Ernesto Ríos Blanco

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on el dolor reflejado en su rostro, Junior Núñez, de 27 años, ex trabajador petrolero del municipio Lagunillas, lamenta todos los días la aplicación de la medida de estatización de las contratistas que incluye a la empresa que le dio muchas satisfacciones durante cuatro años y dos meses. “Fui un obrero de campo. Trabajaba duro como todo obrero, pero era satisfactorio. Yo vivía feliz, porque con mi trabajo yo garantizaba el surgimiento de mi familia. Ahora me veo sin nada en la mano, madrugando y mendigando día y noche un puesto de lo que sea en la industria petrolera”, expresó Núñez. Señala que mientras formó parte de la contrata Cobsa y después la empresa Kaplan Industry, “trataban a uno con respeto. Ahora se burlan del obrero, nos ponen hacer colas en las puertas de los muelles y nos hacen firmar censos y luego hablan para adelante y para atrás. Mientras tanto, me ha tocado pintar casas, sacar monte, pegar bloques para medio comer y vestirme”, comentó el trabajador. Junior Núñez denunció acciones clandestinas orquestadas desde la gerencia de PDVSA para ingresar personal ajeno al municipio. “En los muelles nos dicen que la cuota de ocho mil absrobidos ya está agotada, pero también nos dicen que el presidente Chávez tiene información de que entregarían fichas blancas a once mil empleados, total no sabemos si son ocho o son once los que van a ingresar a la industria, pero más cierto es que ni siquiera sabemos cuántos

Junior Núñez denuncia que PDVSA engaña a los ex trabajadores de las contratistas expropiadas.

son los que han entrado”, expuso. “Están trayendo gente foránea a trabajar al municipio, el sobrino del gerente, el vecino, el amigo, el recomendado, que vienen de Maracaibo, La Cañada y Machiques y aquí nos dicen que no hay censo para nadie mientras ingresan autobuses con gente de otras partes por los otros portones de estos muelles”, denunció Núñez. Éste trabajador es uno más de los que aún esperan les cancelen sus servicios, “pero no se sabe cuándo. En Cobsa tuve cuatro años y no recibí ni un bolívar y ahora en Kapplan, en pleno proyecto, nos pararon, nos botaron y lo que me dieron fue mil bolívares fuertes que hace tiempo se esfumaron. ¿Será que me van a pagar los cuatro años de trabajo en Cobsa?, yo creo que no”, vaticinó el obrero desalentado.

uenta con 30 años, tiene dos niños pequeños, una niña de tres años y un varón de un mes que alimentar. Pese a contar con la ayuda de sus padres y su familia, ve lejano el sueño de obtener un trabajo estable. Es la historia de Jairo Escaray. Cobsoca le dio la oportunidad como trabajador ocasional y “a penas tuve tres meses trabajando como marino, manejando lanchas de transporte de personal. Pensé que era la oportunidad de adiestrarme y lograr un puesto fijo porque en el sector construcción no alcanza el dinero para nada y mi angustia son mis dos hijos”, manifestó Escaray. Cuando comenzó a trabajar en la contrata, Jairo atesoraba expectativas de futuro, pero, “Llegó ese día 8 de mayo y se acabaron los sueños. Nos dijeron que por confiscación de las empresas, los proyectos se paralizaban y nosotros debíamos abandonar los muelles hasta que nos volvieran a llamar”. Se ha hecho larga la espera de la llamada prometida y Escaray volvió al sector construcción. “Eché para atrás como el cangrejo al regresar al trabajo de albañil. Ahorita nadie está construyendo. En este municipio no hay trabajo, no hay comercio, no hay esperanza. Ya me da pena con papá que gana poco y tiene que darme para mis hijos. Tenemos dos meses acudiendo a llamados falsos de gerentes y supervisores de PDVSA que nos ilusionan haciéndonos firmar una lista que todo el mundo sabe que no pasa de los muelles y uno asiste porque no

Jairo Escaray ha desarrollado otras habilidades que le permiten vivir ante la falta de empleo.

nos queda otra”, argumentó el ex trabajador petrolero. Sin embargo, este escenario desolador no amilana a Jairo Escaray quien ha explotado otras habilidades para vivir. “A parte de la construcción me ayudo cortando pelo. Aprendí el oficio y con eso me defiendo. No era lo que aspiraba pero ante la crisis uno debe rebuscarse. Ese es el destino de los obreros en este país donde lamentablemente nos han quitado todo el derecho a progresar y a mejorar”, comentó Escaray. Jairo no pierde la esperanza de que cambien las cosas “porque no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista y llegará el día en que la masa obrera se unirá y reclamaremos nuestros derechos. Ya tenemos antecedentes de lucha”, advirtió.


Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009 PRODUCTOS EXCLUSIVOS VERSIÓN FINAL 17

Contratistas Petroleras LEIDERMAN CASTELLANOS

1986

Descienden los precios del crudo de 28 a 10 dólares.

JOSÉ GONZÁLEZ

“El escenario es oscuro, pero ¡habrá mañana!” LUIS TORRES

“Ese no es el socialismo que nos prometieron” LUIS TORRES

Leiderman Castellanos: Entre la rabia y la larga espera, es un obrero de 52 años que, pese a llorar la pérdida de las empresas que le dieron la oportunidad de progresar, aún cree en el mañana.

Ernesto Ríos Blanco (Unica 2006) erios@versionfinal.com.ve

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u cabellera blanca denota experiencia. Su tez aún se conserva joven. Las ojeras dibujan en su rostro los trasnochos infructuosos de un hombre cuya mirada refleja el luto de haber perdido un tesoro, una oportunidad y toda una experiencia. “Nos quitaron el pan de la boca, nos arrebataron nuestras empresas, porque ocasional y todo, allí teníamos trabajo, progreso y futuro y ahora lo que tenemos es hambre y frustraciones”. Fueron las primeras palabras de la entrevista con Leiderman Castellanos, ex trabajador ocasional de las contratistas que hoy son PDVSA y cuyo traspaso inesperado lo dejó desempleado. Leiderman cuenta con 52 años de vida, de ellos, 27 los ha dedicado a trabajar para la industria petrolera en el rol de obrero ocasional en diferentes empresas contratistas (Ehcopeck, Z&P, CPVEN, entre otras). “Pocos son los hombres capacitados para operar una grúa. Es una maquinaria pesada y cuyo trabajo requiere precisión y destreza”, explicó Castellanos. CPVEN fue la última contratista que le dio empleo como operador de grúa y a pesar de no haber sido expropiada aún, la empresa tiene tres meses paralizada. “Se rumora que en los próximos días la van a expropiar y para eso paralizaron los trabajos. Son tres meses los que tenemos sin trabajar y sin cobrar un bolívar. CPVEN está lista, ya está en manos de PDVSA”, aseguró el obrero. Las ocho personas que habitan en su hogar vivían tranquilas hasta el pasado 8

1996

Aumenta la producción de PDVSA. Se abren licitaciones a empresas extranjeras.

de mayo, día en que llegó la angustia a los familiares de Castellanos. Cinco niños pequeños, su compañera y su madre ahora padecen la cruda realidad del hambre y la necesidad. “No encuentro que hacer para inscribir a los niños en el colegio. Temo que pierdan el año. La escuela de ellos implica dinero para inscribirlos, lista escolar, uniformes y zapatos. A eso súmale la leche, las medicinas y sus cosas personales: talco, toallas sanitarias, perfume, desodorante, y paremos de contar”, expuso el angustiado trabajador. Escenario oscuro Para Leiderman el peor tormento de esta situación es “que mi madre, que ya está mayor ha salido a lavar y planchar ajeno, igual mi esposa, y los niños se quedan solos en la casa a veces hasta tarde y no tienen que comer. Yo mientras tanto, se puede decir que ya vivo a las puertas de los muelles buscando un trabajo, censándome y arañando, marañando, trabajando la mecánica y la albañilería. ¡Jamás me vi en este trance!”, exclamó Castellanos. Sin embargo, para Leiderman esta infausta historia no es para siempre, pues, apuesta a la dignidad y la capacidad de lucha de la masa obrera que a lo largo de la historia venezolana se ha hecho sentir con logros importantes. “El escenario es oscuro, pero, ¡habrá mañana!. Aquí se burlan del obrero de Lagunillas, nos ignoran. Ingresan personal de otros municipios y estados en los puestos que son nuestros. Resistiremos y reaccionaremos cuando las circunstancias lo ameriten y entonces construiremos de nuevo el camino que nos lleve al futuro”, advirtió.

