THERE WILL BE NO QUIET

“There Will Be No Quiet” es un libro de arte y diseño publicado por Stanley Donwood en 2016. El libro incluye una amplia selección de obras de arte de Donwood, que abarcan desde ilustraciones hasta serigrafías y grabados en madera.

Las obras de arte presentadas en “There Will Be No Quiet” comparten una estética oscura y surrealista que es característica del trabajo de Donwood. Los temas de las obras de arte incluyen la política, la cultura pop, el cambio climático y la ciencia ficción, entre otros.

En su libro explora su proceso creativo en la creación de portadas para JG Ballard y sus novelas. Así como la forma de aterrizar ideas específicas para carteles de festivales como el de Glastonbury. Asimismo explica que a pesar de los años, todo trabajo es difícil de comenzar. Y que luego, se dificulta más al desarrollar las ideas hasta el punto de ser imposible, pero terminando bien.

Para Donwood el arte no es una tarea fácil. Abre el libro con la frase “No es nada fácil convertirse en artista y no es algo que yo aconsejaría...” Lucha, se preocupa, piensa y repiensa. La creatividad es un trabajo muy duro”.

There Will Be No Quiet no es el libro de alguien que ‘lo logró’, sino más bien un relato de las “cosas que salieron jodidamente terribles”. Stanley demuestra que no se toma a sí mismo demasiado en serio, y que esa duda no desaparece cuando llegas a las grandes ligas.

There Will Be No Quiet es tanto un viaje descriptivo como visual. Hay notas importantes sobre cómo alentar a sus hijos a expresarse, desde que son pequeños y acerca de como desarrollar la mente de ellos.

Stanley Donwood en este libro nos comparte la vida representada en sus obras a través del uso de infinitas variedades de técnicas, desde la pintura hasta la litografía, un enfoque muy mixto con óleos, computadoras, nuevas técnicas digitales y más.

Hablando con Donwood, comienzas a ver el método detrás de su locura. Aborda los temas con el mismo entusiasmo de un niño. Su cerebro, al igual que su obra de arte, es una sopa de palabras no lineal, y se siente igual de cómodo compartiendo sus opiniones sobre el Brexit. “Es como si los adultos se hubieran ido y los niños acabaran de comer todos los bocadillos azucarados, todo en uno ve y ahora todos están muy, muy enfadados entre sí”, dice), ya que él es Elon Musk (“maldito mago de la tecnología”, y el documental de Adam Curtis, Hypernormality.

Describe haber estudiado bellas artes y literatura inglesa en la Universidad de Exeter, donde él y Thom Yorke se conocieron cuando eran estudiantes, como una “manera de conservar las intenciones de la infancia”. Son sentimientos que se pueden ver reflejados a lo largo de su obra en garabatos infantiles de figuras humanas, demonios, centauros, osos, que parecen alejados de la importancia personal del ego adulto.

“Cuando era niño, hice votos de que cuando sea adulto, no voy a aprender a conducir, lo cual no he hecho. Prometí que no tendría doble acristalamiento, lo cual he hecho”. Comprometí los ideales de mi infancia en muchos niveles. Pero sigo haciendo fotos y escribiendo historias”.

There Will Be No Quiet es una colección de un diario cronológico de fotografías, bocetos y entradas escritas a lo largo de su carrera de 23 años. Su visión, que describe como un ejemplo de “lucidez trascendental o monomanía demente”, es una de las muchas rutas abandonadas hacia las obras de arte de Radiohead detalladas en sus páginas.

Está pensada como una inmersión sin restricciones en la práctica creativa del hombre de 50 años, dedicada a su madre, quien falleció en 2017, pero, en realidad, se siente como un paseo por el patio de recreo cerebral de Donwood, completo con centauros llorando, ejemplicado en Kid A, osos y frases computacionales escritas en mayúsculas, como “DISCORDANT REVOLUTION” y “SMOG CHECK”, todos íconos que han llegado a definir la tradición de Radiohead a lo largo de los años.