Para José González es doloroso que personas no capacitadas realicen trabajos delicados en los muelles y campos petroleros a causa del amiguismo y el clientelismo político.

Ernesto Ríos Blanco (Unica 2006) erios@versionfinal.com.ve

C

on 20 años ininterrumpidos trabajando en la industria petrolera venezolana, José González, nacido en Lagunillas hace 50 años, ha logrado consolidarse como operador de grúa, trabajo delicado que requiere adiestramiento. Muchas han sido las contratistas que otrora le abrieron las puertas, siempre en rol de trabajador ocasional y de ésta manera mantenía estable un hogar de nueve personas. A poco más de dos meses del proceso de nacionalización de las empresas que prestaban servicios a PDVSA, el hogar de José hizo la transición de estable a inestable. En esta entrevista, González compara un escenario con otro para reflejar una cruenta realidad. “Nunca pensé que harían una expropiación tan severa y descontrolada como la que hicieron en la COL. Las expropiaciones desequilibraron todo y dejaron al obrero a merced del hambre y la necesidad”, aseguró González. El obrero refirió que “antes las perspectivas de trabajo eran buenas y a pesar de ser trabajadores ocasionales, siempre había oportunidad. Se tomaba en cuenta la experiencia de un trabajador que como en mi caso, estamos certificados por la propia PDVSA y reconocían nuestra labor. Ahora vale la pena preguntarse, ¿de dónde van a sacar operadores de grúas certificados, encuelladores, soldadores y marinos calificados para maniobrar los equipos en el Lago?”, se pregunta González, intrigado.

El socialismo aplicado De acuerdo con los ex trabajadores, al presidente Chávez lo engañan, aunque esta tesis está desmoronándose poco a poco por lo evidente del problema, según dicen los propios desempleados de Lagunillas. Obreros que aún creen en la “ideología bolivariana socialista”, están decepcionados de la forma como PDVSA aplica el socialismo. José González, se hizo un técnico calificado en la industria. Las contratistas le abrieron las puertas y sus 20 años de experiencia le sirven ahora sólo para hacer lo que él llama “marañas”. “No es justo que a uno le paguen de esta forma. Ni siquiera el Ministro Ramírez tiene la idea de lo que uno padece en esos campos, no conoce porque no ha vivido lo duro que es el trabajo donde está en juego la vida y sin embargo lo hacíamos con amor y con entrega. ¿O de dónde creen que sale la producción petrolera de este país? Nos pagan con engaño, con mentira y con estafa. Ese no es el socialismo que nos prometieron a la masa obrera”, sentenció González. José relata con tristeza su situación económica: “Nos toca comer pan con huevo todos los días. Yo le digo a mis hijos que no se cansen del menú y que le den gracias a Dios porque al menos mis trabajos alcanzan para eso. Del colegio no me quiero ni acordar, pues, si no trabajo ahora mismo, se quedarán sin estudiar. Tengo una hermana que está incapacitada y que depende de mí, ahora no sé de dónde voy a sacar para ayudarla. Mi situación ha puesto a correr a toda la familia, mientras el Ministro y los gerentes se hacen millonarios”, acotó.


18 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras Milagros Ramos es una joven mujer que atesoraba la esperanza de entrar en una de las contratistas petroleras

“PDVSA nunca me ha tomado en cuenta” LUIS TORRES

Cuenta con un amplio currículo que refleja un nivel de preparación profesional importante. Ha tocado repetidas veces las puertas de PDVSA, pero por no tener “palanca” no ha logrado entrar. Ernesto Ríos Blanco (Unica 2006) erios@versionfinal.com.ve

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entada en la acera, a las puertas de la antigua Venezuela Driver, hoy PDVSA y rodeada de cientos de compañeros, se encontraba en días pasados Milagros Ramos. Una joven mujer que desde pequeña supo lo que quería y hacia donde dirigir sus esfuerzos. Era extraño ver en medio de una masa de más de 300 hombres solicitando trabajo en un muelle petrolero a una dama, pues, los estereotipos sociales establecen que “los trabajos duros sólo son para hombres”. Milagros ha vivido para romper esos paradigmas, sin embargo, siente que más han sido sus fracasos que sus logros. Aunque en el fondo, ella se siente triunfadora. “Soy una mujer preparada y capacitada para ejecutar cualquier trabajo dentro del campo donde me

he formado”, aseguró la dama. explicó que no justifica que “a estas alturas, con todo el currículo que me he esforzado en construir, PDVSA no me ha tomado en cuenta. Soy ingeniero petrolero, no soy una analfabeta. Tengo preparación, he hecho cursos y me he mantenido al día con los avances que exige el campo. Sin embargo, aquí me tienen, sentada en una acera con mi carpeta bajo el brazo, buscando un trabajo así sea de limpia pisos en un muelle. De algo tenemos que vivir en estos tiempos de crisis”, comentaba Milagros, casi ininterrumpidamente.

Se esfumó la esperanza Luego de su acelerado relato, Milagros Ramos, hace una pausa, respira profundo y prosigue. “Las empresas contratistas eran mi esperanza de adentrarme a la industria porque directamente en PDVSA, no he sido tomada en cuen-

SEGUIRÁ LUCHANDO Milagros Ramos se graduó de Ingeniero Petrolero en la promoción del 2004 en el Instituto Universitario Politécnico Santiago Mariño, donde ha realizado otros cursos inherentes a su carrera. Manifiesta que se hará vieja de tanto esperar un trabajo digno. Pese haber hecho todas las diligencias posibles, ni en PDVSA ni en las contratistas ha podido entrar. Éstas últimas eran su esperanza. Su lucha ahora es por entrar en la estatal.

Milagros Ramos es una de las víctimas de la indiferencia de PDVSA. A pesar de haber prestados sus servicios al socialismo bolivariano, sigue desempleada.

ta. Ahora con las expropiaciones se me hace cuesta arriba porque nuevamente me toca mendigarle a PDVSA”, relató la ingeniera. “Le exigen a uno experiencia y si no tienes palanca tampoco te permiten entrar. Es el mismo sufrimiento

de los obreros. Nos puede dar una insolación frente a los muelles y nada que nos emplean”, contó Ramos.

La docencia le da de comer Dentro de la lógica de una des-

empleada cuyo desespero por surgir la tiene pidiendo empleo de “lo que sea”, está la reflexión de muchos otros desempleados: “¿De dónde saca uno la experiencia si ni de obrero le dan trabajo? He dado clases en el área de perforación en la Misión Técnica Ribas, y actualmente estoy en la Unión Bolivariana de Trabajadores (UBT) formando a los obreros de PDVSA”, manifestó la ingeniera. Milagros Ramos ha tenido que buscar trabajo de obrera siendo una profesional calificada.

Yolitza Chirinos es madre de familia y único sostén de su hogar

“Le he echado piernas sola a la vida” Sola consiguió entrar en una sub contratista como cocinera. Ha levantado a sus cuatro hijos sola, pues, su marido la abandonó. Su madre y su hermana la ayudan, pero no es suficiente. LUIS TORRES

Yolitza Chirinos tiene experiencia en el área de cocina y cuarto semestre de educación preescolar pero nadie la toma en cuenta para emplearla.

Ernesto Ríos Blanco (Unica 2006) erios@versionfinal.com.ve

Y

olitza Chirinos, tiene 32 años. Es otra víctima de la expropiación de las empresas que prestaban servicios a PDVSA. Desde pequeña ha tenido que enfrentar la vida. Es una humilde mujer de Lagunillas que se ha visto obligada a vivir en la calle para buscar el pan. “Marañando ando, visitando muelles todos los días, llevando sol, pasando hambre y dejando a mis hijos solos”, manifestó la dama. Gran parte de su etapa laboral la vivió en “Momaca”, una distribuidora de comida que tenía contrato con la expropiada Supply Diving Venezuela. Desde la toma de éstas empresas por parte de la Estatal petrolera, Chirinos no ha podido encontrar un buen empleo. “He tocado varias puertas, he entregado currículo por todos lados, he ido a almacenes y me miran de pie a cabeza y me dicen

que por la edad no puedo entrar en almacenes. Tengo cuarto semestre de Educación Preescolar y también he tocado esas puertas pero no entro porque no soy egresada de las misiones y me dicen que si no he estudiado en las misiones no puedo dar clases en ninguna parte”, contó Chirinos.

La espera que no acaba Más de dos años tiene Yolitza fallando en el intento de entrar fija en una contrata, pero, “al menos cuando las empresas tenían vida, las sub contratistas nos empleaban. Allí en Momca fuimos más de 50 los que quedamos sin trabajo”, expuso la dama. Chirinos dejó entre ver que el pago por sus servicios no fue el que merecía, sin embargo, no tuvo opción que “agarrar aunque sea fa-

llo”. “Nos dieron una TEA (Tarjeta de Alimentación) y dos mil bolívares fuertes para que nos quedáramos tranquilos pero lo demás no lo recibí.

Suplica ayuda “Yo vivo desesperada. Cuando llego a mi casa y veo a mis cuatro hijos, se sube la tensión de saber que no les estoy dando lo que ellos necesitan. Menos mal pude inscribirlos gracias a que mi hermana y mi mamá me ayudan, que si no fuera por eso, los tuviera pasando más hambre aún”, manifestó la ex cocinera. Su difícil situación la obliga a implorar un trabajo. “Por amor a Dios, presidente Chávez, Ministro Ramírez, escuchen a esta madre desesperada, necesito trabajar”, suplicó.

“SÓLO PIDO QUE ME AYUDEN POR MIS HIJOS” Al menos dos días de trabajo a la semana es el ruego de estas mujeres desesperadas. Yolitza tiene 4 hijos: “Uno de 15 años, otro de 11 y dos niñas de diez y cinco años. No les he comprado uniformes para el colegio, hacen una comida al día y cuando se enferman no me queda más que rezar”, destacó la dama.


Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009 PRODUCTOS EXCLUSIVOS VERSIÓN FINAL 19

Contratistas Petroleras

1999

Chávez llega al poder.

JOSÉ RODRÍGUEZ

LUIS ALFONSO GARCÍA

“Me apresaron dos veces por salir a pescar”

“Sólo comemos arroz y huevo durante el día”

Ernesto Ríos Blanco El ser encuellador y obrero de taladro no le impidió a José Rodríguez, trabajador residenciado en Lagunillas y padre de dos niños (de cuatro y nueve años), buscar como alternativa el difícil trabajdo de la pesca. Y más difícil se torna el rol de pescador cuando debe sortear la posibilidad de ser apresado por pescar en una zona prohibida. “Me siento presionado porque la falta de dinero pega y los muchachos no entienden que no hay dinero y el hambre se hace insoportable para ellos. Las listas escolares de los muchachos me salen en casi 600 bolívares a razón de 300 cada una y eso me ha llevado a tener que tomar un bote y salir de madrugada a pescar para poder comer”, expuso Rodríguez. El frustrado trabajador acotó: “Me han llevado preso porque el bote que tene-

mos es a remo y no podemos ir muy lejos y cuando lo hacemos cerca de los muelles nos amenazan. La última vez nos quitaron todos los camarones y los pescados los tiraron en la orilla y se dañaron”, relató. Otro oficio que le ha tocado ejercer para rebuscarse es el de lavar y pulir carros, lo cual no le deja buenas ganancias pero al menos le permite juntar un poco más de dinero. “Es frustrante para uno que se desenvuelve en una labor dentro de la industria y que busca escalar posiciones haciendo cursos y aprendiendo y verme en la necesidad de ponerme a lavar carros o de pescar para poder subsistir”, expresó con desaliento. Engañado Rodríguez apoya el proceso que lleva a cabo el presidente Chávez fundamentado en su discurso identificado con la masa

LUIS TORRES

José Rodríguez seguirá luchando por un trabajo digno.

obrera, pero “nos sentimos realmente burlados y engañados porque esto no fue lo que el Presidente prometió. Hemos firmado cualquier cantidad de censos y papeles pero no nos dan respuestas. Nos dicen que ya no hay chance, que no habrán más censos, que esperemos y en esa espera estamos desde hace más de dos meses y muchos de nosotros desde hace ya más de un año”. Rodríguez asegura que seguirá pescando aunque lo metan preso.

Ernesto Ríos Blanco Tubo Servicios fue la última contrata que le dio a Luis Alfonso García, un trabajo ocasional. El área de lubricación y talleres era el lugar donde García se desempeñaba en calidad de obrero. A partir del proceso de expropiación de las contratistas de la COL, García vió cerrada todas las oportunidades de volver a trabajar. Reside en Lagunillas y lleva consigo la carga de un hogar donde debe mantener a su madre, esposa y sus cuatro hijos. La vida ha sido una dura escuela donde a Luis Alfonso le ha tocado aprender cualquier tipo de oficio. “Ya no encuentro que hacer. Desde que arrancó este problema con las contratistas no veo una luz al final del túnel. Conseguir un trabajo de obrero en un muelle es una misión imposible y por eso he tenido que

buscar de ayudante de construcción, limpiando patios, sacando monte y pescando para poder, a trazos, llevar el sustento a mi casa”, comentó el obrero. Los más afectados “Mantener un bebe de un año no es tarea fácil. Se necesita dinero para todo; pañales, comida, medicina, ropa, zapato, juguetes. Pero a parte de eso, mi hijo de 13 años pasó para séptimo grado y actualmente necesita BsF 50 para poder inscribirse en el liceo. Cualquiera diría que eso es una miseria, pues, para nosotros es oro porque yo daría cualquier cosa por conseguirlos y asegurarle los estudios a mi chamo”, describió García, su angustiante situación. Por la mente de cada obrero desempleado pasa cualquier ocurrencia para buscar insumos para sobrevivir, pero en la mayoría de los casos prima la sensatez. “No he salido a robar por-

LUIS TORRES

Fernando Sánchez sólo espera una respuesta concreta.

que sería peor para mi familia si me matan o me meten preso, pero el hambre tiene cara de perro. Sólo en Dios podemos confiar y a él le pido todos los días cuando salgo de madrugada a pedir trabajo en los muelles”, expresó el ex empleado. En un verdadero acto de supervivencia se ha convertido la vida de Luis Alfonso y su familia. “Sólo comemos arroz y huevo durante todo el día y a veces ni eso”, comentó cabizbajo el frustrado ex trabajador petrolero.

FERNANDO SÁNCHEZ

NOE MACHADO

“Trabajé seis meses y sólo me pagaron dos”

“¿De qué me sirven 11 años de experiencias?”

Ernesto Ríos Blanco Como muchos obreros de Lagunillas, el joven Fernando Sánchez empezó a trabajar de obrero a temprana edad. El no tener una profesión lo limitó a conseguir trabajos ocasionales dentro de la contratista P y S, donde laboró por última vez. Tiene la suerte de contar con la ayuda de su padre pero le resulta insuficiente para poder levantar a su pequeño hijo de diez meses de nacido. “Lo dejé enfermo, anoche tuvo fiebre de 40, sin embargo a nosotros los obreros no nos queda otra que abandonar a veces la casa para ir en busca de un trabajo, el que sea, pero lo importante es trabajar para poder medio ayudarse”, comentó Sánchez. La esperanza de este obrero se desvaneció cuando nacionalizaron las contratistas petroleras, pues

estas le sacaban de apuro. “Ahora me ha tocado picar monte y recoger basura. ¿Qué le pueden dar a uno por eso?”, se pregunta con tristeza el ex trabajador. Ni beneficios ni pago Sánchez contó que como muchos otros compañeros “trabajé seis meses y sólo me pagaron dos. Es decir me quedaron debiendo cuatro meses, me quitaron la clínica, me quitaron el TEA (bono alimentario), me lo quitaron todo”. Refirió el ex empleado que “la última liquidación que P y S me tenía que pagar era de ocho mil bolívares fuertes de los cuales sólo me dieron mil quinientos”. Pese a haber acudido a la inspectoría del trabajo y a otras instancias a exponer su caso, “la empresa se niega a pagarme puesto que dice que no tienen dinero porque PDVSA no les ha cancelado a ellos”, explicó Sánchez.

LUIS TORRES

A Fernando Sánchez las siglas de PDVSA le huelen a estafa.

Éste obrero se pregunta: ¿Cómo va haber progreso en este país si no hay trabajo?, ¿Lo que nosotros hacíamos en calidad de obreros dentro de la industria, quién lo va hacer ahora?, ¿Cómo hablan de una producción estable cuando los trabajadores estamos aquí en la puerta de los muelles, sin hacer nada y muriéndonos de hambre?” Son preguntas que aún están sin respuestas por parte de la estatal petrolera venezolana.

Ernesto Ríos Blanco A Noe Machado, obrero de Lagunillas, el término “utilidad social” utilizado en el proceso de expropiación de contratistas, le sonaba a “garantía de entrar en PDVSA”, pero hoy se siente burlado y en la casa. Machado tenía once meses trabajando en la hoy expropiada empresa Nautica Petrolera. Pero además sólo dos meses lo separaban de cumplir once años trabajando en la industria petrolera, en el área de soldadura y ayudante de taladros. “¿De qué me sirven once años de experiencias en la industria si al final voy a terminar como chofer de camiones y en la calle?”, es la pregunta sin respuesta que atormenta día y noche a este humilde trabajador. Machado expresa con impotencia que “no se puede creer cómo engañan al Presidente de la República y éste no se percata de unos

ministros traidores que tiene a su alrededor. Las instituciones están podridas, llenas de traidores y Chávez no se da cuenta”, enfatizó el decepcionado obrero. La denuncia Machado criticó la manera inescrupulosa y sínica con la que, según él, se ha fichado a un grupo de trabajadores. “En este proceso de confiscación de empresas, PDVSA ingresó a los muelles de Lagunillas a un personal que no pertenece al municipio. personas de La Cañada de Urdaneta, San Francisco, San Lorenzo y Tomoporo, irrespetando a la gente preparada del municipio”, señaló Machado. Al igual que el resto de sus compañeros, Machado se siente irrespetado por la manera “inhumana” con la que tratan al obrero en la industria. “Rafael Ramírez es un burgues. Él viene de familia rica. No sabe lo

LUIS TORRES

Noe Machado está convencido del falso socialismo de PDVSA.

que es pasar hambre y pasar sol. Nunca le ha tocado madrugar y pararse todo un día sin tomar agua, sin comer, sin dormir frente a un muelle a anotarse en un censo que es toda una farsa. Eso no es socialismo, aquí estamos muy lejos de practicar ese socialismo del cual habla el Presidente porque sus ministros y gerentes son unos burgueses y capitalistas que actúan peor aún que los de la cuarta República”, sentenció con energía Machado.


20 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras

¡Sus hombres y sus historias! LUIS TORRES

JOSÉ MORENO

“Las contratistas eran los brazos de PDVSA” Ernesto Ríos Blanco En una de tantas concentraciones de trabajadores petroleros, hoy desempleados, realizada en la famosa pasarela de Las Morochas, en Ciudad Ojeda, estaba el señor José Moreno, un hombre mayor, de casi 60 años, que nació en Lagunillas y comenzó a trabajar desde muy joven. Con 11 años de experiencia como marino y cocinero al timón del barco “Don Carlos”, perteneciente a la contratista Vinccler C.A, Moreno dio comida, vestido y educación a sus cuatro hijos mientras ayudaba a sus trece nietos. Desde el momento en que se produce la toma de las empresas contratistas por parte de la estatal petrolera venezolana, José Moreno vio nula la posibilidad de, al menos,

recibir lo que por tantos años de servicios le corresponde. “Soy un hombre mayor, no tengo ninguna necesidad de estar aquí parado bajo este sol inclemente reclamando un pago que por ley me corresponde. Y estoy aquí luchando porque tengo dos hijos en situación de desempleo gracias a la ‘nueva PDVSA’ y la confiscación de las contratistas”, expuso Moreno. El ex trabajador recordaba la minuciosa selección de personal que hacía PDVSA para realizar trabajos en los campos petroleros. “Era difícil entrar a un muelle tan solo hacer labores de limpieza y más difícil aún era entrar a un barco y timonearlo o ser cocinero de esa embarcación. Tenías que reunir un perfil calificado, certificado, con experiencia y de conducta irreprochable, es

decir, debías ganarte el puesto por méritos”, manifestó Moreno. Sin embargo, el señor José relató cabizbajo, como han cambiado las cosas. “Las contratistas eran los brazos de la industria porque en ellas PDVSA tenía servicios de calidad garantizados. Ahora que las empresas no existen, PDVSA no tiene el personal calificado para desempeñarse en los campos. Están dando fichas a personas puestas a dedo por la alta gerencia de la industria sin medir sus capacidades y la muestra de la veracidad de lo que hoy digo está en este caudal de trabajadores desempleados que hay en la COL. Ellos eran quienes, hasta hace poco, operaban los equipos en los campos petroleros. Están calificados y conocen su trabajo. El gobierno los tiene pasando hambre.” sentenció Moreno.

José Moreno reflexionó sobre los criterios de escogencia de trabajadores por parte de PDVSA.

RAÚL GRANADILLO

RUBÉN SUÁREZ

“Estas empresas fueron el trampolín de mi progreso”

“Me ha tocado trabajar de vigilante ante la necesidad” LUIS TORRES

LUIS TORRES

Ernesto Ríos Blanco

Ernesto Ríos Blanco

A sus 32 años, Raúl Granadillo, nacido en Lagunillas, fue escalando peldaño a peldaño el camino a un progreso estable. Horizonte, éste, que se detuvo hace poco más de dos meses. Las contratistas petroleras eran el puente para que Raúl pudiera establecerse en la PDVSA de “todos los venezolanos”, pero ese puente se derrumbó. “Empecé a los 18 años, trabajé en Casigua El Cubo como obrero raso, limpiando. De allí, por mi constancia y mis ganas de aprender, empecé a subir hasta hacerme encuellador. Trabajé con Servicios Ojeda y luego en Maersk, más tarde con Gabo Servicios, Cascop, Leomoca y otras contratas más, siempre como ocasional. Allí fui aprendiendo hasta hacerme un encuellador calificado”, relató Granadillo. No obstante, lo que esperaba este joven obrero no se dio. Nunca recibió una ficha blanca de PDVSA. “Es eso con lo que sueña todo obrero porque para eso uno aprende y se foguea, pero, al menos, en las contratas trabajabamos de forma ocasional lo que nos hacía mantenernos cerca de la industria para optar por un puesto. Ahora no vemos la oportunidad de progresar ni de salir adelante”, expuso el encuellador. Granadillo resaltó la importancia de conocer el trabajo: “Un encuellador es un especialista en el área de perforación. Al momento de perforar, el encuellador debe halar tuberías y colocarlas en las cabrias. Además debe estar pendiente de las bombas, chequear los tanques de lodo y de las válvulas de seguridad. Es un trabajo bastante fuerte y amerita precisión”, explicó

Consorcio Zumaque le dio la oportunidad a Rubén Suárez de laborar como empleado ocasional en el mantenimiento de diques, drenajes y áreas verdes. “Me ha tocado trabajar de vigilante ante la necesidad de comer, porque, con las expropiaciones entrar a la industria es una misión casi imposible”, contó este ex trabajador de 38 años. Sus dos hijos de 12 y 10 años, dependen exclusivamente de él. Su compañera debe cuidarlos y no puede salir a trabajar. “Todavía no tengo para cubrir los gastos de la escuela de los chamos ni la ropa y yo tengo más de tres meses que no me compro ni una camisita porque encontrar dinero es un calvario para uno”, dijo Suárez. Para Suárez, las expropiaciones han significado una paralización en la economía del municipio. “Nosotros llegamos a ser más de dos mil desempleados sólo en Lagunillas. Pero además están compañeros y compañeras de sub contratistas que preparaban y distribuían comida a las empresas. Los que transportaban equipos y herramientas, los que hacían comida rápida frente a los muelles, cada uno con hijos y todos pasando hambre. Esa es la realidad que nos dejan las expropiaciones”, aseveró Suárez. La mayor impotencia y rabia que siente este ex trabajador es “que no nos dan respuestas. Es una sola ‘mamadera de gallo’ lo que tienen en los muelles con nosotros. No es posible que nos toque hasta dormir frente a las puertas a la espera para censarnos y tengamos que repetir esa situación una y otra vez sin que algún gerente,

A Raúl Granadillos no lo reportaron fijo a PDVSA, pero en las contratistas tenía la oportunidad.

al detalle el ex trabajador petrolero. Agregó que “no cualquier persona puede asumir ese puesto, pues, tiene que acumular años de experiencia y formación para estar en capacidad de asumir un trabajo tan delicado”, aseguró. Sin embargo, según este obrero, “PDVSA está pasando por alto ese requisito y de manera hermética y premeditada ingresa a los campos a personas no capacitadas y que adolecen de la experiencia suficiente para esas labores. Igual está ocurriendo con los taladradores, los perforadores y los marinos. Personas ajenas al municipio y sin la capacidad suficiente para atender los campos”. Granadillo asegura que con su experiencia no debería quedar sin empleo.

Rubén Suárez está convencido del fraude de PDVSA en la selección de sus nuevos ingresos.

algún delegado de la industria se digne a darnos respuesta y a darnos trabajo que es lo que teníamos y lo que queremos”, reprochó Suárez. El punto coincidente en cada testimonio de estos hombres y mujeres que un día se sirvieron de las contratistas petroleras para poder vivir está en la actitud “engañosa y descarada” con que, según ellos, PDVSA ha absorbido a los menos de cinco mil trabajadores que recientemente recibieron sus fichas de ingreso a la industria. “Gente traída de Caracas, Valera, Maracaibo, Machiques y otras partes, sin estar calificados y sin tener la experiencia, pasando por encima de nosotros los obreros de Lagunillas, son los que está absorbiendo PDVSA”, señaló Suárez.


Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009 PRODUCTOS EXCLUSIVOS VERSIÓN FINAL 21

Contratistas Petroleras

2006

Trasnacionales que operaban en la Faja del Orinoco entran a los convenios cooperativos de empresas mixtas, para no ser estatizadas.

JOSÉ UGAS

ERNESTO GOTERA

“Nos estamos cansando de este peloteo”

“La entrega de las fichas es un engaño”

Ernesto Ríos Blanco

V

arios patrones han trabajado a su lado, han visto su desempeño y por eso se ha mantenido durante diez años trabajando de ocasional fijo en el rol de marino. Namarca, fue la última sub contratista que dio empleo a José Ugas. Hombre de 44 años que ha resultado afectado producto de la aplicación de la Ley que Reserva al Estado Bienes y Servicios de los Hidrocarburos, que dio paso a la estatización y expropiación de 74 empresas contratistas en la COL. La experiencia adquirida por Ugas lo lleva a expresar reflejando gran seguridad lo peligroso que resulta la absorción a la industria de un personal que no conozca el trabajo. “Un marino debe conocer la embarcación al detalle para poder hacerle

mantenimiento y tener el conocimiento y la experiencia para sustituir al patrón cuando éste lo requiera. Es decir, el marino debe estar capacitado para hacer lo mismo que el patrón”. No obstante, Ugas alerta que “las personas que están entrando en la industria, no sólo son ajenos al municipio y muchos de ellos a la COL, sino que desconocen el trabajo y por ende la producción es mínima y los riesgos de accidentes son mayores”, dijo. No se justifica Ugas rechaza el trato que le ha dado PDVSA a los trabajadores después de las expropiaciones. Al respecto dijo: “No se a qué está jugando PDVSA con este peloteo que tiene con nosotros. Nos estamos cansando del peloteo, del engaño, de la injusticia, porque sabemos que están ingresando un personal nada calificado e integrado

LUIS TORRES

Ernesto Ríos Blanco

L José Ugas está preocupado por el futuro escolar de sus hijos.

por gente que no pertenece a la COL. Es peor aún de lo que hacía la vieja PDVSA, porque con la vieja PDVSA, al menos respetaban a los trabajadores”, sentenció el obrero. Cinco personas dependen exclusivamente de José. Sus tres vástagos ameritan alimento, vestido, juguetes, medicina, colegio y José no tiene como cubrir esos gastos. Ugas exige al Gobierno el trabajo que prometió.

a historia de éste Técnico Superior en Seguridad Industrial no difiere de las del resto de los obreros que han expresado sus testimonios de supervivencia en este trabajo. Ernesto Gotera, tiene 44 años. Le sirvió por cuatro años a la empresa Instrumentación y Electricidad C.A. (Inelca). Es natural de Lagunillas y se siente engañado con la entrega de las fichas de ingreso por parte de la industria petrolera venezolana. Gotera estaba satisfecho con su trabajo. “Mi trabajo era el de velar el cumplimiento religioso de todas las normativas exigidas por PDVSA en la realización de los trabajos en el campo, especialmente la automatizaciones de los múltiples y plantas compresoras de gas. Un trabajo delicado y minucioso para lo cual se necesi-

ta experiencia. A pesar de ser un obrero ocasional, Gotera recibía trabajo semanalmente y con ello mantenía su hogar. Hoy la historia es diferente para éste y los centenares de desempleados de la COL. “Cambiaron las cosas, pero para peor. Ahora si es verdad que no hay trabajo, nos quedamos sin nada y sin oportunidades gracias a las expropiaciones”, lamentó el ex trabajador. Ahora no los valoran De acuerdo con Ernesto Gotera, la relación patrono - empleado, en la época de las contratistas era de respeto y confianza. “Confiaban en uno y por eso nos garantizaban siempre participación en los proyectos. Son más de 10 años trabajando en la industria, donde ya adquieres un respeto y un reconocimiento a tu desempeño. Pero ahora agarran esa experien-

LUIS TORRES

Ernesto Gotera ya no cree en que recibirá su ficha de ingreso.

cia y la botan a la basura. Se burlan de nosotros, nos engañan con que nos van a entregar las fichas, que si los censos, que si las listas. Es una deshonra al trabajador”, sentenció Gotera. El ex trabajador se dedica al comercio y al trabajo informal para poder subsistir. Aún no sabe cómo harán para costear los gastos escolares de sus hijos. Por ahora se preocupa por “medio alimentarlos”.

WILKELIS PINILLO

JAVIER ANTONIO ARAUJO

“Ya no hay vida aquí en Lagunillas”

“Mis hijas se quedarán sin escuela”

Ernesto Ríos Blanco

“Y

a no hay vida en Lagunillas. Uno no sabe qué hacer ni para donde agarrar porque sin trabajo no se puede vivir”. Así comenzó la conversación con Wilkelis Pinillo, un joven obrero de 27 años que hasta hace poco pensó que Lagunillas, su tierra natal le ofrecía algún futuro. “No, para nada, aquí no hay futuro. Es lo que yo percibo porque con las contratistas había cierta estabilidad. Hoy con PDVSA, hay incertidumbre”, subrayó Pinillo. La contrata Nestor Marchán Construcción, le abrió las puertas. Si bien no está en la lista de las expropiadas, tenía contrato con una de ellas. “Trabajé con hidroneumáticos y bombas de agua. En poco tiempo aprendí algo”, contó Wilkelis.

Pinillo relata que de un momento a otro, paralizaron los proyectos y despidieron al personal ocasional. “Eso fue como prender y apagar las luces, violento. Sin explicaciones, sin anestesia. Nos dijeron que se paró el proyecto, que debíamos abandonar la empresa porque PDVSA no iba a pagar y así quedamos, como la guayabera”, describió el obrero. Municipio muerto Lagunillas ha visto caer su estabilidad comercial. Según los obreros, las expropiaciones han causado una cadena de empresas fracasadas. Pinillo expresó que “muchos comercios han cerrado. Se ha reducido la variedad en lo que le ofrecen a uno y además le aumentan el precio a las cosas para poder ganarle. Pero la vida de este municipio son los trabajadores, o sea, nosotros y si no tenemos trabajo, menos po-

LUIS TORRES

Ernesto Ríos Blanco

Y Wilkelis Pinillo cree que en poco tiempo morirá el municipio.

demos tener para salir a los comercios a comprar. Aquí todo se quedará aboyado”, auguró el ex empleado. El consuelo de Wilkelis es que su madre y hermanas trabajan y lo pueden ayudar con sus hijos. “No es fácil para un padre tener que pedirle a tu mamá o a tu hermanos cuando podemos trabajar. Pero así están las cosas y uno no puede sino recibir la ayuda mientras se sigue rebuscándo”, expresó.

a era costumbre para Javier Antonio Araujo, de 30 años, acudir a las contratas petroleras donde siempre conseguía un trabajo. Aún cuando era ocasional, “era un tiro al piso que a uno le dieran trabajo. Ahora es un tiro al piso el que no consigas nada”, lamentó Javier Antonio, apretándose sus manos en señal de impotencia. En Venezuela Driver, Javier Antonio laboraba en los patios. “Trabajaba siempre como ayudante de mantenimiento, soldadura, limpieza. No era un trabajo grande pero era trabajo al fin y por él tenía asegurada la ‘papa’ en casa”, destacó Araujo. Javier Antonio lucha por sus tres hijos pequeños. Su jornada diaria se ha hecho extenuante y poco productiva, pero no le queda otra

opción. “Salgo en la madrugada, allí les dejo el famoso ‘rompe buche’ (bollitos de harina precocida con mantequilla), y me vengo hacia los muelles a ver si consigo algo. Luego al medio día, me voy a marañar, trabajo de albañil, de jardinero, de lo que salga”, describió Araujo. Botado y sin pago Es el mismo drama de la masa obrera de la COL. Los despiden y no les pagan. Javier Araujo relata que desde hace más de dos meses está esperando su pago, pero, “no nos dicen nada, uno escucha son rumores y los rumores son que PDVSA no va a pagar porque esa no es su deuda”, comentó el ex trabajador. Araujo se angustia porque ni en la calle consigue trabajo. “De nada, no hay trabajo porque ahorita nadie tiene cobres para pagar una maraña. Nadie está constru-

LUIS TORRES

Javier Araujo se muestra frustrado y engañado por PDVSA.

yendo, ni arreglando jardines ni pintando ni nada. Se tiene que caminar mucho para lograr encontrar algo”, señaló el obrero. En su casa comen una vez al día. Arroz con huevo es el menú casi a diario. Sus hijas de ocho y 15 años tienen rato que no estrenan y es muy probable que se queden sin escuelas. Esta es la huella que relatan los obreros dejadas por las expropiaciones.


22 VERSIÓN FINAL PRODUCTOS EXCLUSIVOS Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009

Contratistas Petroleras RAFAEL MARTÍNEZ

¡Sus hombres y sus historias!

OMER LOZANO

“Ya no vendo ni siquiera los desayunos del día” “Ahora mi restaurante se llama la revolución fea” Carlos Moreno Antes de entrar a la carretera que conduce al muelle de Terminales Maracaibo, una de las empresas expropiadas, aún puede conseguirse el puesto de Coca Cola, donde Rafael Martínez lleva más de 30 años como cocinero y sirviendo a los trabajadores petroleros. Con la toma de PDVSA, ha recordado los peores días del paro petrolero de 20022003. “Ahora nadie pasa por aquí”, comenta. Martínez recoge sus dos mesas justo a las 11:30 de la mañana, casi no ha vendido nada en el día, el negocio, único sustento de la familia parece no dar para más. “Mis ventas, antes del 8 de mayo, eran del 100 por ciento, ahora aquí nadie pasa, no vendo ni siquiera los desayunos”. Su hija, una joven que le acompaña todas las mañanas a atender el puesto, afirma que se siguen levantando

a las 4:00 am, pero el esfuerzo no parece valer la pena, al menos no por ahora. El propietario recuerda que durante las épocas de trabajo normal su menú era completamente variado, desde los desayunos hasta los almuerzos. Ahora, sólo trata de vender empanadas y pasteles, lo mínimo para poder ganar algo al día. El puesto luce solitario, no hay nadie cerca, ni siquiera trabajadores saliendo del muelle o entrando. Martínez mira y afirma. “Todos los días pasaban por aquí amigos y compañeros que trabajaban en las contratas. Ya no queda nada”. Esperanza Los números le habían bajado desde antes de las expropiaciones, pero manifiesta que cuando PDVSA asumió el control, la debacle fue total. “Aquí antes pasaban 100 personas, ahora pasan 15 o 10, y a casi nadie le dan car-

RICARDO ORTEGA

Rafael Martínez, propietario de un puesto de comida rápida.

né para trabajar”. Diariamente tiene que responder a su casa, donde es sostén de su esposa, dos nietos, una hija y una criada. Martínez dice estar seguro que podrá mantenerse a flote y que tendrá que esperar a que ese momento llegue. Es un hombre de 70 años de edad, lo que de plano le cierra las puertas en el mercado laboral. Su única salida de la crisis económica de la COL es levantarse a las 4:00 am, abrir el negocio, y esperar...

OSCAR ARCHILA

Carlos Moreno La casa de Omer Lozano solía ser en parte cocina y restaurante. El estar ubicada en frente de Z&P, la más grande de las contratistas expropiadas, le daba un valor comercial alto, pese a la deteriorada estructura. Lo cierto es que el negocio había funcionado, la familia había conseguido refundarse toda como microempresarios y los clientes estaban a penas al abrir las puertas, todas las mañanas. La expropiaciones acabaron con todo aquello. Lozano pasa el día sentado frente a la entrada de lo que sería un modesto salón de comensales, todas las mesas están vacías y ya casi es la hora del almuerzo. El hombre quiere hablar. “Pueden decir que ahora el restaurante se llama ‘la revolución fea’, así, para que se den cuenta de lo que han hecho”, dice, aunque suelta una carcajada de seguida.

Por ocho años alcanzaron una estabilidad sólo con los petroleros de Z&P. “Por esta calle pasaban al menos 800 personas semanales, unas 100 diarias”. Y el mismo flujo le permitía a la familia Lozano vender entre 70 u 80 almuerzos al día, cualquier especialidad de la casa tenía acogida en los clientes. Hoy, después de las expropiaciones, las ventas, en caída libre, sólo alcanzan los 10 o máximo cinco almuerzos, pérdidas por demás para la pequeña economía del establecimiento. Cerrar es la opción Lozano ha dicho con certeza que ya conversó con su esposa para cerrar el restaurante, no lo pueden seguir sosteniendo. “Tengo tres hijos y mi esposa, y a todos debo de responder, las cuentas no están llegando y lo que tenemos son pérdidas”. Su vecina, quien también había apostado al negocio

RICARDO ORTEGA

Omer Lozano, dueño de restaurant frente a Z&P.

de las comidas, ya tomó la decisión, la competencia para ellos no resultó ser sus menús, por el contrario fue la propia PDVSA la que terminó con sus pequeños negocios. Lozano dice no saber aún cómo resolverá la situación familiar, es un hombre ya mayor. Los carros que inundaban la calle de Z&P ya no están. La calle está desierta. Todos los amigos y clientes que atendía a diario en el salón de su casa, se han ido, al momento ninguno ha vuelto a sentarse a la mesa.

MARÍA GUTIÉRREZ

“Si en dos meses no mejora cerramos el local” “Chávez va a acabar con los pobres, pero de hambre” Carlos Moreno Hace un año, Oscar Archila, propietario del restaurante “El buen comer”, ubicado en la avenida principal de Lagunillas, decidió probar suerte. Tenía entrada de trabajadores por ambos lados de su establecimiento, unos iban a Terminales Maracaibo, otros a Shlumberger y algunos a Venezuela Driver, lo que le llevó a arriesgar su único capital en el levantamiento del local de comidas. Adquirió sus equipos, y todo lo necesario para un restaurante. De arrancada todo partió bien, su esposa y sus hermanas le ayudaban en el negocio. Los números eran buenos y daban como para mantener en pie el local. Antes de las expropiaciones sus ventas, al igual que muchos otros superaban los 70 almuerzos por día. Una suma significativa para el pequeño restaurante.

Para las semanas subsiguientes al control de PDVSA sobre las contratistas, todo se invirtió. “Ahora cuando el día está muy bueno, a duras penas vendemos 15 o 18 almuerzos por jornada”. Archila debe aún mantener seis hijos, dos de su primer matrimonio, y cuatro de su actual pareja. Por sobre su voluntad el joven de 34 años ha tenido que prescindir de los servicios de varios ayudantes que le acompañaron al comienzo de la empresa. “No podía seguirles pagando, ellos entendieron, es una situación difícil para uno tener que tomar este tipo de decisiones”. No da para cubrir Pero la ventas bajas no sólo impactan su personal, sino que también han sometido a presiones a la familia al no poder pagar sus servicios. “Nosotros esperaremos dos meses como máximo, si

RICARDO ORTEGA

Oscar Archila, del restaurant “El buen comer”.

esto no mejora, lamentablemente tendremos que cerrar las puertas de nuestro negocio”, afirma Archila. El propietario había dejado el trabajo temporal como obrero en contratistas para dedicarse a fundar su propia empresa, por pequeña que esta fuera, pero la idea no le resultó. Igual suerte habría corrido de seguir como trabajador, tal vez no tendría ahora como muchos, nada para comer. El hombre aún se defiende.

Carlos Moreno Dos jóvenes atienden una mesa con confites y teléfonos a la entrada de uno de los muelles. Es un popular “centro de comunicaciones” o “pegaíto” como suelen llamarle. Las dos, de no más de 15 años, vigilan el pequeño negocio de la casa. Todas las cajas aún están repletas de dulces, y los teléfonos les sirven de entretenimiento con cualquier juego para pasar el rato. Su madre, María Gutiérrez sale por momentos a hacerles compañía y a esperar que alguien compre. La mesa, pequeña por demás, representaba un ingreso diario para la familia de mujeres. Las expropiaciones del 8 de mayo pasado acabaron con esa entrada. Entre teléfonos y dulces, las dos chicas hacían en promedio 70 bolívares fuertes al día, lo suficiente como para ayudar a sostener el hogar.

Su madre sale a atender a la prensa, no quiere fotografías, estaba cocinando un poco de comida para sus dos hijas, con lo poco que pueden mantenerse. La señora cuenta que la llegada de PDVSA y la toma militar de los muelles, acabaron con su pequeño negocio. “Chávez dijo que iba a acabar con los pobres, sí lo está haciendo, nos está acabando, pero matándonos de hambre”, una frase que parece volverse cita predilecta en los sectores depauperados de cualquier ciudad. Las dos jóvenes sacan la mesa desde las 7:00 de la mañana. Antes de mayo, les funcionaba, trabajaban sin parar y debían a cada hora cambiar el muestrario de confitería puesto que las ventas daban para ello. Ahora la situación es contraria, las mismas cajas que ponen en la mañana, son las mismas que guardan en la tarde, sin siquiera vender-

RICARDO ORTEGA

María Gutiérrez, del “pegaíto” frente a los muelles de Z&P.

las completas. “Se nos está haciendo muy difícil vender las chucherías”. María Gutiérrez manifiesta que las expropiaciones le han dejado sin clientes y sin una importante entrada familiar. Ya tiene pensado alquilar una mesa similar en el centro de la ciudad para ver si su condición mejora. Ella lava y plancha para poder mantener a sus hijas. Las jóvenes deberán estudiar a turnos para poder atender el pequeño negocio.


Maracaibo, viernes, 7 de agosto de 2009 PRODUCTOS EXCLUSIVOS VERSIÓN FINAL 23

Contratistas Petroleras

2007

Chávez toma los campos de la Faja del Orinoco. Vendría la estatización de Exxon Mobil y Conoco Philips.

2009

Duros discursos ha emitido el presidente de PDVSA tras las expropiaciones de las contratistas

El lenguaje iracundo es propio de las personas carentes de razón

YANMARINE

La última expropiación de la semana

ANA VILORIA

El Ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, no ha dado respuestas concretas a los empresarios ni trabajadores. Su discurso es ofensivo.

PDVSA asegura repuestos para sus lanchas al apropiarse de esta empresa.

Ernesto Ríos Blanco

Ernesto Ríos Blanco

A

tres meses de la aplicación de la Ley que Reserva al Estado Bienes y Servicios Conexos a las Actividades Primarias de los Hidrocarburos, legislación que conllevó a la expropiación de más de 70 contratistas petroleras en el Zulia, el jefe de la cartera de Energía y Petróleo y presidente de PDVSA, Rafael Ramírez Carreño, ha proferido una serie de declaraciones duras dirigidas a los centenares de trabajadores que quedaron fuera de la industria. Ha sido contundente con el sector sindical petrolero que está en desacuerdo con el idealismo socialista que trata de imponer el Presidente de la República. Ha reiterado que no admite conversación alguna con personas que no estén con “el proceso”, discriminando así un importante sector laboral del país. Aquí están fragmentos de algunas declaraciones del Ministro Ramírez luego de la toma de las contratistas por parte de PDVSA.

mayo 8. Gobierno nacional y PDVSA decretan la expropiación de 74 empresas contratistas en la COL. El argumento único. “Son oligarcas”, diría el Presidente.

El Ministro Rafael Ramírez, se muestra intransigente ante la realidad ocasionada por las expropiaciones a las contratistas.

“No se puede trabajar con Gobiernos contrarrevolucionarios” El día 23 de julio, el ministro de Energía y Petróleo descartó poder trabajar junto con el gobernador del Zulia Pablo Pérez por contrariar el ideal socialista que ha tratado de imponer el presidente Hugo Chávez. “Es imposible trabajar con el gobernador Pérez, y por eso lo hacemos con los 14 alcaldes del Psuv”, sentenció.

Promesas de pagos y de Absorciones “PDVSA absorberá a todos los trabajadores vinculados con las contratistas expropiadas”. El 12 de mayo de 2009, el ministro de Energía y el Petróleo, Rafael Ramírez aseguró que “ya fue designada una comisión (de Petróleos de Venezuela) que trabajará empresa por empresa. Se encargará de absorber todos los trabajadores que han estado vinculados a las actividades que han pasado al control del Estado venezolano”. “Vamos a comenzar a trabajar de inmediato. Ya tenemos un primer número y vamos a venir a hacer un acto público para absorber a todos nuestros trabajadores”, aseguró.

“Quien no esté con Chávez es un conspirador” “Quien no esté abierta y proactivamente con el Gobierno, puede ser considerado un conspirador”. Fueron las palabras contundentes pronunciadas la semana del 19 de julio por máximo dirigente de PDVSA. Sus palabras están dirigidas fundamentalmente a responder las constantes declaraciones y exigencias del sector sindical petrolero en cuanto al incumplimiento de la Estatal petrolera con los beneficios prometidos.

“No discutiré nada con enemigos de Chávez” Equipos expropiados al servicio de Pdval "Yo no me voy a sentar a discutir la convención con ningún enemigo de Chávez, de la revolución. ¿Qué es eso? De nada nos serviría tener una nueva PDVSA si fuese un nido de escuálidos. Estamos resteados con el comandante Chávez. PDVSA está y estará en la vanguardia de la revolución bajo la dirección del comandante Chávez", sentenció el ministro Rafael Ramírez en torno a la discusión del contrato colectivo petrolero supeditado a la realización de las elecciones de la Futvp, las cuales han sido suspendidas por no garantizarse el triunfo “rojo rojito”. “La discusión del contrato colectivo en la industria petrolera se hará con los trabajadores revolucionarios”, insistió.

“Los vehículos recuperados a varias empresas contratistas petroleras que fueron expropiadas servirán para el transporte de alimentos”. De esta forma, el ministro Rafael Ramírez, reveló la nueva función de los vehículos de las contratistas expropiadas por la industria petrolera, el día miércoles 22 de julio, vía comunicado. Del total de más de 75 empresas nacionalizadas, la mayoría operaban en el Lago de Maracaibo y se dedicaban en gran parte al transporte de personas y materiales, remolque, mantenimiento de muelles y diques. “Estamos creando las condiciones para las actividades no petroleras como el transporte de alimentos de PDVAL” en el Lago, indicó Ramírez.

El pasado lunes 03 de agosto, los trabajadores de la empresa de suplidores de motores y piezas marinas, Yanmarine, representantes en Latinoamérica de Yanmarine Corporatión, se encontraron con la sorpresa de no poder entrar a laborar como todos los días. El fantasma de las expropiaciones traspasó los portones de esta empresa, ubicada en el muelle Terminales Papagayo, en el sector Hatícos de Maracaibo. Le proveía repuestos a las embarcaciones marinas de las contratistas petroleras, más no tenía relación directa con la Estatal. Sin embargo, la industria de “todos los venezolanos” no vaciló en apropiarse una de las empresas de vanguardia en fabricación de piezas y repuestos marinos en el mundo. Sin explicaciones Sin la alharaca del 8 de mayo, cuando PDVSA expropió 74 contratistas de la COL, de manera silenciosa, la Estatal petrolera tomó posesión de Yanmarine. “El caso de Yanmarine es mucho más grave porque esta empresa no pertenece al rango establecido por la ley en cuanto a bienes y servicios primarios que el Estado se reserva, simplemente suplía de repuestos a las contratistas petroleras”, indicó José Contreras, presidente regional de Consecomercio. Contreras añadió que “luego de las expropiaciones PDVSA había solicitado créditos para adquirir repuestos para reparar los motores de sus embarcaciones y aún cuando desconozco el monto exacto, se trata de sumas mil millonarias que PDVSA no puede pagar. De allí la decisión de expropiar”.


Contratistas Petroleras

¡Sus hombres y sus historias!

Cuando la política juega con las necesidades ajenas La credencial debe entregarse a un empleado luego de seis meses de prueba. Obreros de la COL denuncian que hoy se negocian los distintivos por Bs.F 10 mil.

La Ficha Blanca es la carnada de Chávez para imponer el socialismo

Ernesto Ríos Blanco

F

orma parte de las escalas de ascenso que todo trabajador, en el área petrolera, debe experimentar. La ficha blanca, es la credencial por excelencia que obtiene un obrero. Es el paso previo a quedar fijo en la industria petrolera venezolana. Este instrumento permite a los trabajadores acceder a todos los espacios de los campos petroleros. Para optar por una ficha blanca, debe adquirirse una experiencia avalada por una certificación que otorga la empresa con la aprobación de organizaciones internacionales calificadas en el ámbito industrial. El obrero debe tener el 5º año de bachillerato aprobado, enviar su currículo vitae con soportes originales, y poseer una experiencia de entre 3 y 5 años. Debe estar certificado o titulado en el rol que desempeña, firmar un primer contrato por tres meses que servirán de capacitación. Finalizados los primeros tres meses, se extiende el contrato por tres meses más que servirán de prueba práctica. Una vez aprobado por PDVSA el desempeño de ese trabajador durante esos seis meses, se otorga entonces, la acreditación para entrar como empleado temporal en la nómina de la estatal. Estructura de la ficha Es un carné plástico de color blanco. En su parte frontal se aprecia una franja con la bandera tricolor, el logotipo de PDVSA y la fotografía del empleado. Debajo del retrato se ubica el nombre y apellido del trabajador y la fecha de vencimiento de esta primera ficha blanca. Al lado de la foto del empleado se aprecia una barra azul que identifica a la persona como trabajador temporal. Al dorso, contempla información de contactos con PDVSA, el número de cédula del empleado y su código de barra de acceso.

DENUNCIAS

La ficha blanca es el carné que da acceso a un empleado a circular y operar en todos los campos de la industria.

La anhelada ficha blanca, es actualmente, la causa de innumerables negociaciones clandestinas, denunciadas por los ex trabajadores de las empresas expropiadas y, según ellos, es objeto de venta por altas sumas de dinero. “Venden la ficha blanca a cualquier persona sin importar que esté o no preparada y capacitada para tener acceso a los campos petroleros. Han realizado estos negocios con personal foráneo al municipio. Una ficha blanca se vende descaradamente a un precio de entre 10, 15 y hasta 20 mil bolívares fuertes”, expuso Edwar Mota, ex trabajador afectado por las expropiaciones. Denuncia refrendada por el resto de los desempleados.


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